moleá culas de ARN pueden salir al citoplasma para su utilizacioá n posterior.
La
Ingeniería genética.
El ADN
El ácido desoxirribonucleico, frecuentemente abreviado como ADN, es un
aá cido nucleico que contiene instrucciones geneá ticas usadas en el desarrollo y
funcionamiento de todos los organismos vivos conocidos y algunos virus, y
es responsable de su transmisioá n hereditaria. El papel principal de la
moleá cula de ADN es el almacenamiento a largo plazo de informacioá n.
Muchas veces, el ADN es comparado con un plano o una receta, o un coá digo,
ya que contiene las instrucciones necesarias para construir otros
componentes de las ceá lulas, como las proteíánas y las moleá culas de ARN. Los
segmentos de ADN que llevan esta informacioá n geneá tica son llamados genes,
pero las otras secuencias de ADN tienen propoá sitos estructurales o toman
parte en la regulacioá n del uso de esta informacioá n geneá tica.
Desde el punto de vista quíámico, el ADN es un políámero de nucleoá tidos, es
decir, un polinucleoá tido. Un políámero es un compuesto formado por muchas
unidades simples conectadas entre síá, como si fuera un largo tren formado
por vagones. En el ADN, cada vagón es un nucleoá tido, y cada nucleoá tido, a su
vez, estaá formado por un azuá car (la desoxirribosa), una base nitrogenada
(que puede ser adenina→A, timina→T, citosina→C o guanina→G) y un
grupo fosfato que actuá a como enganche de cada vagón con el siguiente. Lo
que distingue a un vagón (nucleoá tido) de otro es, entonces, la base
nitrogenada, y por ello la secuencia del ADN se especifica nombrando soá lo la
secuencia de sus bases. La disposicioá n secuencial de estas cuatro bases a lo
largo de la cadena (el ordenamiento de los cuatro tipos de vagones a lo largo
de todo el tren) es la que codifica la informacioá n geneá tica: por ejemplo, una
secuencia de ADN puede ser ATGCTAGATCGC... En los organismos vivos, el
ADN se presenta como una doble cadena de nucleoá tidos, en la que las dos
hebras estaá n unidas entre síá por unas conexiones denominadas puentes de
hidroá geno.1
Para que la informacioá n que contiene el ADN pueda ser utilizada por la
maquinaria celular, debe copiarse en primer lugar en unos trenes de
nucleoá tidos, maá s cortos y con unas unidades diferentes, llamados ARN. Las
moleá culas de ARN se copian exactamente del ADN mediante un proceso
denominado transcripcioá n. Una vez procesadas en el nuá cleo celular, las
informacioá n contenida en el ARN se interpreta usando el coá digo geneá tico,
que especifica la secuencia de los aminoaá cidos de las proteíánas, seguá n una
correspondencia de un triplete de nucleoá tidos (codoá n) para cada
aminoaá cido. Esto es, la informacioá n geneá tica (esencialmente: queá proteíánas
se van a producir en cada momento del ciclo de vida de una ceá lula) se halla
codificada en las secuencias de nucleoá tidos del ADN y debe traducirse para
poder funcionar. Tal traduccioá n se realiza usando el coá digo geneá tico a modo
de diccionario. El diccionario "secuencia de nucleoá tido-secuencia de
aminoaá cidos" permite el ensamblado de largas cadenas de aminoaá cidos (las
proteíánas) en el citoplasma de la ceá lula. Por ejemplo, en el caso de la
secuencia de ADN indicada antes (ATGCTAGATCGC...), la ARN polimerasa
utilizaríáa como molde la cadena complementaria de dicha secuencia de ADN
(que seríáa TAC-GAT-CTA-GCG-...) para transcribir una moleá cula de ARNm que
se leeríáa AUG-CUA-GAU-CGC-... ; el ARNm resultante, utilizando el coá digo
geneá tico, se traduciríáa como la secuencia de aminoaá cidos metionina-leucina-
aá cido aspaá rtico-arginina-...
Las secuencias de ADN que constituyen la unidad fundamental, fíásica y
funcional de la herencia se denominan genes. Cada gen contiene una parte
que se transcribe a ARN y otra que se encarga de definir cuaá ndo y doá nde
deben expresarse. La informacioá n contenida en los genes (geneá tica) se
emplea para generar ARN y proteíánas, que son los componentes baá sicos de
las ceá lulas, los "ladrillos" que se utilizan para la construccioá n de los
orgaá nulos u organelos celulares, entre otras funciones.
Dentro de las ceá lulas, el ADN estaá organizado en estructuras llamadas
cromosomas que, durante el ciclo celular, se duplican antes de que la ceá lula
se divida. Los organismos eucariotas (por ejemplo, animales, plantas, y
hongos) almacenan la mayor parte de su ADN dentro del nuá cleo celular y
una míánima parte en elementos celulares llamados mitocondrias, y en los
plastos y los centros organizadores de microtuá bulos o centríáolos, en caso de
tenerlos; los organismos procariotas (bacterias y arqueas) lo almacenan en
el citoplasma de la ceá lula, y, por uá ltimo, los virus ADN lo hacen en el interior
de la caá psida de naturaleza proteica. Existen multitud de proteíánas, como por
ejemplo las histonas y los factores de transcripcioá n, que se unen al ADN
dotaá ndolo de una estructura tridimensional determinada y regulando su
expresioá n. Los factores de transcripcioá n reconocen secuencias reguladoras
del ADN y especifican la pauta de transcripcioá n de los genes. El material
geneá tico completo de una dotacioá n cromosoá mica se denomina genoma y, con
pequenñ as variaciones, es caracteríástico de cada especie.
Daños en el ADN
El ADN puede resultar danñ ado por muchos tipos de mutaá genos, que cambian
la secuencia del ADN: agentes alquilantes, ademaá s de radiacioá n
electromagneá tica de alta energíáa, como luz ultravioleta y rayos X. El tipo de
danñ o producido en el ADN depende del tipo de mutaá geno. Por ejemplo, la luz
UV puede danñ ar al ADN produciendo díámeros de timina, que se forman por
ligamiento cruzado entre bases pirimidíánicas.67 Por otro lado, oxidantes tales
como radicales libres o el peroá xido de hidroá geno producen muá ltiples danñ os,
incluyendo modificaciones de bases, sobre todo guanina, y roturas de doble
hebra (double-strand breaks).68 En una ceá lula humana cualquiera, alrededor
de 500 bases sufren danñ o oxidativo cada díáa. 69 70 De estas lesiones oxidativas,
las maá s peligrosas son las roturas de doble hebra, ya que son difíáciles de
reparar y pueden producir mutaciones puntuales, inserciones y deleciones
de la secuencia de ADN, asíá como translocaciones cromosoá micas.71
Muchos mutaá genos se posicionan entre dos pares de bases adyacentes, por
lo que se denominan agentes intercalantes. La mayoríáa de los agentes
intercalantes son moleá culas aromaá ticas y planas, como el bromuro de etidio,
la daunomicina, la doxorubicina y la talidomida. Para que un agente
intercalante pueda integrarse entre dos pares de bases, eá stas deben
separarse, distorsionando las hebras de ADN y abriendo la doble heá lice. Esto
inhibe la transcripcioá n y la replicacioá n del ADN, causando toxicidad y
mutaciones. Por ello, los agentes intercalantes del ADN son a menudo
carcinoá genos: el benzopireno, las acridinas, la aflatoxina y el bromuro de
etidio son ejemplos bien conocidos. 72 73 74 Sin embargo, debido a su
capacidad para inhibir la replicacioá n y la transcripcioá n del ADN, estas toxinas
tambieá n se utilizan en quimioterapia para inhibir el raá pido crecimiento de
las ceá lulas cancerosas.75
El danñ o en el ADN inicia una respuesta que activa diferentes mecanismos de
reparacioá n que reconocen lesiones especíáficas en el ADN, que son reparadas
en el momento para recuperar la secuencia original del ADN. Asimismo, el
danñ o en el ADN provoca una parada en el ciclo celular, que conlleva la
alteracioá n de numerosos procesos fisioloá gicos, que a su vez implica síántesis,
transporte y degradacioá n de proteíánas (veá ase tambieá n Checkpoint de danñ os
en el ADN). Alternativamente, si el danñ o genoá mico es demasiado grande para
que pueda ser reparado, los mecanismos de control induciraá n la activacioá n
de una serie de rutas celulares que culminaraá n en la muerte celular.
¿Qué es la tecnología del ADN recombinante?
ADN recombinante es una molécula que proviene de la unión artificial de dos
fragmentos de ADN. Por lo tanto, la tecnología de ADN recombinante es el
conjunto de técnicas que permiten aislar un gen de un organismo, para su
posterior manipulación e inserción en otro diferente. De esta manera podemos
hacer que un organismo (animal, vegetal, bacteria, hongo) o un virus produzca
una proteína que le sea totalmente extraña.
Estas teá cnicas se emplean normalmente para la produccioá n de proteíánas en
gran escala, ya que podemos hacer que una bacteria produzca una proteíána
humana y lograr una superproduccioá n, como en el caso de la insulina
humana, que actualmente es producida por bacterias en grandes recipientes
de cultivo, denominados biorreactores. Como las bacterias se multiplican
muy raá pidamente y pueden expresar grandes cantidades de proteíánas, es
posible lograr una sobreproduccioá n de la proteíána deseada. A esto
justamente se dedica la biotecnología, es decir a la utilizacioá n de
organismos vivos o de sus productos con fines praá cticos.
El desarrollo de la tecnologíáa del ADN recombinante fue posible gracias a
varias líáneas de investigacioá n: 1) el conocimiento de las enzimas de
restriccioá n, 2) la replicacioá n y reparacioá n de ADN, 3) la replicacioá n de virus y
plaá smidos y 4) la síántesis quíámica de secuencias de nucleoá tidos.
¿Cómo cortar y pegar el ADN? Tijeras moleculares: enzimas de
restricción
En 1975 Daniel Nathans y Hamilton O. Smith descubrieron un tipo de
proteíánas –las enzimas endonucleasas o enzimas de restricción- que
actuá an como “tijeras moleculares”, cortando la doble cadena de ADN a traveá s
del esqueleto de fosfatos sin danñ ar las bases. El descubrimiento de estas
enzimas condujo a dichos microbioá logos al Nobel en 1978 y dio origen a la
ingenieríáa geneá tica.
Las enzimas de restriccioá n son producidas por bacterias como meá todo de
defensa contra virus y degradan el ADN extranñ o.
A su vez, el propio genoma bacteriano estaá protegido contra sus enzimas de
restriccioá n mediante metilaciones (es decir, el agregado de un grupo metilo
[-CH3)]) en un aá tomo especíáfico de ciertos nucleoá tidos.
Estas moleá culas son indispensables para la ingenieríáa geneá tica, ya que
producen fragmentos que se pueden unir entre síá faá cilmente (con la ayuda
de un “pegamento molecular”: la enzima ligasa).
Las enzimas de restriccioá n cortan dejando extremos cohesivos o romos. Los
extremos cohesivos son generados cuando la enzima corta las dos hebras
asimeá tricamente, dejando los extremos de cada hebra de simple cadena
complementarios entre síá. Por otro lado, los extremos romos son generados
cuando la enzima corta las dos hebras por el mismo lugar, generando dos
extremos doble cadena.
Figura 1. Enzimas de restricción. Este tipo de endonucleasas puede dejar dos
tipos de extremos. En el primer caso, el corte genera nucléotidos de simple
cadena llamados extremos cohesivos. Estos extremos se pueden unir por medio
de otra enzima, la ADN ligasa. En el segundo caso, se generan extremos doble
cadena (extremos romos). Estos extremos también pueden ser unidos con la
ayuda de una enzima ligasa pero, como no los extremos no son
complementarios, la unión será más inespecífica.
Las enzimas de restricción permiten cortar el genoma de cualquier
organismo en pequeños fragmentos llamados fragmentos de restricción.
La colección de miles o millones de estos fragmentos se llama biblioteca
génica.
Biotecnología
La biotecnología es la tecnologíáa basada en la biologíáa,
especialmente usada en agricultura, farmacia, ciencia de los alimentos,
medio ambiente y medicina. Se desarrolla en un enfoque multidisciplinario
que involucra varias disciplinas y ciencias como biologíáa, bioquíámica,
geneá tica, virologíáa, agronomíáa, ingenieríáa, fíásica, quíámica, medicina y
veterinaria entre otras. Tiene gran repercusioá n en la farmacia, la medicina, la
microbiologíáa, la ciencia de los alimentos, la mineríáa y la agricultura entre
otros campos.
Probablemente el primero que usoá este teá rmino fue el ingeniero huá ngaro
Kaá roly Ereki, en 1919, quien la introdujo en su libro Biotecnología en la
producción cárnica y láctea de una gran explotación agropecuaria.1 2
Seguá n el Convenio sobre Diversidad Bioloá gica de 1992, la biotecnologíáa
podríáa definirse como "toda aplicación tecnológica que utilice sistemas
biológicos y organismos vivos o sus derivados para la creación o modificación
de productos o procesos para usos específicos".3 4
El Protocolo de Cartagena sobre Seguridad de la Biotecnologíáa del Convenio
sobre la Diversidad Bioloá gica5 define la biotecnología moderna como la
aplicacioá n de:
 Teá cnicas in vitro de aá cido nucleico, incluidos el aá cido
desoxirribonucleico (ADN) recombinante y la inyeccioá n directa de
aá cido nucleico en ceá lulas u orgaá nulos, o
 La fusioá n de ceá lulas maá s allaá de la familia taxonoá mica que superan
las barreras fisioloá gicas naturales de la reproduccioá n o de la
recombinacioá n y que no son teá cnicas utilizadas en la reproduccioá n y
seleccioá n tradicional.
Maíz Transgénico
Actualmente los íándices poblacionales se han elevado de manera exorbitante,
en relacioá n a deá cadas anteriores, es por esta razoá n que el evitar un
desabastecimiento de alimentos a lo largo y ancho de nuestro planeta se ha
hecho primordial.
Los alimentos de origen vegetal - que es el enfoque que le daremos a nuestro
trabajo - y animal, en su estado natural o modificado geneá ticamente, son
víáctimas de plagas y enfermedades que afectan negativamente su
productividad y calidad.
Con el fin aumentar las cosechas y mejorar la calidad de los productos, es
que desde un tiempo a esta parte se han ido masificando las teá cnicas de la
transgenia.
La transgenia se ha tratado de implantar como una posible solucioá n a las
hambrunas mundiales, puede ser de que esta postura no esteá tan alejada de
la realidad, sin embargo, tambieá n debemos tener presente que la codicia
humana no estaá ajena a las ciencias y la idea de tener grandes ingresos
econoá micos pueden tener mayor peso que el cuidado de la vida humana y
del medioambiente
En este trabajo expondremos que es el maíáz modificado geneá ticamente,
cuales son sus caracteríásticas, sus tipos, sus utilidades y cual es el impacto de
su cultivo en los aá mbitos social, econoá mico y medioambiental.
¿Que es un transgeá nico?
Un transgeá nico (u Organismo Modificado Geneá ticamente, OMG) es un
organismo vivo que ha sido creado artificialmente manipulando sus genes.
Las teá cnicas de ingenieríáa geneá tica consisten en aislar segmentos del ADN (el
material geneá tico) de un ser vivo (virus, bacteria, vegetal, animal e incluso
humano) para introducirlos en el material hereditario de otro. Por ejemplo,
el maíáz transgeá nico que se cultiva en Espanñ a lleva genes de bacteria que le
permiten producir una sustancia insecticida.
El maíáz transgeá nico:
En la actualidad son 4 los grandes cultivos transgeá nicos: Soya, Maíáz, Algodoá n
y Canola. Estos cultivos son controlados por empresas transnacionales que
praá cticamente mantienen su monopolio mundial. estas son Monsanto,
Aventis y Syngenta.
Uno de los mayores problemas que debe enfrentar un agricultor al momento
de cultivar el maíáz, es el gusano taladrador, pues este al introducirse en el
tallo de la planta simplemente la destruye.
A raíáz de esto es que el laboratorio Ciba - Geigy ha aislado un gen de la
bacteria Bacillus thurgienesis, que habita en el suelo de los cultivos.
El gen aislado es el responsable de la síántesis de la toxina Bt. Que mata al
gusano.
Al ser incorporado este gen el genoma de la planta de maíáz, hace a esta
inmune al gusano taladrador, debido a que la planta produce su propia
toxina. Toxina que tambieá n ingerimos nosotros
No conforme con esto, los mismos investigadores han agregado al mismo
maíáz otro gen que lo hace resistente al herbicida "Basta" (producido por la
transnacional Aventis). Esto significa que el agricultor puede utilizar este
herbicida que es muy potente, sin que se danñ e la planta de maíáz y
exterminando toda clase de maleza e insecto que rodeen o habiten el cultivo.
Dos nuevas caracteríásticas que hacen a estas semillas muy atractivas para el
productor.
La planta tiene un tercer gen que la hace resistente a un antibioá tico, la
ampicilina. El agregar este gen tiene como uá nico propoá sito el de ser un
marcador que permite asegurarse que los otros dos genes realmente se
estaá n expresando. La objecioá n reside en que este antibioá tico se usa tanto en
humanos como en animales y se teme que al ingerirlo los animales en los
alimentos, aparezcan bacterias que se hagan resistentes a este antibioá tico y
esto pueda perjudicar la salud humana.
Transgenia y sus consecuencias
Si bien la transgenia “mejora” geneá ticamente la planta de maíáz, tiene varias
contradicciones, como por ejemplo, los cultivos de maíáz no transgeá nico que
se encuentren en las cercaníáas del cultivo transgeá nico, seraá n contaminados e
intervenidos geneá ticamente por medio de la polinizacioá n. Y esta no es la
uá nica consecuencia. Pues, los granos o semillas transgeá nicas en muchas
ocasiones, son esteá riles o sea no son viables. Por lo que el agricultor que
decida cultivarlas se veraá en la obligacioá n de depender de las
multinacionales que venden estas semillas y -si no toma las precauciones de
separar correctamente los cultivos, como míánimo fuera de un radio de 300
metros - de paso obligaraá a los agricultores que colindan con eá l a estar en la
misma situacioá n. Lo que afectaríáa claramente a la economíáa local. Los
transgeá nicos refuerzan el control de la alimentacioá n mundial por parte de
unas pocas empresas multinacionales., que al mismo tiempo de constituir un
medio para luchar contra el hambre, aumentan los problemas alimentarios
en otros aá mbitos. Los paíáses que han adoptado masivamente el uso de
cultivos transgeá nicos son claros ejemplos de una agricultura que a ratos
tiende a no ser sostenible. En Argentina, por ejemplo, la entrada masiva de
soja transgeá nica exacerboá la crisis de la agricultura con un alarmante
incremento de la destruccioá n de sus bosques primarios, el desplazamiento
de campesinos y trabajadores rurales, un aumento del uso de herbicidas y
una grave sustitucioá n de la produccioá n de alimentos para consumo local. La
solucioá n al hambre y la desnutricioá n pasa por el desarrollo de tecnologíáas
sostenibles y justas, el acceso a los alimentos y el empleo de teá cnicas como la
agricultura y la ganaderíáa ecoloá gicas.
Otro de los efectos, es que la tierra va perdiendo su riqueza, las tierras se
debilitan y necesitan entonces que para la segunda o tercera siembra se les
apliquen fertilizantes (los cuales tienen efectos sobre el cultivo y obviamente
sobre sus consumidores finales); despueá s de la aplicacioá n de fertilizantes la
consecuencia loá gica es que no soá lo el cultivo seraá “beneficiado” sino que
apareceraá n plagas nocivas, para lo cual tambieá n existe una solucioá n que las
transnacionales ofrecen: insecticidas y herbicidas, los cuales tienen
repercusiones altamente toxicas para los campesinos, la biodiversidad y por
supuesto, para los consumidores finales de esta forma, quienes estaá n
vendiendo el problema, venderíáan tambieá n la solucioá n; problema y solucioá n
que afectan irreversiblemente el entorno natural.
Otra cosa que se debe tener presente es que una vez que se introduce una
especie transgeá nica al medioambiente, es imposible retirarla o limpiarla.
Ademaá s los Cultivos transgeá nicos pueden cruzarse con malezas de la misma
especie y transformarse en suá per malezas que destruyen sus ecosistemas
naturales.
Las consecuencias de los transgeá nicos en la salud humana y el medio
ambiente auá n no se han determinado; al ingerir alimentos transgeá nicos
estamos potencialmente expuestos a proteíánas poco conocidas, como
tambieá n a toxinas. Ni se ha entendido completamente el impacto real que
podríáan tener los cultivos transgeá nicos, en los muchos tipos de insectos y la
fauna silvestre
Varios de los transgeá nicos que hoy circulan en el mundo, no tienen los
estudios necesarios que acrediten la posibilidad de ser consumidos por seres
humanos y es asíá como en Australia, donde se descubrioá que el maíáz MON
810, producido por la multinacional Monsanto, fue comercializado sin antes
realizar los estudios pertinentes para verificar su alergenicidad (capacidad
de provocar alergias) Los estudios realizados arrojaron que esta semilla
creaba alergias, hipersensibilidad cutaá nea y hasta danñ os pulmonares en
ratas de laboratorio. Algo similar ocurrioá con el maíáz MON 863, que al ser
estudiado, cuando ya era comercializado, se determino que En los ensayos
de
alimentacioá n con ratas se presentaron síántomas de
envenenamiento, asíá como danñ os en el híágado y los rinñ ones de los animales.
Lo que deja en tela de juicio si los transgeá nicos son realmente viables y si los
intereses econoá micos de las transnacionales que los producen son capaces
de atentar contra la vida humana y la biodiversidad.
Otros Usos del maíáz transgeá nico
El maíáz transgeá nico, ademaá s de sus usos en la industria alimentaria y
cosmeá tica, se le puede utilizar en la produccioá n de biocombustible, sin
embargo su eficacia no es tan grande como el combustible derivado de
aceites vegetales que reducen entre un 45 y 50 % la emisioá n de gases
invernaderos, mientras que el etanol, derivado del maíáz, solo reduce las
emisiones en menos del 30 %. Y al ser destinado para la produccioá n de
combustibles, tiene la desventaja de aumentar el valor del costo de
alimentacioá n mundial.
El maíáz transgeá nico en nuestro paíás
En Chile no esta permitida la produccioá n de maíáz ni ninguna otra semilla
transgeá nico para su consumo al interior del paíás, soá lo su produccioá n estaá
permitida para la exportacioá n. Desde enero de este anñ o es que se tramita un
proyecto de ley que permita la produccioá n para consumo interno, pero el
proyecto auá n descansa en el congreso.
En enero de este anñ o, se tuvo registro de los primeros intoxicados por
insecticidas en campos de maíáz transgeá nico en chile. Esto derriboá la idea
propulsada por los defensores de la transgenia acerca de la disminucioá n en
el uso de insecticidas, pues, al aumentar la resistencia de las plantas, se
pueden utilizar productos insecticidas, sin provocar mayores de anñ os al
fenotipo de la planta y su fruto.
La transgenia representa una amenaza a la agricultura ecoloá gica y a la
independencia econoá mica de la agricultura autoá ctona de cada localidad, por
lo que para protegerla se deben tomar las medidas de seguridad que
requieran; tal como el distanciamiento míánimo de 300 metros entre un
cultivo natural y otro transgeá nico.
La agricultura transgeá nica para algunos, no representa maá s que los intereses
econoá micos de ciertas transnacionales que incluso han cruzado las fronteras
de nuestro paíás. Pues la utilizacioá n de insecticidas y abonos soá lo intervienen
de manera negativa e irreversible el entorno natural que los rodea y la flora y
fauna que lo conforma. Y por ninguá n motivo seríáan la solucioá n a las
hambrunas mundiales, pues, estas tienen su solucioá n en el aumento de la
diversidad bioloá gica de los alimentos, que a causa de los transgeá nicos se esta
viendo desplazada y disminuida.

Tras estas plantaciones se encontraba la Sociedad Agríácola Beyce,

exportadora de semillas cuyos oríágenes teníáan los laboratorios de Monsanto
y Syngenta.

Actualmente nuestro paíás no cuenta con una legislacioá n que respalde

realmente la agricultura orgaá nica y natural, y tampoco sobre la rotulacioá n de
alimentos con ingredientes transgeá nicos, tal como ocurre en la unioá n
Europea, Brasil y Argentina

En conclusioá n:

El desarrollo de la biotecnologíáa enfocada hacia la transgenia no deja de ser

un tema que causa poleá mica.

Para algunos, la transgenia puede representar una víáa de exterminio del

hambre mundial, asíá como para otros representa la bonanza econoá mica
personal.

Debemos tener presente que las consecuencias del consumo de alimentos

modificados geneá ticamente, no estaá n del todo claras y tampoco los estudios
que se les han realizado a estos alimentos son completamente veraces, tal es
el caso de distintas variedades de maíáz que generan alergias, deterioro de
oá rganos, etc. y auá n asíá se mantuvieron por mucho tiempo en el mercado.