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El Espacio Euclidiano Rn
i) hx|yi = hy|xi
1
Teorema 4 (Desigualdad de Cauchy-Schwarz). Sean x, y ∈ Rn . Entonces vale: | hx|yi | ≤ kxkkyk.
Se da la igualdad si y sólo si {x, y} es linealmente dependiente (l.d.).
Demostración. Si x ó y son cero, la desigualdad es inmediata. Supongamos x, y 6= 0. Definimos
z = kxky − kykx. Como
0 ≤ hz|zi
= kxk2 hy|yi − kxkkyk hy|xi − kxkkyk hx|yi + kyk2 hx|xi
= 2kxkkyk(kxkkyk − hx|yi)
esto implica 0 ≤ kxkkyk − hx|yi; luego hx|yi ≤ kxkkyk. Además − hx|yi = h−x|yi ≤ k−xk · kyk =
kxk · kyk, i.e. −kxkkyk ≤ hx|yi. Por tanto se tiene demostrada la desigualdad.
Falta probar que, si {x, y} es linealmente dependiente, entonces | hx|yi | = kxkkyk; y que el
recı́proco también es cierto. Supongamos primero que {x, y} es l.d. Entonces existe λ ∈ R tal que
x = λy. Luego kxk · kyk = kλyk · kyk = |λ| · | hy|yi | = | hλy|yi | = | hx|yi | i.e. kxk · kyk = | hx|yi |.
Para probar el recı́proco, razonemos por contradicción suponiendo que {x, y} es linealmente
independiente (l.i.). Entonces vale: (∀λ ∈ R, x − λy 6= 0). Luego 0 < kx − λyk2 = λ2 kyk2 −
2λ hx|yi + kxk2 = p(λ). Como p(λ) es positivo para cualquier valor de λ, p(λ) no tiene raices reales.
Luego el el discriminante de p(λ) = 0 debe ser negativo: 4 hx|yi2 − 4kxk2 · kyk2 < 0; por tanto
hx|yi2 < kxk2 · kyk2 , con lo que la igualdad no se da.
|xi | ≤ kxk. Por otra parte, si α = sup{|x1 |, · · · , |xn |}, kxk2 = nj=1 x2j = nj=1 |x2j | ≤ nj=1 α2 =
P P P
√
nα2 implica kxk2 ≤ n · α2 ; por tanto kxk ≤ n · α, completando ası́ la demostración.
2
Capı́tulo 2
Topologı́a de Rn
2.1. Definiciones.
Sean x ∈ Rn , r ∈ R y A, V, W ⊂ Rn .
iii) Se dice que x es punto interior de A, si existe una bola abierta B(x, r) contenida en A. Al
conjunto de puntos interiores de A se le llama interior de A, denotado por Å.
iv) Se dice que x es punto adherente de A, si para toda r > 0, B(x, r) ∩ A 6= ∅. Al conjunto de
puntos adherentes de A se le llama adherencia (clausura o cerradura) de A, denotada como
A.
v) Se dice que x es punto de acumulación (o punto lı́mite) de A, si para toda r > 0, B(x, r) ∩
(A − {x}) 6= ∅. A la colección de puntos de acumulación de A se le llama conjunto derivado
de A, denotado como A0 .
/ A0 .
vi) Se dice que x ∈ A es punto aislado de A, si x ∈
i) Å ⊂ A
ii) A ⊂ A
3
Demostración. i) Sea x ∈ Å arbitrario. Luego existe r > 0 tal que B(x, r) ⊂ A. En particular
vale x ∈ A; por tanto se tiene la contención.
i) Å ⊂ B̊
ii) A ⊂ B
Demostración. i) Sea x ∈ Å arbitrario. Luego existe r > 0 tal que B(x, r) ⊂ A. Como A ⊂ B,
B(x, r) ⊂ B i.e x ∈ B̊; por tanto Å ⊂ B̊.
ii) Sea x ∈ A arbitrario. Sea r > 0 cualquiera. Puesto que x ∈ A implica B(x, r) ∩ A 6= ∅, se
tiene que B(x, r) ∩ A ⊂ B(x, r) ∩ B, de donde B(x, r) ∩ B 6= ∅. Como r fue arbitraria, x ∈ B,
de donde se tiene lo pedido.
ii) Debe probarse que el complemento de B(x0 , r) es abierto. Sea x ∈ / B(x0 , r) cualquiera. En-
tonces kx − x0 k ≥ r. Tómese R = kx − x0 k − r > 0. Sea y ∈ B(x, R) arbitrario; luego
ky − xk < R. Como kx − x0 k ≤ ky − x0 k + ky − xk y ky − x0 k + ky − xk < ky − x0 k + R, vale
kx − x0 k < ky − x0 k + R; pero además ky − x0 k + R = ky − x0 k + kx − x0 k − r, luego obten-
emos kx − x0 k < ky − x0 k + kx − x0 k − r, de donde resulta r < ky − x0 k i.e. y ∈ / B(x0 , r). Por
haberse tomado y arbitrario, B(y, R) está contenida en el complemento de B(x0 , r) y, por ser
x arbitrario, este último es abierto, por tanto B(x0 , r) es cerrado.
4
Demostración. Sea {Aα }α∈Λ una familia arbitraria de subconjuntos abiertos de Rn , y defı́nase
A = ∪ {Aα | α ∈ Λ}. Para probar que A es abierto, tómese un x ∈ A cualquiera. Entonces existe
γ ∈ Λ tal que x ∈ Aγ . Como Aγ es abierto, existe una bola abierta B(x, r) ⊂ Aγ . De esto se sigue
que B(x, r) ⊂ ∪ {Aα | α ∈ Λ} ⊂ A. Como x fue arbitrario, se tiene que A es abierto.
Demostración. Sea {Fα }α∈Λ una familia arbitraria de cerrados de Rn , y defı́nase F = ∩ {Fα | α ∈ Λ}.
Como Fαc es abierto, entonces ∪ {Fαc | α ∈ Λ} es abierto, por el teorema anterior. Ya que
∪Fαc = (∩Fα )c = F c ,
Lema 1.
Demostración.
i) Sea x ∈ V arbitrario. Por ser V abierto, existe B(x, r) ⊂ V , lo cual implica que B(x, r) ⊂ A.
Como x fue arbitrario esto significa que x ∈ Å, lo cual prueba la afirmación.
Sea x ∈ / A arbitrario. Entonces existe r > 0 tal que B(x, r) ∩ A = ∅, que implica B(x, r) ⊂ Ac
ó A ⊂ (B(x, r))c . Por el inciso ii) del lema anterior, A ⊂ (B(x, r))c ; que a su vez implica B(x, r) ⊂
(A)c . Por haberse tomado x arbitrario, se tiene que (A)c es abierto y, en consecuencia, A es cerrado.
5
Teorema 13.
Demostración.
i) Si A es abierto, por el inciso i) del lema anterior se desprende que A ⊂ Å, que implica A = Å.
Recı́procamente, si se da la igualdad A = Å, claramente A es abierto.
ii) Si F es cerrado, el inciso ii) del lema anterior garantiza que F ⊂ F , probando la igualdad
F = F . La implicación recı́proca es inmediata.
i) Å ∪ B̊ ⊂ (A ∪ B)◦ .
ii) Å ∩ B̊ = (A ∩ B)◦ .
iii) A ∪ B = A ∪ B.
iv) A ∩ B ⊂ A ∩ B.
Demostración.
c
Teorema 15. Para cualquier conjunto A ⊂ Rn se verifican: Å = Ac y (A)c = Åc .
6
c c
Demostración. Como se tiene Ac ⊂ Ac , entonces Ac ⊂ A. Ahora, por ser Ac cerrado, Ac es
c
un abierto. Aplicando el primer inciso del último lema, se deduce que Ac ⊂ Å, o equivalente-
c
mente Å ⊂ Ac . Para la otra contención, basta observar lo siguiente: Å ⊂ A puede escribirse
c c
como Ac ⊂ Å . Debido a que Å es un cerrado, el segundo inciso del último lema establece que
c
Ac ⊂ Å .
a) ∂A es un conjunto cerrado.
b) ∂A = ∂(Ac ).
c) ∂A = A − Å.
d) A = Å ∪ ∂A.
e) Å ∩ ∂A = ∅.
˚ = ∅.
f ) Si A es abierto o cerrado, entonces (∂A)
h) ∂(∂A) = ∂A.
Demostración. Nótese que los incisos a) y b) son inmediatos de la definición. Para demostrar el
tercer inciso, se observa que ∂A = A ∩ Ac = A ∩ (Å)c = A − Å.
Å ∩ ∂A = Å ∩ (A ∩ Ac )
= Å ∩ (A ∩ (Å)c )
= ∅
f) Si A es cerrado,
(∂A)◦ = (A ∩ Ac )◦
= (A ∩ Ac )◦
= Å ∩ (Ac )◦
= Å ∩ ((Å)c )◦
⊂ Å ∩ (Å)c
= ∅
7
g) Puesto que ∂A es cerrado, su frontera tiene interior vacı́o.
h) FALTA DEMOSTRAR.
2.2. Sucesiones.
Una sucesión en Rn es una función ϕ : N → Rn , ν 7→ {xν1 , . . . , xνn }, simbolizada como {xν }ν∈N , la
n
un α ∈ R tal que, para todo > 0, existe un N ∈ N tal que se
cual se dice convergente si existe
ν
cumple: ∀n ≥ N, kx − αk < . De tal α, se dice que es el punto al cual converge la sucesión. Si
no existe dicho punto, la sucesión es divergente.
Nota. Que una sucesión {xν }n∈N no sea convergente significa que, para cualquier α ∈ Rn , existe
un 0 > 0 tal que, dado ν ∈ N arbitrario, vale: ∃ν0 ∈ N − {1, · · · , ν}, kxν − αk ≥ .
Ejemplos.
1
1. Sea la sucesión {xν }ν∈N ⊂ R2 dada por xν = (1 + ν1 , ν! ). Esta sucesión converge al punto
(1, 0).
Para probarlo, sea > 0 √arbitrario.√Como kxν − (1, 0)k = k(xν1 − 1, xν2 )k = k(ν −1 , 1/ν!)k ≤
√
2 · sup (1/ν, 1 − ν!) = ν2 , y lı́m ν2 = 0, entonces existe ν0 ∈ N tal que para cualquier
√
2
ν ≥ ν0 ,se verifica | ν | < . Por ser arbitrario, se sigue lo afirmado.
Supóngase lo contrario. Entonces existe un α = (a, b) ∈ R2 tal que lı́m xν = α. Dado > 0,
existe N ∈ N tal que ∀n ≥ N, kxν − αk < . Puesto que |(−1)ν − a| ≤ kxν − αk, para toda
ν ≥ N se satisface |(−1)ν − a| < . Esto significa que la sucesión real {(−1)ν } es convergente,
un absurdo. Por tanto, {xν } es divergente.
Teorema 18. Sea {xν } ⊂ Rn una sucesión, con xν = (xν1 , . . . , xνn ) y x0 = (x01 , . . . , x0n ) ∈ Rn .
Entonces lı́m xν = x0 si, y sólo si para cada i ∈ {1, · · · , n} vale: lı́m xνi = x0i .
para cada i ∈ {1, · · · , n}, ∀ν ≥ ν0 , kxνi − x0i k < , y por haberse tomado > 0 arbitrario, se tiene
la implicación.
Suficiencia. Supongamos que para cada i ∈ {1, · · · , n} se cumple lı́m xνi = x0i . Dado >
0 cualquiera, existen M1 , . . . , Mn ∈ N tales que ∀ν ≥ Mi , kxνi − x0i k < . Definiendo M =
mı́n{M1 , . . . , Mn } se sigue que ν ≥ M implica ∀ν ≥ M, kxν − x0 k < . Por lo tanto {xν } con-
verge a x0 .
8
Una sucesión {xν } ⊂ Rn se llama sucesión de Cauchy, si para todo > 0 existe N ∈ N tal que
∀µ, ν ≥ N, kxµ − xν k < .
Teorema 19.
i) {xν } es sucesión de Cauchy si y sólo si las sucesiones {xνi }, con 1 ≥ i ≤ n, son de Cauchy.
Recı́procamente, si {xν1 }, · · · , {xνn } son de Cauchy, dada > 0 arbitraria existen naturales
M1 , · · · , Mn tales que se verifica para cada 1 ≤ i ≥ n:
∀µ, ν ≥ Mi , |xµi − xνi | ≤ √ .
n
Elı́jase M = máx M1 , · · · , Mn . Entonces la desigualdad anterior se satisface para todos los
valores de i; en particular para el supremo de los |xµi − xνi |. De esto se sigue que si µ, ν ≥ M ,
se tiene
√
kxµ − xν k ≤ n · sup {|xµi − xνi | | i ∈ {1, · · · , n}}
≤ .
ii) Supóngase que {xν } converge a un α ∈ R. Sea > 0 arbitrario; entonces existe N0 ∈ N tal
que para toda ν ≥ N0 se cumple |xν − α| < ÷ 2. Si µ ≤ ν ≤ N0 , para cualquier i ∈ {1, · · · , n}
se tiene
Como fue arbitrario, se ha demostrado que las sucesiones componentes de {xν } son de
Cauchy. El reciproco es fácil
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Una subsucesión de {xν } ⊂ R es una sucesión de puntos de {xν } elegidos por medio de una
función estrictamente creciente α : N → N, denotada por {xα(ν) }.
Una sucesión real {xν } está acotada, si existe un real M > 0 tal que (∀ν ∈ N, |xν | ≤ M ).
Teorema 20 (Bolzano–Weierstrass). Si una sucesión {xν } ⊂ Rn está acotada, entonces tiene una
subsucesión convergente.
Demostración. Por ser {xν } acotada, existe M > 0 tal que (∀ν ∈ N, kxν k ≤ M ). Para cada
i ∈ {1, · · · , n} se verifica (∀ν ∈ N, |xνi | ≤ kxν k), lo cual indica que las sucesiones componentes
de {xν }, y cualesquiera de sus subsucesiones, están acotadas en R. La sucesión {xν1 } tiene una
α (ν)
subsucesión convergente {x1 1 }, por el Teorema de Bolzano-Weierstrass en R, donde α1 : N → N
es estrictamente creciente. Entonces {xα1 (ν) } es subsucesión de {xν }, tal que su primera sucesin
componente contiene (en R) una subsucesión convergente. Aplicando el proceso anterior a {xα1 (ν) }
Proposición 4. Sean A ⊂ R y x0 ∈ R.
10
Capı́tulo 3
Diferenciación
f (a1 , · · · , xi , · · · , an ) − f (a1 , · · · , ai , · · · , an )
λa = lı́m ,
xi →ai xi − ai
a la aplicación a 7→ λa se le llama primera derivada parcial de f , respecto a la variable xi , en el
∂f
punto a, y se le denota como ∂x i
(a).
Ejemplos.
x1 x2
1. Sea f : R2 → R dada por f (x1 , x2 ) = 0 si (x1 , x2 ) = 0; y f (x1 , x2 ) = x21 +x22
, si (x1 , x2 ) 6= 0.
Calcular las primeras derivadas parciales de f en a = (0, 0).
x1 cos x2
2. Si a ∈ Ω = (x1 , x2 , x3 ) ∈ R3 x3 6= 0 y g : Ω → R dada por g(x1 , x2 , x3 ) =
x3 . Entonces
11
R x1 x2
3. Si g : R → R y f : R2 → R estan dadas por f (x1 , x2 ) = a g(t)dt:
∂f
(x1 , x2 ) = x2 · g(x1 , x2 )
∂x1
∂f
(x1 , x2 ) = x1 · g(x1 , x2 )
∂x2
Ejemplos.
f (x0 + h) − f (x0 )
lı́m = f 0 (x0 ),
h→0 h
f (x0 + h) − f (x0 )
lı́m − f 0 (x0 ) = 0,
h→0 h
f (x0 + h) − f (x0 ) − h · f 0 (x0 )
lı́m = 0.
h→0 h
Luego Df (x0 ) = T , donde T (h) = f 0 (x0 )h es lineal. Se observa que T = f 0 (x0 )I(x), donde
I(x) es la función identidad en R; luego la definición coincide con la usada en el análisis real
de una variable.
12
Demostración. Sean L1 , L2 : Rn → Rm transformaciones lineales tales que
Tómese e ∈ Rn tal que kek = 1. Sea h = λe, con λ ∈ R positiva y arbitraria. Se tiene entonces
0 ≤ kL1 (e) − L2 (e)k
= kλ−1 (L1 (λe) − L2 (λe))k
kL1 (h) − L2 (h)k
= .
khk
kf (x0 + h) − f (x0 ) − L1 (h)k
≤ +
khk
kf (x0 + h) − f (x0 ) − L2 (h)k
.
khk
Entonces
kL1 (h) − L2 (h)k
lı́m kL1 (e) − L2 (e)k ≤ lı́m = 0;
h→0 h→0 khk
que se cumple en particular para todo elemento de {e1 , . . . , en }, la base canónica de Rn . Luego
para todo i ∈ {1, · · · , n} se tiene L1 (ei ) = L2 (ei ). Por tanto L1 = L2 .
Ejemplo. Sea B : Rn × Rm → Rp una función bilineal, es decir que satisface B(αx + βy, z) =
αB(x, z) + βB(y, z) y B(x, αw + βz) = αB(x, w) + βB(x, z) para cualesquier α, β ∈ R y x, y ∈
Rn , w, z ∈ Rm . Demostrar que B es diferenciable en Rn × Rm , y que DB(x0 , y0 )(h, k) = B(x0 , k) +
B(h, y0 ).
13
Entonces
kB(x0 + h, y0 + k) − B(x0 , y0 ) − T (h, k)k kB(h, y0 ) + B(x0 , k) − T (h, k)k
≤
k(h, k)k k(h, k)k
kB(h, k)k
+
k(h, k)k
Elijamos, en particular, que T esté dada por T (h, k) = B(h, y0 ) + B(x0 , k). Es claro que T es
bilineal. Luego
kB(x0 + h, y0 + k) − B(x0 , y0 ) − T (h, k)k kB(h, k)k
≤
k(h, k)k k(h, k)k
Si probamos que
kB(h, k)k
lı́m = 0,
(h,k)→(0,0) k(h, k)k
Xn m
X
B(h, k) = B( hi ei , kj e0j )
i=1 j=1
n X
X m
= hi kj B(ei , e0j )
i=1 j=1
Xn X m
= hi kj aij ,
i=1 j=1
con aij = B(ei , e0j ) ∈ Rp . Si M = máx {kaij k | i ∈ {1, · · · , n}, j ∈ {1, · · · , m}},
n X
X m
kB(h, k)k ≤ |hi ||kj |kaij k
i=1 j=1
Xn X m
≤ M· |hi ||kj |
i=1 j=1
Xn Xm
≤ M ·( hi )( ki )
i=1 j=1
≤ M · (nkhk) · (mkkk)
14
Luego tenemos
kB(h,k)k mn·M
p
y, por tanto, k(h,k)k ≤ 2 · khk2 + kkk2 .
Como
kB(h, k)k mn · M p
lı́m ≤ · lı́m khk2 + kkk2 = 0,
(h,k)→(0,0) k(h, k)k 2 (h,k)→(0,0)
esto quiere decir que B es diferenciable en (x0 , y0 ), y que DB(x0 , y0 )(h, k) = B(x0 , k) + B(h, y0 ).
kf (x) − f (x0 ) − T (x − x0 )k
lı́m = 0.
x→x0 kx − x0 k
15
Sea {e1 , . . . , en } la base canónica de Rn . Como T es lineal, T (x − x0 ) = ni=1 (xi − x0i )T (ei );
P
luego se sigue que
X n n
X
0
f (x) = f (x0 ) + (xi − xi )T (ei ) + E(x) · kϕ(x)k · |xi − x0i | .
i=1 i=1
Definamos para cada i ∈ {1, · · · , n} otra función, αi : Ω → R, tal que αi (x0 ) = 0 y αi (t) =
|ti − x0i |/(ti − x0i ), si t 6= x0 .
Sea i ∈ {1, · · · , n}. Entonces, por ser x 6= x0 , |xi − x0i | = αi (x) · (xi − x0i ). De esto se sigue
n
X
f (x) = f (x0 ) + (xi − x0i )T (ei ) + E(x) · kϕ(x)k · |xi − x0i |
i=1
n
X
= f (x0 ) + xi − x0i T (ei ) + E(x) · kϕ(x)k · αi (x)
i=1
Luego
n
kf (x0 + h) − f (x0 ) − T (h)k X
lı́m ≤ lı́m kTi (x0 + h) − Ti (x0 )k = 0,
h→0 khk h→0
i=1
lo cual prueba que f es diferenciable en x0 y que T = Df (x0 ) es continua.
16
Pn
xi − x0i Ti (x0 ) o Df (x0 )(x0 + h) =
PnNota. Con la notación predecente, Df (x0 )(x) = i=1
i=1 hi Ti (x0 ).
= Tj (x0 );
∂f
por lo tanto Tj = ∂xj , i.e. para todo x ∈ Ω se satisface:
n
X ∂f
f (x) = f (x0 ) + (xi − x0i ) (x0 ).
∂xi
i=1
Nota. Una condición necesaria para que f sea diferenciable en x0 , es que existan todas sus primeras
derivadas parciales. Pero esta condición no es suficiente. En efecto, para f : asdasd → asdasda,
definida como f (x, y) = asdasd, existen las parciales en cualquier a ∈, pero allı́ no es diferenciable.
Para que exista Df (x0 ), es preciso además que todas las parciales de f sean continuas en el dominio
de f .
17
De aquı́ que la j-ésima componente de f y la k-ésima componente de g, k ∈ {1, · · · , p}, estan
dadas por
n
X
xi − x0i Tij (x0 ),
fj (x) = fj (x0 ) +
i=1
m
X
yr − yr0 Hrk (y0 ).
gk (y) = gk (y0 ) +
r=1
es decir
n
X
xi − x0i Si (x0 ),
Dg(y0 )(y) =
i=1
Pm Pm
donde Si (x0 ) = j=1 Tij (x0 )(Hj ◦ f )(x0 ) = j=1 Tij · Hj ◦ f (x0 ).
Luego
Pm
Para cada i = 1, · · · , n la función Si = j=1 Tij · Hj ◦ f
es continua en x0 . Como x es
arbitrario, esto demuestra que g ◦ f es derivable en x0 y D(g ◦ f )(x0 )(x) = ni=1 xi − x0i Si (x0 ).
P
18
Dado x ∈ A, se sigue que
n
X
xi − x0i Si (x0 )
D g ◦ f (x0 )(x) =
i=1
n h m
X X i
= xi − x0i Tij (x0 )(Hj ◦ f )(x0 )
i=1 j=1
n X
X m
xi − x0i Tij (x0 )Hj (y0 )
=
i=1 j=1
Xm Xn
xi − x0i Tij (x0 ) Hj (y0 )
=
j=1 i=1
m
X
= fj (x) − fj (x0 ) Hj (y0 )
j=1
Xm
= Df (x0 ) j (x) · Hj (y0 )
j=1
Dg(y0 ) · Df (x0 ) (x0 ) = Dg(y0 ) Df (x0 )(x)
Xn
= Dg(y0 ) (xi − x0i )Ti (x0 )
i=1
n
X
xi − x0i · Dg(y0 ) Ti (x0 )
=
i=1
n m
X X
= xi − x0i · (yj − yj0 )Hj Tij (x0 )
i=1 j=1
Xm Xn
xi − x0i (yj − yj0 )Hj Tij (x0 )
=
j=1 i=1
m
X
Si (x0 ) = Tij (x0 )(Hj ◦ f )(x0 )
j=1
n
X
Df (x0 )(x) = (xi − x0i )Ti (x0 )
i=1
m
X
Dg(y0 )(y) = (yj − yj0 )Hj (y0 )
j=1
19
Teorema 24. Sean A ⊂ Rn , x0 ∈ Å y f : A → Rm . Una condición necesaria y suficiente para que
f sea diferenciable en x0 , es que las funciones componentes de f = (f1 , · · · , fn ) sean diferenciables
en x0 . En este caso Df (x0 ) = Df1 (x0 ), . . . , Dfm (x0 ) .
Demostración.
La condición es necesaria. Si f es diferenciable en x0 , entonces existen
Pn T1 , · · · , Tn : A → Rm
continuas en x0 , tales que para todo x ∈ A se cumple f (x) = f (x0 ) + i=1 (xi − x0i )Ti (x0 ). Como
f (x) = f1 (x), . . . , fm (x)
n
X
= f1 (x0 ), . . . , fm (x0 ) + (xi − x0i )Ti (x0 )
i=1
Xn
xi − x0i Ti1 (x0 ), . . . , Tim (x0 ) ,
= f1 (x0 ), . . . , fm (x0 ) +
i=1
Pn
xi − x0i Tij (x0 ), es diferenciable en x0 y
la j-ésima
P componente de f , fj (x) = fj (x0 ) + i=1
Dfj (x0 ) = ni=1 xi − x0i Tij (x0 ).
Definamos una función Ti : A → Rm como Ti (x) = Ti1 (x), . . . , Tim (x) . Claramente es continua
Dado x ∈ A, se cumple
n
X
Df (x0 )(x) = (xi − x0i )Ti (x0 )
i=1
Xn
xi − x0i Ti1 (x0 ), . . . , Tim (x0 )
=
i=1
n
X n
X
xi − x0i Ti1 (x0 ), . . . , xi − x0i Tim (x0 )
=
i=1 i=1
= Df1 (x0 ), . . . , Dfm (x0 ) ,
de donde se sigue que Df (x0 ) = Df1 (x0 ), . . . , Dfm (x0 ) .
20
Teorema 25. Sean Ω ⊂ Rn , x0 ∈ Ω̊, λ ∈ R y dos funciones f, g : Ω → Rm . Supongamos que f y g
son diferenciables en x0 . Entonces se cumplen:
Como λ · ni=1 (xi − x0i)Ti (x0 ) = ni=1 (xi − x0i ) λTi (x0 ) , es claro que λf (x) = λf (x0 ) +
P P
ii) P
n 0
i=1 (xi − xi ) λTi (x0 ) ; luego λf es diferenciable en x0 y D(λf )(x0 ) = λDf (x0 ).
iii) Sean M : Ω → R2 , P : R2 → R, como M (x) = f (x), g(x) , P (x, y) = f (x) · g(x). Observemos
vi) Por
ser g continua en x0 , existe una bola abierta B(x0 , r) ⊂ Ω tal que ∀x ∈ B(x0 , r), g(x) 6=
0
0 . Que exista g (x0 ) implica de funciones H1 , . . . , Hn : Ω → R continuas en x0 ,
P la existencia
tales que g(x) = g(x0 ) + ni=1 xi − x0i Hi (x0 ) para todo x ∈ B(x0 , r).
21
Sea x ∈ B(x0 , r) arbitrario. Dividiendo g(x) entre x · g(x)g(x0 ) obtenemos:
n
1 1 X Hi (x0 )
= + xi − x0i ,
x · g(x0 ) x · g(x) x · g(x)g(x0 )
i=1
por tanto
n
xi − x0
1 1 1 X
i −Hi (x0 )
· − = ·
x g(x) g(x0 ) x · g(x) g(x0 )
i=1
Se tiene que
xi − x0i
lı́m = asdasd
x→x0 x · g(x)
−Hi (x0 )
Para cada j ∈ {1, · · · , n} definimos la función Ti (x) = g(x)g(x0 ) .
Es fácil ver que Ti es continua en x0 . Entonces 1/g es derivable en x0 y su derivada en dicho
punto es, tomando x ∈ Ω,
n
1 X −Hi (x0 )
D (x0 )(x) = xi − x0i
g g(x)g(x0 )
i=1
= a
= a
= a
= a
Nota. Dado x0 ∈ Ω̊ fijo, la aplicación f 7→ Df (x0 ) define una transformación lineal del espacio
vectorial de las funciones f : Rn → Rm en L Rn , Rn .
22
Ya que Dg(x0 ) es transformación lineal de Rn en Rm , su representación matricial respecto a las
bases canónicas de ambos espacios es
∂gi
[Dg(x0 )]ij = (x0 ),
∂xj
Ejemplos.
Como
∂u
(a, b) = 4a3 − 8ab2 ,
∂x
∂u
(a, b) = 4b3 − 8a2 b,
∂y
entonces la matriz jacobiana de u es
∂u ∂u
(a, b) = 4a3 − 8ab2 4b3 − 8a2 b .
(a, b)
∂x ∂y
Ω = (x, y) ∈ R2 x1 x2 > 0 y (a, b) ∈ Ω. Sea la función u : Ω → R2 dada por u x, y =
2. Sean
−1/2
ln(x + y 2 ), x2 x2 + y 2 . Hallar Du(a, b).
Sean u1 , u2 las funciones componentes de u. Las primeras derivadas parciales de u son:
∂u1 1
(a, b) =
∂x a + b2
∂u2 a2
(a, b) = 3/2
∂x a2 + b2
∂u1 2b
(a, b) =
∂y a + b2
∂u2 −ab
(a, b) = 3/2
∂y a2 + b2
23
Por tanto Du(a, b) está dada por
1 2b
a+b2 a+b2
a2 −ab
3/2 3/2
a2 +b2 a2 +b2
Nota. No es difı́cil comprobar que la matriz jacobiana de D g ◦ f (x0 ) es el producto de las
matrices jacobianas de Dg f (x0 ) y Df (x0 ).
Ejemplos.
h ∂g ∂g
i
= 1 3(a + b)2 y Df (a, b) es
Como Dg f (a, b) = ∂x 1
(a, b) ∂x2 (a, b)
2a 1
,
1 1
2. Hallar la matriz jacobiana de h(x1 , x2 , x3 ) = f u(x1 , x2 , x3 ), v(x1 , x2 , x3 ) , h : R3 → R, con
f (x1 , x2 ) = x21 + x2 sin x1 , u(x1 , x2 , x3 ) = x1 · exp(x2 ) y v(x1 , x2 , x3 ) = x1 x2 x3 · sin x1 , en el
punto (a, b, c) ∈ R3 .
Sea M : R3 → R2 , como M (x1 , x2 , x3 ) = u(x1 , x2 , x3 ), v(x1 , x2 , x3 ) . Entonces h = f ◦ M y
utilizando la regla de la cadena se tiene Dh(a, b, c) = Df M (a, b, c) · DM (a, b, c). Puesto que
eb ab · eb
0
DM (a, b, c) =
bc · cos a c sin a b sin a
24
Se tiene que Dh(a, b, c) = [ α β γ ], donde
h i
α = eb 2aeb + (abc sin a) cos aeb + (bc · cos a) sin(aeb )
h i
β = ab · eb 2aeb + (abc sin a) cos aeb + (c · sin a) sin(aeb )
γ = (b sin a) sin(aeb )
∂λ1
(a0 ) = −r sin θ0 sin φ0
∂φ
∂λ2
(a0 ) = r sin θ0 cos φ0
∂φ
∂λ3
(a0 ) = 0
∂φ
∂λ1
(a0 ) = r cos θ0 cos φ0
∂θ
∂λ2
(a0 ) = r cos θ0 cos φ0
∂θ
∂λ3
(a0 ) = −r sin θ0 sin φ0
∂θ
25
Teorema 26. Sean Ω ⊂ Rn , a ∈ Ω̊ y f : Ω → Rm . Escribimos f = (f1 , . . . , fm ). Supongamos que
en una bola abierta B(a, δ) ⊂ Ω existen todas las primeras derivadas parciales de f y estas son
continuas en B(a, δ). Entonces f es diferenciable en a.
Demostración. Sin perder generalidad tómese m = 1. Obsérvese que f (x) − f (a) puede escribirse
como
f (x1 , · · · , xn ) − f (a1 , · · · , an ) = f (x1 , · · · , xn ) − f (a1 , x2 , . . . , xn )
+f (a1 , x2 , . . . , xn ) − f (a1 , a2 , x3 , . . . , xn )
..
.
= +f (a1 , a2 , . . . , an−1 , xn ) − f (a1 , · · · , an )
i.e.
n
X
f (x) − f (a) = f (a1 , . . . , ai−1 , xi , xi+1 , . . . , xn ) − f (a1 , . . . , ai−1 , ai , xi+1 , . . . , xn ).
i=1
Para cada i ∈ {1, · · · , n} defı́nase la función gi : Ci → R, con Ci = {t ∈ R | |t − ai | < δi , con δi < nδ},
como gi (t) = f (a1 , . . . , ai−1 , t, xi+1 , . . . , xn ). Dado i ∈ {1, · · · , n} fijo, afirmamos que gi es derivable
en bi ∈ Ci . En efecto,
gi (t) − gi (bi )
gi0 (bi ) = lı́m
t→bi t − bi
f (a1 , . . . , ai−1 , t, xi+1 , . . . , xn ) − f (a1 , . . . , ai−1 , bi , xi+1 , . . . , xn )
= lı́m
t→bi t − bi
∂f
= (a1 , . . . , ai−1 , bi , xi+1 , . . . , xn )
∂xi
= kx − ak.
26
∂f
De aquı́ que Hi es continua en a. Para terminar, definamos la función Ti (x) = ∂x i
◦ Hi (x).
m
Claramente Ti : B(a, δ) → R es continua en a. Además, para toda x ∈ B(a, δ) vale
n
X
f (x) − f (a) = (xi − ai )Ti (x)
i=1
Teorema 27. Sean Ω ⊂ Rn una región (i.e. un abierto conexo) y f : Ω → R tal que existen todas
las primeras parciales de f en Ω. Si para cada x0 ∈ Ω dichas parciales son continuas y se anulan
en x0 , entonces f es función constante.
∂f
Demostración. Que exista ∂x i
, con i ∈ {1, · · · , n}, en todo Ω implica la diferenciabilidad (y por
tanto la continuidad) de f en Ω. Sea x0 ∈ Ω arbitrario, fijo, y considérese el conjunto Ω1 =
{x ∈ Ω | f (x) = f (x0 )} ⊂ Ω.
Afirmamos que Ω1 es cerrado y abierto a la vez. En efecto es cerrado, pues Ω1 = f −1 (f (x0 )) y
este último es cerrado.
Para probar que es abierto, sea un z ∈ Ω1 cualquiera. Como Ω1 ⊂ Ω, vale z ∈ Ω. Por ser Ω
abierto, existe una bola abierta B(z, δ) ⊂ Ω. Más aún, se tiene B(z, δ) ⊂ Ω1 . Dada w ∈ B(z, δ) sea
ψ : [0, 1] → B(z, δ) la parametrización del segmento que une los puntos z con w: ψ(t) = (1−t)z +tw.
Claramente ψ es diferenciable en todo Ω, ya que existen todas sus primeras derivadas parciales y
son continuas.
Definimos ahora una función h : [0, 1] → R como h(t) = (f ◦ ψ) (t). Como f es diferenciable en
x0 ∈ B(z, δ) y su matriz jacobiana es [Df (x0 )] = [ 0 . . . 0 ], pues las parciales de f se anulan en
x0 , h es derivable en t ∈ [0, 1] y vale h0 (t) = 0. Esto es, h es función constante en [0, 1]; por tanto
f debe ser constante en ψ ∗ . En particular se cumple f (w) = f (z), i.e. w ∈ Ω1 , lo cual garantiza la
contención B(z, δ) ⊂ Ω1 , demostrando ası́ que Ω1 es abierto.
En resumen, Ω1 6= ∅ y es tanto abierto como cerrado en el conexo Ω; luego Ω1 = Ω, lo cual
significa que f es constante en Ω.
27
∂f
(Dei f ) (x0 ) = (x0 ).
∂xi
En efecto, sea x0 ∈ Ω. Entonces
f (x0 + tu) − f (x0 )
Du f (x0 ) = lı́m
t→0 t
g(h) − g(0)
= lı́m
t→0 h
= g 0 (x0 ).
Ejemplos.
1. Sea f : R2 → R2 dada por f (x, y) = x2 +y 2 . Calcular Du f (0, 0) para los vectores: i) u = (1, 1),
ii) v = (3, 4) y iii) w = (1, −1).
Luego Du f (0, 0) = 0.
Luego Dv f (0, 0) = 0.
28
f ((0, 0) + t(1, −1)) − f (0, 0)
Dw f (0, 0) = lı́m
t→0 t
f (t, 0) − f (0, 0)
= lı́m
t→0 t
f (t, −t)
= lı́m
t→0 t
= lı́m 2t
t→0
= 0.
Luego Dw f (0, 0) = 0.
2. Sea f : R2 → R2 dada por f (x, y) = (x + y, 2y). Si u = (−1, 1), v = (1, 1), calcular Du f (1, 1)
y Dv f (1, 1).
Demostración.
f (x0 − tu) − f (x0 )
D−u f (1, 1) = lı́m
t→0 t
f (x0 + (−t)u) − f (x0 )
= − lı́m
t→0 −t
= −Du f (x0 )
29
Por tanto Du f (x0 ) = −D−u f (x0 ) i.e Du f = −D−u f .
Observación. El que todas las derivadas direccionales existan en un punto no implica la continuidad
de una función en dicho punto, y mucho menos que sea diferenciable. Por ejemplo, consideremos
f : R2 → R2 definida por f (x, y) = 0 si x = y; y f (x, y) = (xy)/(x2 +y), si x2 6= −y. Sean x0 = (0, 0)
y u = (u1 , u2 ) un vector unitario. Hallar Du f (x0 ).
30
Rn . Si existe la derivada direccional de f en x0 ∈ Rn , en la dirección de u, vale:
Lo anterior se expresa como ”la razón de cambio de f en la dirección del vector u”.
Sea a un punto de la superficie y x(t) una curva sobre dicha superficie, que pasa por a. Esto
significa que a = x(t0 ) para algún t0 ∈ R. Para este valor t0 se verifica: h∇f (a)|x0 (t0 )i = 0. Ası́,
pues, el vector ∇f (a) es perpendicular al vector tangente x0 (t0 ) a la curva en el punto a.
Se define el plano tangente a la superficie en el punto a, como aquel que pasa por dicho punto
y es perpendicular al vector ∇f (a). Recordemos que esta definición solamente es aplicable cuando
∇f (a) 6= 0. En otras palabras, el plano tangente es P = {y ∈ Rn | h∇f (a)|yi = h∇f (a)|ai}.
∂ 2f
∂ ∂f
(x0 ) = (x0 )
∂xj ∂xi ∂xj ∂xi
∂kf
∂ ∂f
(x0 ) = ◦ ··· ◦ (x0 )
∂xik · · · ∂xi1 ∂xk ∂xi1
31
Ejemplo. Sea f : R2 → R dada por f (x, y) = 0, si (x, y) = (0, 0), y f (x, y) = (x3 y)/(x2 + y 2 ) si
(x, y) 6= (0, 0). Calcular las siguientes derivadas parciales en (0, 0):
∂ 2f ∂ 2f
a) (0, 0) b) (0, 0)
∂x ∂y ∂y ∂x
Sea (x, y) ∈ R2 cualquiera. Se tiene que la parcial de f respecto a x en (x, y) es 0 si (x, y) = (0, 0),
y
∂f x2 y(x2 + 3y 2 )
(x, y) = si (x, y) 6= (0, 0)
∂x x2 + y 2
Completar ejercicio!
Como puede observarse, la mera existencia de las derivadas parciales de f , respecto a dos de
sus variables, no garantiza que dichas derivadas sean iguales (pensándolas como funciones). Sin
embargo, la siguiente proposición da las condiciones suficientes para que la igualdad se verifique.
∂f ∂f ∂ 2f
(x0 , y0 ) , (x0 , y0 ) , (x0 , y0 ).
∂x ∂y ∂x ∂y
∂ 2f ∂ 2f
Si ∂x ∂y es continua en (x0 , y0 ), entonces existe ∂y ∂x (x0 , y0 ) y se verifica:
∂ 2f ∂ 2f
(x0 , y0 ) = (x0 , y0 )
∂y ∂x ∂x ∂y
Demostración. Como (x02, y0 ) ∈ Ω̊, existe B (x0 , y0 ), δ ⊂ Ω, con δ > 0. Definamos una función g
de V = B (0, 0), δ ⊂ R en R, g : V → R, como g(h, k) = [f (x0 + h, y0 + k) − f (x0 + h, y0 )] −
[f (x0 , y0 + k) − f (x0 , y0 )]. La meta es probar que
g(h, k) ∂ 2f
lı́m = (x0 , y0 ) .
(h,k)→(0,0) hk ∂y ∂x
32
Entonces
∂ 2f g(h, k)
(x0 , y0 ) = lı́m
∂y ∂x (h,k)→(0,0) hk
g(h, k)
= lı́m lı́m
h→0 k→0 hk
1 ∂f 1 ∂f
= lı́m · (x0 + h, y0 ) − · (x0 , y0 )
h→0 h ∂y h ∂y
∂ 2f
= (x0 , y0 )
∂x ∂y
√
Sea > 0 arbitrario. Entonces existe η > 0 tal que η ≤ / 2 y |h| , |k| ≤ η. Por la continuidad de
∂ 2f
∂y ∂x en (x0 , y0 ), se tiene:
2
∂ 2f
∂ f
∂y ∂x (x0 + h, y0 + k) − ∂y ∂x (x0 , y0 ) < .
p(k0 + t) − p(k0 )
p0 (k0 ) = lı́m
t→0 t
p(k0 + t) p(k0 )
= lı́m − lı́m
t→0
t t→0 t
1 ∂f ∂f
= lı́m (x0 + h0 , y0 + k + t) − (x0 + h0 , y0 )
t→0 h ∂x ∂x
1 ∂f ∂f
− lı́m (x0 + h0 , y0 + k) − (x0 + h0 , y0 )
t→0 h ∂x ∂x
1 ∂f ∂f
= lı́m (x0 + h0 , y0 + k + t) − (x0 + h0 , y0 + k)
t→0 h ∂x ∂x
1 ∂ f 2
= · (x0 + h0 , y0 + k)
h ∂y ∂x
33
Si se satisfacen 0 < |h0 | < |h| y 0 < |k0 | < |k|, entonces
∂ 2f ∂ 2f
g(h, k) 0
hk − ∂y ∂x (x0 , y0 ) = p (k0 ) − ∂y ∂x (x0 , y0 )
2
∂ 2f
∂ f
= (x0 + h0 , y0 + k) − (x0 , y0 )
∂y ∂x ∂y ∂x
<
Por ser arbitrario, se ha demostrado el lı́mite requerido para garantizar la validez de la tesis.
Revisar detalles de la prueba.
A pesar de que la prueba es para una función de dos variables, no es difı́cil proporcionar la de-
mostración para cuando la función tiene n variables, cuyo enunciado es:
Corolario 4. Sean Ω ⊂ Rn abierto, x0 ∈ Ω y f : Ω → R tal que existen
∂f ∂f ∂ 2f
(x0 ) , (x0 ) , (x0 ).
∂xi ∂xj ∂xi ∂xj
∂ 2f ∂ 2f
Si ∂xi ∂xj (x0 ) es continua en x0 , entonces existe ∂xj ∂xi (x0 ) y se verifica:
∂ 2f ∂ 2f
(x0 ) = (x0 )
∂xj ∂xi ∂xi ∂xj
34
3.3. Teorema de Taylor en Rn
Supongamos que Ω ⊂ Rn es abierto y f : Ω → R es una función tal que, para cualesquier i, j, k ∈
{1, · · · , n} es continua la parcial mixta
∂ 3f
∂xi ∂xj ∂xk
∂ 3f ∂ 3f
=
∂xi ∂xj ∂xk ∂xσ(i) ∂xσ(j) ∂xσ(k)
∂ |K| f
DK (f ) =
∂xk11 · · · ∂xknn
Por ejemplo, si K = (1, 3, 4), entonces |K| = 8, K! = (1!)(3!)(4!) = 144, xK = x1 · x32 · x43 y
∂ 8f
DK (f ) =
∂x1 ∂x32 ∂x43
donde ξ ∈ [t, x0 ].
Ahora probaremos el Teorema de Taylor en Rn .
35
Teorema 29. Sean Ω ⊂ Rn abierto y a, x ∈ Ω tales que el segmento [a, x] = {(1 − t)a + tx | 0 ≤ t ≤ 1}
esté contenido en Ω. Si f : Ω → R es de clase C m+1 en Ω, entonces existe un ξ ∈ [a, x] tal que
X DK f (a) X DK f (ξ)
f (x) = (x − a)K + (x − a)K
K! K!
|K|≤m |K|=m+1
donde el subı́ndice de la primera suma indica que esta se realiza para cada uno de los multi-ı́ndices
cuya norma no es mayor que m; mientras que la segunda suma se ejecuta para los multi-ı́ndices de
norma igual a m + 1.
Más aún γ ∈ C m [0, 1] . Ahora, para cada j ∈ Jn = {1, · · · , n} construyamos la función ψj : [0, 1] →
∂f
◦ ϕ. Luego se verifica ψ1 . . . ψn ∈ C m [0, 1] .
R ası́: ψj = ∂xj
es decir
n
X ∂ 2f
ψj0 = (xi − ai ) · (ϕ(t)) (3.1)
∂xi ∂xj
i=1
36
Supongamos, por el momento, que f ∈ C ∞ (Ω); demostraremos ahora, por inducción, una
fórmula para la r-ésima derivada de ψi , con i ∈ Jn fijo. Definamos el conjunto
n n r+1
(r)
X X ∂ f
A = r ∈ N ∀t ∈ [0, 1] , ψj (t) = ··· Pr · ϕ(t)
∂xjr+1 · · · ∂xj1
j1 =1 jr =1
donde
r
Y
Pr = (xjα − ajα )
α=1
(r+1) (r)
ψi (t) = D ψi (t) (t)
n n n
X X X ∂ r+2 f
= ··· Pr · (xjr+1 − ajr+1 ) · ϕ(t)
∂xjr+2 · · · ∂xj1
j1 =1 jr =1 jr+1 =1
n n
∂ r+2 f
X X
= ··· Pr+1 · ϕ(t)
∂xjr+2 · · · ∂xj1
j1 =1 jr+1 =1
Sean t0 = ϕ−1 (a) y t = ϕ−1 (x). Entonces t0 = 0, pues ϕ es biyección. Además γ(0) = a y γ(1) = x.
Como γ ∈ C m+1 [0, 1] , por el Teorema de Taylor en R existe η ∈ [0, 1] tal que
m
X γ (k) (t0 ) γ (m+1) (η)
γ(t) = (t − t0 )k + (t − t0 )m+1
k! (m + 1)!
k=0
m
X γ (k) (0) k γ (m+1) (η) m+1
= t + t
k! (m + 1)!
k=0
37
Eligiendo t = 1, γ(1) = f (x) y
n n
∂ kf
X X
(k)
γ (0) = ··· Pk · ϕ(0)
∂xjk · · · ∂xj1
j1 =1 jk =1
n n
∂ kf
X X
= ··· Pk · (a) ,
∂xjk · · · ∂xj1
j1 =1 jk =1
n n
∂ m+1 f
X X
γ (m+1) (η) =
··· Pm+1 · ϕ(η)
∂xjm+1 · · · ∂xj1
j1 =1 jm+1 =1
n n
∂ m+1 f
X X
= ··· Pm+1 · (ξ)
∂xjm+1 · · · ∂xj1
j1 =1 jm+1 =1
38
Ejemplo 1. Sea f : R2 → R definida por f (x, y) = x1 x2 sin(x1 x2 ). Si a = (1, −1), hallar el desarrollo
de Taylor de f de orden dos.
En este caso m = 2, y los multi-ı́ndices K en R2 tales que |K| ≤ 2 son: (0, 0), (1, 0), (0, 1), (1, 1), (2, 0), (0, 2).
Entonces
Ejemplo 2. Sea f : R3 → R definida como f (x1 , x2 , x3 ) = x31 + x32 + x33 − 3x1 x2 x3 . Hallar para f el
desarrollo de Taylor de segundo orden (m = 2), en el punto a = (1, 1, 1).
∂ 2f ∂ 2f ∂ 2f
= 6x1 = 6x2 = 6x3
∂x21 ∂x22 ∂x23
∂ 2f ∂ 2f ∂ 2f
= −3x3 = −3x2 = −3x1
∂x1 ∂x2 ∂x1 ∂x3 ∂x2 ∂x3
39
∂ 3f ∂ 3f ∂ 3f
= = = −3x2
∂x31 ∂x32 ∂x33
∂ 3f ∂ 3f
=0 = −3
∂xi ∂x2j ∂xi ∂xj ∂xk
∂f ∂f ∂f
(a) = (a) = (a) = 0
∂x1 ∂x2 ∂x3
∂ 2f ∂ 2f ∂ 2f
(a) = (a) = (a) = 6
∂x21 ∂x22 ∂x23
∂ 3f ∂ 3f ∂ 3f
(a) = (a) = (a) = −3
∂x1 ∂x2 ∂x1 ∂x3 ∂x2 ∂x3
∂ 3f ∂ 3f ∂ 3f
(a) = = (a) = −3
∂x31 ∂x32 ∂x33
∂ 3f ∂ 3f
(a) = 0 (a) = −3
∂xi ∂x2j ∂xi ∂xj ∂xk
X DK f (a) ∂f ∂f ∂f
· (x − a)K = (a)(x1 − a1 ) + (a)(x2 − a2 ) + (a)(x3 − a3 )
K! ∂x1 ∂x2 ∂x3
|K|=1
= 0
1 ∂ 2f 2 ∂ 2f
(a)(x 2 − a 2 ) + (a)(x2 − a2 )(x3 − a3 ) +
2! ∂x22 ∂x2 ∂x3
∂ 2f 1 ∂ 2f
(a)(x1 − a1 )(x3 − a3 ) + (a)(x3 − a3 )2
∂x1 ∂x3 2! ∂x23
1 1
= · 6(x1 − 1)2 − 3(x1 − 1)(x2 − 1) + · 6(x2 − 1)2
2! 2!
1
−3(x2 − 1)(x3 − 1) − 3(x1 − 1)(x3 − 1) + · 6(x3 − 1)2
h 2!
= 3 (x1 − 1)2 − (x1 − 1)(x2 − 1) + (x2 − 1)2
i
−(x2 − 1)(x3 − 1) − (x1 − 1)(x3 − 1) + (x3 − 1)2
40
Finalmente, el residuo es:
X DK f (ξ) 1 ∂ 3f 3 1 ∂ 3f
· (x − a)K = (ξ)(x1 − a1 ) + (ξ)(x1 − a1 )2 (x2 − a2 )
K! 3! ∂x31 2! ∂x21 ∂x2
|K|=3
1 ∂ 3f 2 ∂ 3f
+ (ξ)(x 1 − a 1 ) (x 3 − a3 ) + (ξ)(x1 − a1 )(x2 − a2 )(x3 − a3 )
2! ∂x21 ∂x3 ∂x1 ∂x2 ∂x3
1 ∂ 3f 1 ∂ 3f
+ 2 (ξ)(x1 − a1 )(x3 − a3 )2 + (ξ)(x2 − a2 )3
2! ∂x1 ∂x3 3! ∂x32
1 ∂ 3f 2 1 ∂ 3f
+ (ξ)(x 2 − a 2 ) (x 3 − a 3 ) + (ξ)(x3 − a3 )3
2! ∂x22 ∂x3 3! ∂x33
1 ∂ 3f 2 1 ∂ 3f
+ (ξ)(x 1 − a 1 )(x 2 − a 2 ) + (ξ)(x2 − a2 )(x3 − a3 )2
2! ∂x1 ∂x22 2! ∂x2 ∂x23
1
= · −3(x1 − a1 )3 − 3(x1 − a1 )(x2 − a2 )(x3 − a3 )
3!
1 1
· −3(x2 − a2 )3 + · −3(x3 − a3 )3
3! 3!
1h i
= − (x1 − a1 ) + (x2 − a2 )3 + (x3 − a3 )3
3
2
−3(x1 − a1 )(x2 − a2 )(x3 − a3 )
Ya que f (a) = 0, el desarrollo de Taylor de f de segundo orden, en el punto a = (1, 1, 1), es:
h
3 (x1 − 1)2 − (x1 − 1)(x2 − 1) + (x2 − 1)2
i
−(x2 − 1)(x3 − 1) − (x1 − 1)(x3 − 1) + (x3 − 1)2
X DK f (ξ)
+ · (x − a)K
K!
|K|=3
41
∂ϕ1 ∂ϕ1
···
∂x1 (a) ∂xn (a)
[DΦ(a)] = .
.. .. ..
,
. .
∂ϕm ∂ϕm
∂x1 (a) · · · ∂xn (a)
Por lo tanto
∂ϕ1 ∂ϕ1
∂x1 (a) ··· ∂xn (a)
∂f ∂f ∂g ∂g .. .. ..
(a) · · · (a) = (Φ(a)) · · · (Φ(a)) ·
. . .
∂x1 ∂xm ∂x1 ∂xm
∂ϕm ∂ϕm
∂x1 (a) · · · ∂xn (a)
∂g ∂g
= Φ(a)
∂ϕ1 ∂xi
42
de modo que al tomar el lı́mite en la igualdad anterior, cuando xi tiende a ai , se obtiene el resultado
pedido:
∂f g ∂f ∂g
(a) = (a) · g(a) + f (a) · (a) .
∂xi ∂xi ∂xi
∂g
Antes convengamos en denotar las funciones hi : Λ → R como hi (x) = ∂xi (x); y similarmente
∂ϕj
uj : Ω → R por uj (x) = ∂xi (x). Fijemos un k ∈ {1}n. Entonces la parcial de f respecto a xk puede
reescribirse como:
m
∂f X
(a) = (hi ◦ Φ)(a) · ui (a) .
∂xk
i=1
Aplicando la regla del producto para las derivadas parciales se tiene que, para un r ∈ {1, · · · , n}
fijo,
m
!
∂ ∂f ∂ X
(a) = (hi ◦ Φ)(a) · ui (a)
∂xr ∂xk ∂xr
i=1
m
X ∂
= (hi ◦ Φ)(a) · ui (a)
∂xr
i=1
m
X ∂(hi ◦ Φ)
∂ui
= (a) · ui (a) + (hi ◦ Φ)(a) · (a)
∂xr ∂xr
i=1
m m
X X ∂hi ∂ϕj
= Φ(a) · (a) · ui (a) +
∂xj ∂xr
i=1 j=1
m
X ∂ui
(hi ◦ Φ)(a) · (a)
∂xr
i=1
m m 2
X X ∂ g ∂ϕj ∂ϕj
= Φ(a) · (a) · (a) +
∂xj ∂xi ∂xi ∂xr
i=1 j=1
m
∂ 2 ϕi
X ∂g
(Φ(a)) · (a)
∂xi ∂xr ∂xi
i=1
43
3.5. Máximos y mı́nimos
Sean Ω ⊂ Rn abierto y x0 ∈ Ω. Se dice que una función f : Ω → R tiene un máximo local en x0
(respectivamente mı́nimo local en x0 ) si existe una bola abierta B(x0 , δ) ⊂ Ω tal que para cualquier
x ∈ B(x0 , δ), entonces f (x) ≤ f (x0 ) (resp. f (x) ≥ f (x0 )). A tal x0 se denomina máximo local de f
(resp. mı́nimo local de f ). Si x0 es un máximo local o un mı́nimo local, se dice que es un extremo de f .
Demostración. Sin pérdida de generalidad supongamos que f tiene un máximo local en x0 . Entonces
existe una bola B(x0 , δ) ⊂ Ω tal que para toda x ∈ B(x0 , δ), se cumple f (x) ≤ f (x0 ). Fijemos
k ∈ {1, · · · , n}, y denotemos y = (x10 , · · · , xk−1 k+1 n k
0 , x, x0 , · · · , x0 ), con x > x0 . De la condición
y ∈ B(x0 , δ) se deduce que f (y) ≤ f (x0 ), lo cual implica
f (y) − f (x0 )
≤ 0.
x − xk0
∂f
Por tanto ∂x k
(x0 ) ≤ 0. De forma análoga, si hacemos x < xk0 e y ∈ B(x0 , δ), se satisface f (y) ≥
f (x0 ), que implica a su vez
f (y) − f (x0 )
≥ 0.
x − xk0
lo cual prueba la aseveración.
Observaciones.
a) Una función puede tener un extremo local en x0 sin que existan las primeras parciales en
dicho punto. Por ejemplo, f (x, y) = |x| + |y| tiene un mı́nimo local en x0 = 0, pero no existen
las primeras derivadas parciales ahı́.
b) Pueden existir las primeras parciales de f y, sin embargo, x0 puede no ser un extremo local.
Un ejemplo de ello es la función f (x, y) = x2 − y 2 , que tiene primeras parciales en x0 = 0 pero
tal punto no es extremo local. Para convecerse de esto tómense las sucesiones xν = (0, ν −1 ) e
y ν = (ν −1 , 0).
44
3.6. digresión.
Sea B : Rn × Rn → R una forma bilineal. Se dice que:
i) B es positiva definida, si se cumple (∀x ∈ Rn − {0}, B(x, x) > 0).
ii) B es positiva semi-definida, si (∀x ∈ Rn − {0}, B(x, x) ≥ 0).
iii) B es negativa definida, si se cumple (∀x ∈ Rn − {0}, B(x, x) < 0).
iv) B es negativa semi-definida, si (∀x ∈ Rn − {0}, B(x, x) ≤ 0).
Nota. Las definiciones anteriores aplican también para la forma cuadrática asociada a B.
Los menores principales de una matriz A ∈ Rn×n son las submatrices de A: A1 , · · · , An , donde
a11 · · · a1k
.. .. ..
Ak = det . .
. .
ak1 · · · akk
Teorema 31. Sea f : Rn × Rn → R una forma bilineal simétrica, cuya matriz respecto a alguna
base fija de Rn es A = [aij ]. Entonces la forma cuadrática asociada a f , Q : Rn → R dada por
Q(x) = f (x, x), es definida positiva si y sólo si (∀k ∈ {1, · · · , n}, det Ak > 0).
Demostración. Supongamos que f es definida positiva. En primer lugar, por ser f simétrica, A es
matriz simétrica. Luego existe una matriz no singular P ∈ Rn×n tal que P t AP = diag {λ1 , · · · , λn } ∈
Rn×n . Tomando
Pn como base de Rn a los vectores columna de P , para cualquier x ∈ Rn se cumple
Q(x) = 2
i=1 λk xk . Además, el que f sea positiva definida –por hipótesis– implica que todos
los λi son positivos. Por lo tanto se sigue que det A = det (P t AP ) = λ1 · · · λk > 0; es decir
det A = det An > 0.
Para demostrar que det Ak > 0, con 1 ≤ k < n, fijemos tal k y definamos
Vk = {(x1 , · · · , xk , 0, · · · , 0) | x1 , · · · , xk ∈ R} .
Claramente Vk es subespacio lineal de Rn de dimensión k. Además la restricción de Q a Vk es una
forma cuadrática en Vk . Por consiguiente [Q |Vk ] = Ak , de donde se sigue que det Ak > 0.
Demostremos la proposición recı́proca. Supongamos, entonces, que det A1 , · · · , det An son todos
positivos. Fijemos k ∈ {1, · · · , n}. Definamos el vector βk ∈ Rk como βk = α1k e1 +· · ·+αkk ek , donde
{e1 , · · · , ek } es una base fija de Rk , tal que Ak · [βk ] es un vector columna en Rk×1 cuyas entradas
son cero, excepto la k-ésima que es 1. Entonces los vectores {β1 , . . . , βn } de Rn son linealmente
independientes. Además, para cada k ∈ {1, · · · , n} se verifica
[Ak ] a1,k+1 · · · a1,n
.. ..
ak+1,1 . . a2,n
A = det
.. .. .. .. .
. . . .
an,1 an,k+1 · · · an,n
45