Professional Documents
Culture Documents
Es el vínculo permanente de
sangre o relación entre el padre y la
madre con sus hijos e hijas, con reconocimiento social, que entraña sentimientos,
derechos y obligaciones ejercidos con responsabilidad para el desarrollo integral
de la familia.
La maternidad y paternidad, ejercidas de una manera responsable, es una
experiencia que deberá estar presente a la lo largo de la vida del individuo y que
inicia en el momento en que se toma la decisión en tener un hijo, que implica
preparación y madurez. La responsabilidad en la paternidad y maternidad
requiere de la aceptación y cumplimiento del compromiso de formar una familia
saludable tanto física como socialmente, que le permita tener todas las
posibilidades de desarrollo y bienestar, con todo lo que implica a nivel
económico, social, ético, educativo y en salud.
La decisión de tener un hijo o hija es un asunto muy serio. Debe tenerse en
cuenta que:
La responsabilidad de tenerlo debe ser tomada en pareja y ambos deben
asumir las consecuencias de su decisión.
Concebir un hijo o hija es responsabilidad del padre y la madre, criarlo
debe ser también una experiencia compartida.
Un hijo o hija debe ser deseado. También debe ser concebido cuando la
pareja lo decida.
Los hijos e hijas tienen el derecho de nacer y desarrollarse en el seno de
una familia.
La planificación familiar permite a la pareja regular su fecundidad y
asumirla.
CUANDO EMPIEZA LA PAREJA A EJERCER SU RESPONSABILIDAD
La paternidad y maternidad responsable inicia con la elección de la pareja, que
debe estar basada en el amor, respeto mutuo y comprensión, así como el deseo
de compartir responsabilidades, aspiraciones, intereses, alegrías y tristezas.
CARACTERISTICAS
I. Pareja que formalice su situación antes de tener hijos (matrimonio)
II. Saber cuál es la capacidad económica que posee la pareja para poder afrontar
los gastos de los hijos
III. Saber cuál es su capacidad psicológica para asumir la responsabilidad de un
hijo.
IV. Saber cuánto tiempo se le puede dedicar al hijo, pues hay veces que los
padres trabajan a la vez y no tienen tiempo de compartir con el hijo y el
mencionado es criado por otras personas (niñeras, nanas, etc.)
V. Planear el número de hijos que desea la pareja
Los padres deben ser conscientes y juiciosos en el sentido en que traer en un
hijo no solo le compete a la familia, sino también a la sociedad, un menor criado
por padres con valores y principios éticos y morales, comunicativos, tolerantes,
comprensivos, afectivos educarán una persona que aporte a la sociedad
mientras que un hijo criado por padres escasos de valores éticos y morales,
intolerantes, conflictivos y agresivos formaran un hijo rebelde, agresivo o errante
frente a la sociedad.
ÁREAS DE LA RESPONSABILIDAD EN PAREJA
ÁREA BIOLÓGICA
• Cuidar su salud física, en especial de la mujer y la de sus hijos.
• Permitir que sus hijos tengan tiempo para jugar, pasear, conversar con sus
amigos, etc.
• Decidir de manera consciente y bien informada sobre el número de hijos que
deseen tener y el momento más apropiado, eligiendo libremente algún método
de planificación familiar.
EL ÁREA PSICOLÓGICA
• Dar confianza y aliento a sus hijos para que se sientan seguros.
• Manifestarles amor y comprensión a través de actitudes y gestos concretos:
acariciarlos, jugar con ellos, etc.
• Dedicarles tiempo para compartir sus juegos, ayudarlos en sus estudios, etc.
ÁREA SOCIOCULTURAL
• Enseñar a los hijos a relacionarse positivamente con las demás personas.
• Comportarse correctamente en todo momento y situación, dando buen ejemplo
a sus hijos.
• Transmitirles las costumbres y valores propios de la comunidad formando así
su identidad.
Los conocimientos y las formas de comportarse el niño las aprende primero en
su casa y después con sus amigos y en la escuela.
ÁREA ECONÓMICA
• Buscar los ingresos económicos necesarios para satisfacer los gastos de la
familia.
• Buscar satisfacer las necesidades básicas de la familia: alimentación, vivienda,
vestido.
• Dar educación a los hijos.
• No permitir que los niños trabajen en perjuicio de su salud, de sus estudios y
de su recreación.
EL ÁREA EDUCATIVA
• Enseñar disciplina a los hijos en cuanto al comportamiento, respeto a horarios,
orden, limpieza, etc.
• Enseñarles a respetar a la familia, profesores, compañeros y a todas las
personas de su entorno.
• Orientarlos en el cuidado de su salud física y mental (higiene personal.
recreación. etc.).
BASES DE LA MATERNIDAD Y MATERNIDAD RESPONSABLE
1 - CONOCER Y RESPETAR EL PROCESO DE PROCREACIÓN HUMANA.
Es evidente que si los Esposos, por amor deciden procrear un hijo o posponer
su nacimiento, deben conocer la forma de cómo funcionan naturalmente sus
órganos procreativos.
En la concepción y desarrollo del hijo que han de procrear, aprovechando según
su decisión, las fases fértiles o infértiles del ciclo de la mujer, para tener o no
relaciones sexuales.
En estrecha unión con ese conocimiento, se sitúa el respeto y aceptación de las
funciones de sus aparatos procreadores, su finalidad, y la decisión libre de la
pareja, de determinar el momento de transmitir la vida o espaciarla, según la
administración que tengan de su fertilidad.
El desconocimiento del proceso del ritmo biológico, tanto del hombre como de la
mujer y de la procreación humana, favorece a las malas interpretaciones en
cuanto a que se pone excusas para determinar que ya no pueden tener más hijos
por prescripción médica.
A las circunstancias mencionadas, hay que añadir las relativas al grado de salud
tanto física como psicológica de los padres. La salud integral es un factor
determinante de responsabilidad para la toma de estas decisiones, sobre el
número de hijos que ambos consideren que son capaces de procrear y educar.
4 – RESPETAR LA LEY NATURAL Y EL ORDEN MORAL.
"La Paternidad Responsable comporta sobre todo una vinculación más profunda
con el orden moral objetivo establecido por Dios, cuyo fiel intérprete es la
conciencia rectamente formada.
El ejercicio responsable de la Paternidad exige, por tanto, que los cónyuges
reconozcan plenamente sus propios deberes para con Dios (como
colaboradores libres y responsables en su obra creadora), para consigo mismos
(de acuerdo a su dignidad humana ya sus derechos y deberes), para con la
familia (en particular para con los hijos nacidos o por nacer), y para con la
sociedad (a la que deben beneficiar y no causarle problemas), en una justa
jerarquía de valores.
"En la misión de transmitir la Vida, los Esposos no quedan por tanto libres para
proceder arbitrariamente, como si ellos pudiesen determinar de manera
completamente autónoma, los caminos lícitos a seguir en la transmisión de la
vida, sino que deben conformar su conducta a la intención creadora de Dios,
manifestada en la misma naturaleza del matrimonio y de sus actos".
"Cuando los Esposos mediante el recurso del anticoncepcionismo, separan
estos dos significados (unitivo y procreativo), que Dios Creador ha inscrito en el
ser del hombre y de la mujer, y en el dinamismo de su comunión sexual, se
comportan como árbitros del designio divino, y manipulan y envilecen la
sexualidad humana, y con ella la propia persona del cónyuge, alterando su valor
de donación total de los Esposos. El anticoncepcionismo impone un lenguaje
objetivamente contradictorio, es decir; el de no darse al otro totalmente, se
produce no solo el rechazo positivo de la apertura a la vida, sino también una
falsificación de la verdad interior del amor conyugal, llamado a entregarse en
plenitud personal".
No es ningún secreto que la vida matrimonial está sufriendo en nuestros días
profunda crisis. Para convencernos de ello, basta observar las noticias de la
prensa, las declaraciones de los psicólogos, la información de los sacerdotes y
abogados, los guiones de las películas y muchos folletos de literatura, y nos
daremos cuenta en seguida de que la enfermedad social más extendida, la llaga
más profunda, es la crisis del matrimonio y del hogar”
Sin embargo, “Ante todo digamos que hay muchos matrimonios felices, muchas
parejas que un día se hicieron entrega mutua ante el altar, y que ahora van dando
testimonio de su AMOR y de su felicidad ante el mundo que los rodea. Lo que
ocurre que esos matrimonios no hacen ruido y de ellos nadie habla.
¿PUEDE UN JOVEN O ADOLESCENTE SER UN PADRE
RESPONSABLE?
• Los adolescentes por estar en proceso de ser independientes tienen
derechos pero deben de ser responsables de sus actos y decisiones para
el futuro.
• Por lo tanto todos los adolescentes no deben introducirse en la actividad
sexual porque no están preparados ni física, económica y
emocionalmente. A pesar de esto existe un alto índice de madres solteras.
Esta etapa de la adolescencia es sin embargo muy rica para soñar y
planearse metas.
MÉTODOS ANTICONCEPTIVOS
Métodos quirúrgicos
Anticoncepción de emergencia
-Píldora del día después
CONCLUSIONES
La paternidad y maternidad responsables un derecho y deber de los padres hacia
los hijos y el bienestar de la sociedad depende entre muchas otras causas el de
una educación basada en el afecto, dedicación y comprensión; muy aparte de
los derechos del niño (hogar, alimentación, educación primaria y secundaria,
protección, nacionalidad, etc.); para que los hijos sean personas que aporten a
la sociedad y no sean marginados o rebeldes.
Resumiendo, el desarrollar una paternidad responsable aparte de planificarse
para poder darle las condiciones adecuadas de desarrollo a un niño es un
compromiso con la sociedad y con la realidad del país, puesto que ahora en un
mundo globalizado y muy competitivo no sólo en el ámbito intelectual sino
también en el de relaciones interpersonales e intrapersonales, un menor que es
educado bajo los preceptos anteriores puede destacar o simplemente desarrollar
una función determinada de acuerdo a sus capacidades.
Y de manera especial en el Perú donde no hay mucha oferta de trabajo y los
salarios son bajos se debe tener más conciencia.