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Facultad de Ciencias de la Salud

Escuela de Kinesiología

Casanova, Juan Pablo. Sepúlveda, Francisco.


Silva, Franco.

Entrenamiento isométrico de Extremidad Superior vs


Extremidad Inferior para disminuir la presión arterial en
pacientes Hipertensos y Normotensos con riesgo
cardiovascular

Proyecto de investigación presentado a la Escuela de Kinesiología, Facultad de


Ciencias de la Salud de la Universidad San Sebastián Sede de la Patagonia, para la
aprobación de la asignatura de Seminario de Investigación.

Puerto Montt
Octubre de 2017

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UNIVERSIDAD SAN SEBASTIÁN
FACULTAD DE CIENCIAS DE LA SALUD
ESCUELA DE KINESIOLOGÍA

Director Escuela de Kinesiología, Sede de la Pataogia:

Klgo. Prof. Juan Cristóbal Guerrero San Martín

Docente Asignatura Seminario de la Investigación:

Klgo. Prof. Mauricio Reyes González

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NOMBRE DEL TEMA.

COMISIÓN EVALUADORA

Klgo. Mauricio Reyes González MSc.


Docente Asignatura Seminario de Investigación.

Klgo. Carlos Ignacio Cavada Peña


Docente Área Cardiorrespiratorio.

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INDICE
 Introducción
 Marco Teórico:
¿Qué es la Hipertensión Arterial?
Clasificación de PA
Epidemiologia de la HTA
Factores Predisponentes
Fisiopatología
Tratamiento de la HTA
- Farmacológico
- Mediante ejercicio físico
Mecanismo de acción del entrenamiento isométrico sobre la Presión Arterial
Protocolo de ejercicio isométrico
 Problema de investigación:
- Enunciado del problema
- Pregunta de investigación
 Referencias

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INTRODUCCIÓN

En términos generales la hipertensión arterial es un trastorno en el cual hay un


aumento de la presión ejercida por la sangre sobre la pared de los vasos sanguíneos de
forma crónica.

Actualmente es un problema sanitario a nivel mundial, y que constituye uno de los


principales factores de riesgo, que causan eventos cardiovasculares, como cardiopatías,
enfermedades renales, ACV y diversas otras patologías. Se estima que la cantidad de
personas con hipertensión arterial a nivel mundial para el año 2025 es del 29%.
(Radovanovic, Santos, Carvalho, & Marcon, 2014)

Chile tampoco es la excepción a esta problemática sanitaria, según la encuesta de


calidad de vida y salud del año 2006, la HTA es la principal enfermedad crónica declarada
en la población, donde en personas con 17 años y más ocupa una prevalencia de 33,7%,
siendo mayor en la población masculina. (MINSAL, 2011).

Actualmente existen distintos mecanismos e intervenciones para regular la presión


arterial y el flujo sanguíneo, ya sea por farmacoterapia, ejercicio físico, modificaciones en
la alimentación, e incluso psicológicamente, dando como consecuencia, importantes
costos sanitarios, desde el punto de la adquisidor de fármacos, hasta la necesidad de
profesionales de la salud.

Si hacemos hincapié en cuanto el ejercicio físico, se han encontrado


disminuciones significativas de la presión arterial tras esta intervención, con efectos a
corto y largo plazo .Si bien la mayoría de estos cambios se han demostrado en estudios
que involucra ejercicio de característica aeróbica, también hay estudios que demuestran
reducciones significativas de la PA en ejercicios isométricos para miembro superior e
inferior. (Garg, Malhotra, Kumar, Dhar, & Tripathi, 2014) (Carlson et al., 2016) (Espinoza
et al., 2014).

Dentro de unas de las principales ventajas que encontramos modalidad


anteriormente nombrada, es el poco tiempo requerido, la facilidad de espacio, y el bajo
costo de la instrumentaría. Por tanto, resulta interesante saber con qué protocolo de
entrenamiento de ejercicio isométrico para la extremidad inferior o extremidad superior
resulta en reducciones mucho más significativas de la Presión Arterial en periodos a corto
y largo plazo.

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MARCO TEÓRICO

¿Qué es la Hipertensión arterial?

La presión arterial corresponde a la fuerza que ejerce la sangre contra la pared de


las arterias, distinguiéndose dos presiones, una sistólica que se da cuando el corazón se
contrae o late (sístole cardiaca) y una diastólica, cuando el corazón se relaja (diástole
cardiaca), cualquier aumento de estas presiones se denomina Hipertensión Arterial, la
cual es una entidad clínica que se caracteriza por una elevación continua de los valores
normales de presión en una condición de reposo, siendo uno de los principales factores
de riesgo cardiovascular en la población. (Espinoza et al., 2014), (Alcazar, Oliveras,
Martínez, Jiménez, & Segura, 2012).

Clasificación de la PA.

La valoración de la Presión Arterial es sencilla, pero los valores tienen una gran
variabilidad ya que estos se modifican por diversos factores tanto externos como internos
del paciente. Los niveles normales de presión sistólica son entre 120 a 139 mmHg y para
la presión diastólica un rango de 80 a 89 mmHg, cualquier aumento de estos será
considerado como Hipertensión Arterial, la cual tiene diferentes estadios los cuales son:

- HTA grado 1 (140-159/90-99)


- HTA grado 2 (160-179/100-109)
- HTA grado 3 (> a 180/110) .(Espinoza et al., 2014), (Esteban-Fernández, 2013)

Epidemiologia de la HTA.

A nivel mundial la hipertensión resulta en uno de los factores de riesgo


cardiovasculares que más se presenta en la actualidad y es la causa de por lo menos el
45% de las muertes por cardiopatías (la mortalidad total por cardiopatía isquémica), y el
51% de las muertes por accidente cerebrovascular. (OMS, 2013).

En el año 2000 la prevalencia de la HAS en la población mundial era de 25% y la


estimativa para el año de 2025 es de 29%. (Radovanovic et al., 2014). En 2008, en el
mundo se habían diagnosticado de hipertensión aproximadamente el 40% de los adultos
mayores de 25 años; el número de personas afectadas aumentó de 600 millones en 1980
a 1000 millones en 2008. (Alwan et al., 2011). Esta creciente prevalencia de la
hipertensión se atribuye al aumento de la población, a su envejecimiento y a factores de
riesgo relacionados con el comportamiento, como la dieta malsana, el uso nocivo del
alcohol, la inactividad física, el sobrepeso o la exposición prolongada al estrés. (OMS,
2013).

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Chile no es la excepción a esta problemática sanitaria. Según la ENS 2010, el
26,9% de la población chilena mayor a 15 años presenta presión arterial elevada
(promedio de tres mediciones mayores a 140 mmHg sistólica, o mayores a 90 mmHg
diastólica, o normotenso pero en tratamiento farmacológico), con mayor prevalencia en
hombres que en mujeres (27,9% y 25,0% respectivamente). (MINSAL, 2011).

Factores Predisponentes.

Se sabe que el sobrepeso, la obesidad, el sedentarismo, hábito alimenticio,


factores ambientales, genéticos e incluso la raza son factores que en conjunto o de forma
independiente, son fuertes factores predisponentes a una cronicidad de la hipertensión
arterial. Cuando estos son inadecuados constituyen factores de riesgo de enfermedades
cardiovasculares, que incluye la hipertensión arterial (HTA), y otras, endocrinas, como la
diabetes mellitus y la obesidad entre otras. (González Sánchez et al., 2015).

Algunos de estos factores son conocidos como factores de riesgo modificables,


puesto que pueden ser corregidos por la atención de los profesionales sanitarios
correspondientes. A continuación se presentan algunos de los factores de riesgo de una
forma más detallada:

1.- Edad: En cuanto a este factor, Ávila et al (2010) citado por (Weschenfelder Magrini &
Gue Martini, 2012) relata la existencia de una relación directa de la Presión Arterial con
la edad, siendo la prevalencia de HAS superior al 60% en individuos con más de 65 años.

2.- Genética: en cuanto a la genética existe una correlación entre los factores genéticos
y la hipertensión arterial, todavía no existen variantes genéticos que puedan determinar
el riesgo individual de desarrollo de la hipertensión arterial. (Ávila et al 2010) Citado por
(Weschenfelder Magrini & Gue Martini, 2012).

3- Obesidad: Según Ávila et al (2010) relatan que el exceso de peso se asocia con mayor
predominio a la hipertensión arterial desde edades jóvenes, y que en la vida adulta,
incluso entre individuos no sedentarios, un incremento de 2,4kg/m2 en el índice de masa
corporal resulta en mayor riesgo de desarrollar la hipertensión. En otros estudios, como
el de Peixoto et al (2006) sugieren que aproximadamente 70% de los casos nuevos de
hipertensión arterial pueden ser atribuidos a la obesidad o al aumento de peso.
(Weschenfelder Magrini & Gue Martini, 2012).

4.- Sedentarismo: Se sabe que la actividad física reduce la incidencia de HAS en


individuos pre hipertensos además de reducir la mortalidad y los riesgos de desarrollar
enfermedades cardiovasculares. (Ávila et al 2010) citado por (Weschenfelder Magrini &
Gue Martini, 2012)

5.- Hábitos alimenticios: La calidad de la alimentación tiene una gran influencia en el


estado de salud de las personas. Los hábitos alimentarios se forman en edades
tempranas, y se consolidan durante la adolescencia. (González Sánchez et al., 2015). El

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consumo de sal excede los límites máximos recomendados para la ingestión en todos los
países, en todos los extractos de renta, sabemos que la restricción de sal acompañada
de hábitos alimentarios saludables contribuye a la reducción de la presión arterial,
pudiendo llevar a la reducción de la medicina anti-hipertensiva. Costa et al (2009) y Ávila
et al (2010) citado por (Weschenfelder Magrini & Gue Martini, 2012).

Fisiopatología.

La hipertensión arterial siendo una de las enfermedades crónicas más frecuentes


en la población (gran incidencia) no en todos los pacientes logra ser controlada y para
padecer de esta disfunción hay que tener en cuenta dos características: el genotipo y el
ambiente que lo rodea, dando como resultado el fenotipo del paciente. (Soto & Soto,
2015).

Existen distintos mecanismos que se encargan de regular la presión arterial y flujo,


cuando estos mecanismos fallan se genera un desequilibrio que aumenta la presión
arterial.

La etiología de HTA en el 90% es esencial o de causa no determinada


(consecuencia de la interacción genotipo - medio ambiente). Siendo por esto que cada
caso es diferente de otro según severidad y momento de aparición. (Soto & Soto, 2015).

Factores fisiopatológicos causantes de hipertensión arterial:

- Estrés  Incrementando la actividad del SNS (su estimulación genera mayor


contractilidad vascular ocasionando mayor resistencia vascular periférica,
incremento en el gasto cardiaco y retención de líquido a nivel renal) al incrementar
el SNS disminuye el SNPS contribuyendo en un aumento de la FC por ende
aumenta la PA (debido a la relación que existe entre la longitud de la pausa
diastólica y la presión diastólica). Además, el aumento de actividad del SNS
aumenta la RVP por proliferación de células musculares en los vasos sanguíneos.
- Sobreproducción de hormonas  Ahorradoras de sodio y vasoconstrictoras
- Disminución de los vasodilatadores.
- Ingesta inadecuada de Sodio y potasio.
- Hiperuricemia  Causa de la gran parte de los mecanismos de hipertensión
nefrogénica.
La hiperuricemia aumenta la renina plasmática, al activarse esta proteína se activa
el resto del SRAA. El ácido úrico inhibe la producción de óxido nítrico-sintasa en
la macula densa
Para contribuir a que se desencadene la patogénesis de la HTA deben existir dos
tipos de anormalidades tanto funcionales como estructurales:
- Disfunción endotelial
- Remodelación vascular

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Analizando la hipertensión arterial se tiene que tener en cuenta principalmente la
genética del paciente, sabiendo que la HTA es una es una enfermedad multifactorial y
poligénica (más de un gen codifica para esta enfermedad) o monogénica en un 5% de
los casos (que se transmite por un solo gen) esta última teniendo relación con la
regulación de sodio. (Soto & Soto, 2015).

Causas monogénicas:

- Exceso de mineralocorticoides
- Síndrome de Liddle (caracterizado por el incremento en la reabsorción de Sodio.
- El síndrome de Gordon (defecto en el transporte iónico)
- Hipertensión por feocromocitoma
- Defecto en los genes relacionados con el sistema renina angiotensina aldosterona,
existiendo la variante M235T en el gen específico del angiotensinógeno
incrementándolo y así a su vez aumentando la producción de angiotensina 2
aumentando la presión arterial.
Los cambios en la presión arterial que generan estos mecanismos monogénicos
no la alteran en gran medida, siendo estos mecanismos atribuidos por un solo gen
también tiene variaciones entre pacientes y esto demuestra el gran impacto que tiene el
ambiente en la presión arterial.

En cuanto a lo vascular existe una alteración de los baroreceptores (sensores que


captan y controlan los cambios en la PA), reajustándose a niveles más altos, lo que
desencadena en que los vasos sanguíneos se tengan que distender más para poder
percibir el aumento de presión. Estos reajustes se dan por la endotelina y la angiotensina
II, ambos actuando como vasoconstrictores dificultando la distención vascular. Esta
contracción vascular de las arterias aferentes y eferentes activa el SRAA, llevando a la
reabsorción de sodio y agua que culmina en el aumento de la PA. Esta reactividad
vascular traduce un estado de vasoconstricción permanente lo que altera la estructura y
función de las pequeñas arterias e incrementa la RVP. (Soto & Soto, 2015).

Con respecto al SRAA. El aumento de presión genera una vasoconstricción de la


arteria renal aferente, lo que es percibido como hipovolemia por lo tanto como una
disminución de la presión por el riñón que responde secretando renina y convirtiendo el
angiotensiógeno en angiotensina I y luego en angiotensina II por la ECA. La angiotensina
II produce mayor vasoconstricción (estimulando a la endotelina quien aumenta la PA) y
permite la liberación de aldosterona estimulando la mayor reabsorción de la Na y H2O
(potenciando el aumento de PA).

La hipertensión crónica se causa por el daño endotelial, que inhibe los factores de
relajación. Esta injuria endotelial causa una progresiva pérdida en la sensibilidad de los
receptores, enviando información errónea al centro vasomotor bulbar el cual falla su
función de regular la presión arterial. (Soto & Soto, 2015).

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Tratamiento de la HTA.

En Chile el tratamiento de hipertensos de 15 años y más constan en primera línea


de una selección apropiada de fármacos antihipertensivos con metas diferenciadas de
acuerdo a la clasificación de RCV individual. (MINSAL, 2006). Además medidas
correctivas y de cambio en el estilo de vida como la dieta, el ejercicio físico, la reducción
de ingesta de sal, disminuir la ingesta de alcohol, tabaco entre otras. (MINSAL, 2006).

Tratamiento farmacológico.

- Inhibidores enzima convertidora de angiotensina IECA


Los IECA inhiben la enzima que convierte angiotensina I en angiotensina II, con el
consecuente efecto vasodilatador (hipotensor).

- Antagonistas del receptor de la angiotensina ARA II


Los ARA-II, bloquean los receptores AT1 de la angiotensina II, de esta manera interfieren
en el sistema renina-angiotensina-aldosterona, con el consecuente efecto vasodilatador

- Calcioantagonistas o bloqueadores de canales de calcio


Los fármacos calcio-antagonistas son potentes antihipertensivos y actúan a nivel de
los canales de calcio en músculo liso vascular y músculo cardíaco.
Los calcioantagonistas se pueden clasificar en:
1.- Dihidropiridinas: Acción corta (nifedipino) y acción prolongada (nifedipino retard,
nitrendipino, amlodipino, felodipino, etc.)
2.- No dihidropiridinas: Verapamilo, diltiazem, que tienen efectos antiarrítmicos
adicionales.

- Diuréticos
Estudios avalan que el uso de diuréticos tiazídicos, en dosis bajas y especialmente
en personas mayores de 55 años, como fármacos de primera línea por su efecto en la
reducción de la presión arterial, reducción de eventos clínicos y su bajo costo.

- Antialdosterónicos Espironolactona
Único fármaco de este grupo disponible en nuestro país), es un antagonista de los
receptores de aldosterona e inhibe la reabsorción de sodio a nivel de túbulo distal, con
una acción diurética ahorradora de potasio además tiene propiedades antiproliferativas
principalmente en el miocardio y vasos sanguíneos.

- Alfa-2 agonistas
Estos fármacos estimulan los receptores alfa-2 del sistema nervioso central (SNC),
disminuyendo el tono simpático central y el metabolismo de la noradrenalina, con el
consecuente efecto hipotensor. Los agentes más usados de este grupo son clonidina y
metildopa. Esta última se utiliza ampliamente en hipertensión del embarazo.

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- Bloqueador alfa-1
Bloquean selectivamente los receptores alfa 1, disminuyendo la resistencia
periférica y el retorno venoso con efecto vasodilatador (hipotensor). Algunos agentes de
este grupo son, prazosina, doxazosina. Adicionalmente a su efecto sobre la PA, mejoran
el perfil lipídico y sensibilidad a la insulina.

Tratamiento de la HTA mediante el ejercicio físico.

En cuanto al ejercicio físico, se ha demostrado gran evidencia en reducciones de


la PA al emplear entrenamiento aeróbico. Pero también se ha encontrado evidencia de
que el ejercicio no aeróbico, en este caso, sujetos sometidos a un entrenamiento de tipo
isométrico, muestras reducciones significativas de la PA, principalmente la sistólica.

El ejercicio isométrico consiste en una sola contracción muscular sostenida contra


una carga inamovible o sin una resistencia, en donde no hay cambio en la longitud del
grupo muscular involucrado.(Hess et al., 2016)

Numerosos estudios han demostrado la eficacia del ejercicio isométrico, sobre la


presión arterial, con reducciones de 7 a 9 mmHg. Una revisión sistemática del año 2014
evidencio una disminución promedio de la presión arterial sistólica en 6,77 mmHg. Sin
embargo, los estudios analizados en ese metanálisis basado en la escala PEDro no
exponen el riesgo de sesgo real existente. (Espinoza et al., 2014). En 2016, un ECR
evidencia que hay una reducción significativa de la presión arterial sistólica de 7 mmHg,
al realizar un protocolo de entrenamiento isométrico de 8 semanas en sujetos pre-
hipertensos, al 30% de la contracción máxima voluntaria.(Carlson et al., 2016).

Mecanismo de acción del entrenamiento isométrico sobre la Presión Arterial

Los mecanismos responsables de las reducciones en la PA en reposo después de


la práctica de ejercicio isométrico no han sido completamente aclarados debido a que
existen distintos perfiles patológicos que son individuales de cada paciente. Existe una
limitación en las investigaciones que desean investigar los posibles mecanismos
responsables de las adaptaciones al entrenamiento isométrico, debido al pequeño
tamaño de las muestras. Varios ECA de entrenamiento con ejercicio isométrico en HTA
han demostrado que la reducción de la PA en reposo esta mediada por una diminución
de la RVP similar a la práctica del ejercicio aeróbico. (Millar, McGowan, Cornelissen,
Araujo, & Swaine, 2014).

Protocolos de ejercicio isométrico

El entrenamiento isométrico corresponde en realizar una modalidad de ejercicio


mediante una contracción isométrica la cual genera tensión muscular sin provocar
cambios en la longitud del musculo. (Millar et al., 2014). Dentro de los ejercicios más
utilizados se encuentran la empuñadura isométrica unilateral (musculatura de antebrazo)

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y extensión bilateral de rodillas (cuádriceps), siendo los efectos independientes de la
masa muscular involucrada en dicha contracción. (Millar et al., 2014).
Dentro de la modalidad de extensión bilateral de rodillas la intensidad es de 4
series de contracciones de 2 minutos a un 20 % de la contracción voluntaria máxima con
2 minutos de descanso entre dichas series, la cual ha demostrado mayores cambios en
la PA a comparación de intensidades más bajas (< a 10% de CVM).

La frecuencia de dicho ejercicio es de 3 veces por semana con una duración de 8


semanas. Todo esto ha demostrado disminuir 11 mmHg la PAS y también la PAM en 5
mmHg además de la FC. (Millar et al., 2014).
El protocolo para la realización de empuñadura isométrica unilateral consta de una
intensidad de 4 series de contracción durante 2 minutos al 30% de la contracción máxima
voluntaria, con una frecuencia de 3 veces por semana con una duración total del protocolo
de 8 semanas lo que ha mostrado un efecto cardiovascular (< 5 mmHg de PAS y 3 mmHg
de PAM). Mayores cambios se han evidenciado en un entrenamiento alternado de
empuñadura isométrica la cual consta de 4 series de 45 segundos con 1 minuto de
descanso entre estas al 50% de la CVM, 3 días a la semana durante 6 semanas, donde
los cambios en la PA han sido más significativos con una reducción de 13 mmHg de la
Presión Sistólica y 2 mmHg de Presión Diastólica en pacientes diagnosticados con
Hipertensión Arterial. (Millar et al., 2014).

En sujetos Normotensos un protocolo de ejercicio isométrico con el uso de un


dinamómetro en la mano dominante se efectuó mediante 5 contracciones al 30% de la
CVM con periodos de descanso entre las series de 5 minutos, llevándose a cabo 3 veces
por semana con un total de 10 semanas, donde al finalizar el protocolo hubo una
reducción de la PAS de 112.8 ± 1.86 mmHg y la PAD de 76,47 ± 3,00 mmHg comparado
con sus valores al inicio de la intervención (PAS de 122.67 ± 2.31 mm Hg y PAD de 81,73
± 2,66 mmHg) lo cual indica que la respuesta al ejercicio es incluso factible en una
población sin la afección. (Garg et al., 2014).

La evidencia demuestra que los efectos mediante el uso de ejercicio isométrico de


empuñadura requieren de menos tiempo para producir una disminución efectiva de la PA
(Brook et al., 2013) y que una mayor dosis de ejercicio acelera las adaptaciones y
mantiene dichos efectos, esto debido a que la HTA es una enfermedad crónica la cual
requiere de una intervención de por vida. (Millar et al., 2014).

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PROBLEMA DE INVESTIGACIÓN

Enunciado del Problema

Cada año aumenta la tasa de incidencia de Hipertensión Arterial a nivel mundial,


puesto que debido a los malos hábitos tanto alimenticios (inadecuada ingesta de sodio)
como conductuales (sedentarismo, alcoholismo, tabaquismo, estrés, etc.), sumado a esto
existe un poco control sobre dicha enfermedad por lo cual se incrementa la
morbimortalidad y los costos en salud.
Educación, promoción, accesibilidad,
Si tenemos que a nivel mundial la población adulta mayor se encuentra en
aumento, reflejado en una pirámide invertida, y existe una correlación entre hipertensión
y adulto mayor
Pregunta de investigación:

¿Es el entrenamiento isométrico una terapia útil para el control de la Presión


Arterial y cual modalidad genera un mayor efecto sobre ésta, además de poder
implementarse como medida promocional-preventiva y disminuir los costos en salud?

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REFERENCIAS

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