Informe N3

Cuatro son las propiedades esenciales de la Iglesia.

La Iglesia es Una, entendida como unicidad y como unidad interna: slo hay una nica iglesia, luego esa iglesia es
unida en una fe y un espritu.

Puede significar que slo hay una nica iglesia y que no puede haber varias; tambin puede significar unidad
interna, es decir, en la identidad de la iglesia consigo misma. Slo hay una nica iglesia, porque es nico el Dios
que convoca en torno a s, es una en la unidad con Dios Trino. Se sigue luego de la unicidad, la unidad interna de
la Iglesia, no entendida como mera unidad exterior, sino como unida en una fe y un espritu, configurando un
cuerpo con muchos miembros

La Iglesia es Santa como apartada del resto de los pueblos para ser un pueblo nico y unido. El pueblo santo es
apartado del resto de los pueblos y obligado a ser un pueblo distinto, y por fin poder adorar al Dios uno y nico.
La Santidad es un concepto relacional, entendida desde la relacin del Dios santo con su pueblo y viceversa.
Santos porque estn santificados por el ES que habita en ellos.

La Iglesia es Catlica, como aquella que est repartida por toda la tierra y convocada para ser pueblo Santo. Para
Agustn, la unidad es el principio bsico de toda comunidad, y la comunidad se expresa de manera catlica, es
decir, universal. El fundamento de la plenitud catlica es Jess que quiere reunir a todos los que estn en l.

Y la Iglesia es Apostlica, porque predica aquella fe transmitida por los Apstoles, establecindose unidad con la
Iglesia de todos los tiempos. La apostolicidad de la iglesia significa que no puede haber un evangelio ni distinto ni
nuevo. Estamos vinculados a la fe transmitida de una vez por todas de los Apstoles. Nuestra base es Jess
escuchado por boca de los apstoles

Si la unidad y catolicidad hacen referencia a la comunidad sincrnica que existe en el presente, y la santidad a la
comunidad trascendente con Dios en Jesucristo, vemos que la apostolicidad Es la identidad y continuidad de la
iglesia del presente con la de todos los tiempos, vale decir, la comunin con la Iglesia de todos los tiempos.

A mi juicio, expresar de manera creble estas propiedades hoy requiere de un esfuerzo por (1) promover el dilogo
ecumnico entre comunidades cristianas del presente y (2) procurar la reactualizacin en fidelidad de la fe pasada y
transmitida, esto es, de la Tradicin.

Daniel Redel
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