Professional Documents
Culture Documents
1- No debemos admitir más causas naturales que aquellas que son verdaderas y
suficientes para explicar sus apariencias.
INTRODUCCIÓN
Blanche
Al terminar Kant la crítica de la razón práctica confiesa que dos cosas lo llenan de
extremada admiración y asombro: la primera, es la ley moral en su interior, se refiere Kant
a su sentido interno a su causalidad por libertad, a su imperativo categórico moral. La
segunda, es el cielo estrellado sobre su cabeza, que tiene que ver con el universo y todos sus
componentes.
Todo parece indicar, que la preocupación sobre la estructura del universo y sus componentes
viene de tiempos inmemoriales. Lo apreciamos en los calendarios Aztecas, ideogramas
Mayas, en la herencia Egipcia, Babilónica y en la civilización Caldea-Asiria (3.000 años
antes de Cristo). Los astrólogos crearon la división zodiacal en doce signos y éstos a su vez
en treinta y seis décadas, que corresponden a los doce meses del año y a la división de la
esfera celeste en 360 grados. Prácticas astrológicas predijeron eclipses, realizaron
mediciones astronómicas con las cuales el hombre pudo, en parte, dar respuesta a su
angustia de explicar su mundo y su entorno.
En Grecia se intentó, por primera vez, una explicación científica del universo. La
astronomía de los primeros griegos se desenvolvió dentro de las escuelas filosóficas, cuyos
representantes, Filolao de Crota, Eudoxio y Aristóteles, elaboraron distintos sistemas para
explicar el movimiento de los astros. En la escuela de Alejandría se reveló el genio griego a
través de Aristarco de Samos, precursor de Copérnico; de Hiparco, creador de la astronomía
matemática y descubridor de la predicción de los equinoccios, y de Ptolomeo con su sistema
geocéntrico, que subsistió durante catorce siglos.
Aristarco de Samos dibujó las órbitas planetarias en el orden que ahora las conocemos:
las armonías pitagóricas, sistema unificador que comprendía en su conjunto la
totalidad entre lo visible e invisible. El sistema solar formado por el sol y los cinco
planetas conocidos: Mercurio, Venus, Marte, Júpiter y Saturno que giraban alrededor
de la tierra y en su movimiento emiten ondas musicales que constituían la armonía
celeste.
Aristóteles imaginó además de las esferas que contenían astros, otras esferas de
compensación para colmar el vacío que no podía admitir en el universo; por este mismo
motivo materializó todas las esferas, atribuyéndoles una materia transparente (puesto que
eran invisibles), el quinto elemento o éter.
Este geocentrismo cortó las alas a la imaginación dejando al hombre en un mundo cerrado,
dentro de un manto celeste agujerado y egocéntrico; donde el hombre espectador de su mundo
se consolaba con ver a su alrededor un conjunto de esferas cristalinas movidas por
desconocidos dispositivos.
Aristarco fue condenado al olvido. Preguntar por la tortuga que sostenía el elefante y éste a
su vez al mundo, era ya mucho. La concepción del momento centraba su poder en un
mundo fijo e inmutable.
El modelo de Ptolomeo era el vigente, la tierra el centro de ese mundo cerrado, apoyado por
el cuerpo doctrinario de la física aristotélica, que frente a su imposibilidad de explicar el
fenómeno de lanzamiento, requería de un paso; ese paso se dará con la ley de gravitación
universal de Newton.
DE LAS TINIEBLAS A LA LUZ.
Un hombre llamado Abn Haythan nacido alrededor del año 965 D.C. en Basora, ciudad
situada en el actual Irak, resolvió la discusión que se mantuvo en su punto muerto durante
más de 800 años; mientras Euclides y Ptolomeo y otros matemáticos demostraron que la luz
viajaba del ojo al objeto observado, a Aristóteles y los atomistas asumían la posición
contraria y la discusión seguía en pie. Haythan resolvió el problema de la forma más sencilla
de todas. Invitó a los observadores a mirar fijamente el sol, con lo que demostró que cuando
se mira a un objeto lo suficientemente iluminado este quema los ojos. No apeló a la
geometría ni a la necesidad teórica. Demostró que el mundo no responde a la razón ni a la
conjetura. Comprobó la importancia del experimento, algo que se pudiera demostrar en el
tribunal de la observación controlada, la ciencia experimental.
En el siglo XVI se produjo el gran adelanto con la teoría de Nicolás Copérnico expuesta
en De revolutionibus, que fue objetada por los defensores del inmovilismo de la Tierra.
Tycho Brahe, elaboró un nuevo sistema geométrico, en que los planetas giran en torno al sol,
mientras éste gira en torno a la tierra. Johannes Kepler en 1627 resume la armonía de los
mundos en las tres leyes: 1ra. Cada planeta describe una elipse, uno de cuyos focos ocupa el
sol. 2da. El radio vector de cada planeta recorre áreas iguales en tiempos iguales. 3ra. Los
cuadrados de los tiempos de las revoluciones de dos planetas, son proporcionales a los cubos
de sus distancias medias al sol.
de todo, Copérnico fue el primero que propuso la sustitución del cosmos cerrado y jerárquico
de la Antigüedad y de la Edad Media por el universo homogéneo e infinito de los modernos.
En la última década del siglo XVI, a partir de las intuiciones de Giordano Bruno sobre la
idea de infinitud del universo “Un Universo infinito, inmenso y no enumerable poblado por
infinitud de mundos semejantes al nuestro”. Giordano propone una justificación muy
especulativa del sistema copernicano que tuvo la virtud de llamar la atención de sus
contemporáneos. La teoría de Copernico se convirtió en tema de conversación y debate. Pero
Bruno murió en la hoguera en 1600.
A Tycho Brahe se debe el proyecto de creación del primer instituto científico que ha existido
en el mundo: Uranienburgo, en la isla de Hveen, Dinamarca. Propuso también un sistema
copernicano con respecto a la Tierra inmóvil. Johannes Kepler, que fue inicialmente ayudante
de Brahe se estableció en Praga en la corte de Rodrigo II. A él se debe la idea de las órbitas
elípticas. Una fecha de este período conviene recordar: la década de 1620. En esos años se
sustituyó la física de las cualidades por la Física cuantitativa; el Cosmos jerarquizado por
un universo “indefinido” y el mundo sentido de la percepción inmediata por el mundo
pensado del matemático
Las observaciones hechas por Tycho Brahe sirven de base a Kepler para formular las leyes,
las cuales dicen: Los planetas giran alrededor del sol con órbitas elípticas y el sol ocupa uno
de sus focos. El rayo vector que une el centro del sol con el centro del planeta barre áreas
iguales en tiempos iguales. El cuadrado de un período de un planeta es proporcional al cubo
de su distancia al sol.
Mientras Kepler explica el aumento óptico y establece las leyes del movimiento planetario,
Galileo, mirando la luz que incidía sobre él, movió el mundo.
En el siglo XVII se da la verdadera apertura del reino de las tinieblas al de la luz. Los
científicos del momento se encontraban frente a la autoridad aristotélica, nuevas ideas
cosmológicas aparecen, se perfila una apertura de la luz de la razón, pese a la influencia
religiosa de ese momento. En el campo de la astronomía está el gran debate si el sol o la
tierra son el centro del universo.
Bacon en su Novun Organun escribió el manual del usuario para el nuevo instrumento
científico del pensamiento, eliminando los malos hábitos de la razón que no dejan ver de
frente la evidencia. Es el momento en el cual las ciencias sintieron la necesidad de
emanciparse de la tiranía de los dogmas y proclamaron el libre examen, como fruto de la
reforma religiosa. Era necesaria una revisión de las doctrinas fundamentadas en la
revelación divina y la adivinación, por unos conocimientos más positivos divulgados por los
estudios de la naturaleza. Es el momento en el cual la física sustituye el concepto de
revelación por la lógica.
La física justifica los esfuerzos para abordar los estudios de la naturaleza y establecer en
esta forma un ancla en el mundo "Hay que comprender que una ciencia que se exprese en
lenguaje matemático el veredicto de la experiencia no tiene sentido si no aporta una respuesta
precisa a la cuestión planteada"
La nueva ciencia no es el rechazo del razonamiento por la experiencia, sino una manera
nueva de asociarlos. Se trata de "una nueva manera de interrogar la experiencia". La
preocupación por el método, se torna en un lugar común entre los pensadores del momento.
El Novun Organun y el Discurso del Método fundamentan y dan las bases racionales a la
ciencia experimental.
El método en Descartes
Descartes utiliza esta ortopedia conceptual con el fin de fundamentar sus principios y
subordinar la
experiencia a la razón. "La razón nos muestra un acuerdo tan perfecto con la experiencia
que de haber conocido bien a ambas, no creo que sea posible dudar que la cosa no sea tal
como la acabo de explicar"
El método cartesiano está fundado en un criterio de verdad al no aceptar nada que no sea
claro y distinto. De ahí su exigencia de un método matemático. Descartes se dirige de las
causas a los efectos dentro de una estructura racional demostrativa, tal que fuera posible
albergar una duda como concepción de principio, como elemento de una deducción y como
fundamento en valor de una creencia.
1. "No admitir como verdadera cosa alguna, como no supiere con evidencia que lo es, es
decir, evitar cuidadosamente la precipitación y la prevención y no comprender en mis
juicios nada más que lo que se presentara tan clara y distintamente a mi espíritu, que
no hubiera ocasión de ponerla en duda.
2. Dividir cada una de las dificultades que se examinare, en cuantas partes fuere posible
y en cuantas requiriese su mejor solución.
3. Conducir ordinariamente mis pensamientos, empezando por los objetos más simples y
más fáciles de conocer, para ir ascendiendo poco a poco, gradualmente, hasta el
conocimiento de los más compuestos, e incluso suponiendo un orden entre los que no se
pueden naturalmente.
4. Y el último, hacer en todos unos recuentos tan integrales y unas revisiones tan
generales, hasta estar seguro de no omitir nada".
Dice Descartes que éstas reglas conformarán un sistema, y comienza con el carácter
indubitable, estableciendo todo un principio en las ideas claras y distintas, como criterio de
verdad, pasando por su disección sistemática hasta encontrar los primeros principios; luego
ordenar cuidadosamente de los más simples a los más complejos, realizando después una
enumeración heurística con el objeto de no omitir ningún detalle, empleando la razón en
todo y por todo, buscando concebir los objetos con mayor claridad y distinción.
El método en Newton
Los modelos matemáticos que deben concordar con los fenómenos en la física Cartesiana, no
son la preocupación de Newton. De ahí su exigencia de que "La teoría le permitiera
calcular los valores precisos de los fenómenos y luego referirse a la experiencia y
corroborarlos". Su rigor matemático-experimental está marcado. Se afirma que si Newton
no hubiere escrito los Principia Matemática, la ciencia no tendría el avance que hoy tiene.
Newton determinó el pensamiento y la investigación en Occidente.
En el segundo centenario de su muerte en el año de 1927, Einstein dijo sobre Newton que
no sólo fue genial como inventor de ciertos métodos claves, sino que poseyó una maestría
única sobre el material empírico conocido en sus días y también dueño de una maravillosa
inventiva en lo que se refiere a métodos matemáticos y físicos. Newton logró darle una
expresión matemática y someter a un control experimental la gravitación a partir de las
tres leyes sobre el movimiento, permitiéndonos más tarde abordar el infinito.
En su método están dadas las bases de una física experimental y era tal su cuidado con la
metafísica que el mismo repetía: "Física, cuídate de la metafísica". La experiencia nos
atestigua el principio de la gravitación, por eso no exige que sus principios sean al mismo
tiempo fundamentos; es decir, ser ciertos por ellos mismos, sólo alcanzarán su certeza después
del largo camino del orden y en la medida que concuerden con la experiencia.
1- No debemos admitir más causas naturales que aquellas que son verdaderas y
suficientes para explicar sus apariencias.
Newton criticó en varias ocasiones el concepto de hipótesis. Puesto que, como veremos, éste es
un concepto básico para el conocimiento científico es importante precisar el sentido de esta
crítica en el marco de la historia de la ciencia. Newton dice en el libro primero de la
Optica: "Mi propósito en este libro no es explicar las propiedades de la luz mediante
hipótesis, sino proponer y demostrar mediante razonamientos y experimentos".
Refiriéndose a sus descubrimientos en los Principia escribe: "He explicado hasta aquí los
fenómenos celestes y los del mar por la fuerza de la gravitación; pero no he indicado en parte
alguna la causa de dicha gravitación [...] No he podido aún llegar a deducir de los
fenómenos la razón de esas propiedades de la gravedad, y no imagino ninguna hipótesis.
Pues todo lo que no se deduce de los fenómenos es una hipótesis; y las hipótesis, sean
metafísicas, sean físicas, sean mecánicas, sea la de las cualidades ocultas, no son de recibo en
la filosofía experimental [...] En esta filosofía se obtiene las proposiciones de los fenómenos
para generalizarlas luego por inducción"
Para Newton las hipótesis pueden debilitar los razonamientos fundados sobre la inducción,
sacados de la experiencia, por eso sólo acepta la hipótesis cuando la experiencia presenta la
excepción.
Newton introduce las nociones de tiempo absoluto y espacio absoluto, que suscitaron grandes
debates y una viva oposición. El tiempo absoluto verdadero y matemático, en sí y por su
propia naturaleza, afirma Newton, fluye de manera uniforme sin relación con nada
externo, y por otro nombre se le llama duración; el tiempo relativo, aparente y común, es la
medida sensible
Para Feyerabend, Newton reinó durante más de 150 años, y si Einstein introdujo durante
un breve periodo un punto de vista más liberal, no fue si no para dar paso a la
interpretación más amplia.
La mecánica cuántica de principios de siglo, deshizo la ingenua creencia Newtoniana
de un mundo objetivo prelingüistico de objetos materiales que están ahí. El principio de
incertidumbre de Heinsemberg ha disuelto la realidad, ya no es posible preguntar si "
Las partículas existen objetivamente en el espacio y el tiempo".
Por otra parte la nueva visión de la realidad ha destruido el dualismo Cartesiano entre
observador y observado, entre sujeto y objeto y la misma relación espacio-tiempo
absoluto Newtoniano.
Aldumate, Phillip Arturo. La vida en Universo Edid Zig- Zag · Ed Santiago de Clile,
1969, pág. 63
Ibiden, pág. 34
IBIDEN, pág. 18
Newton, Isaac. Optica o tratado de las reflexión, reflacción, inflexiones y colores de la luz.
Edición Carlos Solis, Introducción, Alfaguara,1977.
Isaac Newton
Isaac Newton nació el día de Navidad del antiguo calendario en 1642 (correspondiente al 4
de Enero de 1643 del nuevo calendario), año en que moría Galileo, en el pueblecito de
Woolsthorpe, unos 13 Km. al sur de Grantham, en el Lincolnshire. Fue un niño prematuro
y su padre murió antes de su nacimiento. Newton fue educado por su abuela, frecuentó la
escuela del lugar y, siendo muy niño, manifestó un comportamiento completamente normal,
con un interés marcado por los juguetes mecánicos. A los dieciocho años era alumno del
Trinity College, institución que le brindó hospitalidad, libertad y una atmósfera amistosa
hacia la ciencia, nada en sus estudios anteriores permitía entrever o incluso esperar la
deslumbrante carrera científica del fundador de la mecánica y la óptica.
En la misma época, Newton entró en contacto con los trabajos de Galileo, Fermat, Huygens
y otros, a partir probablemente de la edición de 1659 de la Geometría de Descartes por
Van Schooten.
Retirado con su familia durante los años 1665-1666, conoce un período muy intenso de
descubrimientos: descubre la ley del inverso del cuadrado, de la gravitación, desarrolla su
cálculo de fluxiones, generaliza el teorema del binomio y pone de manifiesto la naturaleza
física de los colores. Sin embargo, Newton guarda silencio sobre sus descubrimientos y
reanuda sus estudios en Cambridge en 1667.
Al final de su vida Newton opina sobre sí mismo, dice: "No sé cómo puedo ser visto por
el mundo, pero en mi opinión, me he comportado como un niño que juega al borde del mar, y
que se divierte buscando de vez en cuando una piedra más pulida y una concha más bonita
de lo normal, mientras que el gran océano de la verdad se exponía ante mí completamente
desconocido." . Después de haber sido profesor durante cerca de treinta años, Newton
abandonó su puesto para aceptar la responsabilidad de Director de la Moneda en 1696.