Trabajo Práctico: “La escuela de la señorita Olga”
Asignatura: Taller de Practica I
Alumna: Aguirre, María Julieta.
Docente: Cabrera, Valeria.
Curso: 1er. año
Instituto: San José de Adoratrices Nro. 9017
1. La obra de Olga Cossettini en la Escuela Carrasco se enmarcó en un contexto donde se produjo el primer golpe de estado del país, y el inicio del periodo de la llamada “Década Infame”, que estuvo a cargo de la reestructuración oligárquica. En este, se encontraba un país golpeado por la economía, y con rasgos democráticos y participativos suprimidos.
Sin embargo, en la provincia de Santa Fe se constituyó todo
un desafío y un enfrentamiento con las tendencias políticas que por entonces dominaban. Bajo el gobierno de Luciano Molinas se aprobó la Ley de Educación N°2364, donde estableció que las políticas educativas iban a operar de manera gratuita, obligatoria, universal y laica, remarcando también la importancia de adherir a los métodos activos, otorgando así la posibilidad de escuelas de carácter experimental.
2. El perfil docente que tenían las hermanas Cossettini era
contrario al modelo de escuela tradicional, caracterizada por una disciplina rígida. Olga y Leticia, aplicaron una autodisciplina nacida del interior del niño hacia fuera, una educación totalmente distinta a la que se ejercía en ese momento en las escuelas.
Por otro lado, tenían la pasión y el deseo de conectarse con la
gente y el barrio, es decir, que era muy importante abrir la escuela a la vida, y por lo tanto basar los aprendizajes en experiencias vivenciadas por los niños a través de su misma realidad o ambiente. Por ello la importancia de los recorridos, paseos y observaciones semanales que se llevaban a cabo. En aquellas salidas los chicos aprendían ciencias naturales; recogiendo flores o insectos y llevándolos al laboratorio, matemáticas; mediante la medición del tiempo en que realizaban el recorrido o analizando las figuras geométricas que encontraban en las cosas cotidianas, entre otros contenidos, también observaban lo natural, disfrutando la belleza que ofrecían los lugares. Para Olga, también era importante construir una escuela basada en la libertad, creatividad y formación artística. Se respetaba las diferentes posibilidades y características de expresión de cada niño. Un claro ejemplo, es cuando una exalumna relata que tenían las posibilidades de expresarse y aprender de diferentes formas, escribiendo (cuentos o poemas), dibujando, cantando o actuando mediante el teatro.
Estas maestras buscaban una estimulación, una adhesión a lo
sensible, a lo artístico y a lograr la capacidad creadora en los niños.
3. Partiendo de las siguientes citas: “La formación solidaria con el
medio, con el pueblo y con la gente, fue a través de las misiones culturales que los niños realizaban a los barrios, llevando temas que pudiesen interesar a sectores postergados de la sociedad y de la vida” exalumna de la Escuela Carrasco
A mi parecer la experiencia pedagógica, en la situación
anteriormente mencionada, contribuye a que los alumnos, como ciudadanos logren interpretar y entender el mundo, a generar un interés por los demás y por su entorno. Formando así sujetos críticos, capaces de comprometerse socialmente y transformar la realidad.
“Un sistema totalmente distintivo al que estábamos
acostumbrados, a hacer una lección, a pasar al frente, a tener hora por hora una persona distinta” … “Empezaba la clase de dibujo y si queríamos pintar los troncos de los árboles de color rojo, azul o del color que hubiéramos querido, era mal visto por los profesores” ... “no interpretaban lo que traíamos y lo que queríamos, no nos daban libertad para hacer nada” exalumnos de la Escuela Carrasco
Como podemos ver la Escuela Serena tenía un papel activo,
creador y experimentador, era flexible y muchas veces espontanea. Se diferencia de la educación tradicional, de la formación intelectual, donde se limita la individualidad, la creatividad y solo importa la mera reproducción de contenidos y de la alineación establecida. Está se separa de las experiencias y realidades del alumno.