{ artibulos Qui SA'TVIOOS SVIONAIO 10 SHLINVIGILISA 1d OWINAD saqueIpnysy {UOWeD “HOLNY| 1yeqatjog, seaueiodwajuooseonoepip Saquelliog :O1 Xa | so, 9p oyeaipuis ‘YOS340ud) ‘ODIGOD} BONSEDI ‘WINSLVINJOO'L$ :O1Daud|sestDE HERENCIAS, DEUDAS Y LEGADOS Una introduccién a las corrientes actuales de la didactica Alicia W. de Camilloni La pluralidad de teorfas, como en todas las ciencias sociales, es constitutiva de la disciplina. Bl andlisis de las principales corrientes permite descubrir cules son las probleméticas que cada una de ellas trata de resolver pero requiere para sw comprensi6n referir a los peculiares modos como se configuré cada una, porque de ellos se derivan s6lo el contenido sustantivo de las corrientes sino también Ja vinculacién que existe entre éstas y, por ende, la con- formacién de la didéctica como disciplina. Algunas corrientes estén muy estructuradas y, en el marco de la didactica actual, son fécilmente reconocibles. Como dirjan Moscovi- ci y Hewstone (1986), estén personificadas, al modo como se iden. (ifican con un viduo de renombre ciertos conocimientos cient. ficos cuando se transforman en conocimiento popular. En este caso, uno de los fenémenos caracteristicos es que las teorias son simbo- Hzadas por personas y que, inversamente, determinadas personas se identifican con teorias esquematizadas en Ja forma de un pequefio Conjunto de enunciados categéricos. Por lo tanto, importa ocuparse de corrientes y autores. Del estudio de las corrient de Ia didéctica actual surgen con‘un sx ‘sezojne soun8|e uo saquotoD soy e seoyMossad soumrquam ~S008 ‘SOWA SaUe OUIOD “ope UN Jog ‘ofajdwos oy euerOUed lun wos souenuosue sou vanaypIp BI 2p feRIOB apeise Jop souRE;eY opueno anb rye ap ‘iaafosar ap opearidisos Anus BX so sepnop se] 2p ema OJOS [J “UOISNasIp ap eLAIEUI BIAS PsAZPAr OWS amb OD:9 oFad ‘sopea| sns op seiqzy sopod eumsn8 ayy “sepnap sns 1909]qNIS9 Ua) “mined sou seuridiosip seo Uoo eanagpip vf 9p souorovfar Seis seiouato sexo seundye wa eysuao0p x sod seprreduros os ‘siuaurey2l9 ‘sopend se] ap seunfye ‘wuydiosip ns ap wzueuos ua bj ap seataLI9 satonsano ap sug vf augos X vanpuroIeR vondo uo ‘soonpmaypur sod openaryo ofeqen un ap anaed v vijouesop 8 18 jerouo3 vonlogpEp un wind eoydum ossoa1d 9)S0 an sorsyps119q so] & so8saui so] ap voreoe s2uoTXayar B soMTONpUOD wpApod [eno Of ‘yersua8 us ezuewasua ej ap odure> oypur je uvjodenxe ef £ eH0M epunyoad & [p9y eun wesous® souamb wos soonpussyeur $07 -,van -ovprp puarwaduy,, vf ep aqaisi0d ej sa oanvoyuBis Anu ose UP) ‘seur[dfostp sesio op vj ¥ UepE|sen as ‘Ife apsep K vuT|diostp ns ap zupyesia vf ap sosysoadso seuroqgoud so] 2p wayred onb sexorne wo PUPS 98 auatsI09 B] opuend varueyd as eIoodso wuD|gord uA ‘wouloypip eB uEyuaISns anb saseg seaant euoroiodoad anh & ropauaquoa 0 ode spt ‘oan -nunsns ‘vumsord owjo oWto9 OtUSLALNIUBOD [9 A VoNUD! 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Por otra parte, podemos categorizarlas en relacién con diversos programas de investigacién cientifica: muchos de ellos, no origina- dos estrictamente dentro de Ja didéctiea sino construidos sobre la base de enfoques o corrientes nuevas que aparecen on otras disci- plinas. Los distintos PIC que coexisten en el interior de la psico- logia constituyen un caso. Pero también ejercen su influencia las discusiones internas, por ejemplo en el campo de la matemética, la historia o la geografia, que no estén necesaria ni exclusivamente teferidas sélo a la enseflanza de estas disciplinas, esto es, a sus diddcticas, Divergencias entre teorfas cientificas en una disciplina también producen una impronta, y generan, a su vez, muevas corrientes que, nacidas desde una diddctica especial, a veces pre~ tenden,.intentan 0 logran ocupar el campo de la didctica general ¥; desde alli, incluso extenderse-a otras didacticas especiales Hay algunas otras influencias que tambign penetran el campo de la diddctica y que definen, en buena medida, la constraccién de algunas de sus corrientes contemporéneas. A partir del movi- nto denominado “reconceptualizacién del currfeulum”, que se en la segunda mitad de la década de los afios ’70,"hay una Teconsideracién de la importancia que tienen las distintas lineas © tearfas filos6ficas, sociolégicas o politieas que, se afirma, de- ben ser retomadas con el objetivo de reconstruir la teorfa del curriculum, que es un objeto de conocimiento central, sin duda, de la didéctica, Diversos autores observan, entonces, que la con ceptualizacién de los problemas curriculares carece de marco teérico amplio y que las grandes concepciones filoséficas, polf- ticas y sociolégicas parecen encontrarse ausentes en la produc- didactica Ello conduce a la introduecién explicita de nuevas perspe en el campo de la teorfa del disefio y desarrollo del curr tales como 4a fenomenologia, el marxismo y el neomarxismo, el estructuralismo, el psicoandlisis, Ja eritica social y politica, entre otras. Y todo ello con referencia a uno de los temas nucleares, mas ini lerencias, deudasy lee importantes en nuestre época en la didectica, el curriculum, lugar geométrico donde se retinen todos los desarrollos teGricos que ha venido realizando la didéctica desde principios de siglo. Se trata, ues, de un tema privilegiado, de un objeto en torno del cual | polémica define no slo la concepeién apropinda de ese objeto, sino los modos de construccién, el tipo de enunciado y los referen. tes principales de la disciplina. Hasta aqui, entonces, si nos proponemos categorizar y explicar el campo de las corrientes actuales de Ja didéctica tenemos que tomar en cuenta la influencia de los programas de investigacién Cientifica de algunas disciplinas, en particular la psicologia, En segundo lugar, la de distintas disciplinas que, a partir de diversas didécticas especiales, se extrapolan a la didéctica general. En tercer lugar, las cortientes filoséficas cuya importancia creciente en el Pensamiento didéctico se manifiesta en Ia lectura de los textos actuales, que tratan de dar un enfoque mds general acerca de la disciplina y no sélo de algunos de los temas espeeificamente de- marcados por la tradicin de la didactica, Entre ellos encontramos Jos enfoques epistemol6gicos que influyen en los métodos de in- vestigaciGn que se utilizan en el desarrollo de la didéctica, como se observa en la polémica acerca del empleo en la investigacién de métodos cuantitativos y cualitativos o experimentales y etnogratficos, Por ¢jemplo, asf como el pensamiento de distintos autores acerca de la naturaleza del conocimiento cientifico, su relacién con otros pos de conocimiento, y e] esfuerzo por definir el campo cubier- to por nuestra disciplina y su propio status epistemoldgico. Tam- Poco se puede soslayar la importancia de una profusa produ de trabajos realizados en el mareo de la filosofia analitica que contribuyeron, en su momento, a despejar en el campo del discur- 80 didéctico, muchos de los problemas planteados por el uso frecuente de “lemas pedagégicos”. En cuarto lugar, es imprescin- dible mencionar la importancia de los aportes provenientes de las diversas corrientes del pensamiento sociolégico y de la ciencia politicaSo] Sopoy u9 £ uptovsxde ap sodumo soy sopoy ua wansypip UoID -onpoud vf uo auay onb erouongar msoyrueur ef 9p A 19 uo urs 0 ‘96 anb eimyeoyl] estyoid ef op spavn p ojwapiaa wynsed oandus -saad ofeqen Jap peprinray e ‘afezipuaide jap wFopoorsd vy apsap sgquauiayuensasuos ‘epeoidxa < epezyeue ‘epuen sa vzueues -u2 e| ap vonguiaigoad wy “vonoypIp 2] sa anb auyap ouLssoouUL aiynsar anb ome so ou ‘s7/Sur ua sopesuad & sousosa sofeqen apsep uuouigap 9s ‘seszoay sey ua sareayonu ‘sopuzyynn spur soydaouoo soy & sauge souydiosip sey ‘vrouanoasuos us ‘oIuTWop ajsa ue opuEN “oaiZoy -o21sd o[apour un ap BotRo[ X Blsamp wrouanoasuos owtod agiquey vroarede eonapprp uoraduasaid ef ‘uae Liny ap odures fap ROA 2] 0 381895 ef ap E[anasa Pf UFO ‘aseq ep Soisondns soy soyTpNbE uuere ou apuop seyoa) sejfanbe eed une ‘oued wo sog “ewSipesed ordoad jap oanrinsuos so ouemouay aysg “aoamedesap eonogpip ey A ajqystauy sovy 28 anb opedyyqo we) so ousuEN [y “voHDBpIP Be ‘vBopootsd vy ap aquouUMBo] resed ered wugdiosip | op sua uosy Sb] TRUT]DP o"WsD99u $9 OU ‘OILY; Of sod ‘oareur ay89 9p BIed y -saygrasosqo sejonpttos sey ap B}409) vun ap corMUE [2 U9 sopeorydxo 48 apand onb sodn soundpe ® sopfonpar ‘afezipuaide ap sosoaord So} usonpord as owl99 1e00U09 aualoUNS pias MYasUa wIed “es “soa! 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Pero la introduceién en la reflexién y e] estudio de los procesos educativos y, en particular, de los que curren en la escuela, de otros enfoques disciplinarios, asf como la crisis del paradigma conductista cuando es tomado con exclusivi dad como marco teérico explicativo, conduce a la adopcién de waa nueva demarcacién, asociada esta vez con el estudio de dos com- plejos objetos como son para algunos el curriculum, entendido como concentrador de la temitica didéctica, o para otros, la escue. Ja, en tanto microcosms institucionalizado de un proyecto social, ambos objetos, por ende, estrechamente relacionados. El inicio y el desarrollo de este proceso conllevan la aparicién en los discursos asi coustruidos, de la discusién acerca de las relaciones de éstos con un conjunto numeroso y heterogéneo de disciplinas. En este mismo terreno, la didéctica aparece un poco més tarde pero con los nombres de una teorfa de Ja ensefianza o de una filosofia de la ensefianza, La enseitanza como proceso diferencia- do del aprendizaje se convierte en objeto propio de conocimiento de esta disciplina, En el desarrollo de las teorfas djdacticas, en- contramos que tienen importancia decisiva los trabajos hechos en microsociologia, en antropologia y en lingiifstica, Sin embargo, ellos toman el campo de la enseftanza, y de hecho, contintan tomindolo desde fuera de la didactica. Comienzan a ocuparse de Jo que sucede, fundamentalmente, en la escuela; se interesan por conocer el objeto “ensefianza escolar’, en tanto es significativo desde un punto de vista sociolégico o, en particular, porque es uno de los dmbitos de trabajo para los antropdlogos que estudian instituciones con una nueva metodologia de investigacién. Tam- bien algunos lingiiistas encuentran alli la posibilidad de analizar procesos de aprendizaje de la lengua que en una situacién de laboratorio se hubieran visto més distorsionados y dan por acep- lado, por lo tanto, que es mds natural trabajarlos en el campo, esto es la escuela, donde ademas, como objeto adicional, tienen oportunidad de investigar ese otro objeto importante de estudio, constituido por las interacciones lingiisticas entre docentes y De herencias, deudas y legados 2 alumnos. Los sociélogos que se ocupan del curriculum y de Ta institucién escolar lo hacen desde la microsociologta por Sw rela: cién con Ja macrosociologia y en razén de que esta articulacin les sirve de principio en la explicacién de procesos macrosocio- Idgicos; tnician sus estudios sobre ta escuela y sus instituciones internas y externas, Ven a la escuela como una organizacién interesante para analizar procesos que, si bien desde un nivel macro podian ser explicados de diferentes maneras, en la escuela, como lugar de formacién instituido por la sociedad, encontraban un Ingar privilegiado de estudio. Los didactas, que hasta ese momento eran los tinicos que se ocupaban de Io que e] maestro hacfa en la clase, encuentran que ese objeto de estudio propio es tema de interés para personas que provienen de otros campos disciplinarios, con lo cual se plantean algunos problemas, En mi opinién los problemas no consisten, precisamente, en que los didactas salgan a disputar el campo. Creo que lo que si ocurre es que aprenden, con dificultades, a utilizar los hallazgos, esto es, las teorias provenientes de otras disciplinas, Asi es como hoy, cuando se trahaja en cvestiones relacionadas con Ia teorfa ola practica del diseiio del curriculum o en el andlisis institucional de la escuela, cuando se trata de explicar los procesos de ensefianza o se desarrollan proyectos de evaluaci6a, cuando se trata de explicar las relaciones que tienen las instituciones escola- res con Ja sociedad y con la cultura en general, el didacta sabe que tiene que utilizar, necesariamente, les teorias provenientes de otros campos. Somos, pues, deudores de esos campos. Somos fuertes deudores Debemos preguntarnos, entonces, si la relacién es de reciprocicad. si también a didéctica entrega teorfa a esas otras disciplinas, Si la respuesta @ esta pregunta es negativa, es posible que ésie sea un indicador de los problemas mas serios de la didéctica actual. Es posible que los antropélogos afirmen que no son deudores de los didactas, y quizas ocurra Jo mismo con los psicdlogos, Pero que~1diasip sey anb opep 4 “ewe, asa seen ered ,euydrosip wun sea19 enb eugey,, anb ao1p 2s ‘ezuryasua euang wun UoD sopenoIoejor sewar 9p E{qety a8 ‘oyparap opor ap ssoauayed viziqap vonsyptp yf anb je ‘uproIUFo9 ¥| op swfousto sej ap odureo fa ua opanc “onus so ‘euydiostp ep ap eaaaoe ‘Pornuara ugIquiey ‘PiouoNse¥] ro [9 $a aun ‘OUUE} Of 10g “So10[A opursindury Js ssouoqa orad ‘ejBojolo0s vy uode 2] anb soywont ~foou99 soj SOpOr ap osn Josey apend oUlN|N ayso snbyod ‘ouepepTuD [ep ‘Palo auquroy [ap ‘spurape ‘viouarapIp as sosayoud [5] “Sox0TeA soung[e ‘swaweresooau ‘ardurars aydaae anbune “eaneroea ppt, canine uoo TeIqeY aqap OBO[9ID0s OoxHUaID UN Bas OTUE) Uo ‘OytOML PAUIZIAINS OFg "LANDgO 398 9p UOIaeETIGO auaN ‘zosayord oyEND 2 “euosied vy] “Jom a}s9 wIBA.”,L9N}I0 Bf a[qisod $9 apuop ‘3190p sa ‘P1geH *anveumayigad equy & saqqes sey sod peg, :oysrp opis ey Sa] oBofeurap je X eyajoud ty “soSoZeuap so] v TU serajOId so] B soauayed ou wipaiga e7,, “6161 US JOqDA\ XPM UII “peplanialaa [Pir 931x9 9] Josaoxd py “rOsayord yap ofeqen jap aquouuere|D vI9 -UouOJTP O] ‘aNeIO;EA PEpYENNOU NS LoUA\UBUE aqap anb BX “ure -ardimuy ns us oanotgo outod oFoj9!00s Jap ofequn fo vzuE}IeN. ‘enbune o1ag ‘sono vod ugrovjas B] eHTAUE opnuos [9 anb | ue jeIo0s tora2e el ap ‘oppuss 09 [eID0s uoIdoe vy ap “eUEIANY ;eIOOS UOTOIe Ie sopudey < sopnap ‘smuna9y 3 I ep euoay eun sas anb suan vpfoporos vy ‘saqam Beg -“afqisod ‘oanafgo sear 0] 298 ap rereN anb auan oBojgI005 ja ‘ofequy ns ua ‘oaq “-2uan soy anb msou8t apand ou onb wé- saxojea sounde op syuatreyesosou sured 9159 an arteupe woig 1s ‘OBo{9I50s [2p ofeqen 2 tied eanziojea pepyteinat #] ap peprsaoat! B warueyd anb sonran ‘raqagy NEP OWlOd OBoTDIDOs Wes un e SoUNTZaFar SoU Ig “eMIO|goId aise sezifeue apand 2s ow9a ap vorsoe ojdiuiafe un sour, OAfOSAX 9p [OHIEP £ ofajduos spur so vonioypyp ey eiuasaad anb oseo 19 o1aq “Sayeio0s ou £ sajnioos sostzpusi9 soqueisar soy & wistuoUadd Ja ‘oR o{paISd fa “sopevorsty [2 ‘opes80a8 ja ‘oFojgdosque [2 ‘oFop1O0s Ja waUAN YT Ig "eollg pepr[iqestiodsar wHua) on oSo[9190s jo anb stap orainb ON “eanoe pepitiqesuodsai op ugnsano eun sa anbiog “sayniv0s swiouat so} ap vundut ap sayiody so} ap oun8uu sn.ousi sapod ou v ‘sofei ap sesus s9pod ou & v8zqo e] anb apuerz ue) vas Bad|t -asqos vonaepip ef anb peparsos z] B ayuoy Jo[ea ap eSxes ef ond: se oq “uoroueazoqU earduur anb prose wun 99 anb oUIS “TeI90s Of 2p uotovaipdxa ap opps oooduim ju ‘uorodussap wroue ap & pupryvar 2] ap wana] ap waIey Pun so ou anb aqeg “[PID0s upfouaATOH ap ofaqen un owioa epremaus aqap ‘re2q[var ® ware oMt09 ezuRUDSUD ¥] ap eongura|qord e] earueyd a8 eroepip fa opuend ‘spwwapE ‘org sepeoy[duioo atowounous usoey 88 sqyeioos soyafgo soy ap oun vpes ap uproeaydxa & uprovjaud -r91uy “ugtodasiad ef ‘opour isa aq “saquaroyIp os ZAR ns e “UI tm} “unt09 year oyafqo un ap eisandns asuq v] a1gos ‘seanoadsiod ‘sesa apsap uaXnqsuao as anb soiefqo soy ‘apuer3 Anu sa sanboyua ap pepnuea vj owloassy -[eIoos of ap oduwiw> omoad Jo & jeros o1slgo omsrur [a ‘Sopepiyepow semumstp too & eISIA ap. soqund soy -unsip apsep rexyur Uaruuied anb seansadsiad ap pepnues euuows aISIx9 KOH “sora{qo soy 9p & sodurwa so] ap uo!aeZHaAInd eANzajO 2 Ue ‘opel un xod :sopnuas sop wa Isa JOK@WE UoLOIPEN B oo UgtoBjas Ua ELEMIpIONNE vULIC} ap OpEFa[dsap uey ay ‘opesed offts J9p soperpaur epsep ‘sapeioos serouato sup oub 59 eoNoRpIP o| eiuaqjua onb jedroud ewoygoxd yo “Yemoe owewiour Jo uo o19g S¥ANYWOAWALNOD SYOLOVaIA SALNERRIOD 02 (CORRIENTES DIDACTICAS CONTEMPORANEAS profesor, pero que constituye ya una eleccién, El.didacta est in- terviniendo, aun en el caso en el que su discurso sostenga que “el profesor debe ser neutro”, porque esté diciendo cémo se debe in- tervenir. La respuesta que da la didctica es qué tipo de interven- cién tiene que tener el docente sobre el aprendizaje de los alumnos en un marco que hoy los didactas tienen absolutamente claro que abarca la sociedad en su conjunto. Desde la didéctica se apunta a desarrollar un cierto tipo de intervencién social. $i todo trabajador social se plantea cémo trabajar, cOmo intervenir en una comunidad, los didactas se ocu- pan de la ensefianza tratando de responder a estas otras preguntas complementarias y especfficas: {qué ensefiamos?, ,e6mo lo ense- fiamos?, zqué debemos ensefiar?, ,qué debe ser y hacer la escue- la? Sabemos que hoy la escuela ~y ya no restan muchos ingenuos en este terreno— es una instituciéa absolutamente fumdamental en la construccidn de una sociedad, sea vista de manera optimist 0, sin necesidad de caer en un estrecho reproduccionismo, con visién pesimista, Sabemos que los modos de transmisién propios de la escuela son importantes en Ia modalidad de construccién de la sociedad y en el tipo de sociedad que de ello resulte. Por esta raz6n, es impreseindible tratar de responder a esas preguntas, que estin claramente impregnadas de valores y comprometidas con la ética. El tema del cual nos ocupamos, por lo tanto, es complicado, Es subsidiario de los aportes de todas las disciplinas del campo de lo social que, entre el walidad. Decimos que la diferenciacién no es clara porque, si bien por la influencia del positivismo, se produjo en su momento uma fragmentaci6a de} objeto social al considerarlo desde distintas perspectivas parciales muy dificiles de unificar, es posible afirmar también que hoy, en un cierto sentido, son més faciles de amalga- mar que en otras épocas. Algunos epistemélogos consideran que ya no sélo las disciplinas sino también las teorfas dentro del dominio de conocimiento de , estén confusamente diferenciadas en la ac- i ylesados 2 una misma disciplina, no pueden ser comparables entre si; que una teorfa debe ser considerada separadamente de otra teoria y que los Conceptos no pueden ser transferidos de una teorfa a atra, Nos referimos a los principios de “inconmensurabilidad de las teo ¥ de “variacién radical del significado” de los conceptos cuando son transferidos de una teorfa a otra. Pero podemos abservar que en el campo de lo social, en este momento, se esté produciendo (ya que no es la didéctica Ia tinica que est recibiendo los aportes de distintas disciplinas) un efecto de trasvasamiento de unas discipli- nas sociales a otras, Este proceso suele realizarse por dos caminos. Uno es Ia adopeién de algunas teorias importantes, grandes teorias gue marcan rumbos en el pensamiento y que impregnan v orientan €] trabajo en distintas disciplinas. Nadie podria negar que hay gran: des cortientes del pensamiento como Ia fenor nélisis, el marxismo, entre otras, que han penetrado disciplinas. Encontramos enfoques psicoanaliticos no solamente en el campo de fa clinica y en la interpretacion de las acciones viduales en situaciones determinadas, sino también en la bisqued: io de todo tipo de fenémenos culturales. Asi, pues, halla- ‘mos enfoques psicoanaliticos no solamente en la psicologia sino también en otras disciplinas, como por ejemplo, una severa discu- si6n acerca del psicoandlisis en a filosofia, del mismo modo que existen también corrientes enraizadas en enfoques psicoanaliticos en Ia didéctica, Este fenémeno se cotresponde con situaciones paralelas, en las que se utilizan como marco otras grandes teorfas, Encontramos citado a Gramsei cuando se habla de ciencia politica, también en la sociologfa y en la teoria del curriculum, Hay fuertes pensadores, de mucho peso, en el e Hismo, la fenomenolo- sia, ¢] estructuralismo, el marxismo, 1a teorfa critica de la Escuela de Frankfurt. En el campo de las ciencias sociales, si bien hay objetos delimitados y también métados que son propios de ciertas Ciencias por lo que siempre nos lamentamos ante la fragmentacién Gel objeto social en muchas disciplinas, parece consolidarse, sin embargo, la tendencia al tasvasamiento de teorfas que ha de hacer-opuege as vurdiosip pun wa senuone ‘onbrog “Imzipue ap sajues ~ouaquy Anud Wos soiquiEs sol ap pepyepour £ peproojaa ws uote BA v] ap sauoze! sel & osarZoxd ap sount sooupForsI0q SOI ‘sanboJua somo ap sayiode sayqisod soy ueneasap & uepeuds sal sestoat sesa anb soBses soy weydope uezexqe sv] sowatnb 1s “SeonaepIp sezI09) svsiaarp B O}USUTESeG 9p sLA8s uapand aub sv ‘sej102) sajuazaytp ap vlouastxe0o yj “wOUaNgesuOD 9‘ ‘upiotsodmyxnk wi ‘uoroesSaqur wf ‘oze[duroas ja “uoradope B| Uo BJUOIOUSE E}TOID vArOSqO 9S SvUIA] SOT ap OIORLINV Jo Uo & sor -UNSIP Wos sopRID9s svIauaro soIAIapIp So] ap oTfouESep ep safaaru So] o1aq “[fN apias epand anb oouga: oyiode upSutu rust apend ON ‘Teqo]8 euydpsip vun ‘uprorayap rod ‘so eundrosip ensonyy ‘efouD|D B| 2p WOLRZTTEGoIs ap osaaoad wn ~9[q¥Ssanar OU euOIAaay wun Bae ap- OpeiAUAs vy aluOUETBAL souOIBaTUMELOD set ap MUOUODA Bl ap UNLEZITEqO|S ap ouaLAQUaS [| “seURDIaD seoodp seqjo na uensixe anb sopeozem serpy sop anb svsosod spur oyanut .uoldoxy 9p svaxy,, seun opesoue uey OAnejar offonesep s0.Keut ap sasjed Soy 2p sojvio0s swrouals spy 9p svoynus!o sepaprenttroa Se[ 9p sajeuoroeu seraynoy se X ‘sexo sey B sou sejqvausied oF ~JouA wey as SeuNEdLOSIp Se] “~eauaEpip B] K vonsINSUN vy “eISojooesd eu INUIT PepHOML OULD OpEITD sa ‘ojdurafa 10d “AysOStA, X sazojne sopuesé ap sayode soy aquauyemoe sexoust alqisodumt tsea Sq “opurazog wea as saNLMNy Soy A sopELRA soy X “qo! jeapre wun 9 opmusauod ey a8 anb KaLuata Bape ef ua VZIENy syUL BOD sas oyooy vy 25 UoIoezyaqo;S Yap orDazo Jo “oIquiD UO “BOY O€, sou so] ap ned v y2BeIq ap sorgy so] sopor seot|qnd A aonpen © opezuauios uvjquy as epuop ‘euedsg ue 0 ‘opniosay -oad Jap somansuy soy ua seuarar syu sofeqen sns ueqeuasue as “0S, [ep epLoap &] spsep ‘apuop euNUadY ef uo ajqisoduuy ayuanm ‘josqe opis wiaiqny fend o| adekq uvos v reUOTDU=TE WIS Sepe>9p seus nue. njona eySojoaisd s20ey opnd as soprup, sopmasey 5] PEpLinyo eruEL WOO eqEAIaSqO as OU Soe souns[E sovy anb seuT|dia “SIP Sef anus ojuatuwznioenue ap suans vn vy “eamgpeoe UpIA BI seuafe sas 9p sofa] uyasa anb ‘souonsano suse ap arsed y se Sopa sopnap ‘osmuauay seh aya sepepruntuos sv] ‘omeurestzaid ‘vos svuioa se] ap 2apTeA eI 9p eoiaoe waptoap sautainb anb opep “reprayo uogop 08 ou anb ways -ua{a vonyjod ap seuzajgord v owioy wa sauorsdo woo ueuoreyar as anb ‘sauonsana seisa v settafe uos ou svoyuaza Sapeprunuiod sey ‘sosinsar ap uprseustse ey ‘opus aod.‘ uorseSnseaut ap sodnid ap ‘sauoroninsuy stato ap jaded [6 opueindsip giso as ofeqen ap soduieo wamnastp as opuens ‘sayeusnoy serouafiantp seiso ap spztap anbiod ‘asopugrmastp wots onb owayo 9s apang “(6S61) aSneay Ux[aAg ap JOLIsJUe vopr vUN ap vyBosar A (CgGT) YI wouNg ap ewot (6861) JayDag Ato, anb uorsoudxo vy upZas , svarUpEaL snq “Ml, Seognuala sapeprunuzos Avy seurdrostp sey op PUN BpLo sen. anb ef ‘seza]uoI} sey UPISe apUOP OpsTMosIp BATS a8 ugIquIR: onb ep pepyiqeqosd eperaya kun ‘oBrequa ws “sa90uOoa! JoIssuaUE sy ‘pepnus opuarpied se\sa azared anb sezaquoy ap eurajgosd ap ody un ap watq sptu EIEN ag ‘soUTULID] sours sof Ua asieayuErd vxaIpNd Koy onb [rowyip soared & opased o/8%s fap sauy ap vidord uorsno sip eum 9 ¥ISq “OrBeyOD [9p oYonposd $9 OM TeIDOs DAL] 1g 59] -B1DOS swIONPUOD sey VIAHET anb vorsv09 By aazafa dnb vf odsand ood pepyeal auot anb ey ‘waypfangy tines *peparoos vy so anb 2A ‘popaizos ef opueaurar ‘wrdord puprua auan ye90s oyso4 [9 anb ‘guauestzaid ‘reysou ered oaqy ns aquose UNSUNG A “ep, ap uolaisod e s2 EOMRIN wSy “soEOPIAIpUBesAE sauOIOE]aI ep aseq EE algos aXnnsuos 98 mIMpUOD e] ap {IDs vIOWaISTSUOD e] apUOP Ha [eos wySojootsd vf ap fa ‘spmap soy ap RONPUOD vl ap UOLOEINNUT eT v spuodsazios onb ‘ono fa £ wsfopo1s0s wy ap odureo jo $0 ‘ordoid {eYo0s tosadsa ap oysay fa ‘oun anb nap v munde prprea us eprey, [eLiqeD uo UOTSNISIP Ng "[eIO0s EIFoJOIISd yf op o1dosd oyalqo Jo ‘owod asrapualua ap By [Pro ados A [PfDOs ogoay Jap UOIORULFaP vf ‘ap Lolaae UOISNOSIP BIMp eUN vIoLsap apuop ‘o2x59}0190s opors ap sv8a2 suy U2 wnaIpNG ap UoLoeTOWNEEe YI ap “ojdutele 10d ‘astq by 21Q0s ‘]eID0s OFo|poISA Jap a1usUMEIL|a BqLIoUDLARIp 25 O80] -gt00s wa uainb amb sey wa svsody sep sofay uapenb enb afqisod sap ‘opipsad vigey as anb or2fqo jap popuSojur vy souoduioaa1 ajqysod S¥SNYUOENELNOD SVOLLDVAIC SALTED +36 (CORRIENTES DIDACTICAS CONTEMPORANEAS nan ciertas teorfas, en otras se adoptan. {Por qué ocure una cosa w otra? GES que no hay ningtn rigor en las ciencias sociales? on la didéctica? Las diddcticas de las disciplinas también van cam- biando por distintas razones. Son asincrénicas entre si y con rela: cin a la didéctica general. Tienen diferente ritmo de desarrollo. y estén basadas sobre enfoques te6ricos, propuestas, corrientes, pro- gramas de investigacién cientifica diversos y a mi etiterio, por lo geheral a partir de planteos que slo en apariencia se desprenden y Son isomorfos de la naturaleza de los contenidos que se deben ensefiar Si el isomorfismo fuera real, cabria, entonces, preguntarse: siendo el enfoque adoptado en Ie didéctica tributario de la estructura pro- pia de los contenidos y habiendo un solo modo de ver esta estruc~ tura, ;¢émo conviene que los alumnos construyan estos conteni- dos? La respuesta serfa abligada, sin lugar a eleccin, Pero el nica explicacién acerea de su validez, Porque en realidad, cuando hablamos de las disciplinas, nos refe~ timos a dominios sisteméticos de conocimiento que implican mu- chos componentes, tales como, por ejemplo, estructuras conceptua~ les, he procedimentales, modos y métodos de investiga- ci6n, una sintaxis entre los conceptos, modos de inferencia propios, pero también valores, actitudes, hébitos y, siempre, comunidades cientilicas. Bfectivamente, el mundo de una disciptina es un mun- do de ideas y personas. Por esta raztin, a veces, las divisiones entre « disciplinas son suficientemente fuertes como para traspasar los limites institucionales, nacionales y temporales. Los matemiticos tienen mayor parentesco con los matematicos de otra escuela, de otra faculiad, de otra universidad, de otro pais y con Euclides, Descartes y Leibniz, que con un bidlogo o un socidlogo, aungue trabajen todos en la misma institucion, en misma escuela o universidad y en el mismo pais y en ef mismo tiempo histéricd, Las comunidades cientificas, las comunidades De herenelas, deudas ylegadios disciplinarias son cuerpos muy poderosos que aceptan o no aceptan una teoria cientifica. En este momento, el trasvasamiento de conceptos y teorias no ocurre sélo en el campo de las ciencias sociales; lo mismo esi ocurriendo en las ciencias naturales. El conocimiento actual es producto de desarrollos interdisciplinarios, multiprofesionales, y todos los limites disciplinarios ya son dificiles de sostener. Para u cientifico, un profesional o un docente que trabajen, aun en un tema sumamente especializado, es précticamente imposible, en ef presente, ignorir Ja relacién que deben tener con otras comunida- des cientificas y con otras profesiones. El progreso de la didéctica esti sometido a similares avatares. Si comparamos su situacién con la de otras ciencias sociales, obser- vamos que la didéctica, segtin algunos autores, nunca tuvo un campo claramente demarcado. La sociologia o la psicologia sf lo tavieron. El dmbito de la sociologfa, sin embargo, se est superponiendo al de otras ciencias, entre ellas, la antropologia, la historia, la econo- mia y Ia psicologia socisl. Los bordes de la psicologia también se estén yuxtaponiendo a otras ciencias sociales o biolégicas, Hay gran cantidad de puntos de contacto, por ejemplo, entre la psico- logia de hoy y 1 mpos de trabajo coneretos y en temas t6ricos. Un fenémeno propio de esta época es que précti- camente no se puede abordar un tema sin recurrir a otra discipline, aunque nada bay més dificil que el trabajo interdisciplinaria ya que existen muchos obstéculos -o sélo te6ricos- para que se pueda ar. En consecuencia, si el problema de construceién de un corpus interdisciplinario es dificil con relacién a los campos disciplinarios que estan o estaban més 0 menos definidos, la diddctica debe en- frentar, adems, un probleme adicional, la definicién de su propio campo. Jean Piaget (1970) afirma que cuando una disciplina entra en crisis comienza a ocuparse de su situacién epistemolégica: “La reflexién epistemoldgica siempre nace a propésito de las ‘crisis de © cual ciencia; [...] estas “crisis” resultan de una laguna de los ingii“OL6! “omar ‘say souang ‘vSojouarside v) ap soporpu & mappansoy zavag IB “6861 ‘9801g Aus ~rextug] wad pur uopwonpy s9y8xH] ow] Yamesey 10} 419120 sup ‘uRyBuT|aNg ‘saopiay pun saquy onuapvoy suo, “sotIDg T66E ‘IXX OffIg ‘oonaYE ‘pypIssaagun OF ap on py “OrPMeID, “omasoauog ue *,esparpa vf ap oonp opnuas 13, “KEM “Faqaay OST ‘UNWOD UpLvONPy Bf ap JONMOW I “SAMY souang ‘upioonasus vp sod ugrovampa 0 & voquay :[ouqeD “eisedutoD ‘pO6L ‘BoueRy ap sastensieArup) 09 amdosoniud V7 :ajaauy “Meuey-raWAry, €661 ‘S9PIa ‘sony souang ‘s2pi20s soioua9 so ap vonoppiq ‘(sdiu0s) erATIS “Taborapyy & zeneag ‘Braquasty U3 ‘,saqeaag seiauar}, ap ROnoEpIC] e[ ep BMojoMasidg,, cap “mM “A eYY ‘Worurea, ger ‘soprea ‘vuojeareg ‘11 101905 vpSo}0218q :°S “IDIAOOSOWY ua “uno? fopnuas ye eiouaI5 vy aq, ‘SalI “suoIsmagy K aB19g sassaug ‘sup ‘94% SVIONTUTTTE ‘ojuartUTS0UOD Jap & TeI90S uOIIDe eT ap odweo fo ua B}IO=) ap wropep £ ajuas9yo wa “ajuaumeooudyoas ‘asitmynsuod so worSoBupad oD 98 uf ap asrednoo je ‘oradura ‘ounsap ng “seut|diostp sexo seypnUr ap wopnap ¢ erapasay ‘ezueuastia ef ap vHI09) BUN so LHOYpIP ET ‘osoanSux X opas oywaRIFIZ0uOD ap o1UMOP oWTOD ‘oy, -s1ap ou] woo ‘vanoppip ef v woynuap! wired onb v1SoSupad ugqoan 9} vind & aagos osmosip un ap viopexaowut 9 jeuISLIo waLGT ugrsonpord ap & uoiseSpsaauy 2 uorxatjar ap pepioedes vnsanit ap iapuadap ep viqey ‘seyoa) sns ap erensn tua eu £ seuydrs -Sip Seno ap sfSU9 sv] ep exapardy LUN o[OS 49S ap LY BONOYPID EI 1§ ‘soue sourrxoud soy ap oayfwars & ooyosoyys owatUIPsued 2 ued seotsieur owes xexedo ap upiqey awtaweinZas ‘oonappip olvenuies 6 pose & sop -uad Je seuenxe ejaepor uosamed & sexjdure spur oqonur uos seo sooysoodsa sorafqo sonsonu v sturrxord Anu piso seungje onbuny ‘soayyntuata sodurea soy sopo} ap safesaua sptu seannoodsxad sey woo & svay seq separ v0o Koy a4 anb tatian anb souoysans wos anb ap pm Ua ‘sulfa v oN! aquawaydutts sensueN TU Opel ap seprefap apand ou wousepip vy] “saleumen serouars Sey v SoqeID0S SeIOUaID Sop ap & sapeioos sejouaia sel & S2[eIweU SeIOUDIO SPL ap ‘SeIDUDID sel stpoy anua wejnoi ‘eperBapiatad uprotsod em vation omsaruII0N09 Jap & saroyea soy 9p ‘eueumny worse ef ap ‘opanut jap ssuoroda> Woo Sef ‘Seo sopuead ap ovuorumsuasen ap sassa01d soy wy ‘opedpnred wy 28 ou upIDBaI9 PANO Wa “RUENXA euMyINO BUN od OpEZtuOTOD JeNID3] -a]U! GN op zw8ny [a epsap vfopurfourur ‘easnu wom Eun z aluaT ugiovulosey 2 ap uoroe}Uay B] Ue Jazo WIS o}TadeY oped ya & “Bonde 2 UgTavABaqUT ap SALIAITED SO] ap UOTDZ9Ae EI ‘Sa[eID0S seJI0g) Set ap opfoutesep [2 ua esuoLsUIse vy s9 JOAfOSAZ ap [OTP spur euTa{qord [2 O14 “oAane sa ou ofeqan ajse eonoPpIP I UG “se[uIOos ou s9[P1908 sefouat> sey uo ‘ayuasoud Jo ua ‘opunzefesauod visa as onb eno e euydiasip pun ap sordaouos ap & sepia ap upfsejnaMt9 ap oVUATETAOUT tn ap Ugzer'ua ‘seuTfdrastp seyonur ap sauode sopetea oye exed opurzyn ‘wudiosip ey ap oldord odureo j2 stmmsuoa wea snb Sof Uos “eXnujsuos anb orxai fa ‘osmasip op odn [2 ‘1p ap asiednoo ap piqey owoa sopour sof ‘oyafgo wn auan A ezueuasua 2] ap ednoo as anbumme 4 “sptiap sv] sepo} o seundye oralunar as ‘@puop Ue onmuop un ses sod epezua}oeIo wUYdiosip Bun ap wie 98 anbrod seaupay sista seyanut efoyer & oqioar vondepIp eT “ages [9p Sopeplepou swno sel ap TI Ua O oayH -Uatd OWATLUDONOD ap PULIOF PI Ua kas Rx aIqQUTOY Tp peplanoe ef ap oxonpoud ja offa ua oprnjout *ouale spias soared oueuiny of ap eped,, ‘seundiostp seqo se] woo souororyar sajqipurosaidunr @ soqdn -jptu sos sod anb ef ‘eonoepip eurdiostp vj ap oduivo aysa so anb TEUIUEINSP ap ayen f auaurarSojowaysida aoreue as eonoepp v] ‘soduian soiso uo anb ‘sand ‘eoridxa ois “,Sopoiyi sosja ap UpI9 -Uaatt of 8 soioes8 sopmiadas sas op uwpiqey onb ‘saxousrue soposgut SVENYYOUNEINOD SYDLLIVAIG SELNEREIOD 8