Professional Documents
Culture Documents
1. Proceso inmediato:
1.1. Concepto
El proceso inmediato solo se podrá incoar, cuando se presente alguno de los siguientes
supuestos:
2. El imputado ha confesado la comisión del delito, en los términos del artículo 160°.
Lea también: «DL 1194 convierte un proceso especial en la regla y al proceso común
en la excepción».
1.1.1. Flagrancia:
El artículo 259[1] del Código Procesal Penal establece los siguientes supuestos específicos
de Flagrancia Delictiva: “La Policía Nacional del Perú detiene, sin mandato judicial, a
quien sorprenda en flagrante delito. Existe flagrancia cuando:
En efecto, conforme se desprende del artículo 259° del Código Procesal Penal, este
permite la detención policial sin autorización judicial solo cuando exista flagrancia:
1. Flagrancia clásica (strictu sensu): los incisos 1 y 2 del artículo en mención regula esta
forma de Se trata del inicio del iter criminis o la consumación del delito. En cualquiera
de ellos el sujeto es sorprendido y detenido, no existiendo huida.
2. Cuasi flagrancia (flagrancia material): el inciso 3 regula esta flagrancia. Aquí el agente ha
sido descubierto por un tercero, solo que ha huido. Su aprehensión se produce
inmediatamente luego de su huida. Este tipo de flagrancia tiene dos elementos que la
caracterizan, esto es, la inmediatez personal y temporal (el autor es percibido,
perseguido y detenido luego de realizar el hecho delictivo).
3. Flagrancia presunta (ex post ipso): el inciso 4 regula esta modalidad. A diferencia de los
dos supuestos anteriores, aquí no se ha sorprendido al autor (inmediatez personal), solo
existiendo indicios de su comisión por la existencia de instrumentos o efectos del delito
que, habría cometido.
Vídeo: Mario Pablo Rodríguez Hurtado destaca los ejemplos de Roxin, Jiménez de
Asúa y López Albújar.
1.2.2. Confesión
Para su validez deberá ser corroborada por otros elementos de convicción, y deberá ser
presentada ante el Juez o Fiscal, con asistencia de su abogado.
Vídeo: ¿Es posible aspirar a un proceso penal universal? Ponencia de Juan Luis
Gómez Colomer.
1.2.3. Elementos de convicción evidentes
Los elementos de convicción son actos de investigación desarrollados por el Policía y/o el
Fiscal, que sustentan la imputación de un hecho delictivo a una persona determinada.
Es un delito que sanciona al que omite cumplir su obligación de prestar los alimentos que
establece una resolución judicial, conforme al artículo 149 del Código Penal.
2. Objetivo:
Fortalecer la actuación de los operadores del Sistema de Justicia Penal en la aplicación del
proceso inmediato en casos de flagrancia y otros supuestos.
3. Alcance:
Establecer los procedimientos en el marco del Decreto Legislativo Nº 1194, a ser
aplicados por los operadores de justicia.
Lea también: Imponen multa de 790 soles a abogado por no asistir a audiencia.
4. Finalidad:
Dotar a los operadores de justicia de un instrumento operativo, que permita la
implementación adecuada del Decreto Legislativo Nº 1194, que regula el proceso
inmediato, en casos de flagrancia y otros supuestos.
Lea también: Técnicas para memorizar las ideas básicas del alegato.
5. Procedimiento:
Paso 01: Supuestos de aplicación y decisión de procedencia
1.1. Flagrancia
1.1.1. Intervención
1.1.2. Calificación
1.2.1. Calificación
1.3.1. Calificación
1.4. 1. Calificación
1.5.1. Calificación.
[1] De conformidad con el artículo 2º de la Ley Nº 29372 publicada el 09 junio 2009, que
incorpora el inciso 6 a las Disposiciones Finales del Código Procesal Penal de 2004, el
artículo 259º entran en vigencia en todo el país el 1 de julio de 2009.
1. GENERALIDADES
2. DEFINICIÓN
Puede ser definido como aquel proceso especial que, en aras de la celeridad de los procesos
penales, pasa directamente de la fase de diligencias preliminares al juicio oral, obviando llevar a
cabo las etapas de investigación preparatoria propiamente dicha y la intermedia de un proceso
común1[1].
1[1] NEYRA FLORES, José Antonio. Tratado de Derecho Procesal Penal. IDEMSA. Tomo II. Junio. 2015. Pág.
45.
2[2] CALDERÓN SUMARRIVA, Ana. Derecho Procesal Penal. Editorial san Marcos. Diciembre 2014. Pág. 125.
burocrático, rutinario e innecesario cuando están dadas las condiciones para formular
acusación3[3].
Para su incoación no se requiere de la aceptación del imputado, solo que el Fiscal – y solo él –
inste este procedimiento ante el Juez de la Investigación Preparatoria4[4]. El proceso inmediato,
se encuentra determinado por la falta de necesidad de realizar la investigación preparatoria,
debido a la existencia de flagrancia delictiva, confesión del imputado en la comisión del delito y/o
porque los elementos de convicción evidencian la materialización del ilícito y la participación del
imputado5[5].
El Art. 446° del CPP 2004 regula los supuestos de aplicación del proceso inmediato, siendo una
novedad que la norma impone al fiscal el deber de solicitar, bajo responsabilidad, la vía del proceso
inmediato al juez de investigación preparatoria, referimos que es una novedad, pues en la
redacción anterior, solamente existía la posibilidad de que el fiscal efectúe tal solicitud.
El primer supuesto, del proceso inmediato es para toda aquella persona que haya sido
sorprendido y detenido en flagrante delito, en cualquiera de los supuestos del Art. 259°. La
flagrancia delictiva exige las notas de inmediatez personal, inmediatez temporal y necesidad
urgente de la intervención policial: el sujeto es sorprendido realizando actos de ejecución del
delito. La flagrancia es lo opuesto a la clandestinidad de la comisión de un delito. El delincuente
debe estar en el teatro de los hechos, o muy cerca de él, y en una relación inmediata con los bienes
3[3] VINELLI VEREAU, Renzo. “El proceso inmediato. Comentarios sobre el Decreto Legislativo N° 1194”, en
la Revista Actualidad Penal. Vol. 16. Lima. Octubre. 2015. Pág. 70.
4[4] SAN MARTÍN CASTRO, César. Derecho Procesal Penal. INPECCP (Instituto Peruano de Criminología y
Ciencias Penales) y CENALES (Centro de Altos Estudios en Ciencias Jurídicas, Políticas y Sociales). Noviembre.
2015. Pág. 803-804.
5[5] NEYRA FLORES, José Antonio. Tratado de Derecho Procesal Penal. IDEMSA. Tomo II. Junio. 2015. Pág.
46.
delictivos o con la ejecución del delito, de modo que siendo observado por la autoridad policial se
torne imprescindible su intervención para poner fin a la situación delictiva que ha creado por su
propia conducta. Esa misma lógica opera para la cuasiflagrancia, que abarca al individuo que logra
huir de la escena del delito pero es perseguido e inmediatamente detenido después de cometerlo
o intentarlo – no se exige la percepción directa de la comisión delictiva-6[6]. La flagrancia es un
instrumento de naturaleza estrictamente procesal que ha sido dotada de importancia
constitucional, que justifica privar de libertad a una persona, fundado en: presupuestos fácticos
debidamente autorizados por la ley, existencia de una vinculación fáctica suficiente directa e
inmediata del sujeto con el hecho delictivo por parte de un tercero, inmediatez (coetaneidad) en
los hechos tanto temporal (percibido durante la comisión del delito) como personal (es ubicado en
el sitio y es vinculado con el delito, o al ser detenido es relacionado con el objeto o instrumentos
del delito) y; por último, una ostensiblidad7[7].
En nuestro ordenamiento jurídico, los únicos supuestos en los cuales la policía puede
detener constitucionalmente sin mandato judicial a una persona están contenidos en el Art. 259°
del Código Procesal Penal, y se denominan, detención policial en flagrante delito. En la realidad, la
policía detiene frente a un hecho jurídico que tiene la apariencia de delito. Recuérdese que, el
policía no es abogado, por lo cual, no tiene la capacidad para calificar un hecho jurídico en un tipo
penal8[8], por ello, inmediatamente deberá comunicarse con el fiscal penal de turno. Será el fiscal
quién, desde el primer segundo que la persona está detenida, tendrá solo veinticuatro horas para
establecer si la detención policial es constitucional, para calificar si el acto jurídico del detenido en
la comisaría tiene o no relevancia penal, para realizar las diligencias urgentes de investigación, y
recabar los elementos de convicción, tanto de cargo como de descargo, y finalmente, si concurren
los presupuestos del Art. 268 del Código Procesal Penal, redactar y presentar al juzgado, el
requerimiento de prisión preventiva, todo dentro de las veinticuatro horas; por ello, cuando la
policía no comunica inmediatamente al fiscal la detención de una persona, vicia sustancialmente
desde su nacimiento la investigación, por lo que, al policía le corresponde responder funcional y
penalmente por su omisión9[9].
6[6] SAN MARTÍN CASTRO, César. Derecho Procesal Penal. INPECCP (Instituto Peruano de Criminología y
Ciencias Penales) y CENALES (Centro de Altos Estudios en Ciencias Jurídicas, Políticas y Sociales). Noviembre.
2015. Pág. 804.
7[7] ARAYA VEGA, Alfredo G. El Delito en Flagrancia. Editorial soluciones Ideas. Lima. 2015. Pág. 63.
8[8] BAZALAR PAZ, Víctor M. “El proceso inmediato según el Decreto Legislativo N° 1194: especial referencia
a la omisión a la asistencia familiar”, en la Revista Actualidad Penal. Vol. 16. Lima. Octubre. 2015. Pág. 43.
9[9] BAZALAR PAZ, Víctor M. “El proceso inmediato según el Decreto Legislativo N° 1194: especial referencia
a la omisión a la asistencia familiar”, en la Revista Actualidad Penal. Vol. 16. Lima. Octubre. 2015. Pág. 44.
El segundo supuesto del proceso inmediato se da cuando el imputado ha confesado. En
cuanto al valor de la prueba de la confesión se establece que la misma debe hacerse en los términos
del Art. 160° del CPP, el cual establece en qué consiste la confesión y cuándo esta posee valor
probatorio.
Desde una perspectiva funcional debe entenderse como el reconocimiento del imputado
de la participación en el hecho objeto de la imputación. El procesado debe admitir los cargos o
imputación formulada en su contra, es decir, reconocer la comisión de los hechos incriminados.
Por lo demás, ese testimonio debe ser intrínsecamente válido, es decir, prestado libremente y en
estado normal de las facultades psíquicas del declarante ante el fiscal en presencia de su abogado
defensor10[10].
El tercer supuesto de proceso inmediato es aquel que deberá ser iniciado, porque en las
diligencias preliminares ya se cuenta con “evidentes elementos de convicción”, y que estas hayan
sido acumuladas durante las diligencias preliminares, y previo interrogatorio del imputado. Existen
10[10] SAN MARTÍN CASTRO, César. Derecho Procesal Penal. INPECCP (Instituto Peruano de Criminología y
Ciencias Penales) y CENALES (Centro de Altos Estudios en Ciencias Jurídicas, Políticas y Sociales). Noviembre.
2015. Pág. 804-805.
11[11] NEYRA FLORES, José Antonio. Tratado de Derecho Procesal Penal. IDEMSA. Junio. 2015. Pág. 52.
12[12] SAN MARTÍN CASTRO, César. Derecho Procesal Penal. INPECCP (Instituto Peruano de Criminología y
Ciencias Penales) y CENALES (Centro de Altos Estudios en Ciencias Jurídicas, Políticas y Sociales). Noviembre.
2015. Pág. 805.
elementos de convicción suficientes, cuando de lo actuado en la investigación preliminar se ha
hallado elementos incriminatorios de calidad tal, que bastan para sustentar una acusación13[13].
Debe tenerse presente que los supuestos del numeral 1 del artículo bajo análisis no
necesariamente deben ser concurrentes, pues como lo señala expresamente el propio numeral
mencionado, bastará con que se dé alguno de los supuestos14[14]. Basta la presencia de una de
estas circunstancias para que el fiscal esté en la posibilidad de solicitar el procedimiento inmediato,
no es necesario que concurran las tres15[15].
Como quiera que el CPP 2004 reconoce como derecho fundamental la libertad de declaración
y, por ende, que el imputado tiene derecho al silencio, es posible que este no se someta al
interrogatorio, por lo que cabe preguntarse si dicho obstáculo procesal impide la incoación del
procedimiento inmediato. Tal obstáculo puede ocurrir tanto en los casos de flagrancia delictiva
como en los de evidencia delictiva. Así las cosas, no es dable rechazar la incoación del
procedimiento inmediato, pues basta que el imputado esté presente y que se le haya dado la
posibilidad de que ejerza su defensa material, que se le emplace para que responsa a los cargos y
que aporte lo que corresponda a su defensa material. La esencia de esta posibilidad procesal no
está en la actitud del imputado frente a los cargos – de ser así solo sería viable en el supuesto de
13[13] NEYRA FLORES, José Antonio. Tratado de Derecho Procesal Penal. IDEMSA. Tomo II. Junio. 2015. Pág.
52.
14[14] VINELLI VEREAU, Renzo. “El proceso inmediato. Comentarios sobre el Decreto Legislativo N° 1194”,
en la Revista Actualidad Penal. Vol. 16. Lima. Octubre. 2015. Pág. 75.
15[15] AVALOS RODRIGUEZ, Constante Carlos. Mecanismos de Simplificación procesal en el Código procesal
Penal de 2004. Junio. 2014. Pág. 246.
16[16] SAN MARTÍN CASTRO, César. Derecho Procesal Penal. INPECCP (Instituto Peruano de Criminología y
Ciencias Penales) y CENALES (Centro de Altos Estudios en Ciencias Jurídicas, Políticas y Sociales). Noviembre.
2015. Pág. 806.
la confesión -, sino en la entidad de los elementos de convicción que rodean al caso y que hacen
viable estimar que existen datos patentes del hecho delictivo y de su autor17[17].
El D. Leg. N.° 1194 ha incorporado dos supuestos a la redacción del Art. 446° del CPP 2004. El
primer supuesto incorporado se encuentra en el numeral 2, que señala la excepción a la aplicación
de este proceso inmediato. Esta excepción se aplica en aquellos casos en que, por su complejidad,
se requiera ulteriores actos de investigación, conforme lo establece el numeral 3 del artículo 342
del CPP - que establece las condiciones mediante las cual el fiscal puede declarar complejo el
proceso-. La norma exceptúa del “proceso inmediato” a los supuestos especificados en el numeral
3 del Art. 342°, que establece que, “corresponde al fiscal emitir la disposición que declara complejo
el proceso cuando: a) Requiera de la actuación de una cantidad significativa de actos de
investigación; b) Comprenda la investigación de numerosos delitos; c) Involucra una cantidad
importante de imputados o agraviados; d) Demanda la realización de pericias que comportan la
revisión de una nutrida documentación o de complicados análisis técnicos; e) Necesita realizar
gestiones de carácter procesal fuera del país; f) Involucra llevar a cabo diligencias en varios distritos
judiciales; g) Revisa la gestión de personas jurídicas o entidades del Estado; o h) Comprenda la
investigación de delitos perpetrados por integrantes de una organización criminal, personas
vinculadas a ella o que actúan por encargo de la misma”18[18]. El apartado 2 del Art. 446 del CPP
2004 dispone que los casos complejos, según las reglas estatuidas por el Art. 342.3 del CPP 2004,
están excluidos del proceso inmediato19[19].
El segundo supuesto, lo encontramos en el numeral 3 del Art. 446° del CPP 2004, el referido
artículo señala que en los casos de una causa seguida contra varios imputados, solo es posible el
proceso inmediato si estos se encuentran implicados en el mismo delito y se encuentren en los
supuestos de aplicación del proceso inmediato consagrados en el Art. 446 inciso 1) del CPP. El
proceso inmediato, es también aplicable en caso de pluralidad de imputados, pero se establecen
dos exigencias para ello, la primera es que todos ellos se encuentren en una de las situaciones
previstas en el numeral 1 del Art. 446°, esto es que se encuentren dentro de los supuestos de
aplicación de este proceso, y que estén implicados en el mismo delito20[20]. De existir pluralidad
de imputados, será posible el proceso inmediato si todos los encausados se encuentran en la
17[17] SAN MARTÍN CASTRO, César. Derecho Procesal Penal. INPECCP (Instituto Peruano de Criminología y
Ciencias Penales) y CENALES (Centro de Altos Estudios en Ciencias Jurídicas, Políticas y Sociales). Noviembre.
2015. Pág. 806.
18[18] BAZALAR PAZ, Víctor M. “El proceso inmediato según el Decreto Legislativo N° 1194: especial
referencia a la omisión a la asistencia familiar”, en la Revista Actualidad Penal. Vol. 16. Lima. Octubre. 2015.
Pág. 47.
19[19] SAN MARTÍN CASTRO, César. Derecho Procesal Penal. INPECCP (Instituto Peruano de Criminología y
Ciencias Penales) y CENALES (Centro de Altos Estudios en Ciencias Jurídicas, Políticas y Sociales). Noviembre.
2015. Pág. 811
20[20] NEYRA FLORES, José Antonio. Tratado de Derecho Procesal Penal. IDEMSA. Tomo II. Junio. 2015. Pág.
53.
misma situación jurídica: flagrancia, confesión o evidencia delictiva (Art. 446.3 del CPP 2004), que
presupone en principio prueba acabada del delito y, a su vez, simplicidad material de la
causa21[21]. La razón de esta disposición se encuentra en la naturaleza del proceso inmediato,
dado que está reservado para ser aplicado a hechos delictivos de índole sencilla y de fácil solución,
sea porque el autor fue sorprendido en flagrante delito, porque ha confesado o porque existe
suficiencia de elementos de convicción, siendo esto así, no sería funcional aplicarlo a causas con
varios imputados y de cierta complejidad22[22].
21[21] SAN MARTÍN CASTRO, César. Derecho Procesal Penal. INPECCP (Instituto Peruano de Criminología y
Ciencias Penales) y CENALES (Centro de Altos Estudios en Ciencias Jurídicas, Políticas y Sociales). Noviembre.
2015. Pág. 812.
22[22] GÁLVEZ VILLEGAS, Tomás Aladino y otros. El Código Procesal Penal. Comentarios descriptivos,
explicativos y críticos. Jurista Editores. Mayo. 2008. Pág. 831.
23[23] VINELLI VEREAU, Renzo. “El proceso inmediato. Comentarios sobre el Decreto Legislativo N° 1194”,
en la Revista Actualidad Penal. Vol. 16. Lima. Octubre. 2015. Pág. 76.
Luis Martín Lingán Cabrera
I.- INTRODUCCIÓN.
II.- ANÁLISIS.
El Código Procesal Penal del 2004 (en adelante CPP2004) se regula un proceso común
(arts.321 a 445), en el cual se pueden distinguir principalmente las siguientes etapas:
En el libro V del CPP2004 se han regulado un grupo de procesos a los que se denomina
especiales, por las singulares características que presenta cada uno de ellos. Así, estos
procesos son: el proceso inmediato, proceso por razón de la función pública (proceso por
delitos de función atribuidos a altos funcionarios públicos, procesos por delitos comunes
atribuidos a congresistas y altos funcionarios públicos, procesos por delitos de función
atribuidos a otros funcionarios públicos), proceso por delito de ejercicio privado de la
acción penal, proceso de seguridad, proceso de terminación anticipada, proceso por
colaboración eficaz, proceso por faltas.
El proceso inmediato (arts. 446 al 448 del CPP2004) puede ser definido como aquel
proceso especial en el que en aras de culminar con celeridad un proceso penal, el Fiscal,
luego de culminadas las diligencias preliminares, sin necesidad de Formalizar la
Investigación Preparatoria, ni transcurrir por la Etapa Intermedia, lleva su caso a juicio oral.
Sin embargo, según se señala en el todavía vigente artículo 447 del CPP2004 también
puede realizarse el proceso inmediato cuando el Fiscal ha formalizado la Investigación
Preparatoria, siempre y cuando éste lo solicite antes de los treinta días de haberse
producido esta formalización.
Con la modificación introducida por Decreto Legislativo N° 1194 se señala que para los
supuestos b y c del artículo 446 (confesión del imputado y evidentes elementos de
convicción), el requerimiento de proceso inmediato se presenta luego de culminar las
diligencias preliminares o, en su defecto, antes de los treinta días de formalizada la
investigación preparatoria.
b) El imputado ha confesado la comisión del delito, en los términos del artículo 160, o;
c) Los elementos de convicción acumulados durante las diligencias preliminares, y previo
interrogatorio del imputado, sean evidentes. (Art. 446 del CCP2004)
Como se verifica, con las modificaciones realizadas mediante Decreto Legislativo N° 1194
al trámite del proceso inmediato, cuando se presente algunos de los supuestos antes
indicados, ya no será una facultad del Fiscal decidir si inicia un proceso inmediato o no,
sino será una obligación. De no hacerlo incurrirá en responsabilidad funcional.
Actualmente, al menos en Cajamarca, en los supuestos antes indicados, se formulaba
Acusación Directa, para ir a la Etapa Intermedia, sin necesidad de Formalizar la
Investigación Preparatoria, pero no había predilección por incoar el proceso inmediato.
Esto podía hacerse por la circunstancia de que era facultad del Fiscal decidir si inicia
proceso inmediato, lo cual necesariamente deberá cambiar a partir de la vigencia del
Decreto Legislativo N° 1194, pues ahora necesariamente deberá incoarse un proceso
inmediato.
2.2.2.3 Excepciones a la necesidad de incoación del proceso inmediato
A.- En caso de procesos complejos
En el numeral 3, del artículo 342 se establecen los supuestos en los cuales el Fiscal debe
emitir la disposición que declara complejo el proceso: a) Requiera de la actuación de una
cantidad significativa de actos de investigación; b)Comprenda la investigación de
numerosos delitos; c)Involucra una cantidad importante de imputados o agraviados;
d)demanda la realización de pericias que comportan la revisión de una nutrida
documentación o de complicados análisis técnicos; e)necesita realizar gestiones de
carácter procesal fuera del país; f)involucra llevar a cabo diligencia en varios distritos
judiciales; g)revisa la gestión de personas jurídicas o entidades del Estado; o h)comprenda
la investigación de delitos perpetrados por integrantes de una organización criminal,
personas vinculadas a ella, o que actúan por encargo de la misma.
Entonces, cuando se presenten los supuestos de complejidad antes indicados, se
exceptúa la incoación del proceso inmediato.
Entonces, si en una investigación hay varios imputados, de los cuales todos no están en
un supuesto de flagrancia, hayan confesado el delito o no existan suficientes elementos
de convicción contra todos, no procederá incoar el proceso inmediato.
24[1] En este acápite aparentemente hay un error, pues el numeral anterior hace referencia a la excepción
del trámite de procesos inmediatos, cuando estamos ante supuestos para declarar un proceso complejo.
En el artículo 446.4 del CPP2004 se establece que independientemente de lo señalado en
los numerales anteriores, el Fiscal deberá también deberá solicitar la incoación del proceso
inmediato para los delitos de omisión a la asistencia familiar y los de conducción en estado
de ebriedad o drogadicción, sin perjuicio de lo señalado en el numeral 3 del artículo 447
del CPP2004.
Con el Decreto Legislativo N° 1194 se han realizado modificaciones al trámite del proceso
inmediato.
Así, a partir de la vigencia del Decreto Legislativo N° 1194, el artículo 447 del CPP2004 es
nominado “Audiencia única de incoación del proceso inmediato en casos de
flagrancia delictiva”
Así, con la modificación, el trámite del proceso inmediato para el supuesto de flagrancia
delictiva será el siguiente:
- Al término del plazo de la detención policial establecida en el artículo 264 del CPP2004,
el Fiscal debe solicitar al Juez de la Investigación Preparatoria la incoación del proceso
inmediato.
- -El Juez, dentro de las 48 horas siguientes al requerimiento Fiscal, realiza una Audiencia
Única de incoación para determinar la procedencia del proceso inmediato.
- Recibido el auto que incoa el proceso inmediato, El Juez penal competente realiza la
audiencia única de juicio inmediato en el día. En todo caso, su realización no debe exceder
las setenta y dos (72) horas desde la recepción, bajo responsabilidad funcional.
B.- Trámite del proceso inmediato para supuestos de confesión del imputado y
existencia de evidentes elementos de convicción
Para estos supuestos, con la modificación introducida mediante Decreto Legislativo se dice que
rige el procedimiento antes descrito en lo que corresponda, es decir, el procedimiento para los
supuestos de flagrancia, en lo que corresponda.
Con la modificación introducida por el Decreto Legislativo N° 1194 se señala que “Al
término del plazo de la detención policial establecida en el artículo 264 del CPP2004, el
Fiscal debe solicitar al Juez de la Investigación Preparatoria la incoación del proceso
inmediato” Se da a entender que en situaciones de flagrancia, siempre deberá incoarse el
proceso inmediato. Sin embargo, nos preguntamos qué pasa si dentro de las 24 horas de
detención en flagrancia, el investigado, en los supuestos que procedan, ha aceptado
someterse al principio de oportunidad y ha pagado la reparación civil a favor de la parte
agraviada ¿Procederá incoar el proceso inmediato? Consideramos que no, pues el caso
ya se solucionó, no siendo adecuado sobrecargar al Poder Judicial de casos que pueden
solucionarse tempranamente.
Así mismo, atendiendo a que en el Decreto Legislativo N° 1194 se establece que para los
supuestos establecidos en los literales b y c, numeral 1 del artículo 446 (supuestos de
confesión del imputado y evidentes elementos de convicción), rige el procedimiento que
se describe en el referido Decreto para los supuestos de flagrancia, nos preguntamos si el
Poder Judicial tendrá la capacidad logística y de personal para cumplir con lo señalado en
la norma. De no ser así, deben adoptarse las medidas urgentes para lograr el cumplimiento
de lo regulado en el Decreto antes indicado, pues de lo contrario, solo quedará en el papel
como una buena intención, sin resultados en la práctica.
“1.- El fiscal debe solicitar la incoación del proceso inmediato, bajo responsabilidad, cuando
se presente alguno de los siguientes supuestos:
a) El imputado ha sido sorprendido y detenido en flagrante delito, en cualquiera de los
supuestos del artículo 259.
b) El imputado ha confesado el delito en los términos del artículo 160; o
c) Los elementos de convicción acumulados durante las diligencias preliminares, y previo
interrogatorio del imputado, sean evidentes. “
Consideramos que dicho Decreto Legislativo es inconstitucional por recortar una serie de
derechos fundamentales, entre ellos, el derecho a la defensa y el debido proceso. Sin
embargo, este desarrollo excede los límites de este trabajo, por lo que nos avocaremos a
explicar por qué el fiscal no “debe” solicitar la incoación del proceso inmediato. A nuestro
parecer el fiscal “puede” solicitar la incoación al proceso inmediato.
El proceso inmediato es un tipo de proceso especial que está regulado en el Nuevo Código
Procesal Penal. Los procesos especiales en el NCPP son siete: el proceso inmediato, el
proceso por razón de la función pública, el proceso de seguridad, el proceso por delito del
ejercicio privado de la acción penal, el proceso de terminación anticipada, proceso por
colaboración eficaz y el proceso por faltas. Estos procedimientos especiales “están previstos
para delitos muy concretos o circunstancias específicas de especial relevancia procesal,
configurándose modelos de procedimientos muy propios, por entero alejados del modelo
ordinario. Los procedimientos especiales están previstos para circunstancias o delitos
específicos, en los que se discute una concreta pretensión punitiva”.[1]
Podemos mencionar, sin ahondar en el tema, que el artículo 2°, inciso 24, numeral f,
establece que nadie puede ser detenido sino por mandamiento escrito y motivado del Juez
o por las autoridades policiales en caso de flagrante delito, sin especificar qué se debe
entender por flagrante delito. El artículo 259 del NCPP, por su parte, regula los tipos de
flagrancia en los que se puede encontrar el imputado, los cuales son flagrancia en sentido
estricto (inciso 1), la cuasi flagrancia (inciso 2) y la presunción de flagrancia(incisos 3 y 4).
No obstante esta delimitación que llenaría el contenido del artículo 2°, inciso 24, numeral f,
el Tribunal Constitucional ha delimitado el significado de flagrante delito.
En ese sentido, podemos afirmar que la presunción de flagrancia regulada en el artículo 259,
incisos 3 y 4 del NCPP es inconstitucional, pues no cumple con los elementos de inmediatez
temporal, ni personal, por lo que una detención que no cumpla con dichas características,
no podrá ser llevada a cabo por un proceso inmediato, sino, por el contrario, esta deberá ser
llevada por el proceso común.
Ahora bien, el fiscal “debe” solicitar la incoación del proceso inmediato. Según la RAE, el
verbo deber significa estar obligado a algo por la ley divina, natural o positiva.[3] Por ese
motivo, el Ministerio Público está obligado por la ley positiva a que, en caso de delitos
realizados en flagrancia, necesariamente se realicen bajo los cánones del proceso inmediato.
Bajo este supuesto, consideramos que este artículo está violentando derechos fundamentales
regulados en la Constitución Política del Perú y, a su vez, recogidos en el Título Preliminar
del NCPP. La constitución regula en el artículo 158° que el Ministerio Público es autónomo.
El artículo 159°, por su parte, atribuye al Ministerio Público la función de promover de
oficio, o a petición de parte, la acción judicial en defensa de la legalidad y de los intereses
públicos tutelados por el derecho. El título preliminar del NCPP en su artículo IV, menciona
que el titular de la acción penal es el Ministerio Público.
El profesor Mario Rodríguez Hurtado menciona que el inciso 1 del Artículo IV del Título
Preliminar del NCPP indica “que le corresponde la titularidad del ejercicio público de la
acción, esto es, que sólo a él, en la medida que tiene calidad de órgano civil autónomo de
persecución del delito y sus agentes, le corresponde poner en marcha la maquinaria judicial
para la apropiada determinación y realización de la pretensión punitiva. Esta tarea
persecutoria, en consecuencia, importa investigar, acusar y probar la acusación, en
manifiesto cumplimiento de la carga probatoria que la distingue”[4].
Siendo el Ministerio Público un órgano civil autónomo de persecución del delito, entonces,
le correspondería, con la independencia de la que ha sido dotada, tener la posibilidad de
poder determinar cuándo se debería en un caso de flagrancia ir por un proceso inmediato o
por un proceso común. Por ejemplo, en un caso en el que falten testigos o pericias que, por
su naturaleza, demoren más que el plazo establecido para click here el proceso inmediato,
el fiscal deba tener la posibilidad de determinar que esta falta de pruebas podría ser un
aliciente para poder ir a un proceso común, en el cual se pueda investigar con mayor
precisión. De esta manera nos ceñiríamos a lo que establece la constitución y, además, con
esto se podría garantizar un efectivo derecho de defensa, pues, consideramos que solo podría
irse efectivamente a un proceso inmediato cuando hayan pruebas suficientes para
determinar la existencia de un delito. De estimar el Fiscal que no hay elementos suficientes
para poder llevar un proceso con la gran celeridad y plazos cortos que posee el proceso
inmediato en casos de flagrancia, este debería tener la posibilidad de llevar el proceso a la
vía ordinaria, pues así este tiene mayores posibilidades de poder investigar el delito y, el
imputado, por su parte, tendría mayores opciones de poder ejercer un mejor derecho de
defensa técnico y poder presentar, al igual que el Fiscal, las pruebas pertinentes para el caso
concreto.
Queremos concluir este corto trabajo mencionando que estas consideraciones vertidas líneas
arriba han sido consideradas por otras legislaciones que regulan el proceso inmediato en
casos de flagrancia. Así, “en Francia se suprime la fase de instrucción en un asunto de
flagrancia cuando se cumplen cuatro condiciones:
La existencia de un delito, que puede recibir el calificativo de flagrante o no. Cuando sea
flagrante, debe tener una pena de prisión de al menos seis meses para que este trámite
resulte de aplicación (artículo 395).
En opinión de la fiscalía, no se requiera investigación preliminar o, dicho de otro modo, los
elementos con los que se cuente constituyan material suficiente para llevar adelante el
caso y presentarlo ante el órgano de juicio (artículo 393).
La persona se encuentra detenida luego de haber sido sorprendida en flagrancia.
La persona procesada acepta que su causa se tramite mediante comparecencia inmediata
(artículo 397).”[5]
En el Proceso Penal Francés deben cumplirse taxativamente estas cuatro condiciones para
que se pueda ir a un proceso inmediato. Observamos que en este caso, el Fiscal tiene la
posibilidad -no el deber- de determinar que no se requiera investigación preliminar cuando
considere que haya elementos suficientes para llevar adelante al caso. Como vemos, el
artículo 393 le brinda al Fiscal la autonomía que debe poseer el Ministerio Público en un
sistema acusatorio -o mixto- y, además, con ello, se evita que se recorten derechos
constitucionales como el derecho de defensa en caso se siga un proceso inmediato sin
elementos que puedan constituir material suficiente para llevar adelante el caso.
Por otro lado, hemos advertido que constitucionalmente el Ministerio Público es autónomo,
siendo el artículo 446 contrario a lo que la norma constitucional establece. Por ello,
consideramos que se debe cambiar la redacción de dicho artículo por el verbo “poder”, pues
solo así podremos garantizar la autonomía del Ministerio Público y tener la posibilidad de
no recortar derechos fundamentales a los imputados, tal como lo ha previsto acertadamente
el legislador Francés en los casos en que se pueda llevar a cabo un proceso inmediato.
[3] http://dle.rae.es/?id=Bu2rLyz|Bu8i6DA
Uno de los procesos especiales previstos en el Código Procesal Penal de 2004, conocido como
Proceso Inmediato ha sido modificado por el Decreto Legislativo 1194.
Originalmente, este proceso estaba destinado a reducir los plazos, dándole al fiscal la
oportunidad de interponer acusación cuando tiene todos los medios probatorios suficientes
para imputarle responsabilidad al detenido.
Se ha establecido que este es un proceso obligatorio para los casos de flagrancia, de modo
que se ha modificado el artículo 446 del Código y se ha dado una estructura completamente
nueva a los artículos 447 y 448.
Asimismo, se exonera al fiscal del deber de incoar el proceso inmediato en los casos complejos
donde sea necesaria la realización de ulteriores actos de investigación (inciso 2).
El antiguo inciso 2 ha sido colocado ahora en el inciso 3, donde se establece que ante una
pluralidad de imputados solo es posible el proceso inmediato si todos ellos se encuentran en
una de las situaciones previstas en el primer párrafo. Además, mantiene la disposición de que
los delitos conexos en los que estén involucrados otros imputados no se acumulan, salvo que
ello perjudique al debido esclarecimiento de los hechos o la acumulación resulte indispensable.
Finalmente, se indica en el inciso 4 que en los casos de delitos de omisión de asistencia familiar
y los de conducción en estado de ebriedad o drogadicción el fiscal también deberá solicitar la
incoación del proceso inmediato, sin perjuicio de que las partes pueden instar la aplicación del
principio de oportunidad, de un acuerdo reparatorio o de la terminación anticipada (numeral 3
del artículo 447).
El artículo 447 ahora tiene una estructura completamente distinta y nueva. De ella resalta el
párrafo 1 en donde se establece que al término del plazo de la detención policial, el fiscal
deberá solicitar al juez de la investigación preparatoria la incoación del proceso inmediato,
quien resolverá dentro de las cuarenta y ocho horas para determinar la procedencia del
proceso inmediato. Durante todo el trámite se mantiene la detención del imputado hasta la
realización de la audiencia.
El párrafo cuarto establece que la audiencia única de incoación del proceso inmediato es de
carácter inaplazable. Asimismo, el párrafo seis establece que aceptado el requerimiento, el
fiscal procede a formular acusación dentro de las 24 horas; el cual deberá ser remitido en el
día al juez penal por parte del juez de la investigación preparatoria; y el primero dictará
acumulativamente el auto de enjuiciamiento y de citación a juicio.
La audiencia de juicio inmediato es regulada por el artículo 448, que presenta también una
nueva estructura. Allí se dispone que el juez penal realice la audiencia única de juicio inmediato
en el día de recibido el auto que incoa el proceso inmediato, de no ser ello posible, su
realización no debe exceder las setenta y dos horas.
El párrafo cuarto de este artículo establece que el juicio se realiza en sesiones continuas
eininterrumpidas hasta su conclusión; por lo que el juezpenal que instale el juicio no puede
conocerotros hasta que culmine el ya iniciado. Finalmente, es posible aplicar las reglas del
proceso común cando no estén previstas para el proceso inmediato siempre que sean
compatibles con su naturaleza célere.
La Ley.
04 Noviembre 2015
El pasado 30 de Agosto del 2015, se publicó en el diario El Peruano el D.L. N° 1194 el cual
tiene por objetivo regular el proceso inmediato en caso de flagrancia, es decir agilizar las
sentencias contra personas que hayan sido encontradas cometiendo delitos infraganti,
incluido “el manejar en estado de ebriedad”.
En el caso que un chofer fuera sorprendido por la policía manejando en estado etílico es
inmediatamente detenido por PELIGRO COMÚN y llevado a la Fiscalía donde el fiscal de
turno determinará la gravedad del delito.
Este proceso tiene una duración máxima de 24 horas, si se determina que pase ante un
juzgado el cual dispondrá de un plazo máximo de 72 horas para sentenciar y determinar
cuántos años se privará de libertad al procesado.
Durante todo el proceso el acusado queda en calidad de detenido y pierde el brevete por un
periodo de 3 años según determina la ley.
Aspectos a tomar en cuenta
Es importante tener como referencia que con dos copas pequeñas de vino o dos vasos de
cerveza son suficientes para superar la medida mínima (0.5 gramos por litro de sangre) por
lo que estará en estado etílico.
Saludos cordiales
Proceso Inmediato para Delitos en
Flagrancia
Posted on September 13, 2016 adminPosted in Uncategorized
En los supuestos de flagrancia, la Policía Nacional del Perú, detiene sin mandato judicial,
a quien sorprenda en flagrante delito, ante la existencia de que: El agente es descubierto en
la realización del hecho punible, que el agente acaba de cometer el hecho punible y es
descubierto, que el agente ha huido y ha sido identificado durante o inmediatamente
después de la perpetración del hecho punible, por el agraviado, por la persona que haya
presenciado el hecho, otros, y; es encontrado dentro de las veinticuatro 24 horas de
producido.
Los elementos de convicción, como los actos de investigación desarrollados por el Fiscal
y/o Policía Nacional del Perú, que sustente la imputación de un hecho delictivo a una
persona determinada.
Por otro lado, se presenta la incoación obligatoria del proceso inmediato en caso de los
delitos por omisión a la asistencia familiar y la conducción en estado de ebriedad y
drogadicción, conforme con al artículo 149° y 247° del Código Penal respectivamente.
Cuerpo Normativo:
Modelo o Formato de Acta de Audiencias para cada uno de los estadios del proceso
inmediato, para los órganos jurisdiccionales que conocerán los procesos de Flagrancia,
Omisión a la Asistencia Familiar y Conducción en Estado de Ebriedad o Drogadicción.
El reconocido penalista sostuvo que la excesiva carga procesal de los despachos fiscales haría
inviable el uso facultativo del proceso inmediato.
Lea también: Proponen ley que faculta a fiscales decidir si solicitan el inicio del
proceso inmediato.
La agresión por violencia o amenaza al policía puede generar los siguientes resultados:
1º. Muerte
2º. Lesiones graves
3º. Lesiones simples
4º. Faltas contra la salud
5º. Coacción
El asesinato del policía: pena de 25 a 30 años (artículo 108-A). Lesiones graves contra el
policía: pena de 6 a 12 años (artículo 121, segundo párrafo). Homicidio preterintencional
del Policía: pena de 15 a 20 años (artículo 121, tercer párrafo).
La violencia contra el policía seguida de muerte tiene una pena abstracta de 12 a 15 años
(artículo 367, tercer párrafo). Está justificada por la pena del asesinato (25 a 30) o del
homicidio preterintencional del policía (15 a 20).
La violencia contra el policía seguida de lesiones graves tiene una pena abstracta de 8 a 12
años (artículo 367, segundo párrafo). Está justificada por la pena de lesiones graves contra
el policía (6 a 12).
Las lesiones graves a policías tenían una pena de 5 a 12 años, y la violencia contra el
policía seguida de lesiones graves una pena de 4 a 7 años.
El problema mayor se presenta con la pena abstracta de la violencia contra el Policía que
produce lesiones simples, faltas, o no genera lesión; la pena abstracta es de 8 a 12 años,
mientras que las lesiones simples tiene una pena no mayor de 2 años, articulo 122; y la
coacción no mayor de 2 años, articulo 151.
La violencia contra el policía por coacción, o que produce lesiones simples o faltas, como
figura agravada, se incorporó a la legislación en el año 2006, con la pena de 4 a 7 años
(Ley 28878 del 17 de agosto del 2006), luego se aumentó de 6 a 12 años (Decreto
Legislativo 982 del 22 de julio del 2007), y ahora es de 8 a 12 años (Ley 30054 del 30 de
junio del 2013).
Hay necesidad de modificar la pena de este tipo alternativo de violencia Policial agravada,
disminuyéndola; asimismo incorporando el tipo penal agravado de lesiones simples a
Policías, como se ha hecho con las lesiones graves del artículo 121, a fin de poder imponer
penas superiores a los 2 años, el máximo actual de las lesiones simples, respetando el
principio de proporcionalidad, por ejemplo 4 a 7.
Mientras se produce el cambio legislativo, se debe imponer una pena concreta inferior a
8 años, a partir de una interpretación constitucional de la ley penal, a la luz del
principio de proporcionalidad, teniendo en cuenta los siguientes criterios:
Lea también: «DL 1194 convierte un proceso especial en la regla y al proceso común
en la excepción».
Guatemala: 1 a 3 años
El Salvador: 1 a 3 años
Chile: 1 y medio a 3 años
México: 1 a 2 años
Argentina: no mayor de 1 año
Colombia: 4 a 8 años
España: 6 meses a 3 años
Lea también: César San Martín analiza exhaustivamente el proceso inmediato (mal
llamado proceso de flagrancia).
La sanción penal por violencia contra la Policía exige la verificación que el acto policial
sea legítimo, es decir, se haya realizado o intentado realizar de forma reglamentaria.
El acto policial legítimo es un hecho constitutivo del delito de violencia contra la policía y
por tanto debe ser probado.
En la audiencia única de incoación del proceso inmediato el juez debe verificar que la
Fiscalía cuenta con actos de investigación suficientes para formular una acusación, por
tanto para establecer un acto Policial legítimo.
Los supuestos de flagrancia son casos de descubrimiento del delito, el conocimiento que
se ha cometido; no necesariamente permiten alcanzar la evidencia delictiva.
La flagrancia no evidencia a los hechos impeditivos, casos de faz negativa del delito;
causas de justificación, causas de exclusión de la culpabilidad, causa de exculpación;
tampoco la flagrancia permite probar las circunstancias atenuantes de la pena, por ejemplo
las eximentes incompletas del artículo 21 del Código penal.
Lea también: «DL 1194 convierte un proceso especial en la regla y al proceso común
en la excepción».
El proceso inmediato tiene como principal presupuesto a la evidencia delictiva, que puede
alcanzarse en los supuestos de flagrancia del delito de violencia a la autoridad, salvo que
existan elementos de prueba de la causa de justificación derecho de resistencia legal, si se
prefiere, legítima defensa, e incluso una legítima defensa imperfecta, que pueden llevar
según su nivel desde que el fiscal no formalice investigación preparatoria, que el juez
estime una excepción de improcedencia de acción, o que por necesidad de prueba de la
defensa, complejidad probatoria, deba seguirse el caso en la del proceso común.
Las circunstancias del caso de violencia contra la Policía, más aun por la dinámica del
proceso inmediato, exigen que el juez verifique la capacidad de culpabilidad o
imputabilidad cuando hay información que lo justifica.
El reciente caso del joven que agredió a un Policía, se informó que sufre trastorno de
personalidad limítrofe o borderline; la persona sufre una importante afectación del control
de impulsos que puede llevar a una inimputabilidad del artículo 20 inciso 1 o
responsabilidad restringida del artículo 21 del Código penal.
La necesidad de prueba de una enfermedad mental puede llevar a que no sea procedente
utilizar el proceso inmediato.
En horas o días una persona puede ser acusada, juzgada y sentenciada. Tal velocidad
procesal exige:
En los procesos penales por delito de omisión a la asistencia familiar, de forma sistémica,
se desconoce que los tipos penal de omisión propia tienen el elemento capacidad
individual de acción.
El autor tiene la capacidad material o jurídica de cumplir el deber legal de actuar, en este
caso, capacidad económica para cumplir con la obligación alimentaria.
Sin embargo en el proceso penal la presunción de inocencia impide aplicar tal regla, de allí
que no basta con incorporar la sentencia de alimentos y la liquidación de pensión de
alimentos, se necesita probar la capacidad individual de acción.
Legis.pe
6417
0
Share
El maestro Celis Mendoza Ayma ha publicado sus reflexiones a propósito de la garantía del plazo
razonable en el proceso inmediato por flagrancia. Es un deber inexorable tener en cuenta su
posición, no solo porque se trata de un académico de polendas, sino porque su trayectoria como
juez penal le hace amalgamar con audacia la teoría con la práctica:
Esos dos momentos –policial y fiscal–, por lo general, generan un contexto de innegable
presión institucional, de tal manera que se configura un contexto para que el imputado
acepte de manera incondicional los hechos.
Esa es la razón por lo que es urgente la defensa del proceso inmediato regular y el plazo
necesario modulado dentro de 30 días, para los casos fáciles; y cuestionar el proceso
inmediato por flagrancia, centralmente por la anulación de la garantía procesal del plazo
necesario.
Acierta el profesor Alfredo Araya, cuando refiere que el plazo razonable debe
configurarse en función de la complejidad del caso; empero, una cosa es la modulación del
plazo en función de las necesidades concretas del caso, y otra asumir fictamente que el
momento de las 24 horas configura el plazo necesario para preparar una estrategia de
defensa, por más que el caso sea fácil. De hecho los casos complejos previstos
normativamente –y los de complejidad no previstos normativamente– requieren de los
plazos previstos para el proceso común. En ese orden, para los casos fáciles y flagrantes
urge operativizar el proceso inmediato regular.
El maestro Celis Mendoza, siempre atento a la reforma procesal penal, ha vertido sus
reflexiones en una suculenta nota intitulada «El proceso inmediato por flagrancia (PIF)
en el contexto de la reforma del proceso penal». Lo que hay que destacar de estas
reflexiones es el acento que el doctor Mendoza le pone al contexto histórico, social,
político y cultural en el que se desenvuelven las instituciones jurídicas. Y eso es lo que
celebramos de esta nota: su análisis no solo del texto, sino del contexto.
Lea también: Diez cosas que debes saber de de Claux Roxin y de su teoría del dominio
de la voluntad en aparatos organizados de poder.
El profesor Celis escribe que, ante la imposibilidad de que todos los casos vayan a parar al
juicio oral, se promovió intensamente la aplicación de «salidas alternativas» como los
mecanismos de simplificación procesal (terminación anticipada, proceso inmediato, etc.).
Es en ese contexto que la terminación anticipada se convirtió en el mecanismo
alternativo de mayor uso, al punto que la prensa celebraba que las sentencias batieran
records de rapidez.
Si bien, como apunta el doctor Celis, esa genuina expresión del fast justice se detuvo
cuando se separó el trámite del proceso de terminación anticipada de la solicitud de
prisión preventiva, de manera que la justicia negociada (con pleno respeto a la autonomía
de voluntad del imputado, como dice el profesor) volvía a los despachos, la misma
perversión se presentó bajo un nuevo ropaje: el proceso inmediato por flagrancia. «De
hecho –dice el doctor– operativamente así se manifiesta, pues la generalidad de los casos
concluyen en la audiencia única de incoación de proceso inmediato con una terminación
anticipada». Aquí el clímax de sus reflexiones:
Pero ya no se trata de quebrar la voluntad del imputado con una petición de prisión
preventiva como mecanismo de coacción; sino que ahora es el imperativo del Decreto
Legislativo 1194, que impone un vertiginoso procedimiento, y deja solo como alternativa
a una sorprendida defensa a optar por una terminación anticipada, para obtener una
disminución de la pena, como premio por su renuncia al juicio oral.
Por otro lado, así se avance a la estación del juicio inmediato (juicio oral) en el proceso
inmediato por flagrancia, este no garantiza en absoluto una preparación de información
para la defensa, pues la única fase de producción de información se superó con las fugaces
24 horas de la Detención Preliminar. El trascurso del tiempo, entre la Detención
Preliminar y el desarrollo de la Audiencia Única del Juicio Inmediato por flagrancia, es
básicamente de preparación ritual del juicio oral; en ese orden, la defensa técnica está
enervada o anulada.
Se ingresa al juicio oral con una situación procesal vencida; en efecto, no se trata de
mera desventaja procesal, sino de una real situación de defensa derrotada, deviniendo el
juicio oral en una mera parafernalia. En ese contexto, la única opción de la defensa
técnica del imputado es el sometimiento al procedimiento de terminación anticipada,
en la expectativa de obtener una disminución de pena tasada legalmente; con ello, el
retorno vigoroso y remozado de la terminación anticipada (mecanismo eficaz y expeditivo
en quebrar voluntades para la cuantificación estadística de sentencias) pero ahora con la
cobertura del proceso inmediato por flagrancia.
Lea también: Razones político criminales del proceso inmediato y su aplicación en el
Perú: una discusión actual.
Lea también: «Si el proceso inmediato fuera facultativo los fiscales no lo usarían».
Texto completo de la ponencia de César Nakazaki en el II Pleno Jurisdiccional.
Uno y otro advierten que con la implementación del proceso inmediato se estarían
vulnerando derechos elementales del procesado, v. gr. el derecho de defensa expresado en
el plazo razonable que todo investigado debe tener para preparar su defensa; también se
dice que su aplicación no estaría siendo acorde con la ratio legis del Decreto Legislativo
Nº 1194.
Por tanto, a continuación abordaremos estos aspectos, desde nuestro modesto punto de
vista. Con relación al primer cuestionamiento, debo señalar que no es correcto atribuirle la
«desproporcionalidad de la pena» a la implementación del proceso inmediato; pues, las
reglas o criterios para la medición de la pena privativa de la libertad están establecidos, no
en las normas que regulan el proceso inmediato, sino en la norma material –parte general
del Código Penal, a través del sistema de tercios–; por tanto, achacarle la
desproporcionalidad de las penas a la aplicación del proceso inmediato, es un error.
La violación de garantías procesales no es atribuible al proceso inmediato, sino a los
operadores jurídicos
Vea también: Pedro Miguel Angulo Arana: problemas en torno al proceso inmediato
Lea también: Si el proceso inmediato fuera facultativo los fiscales no lo usarían Texto
completo de la ponencia de César Nakazaki
Por su parte, el juez también capacitado hará un control exhaustivo del requerimiento de
incoación del proceso inmediato. A su turno, el abogado defensor del imputado, basado en
el Principio de Contradicción, también coadyuvará en el control del requerimiento
de incoación del proceso inmediato postulado por el Ministerio Público.
Lea también: Juicios contra animales (I): el célebre caso de una marrana francesa
Nótese que la aplicación del proceso inmediato está sujeta normativamente a diversos
controles, por consiguiente, no debe existir la posibilidad de vulneración de las garantías
procesales del investigado, ni de la parte agraviada; dependerá su eficacia y legitimidad
procesal y constitucional de quiénes sean los operadores jurídicos que intervengan en su
aplicación. Aunado a ello cabe anotar –y recordar siempre– que el proceso inmediato, es
un «proceso especial», por lo tanto, su aplicación no debe ser una regla general, es una
excepción al proceso penal común, que su incoación debe tener lugar única y
exclusivamente ante los supuestos regulados en el Decreto Legislativo Nº 1194, en lo
demás el caso penal debe ser ventilado en la vía del proceso común.
Y por último, con relación a la ratio legis del Decreto Legislativo Nº 1194, cabe precisar
que aquella señalada en la exposición de motivos, como el fortalecimiento de la seguridad
ciudadana, la lucha contra la delincuencia y el crimen organizado, en especial combatir el
sicariato, la extorsión, el tráfico ilícito de drogas e insumos químicos, la usurpación y
tráfico de terrenos y la tala ilegal de madera, no resulta muy coherente con la excepción
que se señala en el mismo Decreto Legislativo, al indicarse que quedan exceptuados en
su aplicación los casos en los que por su complejidad sean necesarios ulteriores actos de
investigación. Pues, los casos de criminalidad organizada o la alta delincuencia requiere la
realización de actos de investigación ulteriores sucesivos, que no hacen viable de por sí la
incoación de procesos inmediatos.
SINOPSIS:
EL PROCESO INMEDIATO:
Se conoce como proceso inmediato a la serie de procedimientos que tiene como objeto
emitir una respuesta efectiva por parte de la jurisdicción frente a casos de flagrancia
delictiva, confesión sincera o configuración de elementos objetivos de convicción que
generen certeza de la comisión del tipo penal.
Dicho esto, el objeto de lo dispuesto en el Decreto Legislativo Nº 1194 es que el art. 446º
del Decreto Legislativo Nº 957 se aplique a casos en los que un sujeto haya sido
aprehendido por la policía, o en su defecto cuando la confesión haya sido previamente
validada conforme a los requisitos prescritos en el art. 160º del Código Procesal Penal,
siempre y cuando el proceso no sea declarado complejo de acuerdo a lo prescrito en el
inciso 3) del art. 342º de la norma adjetiva.
Una de las características más resaltantes de la norma pasa porque, luego de que venciera
el plazo de detención en sede policial (24 horas para los casos en general y 15 días
calendario para delitos de terrorismo y tráfico ilícito de drogas), el Fiscal remitirá al Juez
en un plazo no mayor de 48 horas un requerimiento de inicio de Proceso Inmediato, siendo
que el magistrado a cargo tendrá la misión de establecer la medida coercitiva a dictarse
en contra del imputado, la aplicación del Principio de Oportunidad -en caso sea necesario-
, y la procedencia o no del procedimiento; siendo –conforme a lo prescrito en el art.448º
del NCPP- que el Juez debe en un plazo máximo de 72 horas desde la recepción del
requerimiento fiscal convocar a una Audiencia Única.
Para concluir con el resumen de este nuevo dispositivo, es preciso señalar que en el caso
de personas que cometieron delitos tales como omisión de asistencia familiar y conducción
en estado de ebriedad se podrá convocar a este proceso a efecto de establecer una
condena pronta dada la flagrancia de los delitos antes expuestos.
CONCLUSIONES:
Este tipo de procesos lo que busca es, entre otras cosas, asegurar la eficacia y la celeridad
de los procesos penales en caso de aquellos infractores de la ley penal que hayan sido
capturados por la Policía Nacional, a efectos de que no se acumulen procesos y con ello
se agrave la sobrecarga procesal en los distritos judiciales del país.
Este es uno de los avances en la aplicación del Código Procesal Penal del 2004, pues el
dispositivo legal se encuentra en Lima solo aplicable a los procesos por delitos contra la
Administración Pública[2], por lo que el planeamiento de aplicación del texto legal va a
crecentando, siendo tarea pendiente del Estado –a través de los poderes Ejecutivo y
Judicial- emplazar un solo ordenamiento procesal para así estar involucrados en una serie
de normativas que solo confunden más al operador jurídico.
Abogado
06 de Diciembre del 2015 - 11:59 » Textos: Javier Trujillo » Fotos: Javier Trujillo
Uno de los procesos especiales previstos en el Código Procesal Penal (CPP), conocido
como Proceso Inmediato fue modificado mediante el Decreto Legislativo N° 1194, que
entró en vigencia desde el 1° de diciembre.
Inicialmente el proceso era para reducir los plazos, a fin de que el fiscal acuse cuando
tenga todos los medios probatorios para imputarle responsabilidad al detenido. La
modificación del artículo 446 y la nueva estructura otorgada a los artículos 447 y 448 del
Código, establecen que es un proceso obligatorio para los casos de flagrancia.
Proceso. Según la norma, el proceso a seguir incluye que el fiscal, luego del término del
plazo de la detención policial, solicite la investigación preparatoria al juez, y éste en 48
horas tendrá que realizar una audiencia única para determinar la procedencia de la
solicitud en caso se cumplan los tres criterios establecidos.
El juez, en este sentido, deberá seguir tres formas: La primera, que dispone la procedencia
de la medida coercitiva requerida por el fiscal contra el sospechoso; la segunda, la
procedencia del principio de oportunidad; y la última está referida al inicio inmediato del
proceso.
El juez penal efectuará una audiencia única de juicio oral, pública e inaplazable en el
día. De no darse en el momento, la audiencia no debe exceder las 72 horas, a fin de que la
fiscalía exponga en forma resumida los hechos delictivos que imputan al acusado y las
pruebas halladas.
1. El Fiscal podrá solicitar la vía del proceso inmediato, cuando: a) el imputado ha sido sorprendido y detenido
en flagrante delito; o, b) el imputado ha confesado la comisión del delito; o, c) los elementos de convicción
acumulados durante las diligencias preliminares, y previo interrogatorio del imputado, sean evidentes.
2. Si se trata de una causa seguida contra varios imputados, sólo será posible el proceso inmediato si todos
ellos se encuentran en una de las situaciones previstas en el numeral anterior y estén implicados en el mismo
delito. Los delitos conexos en los que estén involucrados otros imputados no se acumularán, salvo que ello
perjudique al debido esclarecimiento de los hechos o la acumulación resulte indispensable.
1. El Fiscal, sin perjuicio de solicitar las medidas de coerción que correspondan, se dirigirá al Juez de la
Investigación Preparatoria formulando el requerimiento de proceso inmediato. El requerimiento se
presentará luego de culminar las diligencias preliminares o, en su defecto, antes de los treinta días de
formalizada la Investigación Preparatoria.
1. El Fiscal debe solicitar la incoación del proceso inmediato, bajo responsabilidad, cuando se
presente alguno de los siguientes supuestos: a) El imputado ha sido sorprendido y detenido en
flagrante delito, en cualquiera de los supuestos del artículo 259; b) El imputado ha confesado la
comisión del delito, en los términos del artículo 160; o c) Los elementos de convicción acumulados
durante las diligencias preliminares, y previo interrogatorio del imputado, sean evidentes.
2. Quedan exceptuados los casos en los que, por su complejidad, de conformidad con lo dispuesto
en el numeral 3 del artículo 342, sean necesarios ulteriores actos de investigación.
3. Si se trata de una causa seguida contra varios imputados, sólo es posible el proceso inmediato si
todos ellos se encuentran en una de las situaciones previstas en el numeral anterior y estén
implicados en el mismo delito. Los delitos conexos en los que estén involucrados otros imputados no
se acumulan, salvo que ello perjudique al debido esclarecimiento de los hechos o la acumulación
resulte indispensable.
“Artículo 447.- Audiencia única de Incoación del proceso inmediato en casos de flagrancia delictiva . 1.-Al
término del plazo de la detención policial establecido en el artículo 264, el Fiscal debe solicitar al Juez de
la investigación preparatoria la incoación del proceso inmediato. El Juez, dentro de las cuarenta y ocho
horas (48) siguientes al requerimiento fiscal, realiza una Audiencia única de Incoación para determinar la
procedencia del proceso inmediato. La detención del imputado se mantiene hasta la realización de la
Audiencia.
1. Dentro del mismo requerimiento de incoación, el Fiscal debe acompañar el expediente fiscal y comunicar
si requiere la imposición de alguna medida coercitiva, que asegure la presencia del imputado en el
desarrollo de todo el proceso inmediato. El requerimiento de incoación debe contener, en lo que resulte
pertinente, los requisitos establecidos en el numeral 2 del artículo 336.
2. En la referida Audiencia, las partes pueden instar la aplicación del principio de oportunidad, de
un acuerdo reparatorio o de la terminación anticipada, según corresponda.
4. El auto que resuelve el requerimiento de proceso inmediato debe ser pronunciada, de modo
impostergable, en la misma Audiencia de Incoación. La resolución es apelable con efecto
devolutivo.
5. Pronunciada la decisión que dispone la incoación del proceso inmediato, el Fiscal procede a
formular acusación dentro del plazo de veinticuatro (24) horas, bajo responsabilidad. Recibido el
requerimiento fiscal, el Juez de la Investigación Preparatoria, en el día, lo remite al Juez Penal
competente, para que dicte acumulativamente el auto de enjuiciamiento y de citación a juicio,
con arreglo a lo dispuesto en el numeral 3 del artículo 448.
6. Frente al auto que rechaza la incoación del proceso inmediato, el Fiscal dicta la Disposición que
corresponda o la formalización de la Investigación Preparatoria. Para los supuestos comprendidos
en los literales b) y c), numeral 1 del artículo 446, rige el procedimiento antes descrito en lo que
corresponda. Solo en estos supuestos, el requerimiento se presenta luego de culminar las
diligencias preliminares o, en su defecto, antes de los treinta días de formalizada la Investigación
Preparatoria.”
[1] SEMINARIO SAYAN; Gustavo, El Principio de Oralidad en el Código Procesal Penal del 2004,
artículo publicado para: GACETA JURÍDICA, Manual del Código Procesal Penal, 1º Edición, Gaceta
Jurídica, Lima, 2011, Pág. 48.
Publicadas por Iustitia Corporación Jurídica a la/s 17:51
PROMULGAN DECRETO
LEGISLATIVO QUE REGULA EL
PROCESO INMEDIATO EN CASOS DE
FLAGRANCIA
Actualmente nuestro país está sufriendo una realidad preocupante, que se viene dando por
el incremento de la delincuencia y la inseguridad ciudadana; robos, asaltos, secuestros,
conducción en estado de ebriedad, microcomercialización, feminicidio, agresiones,
secuestros, violaciones son algunos de los delitos más frecuentes, a los que estamos
expuestos todos los ciudadanos, sin discriminación de su condición social económica, sexo
u otra índole; dicha situación se ha desbordado en los últimos años y las cifras estadísticas
son alarmantes con proyección a incrementarse.
En tal sentido queda modificado El artículo 446, establece su definición y los supuestos de
su aplicación, en el cual, refiere que el proceso inmediato es un proceso especial y de
simplificación, estrictamente oral, que tiene por finalidad el juzgamiento racional, ágil y
eficiente de aquellos casos en los que, por sus propias características, son innecesarios
mayores actos de investigación, el proceso inmediato omite la etapa intermedia así como la
de investigación preparatoria.
Por otro lado, El artículo 447° establece los procedimientos de la audiencia única de
incoación del proceso inmediato en casos de flagrancia delictiva, los plazos, los medidas
coercitivas que se tenga que solicitar por parte del fiscal, así como la oportunidad de
aplicación de los principios de oportunidad, de un acuerdo reparatorio o de la terminación
anticipada, según corresponda, el plazo para formular de la acusación fiscal, todas las
diligencias deben de realizarse antes de los treinta días de formalizada la Investigación
Preparatoria.
La importancia de esta norma también es cautelar por el interés del menor, pues la norma
también será de aplicación para los casos de omisión a la asistencia familiar, referidos a los
padres que no cumplen con pasar los alimentos de sus menores hijos, y a los delitos contra
la seguridad pública que se deriven de la conducción en estado de ebriedad.
También cabe señalar que el Poder Judicial (PJ), mediante Resolución Administrativa Nº
231-2015-CE-PJ de fecha 15 de julio de 2015, ha dispuesto la implementación de la unidad
de flagrancia delictiva en la Corte Superior de Justicia de Tumbes como sede piloto, el 1º
de Agosto del presente, extrínsecamente no hace otra cosa que disponer el restablecimiento
de la aplicación del proceso inmediato, en vista que su aplicación justifica su vigencia.
La aplicación de esta norma, dispuesta por el PJ facilita la intervención del estado, para la
rápida conclusión del proceso penal, evitando tramitar por todas las etapas del proceso,
resarciendo oportunamente el daño sufrido a la víctima, así como la expectativa ciudadana,
reduciendo la carga procesal en la etapa de investigación preparatoria e intermedia,
generando el ahorro de los recursos públicos evitando gastos y esfuerzo humano
innecesario, y reduciendo la impunidad en aquellos casos que por el transcurso del tiempo
dejen de ser perseguidos.
Finalmente, la promulgación del D.L. N° 1194, que regula el proceso inmediato en casos de
flagrancia, demandaría en el Poder Judicial, Ministerio Público, Defensa Pública y Policía
Nacional del Perú, la designación de órganos jurisdiccionales que administren justicia bajo
los preceptos del proceso inmediato, dentro del plazo razonable en el ámbito de sus
competencias, consecuentemente corresponde a este poder del estado disponer las medidas
administrativas pertinentes para el cumplimiento del mencionado D.L..