rales dé División—^iuan Carlos Sánchez y Jorge: EstebafiGáeeresMbfiie-—, dos genera- les deMrigafi&,:-r-0e$árm Ángel: Cardozo y >Garlos: pm.arsAcMsrTV3d#^v4eealmirantés,, un brigadier del Aire,, máside^yeinte, coroneles y ¡ARGENTINOS! RECORDAR A NUESTROS MUERTOS ASESINADOS POR EL tenientes coroneles; y ¡numerosos oficiales, TERRORISMO APATRIDA, SERVIRÁ PARA QUE NUNCA REfW&MOS suboficiales y tropa asi como policías profe RORES DEI PASADO Y APREVDA^OS A CONVIVIR " É ^ sores, diplomáticos empresarios han sido A»tt»m»TO»COIt«TlDO»P0mi.TE»R0RI»»l0«HT«« 1970* 1»7» asennados por los terroristas hasta ofrecer eí estremecedor balance de 1 024 muertos y entre 2 500 y 2 600 heridos durante estos años de enfrentamiento Es todo esto una cuenta demasiado pe- sada como para ignorarla limitándose a pre- sen! ar como única referencia del dolor argén tino a las ciertamente desdichadas madres de la plaza de Mayo vistas en todas las televi síones del mundo cuyos operadores por desgracia no han tenido la curiosidad de andar unos metros apenas muy pocos, para llegar donde las madres de los soldados muertos lloran —por lo menos con tanta amargura como las otras— la perdida de sus seres queridos que ellos si operaban en nombre de la Ley bajo la bandera del Ejer- cito. Crítico momento Entre el 885 de la Diagonal Norte sede de FAMUS —Familiares de Muertos por la Sub versión— y la plaza de Mayo no hay más dis tancia que la marcada por una voluntad de sinformativa que ciertos colegas practican para presentar tan sólo la mitad de la realidad argentina cuando se acerca el crítico instante en que la nueva democracia afronte el pro blema de las responsabilidades de la repre- sión de terrorismo por parte del Ejercito tras una larga y bien orquestada intoxicación a es cala internacional de acusaciones brutales contra el Ejército en su totalidad como si un Ejército tuviese la culpa de hacer la guerra que los civiles no supieron evitar La tesis de las personas desaparecidas no es admisible de nmgjna manera y el Go blemo de la dictadura militar ha cometido un grave error, que sus enemigos han sabido ex plotar a fondo La información es necesaria y posible- mente cuando se conozcan las cifras volunta Esto» mortirea argentino» y extrañaros tnmoladoi en u couito por los sirvientes de la sin razón, no necesitan que nadie ñámente deformadas por la propaganda, las reclame por »u» derechos EHos mur eron por nuestra fe por nueitra patrio y por lo libertad, nada hay más noble que esto. dimensiones del drama quedarán en su justo Familiares y amigos de muertos por p la subversión (FAMUS) límite, pero entre la correcta y legitima infor Diagonal NorU MSvCapttal F*fr*t
maaon, y el JUICIO cnminal sentenciado por un E»t«a »OM»KteS0(V»M aáopor os armM «9 amigosd«l<»mu«'ioapof 1**u6v«rstón
Tribunal ante cualquier denuncia de un fami-
liar de persona desapareada que parece ser la pretensión de muchas entidades internacio- El pasado 26 de octubre el diario «La Nación», de Buenos Aires, publicó una esquela de nales en apoyo de determinadas organizacio la Asociación de Familiares de Militares asesinados por la subversión. La totalidad de nes argentinas sera preciso buscar un sis muertos victimas del terrorismo es más elevada, puesto que la Asociación sólo agrupa a tema de condena moral o política que solo las familias de militares asesinados y puede estimarse en 1.024 muertos encierre responsabilidades penales en los casos de violación flagrante de los derechos fnr la pena —más de 100 muertos homologa argentino sean capaces de superar sin revan- humanos, lo que no se produce cuando exis- dos— de sus culpas o aquellos militares chismos casi quince años de guerra civil será ten choques armados entre patrullas militares —alguno muy conocido^— que aprovecharon la única manera de que no se reproduzca. que cumplen órdenes y comandos terroristas el dehno sangnento del país para ajustar sus Y queda una consideración dé importancia. asaltantes de un cuartel cuentas personales con gentes que resulta La democracia que: há recupéfadp Argentina ban molestas para sus expansiones inconfe- no era posible en medió de la guerra civil ni La habilidad de Raúl Alfonsm el nuevo sables de la sangre derramada por la guerrilla anti- presidente de la República para equilibrar La guerra civil es una cosa el «gangste social. El terrorismo era el impedimento nú- estas dos exigencias —respetar (os derechos nsmo» disfrazado con la bandera celeste y mero uno para la democracia, y el'combate humanos y admitir que la guerra se hace con blanca otra muy diferente que consiguió aniquilarlo constituía la etapa la fuerza— será la clave del futuro de la Re Pero confundir a un Ejercito que cumple previa —todo lo dolorosá qué-sé quiera, pero púbbca Y naturalmente al decir esto desear con su deber aniquilando a un grupo armado indispensable—- para que Argentina reco- tamos de toda fórmula de pacificación por la terrorista con un pistolero fuera de la Ley brase la salud. Si hoy existe la libertad es práctica generosa del perdón a los criminales seria un error histórico quiza irreparable Que porque alguien luchó^poréíláfj-^; -' '[' corno por ejemplo los miembros de la stntes tra Triple A, simples asesinos que deben su- la generosidad y el buen sentido del pueblo Salvador LÓPEZ DE LA TORRE ABC (Madrid) - 16/11/1983, Página 35 Copyright (c) DIARIO ABC S.L, Madrid, 2009. Queda prohibida la reproducción, distribución, puesta a disposición, comunicación pública y utilización, total o parcial, de los contenidos de esta web, en cualquier forma o modalidad, sin previa, expresa y escrita autorización, incluyendo, en particular, su mera reproducción y/o puesta a disposición como resúmenes, reseñas o revistas de prensa con fines comerciales o directa o indirectamente lucrativos, a la que se manifiesta oposición expresa, a salvo del uso de los productos que se contrate de acuerdo con las condiciones existentes.