CSAR MORO// CMO HACER UN POEMA: De entrada abro al azar un libro cualquiera, del tipo de la

Introduccin al Psicoanlisis; un diario; o miro un fragmento de papel impreso, un programa de cine, el texto
ms idiota o anodino. Se trata de forzar la inspiracin. He hecho toda una serie de poemas a partir de un
catlogo de plantas: variedades de ensaladas, flores delicadas, canteros, etc.

Luego hay que exprimirse literalmente el cerebro, balbucear, ponerse colorado, romper varias plumas,
derramar la tinta. Trato de soltarme y de imaginarme la cabeza humeante del probable lector, amorfo,
hipottico, de esta especie de sapo-escupidera, calculando su aturdimiento. Se hace poesa para fastidiar a la
gente. Es un buen principio. Una vez en plena desesperacin, absolutamente asqueados de todo, reunimos a
duras penas algunas palabras; las escribimos en todos los sentidos; miramos por la ventana sin ocuparnos del
paisaje, el cual no es inspirador; las ocupaciones ms pueriles son admisibles: se puede ordenar estampillas,
arreglarse las uas, redactar una nota para la lavandera, etc. Vale escribir una carta con insultos. Hay que
fumar al menos un atado de cigarrillos por poema. Cuando sientan que la cabeza les va a estallar, es el buen
momento. El trabajo siempre se ve recompensado: algunas lneas afluyen. As podrn hacer de dos a tres
poemas por noche.

Si por descuido se desliza una lnea susceptible de agradar, se impone la tachadura violenta e inmediata. Se
debe hacer un poema de un tirn, como cuando nos liberamos de una camisa sucia o de un par de guantes
demasiado ajustados.

Cultivando asiduamente este mtodo, podrn estar seguros de alejarse de toda posibilidad honrada de vivir y
caern en un estado melanclico de primero o segundo orden, segn sus capacidades. Se hace el vaco en
uno mismo y alrededor de uno mismo. La gente tiene el olfato muy desarrollado y les perdonarn fcilmente
una estafa est dentro del orden pero no una vida blanca entregada al placer fnebre de ensamblar
palabras que no expresen ninguna necesidad inmediata o digna de ser satisfecha. De tal modo que arruinarn
su vida teniendo el nico consuelo de no haber servido al entretenimiento de los idiotas y de los agrimensores
de gusanos.
(Mxico, marzo 1940)
Traduccin (del francs) de Reynaldo Jimnez