Professional Documents
Culture Documents
MARYI GONZÁLEZ
AGRADECIMIENTO
A Maribel Batista y a Esteban Quintana por apoyarme, por sus palabras y compañía en
los momentos precisos.
DEDICATORIA
AGRADECIMIENTO
DRDICATORIA
RESUMEN
INTRODUCCIÓN
CONTENIDO
CONCLUSIONES
RECOMENDACIONES
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
RESUMEN
Debido a que este teorema se resistió a los Matemáticos más sobresalientes de todos los
tiempos y debido al auge de descubrimientos de nuevas herramientas matemáticas nos
proponemos presentar algunos acontecimientos históricos y aportes que hicieron los
matemáticos cuando intentaban demostrar el Último Teorema de Fermat, su
demostración y la profunda historia de motivación de Andrew Wiles, quien lo demostró.
Por otra parte, otro de nuestros objetivos es resaltar la importancia de este teorema para la
Teoría Algebraica de Números.
INTRODUCCIÓN
En la teoría elemental de números se estudian los números enteros sin utilizar técnicas
provenientes de otros campos de la Matemática. Pertenecen a la teoría elemental de
números: los criterios de divisibilidad, el algoritmo de Euclides para calcular el máximo
común divisor, la factorización de los enteros como producto de números primos, la
búsqueda de los números perfectos y las congruencias.
ANTECEDENTES HISTÓRICOS
“El poeta debe ser capaz de ver lo que los demás no ven,
debe ver más profundamente que otras personas.
Y el matemático debe hacer lo mismo.”
S. KOVALEVSKAYA
La ecuación
xn + yn = zn
Antecedentes Históricos
Entre el año 200 y 290 d.C. vivió un matemático griego llamado Diofanto. Vivió en
Alejandría. Poco es lo que se conoce de su vida. Por un epitafio sabemos que vivió 84
años.
Su obra más conocida y a la cual debe su reconocimiento es “La Aritmética”. Esta obra
era una colección de 189 problemas distribuidos en 13 libros. Sólo 6 de éstos
sobrevivieron a la destrucción de la gran biblioteca de Alejandría. La mayoría de los
problemas son de ecuaciones lineales y cuadráticas, pero siempre con solución positiva y
racional, ya que en aquella época los números negativos y los irracionales no tenían
sentido.
Según Diofanto, La Aritmética fue escrita para ayudar a uno de sus estudiantes. Esto no
los describe en el preámbulo de su Aritmética:
“Como sé, muy honorable Dionisio, que quieres aprender a resolver problemas
numéricos, he emprendido la tarea de exponer la naturaleza y el poder de los números,
empezando por las bases que sustentan estas cuestiones. Es posible que parezcan más
difíciles de lo que son por ser desconocidas aún y que los principiantes duden de
conseguir alcanzarlas, pero las comprenderás fácilmente gracias a tu actividad y a mis
demostraciones, pues que el deseo unido a la enseñanza conduce rápidamente al
conocimiento”.
Ecuaciones Diofánticas
Ejemplo #1:
5x + 7y = 57
Tiene por soluciones:
x = 3 + 7t
y = 6 – 5t
Un resultado obtenido por Euclides nos permitirá saber si una ecuación de este tipo tiene
o no solución.
Teorema 1:
Una ecuación lineal diofántica de la forma ax+ by=n tiene solución entera x0, y0 si y
sólo si el máximo común divisor de a y b es un divisor de n.
Además, si llamamos d al mcd(a,b) se tiene que una solución particular de dicha
ecuación puede obtenerse de la siguiente forma:
𝑛
𝑥0 = 𝛼
𝑑
(1)
𝑛
𝑦0 = 𝛽
𝑑
Siendo 𝑑 = 𝛼𝑎 + 𝛽𝑏
Teorema 2:
Si x0, y0 ∈ 𝑍 es una solución particular de la ecuación ax+ by =n (1) entonces todas las
soluciones enteras xy de la misma son de la forma:
𝑏
𝑥 = 𝑥0 + 𝑡
𝑑
(2)
𝑏
𝑦 = 𝑦0 + 𝑡
𝑑
con t ∈ 𝑍, siendo d = mcd(a, b),
Ejemplo #2
Encuentre las soluciones enteras de 30x + 12y = 1200
Luego, por las ecuaciones (2), se tiene que las todas las soluciones son de la forma:
12
𝑥0 = 200 + 𝑡 = 200 + 2𝑡
6
30
𝑦0 = −400 − 𝑡 = −400 − 5𝑡
6
Ecuación Pitagórica
x2+y2=z2
Los enteros x, y, z que cumplan con esta igualdad componen una terna pitagórica. Este
nombre se deriva del teorema de Pitágoras, el cual establece que:
“En todo triángulo rectángulo el cuadrado de la hipotenusa es igual a la suma de los
cuadrados de los catetos”.
En este sentido, cualquier terna pitagórica puede asociarse con las longitudes de dos
catetos y una hipotenusa, formando así un triángulo rectángulo.
donde n є N.
Sus estudios de Magistratura los realizó en Toulouse, donde más tarde acabó instalándose
como magistrado.
Fermat ejerció como funcionario durante 34 años. Los 17 últimos los ejerció en la
Conserjería Real en el Parlamento local de Toulouse, luego de haber sido ascendido en
1648. Debido a que este cargo público exigía, para evitar corrupciones, mantenerse
alejado de todo tipo de actividades sociales, Fermat pudo disponer de mucho tiempo
libre, el cual dedicó a la Matemática y, gracias a ello, dio muchos frutos.
Fermat es uno de los pocos matemáticos que cuentan con un asteroide con su nombre.
Este asteroide primero fue denominado asteroide 12007, luego: Fermat.
La traducción latina más conocida de Arithmetica es la que hizo Bachet en 1621. Esta se
convirtió en la primera edición latina ampliamente disponible.
Fermat tenía una copia de esta traducción, la cual estudió durante algún tiempo. Como de
costumbre, en los márgenes anotó sus observaciones y comentarios.
Cinco años después de que Fermat falleciera su hijo Samuel publicó este libro con todas
esas anotaciones. Más tarde, esas notas marginales se hicieron célebres y muchas se
convirtieron en importantes teoremas de la Teoría de Números.
En efecto, su famoso teorema surge al generalizar una proposición que leyó en el tomo II
de la Aritmética: “dividir un cuadrado dado en dos cuadrados”.
“Es imposible dividir un cubo en suma de otros dos o un bicuadrado en otros dos
bicuadrados, en general una potencia cualquiera superior a dos en dos potencias del
mismo grado; he descubierto una demostración maravillosa pero en este margen es
demasiado estrecho para contenerla.”
xn + yn = zn
Por ser esta la afirmación de Fermat que más años tardó en demostrarse es que se le
conoce como El Último Teorema de Fermat.
Más de 350 años de Intentos de Demostración del Último Teorema de Fermat
“El último teorema de Fermat ocupó el centro de una intrigante saga de valor, embuste,
trucos y tragedia que involucró a los mayores héroes de las matemáticas”.
A partir de esta cita, señalaremos el porqué Singh hace una denominación, de esta
magnitud, al Último Teorema de Fermat.
Para el caso n=4 el mismo Fermat probó su conjetura. Para ello, utilizó un método que él
mismo inventó: método descenso infinito.
Este método se utiliza para demostrar afirmaciones sobre números naturales. Consiste en
decir que ninguno de los números naturales de un cierto subconjunto cumple cierta
propiedad. Formalmente, este método prueba proposiciones de la forma:
∀𝑛 ∈ 𝐴 ϲ 𝑁: ~𝑃(𝑛)
Donde:
𝐴 ϲ 𝑁 : es un cierto subconjunto de los números naturales.
Este método también se basa en el axioma de que el conjunto de los números naturales es
un conjunto bien ordenado.
Utilizando este principio, Fermat supuso que x4 + y4 = z4 tenía una solución entera: x0,
y0, z0. A partir de ella, fabricó otra (x1)4 + (y1)4 = (z1)4 en la que z1 era menor que z0.
Aplicando esto repetidas veces, pero una cantidad finita, se llegaba a que 1, por ser el
elemento mínimo de los números naturales, era una suma de cuartas potencias de
números positivos, lo que es contradictorio: 14 + 14 = 2; pero 2 ≠ z4, con z 𝜖 N
Esto fue lo que demostró Fermat: no hay enteros que cumplan la ecuación x4 + y4 = z4.
Con respecto al caso general, Fermat afirmó tener una prueba maravillosa que no cabía en
aquel margen. Sin embargo, nunca se encontró tal demostración.
Después de más de 100 años
Leonhard Euler
Por su extrema dedicación al trabajo, pierde la visión del ojo derecho. Esto no afectó ni a la
calidad ni al número de sus hallazgos. En Geometría desarrolló conceptos básicos como:
ortocentro, circuncentro y baricentro de un triángulo.
Después de más de 100 años de que Fermat había enunciado su teorema, Euler publicó
su demostración para el caso n=3.
Pese a que Euler había trabajado con estos números erróneamente, el error resultaba muy
difícil de corregir directamente. Debido a que otros aportes hechos por Euler permitían
encontrar una solución correcta por medios más simples, es que se le atribuye la
demostración para el caso n=3.
Las aportaciones de Sophie Germain en teoría de números fueron grandes, sobre todo la que hizo
para tratar de resolver el último teorema de Fermat. También hizo grandes aportaciones a la teoría
moderna de la elasticidad.
En 1830, y con el impulso de Gauss, la Universidad de Göttingen acordó otorgar a Germain un
grado honorífico; pero antes de que ella pudiera recibirlo, murió de cáncer de mama el 27 de
junio de 1831.
Los casos n=3 y n=4 ya habían sido demostrados, pero Germain no quería demostrar
casos particulares.
Sophie Germain desarrolló lo que hoy conocemos como Teorema de Germain. Este
teorema probó que el UTF era verdadero para cualquier n que fuese un número primo
menor que 100. Para ello, adoptó esta estrategia: si n es un número primo y 2n+ 1
también lo es, entonces xn + yn = zn no tiene soluciones enteras no triviales.
Estos números primos son conocidos como números primos de Germain. Los primos de
Germain menores que 100 son: 2, 3, 5, 11, 23, 29, 41, 53, 83, 89.
Adrien-Marie Legendre
Nació en París en 1752. Tras completar sus estudios en el Collège
Mazarin, entró a trabajar en la Escuela Militar, para la que
completó un estudio sobre la trayectoria de los proyectiles que le
supuso el Premio de la Academia de Berlín en 1782.
Lejeune Dirichlet
Dirichlet publicó una demostración para el último teorema de Fermat cuando n = 14.
Estaba tratando de demostrar el caso n = 7 pero había demostrado un resultado más débil.
Demostró el último teorema de Fermat para el caso n=7. Mostraba por qué Dirichlet
había tenido tanta dificultad ya que, aunque en la prueba de Dirichlet para n = 14 se
usaban aargumentos similares (pero computacionalmente mucho más difíciles) a los
casos anteriores, Lamé tuvo que introducir algunos métodos totalmente nuevos. La
demostración de Lamé es extremadamente difícil y hace parecer como que progresar
a n más grandes sería casi imposible sin formas de pensar radicalmente novedosas.
Gabriel Lamé
Etapa de embuste
Germain había aportado cómo descartar un sector completo de casos de números primos).
Después de los avances de Germain la Academia Francesa ofreció una serie de premios:
una medalla de oro y 3000 francos para el que probara el U.T.F.
1847
Con veintisiete años ya era uno de los matemáticos de mayor prestigio y empezó a trabajar
en las funciones de variable compleja, publicando las 300 páginas de esa investigación once
años después. En esta época publicó sus trabajos sobre límites, continuidad y sobre la
convergencia de las series infinitas. En 1830 se exilió en Turín, donde trabajó como
profesor de física matemática hasta que regresó a París (1838). Pasó el resto de su vida
enseñando en La Sorbona.
Gerd Faltings
Faltings fue capaz de demostrar que, debido a que las figuras siempre tienen más de un
agujero, la ecuación de Fermat asociada sólo podía tener un número finito de soluciones
enteras. Un número finito de soluciones podía ser entre cero, que fue lo que Fermat
aseguró, hasta un millón o un billón. En otras palabras, el matemático alemán Faltings
demostró que para n > 2 pueden existir a lo sumo un número finito de ternas (a, b, c) tales
que an+ bn=cn.
Faltings no demostró el último teorema de Fermat, pero al menos había podido descartar
la posibilidad de una infinidad de soluciones.
1988, Yoichi Miyaoka
En 1988, pensó que había demostrado el UTF. En Bonn, Miyaoka describió que había
enfocado el problema desde un ángulo completamente nuevo; desde la geometría
diferencial.
Miyaoka aseguró que podía ir un paso más allá de la contribución de Faltings. Cuando
tenía poco más de veinte años había creado una conjetura concerniente a la llamada
desigualdad de Miyaoka. Quedó claro que la prueba de su propia conjetura geométrica
demostraría que no sólo las soluciones de la ecuación de Fermat son finitas, sino que son
cero.
El 8 de marzo de 1988, los titulares de la primera página de los diarios decían que el
último teorema de Fermat había sido demostrado. ElWashington Post y el New York
Times anunciaban que Yoichi Miyaoka, de treinta y ocho años y que trabajaba en la
Universidad Metropolitana de Tokio, había descubierto una solución al problema más
difícil del mundo.
Dos semanas después de su anuncio de Bonn, Miyaoka publicó las cinco páginas de
álgebra que detallaban su demostración, y empezó el escrutinio. Los teóricos de números
y los geómetras diferenciales de todo el mundo examinaron la demostración línea por
línea, buscando la más mínima brecha en el argumento lógico o la más pequeña
indicación de una falsa suposición. En pocos días varios matemáticos resaltaron lo que
parecía ser una preocupante contradicción en la demostración. Parte del trabajo de
Miyaoka llevaba a una particular conclusión en teoría de números que, al ser traducida
otra vez a la geometría diferencial, entraba en conflicto con un resultado que había sido
demostrado unos años antes. Aunque esto no invalidaba necesariamente toda la
demostración de Miyaoka, chocaba con la filosofía del paralelismo entre la teoría de
números y la geometría diferencial.
Por más de 2 siglos cualquier intento por probar el UTF fue un fracaso.
CAPÍTULO II
“El último teorema era una sirena matemática que tentaba a genios solo para
destrozarle sus esperanzas. El último teorema de Fermat era la prueba definitiva y quien
quiera que lo demostrara había triunfado donde Cauchy, Euler, Kummer y muchos otros
habían fracasado.” dice Signh.
Antes de Wiles, los matemáticos vinculados con el último teorema durante siglos
anteriores contribuyeron a engrandecer la Teoría Algebraica de Números, pero no
lograron demostrar el teorema.
Andrew Wiles siendo tan solo un niño de diez años encontró en la biblioteca un libro
titulado The Last Problem de Eric Temple Bell, en él halló el enunciado del UTF.
Dice Wiles:
<<Parecía tan simple, y ninguno de los grandes matemáticos de la historia lo había
demostrado aún. Allí había un problema que yo, un niño de diez años, podía entender, y
desde aquel momento supe que jamás se me iría de la cabeza. Tenía que resolverlo>>.
Taniyama y Shimura
Enero 1954, un joven matemático Goro Shimura en un encuentro accidental por causa de
un libro con otro joven matemático japonés Yutaka Taniyama plantearan al mundo
matemático una conjetura que sería fundamental en la prueba definitiva del Último
Teorema de Fermat; ellos estudiaron un tópico conocido como Formas Modulares.
Por otro lado, en 1975 Andrew Wiles bajo la dirección de su tutor John Coates comenzó
sus estudios de postgrado en la Universidad de Cambridge.
Señala Wiles:
“cuando fui a Cambridge dejé a Fermat de lado. No fue que lo olvidara, siempre estaba
allí, pero me di cuenta que las únicas técnicas que teníamos para abordarlo existían
desde hacía 130 años.”
Coates persuadió a Wiles para que estudiara curvas elípticas. Este estudio sería crucial
para la carrera de Wiles y la prueba del UTF.
Las formas modulares constituyen uno de los más extraños y maravillosos objetos de la
Matemática. El aspecto clave de las formas modulares es su excesivo nivel de simetría.
Las formas modulares estudiadas por Taniyama y Shimura se pueden desplazar,
intercambiar, rotar y reflejar en un número infinito de maneras y aún así permanecen
inalteradas, lo que hace de ellas los objetos matemáticos más simétricos.
Desafortunadamente dibujar, o incluso, imaginarse una forma modular es imposible.
Si el último teorema de Fermat fuese falso, entonces existiría una curva elíptica tal que no
puede asociarse con ninguna forma modular, y por lo tanto la conjetura de Taniyama-
Shimura sería falsa.
Último teorema de Fermat establece que no existe solución con números enteros
para la ecuación: xn + yn = zn si n es un entero más grande que dos.
curva elíptica hipotética, llamada la curva de Frey, que debe existir si hay un
contraejemplo al último teorema de Fermat. Siguiendo el trabajo de Yves
Hellegouarch, quien fue el primero en considerar esta curva, Frey señaló que si
tal curva existiese tendría propiedades peculiares, y sugirió en particular que
aquella curva no sería una curva modular.
Después de tres años de esfuerzo continuo Wiles había hecho una serie de avances. Había
aplicado los grupos de Galois a las ecuaciones elípticas, había despedazado las
ecuaciones elípticas en un número infinito de piezas y había demostrado que la primera
pieza de cada ecuación elíptica debía ser modular.
Desde 1986, por seis años trabaja, aisladamente, en la demostración del Último Teorema
de Fermat. Por todos estos años de dedicación, Wiles describe lo que siente al hacer
matemáticas como un recorrido en la oscuridad en una mansión desconocida: «Uno entra
en la primera habitación de la mansión y está en la oscuridad. En una oscuridad completa.
Vas tropezando y golpeando los muebles, pero poco a poco aprendes dónde está cada
pieza del mobiliario. Al fin, tras seis meses más o menos, encuentras el interruptor de la
luz y de repente todo está iluminado. Puedes ver exactamente dónde estás. Entonces vas a
la siguiente habitación y te pasas otros seis meses en las tinieblas. Así, cada uno de estos
progresos, aunque algunas veces son muy rápidos y se realizan en sólo un día o dos, son
la culminación de meses precedentes de tropezones en la oscuridad, sin los que el avance
sería imposible.»
Tras seis años de intenso esfuerzo, Wiles creía que el final estaba a la vista. Semana tras
semana progresaba, demostrando que nuevas y mayores familias de curvas elípticas
debían ser modulares.
“Estaba mirando por encima un artículo de Barry Mazur y había una frase en él que captó
mi atención. Mencionaba una construcción del siglo XIX y de repente me di cuenta de
que podía usarla para hacer funcionar el método de Kolyvagin–Flach sobre la última
familia de ecuaciones elípticas”.
Las charlas terminaron con una cerrada ovación y la fama mundial para su autor. Sin
embargo, Wiles no quiso exponer su artículo al escrutinio detallado de toda la comunidad
matemática hasta que hubiera sido revisado por un pequeño grupo de matemáticos, a cada
uno de los cuales fue encargado revisar una parte del manuscrito original de más de 100
páginas. Dicho escrutinio reveló un error fatal, que Wiles no pudo solucionar de
inmediato.
“…adoré cada minuto de los primero siete años que trabajé en este problema por más
duro que haya sido. Hubo retrocesos, cosas que parecían ser irremontables pero estaba
comprometido con una clase de batalla privada y muy personal. Luego, cuando surgió
el problema, hacer matemática en esta manera tan sobreexpuesta fue ciertamente no mi
estilo y no quisiera que se repita….”
Tras estos dos años de trabajo intenso y la ayuda de su ex doctorando Richard Taylor,
Wiles publicó en Annals of mathematics el artículo definitivo.
La primera vez que el profesor Shimura se enteró de la demostración de su propia
conjetura fue cuando leyó la primera plana del New York Times: «Por fin, un grito de
“¡Eureka!” en un antiguo misterio matemático.» Treinta y cinco años después de que su
amigo Yutaka Taniyama se suicidase, la conjetura que habían creado juntos había sido
justificada.
Andrew Wiles había cimentado algunas de las partes más importantes de la Teoría de
Números. Ya no era tan solo el haber resuelto el enigma matemático más duradero, sino
haber hecho avanzar las fronteras de la Matemática misma.
CAPÍTULO III
MATEMÁTICOS QUE DICEN TENER UNA DEMOSTRACIÓN MÁS
ELEMENTAL DEL UTF.
EL UTF COMO GÉNESIS DE LA TEORÍA ALGEBRAICA DE NÚMEROS
Matemáticos que dicen tener una demostración más elemental del UTF
Un artículo titulado “Fermat's Last Theorem. Is this the marvelous proof?; en español:
Último Teorema de Fermat. Es esta una demostración maravillosa? Este artículo propone
demostrar el Último Teorema de Fermat usando técnicas que el mismo Fermat podría
haber utilizado. El autor de este intento de demostración es Daniele De Pedis, que trabaja
en el National Institute of Nuclear Physics de Italia, y nos dice que lo suyo es un intento
sin ánimo de engañar y con la premisa de que puede estar equivocado.
Todo dio un giro profundo cuando Kummer se dio cuenta que las suposiciones necesarias
acerca de la factorización prima (única) que funciona para enteros ordinarios falla para
los enteros generalizados de un campo de números algebraicos (un campo de números
algebraicos es una "extensión" finita de los números racionales ordinarios para incluir las
soluciones de ecuaciones polinómicas específicas). Para resolver este problema, Kummer
inventó una nueva especie de número "ideal" donde se mantuviera la factorización única.
Varias décadas de refinamiento de las ideales de Kummer nos llevan a los anillos del
álgebra moderna y a la teoría moderna de números algebraicos tal como la conocemos
hoy.
A pesar del gran poder e importancia de la teoría de ideales de Kummer, y de la
subsecuente sofisticación de los desarrollos tales como la "teoría del cuerpo de clases"
(class field theory), los intentos de probar el UTF por métodos puramente algebraicos
siempre se quedaron cortos.
Algo sorprendente pasó. Bernard Riemann fue uno de los grandes matemáticos del siglo
diecinueve, tal vez mejor conocido por poner el cálculo integral sobre una base rigurosa
(con la integral de Riemann). Él hizo muchísimo más que algo relevante en teoría de
números y el UTF.
En 1850, Riemann investigó las propiedades de cierta función compleja llamada función
zeta, la cual había sido de intéres mucho antes para gente como Euler y Dirichlet. La
función zeta es quizás la más simple de una clase de funciones definida por una
expansión en serie llamadas más tarde "de Dirichlet". El comportamiento analítico de esta
función, en particular la localización de sus ceros y sus polos, mostraron tener una
profunda conexión con la distribución de números primos. El conocimiento de la función
zeta permitió eventualmente a Hadamard probar el "Teorema de los números primos", el
cual da una fórmula asíntotica para el número de primos menores que un número dado.
Una fuerte conjetura que permanece sin probar todavía acerca de la función zeta,
llamada la Hipótesis de Riemann (la cual dice que los únicos ceros de la función zeta que
estan en la banda 0 ≤ 𝑅𝑒(𝑧) ≤ 1 se encuentran sobre la línea 𝑅𝑒(𝑧) = 1/2, nos da
muchísima información precisa acerca de la distribución de primos.
Representaciones de Galois
Otra clase de construcción matemática la cual puede ser hecha para curvas elípticas y
formas modulares. Nosotros vemos los grupos de Galois y sus representaciones como
matrices sobre varios anillos, incluyendo los números p-ádicos.
CONCLUSIONES
Finalizado este trabajo, me atrevo afirmar que la importancia del Último Teorema de
Fermat no radica en su demostración sino en el aporte que dio a la Matemática en sí
misma: expansión del conocimiento matemático y la creación de nuevas técnicas
matemáticas. Por esta razón, se interpreta el Último Teorema de Fermat como génesis se
la Teoría Algebraica de Números.
Todos esos años de intentos de demostración son, especialmente para los matemáticos,
una historia inspiradora. Aunque he mencionado que en sí no es la demostración la de
relevante importancia, hay que señalar que humanamente tiene un gran valor: Andrew
Wiles es un ejemplo de perseverancia. Así mismo lo son todos los héroes de la
Matemática que también desarrollaron una Matemática nueva a través de todos los
intentos de demostración.
La historia del UTF aún no acaba, todavía queda la interrogante de si Fermat tenía una
demostración maravillosa y elemental. Como a los matemáticos le gusta dar siempre
respuestas que convenzan, no que siembren dudas, hay matemáticos que se aventuran a
darle una solución más sencilla al UTF como asumió Fermat que la tenía. Los trabajos
propuestos por estos matemáticos aún no han sido declarados válidos.
RECOMENDACIONES
Libro
Sighn, Simon. Editorial Planeta. 2006. El Enigma de Fermat. Barcelona, España.
WEB SITES
http://es.wikipedia.org/wiki/Andrew_Wiles
http://www.fisicanet.com.ar/biografias/cientificos/l/legendre.php
http://www.biografiasyvidas.com/
http://rinconmatematico.com/foros/index.php?topic=39466.20;wap2
http://translate.google.com/translate?hl=es&sl=pt&u=http://pt.wikipedia.org/wiki/12007_Ferm
at&ei=lYwkTsaWFaLZ0QHApSkAw&sa=X&oi=translate&ct=result&resnum=1&ved=0CB8Q7gEwA
A&prev=/search%3Fq%3Dasteroide%2B12007%26hl%3Des%26biw%3D1280%26bih%3D663%26
prmd%3Divns