Objetivos en la organización

Miller Ordoñez Soto Cod. 20162150964

Determinados como un componente intrínseco dentro del devenir de la

organización, los objetivos corresponden a un instrumento que asociados al logro
de unos fines, orientan las funciones que son necesarias para el alcance de los
mismos.
Siendo los anteriores, clasificados en tres categorías. Inicialmente, se encuentran
aquellas organizaciones cuyo objetivo se consolidan en la relación de sus
miembros y su interacción. Seguidamente están aquellas que obran de forma
específica sobre una colectividad que han sido elegidos para un fin definido.
Finalmente, están aquellas que tienen objetivos que están orientados al logro de
resultados. Siendo las dos primeras clasificaciones, organizaciones estructuradas
de acuerdo a un modelo democrático, en el cual existe una decisión deliberada. Y
la última, corresponde a aquellas organizaciones de carácter estructural jerárquico
en las que predomina un mando de arriba a bajo.

Por su parte se refiere dos tipificaciones de los objetivos. Primero se encuentran

los objetivos legales, los cuales corresponden a aquellas organizaciones que
estando dentro de la “legalidad” formulada por el Estado no desempeña una
actividad contemplada por la ley como punible o sancionada.
En segundo lugar, se encuentran las organizaciones ilícitas, que surgen en
aquellas casos particulares en los cuales el estamento legal (orientado por el
Estado) define una actividad como ilegal, pese a que existe un colectivo
significativo de la sociedad que difiere de esta asignación como tal. Y ejercen la
misma aún bajo la pérdida del amparo que otorga el pertenecer a las
organizaciones de carácter ilícito.

Siendo los objetivos una herramienta imperativa en la organización, su

conocimiento y apropiación, serán garante de la lucha y la preservación de los
mismos. Sin embargo, el establecimiento de los mismos está sujeto a la
denominada constelación de valores, que no son más que aquellas actitudes de
juicio que poseen los integrantes y que definen el cómo del cumplimiento de los
objetivos.
Para el caso en particular de las organizaciones que poseen objetivos vagamente
definidos, se puede presentar que el cumplimento de los mismos no este
correctamente asignados dentro de las funciones. E inclusive, está condición
puede llevar a la sucesión de objetivos, cosa que puede llevar a una correcta
definición del objetivo general. Siendo ejemplo característico aquellas
organizaciones de carácter democrático.
Por su parte, las organizaciones con modelo jerarquico poseen objetivos
unívocamente definidos.

Dentro del caso en particular de la organizaciones con un objetivo general y el

cumplimiento de una meta, se encuentran sujetas al problema de la sucesión de
objetivos. Hecho que puede desembocar en la consolidación de una nueva
empresa con un nuevo objetivo o la disolución de la misma. Factores diversos
afectan la adquisición de un nuevo objetivo en los integrantes y facilitan o
entorpecen estos cambios de llegar a suceder.

Sin embargo, no son los anteriores el único problema que puede surgir, en las
organizaciones con objetivo general. Pues el cumplimento de los específicos
pueden llevar al cumplimiento de uno u otro objetivo en menor o mayor medida.
Provocando conflictos ente los integrantes
Acotando finalmente, que una correcta definición de un objetivo permite definir las
actividades y funciones correctas para la consecución de las metas planteadas.