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Las Ciencias Ambientales, La Sociología Y La Relacion Entre

Medio Ambiente Y Sociedad

Ecología II: Ecología Humana (Universidad Nacional de Educación a Distancia)

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CAPITULO 1
LAS CIENCIAS AMBIENTALES, LA SOCIOLOGÍA Y LA RELACION
ENTRE MEDIO AMBIENTE Y SOCIEDAD
El estudio de la relación entre medio ambiente y sociedad implica analizar, por una parte, los
efectos sociales de las alteraciones del entorno natural y, por otra, las repercusiones que sobre éste
tienen las transformaciones y cambios sociales, e.d., dos campos las cc sociales y las cc naturales
cuya separación no ha hecho mas que agrandarse.

Wilson decidido ha unificar el conocimiento, ha identificado las ciencias ambientales como uno
de los cuatro ámbitos junto con la neurociencia cognitiva, la genética del comportamiento humano
y la biología evolutiva, en que, a su juicio, las ciencias naturales han llegado ya hasta los limites
propios de las ciencias sociales y están preparadas, por tanto, para tender un puente entre ambas.

El conjunto de problemas que suelen agruparse bajo la expresión “crisis ecológica” es ya una
de las encrucijadas abiertas ante la humanidad contemporánea por lo que el proyecto de las
ciencias ambientales surge para intentar satisfacer las necesidades de información suscitadas por
las respuestas sociales e institucionales a dichos problemas.

Tres tareas para responder al conjunto de problemas:

1. responder a nuevos problemas en ámbitos interdisciplinares previamente existentes
2. supone una ampliación de las disciplinas existentes y el surgimiento de nuevos contextos
interdisciplinares
3. la exploración de un núcleo compartido, transdisciplinar

Cuestiones generales previos a la discusión sobre los enfoques concretos

sociológicos:

La relación entre sociedad y naturaleza: metáforas y definiciones.

Hay dos metáforas respecto del acoplamiento entre los seres humanos y su medio ambiente:
1. La imagen de la astronave Tierra (Boulding-1966); un sistema de relaciones lineales que
puede ser controlado si se estudian minuciosamente su estructura y las leyes que rigen su
dinámica. Introduce la noción de límite, es decir, la finitud del hogar de la humanidad en el
universo.
2. Alicia en el País de las Maravillas (Bateson); partido de croquet. Presenta una diferencia
básica entre la mecánica y la vida y nos sitúa ante la indeterminación, que resulta de la
relación entre dos sistemas complejos autoorganizadores, como son la sociedad y la
biosfera.

Límite e indeterminación son fundamentales en la construcción de las ciencias ambientales.

Conceptos que permiten una aproximación a la relación entre sistemas sociales y sistemas
naturales
Un sistema es una parte del universo (mundo físico) delimitada por una frontera espacial
(superficie) y por una duración.
Los sistemas pueden ser según la frontera:
a) Aislados: es aquel cuya frontera no permite la transferencia ni de energía ni de materia
(masa) de modo que no tiene interacción alguna con su medio ambiente.
b) Cerrados: en los que la frontera permite sólo la transferencia de energía pero no de
materia. La tierra
c) Abiertos: en los que la frontera permite el intercambio de materia y energía con el medio
ambiente. Las sociedades humanas

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 Las sociedades humanas son sistemas abiertos porque obtienen de su medio

ambiente energía y materiales y tras procesarlos los incorpora para mantener y modificar su
organización interna, devuelven a su medio ambiente los residuos de todo tipo generados por
dicho procesamiento. El medio ambiente de las sociedades humanas ha estado limitado al
planeta Tierra (biosfera y ecosfera).
 La Tierra es un sistema cerrado porque recibe energía del resto del universo
(radiación solar) y emite energía al espacio exterior (calor), en cambio el intercambio de masa
es muy reducido.

La relación entre sociedad y naturaleza es la de un sistema abierto cuyo medio ambiente es

un sistema cerrado.

Hay que preguntarse por la diferencia entre el planeta tierra y otros sistemas cerrados similares, así
como entre la sociedad y el resto de los sistemas abiertos.

La particularidad de la Tierra es que en ella existe vida respecto de otros sistemas similares (marte)
y es comprendida mediante la teoría de la evolución de Darwin, en el “origen de las especies”
(1965) mantuvo que todos los organismos existentes son los descendientes modificados de uno o
unos pocos antecesores que aparecieron en la tierra en el pasado lejano (3.000 millones de años) y
la fuerza impulsora de ese cambio evolutivo es la selección natural.

En una versión generalizada de la teoría, establece que cualquier población de entidades con las
propiedades de:
1. multiplicación, una entidad puede dar lugar a otras,
2. variación, que no todas las entidades sean iguales, siendo algunos tipos mas aptos
para sobrevivir y multiplicarse, y
3. herencia, que lo semejante engendre lo semejante.

La evolución en nuestro planeta ha sido posible porque los organismos vivos tienen estas tres
propiedades.

Autoorganización.
Significa que el intercambio con el entorno es aprovechado para producir y mantener estructuras
alejadas del equilibrio, altamente ordenadas y estables.

En las sociedades humanas la autoorganización es posible porque se trata de sistemas abiertos

capaces de absorber baja entropía1 (energía libre y materiales desordenados). Las sociedades
humanas es un sistema autoorganizador porque son capaces de pasar de un estado inicial a otro
mas complejo en cuanto al número y tipos de sus componentes y en cuanto a su organización.

La autoorganización significa por otra parte que el intercambio con el entorno es aprovechado
para producir y mantener estructuras alejadas del equilibrio, altamente ordenadas y
misteriosamente estables.

Las sociedades son un caso particular en la serie de los sistemas vivientes, construidos a través
de la agregación de células. Las distintas posiciones en dicha serie pueden ser ordenadas según el
grado en que los componentes (muy autónomos), en su existencia como unidades distinguibles
unas de otras, las personas dependen de su participación en el sistema que componen y se
organizan sobre la base del lenguaje y la autonomía individual.

1
Entropía: se concibe como una medida del desorden o la peculiaridad de ciertas combinaciones. Medida de
incertidumbre.
2

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El lenguaje modifica radicalmente el comportamiento humano, dando lugar a nuevas

posibilidades de operación que experimentamos como conciencia.

Las sociedades son un tipo particular de sistema autoorganizador, caracterizado por la

reflexividad, por la capacidad de condensar núcleos (instituciones) que acumulan información y
capacidad de decisión (poder) en vistas a actuar de un modo consciente, guiado por un propósito.

El cambio de las sociedades responde a la evolución cultural en vez de a la evolución natural,

aunque para evitar confusiones, resulta preferible no hablar de evolución cultural sino de cambio
social o historia, es decir, la relación entre sociedad y naturaleza consiste en sistemas
históricos integrados en entornos evolutivos. La integración resulta problemática en muchos
casos debido a las diferencias entre los respectivos principios del cambio. Por ejemplo, el cambio
cultural permite no sólo la transmisión hereditaria de características adquiridas, sino incluso la
difusión de éstas entre coetáneos, eso hace que en general sea mucho más rápido que el cambio
debido a la selección natural.

Dos malentendidos en la sociología contemporánea que tiene que ver con los conceptos:
1. La creencia en que la dependencia respecto a la naturaleza disminuye con el progreso
económico.
2. La creencia en que su habilidad para generar incrementos en información o complejidad
libera a las sociedades humanas de los efectos de la segunda ley de la termodinámica2.

Ambas creencias son erróneas, suele decirse que el desarrollo de las sociedades humanas ha ido
en dirección a una menor dependencia respecto a las restricciones naturales, sería más exacto decir
que se ha reducido, la dependencia respecto a las restricciones naturales impuestas por los
ambientes locales.

En las sociedades industriales se ha eludido los límites de sus entornos locales por la vía de
movilizar energía exosomática3 para obtener recursos cada vez más lejanos, hasta hacerse
dependientes de los servicios naturales del planeta entero, pero, la expresión “crisis ecológica” es
el fin de esta ilusión, hay tensiones sobre el cambio climático.

Otra puntualización es la capacidad de los sistemas vivos para mantenerse alejados del equilibrio,
no constituye una excepción a las leyes de la física. Los sistemas vivos sólo pueden subsistir y
evolucionar incrementando la entropía de su medio ambiente. Desde esta perspectiva, los
sistemas autoorganizadores son también sistemas desorganizadores, pues no pueden subsistir a
menos que estén en estrecho contacto y en interacción permanente con un medio ambiente
poseedor de orden y energía accesibles.

El objeto de la sociología es el conjunto formado por la sociedad y su entorno, un contexto en el

que las implicaciones de la ley de entropía no pueden ser ignoradas.

La existencia de sistemas históricos en entornos evolutivos puede ser estudiada desde perspectivas
diversas. Desde la perspectiva de las ciencias ambientales la cuestión es la adecuación entre
instituciones y ecosistemas. El problema de la adecuación entre sociedad y naturaleza aparece
cuando se toma conciencia de que la congruencia entre las racionalidades del desarrollo industrial
y de la sostenibilidad ecológica no está en modo alguno garantizada. Hay una restricción respecto
a los usos tradicionales de la expresión medio ambiente en sociología que ha significado tres
cosas distintas:

2
2ª ley de la termodinámica: si bien la materia y la energía no se pueden crear ni destruir si se puede transformar en
otras cosas que cada vez son más útiles para generar trabajo en un sistema.
3
Energía exosomática: o energía externa, es la que utilizamos para muchas actividades, es generada fuera del cuerpo
humano y la que usamos para nuestra vida diaria, por eje. La leña que quemamos.
3

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1. Ambiente, se ha sólido entender algo más o menos equivalente a entorno social o contexto
sociocultural, lo heredado y lo aprendido, entre lo genético y lo ambiental...
2. Sociología urbana, la referencia ha sido el entorno físico artificial, el universo de
prolongaciones exosomáticas característico de los asentamientos humanos, es decir, lo que
podría llamarse “medio ambiente construido”.
3. Sociología medioambiental o ecológica, se entiende casi siempre el entorno natural de las
sociedades humanas. Esta es la más pertinente en el contexto de las ciencias ambientales.

Ambiente y medio ambiente serán usados (en este libro) para referirse al entorno natural de la
sociedad, entendiendo sociedad como el conjunto de individuos humanos, artefactos y signos y sus
relaciones con los animales y plantas domesticados ocupando quizás un lugar intermedio.

Esta restricción en el uso de ambiente y medio ambiente debe ser tenida en cuenta porque las
sociedades humanas contienen muchos tipos de grupos más pequeños y para delimitarlas se suele
recurrir a su autonomía de forma tal que las sociedades serían grupos no sometidos a la autoridad o
el control político de otros grupos más amplios. Desde esta perspectiva, lo que es externo a una
sociedad determinada (su medio ambiente) incluye también otras sociedades con las que entran en
contacto de una u otra forma.

Mediaciones sociales entre mente y naturaleza

El campo de las ciencias ambientales se extiende desde la física hasta la ética, pasando por la
biología o la sociología. El punto de vista del autor es el de una cierta reunificación del
conocimiento, en una versión moderada que se distancia de los reduccionistas.

Presentación de este punto de vista (reunificación del conocimiento)

En el contexto de las ciencias ambientales, la relación sociedad-medio ambiente se concreta sobre
todo en la discusión respecto al concepto de sustentabilidad (o sostenibilidad).

El problema de la sostenibilidad es el de la adecuación entre la mente guiada por un

propósito y el medio natural en que se llevan a cabo las actividades humanas, de modo que la
organización de éstas pueda prolongarse en el tiempo (resulta sostenible), esa relación tiene
diversas mediaciones correspondientes a diversos niveles de la organización social.

Las preguntas de la ecología humana pueden plantearse con la cuestión relativa a la

capacidad de carga para seres humanos, pues pueden ser cambiantes según las
características de las técnicas disponibles: en la especie humana, la biología no es independiente
de la tecnología y su consecuencia es que algunas personas pueden tener prolongaciones
exosomáticas mayores que otros por lo que entra en el análisis la desigualdad y el conflicto social,
la biología no es separable de la tecnología ni de la sociología ni de la política.

Por otra parte, la creencia en que la acción social puede frenar la crisis ecológica depende de la
hipótesis de que la especie humana es capaz de encontrar en su medio fuentes de recursos sin
explotarlas hasta el agotamiento, e.d., a la existencia o carencia de medio para satisfacerlas, por lo
que nos encontramos en el terreno de la cultura (de los estilos de vida, de los valores y también de
los mitos).

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Mediaciones sociales en la relación mente-naturaleza:

Nivel de análisis Problemática

1. Dinámica demográfica
2. Provisión energética
3. Tecnología / economía
4. Estructura social
5. Orden político
6.Construcciones de las necesidades Orientada por la abundancia o por la suficiencia,
7. Narraciones constituyentes
Capacidad de sustentación o de carga, compatible con la
biosfera o tendencialmente ilimitada. Ecología humana
Horizonte de escasez de los combustibles fósiles, debate
sobre energías renovables, fusión nuclear.
Sustitución de factores de producción, de muy elevada a
muy limitada.
Grado de polarización o de igualdad, acceso diferencial a
los recursos y distribución diferencial de los riesgos.
Grado de interconexión, de diversidad y de democracia:
limites a la regulación y al control.
posibilidades del aprendizaje por anticipación
Mitos de dominio sobre la naturaleza o de armonía entre
los seres humanos y el resto de los seres vivos.

Cada nivel es autónomo y no puede reducirse a cualquiera de los otros. Todos estos niveles de
análisis tienen dimensiones sociales y no pueden ser eludidos.

La alternativa más adecuada pasa por la formulación de análisis realizados desde diferentes
perspectivas, con puntos de partida distintos, realizados de tal manera que intenten aproximarse a
la compatibilidad mutua sin ser por ello respectivamente reducibles.

Precedentes
En el marco de las ciencias ambientales existen formulaciones que han suscitado varios
debates:

El complejo ecológico de Duncan. La expansión ecológica en las fases de la evolución social

influidas por el industrialismo puede ser caracterizada mediante una fórmula, cuyos cuatro
términos han sido denominados el “complejo ecológico”: la acumulación tecnológica a una tasa
acelerada, la explotación intensificada del medio ambiente, la transición demográfica (explosión
demográfica) y la revolución organizativa.
a. Existe una versión simple en la que la organización es vista como factor
dependiente que es influido por los otros tres factores independientes
b. Versión más elaborada, que considera a la organización social recíprocamente
relacionada con los otros tres factores.
En ambos casos, se trata de explicar la organización social en términos de respuesta adaptativa de
una población humana a un ambiente constituido por elementos tanto naturales como tecnológicos,
así como por otras poblaciones o comunidades humanas.

La sociología medioambiental de Dunlap. Observo la similitud entre la idea de complejo

ecológico y la pseudoecuación del impacto ambiental de Ehrlich y Holdren habían propuesto. La
idea de estos autores es que el impacto producido por las actividades sociales sobre el medio
ambiente natural es el resultado de tres factores:
1. La población, medida por el número de individuos que la componen.
2. La riqueza, medida por los recursos consumidos por el individuo medio.
3. La tecnología, de acuerdo con un índice de la destrucción medioambiental causada por
los procesos productivos que suministran los bienes consumidos.
Los factores población y tecnología coinciden, el ambiente puede ser interpretado como ambiente
natural y la riqueza es un aspecto de la organización social. En este caso el ambiente es el factor
independiente.

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El “centón coevolutivo” de comunidades discursivas, según Norgaad. Versiones más recientes,

tienen en cuenta las relaciones en sentido contrario, es decir, la influencia de los cambios
ambientales sobre la sociedad, así como la necesidad de considerar otras dimensiones o niveles de
la realidad social, en particular el sistema cultural. Considerar la relación entre sociedad y
naturaleza como un proceso de interacciones entre la organización social, la tecnología, el
conocimiento, los valores y el medio ambiente en el que todo está relacionado con todo lo demás,
en el que nada es exógeno o independiente.

Ecocentrismo4 y antropocentrismo
Reduccionismo y la especificidad del método sociológico.

Hay que buscar una nueva ética ambiental y podemos elegir y no ha de ser por shock sino
también por anticipación y derivar en reformas institucionales y modificaciones en los valores y el
comportamiento basadas de algún modo en los resultados de ese evaluar nuestra situación.

Se ha insistido en que, cuando emergen sistemas complejos altamente ordenados, éstos se

desarrollan y crecen a costa de incrementar el desorden en los entornos que los incluyen,
mostrando una tendencia inherente a aumentar su capacidad para disipar los gradientes de energía
a su alcance.

Las poblaciones de cualquier especie animal reaccionan a un eventual incremento de los recursos
accesibles en su entorno con un más que proporcional incremento de su consumo de los mismos,
es decir, con un más que proporcional aumento del número de sus miembros.

El punto de vista antropocéntrico, suele conectarse con dos creencias:

1. El exencionalismo, consiste en pensar que las leyes de la física y de la biología no
condicionan la organización y el cambio de las sociedades, dichas leyes dejan de regir
cuando se trata de los asuntos humanos.
2. El excepcionalismo, remite a la emergencia de novedades en la organización que no son
observables en otros niveles de la realidad.

La existencia social contiene numerosas excepciones; ninguna de ellas, sin embargo, nos exime de
la de entropía ni de la programación genética de algunos comportamientos.

El postulado reduccionista5 esta en la tesis de que la propia creencia en la excepcionalidad de la

cultura se seleccionó en fases tempranas de la evolución humana para favorecer las posibilidades
de supervivencia frente a las dificultades de adaptación derivadas de un cerebro extremadamente
flexible.

Explicación al anterior argumento; la proposición darwiniana de que los humanos descienden de

un antepasado de la familia de los simios sólo es rechazada por algunos fundamentalistas
religiosos, hay buenas razones evolutivas para que esas resistencias se mantengan: las capacidades
extraordinarias que se derivan de la expansión del cerebro y el desarrollo del lenguaje, sin el
contrapeso de un impulso genético frente a las emergencias, habrían resultado un inconveniente
fatal en las precarias condiciones iniciales.

4
Ecocentrismo El ecocentrismo es una corriente filosófica que surgió a finales del Siglo XX, prácticamente con el
concepto de desarrollo sostenible. Esta filosofía se basa en que las acciones y los pensamientos del individuo se
centran en el medio ambiente por sobre todas las cosas, tanto en su cuidado y la conservación, es por tanto
antihumanista. Este pensamiento es característico del movimiento ecologista
5
Reduccionismo. "El todo puede ser explicado nada más que con la suma de sus partes constituyentes", Tal
postulado nos permite deducir, sobre su base, que se pueden explicar las propiedades y leyes de los sistemas más
complejos por las leyes y propiedades de los sistemas más simples
6

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Puede decirse, que nuestra obsesiva tendencia a atribuir un significado místico a nuestras
percepciones fue clave para la supervivencia, así como para el ulterior camino al estrellato
evolutivo, de nuestra inicialmente mal adaptada especie. En definitiva, el espíritu está en los genes,
algo que explica tanto nuestra victoriosa expansión en el pasado como nuestra presente
incapacidad para frenarla antes de arruinar completamente los sistemas de soporte de la vida.

Esta variante del reduccionismo no deja lugar para elecciones, su núcleo es que nuestra creencia en
la invencibilidad humana nos lleva a sobrepoblar la Tierra, con la consiguiente destrucción,
primero del mundo no humano y, luego de nuestro propio mundo.

Un importante tratado sobre la evolución y la ecología humana de Ehrlich, parte de la

negación del dualismo mente-cuerpo y de las diferentes contraposiciones que son sus persistente
herencia: innato-adquirido, herencia-ambiente...para él cualquier atributo de cualquier organismo
es, de hecho, el producto de una interacción entre su dotación genética y su medio ambiente.
Sin embargo, en la mayoría de los casos las contribuciones relativas de la herencia y el ambiente a
los diversos atributos humanos son difíciles de especificar, y varían considerablemente de unos
atributos a otros.

En consecuencia, no puede hablarse de una naturaleza humana permanente e inmutable, es

preferible hablar de las naturalezas humanas que son el producto de dotaciones heredadas similares
(no idénticas) que interactúan con diferentes ambientes biofísicos y culturales.

Ehrlich repasa el bipedalismo, el desarrollo del cerebro y la autoconciencia, el lenguaje y la

socialidad, la alimentación, el sexo y la reproducción, la guerra, la religión, el arte, la agricultura,
el origen del estado y la estratificación, etc. Su criterio básico es el predominio de la cultura, más
intenso a medida que se va avanzando en la serie mencionada.

En los puntos dudosos recurre a un criterio heurístico según el cual, en la mayoría de los casos, los
genes no dictan el destino sino que definen un rango de posibilidades en un ambiente determinado.
y apoya el criterio heurístico principalmente en tres consideraciones:

1. “Escasez de genes”; los genes no pueden controlar más que los aspectos más generales del
comportamiento humano.
2. La lógica de la reducción al absurdo; sería un sin sentido que la evolución hubiera
seleccionado un instrumento tan extraordinariamente flexible para coordinar
comportamientos como el cerebro humano y, al mismo tiempo, hubiera mantenido una
rígida programación genética de esos comportamientos.
3. “Caso más significativo”, si hubiera una única instrucción sobre el comportamiento
grabada en el ADN humano sería el impulso de tener tantos hijos como sea posible, porque
la tendencia a maximizar las contribuciones genéticas a las generaciones futuras es lo que
hace que la evolución funcione, el hecho de que prácticamente ningún ser humano
obedezca a éste imperativo genético revela que los factores ambientales, culturales sobre
todo, lo han anulado en buena medida.

En general, en lo que respecta al comportamiento humano, a las formas de la organización social y

a los cambios en ella, la explicación debe recurrir al examen detallado de las trayectorias
históricas. Hay ciertamente algunos rasgos comunes entre la evolución y la historia : ambas
están constreñidas por el pasado, influidas por el aislamiento y el intercambio y sujetas a
terminación selectiva, en ambos casos, el futuro es muy difícil de predecir.

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Pero, hay algunas diferencias básicas: los genes pasan sólo a los parientes de la siguiente
generación, mientras que las unidades culturales pasan tanto a parientes como a no parientes y no
lo hacen sólo entre generaciones sino dentro de una misma generación, de ordinario, el cambio
cultural no implica selección natural entre individuos, pero puede implicar supervivencia
diferencial entre grupos mucho más a menudo que la selección biológica.

En resumen, hay un fundamento para creer que hay potenciales pare el cambio social consciente,
incluso si se aborda la cuestión desde una perspectiva biológica.

Versiones actuales del reduccionismo

Wilson y la reformulación del programa de la ciencia unificada.

Los filósofos del Circulo de Viena concibieron un vasto programa de unificación del conocimiento
empírico que, en términos generales, mostró una fuerte propensión a desarrollarse a lo largo de tres
ejes:

1. El reduccionismo, la conexión entre las leyes de un nivel determinado y las de otros

niveles más primarios.
2. El análisis, el estudio de un objeto mediante el descubrimiento y observación de los
elementos que lo componen.
3. El determinismo, la explicación mediante inclusión en conjuntos de leyes deductivamente
ordenados que hace posible la predicción.

No puede afirmarse que la predicción de un acontecimiento concreto particular dependa

únicamente de leyes de una de esas clases, es decir, en condiciones dadas, todos los tipos de leyes
deben poder ser conectadas entre sí. Todas las leyes, ya sean químicas, climatológicas o
sociológicas, deben, en consecuencia, ser concebidas como partes de un sistema, es decir, de la
ciencia unificada.

La idea clave de esta propuesta de reunificación de la ciencia es la palabra consilience

(consilicencia), que alude a la coincidencia entre inducciones realizadas a partir de clases
diferentes de hechos y a la tesis de que las explicaciones de fenómenos diferentes que pueden
conectarse unas con otras y resultan mutuamente consistentes es más probable que sobrevivan
(Wilson). La necesidad de un principio así es particularmente visible en las ciencias ambientales,
que exigen que cuatro ámbitos que hoy están académicamente separados (la biología, la ciencia
social, la ética y la política ambiental) puedan conectarse de un modo sólido.

Neurath vio el conductismo (ambientalismo radical) como el modelo para desarrollar una
sociología fisicalista.
Wilson, cree posible convertir la ética en una ciencia positiva, que entienda las normas morales
como expresión codificada de elecciones que la sociedad tuvo que hacer en el pasado. El debate
sobre la reunificación en el campo de las ciencias naturales tiene algunos nudos difíciles de corta r.
La principal conclusión de Wilson es que las ciencias naturales han llegado ya hasta la frontera
con las ciencias sociales.
El enfoque general de Wilson: conectar las explicaciones sociológicas con la biología humana,
aceptar que la unidad de análisis deber ser el individuo, examinar el comportamiento humano a
partir de reglas epigenéticas.

Las reglas epigenéticas son operaciones innatas del sistema sensorial y del cerebro que permiten a
los organismos encontrar soluciones rápidas a problemas que se plantean en el ambiente, nos
llevan a evitar el apareamiento entre hermanos, explican que hablemos con frases gramaticalmente
correctas, que recibamos a los amigos con una sonrisa...
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Reconoce que las personas dedicadas a la sociología están con frecuencia interesadas en otras
cosas e insiste en que la pasión de las ciencias sociales por el detalle menudo no debería alejarlas
de la voluntad de construir a partir de las zonas en que la reducción sí parece posible, pues sólo
esas zonas ofrecen un fundamento sólido. No ignora los conflictos, pero los disuelve en una
matizada profesión de fe en la dinámica acumulativa del conocimiento en la más pura tradición
positivista: en la tesis según la cual la peculiaridad de las ciencias sociales deriva sólo de que la
sociedad es más compleja que los objetos estudiados por las ciencias de la naturaleza. Hace una
similitud con la ordenación de las ciencias en un orden lineal de generalidad decreciente y
complejidad creciente como la que propuso Comte.

Buena parte del debate sobre el método de las ciencias sociales ha girado siempre en torno a las
opciones, implícitas o explicitas.

1. Si se trata tan solo de que la sociedad es más compleja, entonces todo es una cuestión de
grado, de más dificultad, quizás sobre todo una cuestión de tiempo (buscando la
continuidad).
2. Si se trata de que la sociedad es inherentemente distinta entonces la continuidad parece
perder sentido.

Los sistemas pueden ser más o menos complejos según diferentes criterios y eso acostumbra a ser
una fuente de enredos inagotables. De todas formas, parece razonable pensar que las diferentes
formas de la complejidad tienen a manifestarse simultáneamente, lo que ha llevado a mucha gente
a buscar un camino más corto para la reunificación del conocimiento.

Modos de complejidad:

1. Epistémicos.
a. Complejidad de formulación.
i. Complejidad descriptiva. Descripción adecuada del sistema (Longitud)
ii. Complejidad generativa. Longitud del conjunto de instrucciones necesarias
para proporcionar una regla para producir el sistema.
iii. Complejidad computacional. Cantidad de tiempo y esfuerzo exigido para
resolver un problema.
2. Ontológicos
a. Complejidad de composición.
i. Complejidad constitutiva. Número de componentes o elementos
constitutivos
ii. Complejidad taxonómica (heterogeneidad). Variedad de elementos ,
número de tipos diferentes de componentes.
b. Complejidad de estructura.
i. Complejidad organizativa. Variedad de las diferentes formas posibles de
ordenar los componentes en modos diferentes de interrelación
ii. Complejidad jerárquica. Desagregación organizativa en subsistemas,
relaciones de subordinación en los modos de inclusión y subsunción.
c. Complejidad de funcionamiento
i. Complejidad operativa. Variedad de modos de operación o tipos de
funcionamiento.
ii. Complejidad nomológica. Carácter más o menos elaborado e intrincado de
las leyes que gobiernan el fenómeno.

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El atajo holístico: la hipótesis de la complejidad.

En muchos campos del conocimiento están apareciendo estudios sobre fenómenos complejos.
1. En cosmología, se asocia la tendencia al incremento de la complejidad de los sistemas
materiales a un principio evolutivo universal.
2. En física, se habla de diferentes teorías de la complejidad con aplicaciones en diferentes
campos.
3. En biología evolucionista y en neurociencia, la idea de la complejidad aparece
relacionada con la formulación de modelos.

Hay básicamente dos posturas ante esta proliferación :

1. Los que señalan que la única característica común a los diversos enfoques es la dificultad
para obtener un buen ajuste entre los modelos y las observaciones
2. Los que perciben la coincidencia, por todas partes, de fenómenos en los que la apariencia
de azar y caos no revela la ausencia de regularidades, sino más bien un funcionamiento
natural que conduce según pautas básicamente idénticas a la emergencia de legal idades de
orden superior como la conjetura de Santa Fe.

La conjetura de Santa Fe (teoría de la emergencia)

Para los sistemas dinámicos no lineales con ricas redes de elementos interactuantes (complejos),
hay un atractor (región de las trayectorias) que se encuentra entre una región de comportamiento
caótico y otra que está congelada en un régimen ordenado, con poca actividad espontánea;
cualquier sistema así (un organismo en desarrollo, un cerebro...) tenderá a establecerse
dinámicamente en esa zona al borde del caos (Goodwin). Se ha extrapolado a las ciencias sociales.

La hipótesis básica (conjetura de santa fe) es que el destino en la biosfera de todos los sistemas
complejos adaptativos es evolucionar hacia un estado natural entre el orden y el caos (Ka uffman).
¿Cómo aparece el orden? Con dos formas básicas:
1. la propia de los sistemas en equilibrio de baja energía
2. La aparición y mantenimiento del orden requiere disipar una fuente constante de masa y/o
energía para sustentar durante un tiempo la estructura ordenada lejos del equilibrio, esto
corresponde a los sistemas vivos.

La conjetura de Santa Fe sostiene que el orden no es totalmente accidental, que hay otros
principios del orden, que hay leyes de la complejidad que generan espontáneamente mucho del
orden existente en el mundo natural y que la selección se limita a moldearlo y refinarlo
(Kauffman). Se podría denominar la teoría de la emergencia.

La teoría de la emergencia sería una combinación de autoorganización y selección natural. El

concepto de emergencia se refiere a aquellas situaciones en que el todo es más que la suma de las
partes, a propiedades de los sistemas que no pueden ser explicadas a partir del análisis de sus
componentes y de las relaciones entre ellos.

Kauffman explora fenómenos de emergencia en diversos ámbitos: la vida, la ontogénesis, la

coevolución...y adelanta la idea (hipótesis) de que la evolución hacia un régimen situado entre el
orden y el caos es un principio general aplicable en muchos contextos diferentes. Explora la
posibilidad de extrapolar sus ideas al estudio de la sociedad en dos ámbitos: el cambio tecnológico
y el surgimiento de las civilizaciones.

Señala el paralelismo entre la evolución de la vida y el desarrollo tecnológico gobernadas por leyes
generales similares en la evolución biológica y en la tecnología. No es algo tan sorprendente, pues
todas esas formas de adaptación evolutiva exploran vastos espacios de posibilidades en paisajes de
adaptación o de costes mas o menos escarpados.

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La unidad de análisis en la perspectiva de la complejidad (Goodwin) es el organismo no los

genes. Esta es la diferencia fundamental entre ese punto de vista y el neopositivista.

El criterio de unificación reductiva, se mantiene: las diferentes manifestaciones de la

organización y el cambio en todos los sistemas complejos adaptativos podrían ser explicados en
base a las mismas leyes de la emergencia y la autoorganización.

El determinismo también se mantiene, aunque lo hace al precio de renunciar a la posibilidad de

predicción en cuanto a los detalles, dada la extrema sensibilidad a variaciones mínimas en las
condiciones iniciales.

Las razones del excepcionalismo: la sociología comprensiva y las ciencias

ambientales.
La crítica sociológica al reduccionismo, ha consistido en invocar que las sociedades son sistemas
con propiedades emergentes, distintivas, y requieren en consecuencia métodos particulares para
que su estudio sea abordado.

Weber: la tarea de la sociología es comprender, interpretándolas, las acciones orientadas por un

sentido.

Tres argumentos sobre el excepcionalismo:

El de la exigencia de sentido. Sin el recurso al sentido, todo cuanto entra en el ámbito de lo social
se vuelve incomprensible. La sociología ecológica podría definirse, de hecho, en términos de su
interés por examinar las interconexiones entre las condiciones ambientales y el disfrute de la vida.
(cuadro 1.5-pg. 53). Detrás de las reglas de sostenibilidad medioambiental nos topamos con los
dilemas sociales y políticos inherentes al debate sobre cómo mejorar la vida sin socavar las bases
naturales que la sustentan.

Residuos cualitativos. Conceptos como justicia o vida placentera no parecen tener las propiedades
métricas requeridas para poder describirlos con números, conceptos como deseos, especies,
industria...se superponen parcialmente con sus opuestos (Georgescu-Roegen) denominándolos
dialécticos, en contraposición a aquellos que se distinguen entre sí de forma discreta, como los
números, a los que llamó aritmomórficos.
Cuando pensamos formas y cualidades hemos de recurrir casi siempre a concepto dialécticos.
La nociones dialécticas aluden con frecuencia a fenómenos o rasgos de la vida social que resultan
demasiado importantes para ser ignorados.

La omnipresencia del cambio. Hay una estrecha relación entre conceptos dialécticos y cambio
cualitativo, entre la insuficiencia de los análisis cuantitativos y el clásico problema de heráclito;
nadie puede sumergirse dos veces en el mismo río. El cambio comporta la aparición o emergencia
de novedades de un tipo especial. Hay tres clases de novedades que son relevantes para el
conocimiento:
1. las que pueden predecirse antes de haber sido observadas mediante operaciones
deductivas.( los descubrimientos de planetas). Incertidumbre.
2. las que no pueden ser descritas antes de haber sido observadas pero resultan ser
permanentes. (compuesto químico). Incertidumbre.
3. hay casos en que la permanencia está ausente, en que no puede predecirse el resultado
incluso después de haber observado las misma combinación muchas veces, como las
estructuras familiares que varían entre las diferentes culturas y dentro de la misma cultura.
Incertidumbre de segundo grado debido al cambio cualitativo no permanente.

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Recapitulación:

La peculiaridad metodológica de la sociología deriva de ciertas características de los sistemas

sociales:

1. La dinámica de estos es irreversible o asimétrica respecto del tiempo, nunca vuelven a un

estado idéntico en todos sus aspectos.
2. Tienen una historia, esto es, la actividad de sus elementos constriñe el número de posibles
estados futuros, aunque no los determina.
3. Los estados futuros son inherentemente impredictibles, pues hay una continua emergencia
de novedades como consecuencia de una dinámica indeterminista que combina alteraciones
graduales en la organización con perturbaciones que son ocasionalmente muy profundas.
4. La dinámica consiste sobre todo en cambio cultural que no se produce en términos de azar
y selección natural.

Todo esto es lo que ha frustrado hasta hoy los intentos de dar cuenta de los fenómenos sociales
mediante modelo mecánicos, es también, lo que impide proponer un modelo unificado para el
sistema sociedad-medioambiente, se trata en cualquier caso de un tipo particular de complejidad
derivado de la actuación finalista, el continuo cualitativo que obstaculiza las particiones discretas y
la inestabilidad de las estructuras.

Weber y su idea de que el conocimiento sociológico no procede por derivación deductiva de

proposiciones empíricas a partir de leyes, sino por interpretación comprensiva: “explicar”
significa, de esta manera, para la ciencia que se ocupa del sentido de la acción, algo así como:
captación e la conexión de sentido en que se influye una acción, ya comprendida de modo actual, a
tenor de su sentido subjetivamente mentado.

Las nociones de limite e indeterminación son cruciales en el estudio de las relaciones entre
sociedad y medioambiente.

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