_ EI partido cartel La transformacién de los modelos de partidos y de la democracia de partidos Richard S. Katz y Peter Mair erropuceten Una linea comin que ha recorido Ia literatura centrada en los partidos poltios, undamentalmente desde los tiempos Se Os: ‘wogorski (1902), y que asimismo ha atravesado la gran mayorta de ipologias y andlisis (‘anto normativas como empiricos) pre Sentes en esa literatura ha sid la visin de que los partidos an de ser clasificados y entendidos sobre la base desu Felacion con 1a sociedad civil (véanse, por ejemplo, Duverger 1954; Neumann 1986 y Pancbianco 1988). Fsto ha tenido dos consecuencia. La primera ha sido la tendenciaa presentar el modelo de partido de ‘masas como el esndar a patie del eval todo debe ser jueeado (Lawson 1980, 1988; Sainsbury 1990). La segunda tendencie he sido la de subestimar hasta que punt las diferencias entre parti ‘een pare por et Nachwa Sccnos Foundation (SESEBI649)0 ZONA ABIERTA 108/109 (2004) os pueden ser también entendidas en funcin de sus relaciones fon el Estado, a tesis que sostenemos aqut es que ambos supuestos se fun ddamentan en bases ertGacas. Como demostraremos, el modelo ‘de partido de masas ext vinculado a una cert concepci de la ‘democracia (seas tambien Pomper 1992) y a una vision ideal y ya caduca dela estructura social, que noes representativa de las Sociedades postandustriales. Ademds, | modelo de partido de masa leva implicit un proceso lineal de desarollo de los part tos que, incluso evando pretende tener en euenta los cambios mis recientes (por ejemplo, el partido escoba de Kirchheimer 0 partido electorakprofesional de Panebianco), conduce 2 un punto de llegada cuyas Unicas opciones son la estabilidad 0 El dcelive, y que. como cualquier hipstesis sobre el in dela evo Tucién, esta nocessriamente sospechosa. Contra esa vision, nosotfos sostenemos que la evolUcién de los partidos en las ‘democracias ocidentlesrflja un proceso dialétio en el que ‘ada nuevo tipo de partido genera una reacién que estimula un nuevo desartollo,y que por tanto lleva a su vez aun nuevo tipo te partido, y aun nuevo conjunto de reacciones, yas sucesiva- mente. Desde esta perspectva, el partido de masas es simple ‘mente un estadio en un proceso continuo. ‘Asimismo argumentamos que los factors que fcilitan esta ialgetica no provenen tan slo de les eambios que se producen ‘em Ia sociedad evil sino tambign de las transformaciones en las Felaciones entre ls partido yel Ext. En particular, rostne tos que en lor fimos aos existe una tendenca hacia una smn biosis cada ver mas estrecha entre los partidos y el Estado, y que {saa la que extablece las condiciones para la emergeacia de un nueva tip de partido, que nosotros definimos como “el partido Cartel”. Al igual que Tos tos tpos de partido ya existent, el partido cartel implica una concepeién particular de la democra- ‘iy dems, y también como en el aso de anteriores tipos de partido, su surginientoextimula la reacsi yslembra el teen para ulteriores eveluciones. ZONA ABIERTA 108/109 (2008) n El énfassen el partido de masas como modelo leva consigo dos supuestos. Uno de ells tiene que ver con el significado esencial y los requisitosinsttucionales dela democraia, mientras quel ‘tro esti relacionado con los requisites organiativos del éxito electoral. Amos supuestos han sido desarrollados principal mente por Duverger (1954), pero estin también presents en el modelo de democraciabrtdnica deserito por Beer (1969: cap. 3) bajo el eptteta de “democraca socialist", asi como en una gran variedad de prescipciones para la democracianorteamericana fgeneralmente identificada como el "gobierno del partido res ponsable” (Ranney 1962) En el modo arquetipico de partido de mass, las unidades fundamentales de la vida polities estan constituidas por grapos ‘socials predefinidos de contornos preciso, y la pertenencia a 6s tos fect a todos les aspects de la vida del individu (Neumann 1856: en especial lap. 403). La polticaestéfundamentalmente ‘asada en [a competicdn, el conflict y a cooperacéin de estos ‘rupos,y los partides polis son los agentes mediante ls ci es estos grup, ¥ por tanto sus embros, participan en la pot tia, formula sus demandas al Estado y,en dima insane, i fentan controlar et Estado’ mediante la colocacién de sus representantes en puestos clave. Cada uno de estor grupos tiene tm interes, quo so articula en el programa de “ou partdo. No ‘obstante este programa no et un mero conjunto de poiicas, sino un todo coherentey lgicamente eonectado. De esta mane, la ‘nia y la disciplina de partido no solo son ventejosas desde na perspectiva pragmatia, sino tambien aormativamente legtimas. Eta leitimacion dependo, su vez, de a impliacién popular en la formutacin de programa del partido y, desde una perspectiva organizativa, esto conleva la necesidad de una estructura de sgrupaciones locales 0 eélulas que canalicen el input de las masas hasta el seno del partido en los procesos de formulacion de lis politcas. La implicacion popular. asimismo, conleva la neces ad de la supremacta dela dimensién extrs-parlamentaria del partido, al y como se artiulaen los congresos de los partidos. En este modelo, la opcin electoral individual esté delimit 44 por la absoreién del grueso de electorado dentro de alginoi 2 ZONA ABIERTA 108/109 (2008) 4e os grupos subculturales representados por los partido, de manera que la competicign electoral nos refiete tanto mas tasasdiferenciales de conversion como a Ia tasaediferenciales sde movilizacin. No obstante, en el nivel sistémico, el modelo de partido de masasosocialista permit el contol popular prospect Wo dels polteas, ya que ls votantes apoyan tno oto partido en funcién de unos programas precios, y el partido (0 coal de partidos) que obtene una mayoria de voto accede al gobier- no, Los partidos, seydn esta visién, proporcionan el (y no slo tno de entre varios) vinculo esencial entre lon ciudadanos y el Estado (Lawson 1988: 36). Este hecho también comporta tna concepeisn particular de a eficacia organizativa. Dado que 1a competcidn electoral esti sobre todo centrada en la movie «6a y no en la conversa, el requsto clave pare el éxito Je un partido es el de aumentar el nivel de compromiso de aquellos {que ya estén predispuestos a ofrecer su apoyo —o Se, fs mem bros de su electorado “natural”. Por consiguente,debido tanto ‘arazones de egtimidad como de convenienia,acabé gener dose la expecttiva de que se producria un “contagio desde la iaquierda" seg el cual ls partidos repesentativos de otros in. leteses osctores dela sociedad estarianobligados a adopt los rincipaesrasgs yl estrategia del modelo de partido de mases © socialist, y que de n0 hacerlo, estrian condenados al 0:40 (Duverger 1954: xvi). Desde esta éptica, el partido de meses acab6 considerdndose el partido del futuro, El nacimiento de lo que Kichheimer (196) dio en lamar el “partido catch-all” supuso un gran esata a la nocién del pat do como representante de sectors sociales predefnigos En pri- ‘er lugar, el desdibujamiento paultino de las lineas de visi sociales a finales de los afos cincuentay durante la década de los sesentatrajo consigo un debilitamieato de lo que hasta en ‘tonees babian sido idenidades colectivas claramente distingu- bies, e hizo ms dif la identiieaion de grupos diferenciados dentro del electorado a los que atribur intereses comunes & largo plazo. En segundo lugar, el crecimiento economico y la importanciaereciente del Estado del Binestar faclitaron a formulacion de programas electorales sin que éstos tuvieran ne. ‘cestramente que ser ni partidistas ni de confrontacén, pudien 4o proclamar e servicio los intereses de todos o cas todos. Ea tercer lugar, con el desarrollo de los medios de comunicacion de ‘ZONA ABLERTA 108/109 (2004) B ‘masas, los lideres politicos dispusiron dela capacidad de hacer llamamientos al clectorado en su conjunto,eletorado este que ‘ba aprendiendo progresivamente a comportare més como Un ‘onsumidor y menos como un partiipante activo, ‘Todo esto resulté en la formulacién de un nuevo modelo de partido, y asociada a ést,surgs una nueva concepeiin de lade. ‘mocracia, que algunos observadores, aunque no de manera siste- imética,identifcaron como la “americanizacién” de la politica europea. Pas6 a consderarse que las eleciones se reducta fun. ‘damentalmente a optar entre lideres y no entre politcas 0 pro- ‘Tamas, mientras que Ia formulacin de esat mismaspolitcas © programas pas6 a ser la pretrogativa de las elites de en partidos ‘ms que de los militantes. El control popular y su capscidad para pedir cuentas alos politicos dejron de asegurarse prospec: tivamente sobre Ia base de alterativas claramente defines, para pasar a ser retrospecivos,basados en la experiencia ye historia! (por ejemplo, Fiorina 1981). Ast, de de considerarse {que el comportamiento electoral estaba moldesdo por predispo. siciones para pasar a ser concebido como el producto de tna cleccion (Rose y McAllister 1986). Dejaon también de ent zarse tanto la movilizacién de los votantes como su conversisn, ya que ambos process presuponian la eapacidad de format lal. {des afectivas. En lugar de esto, pasé a concebise a ls vlan tes como s,carentes de compromisos,fotaran libremente, ds: Ponibles y susceptible de ser eaptados por cualquiera de los Darts en competicign, El problema de este nuevo modelo era que —al contario {que Ia concepcion anterior de los partidos, que los entendia, como elementos eenciales en el funeionamiento de la democ «ia, dando as por descontada su supervivenciaorganizetiva-- en «sta nueva concepcin de los partidos, y de la democracia, el pa, pel de aquéos resutaba mucho mis contingent. Por tanto, aunque In modalidad hubiera cambiado, los partidos segulag ‘siendo evaluados fundamentalmente en base al vincul ent el Partido y Ia sociedad civil, siendo precisamente este vncule el {que se estaba debilitando. De ahi la abundant literatura sobre “el delve de los partidos”, y por tanto, tambien la panoplia Je | 2a cpl Lawson y Merl (88 3) any ga “lends be al > dele piss jt con eaene encands ened eomens sae1“ ZONA ABIERTA 108/109 (2008) intentos de expicar emo podian sobrevivir éstos a tales cam- bios (por ejemplo, Pzzomo 1981), Cuando, al contraro, jamos iuestfaatencign en ls vinculs entre el partido y el Estado, tan- to la supervivencia como la evolucion de los parties polltcos resultan mas faciimente comprensibles. A ello dedcaremos los partados que sguen, Los modelos de partido que hemos presentado hasta aqut asu- men una clara distincidn entre partidos politicos y Esta. El partido de masas elsico es un partido dela sociedad cv, que ‘mana de alguno de los sectres del electorad, y qu pretende penetrar el Estado y modifica las polities pabica ene interés 8 largo plazo de aquellos sectores del eletorado ante ls que ha ‘de rendireventas. Fl partido eaich-allal no nacer como un par- tido de la sociedad cv sino como uno que se sta entre a o- ‘edad civil y el Estado, también pretende infu sobre el Estado ‘desde fuera, mediante el control temporal d las politicaspablcas ‘corto plazo, las demandas de ss prag- "En pocas palabras, a pesar de ser bien ss relaiones con la sociedad civil, ambos pos de partido se stan fuera del Estado, que aparece, en principio, no partis, “Aunque el supuesto de que los partidos politicos estén nii- ton madeonrepresenan tps poles sles desde un pont de ‘sta Berto To ue ls pares concretos pueden apr mare miso meno en'un momento dade, Aung laf o ol patio partment parecer lara forma fon dew atl uo pended a expecta drama eel pode io some np, an sodas um component ate ‘cere abst stor ep Ere ac ‘prez proporoa gue rompers monopole fpr (orm Se ‘an ops pei) ol gran ene er cr ‘luteal arto rane Web 5), Pe ‘ZONA ABIERTA 108/109 2004) » nie las caracterstica clave que han ido variando con el tiempo, estan auellas que tienen que ver con los fines de la po- tea yia base dela artidsta Enel periodo de do- ‘minio del partido de lites, los fines politicos y os conictos gi ‘aban sobre todo en torno a a distrbucign de privlegios,y os partidos competian en base al estatus al que sus apoyor estan Adscritos. Seg fueron desarrollandose los partidos de masas, {a contrposici clave de ls politica comenzs a irr en torn a cuestin de Is reforma socal ( alrededor dela oposicion a eta ‘eforma) y los partidos comenzaron a competir en base a su ca (Con el surimiento del partido catch-all, ‘continuaroa sendo fundamentalmente in: tencionales, pero acabaron centrindose en la cuestiones de me jora socal y'no tanto de reformas integrales, con unos partidos fue competian menos basandose en su eapacidad representative {ycentrandose mas en suefectivdad para implementar politica, Finalmente, con el surpimiento de os partidos cartel, eiicia un periodo en cl que los fines de la politics, a menos por ahora, se hhacen mis auto-eferenciaes, la politica deviene tna profes cen s{ misma —una profesion cuaificada, claro est, en la que Ja competicion partdistalimitada que se produce se basa en la lucha por convencer al eletorado de que el partido en euestisn la opcién que garantiea mejor una gestion ms efectivay ef Las tendencias de a competicin electoral, en consecuencia, también han ido cambiando. Entre ls partidos de elite, la com: petencia era gestionada y controlada de forma efectva, Esta fendencia fue radcalmente socavada con la extension del st {io y la emergencia de los partidos de masas, que persegulan Ia ‘ictora electoral mediante la movilizacién popular. Ese auevo cstilo de competciin electoral pora interpretase,y at lo ha sido, como un intento de los partidos de masas de segmentar el clectorado en una serie de bases electorales excuyentes, y Lip sety Rokkan (1967: 51 se reieren a este fenomeno como el in fento “de estrechar el mercado de apoyos". Con los partidos ‘atch-all las estrategias electorales se hicieron mis competitvas. {Los votuntes podian ser conquistades, y lo partidos comenza- fon a considerar que merects la pena congustartos, incluso sla competion dejaba de estar basada en cuesionesfundamenta- les ycomenzaba a basarseen evestiones de efetvidad en la gesTABLA}. L0SMODELOS DE PARTIDO ¥ SUS CARACTERISTCAS a re ee Pana Pee Sam os cs me (Gage oe nnn sexe |g ware | Exeratn os soego v| Sawpounanal | Stagorheus Eo ogo re = ee Nal de drickn Go| Maren retina | Rasvarere teres corcowin | Rosanne te reer Fcpsen sapien __|Darbacin de ngs [era soc uc acc a pate amo rots ‘rota sm Ftc nsec) ae oe copetoin | Eta aoe cepesan orem eenicnponca | rabances oe owtin panes once it, cent] nee onze come oy Retr vate oe | eee Temmomeltan | renmoencaom pane, ol aroara satse erro Fem prope (maccspreram | ououscemeroor | comeioes poms onrenoe nroseres S's rare eres cies we ates | No ay mst au | nec apace [De arb sta oe mi yet oupass |Ioene eho eres | ras er once a Seana emer gerdce cei sae ent erie ae maa einai ia rats etn en cos ‘ores fteroaten escue ia nn ras Nason pone iincen ew ron ay” doe “on os nase de comes os Br iar on pro camel por selec Bride teins Frio worae ena Eta yond ‘pacar moro ie grec aa evans sts. Sn 7 pow ac (gone) 6ovn01 vanay vo, So (9002) covgor vaxnay vNoz ira_MERTA 108/109 (2004) esta oP 8 Politicas. No. 2*4 ABET LOU105 2995 mit in Que ee pat ecm de py cada ver isn el pm os Dartdos caret ceabtoncion de russe Provenicntes del ba como subyes meamPetcion goed uae crust tit ¥ manejada Gee tones y otras ayuda mente, los partidos encom onliodo, pero io 4 sabien. Todo esto apenas de neeattetea organization ca seunes caus, l inceatvo limon i uiEy ZONA ABIERTA 108/109 (2008) Et rertado es un iderzgo que puede legtimar su poscién tanto dentro como fuera del partido hacendo referencia a una Iitanca nunerosa Ia quefrmalmente se ha otorgaa e fle Al ino tempo, como reslado del dbitemiento de Ie porian del actvats lle como intermedaon neces ‘oy de que umn mitanci soma ex menon caper decom fertse en un dx, cena atonomia des dre or sapesto spares igucanecstando,yquerendo oe Est agrapaconeasecionesleses,y és pueden lear 8 ‘present un problema pars I pula central patio st $puyn pltcaso estratepas gue ven em conrad aul de- fends por el iderazgo del pro nivel nacional. Hech eta faved. os dees locales fendrindesinentivon pata interve= tren los autos nncionals al ser consents de que os eres facial sb senten deaiadoy, pueden communica dela tment 9 sn intermedacion con ls militants india Por otro lad, en oq st reir os asinios locals ambas partes tienen ners en implsar la atonomia eel Desi el punto de it deo lieres locals, distr de stonomine sempre de ‘eal, mientras que pare ln sede central npr oe! at tomo tne una mayor tnd «impular el comprom a ateipacin y x mas capaz de present un parto atacivo ic lo micibrosy snpatants poten Amber parts, por tana teen to ntersen alae con manps anche Ele Feiad de nto claeetr gut Del mismo modo en que los modelos de organizacién de partido ‘que lo precedieron (partido de elites, partido de masss, partido ‘uctal) estaban asoriados un cierto model de democraa Surgimiento de modelo de partido cartel como fendmmeno empi- ‘9 est aociado a una revision del modelo normativo de demo- ‘roca. En este modelo revisado, la esencia de la demecraciayace la posbildad de que ls vtantes puedan elgir entre un ment fjo de partidos politicos. Las partidos son grupos de lderes que ‘compiten por la posibilidad de ccupar puestesgubernamentalesy por Se, en as siguientes elecciones,responsables dela aetuai6n ‘el gobiemo, En un certo seatido, étaes simplemente una ver ZONA ABIERTA 108/109 (2004) as sin extrema del modelo de democracia del parti catch-all o del liberal-litsta, ye elemento deGnitoro ex justo el que est ausen- te en esta formulacién. La democracia reside en que las elites se. Uisfagan las prefeencia del pico, y no en la implicacion publi ‘2 en el proceso de formulacion de las polices. Los votantes ‘deben intresrse por lo resllados més qu por ls politics, que son del dominio de los profesionales. Ls partidos sn asocacio ‘es de profesionals y no asoeacions de, o para los votantes. En otros sentidos, sin embargo, el modelo de democracia del partido cartel es fundamentalmente distin. En los modelos an teriores la idea de la alternanca en el poder era central —no slo quedabs clara la distineion entre le partides que estaban “dentro” y ls que estaban “fuera"— sno que ademis el temor de ser expulsado del cargo por los votantes era considerado el ‘mayor incentivo de los politicos para ser eceptivos ante la ci ddadania. En el modelo cartel, en cambio, ninguno de los pine. pales partidos ests totalmente “fuera”. Como resultado, existe ‘recientemente la percepeién de que la democracia electoral debe se vista como el procedimiento pore cual los gobemnantes controlan a los gobernados, y no al contrario. En la medida en ue ls programas electorales se asemejan cada vez més ent si, Yen que las campatias tratan, en cualquier easo, sobre fines ‘compartidos por todos, yno sobre medios controvertidos, se produce una limitacin del grado en que los resultados electors les puede determina las aciones dl gobierno. Adem, a me sida que se desdbuja Ia distinc entre los partidos en el go- bierno y aquellos fuera de él, se reduce el prado en que los votantes pueden eastigar a los partidos, incluso en el caso de une insatsfaccion generalizada. Al mismo tiempo, la patcipacin cen el proceso electoral implica al vont yal considerate las clecciones como el canal leytimo dela actividad politica, se des legitimanrelativamente otros canles potenialmente mis cfec- tivos, La democracia se converte en una manera de aleanzar la establidad socal y no tanto el cambio socal, las elecciones Se ‘onvierten en "solemnes" procedimientos constituconales, Dicho de otro modo, la democracia deja dese vista como un proceso pore cual la sociedad iil impone limites o controls al Estado, y pas a ser un servicio que el Estado proporcions la sociedad civil. El liderargo politico necesita set renovado las elecciones constituyen ua ritual pactfico para consepuitl,36 ‘ZONA ABIERTA 108/109 (2004) Los goberantes, para poder actus de una manera satsfctoria| para la mayoria,necesitan informacion por parte de los goberna- ‘os, y las eleciones compettvas, que fndican la stintaccion (0 Jnstisfaccién) con ls politcasy los resultados, proporcionan sta informacion. Por eso el Estado organiza elecciones compe: titivas. ¥ dado que las elecciones democrdticas, al menos tal como las conocemos, requieren partidos politicos, ef Estado también proporcions (o garantiza la existenca de) partidos pol ticos. Al inal, claro est, som ls partidos en el poder los que conforman el Estado y dan este servicio, y por tanto es su propia fexstencla la que se estégarantizando. El reconocimiento dela politica de partido como una profe- si6n a tempo completo implica aceptar, inelso inceativar, va fiastendenciasconsideradasindeseables por anteriores concep cones de la democracia. Aunque existe una relacién directa entre étasy la idea de un partido cartel, bien como precondi- ones 0 como consecuencias probable, el resultado es una reorientacién hacia los partidos las elecciones. Més importante ‘aun es el hecho de que los politicos sienten una crecientenecesi- dad de reduce los costes de Ia derrta electoral. Esto, por su puesto s un deseo universal que ha levado con fecucneia & la Suspension total de las eleciones en algunos pales sin normas clectorales claramente establecias. En los paics ocidentales, fen los que, evidentemente,ésta 90 es una opsion viable, la alter nativa es la de proporcionar subvenciones y ayudas 8 todos, permitiendo que diferentes coaicones ocupen cl gobierno en Sistintosniveles 0 en distintos lugares. Esto lleva consigo una limitaién dela competicin. Ademés, como ls poliizos enen carreras de larga duracién,acaban por consierar a sus oponen- tes politics como colegas profesionales, enfentados alas mis. mas prsiones, con similares deseos de Seguridad laboral,y 200 los que habré que compartir asuntos a largo plazo. La estabili- dad se convierteen algo mis importante que el triunfo; la politi ‘x pas a ser un abajo yno una vocacién Los Dezatio AL PARTIDOCARTEL ‘Aungue fos partidos cartel son capaces de limitar la competcion centre ello, Se muestran no obstanteincapaces de elimina ZONA ABIERTA 108/109 (2008) 7 cn police de forms general Esto es patcuarmente Ero canado los pare, ato nds como on gr o.etin ada Ver is igadon l Extn, ond or ena Scmuniacion este Ia sctedad ei ye Estado dejan de ser ‘fects. Enlgarde sr los prio os qu raga dean: fava Emado en nombre de pros conto dente dea oce- ‘sd, ston gropo sven conten formtlr sus de- sands satel prtorExtac, De manera cee, po ato, it ariclain dels demandas pas er competcaa de fot frupos deters En algunos cts, do est sobre too en {Faso dels ipo de inter mis ampliosy mejor estab dos (por ejemplo, os sndcato yl patos seh etablado faclons con et Eade snarls devarellada por lo pat {ios Exe fendmeno ba sido denominado“neocnpoatins™ lr ors cosa, implica a coneson x slgunos grupos de ue posicinprivegiadnyaeguratns cami de un “buen conpor. {amen Pero, pretamente pore echo de que eto grupos an sido opts po el stera se mesran cents a aces par formula signer demandes, y exo vx pusde evar al surgimieoto de orgenacons aera, qu cen drat poo J caracterzars pra ue protesta Como tdo exo supers lov mecinitos de ato protein senerados por on partis cartel tienen sus propia contac jones nema. En Ta media omg lon parr cate! tan a postbidad de dsscverdon ntr-orgmiatvom ininian iat omersenis de la competion dent dl carly se protgen els conecoencns dei inabsfacin letra extn pe ‘Sendo que ls eleosones van para compli ins a funn ‘nina de fedback qu el ae modelo de democracies tye Est tvacin so hace mis evdente Caan los mayares supos de interes se alincan aj pares proector defo Scerdosneocorpratitas Al ano tempo st no ea que Surjan denon desde fers de earteinao cuando pueden Boers obstcalon en el camino de msvon partis hat ae {rad en ol sstema, como por eemplo, a condnalidad Jes subvencons extatiles mann emtaonsectoalesprevion Oa restriccion de aces a a papelets Adem, os intents Ge "xclsin pueden legar ater Contraproduent propoconsn ols net exlidos a ama Son la que mova el apo 3 de los dsnfecton. De itl forma gue lo prion de lies38 ZONA apie 108/109 (2004) ‘rearon las condiciones sociales y poltiea para el surpimiento y ‘consolidacin de los patios de masas, los partidos de mass, 4 5 ver, erearon las condiciones para el surginiato y consoi- ‘cin defo partidos catch al los partidos catch-all propicia ron las condiciones de sugimiento de los partidos cartel, et més reciente auge de los partidos cartel genera, inevitablemente, su propia oposcin. Es evidente que los nuevos partidos en espera de ierumpir dentro dl sistema pueden hacer campafa basdndose en una ‘variedad de relamos idologics. Sin embargo. de mane- ‘recente, la experiencia sugiere que un reclamo parti mente atrayente, al que reurren muchos de le avevos partidos Y que parece especialmente efectivo ala hora de movilizar apo- $yos (ase, por ejemplo, la experiencia recente de Ross Perot fn la campatia estadounidense la eampafa del partido rfor- mista canadiense),es la consigna de “romper el molde” de I po- ea tradicional (véanse, por ejemplo, Poguntke 19%; Scarrow 1094), En muchos caso, esta eoasigna es sobre todo retérca y sus protagonists, sabre todo aquellos que buscan el apoyo de Tas nuevas clases medias —partidos que van desde los Demo- ‘ras 66 en Holanda los Liberal Democrats en Gran Bretana y los Progressive Democrats en Irands— a menudo demuestran estar mucho mds dspuestos a engrosar las fs del establishment fe lo que inicalmente declaran. lncluso, como de hecho ocurre con muchos de los partidos verdes, en casos en ls que la opos- ‘ign tiene races més profundas, ests demandas acaban demos: {réindotesuscepibles de ser acomodadas y cooptadas. 'No obstante, en algunos casos, a rotesa se sive de una de- safeccén més radical. Este es clarameate el caso de la mayoria de los nuevos partidos de extrema derecha, como el Vlaams Blok en Belgica el Frente Nacional en Francia, la Accién Nacio nal en Suiza e incluso posblemente la Nueva Democracia sue ‘2, que intentarian seguir el camino de los Patios del Progreso ‘en las vecinas Dinamarca y Noruega. Este es también el aso del ya establecido, pero cada vez mds ruidoso y excluido, Partido de ia Libertad en Austria, Todos estos partidos parecen mostrar tuna oposicion profundamente antidemocritica, con frecuencia enéfobs, al consenso establecdo en la mayoria de las democra- as europeassiendo és, claramente, una de las principales bases de su dito. Peo, lo que probablemente sea més chocant, ‘ZONA ABLERTA 108/109 (2004) 8 es que muchos de estos partidos también parecen estar logrando sacar partido de su supuesta capacidad de romper con lo que a ‘menudo sefialan como acuerdos "de amigos” entre las alterna vas polteasestablecidas. En efecto, por tanto, operando como lun cartel, intentando asegurar que no haya caros ganadores ii perdedores entre las altemativas establecidas y explotando el control del Estado para generar recursos a repartr entre ellos, fos patios cartel proveen sin querer, las municiones de las que los nuevos activists de a drecha se srven en sus guerra, Estos rvevosactores no representan un desaffo lo partidos en sf su protsta est, en cualquier cas, organizada a través de un pat do. Pero screen represenar un desafio a ls partidos cartel, un desatio que puede estar alimentado por las props aciones de lpr carly qe argo lo, eden por at epi ‘Tal y como sefalamos al comienzo de este ariculo, gran pate dela lieratura contempordnea se centa en el declive 0 el face 50 de los patios, énfasis este que, desde nuestra perspectva ‘equvocado. En realidad hay pocaevidenca que demuesire que la «rade los partidos ha terminado, Alcontrario, aunque en algunos aspects los partidos tienen menos poder que antes —contando, en general, con leallades partidstas menos intensas, menores Porcentjes de simpatizantes,identidades polieas menos difren- ‘iadas—, en otros aspects si posicién se ha visto fortaleida, en parte como resultado del aumento de lor recursos que el Estado (los partidos en el Estado) pone a su disposcion. Parece claro ‘que 3 e toma como referencia el modelo de partido de masis, como gran parte del literatura hace, los parties convencionales| aparecen como menos fuertes que ante, Pero ésta, como hemes cexplcado, es una referencia equivocada, ya que no tiene en even ‘a as f6rmulas que los partides pueden adopt para ascgurat 5 supervivencia, yes también una feferenci que soslaya los puntos fueres que los partidos pueden desirrollar para compensa las Sebilidades que se han puesto de manifesto. En resumen, tata de partidos cistntos. Habla de los desis alos que se enfrentan tos partidos, en lugar de hablar de declve a fracas, supone qui ‘2s hablar sobre bases mas seguras, aunque también algo inexac us. Esto es asf debido & que lo que se observ en las democracias occidentale no es tanto un desaffo lot partidos en general ‘como, inevitablemente, un desi los patios cartel