YA NI EL MIEDO Pare meu que potser algun dia molt discret mestimaves (Mara Cabrera i Calls) Hilo dental

meticuloso en el lecho de un hospital. Irnico presagio de un futuro sin mella. Sus huesos golpearn madera pero sus dientes ya no caern. (los prpados se abatirn primero) Sus dientes slidos blancos intiles en la boca de tierra ya no podrn morder. Y yo clavar los puos en mi estpido vientre lozano vida de la dentellada de su clera por vez primera imposible. Tachonar toda ranura impedir la luz oblicua. Ya no habr siesta ni ruido ni paz. El polvo terco en los rayos que se cuelen (sardnica flecha sobre la cama vaca) traer el eco de las risas infantiles en las tardes tediosas cuando el padre era el miedo. Y ya ni el miedo habr. Entonces le construir con mi recuerdo una voz de lodo una cancin de cuna antigua la memoria tierna de un da en que tal vez muy discretamente me quiso. Mi padre ha muerto. Escupir sobre los eufemismos mientras las hienas del dolor se disputan sus recuerdos