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La dirección de grupo es una de las funciones que tiene un docente al recibir carga
académica. El tema de interés es, específicamente secundaria y media, donde se
reciben 22 horas de clase más la titulatura (dirección de grupo).
En el caso de Colombia la resolución 13342 de 1982, que fue derogada por la Ley
General de Educación de 1994, decía así:
En el marco legal vigente, la Ley 115 de 1994, que en su artículo 104 dispone: “El
educador. El educador es el orientador en los establecimientos educativos, de un
Y finalmente, el decreto 1075 del 2015, que recopila todas las normas
reglamentarias preexistentes y sus respectivos ajustes para convertirse en el
decreto Único Reglamentario del Sector Educación. Ambos decretos, solo
mencionan esta función, pero no estipulan nada diferente.
Es de esta forma, que se puede observar cómo dejan a libre albedrío en las nuevas
normativas, la manera de desarrollar la titulatura, sin que se enmarque sobre ella
ninguna importancia. Pero, en el quehacer docente hay una responsabilidad
llamada formación de estudiantes, que abarca muchos aspectos de ese ser, en
cuanto a la disciplina, su personalidad, orientación emocional, entre otros. Por eso,
Giuseppe (1985) dice: “Los buenos o malos resultados escolares dependen mucho
de la dirección de curso, pues solamente ésta puede establecer las circunstancias
indispensables de orden y de esfuerzo que deben reinar en toda situación de
aprendizaje” (p. 483). Así mismo, la importancia de la dirección de grupo sobre todo
en los jóvenes de secundaria y media, también, es debido a los cambios físicos y
emocionales que están experimentando, pues se reciben chicos y chicas en plena
pubertad.
Además, al observar algunos estudiantes y conversar con ellos, sobre cada uno de
sus titulares, algunos ofrecían estas opiniones: Leandro: “A mí me gustaría que mi
titular fuera otro, la que tengo no sirve, ni siquiera nos dice nada, por lo general,
llega solo a dictar clase”. También Juan Fernando decía: “En cambio a nosotros si
nos tocó una buena titular, ella nos habla, nos motiva, nos regaña algunas veces,
pero siempre nos trata con cariño, la queremos mucho”. Otros muchachos
manifestaron que la forma como son tratados los hace impulsarse en sus estudios,
tanto, que mantienen una comunicación muy fluida con sus directores de grupo,
más allá del colegio.
Por observación, algunos padres de familia se muestran mas afectivos con unos
docentes que con otros, por la confianza mencionan algunos, esto permite
establecer una necesidad en el rol de la dirección de grupo que se ve manifestada
en el trato con el titular, pero, que se mantiene olvidada o al margen. De esta
manera, surge entonces unas preguntas, ¿Es importante la forma como se realiza
una dirección de grupo? ¿será que la falta de interés de los docentes por asumir el
liderazgo de sus estudiantes, ha permitido un desapego generalizado de los
estudiantes y padres con la escuela?
Giuseppe, I. (1985). Hacia una didáctica general dinámica. Buenos Aires, Argentina:
Kapelusz S.A. Recuperado de:
http://biblio3.url.edu.gt/Libros/didactica_general/14.pdf