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Luc 22:7 Llegó el día de los panes sin levadura, en el cual era necesario sacrificar el cordero de la pascua.
Recordemos que en aquella celebración se debía tomar un corderito de un año, perfecto, sin mancha, sin heridas, sin defectos, y
debía ser muerto, su sangre derramada y el animalito puesto en un altar para ser quemado por completo y luego comido.
Aquel corderito que debía ser muerto en lugar de ellos, un sacrificio que nos recordaba el pacto de Dios con su pueblo al liberarlos
de la esclavitud de Egipto.

Luc 22:8 Y Jesús envió a Pedro y a Juan, diciendo: Id, preparadnos la pascua para que la comamos.
Que palabras más confusas para estos hombres, que el Señor les pida que hagan algo sabiendo el Señor que no tenían dinero, no
tenían casa, no tenían nada para esperar la pascua como correspondía.
Recordemos que eran hombre de no muchos ingresos monetarios y por seguir a Cristo incluso sus trabajos habían dejado.
Dios nos quiere utilizar, y muchas veces nos indica lo correcto, pero no sabemos cómo hacer. Muchas veces nosotros nos limitamos,
limitamos nuestras vidas, limitamos nuestras fuerzas, limitamos nuestras capacidades, siendo Dios quien realmente realiza las cosas.
Si Dios es por nosotros, ¿Quién contra nosotros?

Luc 22:9 Ellos le dijeron: ¿Dónde quieres que la preparemos?

Era algo extraño lo que les pedía el Señor pero para todo hay un propósito en la vida.
Ellos le consultan al Señor Donde quería que la prepararan, porque no tenían lugar ni donde recostar sus cabezas.
Y el Señor desea que nosotros le preguntemos, a Dios le agrada la comunión con Él. Dios quiere que por cada cosa que debamos
hacer le preguntemos a Él su voluntad. Dios ofrece un servicio mejor que los servicios técnicos, que cuesta ubicarlos, que se
demoran en atender, que realizan mal su trabajo. Dios es distinto, Dios quiere escuchar las peticiones de sus corazones y ayudarles a
ver lo que es mejor para nuestras vidas.

Luc 22:10 Él les dijo: He aquí, al entrar en la ciudad os saldrá al encuentro un hombre que lleva un cántaro de agua; seguidle hasta la
casa donde entrare,
Una orden un poco extraña, debían entrar en la ciudad y ver a un hombre con un cántaro de agua y seguirle.
En ese tiempo era común ocupar los cantaros para sacar agua, no llegaba el agua como en nuestros días por cañería. Entonces de
todos los hombres que podrían ver tenían que seguir al que el Señor les ordenaba hasta la casa donde iba a entrar. Hasta este punto
ya era extraño lo que debían hacer.
Muchas veces las personas esperan cosas mágicas, que venga un ángel del cielo a traer lo que yo necesito, o que se hagan cosas
milagrosas y grandiosas para poder creer en Dios. Pero por las cosas más sencillas podemos ver a Cristo en nuestras vidas. En este
caso por un caso particular de un hombre que llevaba un cántaro con agua. Recordemos que no es la primera vez que Dios guía a
persona por alguien con agua, en el caso cuando le buscaban a Isaac una esposa la señal de la mujer era una joven que le ofreciera
agua a el mayordomo a sus animales.

Luc 22:11 y decid al padre de familia de esa casa: El Maestro te dice: ¿Dónde está el aposento donde he de comer la pascua con mis
discípulos?
Y debían hablar con el dueño de casa sin haberlo conocido diciendo el mensaje que el Señor les había enviado. El maestro te dice.
Para este hombre no iba a ser extraño lo que estos hombres decían, y ya tendría preparado el lugar para su Maestro. Además debía
suministrar el cordero y todo lo necesario para poder celebrar completamente esa fiesta.
Este hombre esperaba la señal de su Señor, en esta ocasión el Señor bendice a ambas personas a quienes enviaba porque veían la
mano de Dios en lo que hacían y a este hombre que fue bendecido por ser elegido por Cristo para que le facilitara un aposento para
realizar la cena.

Luc 22:12 Entonces él os mostrará un gran aposento alto ya dispuesto; preparad allí.
Entonces en aquel local lo celebrarían, un lugar prestado, un lugar en que les entregarían todo listo y ahí debían arreglar las cosas.
Y las cosas que Dios hace no son insignificantes estos hombres por obedecer a la voz de Dios no solo recibieron un lugar sino uno
grande, porque Dios da en abundancia a los que son fieles a sus palabras.

Luc 22:13 Fueron, pues, y hallaron como les había dicho; y prepararon la pascua.
Los discípulos creyeron en la palabra de su Señor y todo les salió según Cristo había dispuesto. Y allí prepararon la pascua.

Por: Iván Pablo Yáñez Fica 



  
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Dios hoy también está hablando y quiere mostrar grandes cosas para usted y que lo que haga sea según como Dios quiera, no
siempre podremos tener todo lo que queremos de inmediato, ni como lo queremos, pero lo que él nos dé será de grande bendición
para nosotros porque da según nuestras necesidades.

Luc 22:14 Cuando era la hora, se sentó a la mesa, y con él los apóstoles.
La hora, el tiempo correcto, el tiempo exacto. Dios para todo tiene su tiempo, según dice Eclesiastés 3, y Dios ahora le ha dado
tiempo para poder escuchar de su palabra. De poder cambiar su destino, de poder mejorar su camino, o poder enderezar su vida.
Dios le ama y quiere lo mejor para usted y hoy también quiere hacer un milagro en su vida, hoy le está hablando porque le quiere
transformar Dios busca un lugar donde habitar, el Señor quiere entrar a un lugar donde le estén esperando, en donde estén
agradado de recibirle, Cristo quiere entrar a su corazón. Nuestro cuerpo es un templo, es una casa donde puede habitar el Espíritu
Santo si es que le recibimos. Cristo al igual que el corderito, se entrego por usted y por mi para darnos vida. Él es el cordero de Dios
que quita el pecado del mundo a todo aquel que le quiere recibir. Dios lo obre hoy y gratuitamente. Pero de usted depende.
Si a usted le dicen hoy, el Maestro quiere saber dónde está su lugar, donde está su aposento.
Dios te dice hoy:
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Luc 22:15 Y les dijo: !!Cuánto he deseado comer con vosotros esta pascua antes que padezca!
El deseo del Señor por estar con los suyos era mucho, el comer es una reunión en donde se puede compartir de mejor manera, uno
se siente más feliz, y el Señor deseaba comer con ellos esa pascua. Era un momento de comunión, de amor, una experiencia en
donde el compartiría por última vez con sus discípulos para realizar aquella pascua la cual ahora sí tendría sentido.

Luc 22:16 Porque os digo que no la comeré más, hasta que se cumpla en el reino de Dios.
Nuevamente anuncia su muerte pero ahora si más próxima. Era su última comida con sus discípulos, con aquellos que le
acompañaron ese tiempo y ahora se revelaría aquel que le entregaría. Una cena con mezcla de emociones y con una celebración que
se dejaría los creyentes que queden por todas la generaciones.
Luego habrá otra celebración en el cielo, una celebración, una comida ya no para recordar una muerte sino para celebrar la vida y
reino de Dios.
Dos actividades en que se compartirá, dos actividades en donde se comerá, pero con distintos sentidos.

Luc 22:17 Y habiendo tomado la copa, dio gracias, y dijo: Tomad esto, y repartidlo entre vosotros;
Entonces en la comida el Señor invita a comer a sus discípulos, les reparte la copa para que beban.
En la Biblia el vino es símbolo de alegría, de felicidad, de gozo. Cristo quería que pasaran un momento feliz sin que lo que vendría
más adelante interfiera con lo que se celebraba.

Luc 22:18 porque os digo que no beberé más del fruto de la vid, hasta que el reino de Dios venga.
 
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Acá se refiere a cuando Cristo venga nuevamente cuando su reino se establezca en la nueva tierra y reinemos por la eternidad con
Él.

Luc 22:19 Y tomó el pan y dio gracias, y lo partió y les dio, diciendo: Esto es mi cuerpo, que por vosotros es dado; haced esto en
memoria de mí.
Luego da inicio a la cena del Señor tomando el pan y dando gracias lo partió y les dio. Lo importante de la cena del Señor es hacernos
pensar y meditar a través de sus símbolos.
El pan es el alimento más común de todas las civilizaciones, con distintos ingredientes, con distintas formas pero con un mismo
objetivo, que es dar los nutrientes necesarios para que el cuerpo pueda estar fuerte y dar energías para el día a día.
El pan está compuesto por elementos de la tierra, básicamente harina y agua. Elementos opcionales son la sal y la levadura.
Se necesita primero con este pan dar las gracias para que pase de ser un simple pan a ser un símbolo incluid en la cena del Señor, es
un pan que es bendecido por Dios, no por lo que contiene sino por lo que es.
Por otra parte se necesita Partir aquel pan, porque así como partimos el pan el cuerpo de Cristo fue partido.

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Y luego debe ser dado a todos los que la celebran, para recordar que Dios lo hizo por cada uno, para meditar en su cuerpo y para
participar de sus dolores y sufrimientos juntamente con Él.

Por: Iván Pablo Yáñez Fica 



  
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Luc 22:20 De igual manera, después que hubo cenado, tomó la copa, diciendo: Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre, que por
vosotros se derrama.
La copa también se agradece, y se entrega a los demás, porque así como aquella copa con el contenido de la vid se va vaciando por
los presentes, así la sangre de Cristo fue derramada por cada uno de los que en Él creen.
Es la sangre preciosa que Dios entrega por sus hijos, para que por medio de esa sangre seamos limpiados.

Luc 22:21 Mas he aquí, la mano del que me entrega está conmigo en la mesa.
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Luc 22:22 A la verdad el Hijo del Hombre va, según lo que está determinado; pero !!ay de aquel hombre por quien es entregado!

Luc 22:23 Entonces ellos comenzaron a discutir entre sí, quién de ellos sería el que había de hacer esto.

Por: Iván Pablo Yáñez Fica