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Preeclampsia. Eclampsia
D Édouard
Resumen. - La preeclampsia se define como asociación de hipertensión arterial iniciada después
de las 20 semanas de amenorrea y proteinuria. Se debe a una anomalía de la implantación de
la placenta, de mecanismo no bien conocido, que ocasiona isquemia placentaria; ésta, a su vez,
provoca hipoxia fetal crónica y lesión endotelial difusa materna, origen de la hipertensión arte-
rial y de las complicaciones orgánicas. Las formas graves de preeclampsia dependen de la inten-
sidad de la hipertensión arterial o de la gravedad de las lesiones orgánicas: edema pulmonar,
insuficiencia renal, síndrome HELLP (hemolysis-elevated liver enzymes-low platelets count;
hemólisis, elevación de las enzimas hepáticas, disminución del recuento de plaquetas), altera-
ciones de la coagulación, hematoma retroplacentario o hematoma hepático, eclampsia y retra-
so de crecimiento o muerte fetal intrauterina. El diagnóstico precoz y el tratamiento de la hiper-
tensión arterial, junto con un estricto seguimiento clínico, análisis de laboratorio y ecografías de
la paciente, mejoran el pronóstico materno y fetal. Los calcioantagonistas desempeñan un
papel destacado en el tratamiento. La persistencia de hipertensión, la aparición de complica-
ciones orgánicas o la repercusión fetal son motivo de hospitalización. Si el tiempo de gestación
es corto, se puede realizar tratamiento conservador en una unidad especializada para permitir
que continúe el desarrollo fetal si los antihipertensivos intravenosos, el Ilenado vascular pru-
dente y la corticoterapia se muestran rápidamente eficaces. Si el tratamiento fracasa o apare-
cen convulsiones, está indicada la interrupción del embarazo. Si la coagulación es normal, el
parto se puede producir por vía vaginal con analgesia peridural. Si se decide practicar cesárea,
suele ser necesaria la anestesia general, motivada por la urgencia y por los problemas de coa-
gulación. La raquianestesia es una alternativa interesante, al evitar la crisis hipertensiva pro-
vocada por la laringoscopia en donde la intubación en ocasiones es difícil. El seguimiento pos-
parto es de suma importancia, debido a la posibilidad de aparición de edema pulmonar o de
complicaciones orgánicas que se pueden presentar exclusivamente después del parto.
Obligatoriamente, la madre se debe someter a un seguimiento para detectar factores de riesgo,
en particular trombofilia, realizar un seguimiento precoz de los embarazos posteriores, prescri-
bir tratamiento profiláctico según las circunstancias y observar la aparición de hipertensión
arterial crónica.
e 2003, Editions Scientifiques et Médicales Elsevier SAS, París. Todos los derechos reservados.

Palabras clave: analgesia obstétrica, insuficiencia multiorgánica, eclampsia, glucocorticoides,


hematoma retroplacentario, hipertensión arterial, preeclampsia, proteinuria, sufrimiento fetal,
síndrome HELLP.

Introducción la preeclampsia. El ingreso en una unidad especializada per-


mite iniciar el tratamiento materno para retardar la posibili-
La hipertensión arterial es una de las más dad de un parto prematuro, modalidad terapéutica última
complicaciones de la preeclampsia ~9’~.
frecuentes del embarazo. Si se asocia proteinuria, la pree-
clampsia constituye un reto para el equipo médico. A pesar
de la reducción significativa de la mortalidad por pree-
clampsia durante los últimos años, esta enfermedad sigue Generalidades
siendo la causa de la muerte materna en el 17 al 20 % de los
casos. El 60 % de estos fallecimientos se debe a una atención
DEFINICIONES E INCIDENCIA
inadecuada, pese a un control en general regular de las
mujeres. La incidencia de la preeclampsia es difícil de determinar
Un mejor conocimiento de la fisiopatología de la preeclamp- debido a las diferencias geográficas y socioeconómicas de
sia ayuda al diagnóstico precoz mediante el descubrimiento las poblaciones estudiadas, a la frecuencia de errores de
de signos reveladores, con frecuencia atípicos. En estos diagnóstico y a la multiplicidad de definiciones. En Francia,
casos, la atención se adapta a la gravedad y a la evolución de por ejemplo, del 1 al 2 % de las primíparas y del 0,5 al 1 % de
las multíparas presentan preeclampsia durante el embarazo;
estos porcentajes son notablemente inferiores a los comunica-
dos en estudios anglosajones. Antes de considerar la enferme-
I Domlnlque157,Édouard :
8éclere, avenue
Praticien hospitalien service d’anesthésie-récnimation,
de la Porte-de- Trivaux, 92141 1 clamort, France.
hópital Antoine
dad, se debe establecer un acuerdo sobre las definiciones 1781.
La hipertensión arterial gravídica se define como hipertensión
arterial aislada (presión arterial sistólica a 140 mmHg y/o o

presión arterial diastólica z 90 mmHg) que se presenta a par-


tir de las 20 semanas de amenorrea y complica el 10 % de los
embarazos. La preeclampsia se define como hipertensión arte-
rial gravídica asociada a proteinuria superior a 300 mg/24 h o
superior a 2+, precedida en ocasiones por uno o más de los
siguientes signos: edemas de aparición brusca, uricemia supe-
rior a 350 pnol/1, aumento de la aspartato aminotransferasa
(ASAT), disminución del recuento de plaquetas « 150 x 109/1).
La hipertensión arterial esencial o crónica es una hipertensión
de aparición precoz durante el embarazo o anterior a éste. En
el 15 al 20 % de los casos, se puede complicar con preeclamp-
sia sobreañadida.
La definición de forma grave (10 % de las preeclampsias)
establecida por la Conferencia de Expertos de la Sociedad
Francesa de Anestesia y de Reanimación es la siguiente:
-

preeclampsia con hipertensión arterial intensa (presión


arterial sistólica a 160 mmHg y/o presión arterial diastólica
z 110 1 Esquema fisiopatológico de la preeclampsia.
mmHg);
-

preeclampsia con hipertensión arterial moderada, pero


asociada a uno o más de los siguientes síntomas: dolor epi-
gástrico, náuseas, vómitos, cefalea persistente, hiperreflexia
osteotendinosa, trastornos visuales, proteinuria superior a observado formas graves de preeclampsia durante embarazos
3,5 g/d, creatininemia superior a 100 umol/1, oliguria infe- molares. El origen de la enfermedad se debe a un conflicto
rior a 20 ml/h, hemólisis, ASAT superior a tres veces el valor entre el tejido trofoblástico y el tejido materno " ID="I268.67.9">17 1. La secuen-
normal, trombocitopenia « 100 x 109 plaquetas/1). cia isquemia placentaria-microangiopatía difusa-disfunción
orgánica se ha comprobado; asimismo es preocupante la
FACTORES DE RIESGO semejanza con el síndrome inflamatorio reactivo grave de ori-
gen séptico o traumático " ID="I268.71.5">172.86]. La invasión de las arterias espi-
factores obstétricos raladas de origen uterino por células citotrofoblásticas pla-
centarias es incompleta. Los vasos uteroplacentarios conser-
La nuliparidad es el principal factor de riesgo: la prevalencia van sus propiedades de resistencia y no se adaptan a las nece-
de la afección es del 5 % durante el primer embarazo y del sidades de la unidad utero-placento-fetal, por lo que aparece
0,3 % en los siguientes. En mujeres muy jóvenes, el riesgo hipoxia isquémica regional. La placenta isquémica libera gran
elevado de preeclampsia se debe a la gestación y no a la edad cantidad de células trofoblásticas y restos celulares por
de la madre. La inseminación con donante aumenta el ries- aumento de la apoptosis; ambos son directamente tóxicos
go. La consanguinidad, así como una compatibilidad HLA para el endotelio vascular. Durante la afección, la activación
elevada entre los padres, favorece las anomalías placenta- de plaquetas y de neutrófilos es constante. La lesión endote-
rias. Lo mismo sucede en caso de intervalo largo entre dos lial materna provoca aumento de la permeabilidad capilar,
embarazos, embarazos múltiples, anomalías cromosómicas trombosis plaquetaria y espasmo vascular ~"°~ y se pone de
o malformaciones fetales " ID="I268.39.4">1741. manifiesto mediante la concentración de fibronectina y de
antígeno asociado al factor VIII circulante. La hipertensión
Factores ambientales y generales arterial es consecuencia de las lesiones vasculares, ya sea por
influencia de mediadores circulantes o por aumento del tono
La altitud geográfica y el estrés físico o psicológico favorecen
la preeclampsia. Otros factores de riesgo son sobrepeso,
simpático periférico. Estas deficiencias vasculares provocan
lesión cerebral, pulmonar, renal y hepatopancreática, respon-
población de raza negra, actividad profesional prolongada sables de la gravedad de la enfermedad y cuyas consecuen-
durante toda la gestación y embarazo tardío (edad superior a cias son nefastas para el desarrollo y la viabilidad del feto " ID="I268.90.12">í"1.
40 años) [241. La hipertensión arterial crónica multiplica el ries- En la placenta, la isquemia tisular provoca hipoxia fetal cró-
go por seis y la diabetes por tres. Las descendientes de una nica que ocasiona oligoamnios, retraso del crecimiento
mujer que sufrió preeclampsia tienen un riesgo de tres a intrauterino e incluso sufrimiento fetal (ritmo cardíaco fetal
ocho veces mayor; no se conoce aún la forma de transmisión
anormal, disminución de los movimientos espontáneos).
del riesgo. Se calcula que la prevalencia de preeclampsia es
del 16 % en las mujeres que padecen una enfermedad autoin-
munitaria (anticoagulante circulante, anticuerpo lúpico, anti-
cuerpo anticardiolipina, síndrome de antifosfolípidos). En la clínico de la
hiperhomocisteinemia (mutación del gen de la metileno- Enfoque enfermedad
tetrahidrofolato reductasa) y en la trombofilia hereditaria [41)
(déficit de proteína C, de proteína S y de antitrombina III, PREVISIÓN Y DIAGNÓSTICO PRECOZ
mutación de la protrombina, resistencia a la proteína C acti- Aunque los síntomas de la preeclampsia no aparecen en gene-
vada, en particular en su forma homocigótica) [661 también se ral hasta después de la 20a semana de gestación, las causas se
ha descrito aumento del riesgo de preeclampsia. En las muje- manifiestan entre la 8’ y la 12a semanas. Para el diagnóstico
res gestantes con nefropatía crónica o con
trasplante renal el precoz de la preeclampsia, se ha propuesto un gran número
riesgo de preeclampsia es del 30 al 38 % ’"1. de pruebas clínicas, bioquímicas y biofísicas " ID="I268.10 .7">1", aunque nin-
guna de ellas ha demostrado su eficacia, aparte del aumento
del hematócrito como signo de hemoconcentración y de una
LESIÓN ENDOTELIAL Y PLACENTARIA (fig. 1) anomalía bilateral de la velocidad sanguínea en las arterias
La presencia del feto, a diferencia de la del trofoblasto, no es uterinas ~9’. La uricemia y el recuento de plaquetas permiten
necesaria para el desarrollo de la enfermedad, porque se han apreciar la gravedad pero no tienen valor predictivo [131.
2
SEGUIMIENTO CLÍNICO tar una hemólisis (presencia de esquistocitos). El hematócri-
Y ANÁLISIS
DE LABORATORIO EN FORMAS to evalúa la volemia materna: una cifra o superior a la
igual
MODERADAS DE PREECLAMPSIA
normal (es decir 40 %) indica hipovolemia, que precede en 4
Las consultas y evaluaciones generales deben ser frecuentes semanas, como promedio, a la aparición de retraso del creci-
para diagnosticar precozmente una complicación, en parti- miento intrauterino. El recuento de plaquetas permitirá
cular cuando se han detectado uno o varios factores de ries- diagnosticar la trombocitopenia signo de trastornos de la
go. La presión arterial debe regularse para prevenir las com- coagulación y de microangiopatía. La determinación de
plicaciones orgánicas. transaminasas séricas es sistemática, especialmente si existe
dolor epigástrico, náuseas, vómitos o trombocitopenia. La
t Examen clínico uricemia se debe cuantificar al comienzo del embarazo, por-
que su elevación brusca indica una complicación. La cifra de
La anamnesis permite definir el tipo de hipertensión (hiper- 350 pmol/1 constituye un signo de alarma. En presencia de
tensión arterial crónica o hipertensión gravídica pura), des- un valor superior a 450 umol/1 o un aumento de más de
cubrir antecedentes familiares o personales que predisponen 60 pmol/1 en 1 mes, existe riesgo materno y fetal.
a la afección, detectar factores de pronóstico (accidentes debi-
La ecografía permite el diagnóstico precoz de hipotrofia fetal
dos a hipertensión gravídica durante embarazos anteriores,
hematomas de y la evaluación del volumen de líquido. Se combina con
en particular retroplacentarios) o gravedad velocimetría Doppler de las arterias uterinas: lapresencia de
(existencia de signos funcionales: cefalea, trastornos visuales, una escotadura en la curva de velocidad indica vasocons-
somnolencia, dolor epigástrico en barra, disminución de la
tricción distal y precede a la aparición de la hipertensión
diuresis) ~5’~. Aunque una preeclampsia puede ser grave de
arterial y de la hipotrofia fetal. Durante la exploración, tam-
entrada sin hipertensión arterial intensa, la determinación de
bién se puede estudiar la circulación arterial fetal (umbilical
la presión arterial, usando el método de auscultación con
manómetro de mercurio, debe ser cuidadosa, ya que la defi- y cerebral).
nición de la enfermedad se basa en la cifra de presión arterial
diastólica que se aprecia cuando desaparecen los ruidos de Organización práctica del seguimiento
Korotkoff en una mujer en ligero decúbito lateral izquierdo Tanto las mujeres como los médicos generales deben conocer
(30°) después de un período de reposo. Para tomar una deci- los signos precoces de la enfermedad [51]. La gravedad poten-
sión terapéutica, también se deben tener en cuenta los signos
cial de la hipertensión gravídica exige un atento seguimiento
funcionales y las cifras de presión arterial sistólica. La protei-
nuria se debe valorar mediante determinación en orina de 24 que comprende la información brindada a la mujer, segui-
miento domiciliario, consultas al especialista e ingreso de día.
horas: es significativa cuando es igual o superior a 300
La organización de las redes asistenciales permite orientar a
mg/24h. Se puede calcular en orina recién emitida usando las mujeres con preeclampsia hacia la unidad hospitalaria
tiras reactivas: una reacción igual o superior a 2+ en dos
muestras recogidas con más de 4 horas de intervalo es signi- mejor adaptada a su estado cuando llegue el momento. El
ritmo de las consultas y la repetición de las pruebas comple-
ficativa. Con esta técnica, se corre el riesgo de detectar falsos
mentarias dependen de la evolución de la enfermedad.
positivos si el pH urinario es superior a 8 y/o la densidad Durante el embarazo la consulta es mensual y quincenal, o
urinaria es superior a 1 030, así como falsos negativos si la
incluso semanal, si aparece hipertensión arterial o si los exá-
densidad urinaria es inferior a 1 010. En los embarazos nor-
menes de laboratorio muestran alguna anomalía. La presión
males, también se observan edemas, pero éstos adquieren arterial a domicilio se debe determinar dos veces por semana.
significación cuando se asocian con hipertensión arterial y Los exámenes de laboratorio iniciales comprenden todas las
proteinuria, aparecen rápidamente (manifestados inicialmen-
te por aumento de peso muy importante) o se localizan en pruebas ya descritas (cf. supra); posteriormente se limitan,
con la misma frecuencia que las consultas, a la detección de
regiones no declives (cara, manos). Pueden no estar presen- la uricemia y transaminasas séricas, recuento de plaquetas,
tes durante una hipertensión gravídica grave. El examen clí-
nico completo también debe incluir exploración neurológica hematócrito y albúmina y azúcar en orina (completándose,
si es necesario, con el análisis cuantitativo en orina de 24
para detectar reflejos osteotendinosos intensos o incluso poli-
cinéticos. La determinación de la altura uterina permite apre- horas). La detección de albúmina se efectúa en el domicilio,
ciar la hipotrofia fetal; esta práctica sigue siendo válida debi- al mismo tiempo que la toma de la presión en caso de pro-
do a su simplicidad, aunque la ecografía es una técnica com- teinuria.
plementaria indispensable. El número de movimientos acti- La frecuencia de las ecografías depende del tiempo de gesta-
vos fetales y el estudio del ritmo cardíaco fetal no son ele- ción, de los valores de la presión y del crecimiento fetal
mentos clave de control, pero la disminución brusca de los (quincenal o mensual, según el tamaño del feto). La veloci-
primeros y la falta de fluctuación o desaceleración del ritmo metría Doppler también se practica mensualmente, excepto
cardíaco son signos de alarma. si la presión arterial es inestable, en cuyo caso se puede prac-
ticar con mayor frecuencia. El estudio del ritmo cardíaco
t Exámenes de laboratorio y ecografías fetal se realiza una o dos veces por semana a partir de la
semana 28, en una mujer no hospitalizada con hipertensión
Algunas pruebas forman parte del estudio general clásico de gravídica.
la hipertensión arterial: fondo de ojo, electrocardiograma,
determinación sanguínea y urinaria de glucosa, urea, creati-
nina e iones. Su interpretación debe tener en cuenta la DIAGNÓSTICO DE COMPLICACIONES ORGÁNICAS
influencia del embarazo normal, de ahí que la concentración DE LA PREECLAMPSIA
de creatinina en la sangre se considere anormal si es superior Las complicaciones orgánicas determinan la gravedad.
a 65 umol/l. La detección de anticuerpos circulantes (sín- Pueden poner de manifiesto la enfermedad o complicar su
drome de antifosfolípidos, anticuerpo lúpico, anticuerpo evolución, especialmente en caso de error terapéutico o pro-
anticardiolipina) y la valoración del riesgo de trombosis longación injustificada del embarazo [511.
(valoración de la proteína C, proteína S y antitrombina III,
mutación del factor II o del factor V) son más específicas.
También en este caso, la interpretación de los resultados Complicaciones cardiorrespiratorias [78]
debe tener en cuenta la influencia del embarazo normal. La La preeclampsia se caracteriza por aumento de la resistencia
determinación del número de glóbulos rojos permitirá detec- vascular periférica de origen adrenérgico relacionada con

3
hipovolemia relativa con respecto a un embarazo normal, cortical que puede justificar a largo plazo la práctica de biop-
dando lugar a un gasto cardíaco inadecuado 1"1. El gasto car- sia del parénquima renal 111. Desde el punto de vista funcional,
díaco puede estar elevado al comienzo de la enfermedad o la interpretación de los resultados es compleja. Paralelamente
cuando se practica llenado vascular y administración de a una evidente sobrecarga hidrosalina y a una
posible hipo-
vasodilatadores; un verdadero estado hipercinético revela la volemia eficaz, una pérdida de sal podría contribuir a la hipo-
enfermedad ’6’. En las formas más graves no tratadas o trata- natremia observada en las formas más graves de preeclamp-
das con betabloqueantes, el gasto cardíaco disminuye [901. sia "l. La evaluación de la función renal mediante determina-
Aunque los resultados de la valoración de catecolaminas cir- ción de la creatinina en la sangre debe tener en cuenta los
culantes son a menudo contradictorios, el registro de la acti- valores observados durante el embarazo normal: una creatini-
vidad simpática neuromuscular demuestra la existencia nemia «normal» en una mujer no gestante indica una reduc-
constante de un tono adrenérgico de base elevado ]29,78J. En las ción del 50 % en la filtración glomerular.
mujeres con preeclampsia, existe hiperreactividad neurohu-
moral con las modificaciones posturales [43J. La vasoconstric-
ción venosa periférica provoca movilización de la sangre
t Complicaciones hepatoviscerales y hematológicas
hacia el compartimiento vascular cardiopulmonar (2l.70J. A El síndrome HELLP complica el 20 % de las preeclampsias;
se define como asociación de hemólisis (esquistocitos circu-
pesar de la existencia de un volumen sanguíneo circulante
inferior al que se observa en el embarazo normal, la precar- lantes, haptoglobina baja, bilirrubina total igual o superior a
ga ventricular izquierda no está modificada por la pree- 12 mg/1, actividad lacticodeshidrogenasa total superior a
clampsia. La curva de función ventricular izquierda está 600 UI/1), citólisis hepática (ASAT y alanina aminotransfera-
sa superior a 70 UI/1) y trombocitopenia (recuento de pla-
generalmente desplazada hacia arriba y a la izquierda. En el
20 % de las mujeres con preeclampsia, una auténtica miocar- quetas inferior a 100 x 109/1) [52]. Cuando aparece el síndrome
diopatía dilatada se acompaña de aplanamiento hacia la HELLP, el dolor epigástrico en barra es casi constante (90 %
derecha de la curva de función ventricular; esta circunstan- de los casos) y las náuseas frecuentes (40 % de los casos); la
cia dificulta la evaluación del llenado ventricular izquierdo presión arterial es normal en el 10 al 30 % de los casos. Esta
mediante la determinación de la presión venosa central [10. " ID="I270.25.10">14J. situación es transitoria; la asociación de hipertensión arterial
El mecanismo del edema pulmonar hemodinámico durante y síndrome HELLP es especialmente propicia a la aparición
la preeclampsia es complejo. Con frecuencia se piensa que se de eclampsia [581.
debe a una elevación de la presión hidrostática vascular en El síndrome HELLP indica la presencia de isquemia visceral
caso de llenado vascular intempestivo asociado a un trata- secundaria a la microangiopatía y a la lesión endotelial; ade-
miento antihipertensivo que interfiere con el inotropismo más, no es excepcional la aparición de pancreatitis de origen
cardíaco (betabloqueante o calcioantagonista). Las anoma- vascular. La hemólisis intravascular es consecutiva a la des-
lías de la permeabilidad capilar manifestadas por aumento trucción de hematíes en los depósitos de fibrina endoteliales;
del volumen intersticial y reducción importante de la pre- anemia aguda y orina de color oscuro (vino de Oporto) son la
sión oncótica son factores que influyen significativamente I65J. manifestación clínica de hemólisis intravascular grave, cuyo
La gravedad de la hipoxemia vinculada con el edema pul- valor pronóstico es muy desfavorable. La citólisis hepática
monar obliga con frecuencia a la práctica de ventilación asis- provoca necrosis periportal con depósitos fibrinosos intrasi-
tida " ID="I270.37.2">[97J. La inundación alveolar subsiguiente aumenta debido nusoidales. La elevación de la presión intravascular hepática
a la baja capacidad residual funcional de la mujer gestante y es responsable de los hematomas intraparenquimatosos o
a la eventual reducción de la distensibilidad torácica secun- subcapsulares y de la ascitis. Con frecuencia, después de la
daria a infiltración de la pared. La sobrecarga del comparti- citólisis inicial, se produce hepatitis colestásica. En la inter-
miento intersticial explica el edema faringolaríngeo, cuya pretación de la elevación de las transaminasas, se debe tener
en cuenta un posible origen extrahepático de las enzimas. Las
importancia es proporcional; generalmente es asintomático,
pero se puede agravar durante el parto, provocar obstruc- transaminasas aumentan debido a la lisis de hematíes o a
ción de las vías respiratorias con estridor y hacer necesaria la lesión del músculo estriado esquelético; en el segundo caso,
intubación traqueal que puede facilitarse con administración se observa elevación de la creatinina cinasa total, que refleja
de corticoides [7]. la intensidad de la hipoperfusión tisular periférica. La trom-
bocitopenia es consecuencia de un aumento de la destrucción
a Complicaciones renales periférica y del consumo asociado a la lesión endotelial; en el
15 % de los casos, precede a la aparición del síndrome
La glomerulopatía presenta varios aspectos: aparte de las HELLP. En el 18 al 36 % de las mujeres con síndrome HELLP,
lesiones vasculares asociadas a la antigüedad de la hiperten- se observa asociación de trombocitopenia y coagulopatía
sión arterial, una endoteliosis glomerular es patognomónica intravascular acompañada de reducción de la antitrombina
de la afección y reversible después del parto. Puede estar III y elevación de los D-dímeros circulantes " ID="I270.1 9.8">[42]. En las formas
asociada a hialinosis segmentaria y focal en las formas más graves de la enfermedad, puede haber, además, una trombo-
graves de hipertensión arterial. La vasoconstricción arterial citopatía. El síndrome HELLP se debe considerar como el
y la lesión endotelial provocan reducción de la filtración glo- preludio de una posible insuficiencia multiorgánica [30,36].
merular frecuentemente limitada, pero se pueden producir Paralelamente a la existencia de esta trombocitopenia, las
lesiones isquémicas. formas graves de preeclampsia también se acompañan de un
La proteinuria es signo de afección renal; es poco selectiva, de estado de hipercoagulabilidad con aumento de la agregación
intensidad variable (de 0,5 a 12 g/1) y puede dar lugar a un plaquetaria y disminución de la concentración de antitrom-
auténtico síndrome nefrótico. Con frecuencia, la proteinuria bina III proporcional a la fuga proteica urinaria. Para valorar
aumenta en los embarazos prolongados y tratados, sin que el equilibrio entre riesgo hemorrágico y riesgo de trombosis,
tenga un valor pronóstico desfavorable 111. La insuficiencia se deben realizar exámenes de laboratorio que pueden
renal aguda con anuria es poco frecuente; se presenta sobre incluir tromboelastograma y tiempo de sangría.
todo en mujeres con hipertensión arterial crónica o nefropatía
vascular preexistente, en ocasiones desconocida. La hipovole-
mia puede favorecer una necrosis tubular, en particular si
t Complicaciones hemorrágicas
existe, simultáneamente, coagulopatía: esta asociación se Algunas complicaciones hemorrágicas son peligrosas, por-
observa en caso de aparición de hematoma retroplacentario. que manifiestan la gravedad de las lesiones orgánicas y pro-
En presencia de anuria persistente, se debe sospechar necrosis vocan un estado de choque hipovolémico hemorrágico.

4
Hematoma retroplacentario ma intracerebral es menos frecuente (10 % de las lesiones
En el 4 % de las preeclampsias graves se presenta hematoma macroscópicas). Se presenta en forma de zonas espontánea-
mente hiperdensas, de localización subtentorial, con efecto
retroplacentario y el síndrome HELLP se acompaña de des- de masa y acompañada a veces de hemorragia intraventri-
prendimiento placentario en el 16 % de los casos. La consti- cular. Su pronóstico es desfavorable con una tasa de morta-
tución del hematoma se diagnostica por dolor abdominal de
lidad del 60 al 80 %. Estas lesiones se asocian a la microan-
aparición brusca con hipertonía uterina, hemorragia vaginal, giopatía y a la coagulopatía. Coinciden con una pérdida de
signos de sufrimiento fetal agudo y coagulopatía de consu- la autorregulación de la vasomotricidad cerebral, de tal
mo. El hematoma retroplacentario puede ser revelador de la
manera que pueden aparecer lesiones isquémicas por reduc-
enfermedad, sobre todo en caso de preeclampsia sobreaña- ción del volumen circulatorio (por minuto) secundario a un
dida. El pronóstico fetal es desfavorable: el riesgo de muerte
tratamiento antihipertensivo inadecuado, choque hemorrá-
intrauterina por anoxia es mayor cuanto más precoz ha sido
la proteinuria (antes de las 20 semanas) y cuanto peor regu- gico, hipertensión intracraneal e, incluso, por el resultado
hemodinámico de hiperventilación asociada a las lesiones
lada haya estado la hipertensión íll.
neurológicas, o secundaria a la ventilación asistida.
La TC y la RM cerebral no se realizan rutinariamente debido
Hematoma subcapsular hepático a la falta de paralelismo anatomoclínico. Deben practicarse

Esta complicación es testimonio del síndrome HELLP en el en caso de eclampsia, coma poscrítico prolongado o apari-

95 % de los casos y se presenta durante la evolución en el 1 ción de signos de focalización, para detectar hemorragia
al 4 %. El hematoma se localiza habitualmente en el lóbulo intracraneal o trombosis vascular. Por último, el síndrome
derecho del hígado y se manifiesta mediante dolor violento HELLP asociado a la eclampsia agrava el pronóstico de la
en el hipocondrio, en ocasiones con irradiación escapular; la enfermedad 111; indica la existencia de insuficiencia multior-
confirmación se obtiene mediante ecografía o tomografía gánica debida a la microangiopatía. En esta circunstancia,
computadorizada (TC). Como norma general, se realiza tra- según la experiencia, la mortalidad materna es del 2 %,
tamiento conservador, controlando ecográficamente la mientras que la morbilidad fetal es más elevada, porque esta
asociación aparece más precozmente que la eclampsia aisla-
regresión espontánea. En ocasiones, se puede practicar da (33 frente a 35 semanas) y la mortalidad neonatal es del 7
embolización. En un 2 % de los casos, se produce ruptura,
al 18 %.
que es motivo de laparotomía hemostática ante un estado de
choque hemorrágico de pronóstico desfavorable (mortali-
dad del 80 %) [99].
" ID="I271.94.1">Complicaciones infecciosas
Un aumento de la incidencia de endometritis, pielonefritis o
Complicaciones neurológicas infecciones parietales indica la probable existencia de una
La aparición de eclampsia es excepcional cuando el segui- disfunción inmunitaria [51].
miento durante el embarazo es constante, la presión arterial se
regula con vasodilatadores que limitan el vasoespasmo cere- COMPLICACIONES FETALES
bral y el parto se realiza antes de la crisis convulsiva o en el
momento de aparición de los signos prodrómicos. Los signos
La isquemia placentaria provoca hipoxia tisular crónica del
de sufrimiento neurológico son hiperreflexia osteotendinosa, feto. La intensidad de la hipoperfusión fetal se evalúa
clonos en las extremidades, somnolencia, confusión mental, mediante el flujo sanguíneo umbilical (falta o inversión del
trastornos oculares y sobre todo, en el 60 al 80 % de los casos, flujo diastólico) y cerebral (redistribución del flujo hacia el
cefalea en casco o frontal, intensa, pulsátil, acompañada de encéfalo). La isquemia crónica es responsable de oligoam-
nios, retraso de crecimiento intrauterino con interrupción
vértigo. La lesión subyacente a los trastornos oculares por lo del crecimiento en el control ecográfico, anomalías del ritmo
general es un edema retiniano; puede existir desprendimien- cardíaco fetal y disminución de los movimientos fetales
to de retina o espasmos vasculares. La ceguera cortical es
excepcional y se caracteriza por falta de recorrido visual y espontáneos. Además de la constitución de un hematoma
supresión del parpadeo, lo que contrasta con la conservación retroplacentario, el conjunto contribuye a la extracción pre-
matura de un feto hipotrófico, con las consecuencias de
de los reflejos fotomotores " ID="I271.43.5">[1 ]. Se asocia a menudo a una forma
inmadurez respiratoria y cerebral e incluso muerte fetal
grave de preeclampsia y precede o sigue a una crisis convul- intrauterina.
siva. La recuperación suele ser total en el plazo de horas o
días. Según los autores, de 54 casos, la eclampsia está siempre
precedida por elevación de la presión arterial y aparición o DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
empeoramiento de los edemas. El electroencefalograma DE LAS COMPLICACIONES VISCERALES
muestra anomalías difusas en el 70 % de los casos y disminu- DE LA PREECLAMPSIA
ción de la velocidad localizada en el 30 % de los casos.
Las lesiones intracraneales observadas en el transcurso de Diagnóstico diferencial de trombocitopenia aislada
las crisis convulsivas de la eclampsia son edematosas o La trombocitopenia por aloinmunización de origen fetal y la
hemorrágicas. Se explican por la hipertensión y la isquemia púrpura trombocitopénica autoinmunitaria no se acompa-
secundaria a la lesión vascular y al vasoespasmo. Se pueden ñan de hipertensión arterial ni de proteinuria; el diagnóstico
desarrollar lesiones sin hipertensión arterial intensa: un se basa en el descubrimiento de anticuerpos antiplaqueta-
coma sin convulsiones puede ser un modo de presentación. rios. La trombocitopenia asociada a lupus eritematoso dise-
En el 50 % de las mujeres con eclampsia, se encuentra edema minado con síndrome de antifosfolípido plantea problemas
cerebral difuso o, con mayor frecuencia, posterior. Su exten- de diagnóstico, porque este síndrome favorece la aparición
sión es proporcional a la duración de las convulsiones. La TC de la preeclampsia; la determinación cuantitativa de los anti-
permite observar hipodensidad de la sustancia blanca sub- cuerpos contribuye al diagnóstico.
cortical, que no capta el contraste. El edema es reversible con Las trombocitopenias medicamentosas pueden deberse a
el tratamiento clínico. Las hemorragias corticales y subcorti- aumento de la destrucción periférica, toxicidad propia o
cales son frecuentes, corresponden a microinfartos cerebra- mecanismo inmunológico. Los medicamentos que pueden
les de localización esencialmente posterior, que se observan provocar trombocitopenia en una mujer embarazada con
mejor mediante resonancia magnética (RM). Estas lesiones preeclampsia son: heparina, ampicilina, cefalosporinas, alfa-
también son reversibles con tratamiento clínico. El hemato- metildopa, hidralazina, difenilhidantoína. Si se ha prescrito
5
un tratamiento con estos medicamentos, debe interrumpirse Esteatosis hepática aguda gravídica
y sustituirse en caso de necesidad, mientras se realizan los Es un cuadro muy similar al síndrome HELLP, aunque el
exámenes de laboratorio de diagnóstico.
substrato-histológico es notablemente diferente: se observan
microvesículas lipídicas en el interior de hepatocitos pálidos
Diagnóstico diferencial del síndrome HELLP con núcleo central; los focos de necrosis hepatocelular son

Esimportante conocer las afecciones hepáticas que pueden excepcionales. Dado que en el 50 % de las mujeres con estea-
tosis hepática aguda gravídica se observa preeclampsia, se
aparecer durante el embarazo, aparte del síndrome HELLP, ha planteado una relación fisiopatológica con el síndrome
porque algunas justifican un tratamiento específico o no HELLP. La esteatosis hepática aguda gravídica se manifiesta
necesitan la interrupción del embarazo. con ictericia de retención acompañada de vómitos, hepatal-

gia y epigastralgia. La asociación con síndrome poliuropoli-


Hepatitis dípsico orienta este diagnóstico. Los exámenes de laborato-
rio ponen constantemente de manifiesto una insuficiencia
Puede ser vírica o medicamentosa, sin implicación sobre el
término del embarazo con excepción de una forma fulmi- hepatocelular en el curso de esteatosis hepática aguda graví-
dica con hipoglucemia. El déficit de producción de factores
nante. El diagnóstico de hepatitis vírica se basa en el descu-
de la coagulación provoca coagulopatía intravascular dise-
brimiento del contagio y la cuantificación de marcadores minada en el 75 % de los casos. La ecografía y la TC hepato-
biológicos. La incidencia de hepatitis herpética, febril y leu- biliar no tienen sensibilidad ni especificidad diagnóstica. La
copénica aumenta durante el embarazo. La hepatitis medi- afección evoluciona hacia la encefalopatía con síndrome
camentosa habitualmente es pruriginosa y necesita la inte-
hepatorrenal. La muerte materna se puede precipitar por
rrupción inmediata del tratamiento causal. complicaciones hemorrágicas, en particular hematoma sub-
capsular hepático. El diagnóstico de esteatosis hepática
Colecistitis aguda litiásica aguda gravídica se establece formalmente mediante biopsia
Podría ser favorecida por el embarazo, que aumenta el depó- hepática, debiéndose valorar el beneficio frente al riesgo,
incluso cuando se realiza por vía transyugular. El diagnósti-
sito de sedimento vesicular; se diagnostica fácilmente co diferencial entre esteatosis hepática aguda gravídica y
mediante práctica simultánea de examen clínico, pruebas de síndrome HELLP grave no tiene consecuencias terapéuticas
laboratorio y ecografía.
importantes ya que, en ambos casos, es necesario interrum-
pir el embarazo, cualquiera que sea el tiempo de gestación,
Colestasis gravídica después de una reanimación adecuada. Este tipo de atención
activa mejora el pronóstico de la afección, con reducción de
En el 95 % de los casos, se pone de manifiesto por la presen-
la mortalidad del 75 al 25 % 111.
cia de subictericia pruriginosa con clara elevación de las
transaminasas (30 veces el valor normal). Incide en el 0,2 al
0,5 % de los embarazos; a menudo se desencadena por toma Diagnóstico diferencial de la eclampsia
de progesterona. La creatininemia y el recuento de plaquetas La TC cerebral permite establecer el diagnóstico etiológico
son normales. de la mayoría de las complicaciones neurológicas del emba-
razo que no constituyen una verdadera eclampsia.
Síndrome hemolítico-urémico
y púrpura trombocitopénica trombótica Trombosis venosa cerebral
Deben diagnosticarse rápidamente para prescribir un trata- Es secundaria a la hipercoagulabilidad gravídica asociada a
miento específico (inmunoglobulinas, plasmaféresis, cortico- un cuadro patológico trombogénico (déficit de factor antico-
terapia) y mejorar el pronóstico caracterizado por una tasa agulante, infección y deshidratación). Esta complicación
de mortalidad elevada a largo plazo (superior al 40 %) [551. aparece durante las 3 primeras semanas después del parto.
Síndrome hemolítico-urémico y púrpura trombocitopénica Se manifiesta por cefalea y convulsiones en el 80 % de los
trombótica son dos expresiones de un mismo proceso fisio- casos, con coma poscrítico o déficit motor en el 50 % de los
patológico no específico del embarazo. La púrpura trombo- casos. La evolución en general es favorable.

citopénica trombótica es más frecuente; asocia trombocito-


penia, microangiopatía hemolítica, afección neurológica, Embolia arterial cerebral
insuficiencia renal y fiebre. El diagnóstico diferencial es difí-
cil en el posparto porque el síndrome HELLP puede apare- Es responsable de la mayoría de los accidentes isquémicos.
cer en una mujer normotensa y, a la inversa, la púrpura Aparece durante la segunda mitad del embarazo o en el pri-
mer mes después del parto. Los síndromes deficitarios son
trombocitopénica trombótica y el síndrome hemolítico-uré- más frecuentes que las convulsiones. Se debe pensar en el
mico pueden ir acompañados de hipertensión arterial. En
realidad, más que un diagnóstico diferencial, el síndrome origen intracardíaco del trombo.
hemolítico-urémico es, tal vez, la expresión final de un pro-
ceso fisiopatológico en el que el síndrome HELLP es la Malformación vascular cerebral
expresión intermedia (22]. (aneurisma o malformación arteriovenosa)
Habitualmente es revelada por el embarazo debido a las
Síndrome de Budd-Chiari modificaciones estructurales vasculares gravídicas. El cua-
dro clínico depende de la localización de la malformación.
Está favorecido por la tendencia procoagulante del embara- Puede haber variaciones de presión dependiendo de una
zo, en particular cuando existe un déficit de proteína anticoa- eventual hipertensión intracraneal.
gulante o síndrome de antifosfolípido. La asociación de
hepatomegalia dolorosa, ascitis y fiebre excepcionalmente es Embolia amniótica
completa; la hipertensión arterial puede coincidir con la
afección. El diagnóstico se confirma mediante pruebas de Puede asociar, durante el parto, coma o convulsiones e insu-
imagen de las venas suprahepáticas. Si no se trata, evolucio- ficiencia cardiorrespiratoria con coagulopatía intravascular
na hacia hipertensión portal y necrosis hepatocelular. diseminada. El diagnóstico debe hacerse, en este caso, por

6
eliminación y necesita confirmación anatomopatológica en En caso de anomalías de la función renal, está permitido el
caso de muerte. tratamiento con diuréticos. Los tratamientos que interfieren
con el sistema renina-angiotensina (inhibidores de la enzima

Otros de conversión y antagonistas de los receptores AT1 de angio-


tensina) deben interrumpirse antes del embarazo, en la
Epilepsia, intoxicación hídrica (durante tratamiento con oxi- medida de lo posible; en caso contrario, se impone la inte-
tocina), toxicidad por anestésicos locales, síncope vagal e rrupción precoz y un tratamiento alternativo.
hipoglucemia se descartan fácilmente por la anamnesis. En cualquier caso, el seguimiento debe ser riguroso y exige
control clínico y exámenes de laboratorio repetidos de la
madre (cf. supra). El desarrollo y el bienestar fetal se evalú-
an mediante seguimiento del ritmo cardíaco fetal y explora-
Modalidades terapéuticas ciones ecográficas. La evolución de la enfermedad en estas
formas moderadas exige reflexionar acerca de la interrup-
FORMAS MODERADAS ción del embarazo cuando el tiempo de gestación es superior
Aunque la eliminación del estrés físico y psíquico es impor- a las 37 semanas.
tante, se discute la eficacia del reposo absoluto y no debe
retardar la administración de antihipertensivos. Desde el
CRITERIOS Y MODALIDADES DE HOSPITALIZACIÓN.
punto de vista dietético, se debe recordar a las mujeres CRITERIOS DE INTERRUPCIÓN DEL EMBARAZO
hipertensas que la dieta sin sal es inútil (salvo en algunos
casos de hipertensión arterial crónica dependiente del sodio)
Hospitalización
e incluso peligrosa ya que el régimen sin sal agrava la hipo-
volemia relativa que acompaña constantemente a la hiper-
El seguimiento maternofetal dará la pauta y los criterios de
tensión gravídica. El aporte de calcio y de magnesio podría hospitalización dependen de la regulación insuficiente de la
ser beneficioso en poblaciones con estas deficiencias. A pesar presión arterial, la aparición de complicaciones viscerales o
la repercusión de la enfermedad en el feto (cuadro I).
de que, en los estudios publicados, se señala la ineficacia evi-
dente de los diferentes regímenes, se recomienda consultar La hospitalización prepara a las mujeres para el parto en la
un especialista en dietética cuando el aumento de peso es mejor condición hemodinámica general y regional y con los
anormal [61]. mejores resultados de las pruebas de coagulación.
El tratamiento antihipertensivo reduce la proteinuria, la inci-
dencia de las formas graves y la necesidad de hospitaliza- Edad gestacionall
ción " ID="I273.25.2">[47]. Está indicado en caso de presión arterial diastólica La edad gestacional es un elemento de decisión importante.
superior a 90 mmHg. Cuando el tiempo de gestación es corto, se puede realizar
Alfametildopa: es el medicamento más utilizado. No se han tratamiento conservador para permitir la continuación del
comunicado efectos adversos a corto plazo en el feto o el desarrollo del feto en un servicio de maternidad donde tam-
recién nacido, o a largo plazo en el niño. Se administra en bién se ofrezcan los siguientes servicios: reanimación neona-
dosis de 500 a 1 500 mg/d. Su eficacia es inconstante. Pueden tal, radiología intervencionista, cirugía, reanimación de
aparecer trastornos hepáticos, aunque son excepcionales. adultos y servicio continuo de laboratorios. El riesgo de este
Betabloqueantes: el atenolol disminuye la incidencia de pree- tratamiento depende de la evolución de la enfermedad ". ~°. 8~’.
clampsia, pero puede provocar disminución del volumen cir- Se puede considerar la interrupción del embarazo frente a
culatorio (por minuto) uteroplacentario, responsable de retra- un nuevo agravamiento de la enfermedad o durante el máxi-
so del crecimiento intrauterino íll]. Los resultados con respecto mo efecto de la corticoterapia para permitir que la madre
a los efectos adversos de los otros betabloqueantes son con- tenga un parto programado con anestesia peridural. En el
tradictorios ~9’~. Todos los betabloqueantes atraviesan la barre- primer caso, la urgencia y la anestesia general exponen a
ra placentaria y tanto el feto como el recién nacido pueden intubación traqueal difícil, inhalación de líquido digestivo,
presentar bradicardia o hipoglucemia. Los medicamentos que descompensación cardiorrespiratoria y crisis hipertensiva
se excretan por vía renal (atenolol) pueden persistir durante durante la laringoscopia.
largo tiempo en el recién nacido y provocar efectos secunda- Cuando el tiempo de gestación es superior a 34 semanas y se
rios hasta 72 a 120 horas después del nacimiento. Esto no trata de una forma grave, se debe proponer una modalidad
sucede con los medicamentos que se eliminan principalmen- de parto según las condiciones obstétricas.
te por vía metabólica (betaxolol, oxprenolol, labetalol, propra-
nolol), excepto si los metabolitos son activos (acebutolol, Criterios de interrupción del embarazo
metoprolol). Muchos equipos proponen la utilización del
labetalol sin que se hayan observado efectos adversos fetales La interrupción del embarazo está indicada en las tres cir-
o neonatales. No existen estudios a largo plazo en niños cuya cunstancias siguientes:
madre recibió betabloqueantes durante el embarazo. -

cuando el pronóstico del niño es, de entrada, desfavora-


Calcioantagonistas de tipo dihidropiridina: se utilizan en la prác- ble (forma grave que aparece antes de las 25 semanas, sufri-
tica clínica para el tratamiento de amenaza de parto prema- miento fetal crónico, retraso del crecimiento intrauterino
turo y de hipertensión gravídica sin complicación cardio- importante); se propone la interrupción del embarazo de
acuerdo con el método médico elegido por consenso entre el
rrespiratoria demostrada en el feto; ocupan un lugar predo-
minante como tratamiento de primera elección " ID="I273.54.7">[47,831, ya que obstetra, el pediatra y los padres;
tienen acción antioxidante " ID="I273.5 .4">1 1 . -

cuando el estado materno se degrada rápidamente


Inhibidores de la enzima de conversión y antagonistas de los recep- durante la hospitalización como lo demuestra:
tores AT1 de angiotensina: están contraindicados [261. . hipertensión arterial resistente a doble terapia antihi-
Diuréticos: sólo deben usarse en indicaciones específicas. pertensiva por vía intravenosa bien realizada;
En caso de hipertensión arterial crónica, se pueden conti-
o
oliguria persistente a pesar de la asociación de llenado
nuar los tratamientos anteriores, adaptando las dosis para vascular, diuréticos y vasodilatadores;
mantener una presión arterial sistólica próxima a 120 mmHg · disnea secundaria a edema pulmonar;
y una presión arterial diastólica inferior a 90 mmHg. A veces, microangiopatía evolutiva que, tratada con corticoides,
.

es necesario reducir la dosis durante el segundo trimestre. se asocia a trombocitopenia inferior a 100 x 109/1 o reduc-

7
Cuadro I. Criterios de de sión arterial media en el 20 %; un valor de presión arterial
-

hospitalización una paciente con pree-


media de 100 mmHg parece adecuada para una perfusión
clampsia. visceral satisfactoria. Si la presión arterial media es superior
a 140
mmHg, se administran inyecciones repetidas de nicar-
dipina (0,5 o 1 mg) en bolos intravenosos, para prevenir las
complicaciones neurológicas, seguido de infusión intraveno-
sa continua de un
antihipertensivo (labetalol, hidralazina,
nicardipina) [2]. Los efectos secundarios (hipotensión brusca,
necesidad de parto por cesárea, índice de Apgar bajo) pare-
cen menos frecuentes con los calcioantagonistas
y el labeta-
lol que con la hidralazina ~4’~. El labetalol reduce la taquicar-
dia refleja secundaria a la vasodilatación provocada por la
hidralazina y la nicardipina. Los excepcionales casos de bra-
dicardia fetal descritos durante el tratamiento con labetalol
por vía intravenosa no requieren tratamiento. Si los betablo-
queantes están contraindicados, se puede usar clonidina. En
la figura 2 se resumen las modalidades de administración del
tratamiento antihipertensivo.

Llenado vascular
El llenado vascular puede ser necesario en el curso de la pre-
eclampsia, en mujeres con hipovolemia relativa con respecto
al embarazo normal y cuando se administra tratamiento
vasodilatador y simpaticolítico [18]. No se debe practicar de
forma sistemática debido al riesgo vital asociado al desarro-
llo de edema pulmonar o incluso al agravamiento de un
edema cerebral ~z3, ~3]. Un 40 % de las muertes en mujeres con
preeclampsia se produce por insuficiencia respiratoria 118.92].
ción mayor del 20 % del recuento de plaquetas, o si existe Las indicaciones del llenado vascular son:
hemólisis manifiesta; -

disminución brusca y significativa de la presión arterial


e
persistencia de dolor abdominal o vómitos; cuando se inicia tratamiento antihipertensivo por vía intra-
e
pródromos de eclampsia (ceguera cortical, cefalea); venosa ;
e
hiponatremia (= 130 mmol/1);
-

hipovolemia patente, que se manifiesta por hemoconcen-


hematoma subcapsular hepático;
e tración (hematócrito 40 %), en particular antes de anestesia
=

hematoma retroplacentario;
e peridural;
-
cuando el estado fetal empeora, como evidencian las
-

oligoanuria; si no existe hemólisis, se puede tolerar una


emisión urinaria de 100 ml/4 h; en caso contrario, está indica-
anomalías del ritmo cardíaco (desaceleración o disminución
do el llenado vascular cuando la oliguria es persistente; si esto
de la variabilidad), detención del crecimiento fetal, velocida-
no da resultado, se pueden asociar diuréticos del asa de Henle
des arteriales fetales anormales.
Si existen signos de sufrimiento fetal agudo, en particular
(furosemida o bumetanida) y dopamina (2 a 5 g/kg/min) [49];
si la diuresis con tratamiento es inferior a 500 ml/24 h, se
cuando hay hematoma retroplacentario, el nacimiento debe debe interrumpir el embarazo. La determinación repetida de
tener lugar en un centro hospitalario especializado. creatinina y potasio en la sangre permite valorar la gravedad
de la complicación visceral que, en ocasiones, requiere depu-
REANIMACIÓN EN LAS FORMAS GRAVES [51 ración extrarrenal, en especial cuando existe edema pulmo-
nar asociado.

Objetivos Se pueden usar soluciones cristaloides (Ringer lactato, cloru-


La reanimación de las mujeres que presentan una forma ro sódico 0,9 %), porque el edema pulmonar eventualmente
secundario a la perfusión es más fácil de controlar con los
grave de la enfermedad requiere la cooperación del aneste-
diuréticos. Sin embargo, está justificado el uso de soluciones
sista-reanimador, del obstetra y del neonatólogo, con el fin
de evaluar conjuntamente y a intervalos cortos a la madre y coloidales por su eficacia en cuanto a la expansión de volu-
men y al deseo de aumentar la presión oncótica. Las solu-
al niño y comparar regularmente riesgos y beneficios del tra-
tamiento conservador del embarazo. La duración de la rea- ciones de gelatina líquida y de dextrano están contraindica-
nimación es variable según el tiempo de gestación y la efica- das por la posibilidad de alergia. La seroalbúmina humana
cia del tratamiento. Los objetivos de la reanimación son el al 4 % se reemplaza con frecuencia por solución al 6 % de
control de la presión arterial para evitar lesiones viscerales hidroxietilalmidón de baja sustitución 111.
agudas, el ajuste del volumen sanguíneo circulante para El volumen de perfusión inicial, en 30 a 45 minutos, por lo
mantener la diuresis evitando el edema pulmonar, la correc- general es de 500 a 700 mi de cristaloides o de 250 a 500 mi
ción de anomalías de coagulación, el retraso de la aparición de hidroxietilalmidón. La velocidad recomendada de la per-
de lesiones endoteliales y la maduración pulmonar fetal. La fusión posterior de una solución cristaloide es de 85 ml/h. El
ventilación asistida y el tratamiento anticonvulsivo son aporte hídrico total, incluidas las bebidas, debe ser inferior a
necesarios en el curso de la eclampsia; la ventilación asistida 2 500 ml/24 h.
también puede ser necesaria cuando existe edema pulmonar La eficacia y la tolerancia del llenado vascular se suelen valo-
asociado a la enfermedad o a un error terapéutico. rar a partir de la presión arterial, la frecuencia cardíaca, la

pulsoximetría y la recuperación de la diuresis que pone de


manifiesto el restablecimiento de la perfusión renal. La
Tratamiento antihipertensivo monitorización invasiva se limita con frecuencia a la deter-
Se basa en la utilización de vasodilatadores intravenosos (16.781. minación de la presión venosa central, si no existe disfun-
El objetivo del tratamiento antihipertensivo es reducir la pre- ción ventricular izquierda patente. En pacientes en reanima-

8
ciosas periparto y provocar disfunción del eje hipotálamo-
Valor inicial de la presión arterial media (PAM) hipófisis-suprarrenal en la madre [56].
La transfusión de plaquetas es necesaria cuando su número
antes del parto es inferior a 50 x 109/1. La transfusión pla-
PAM 2:140 mmHg PAM < 140
mmHg quetaria puede ser poco eficaz o ineficaz en las formas más
Tratamiento de ataque:
graves del síndrome HELLP; en ocasiones, es necesario repe-
nicardipina en bolo
...

Tratamiento de mantenimiento: tirla. En caso de manifestación hemorrágica, coagulopatía


intravenoso, de 0,5 a 1 mg nicardipina en perfusión : intravascular diseminada o insuficiencia hepática, está indi-
o de 1 a 6 mgth
dihidralazina en o cada la transfusión de plasma fresco si el tiempo de Quick es
perfusión : ..

3 mg durante 30 minutos dihidralazina en perfusión : inferior al 40 %. La transfusión de hematíes no debe retra-


si tratamiento con MgS04 1 a 3 mg/h
sarse en caso de hemólisis o de coagulopatía, porque contri-

buye a estabilizar el proceso patológico. En las formas gra-


ves, rápidamente evolutivas y antes del parto, es urgente
Eficacia y tolerancia del tratamiento
corregir las anomalías de la coagulación mediante transfu-
sión de derivados sanguíneos lábiles, para prevenir una
PAM < 100 00 !s PAM 120 PAM > 120 Efectos secundarios
cefalea
taquicardia,
hemorragia cerebral mortal si se produce una crisis hiper-
tensiva.
Detención Tratamiento Biterapia: Reducción de dosis
de¡ Asociación:
tratamiento
de mante-
nimiento en
labetalol
perfusión,
-

+ labetalol en
Tratamiento de la eclampsia [60.951 (cuadro I1)
de 5 a 20 mg/h perfusión: de 5 a 20 mg/h La presión arterial debe regularse en las mismas condiciones
0 0
clonidina + clonidina que en la preeclampsia (reducción del 20 % de la presión arte-
(si 13- contraindicados) (si 13- contraindicados) rial media, que se mantiene próxima a 105 mmHg). Cual-
en perfusión: en perfusión:
15 a 45 Wh 1 5 a 45 quier hipertensión arterial amenazante se debe regular
mediante la administración de nicardipina en bolos intrave-
2 Tratamiento antihipertensivo en las formas graves de preeclampsia. nosos. Si aparecen crisis convulsivas generalizadas, los erro-
MgS04: sulfato de magnesio; ~: betabloqueantes. res terapéuticos pueden ser un factor agravante. La hipoten-
sión arterial secundaria a un tratamiento antihipertensivo
demasiado agresivo o a hipovolemia aguda mal controlada
tiene un efecto catastrófico sobre la presión de la perfusión
ción, una presión venosa central entre 8 y 12 mmHg es el
cerebral. El vasoespasmo cerebral es el principal mecanismo
objetivo habitual. Si existe edema pulmonar resistente al tra- que justifica la administración de vasodilatadores [98].
tamiento con diuréticos, oliguria persistente al llenado vas-
cular, hipertensión arterial intensa con doble tratamiento El sulfato de magnesio es el tratamiento de referencia, a pesar
intravenoso o miocardiopatía subyacente, se puede utilizar de su mecanismo de acción desconocido y de una eficacia no
cateterismo arterial pulmonar 121!.78]. La ecocardiografía se bien determinada ~95~. La dosis de carga de magnesio elimina el
puede usar si se dispone de los equipos para exploraciones espasmo vascular cerebral por su efecto inhibidor del calcio;
también se ha propuesto un efecto antiedematoso cerebral.
repetidas y de un profesional con experiencia 145]. Cuando se
puede colocar la sonda, la velocimetría aórtica por vía esofá- Después de una dosis de carga de 2 g de sulfato de magnesio
en perfusión durante 5 minutos, se administra una perfusión
gica es útil para seguir la evolución cardiovascular, aunque continua de 1 a 2 g/h hasta ello o 2° días después del parto.
se ha comunicado una infravaloración del 40 % del gasto
cardíaco 1681. Finalmente, el cateterismo arterial periférico per- No se recomienda una dosis de sulfato de magnesio superior
mite una medición precisa y continua de la presión arterial, a 6 g para controlar la crisis convulsiva, debido al riesgo de

así como la obtención repetida de muestras de sangre. Este paro respiratorio. Es preferible la administración de 10 mg de
catéter aumenta la comodidad de la paciente. diazepam seguida de la perfusión de mantenimiento de mag-
nesio [27]. La concentración plasmática terapéutica de magnesio
es de 2 a 3 mmol/1. Durante la perfusión de mantenimiento,
Tratamiento de la microangiopatía se debe realizar seguimiento horario de los reflejos osteoten-
y de la coagulopatía dinosos, frecuencia respiratoria, electrocardiograma y pulso-
En el síndrome HELLP, se han propuesto sustituciones plas- ximetría. La determinación de la concentración plasmática se
máticas con plasma fresco, por analogía con la púrpura realiza después de 1 hora de perfusión y luego cada 6 horas.
trombocitopénica trombótica y el síndrome hemolítico uré- Si existe oliguria y si la concentración de urea en la sangre es
mico. superior a 10 mmol/1, la velocidad de perfusión se debe redu-
La prostaciclina se ha utilizado en el síndrome HELLP del cir a 1 g/h. La toxicidad se manifiesta por desaparición de los
posparto, por su propiedad vasodilatadora y antiagregante reflejos osteotendinosos, debilidad muscular, náuseas, rube-
plaquetaria. En mujeres con síndrome HELLP, también se ha facción cutánea, somnolencia, diplopía o trastornos del habla.
practicado perfusión de antitrombina III (30 a 60 UI/kg) 148,671. Cuando la concentración de magnesio en la sangre es de 6 a 7
Ambas sustancias aumentan el riesgo de hemorragia duran- mmol/1, se produce paro respiratorio y parálisis y cuando
te el parto. supera los 12 mmol/1, hay que temer un paro cardíaco. En
Los glucocorticoides se usan actualmente para permitir la con- caso de sobredosificación, se debe detener la perfusión, admi-

tinuación del embarazo y para acelerar la remisión del síndro- nistrar oxígeno o incluso practicar ventilación asistida con
me HELLP del posparto. Su eficacia en la madre se ha obser- intubación traqueal, verificar la concentración de magnesio en
vado durante su empleo para facilitar la maduración pulmo- plasma y realizar perfusión de gluconato de calcio (1 g) por su
nar fetal (betametasona, 12 mg/d durante 48 horas) [46, 641. efecto antagonista del magnesio en la unión neuromuscular.
Reducen la trombocitopenia y la citólisis hepática. Si la utili- Las dosis altas tienen efecto antiagregante plaquetario con
zación es prolongada (> 48 horas), la betametasona se susti- alargamiento del tiempo de sangría. En mujeres tratadas con
sulfato de magnesio, se ha comunicado aumento del volumen
tuye por un derivado que no atraviese la barrera placentaria
de sangre expulsado durante el parto [321.
(prednisona). La mejoría del síndrome HELLP disminuye la
necesidad de derivados sanguíneos lábiles y la utilización de Los calcioantagonistas de tipo dihidropiridina son una alter-
anestesia peridural en el parto. Sin embargo, la corticotera- nativa. La nimodipina si no existe hipertensión arterial y la
pia puede aumentar la incidencia de complicaciones infec- nicardipina en caso de hipertensión arterial tienen efecto
9
Cuadro 11. - Tratamiento de la eclampsia.

GCS: índice de Glasgow.

antiespástico sobre la circulación cerebral (4,31]. No se reco- -

La trombocitopenia es moderada (aproximadamente 100


mienda la asociación de sulfato de magnesio y un calcioan- x 109 plaquetas/1), pero la enfermedad empeora rápidamen-
tagonista, porque potencia el bloqueo neuromuscular y te. La anestesia locorregional está contraindicada si las ven-
favorece la hipotensión. tajas (no hay criterio de intubación difícil, regulación eficaz
El tratamiento debe durar como mínimo 48 horas después de la presión arterial) no superan al riesgo. Cuando el riesgo
del parto y se prolonga en caso de crisis intercurrentes. asociado a la anestesia general es importante, es necesaria la
La oxigenoterapia es imperativa. Cuando el índice de anestesia locorregional. Si se ha colocado catéter peridural,
sólo se retirará durante el posparto si la coagulación es nor-
Glasgow es igual a 9, está indicada la intubación orotraqueal, mal. Se puede realizar raquianestesia con ayuda de una
que permite la ventilación asistida. Se realiza usando tiopen-
tal y anestesia local faringolaríngea. La administración (en el aguja de 25G si se debe realizar una maniobra al final del
servicio de urgencias) de plasma fresco y de unidades pla- parto o si se practica cesárea. Independientemente de la téc-
nica de anestesia locorregional, debe realizarse seguimiento
quetarias corrige las eventuales anomalías de la coagulación.
El interés de un tratamiento profiláctico con sulfato de mag- neurológico durante las 48 horas posteriores.
nesio cuando no existe eclampsia es discutido 111; en cambio,
-

La paciente ha recibido aspirina. En este caso, el riesgo de


es indispensable la rápida regulación de la hipertensión arte- anestesia locorregional es bajo pero no nulo 111. Es mayor si
rial con un calcioantagonista de tipo dihidropiridina. durante la preeclampsia existe agregación plaquetaria anor-
El tiopental es el anestésico de elección en caso de parto por mal y coagulopatía intravascular diseminada latentes. El sul-
cesárea de urgencia en un cuadro de eclampsia. El parto es fato de magnesio tiene actividad antiagregante plaquetaria ]321.
Sin embargo, se practican anestesias peridurales durante
imperativo después de una crisis de eclampsia; en muy una perfusión de sulfato de magnesio. Ningún examen de
pocos casos, se puede pensar en un tratamiento conservador, laboratorio (tiempo de sangría, tromboelastograma, pruebas
cuando el tiempo de gestación es muy corto, el estado de la
madre se ha estabilizado después de la crisis y no existe de agregación plaquetaria) permite prever el riesgo hemo-
sufrimiento fetal. En la mayoría de los casos, la mejoría neu- rrágico. En la práctica, probablemente se puede aceptar
anestesia locorregional cuando el riesgo de anestesia general
rológica es rápida después del nacimiento del niño. En el 10 se considera importante, el tiempo entre la última toma de
al 12 % de los casos, el coma persiste durante más de 4 a 6
horas después del parto y exige practicar TC o RM cerebral. aspirina y la punción debe ser superior a 3 días y el recuen-
Este último pone de manifiesto, en el 70 % de los casos, un to de plaquetas debe ser superior a 200 x 109/1 [78,84].
edema cerebral cuya importancia es proporcional a la dura-
ción de las convulsiones. El tratamiento es el de una hiper-
tensión intracraneal.
Analgesia para parto por vía vaginall
La anestesia peridural tiene muchas ventajas. Proporciona
analgesia estable durante el parto, evita las consecuencias
ASISTENCIA AL PARTO cardiovasculares de las estimulaciones nociceptivas y puede
E Generalidades
mejorar el flujo sanguíneo uteroplacentario por reducción de
las catecolaminas circulantes. Todo el trabajo de parto debe
Debido a la rápida evolución de la enfermedad en su forma tener lugar con la paciente en ligero decúbito lateral izquier-
grave, se debe practicar exploración clínica y exámenes de do. La inocuidad de la anestesia peridural se ha demostrado
laboratorio menos de 2 horas antes del parto. Esta evalua- en diversos estudios en mujeres con preeclampsia 111.

ción permite autorizar o no el parto por vía vaginal y practi- La práctica de la anestesia peridural resulta a veces difícil en
car o no anestesia peridural. La cesárea, generalmente pro- pacientes con toxemia gravídica, porque la infiltración ede-
puesta después de una eclampsia, no es sistemática en pre- matosa de la zona lumbar complica la punción. Se puede
sencia de síndrome HELLP, durante el cual es posible la producir hipotensión arterial brusca por asociación de la
inducción del parto, siempre que no exista hemorragia acti- vasoplejía anestésica a la hipovolemia y/o al tratamiento
va, hematoma subcapsular hepático ni dificultad respirato- antihipertensivo, si la dosis no se ha reducido antes de la
ria. La anestesia peridural está contraindicada si existen sig- anestesia. Para tratar la hipotensión, deben usarse dosis
nos clínicos de síndrome hemorrágico, hematoma retropla- bajas de efedrina (3 mg) debido a la sensibilidad de estas
centario, trombocitopenia « 100 x 101 plaquetas/1), dismi- pacientes a los vasoconstrictores. La interpretación de los
nución del tiempo de Quick o prolongación del tiempo de efectos cardiovasculares de la dosis de prueba es difícil en la
cefalina activada (ATTP) o coagulopatía intravascular dise- mujer embarazada durante el trabajo de parto, sobre todo en
minada. Dos situaciones son objeto de controversia: caso de tratamiento con betabloqueantes. No obstante, la

10
repercusión de la anestesia peridural en la presión arterial es oxígeno (Sp02) y de la PETC02 es importante. Los inconve-
mínima si se usan concentraciones bajas de anestésico local, nientes de la anestesia general siguen siendo significativos.
junto con un opiáceo (por ejemplo, dosis de carga de 12 ml Las frecuentes crisis hipertensivas graves exponen al riesgo
seguida de perfusión de 10 a 12 ml/h de una solución de de hemorragia cerebral o de insuficiencia ventricular iz-
bupivacaína al 0,08 % y 0,5 pg/ml de sufentanilo) después quierda con edema pulmonar. Durante la inducción anesté-
de llenado vascular prudente con una solución cristaloide sica, se deben tener a disposición antihipertensivos de ur-
(Ringer lactato, 10 ml/kg). Durante la anestesia, se adminis- gencia. El riesgo de inhalación de líquido digestivo aumenta
tra oxígeno de forma permanente y se realiza control elec- por una intubación traqueal a menudo difícil (edema farin-
trocardiográfico y de la presión arterial. La infusión intrave- golaríngeo, hemorragia de las mucosas lesionadas). Inde-
nosa de dosis bajas de oxitocina durante el parto y después
pendientemente del tiempo transcurrido desde la consulta al
del parto no está contraindicada. Por el contrario, está prohi- anestesista, la dificultad de intubación debe reevaluarse
bido el uso de metilergometrina. Si la anestesia peridural antes de la inducción anestésica, debido a la rapidez de apa-
está contraindicada, la analgesia se puede obtener con infu- rición de las anomalías asociadas al edema. Se tendrá prepa-
sión intravenosa de un opiáceo (fentanilo o sufentanilo) de rado en el quirófano el material necesario para paliar la difi-
forma continua o controlada por la propia paciente. cultad de intubación (introductor Eschmann, mascarilla
laríngea). Las anomalías de la coagulación deben corregirse
Anestesia para parto por cesárea [78] mediante transfusión de plaquetas, si su número es inferior
a 50 x 109/1 y transfusión de
El riesgo de la anestesia en el curso de la toxemia gravídica
plasma fresco en caso de pro-
consiste en la disminución del volumen circulatorio (por
longación del tiempo de Quick.
Antes de la inducción anestésica, se ingieren antiácidos y se
minuto) uteroplacentario, debido a hipotensión arterial practica expansión de volumen (500 ml de solución cristaloi-
durante la anestesia peridural o a vasoconstricción adrenér-
de), desaturación de nitrógeno mediante ventilación con
gica durante la inducción de anestesia general. No obstante, mascarilla de oxígeno puro (5 minutos) y anestesia local
la hipotensión es moderada y controlable durante la aneste-
sia locorregional, mientras que ninguna técnica evita eficaz- faringolaríngea si es posible.
La inducción anestésica se consigue mediante inyección intra-
mente la crisis hipertensiva durante la intubación traqueal.
venosa de tiopental (5 mg/kg), etomidato (de 0,3 a 0,4 mg/kg)
o propofol (2,5 mg/kg) junto con succinilcolina (1 mg/kg).
Anestesia locorregional La maniobra de Sellick se practica desde el momento de
Aunque la anestesia peridural es la técnica clásica, puede inyección del hipnótico y se continúa hasta el inflamiento del
usarse raquianestesia, ya que la inyección intratecal de un pequeño balón de la sonda de intubación correctamente situa-
da. Para evitar la crisis hipertensiva durante la inducción
opiáceo permite reducir la dosis de anestésico local garanti-
zando una estabilidad hemodinámica similar a la observada anestésica, se usan antihipertensivos y opiáceos. Se mantiene
durante la anestesia peridural ~"~ 9’~. La raquianestesia tiene el tratamiento antihipertensivo parenteral. Si la presión arte-
menos riesgo de lesión vascular, de ahí que se prefiera en rial media es superior a 120 mmHg, se administra nicardipina
situaciones de riesgo [79J. La anestesia locorregional se practi- en forma de bolos intravenosos ~5’~. La administración de

ca después de ingestión de antiácidos (cimetidina) y expan- esmolol durante el parto es discutida, porque se ha conside-
sión de volumen prudente, guiada, en las formas más graves, rado responsable de bradicardia fetal [151 y la lidocaína puede
por monitorización cardiovascular. Por vía peridural, la anes- provocar hipertonía uterina. Las dosis útiles de opiáceo
tesia se obtiene mediante inyecciones fraccionadas de bupi- (sufentanilo: 0,2 pg/kg, alfentanilo: de 10 a 20 ug/kg, remi-
vacaína al 0,5 % o de lidocaína al 2 % en el catéter peridural. fentanilo : de 0,1 a 0,2 ug/kg/min), 3 minutos antes de la
Se necesitan de 20 a 25 ml de la solución de anestésico local inducción, no tienen efecto sobre el feto [12.38]. No obstante,
conviene avisar al pediatra de esta inyección, para que el
para conseguir anestesia quirúrgica, que puede completarse
con inyección peridural de 50 pg de fentanilo o 10 pg de seguimiento del recién nacido sea apropiado y prever la
sufentanilo. En ocasiones, es necesario utilizar efedrina. Por administración de naloxona si se presentan pausas respira-
vía intratecal o en caso de anestesia combinada (peridural y torias en el bebé. Un déficit de seudocolinesterasas que
aumenta la sensibilidad a los relajantes musculares despola-
raquianestesia) se inyecta una mezcla de sufentanilo (2,5 pg) rizantes no tiene manifestación clínica.
y de bupivacaína hiperbara (10 mg en el primer caso o 7,5 mg
en el segundo) durante la infusión intravenosa de 500 ml de La anestesia se mantiene con un anestésico halogenado.
solución de Ringer lactato conteniendo 30 mg de efedrina. La Antes de la extracción del feto, se recomienda el uso de una
sensibilidad a la toxicidad de los anestésicos locales en concentración de 0,6 CAM de isoflurano o de sevoflurano
pacientes con hipertensión gravídica es mayor que en muje- vaporizada con oxígeno puro. Después de la extracción, es
res gestantes normotensas, debido a la hipovolemia, a la necesario administrar un opiáceo y eventualmente asociar
hipoproteinemia (pese a que alfa-1-glucoproteína ácida está nicardipina en bolos intravenosos al final de la intervención,
aumentada) y a la afección hepática. Sin embargo, la utiliza- para evitar las crisis hipertensivas asociadas a la extubación.
ción de un anestésico local con adrenalina es objeto de con- Los relajantes musculares (vecuronio: de 0,04 a 0,05 mg/kg,
troversia, ya que la adrenalina provoca, según algunos auto- rocuronio: de 0,3 a 0,4 mg/kg, atracurio: de 0,25 a 0,30
res, crisis hipertensivas y según otros, hipotensión arterial. mg/kg) facilitan la ventilación asistida; los parámetros ven-
La administración intravenosa de antihipertensivos se sus- tilatorios aseguran una PETC02 próxima a 35 mmHg, mien-
tras que la F’02 de la mezcla gaseosa es igual o superior al
pende hasta la administración completa de la anestesia. 50 %. En el momento de la extubación, existe riesgo de obs-
trucción laríngea por agravamiento del edema provocado
Anestesia general por la intubación traqueal. Para evitar este accidente, se debe
Es la más utilizada, debido a la frecuencia de coagulopatía y verificar que una parte de la ventilación de la paciente se
de situación de extrema urgencia, frecuencia que aumenta produzca alrededor de la sonda de intubación cuando se
con la práctica de tratamiento conservador en las formas desinfla el pequeño balón de la sonda durante la fase de des-
graves y precoces de la enfermedad. Las ventajas de la anes- pertar (cuff-leak test). El sulfato de magnesio potencia la
tesia general son rapidez, fiabilidad y posibilidad de obtener acción de los relajantes musculares y favorece la hipotensión
una ventilación adecuada, sobre todo si existe edema pul- durante la anestesia general. Lo mismo sucede con los cal-
monar, alteración de la conciencia o incluso convulsiones. La cioantagonistas, cuyo efecto hipotensor es más patente en
monitorización intraoperatoria de la saturación parcial de caso de anestesia con sevoflurano que con isoflurano " ID="I27 .135.9">[63].

11
Analgesia postoperatoria Tratamiento médico
La modalidad depende de la técnica anestésica: perfusión de La reducción del aporte líquido permitirá la obtención de un
una solución de anestésico local y de opiáceo por el catéter equilibrio hídrico negativo. Durante este período, se pueden
peridural, inyección intratecal de 100 pg de morfina, admi- utilizar diuréticos (de 20 a 80 mg/d de furosemida).
nistración de morfina por vía subcutánea, según las necesi- El tratamiento antihipertensivo se adapta a las cifras de pre-
dades, o por vía intravenosa controlada por la paciente. Los sión y a una eventual lactancia. La perfusión de un antihi-
antiinflamatorios no esteroides mejoran la analgesia, pero su pertensivo (labetalol, nicardipina), iniciada al final del emba-
administración debe ser prudente debido a la coagulopatía y razo o durante el trabajo de parto, se continúa durante 24
nefropatía latentes. horas antes de sustituirla por administración oral. El uso de
calcioantagonistas se recomienda después del parto, ya que
ayudan a eliminar el espasmo vascular cerebral. En la madre
ATENCIÓN MÉDICA DESPUÉS DEL PARTO lactante, el tratamiento se basa sobre todo en metildopa (de
1 000 a 1 500 mg/d). Pueden utilizarse algunos betablo-
Riesgo queantes que pasan en poca cantidad a la leche materna,
El riesgo de complicaciones de la preeclampsia persiste, e como el propranolol y el labetalol. La nifedipina en dosis infe-

incluso aumenta, en el posparto. Es máximo durante los 3 rior a 90 mg/d también se puede utilizar durante la lactancia.
primeros días, pero se han descrito accidentes hasta el final En caso de hipertensión arterial grave, se debe suspender la
de la primera semana. Además del aumento brusco del lactancia para permitir la administración de atenolol y de
retorno venoso después del parto, existe aumento del volu- inhibidores de la enzima de conversión. La bromocriptina está
men sanguíneo circulante durante el segundo y el tercer día contraindicada en pacientes con preeclampsia, debido al ries-
después del parto por paso de líquido del intersticio a los go de aparición de una crisis hipertensiva, convulsiones y
vasos. Estos fenómenos provocan elevación de la presión de accidente isquémico cerebral o miocárdico [35.39].»

llenado cardíaco y reducción de la presión oncótica. Des- Si aparece síndrome HELLP, se recomienda tratamiento con
pués de una disminución transitoria de la presión arterial a corticoides para acelerar la " ID="I278.87.5">remisión [46,64,87].
lo largo de las primeras 12 horas del posparto, la presión La profilaxis tromboembólica es importante en las pacientes
arterial alcanza a menudo cifras elevadas en las pacientes con preeclampsia, a causa del mayor riesgo de trombosis
con hipertensión gravídica, aumentando así la poscarga del cerebral o periférica, en particular si la proteinuria es muy
ventrículo izquierdo. Durante este período, el riesgo de elevada, si existía coagulopatía de consumo en el momento
insuficiencia cardíaca con edema pulmonar o de crisis de del parto, si el síndrome HELLP es grave o si existe trombo-
eclampsia (aproximadamente el 14 % de las eclampsias) es filia. El tratamiento profiláctico comienza lo más pronto
muy elevado, sobre todo si la paciente presentaba edemas posible según el resultado de las pruebas de coagulación; se
voluminosos y/o si se realizó expansión de volumen consi- usa heparina cálcica no fraccionada o heparina de bajo peso
derable en el momento del parto. Este riesgo es más real, molecular. La dosis y la duración del tratamiento se adaptan
sobre todo si se tiene en cuenta que la poliuria espontánea a cada caso. No existen recomendaciones sobre la duración
del posparto se retrasa, a veces, más de 24 horas. El edema de la profilaxis tromboembólica, pero se suele proponer una
pulmonar también puede ser debido a la descompensación duración mínima de 6 semanas.
de una cardiopatía asociada a hipertensión arterial crónica Los anticonceptivos orales sólo están contraindicados si exis-
o a una miocardiopatía dilatada. En casos excepcionales, la te lesión hepática atribuible al tratamiento con estrógenos y
movilización de líquido hacia el sector vascular está retra-
progestágenos o en caso de trombofilia.
sada, lo que puede provocar hipotensión arterial con hipo- Después del parto, la proteinuria desaparece y la presión
natremia importante sugiriendo una insuficiencia suprarre- arterial se normaliza en un plazo variable entre 2 días y 3
nal " ID="I278.39.2">[37]. meses. Un control semanal permite adaptar el tratamiento
Siempre es posible la aparición de síndrome HELLP duran- antihipertensivo [25].
te el posparto: el 30 % de los casos se presenta después del
parto. El valor más bajo de la trombocitopenia constitutiva SEGUIMIENTO A LARGO PLAZO
de un síndrome HELLP que llevó a decidir el parto se pro-
duce a las 29 horas del posparto [621. La elevación de la ASAT La evolución cardiovascular a largo plazo de la madre varía
puede durar 48 horas [SOl. La corticoterapia puede acelerar la según la gravedad y la precocidad de la enfermedad 111. Una
normalización de los exámenes de laboratorio alterados en paciente que haya presentado preeclampsia precoz o hiper-
el síndrome HELLP (trombocitopenia y citólisis hepática); su tensión gravídica en cada embarazo tiene un riesgo elevado
empeoramiento pasadas las 72 horas del parto debe hacer de desarrollar hipertensión arterial crónica.
pensar en el diagnóstico de síndrome hemolítico urémico o
de púrpura trombocitopénica trombótica. La citólisis hepáti-
Evaluación general materna
ca a menudo va seguida de colestasis citolítica a partir del

séptimo día del período posparto [20, 75]. Desde el punto de Se recomienda realizar una evaluación general tres meses
vista radiológico la curación de los hematomas hepáticos se aproximadamente después del parto, con suficiente distancia
percibe durante los 6 meses posteriores al parto. de un eventual accidente trombótico o de un tratamiento con
estrógenos y progestágenos. Se investiga la existencia de
9
trombofilia valorando la antitrombina III, proteínas C y S,
Seguimiento homocisteína y anticuerpos antifosfolípidos y anticardiolipi-
Durante este período, el seguimiento debe ser muy estricto. na, mutación del gen del factor V (factor V Leyden), protrom-
Control clínico: presión arterial cada 4 horas, detección de bina G20210A y metilentetrahidrofolato reductasa en presen-
disnea y pródromos de convulsión, Sp02, control de la diu- cia de homocisteinemia elevada. Se debe descartar la existen-
resis, proteinuria, diagnóstico de atonía uterina, detección cia de una enfermedad autoinmunitaria. Si hay hipertensión
de un síndrome hemorrágico. Además, se realizan exámenes arterial persistente, es necesario investigar la causa, especial-
de laboratorio y ecografías: análisis sanguíneo, pruebas de mente renal. En presencia de albuminuria residual después
función hepática y renal, ecografía hepática repetida si el sín- del sexto mes o si se sospecha una enfermedad sistémica,
drome HELLP empeora o si existe hematoma hepático. puede ser necesario practicar biopsia renal.
12
a Atención en los embarazos posteriores Conclusión
El riesgo de recidiva depende esencialmente de la precocidad
de aparición de la primera preeclampsia y del estado general ’8’ . La preeclampsia se caracteriza por una gran variabilidad inter-
El desarrollo precoz de síndrome HELLP (antes de las 32 individual de expresión y por su rapidez evolutiva hacia com-
semanas) permite predecir una recidiva en el 50 % de los plicaciones potencialmente mortales. El tratamiento médico
casos. Un estado trombofílico, una
hipertensión arterial cróni- debe adaptarse a cada caso particular, según la modalidad de
ca o una nefropatía persistente son factores de recidiva de
pre- expresión de la enfermedad. Si la enfermedad es de aparición
eclampsia. Es necesario realizar seguimiento precoz de un precoz, en ocasiones puede continuarse el embarazo y retardar el
embarazo posterior. Al comienzo del embarazo, se propone parto que representa, no obstante, el único recurso terapéutico
tratamiento profiláctico. Si las pruebas para detectar trombo- definitivo. Los profesionales médicos deben conocer las distintas
filia son positivas, se deberá administrar heparina de bajo opciones de tratamiento y los límites de una atención que no sea
peso molecular desde el primer trimestre [3]. Los resultados de multidisciplinaria, ni basada en una experiencia habitual de la
un metaanálisis de ensayos clínicos con dosis
bajas de aspiri- preeclampsia. Un mejor pronóstico de la enfermedad depende de
na no permiten establecer recomendaciones
precisas: en muje- la asistencia hospitalaria y de la precisión de los tratamientos:
res que han tenido un antecedente de preeclampsia grave o de límites y peligro del llenado vascular, predominio de los calcio-
retraso del crecimiento intrauterino importante, está justifica- antagonistas en el tratamiento de la hipertensión arterial, efica-
da una dosis diaria de 100 mg desde el primer trimestre " ID="I279.17.12">[17]. cia de los glucocorticoides frente a la lesión endotelial. La iden-
Más recientemente, se ha propuesto la administración de sus- tificación de todos los factores de riesgo, el descubrimiento de
tancias antioxidantes (vitaminas C y E) durante todo el emba- marcadores precoces de la enfermedad y la búsqueda de una pro-
razo [851. Por último, en presencia de una enfermedad autoin- filaxis eficaz constituyen los parámetros de investigación del
munitaria, se debe plantear el uso de corticoides. futuro para los equipos especializados en esta afección.

Cualquier referencia a este artículo debe incluir la mención del artículo original. Édouard D. Prééclampsie. Éclampsie. Encycl Méd Chir (Editions Scientifiques et Médicales Elsevier SAS, Paris, tous dn
réservés), Anesthésie-Réanimation, 36-980-A-10, 2003, 16 p.

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