You are on page 1of 84

CARRERA PROFESIONAL DE PSICOLOGÍA

“ASOCIACIÓN ENTRE TIPOS CARACTEROLÓGICOS DE


PERSONALIDAD Y ESTRATEGIAS DE AFRONTAMIENTO AL
ESTRÉS EN PACIENTES CON CÁNCER DE UN HOSPITAL DE
CHICLAYO, AGOSTO 2016”

Informe de investigación para obtener el título profesional

de Licenciado en Psicología

Autores:

Bach. Ps. Granados Mori Geraldo Yampieri.

Bach. Ps. Gonzales Yovera Nelly del Rosario

Asesora:

Mg. Ps. Lizzeth Aimée García Flores

CHICLAYO, DICIEMBRE 2016


“ASOCIACIÓN ENTRE TIPOS CARACTEROLÓGICOS DE PERSONALIDAD Y
ESTRATEGIAS DE AFRONTAMIENTO AL ESTRÉS EN PACIENTES CON CÁNCER
DE UN HOSPITAL DE CHICLAYO, AGOSTO 2016”

Informe presentado por:

Bach. Ps. Geraldo Yampieri Granados Mori Bach. Ps. Nelly del Rosario Gonzales Yovera

Autor Autora

Aprobado por:

Dra. María Rosa Vásquez Pérez


Presidenta

Ps. Mary Cleofé Idrogo Cabrera


Secretaria

Ps. Mg. Efrén Gabriel Castillo Hidalgo


Vocal

Ps. Mg. Lizzeth Aimée García Flores


Asesora
DEDICATORIA

A Dios por darme la vida y poner en mi camino a grandes seres humanos, mi familia; mis padres,

mis abuelos y hermano, todos ellos ejemplo de perseverancia y dedicación, por siempre

inculcarme y motivarme a conseguir siempre lo mejor.

Geraldo.

i
DEDICATORIA

A Dios, por ser mi guía y mi luz cada día, y permitirme llegar con éxito al término de mi carrera.

A mis padres, por ser mi ejemplo de lucha y esfuerzo; por apoyar y respetar cada paso que doy en

mi vida.

Con especial afecto a mis docentes, por su sabiduría, enseñanzas impartidas, paciencia, pero

sobre todo por su exigencia académica para ser una mejor profesional.

Nelly
AGRADECIMIENTO

Son muchas las personas que merecen nuestro agradecimiento, pero antes de hacer una mención

en particular, agradecemos a Dios porque es su voluntad la que hace posible la culminación del

presente estudio, que nos ha dejado gran satisfacción y crecimiento personal, enriqueciendo

nuestro espíritu de compromiso con la sociedad.

Asimismo agradecemos a las autoridades del centro hospitalario, por brindarnos el acceso a sus

instalaciones y llevar a cabo cada una de las actividades para el cumplimiento de los objetivos

propuestos.

De igual manera manifestamos especial gratitud al Dr. Marco Calderón Espil, director del área

de oncología, por el apoyo brindado, y hacer factible la ejecución del estudio,

Merecen una mención especial los pacientes oncológicos, a quienes agradecemos infinitamente

por haber entendido el propósito de la investigación, y contar con su participación voluntaria.

Queremos manifestar especial agradecimiento a nuestra asesora, la magister en psicología

Lizzeth Aimée García Flores, por su confianza, paciencia y tiempo brindado, su acertada

dirección y guía, y por haber sido en todo momento la voz que nos animó a continuar y

enseñarnos que el límite es algo que no existe para la imaginación y la voluntad humana.

Los autores.

iii
RESUMEN

El cáncer es la segunda causa principal de muerte en el mundo, está enfermedad no hace

distinción entre la población de países desarrollados y en vías de desarrollo. Tal enfermedad

tiene grandes repercusiones en el estado emocional, físico y social del paciente, viéndose

reflejada en los tipos caracterológicos de personalidad y en la utilización de estrategias de

afrontamiento al estrés, es por ello que este estudio tuvo como objetivo determinar la

asociación entre ambas variables. La investigación responde al paradigma cuantitativo, no

experimental y correlacional. Se trabajó con 60 pacientes (población muestral), cuyas edades

oscilaron entre 20 a 60 años, atendidos en consulta ambulatoria de un hospital de Chiclayo en

Julio – Agosto de 2016. Se utilizó el Cuestionario Caracterológico de Gastón Berger con una

confiabilidad de 0.69 para emotividad; 0.67 para actividad y 0.51 para resonancia; y el

Inventario de Estimación de Afrontamiento– COPE, con una confiabilidad de 0.92. Los datos

fueron procesados en el programa SPSS versión 22 y Microsoft Excel 2010. Se aplicaron

estrategias para asegurar los aspectos éticos y los criterios de cientificidad. Con respecto a los

resultados se encontraron que los tipos caracterológicos de personalidad predominantes en los

hombres es el nervioso (60%); y en las mujeres el Flemático (34%) y Sanguíneo (26%). En

cuanto a las estrategias de afrontamiento al estrés predominantes son “Desentendimiento

conductual” (35%), “Enfocar y liberar emociones (25%) y “Planificación”, “Búsqueda de apoyo

social por razones emocionales” y “Acudir a la religión” (23% cada uno). La prueba estadística

Chi Cuadrado de Pearson revela que no hay asociación entre ambas variables.

Palabras clave: Personalidad, estrategias de afrontamiento, cáncer.

iv
ABSTRACT

Cancer is the second leading cause of death in the world, this disease makes no distinction

between the population of developed and developing countries. This disease has great

repercussions on the emotional, physical and social state of the patient, being reflected in the

characterological types of personality and in the use of coping strategies to stress, that is why this

study aimed to determine the association between both variables. The research responds to the

quantitative, non-experimental and correlational paradigm. Sixty patients (sample population)

were studied, whose ages ranged from 20 to 60 years, attended in an outpatient clinic of a

hospital in Chiclayo in July - August 2016. The Gaston Berger Characteristic Questionnaire was

used with a reliability of 0.69 for emotionality; 0.67 for activity and 0.51 for resonance; and the

COPE Coping Estimation Inventory, with a reliability of 0.92. The data were processed in SPSS

version 22 and Microsoft Excel 2010. Strategies were applied to ensure the ethical aspects and

criteria of cientificidad. Regarding the results we found that the predominant character types of

personality in men are the nervous (60%); And in women the Phlegmatic (34%) and Blood

(26%). As for the predominant stress coping strategies are "Behavioral discomfort" (35%),

"Focusing and releasing emotions (25%) and" Planning "," Seeking social support for emotional

reasons "and" Going to religion " (23% each). The Pearson Chi square test reveals that there is no

association between both variables.

Key words: Personality, coping strategies, cancer.

v
INTRODUCCIÓN

La incidencia del cáncer es mayor en países desarrollados que en vías de desarrollo, no

obstante la mayor tasa de mortalidad es mayor en estos últimos. Una de las principales

causas de ello es debido a que el diagnóstico se da en etapas avanzadas por la escasa

accesibilidad a los servicios de salud y a la poca sensibilización para la detección precoz

(Instituto Nacional de estadística y geografía, 2015).

Según la Oficina para el Control del Cáncer a nivel internacional, esta enfermedad

representa la segunda causa principal de muerte en todo el mundo. Para el año 2012 se

diagnosticaron un aproximado de 14 millones de casos; y se anticipa que en el año 2025 esta

cifra ascenderá a los 19,3 millones de casos nuevos (Frieden, 2016)

En los países de América Latina, el número de casos que se diagnostica es inferior a los

que se registran en Europa y EEUU. Sin embargo, el nivel de mortalidad en los países

latinos es casi el doble, debido a que muchos de los pacientes se diagnostican en estadios

avanzados. Siendo la incidencia de cáncer en toda América Latina de 163 casos cada

100.000 habitantes; por debajo de los 300 casos en EEUU y los 264 que registran los

países europeos. Pese a estos datos, las estadísticas determinan que la tasa de mortalidad

para este diagnóstico es inversa; pues se estima 13 víctimas por cada 22 casos de cáncer en

América Latina, frente a 13 víctimas por cada 30 casos en Europa y por cada 37 casos en

EEUU (Cornejo, 2014).

De acuerdo con los datos estadísticos del Instituto Nacional de Enfermedades

Neoplásicas, la incidencia anual de cáncer en el Perú es de 150 casos cada 100.000

habitantes, lo que correspondería a 45000 casos nuevos por año. El motivo principal de

ello es que la enfermedad se diagnostica en fases avanzadas; existiendo así una menor

1
probabilidad de curación, menor calidad de vida, un costo de tratamiento mayor y una

elevada tasa de mortalidad (Salazar et al., 2013).

Ante el diagnóstico de cáncer, el individuo puede experimentar ansiedad tras la

incertidumbre, la posibilidad de tener que ser hospitalizado, o las incomodidades y

perturbaciones emocionales que le impiden seguir una vida normal (Organización

Panamericana de la Salud, 2006).

Siendo el cáncer una vivencia de alto nivel estresante, es inevitable que el individuo

tenga que enfrentarse con temas que limiten de alguna u otra forma sus estilos de vida;

tales como el sufrimiento, el deterioro progresivo y la propia muerte (Barroilhet, Forjaz &

Garrido, 2005)

Es posible entonces, que el paciente tenga que asumir las restricciones relacionadas

con su nueva condición y la posibilidad de que se produzca un declive paulatino de su

salud; ello significa que tendrá que afrontar la enfermedad aprendiendo a manejar y/o

sobrellevarla, y lo más importante emprender acciones para impedir que su salud se

deteriore aún más (Morrison & Bennet, 2008).

Es importante hacer mención que el ser humano tiene la capacidad de hacer frente a

situaciones estresantes, sin embargo las valoraciones y las emociones negativas impiden la

homeostasis en la vida del paciente (Morrison & Bennet, 2008).

El estrés se genera cuando existe un desajuste percibido entre las demandas de la vida y

los recursos que la persona posee. El afrontamiento entonces tiene que ver con la

interpretación según la percepción del paciente acerca de su enfermedad, haciendo que

parezca más favorable. Aunque existen numerosas definiciones, el modelo transaccional de

Lazarus ha tenido el impacto más profundo para conceptualizar dicho término; definiéndolo

2
como aquel esfuerzo cognitivo o conductual que realiza la persona, para reducir el impacto

de un elemento estresante, real o percibido. Puesto que las valoraciones evocan emociones, se

puede lograr el afrontamiento alterando o reduciendo las emociones negativas, o centrándose

directamente en el factor estresante. Por ende “el afrontamiento permite la adaptación a la

enfermedad, tolerando, reevaluando o minimizando la situación vivida” (Morrison & Bennett,

2008, p. 399).

Por su parte Oliveros, Barrera, Martínez y Pinto (2009), afirman que en un futuro no

muy lejano todas las personas se verán afectadas por esta patología, ya sea en calidad de

pacientes, familiares o amigos, por lo que tendrán que hacer frente a esta enfermedad. Por

ende el afrontamiento constituye una variable estudiada de mayor trascendencia en los

últimos años.

Pasando al estudio de la personalidad; la teoría psicosomática relaciona ciertas

enfermedades con determinados rasgos de personalidad. Así por ejemplo el patrón de

conducta tipo A es relacionado con enfermedades cardiacas, mientras que el patrón de

conducta tipo C con el cáncer. Tomando en cuenta los postulados de esta teoría, la

personalidad representa la predisposición de adquirir enfermedades y desempeñar un

papel importante en la progresión o resultado de la misma (Morrison & Bennett, 2008).

Por su parte Bermúdez, Pérez, Sanjuan, y Rueda (2012), refieren que el individuo es un

ente activo, el cual él mismo es generador del escenario de sus conductas, y que las personas

se diferencian en la manera en que interpretan las situaciones vividas. Estas interpretaciones

percibidas son guiadas por un componente afectivo y cognitivo, definiendo la personalidad

del individuo.

3
Según el Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica; Lima, La Libertad,

Lambayeque, Callao y Piura son los departamentos con mayores casos de cáncer, y el tipo

de cáncer más frecuente a nivel nacional son cérvix, estómago, mama, piel y próstata.

Además revelaron que durante el Período 2006-2011 en Lambayeque se reportaron las

siguientes cifras de casos: La DIRESA Lambayeque (4,019 casos) Hospital Regional Docente

“Las Mercedes” (1,782 casos) Clínica de Tumores SAC (1,600 casos) Hospital Belén (49

casos) (Ramos & Venegas, 2013).

El jefe del Departamento de Oncología del Hospital Regional Docente “Las Mercedes”,

el médico oncólogo Marco Antonio Calderón Espil, reveló que en el 2015 se han reportado

84 nuevos casos de pacientes con cáncer de mama. “El cáncer de mama es el más frecuente

en nuestra región, seguido del cáncer de cuello uterino, estamos recibiendo pacientes en

estadios 3 y 4, siendo el tratamiento más complicado, por lo que lamentablemente el 30% de

la población fallece” indicó (Urpeque, 2015).

Según relatos de los pacientes abordados dentro del escenario de estudio, coinciden al

manifestar que, tras la noticia del diagnóstico de cáncer, les es difícil asimilar de manera

positiva la situación por la que están pasando, ya que nadie espera tan temido diagnóstico.

Una de ellas manifiesta: “La verdad aun no puedo creer que tengo cáncer, es la noticia más

terrible que he recibido en mi vida, en un comienzo me sentía muy mal conmigo misma,

angustiada y sin ganas de querer hacer nada; ni siquiera de someterme a tratamiento; pero

luego con el pasar del tiempo me acostumbre a vivir con la enfermedad, quien me da

fortaleza a parte de mi familia, es Dios”. Otra paciente refiere: “A mí me sigue costando

aceptar que tengo este mal (cáncer de mama), jamás pensé que esto me pasaría a mí, dejo

todo en manos de Dios, trato de ser positiva”, otra de ellas relata “En lo primero que pensé

cuando me diagnosticaron cáncer, fue en mis dos hijos, sentía que no iba a poder con la

4
enfermedad. Los primeros meses lloraba todo el día; luego me di cuenta que lo que me

estaba matando, no era el cáncer; sino la depresión, así que decidí luchar para seguir

viviendo”. Finalmente otra persona comenta “Hace cuatro meses me diagnosticaron cáncer

de mama, cuando me someto a las quimioterapias me siento tensa y ansiosa, luego termino

cansada, agotada, muy débil y sigo teniendo mucho malestar, vivo con la incertidumbre de

lo que pueda pasar después”.

Según lo manifestado por los profesionales del escenario de investigación, existen

pacientes que muestran actitudes devastadoras, temerosas, depresivas, ansiosas, y

desesperanza frente al diagnóstico; otros adoptan actitudes de rebeldía, ira, cólera consigo

mismos y con la vida, sintiéndose en muchas ocasiones culpables de su enfermedad;

mientras que por el contrario otros denotan actitudes de coraje, valentía y espíritu de

lucha.

Conforme a la problemática descrita, se planteó la siguiente interrogante: ¿Existe

asociación entre los tipos caracterológicos de personalidad y las estrategias de

afrontamiento al estrés en pacientes con cáncer de un hospital de Chiclayo, en agosto de

2016?

Como objetos de estudio estuvieron los tipos caracterológicos de personalidad y las

estrategias de afrontamiento al estrés. La primera, definida como personalidades destacadas

en los diferentes campos del que hacer, saber y arte, encontrándose tres factores constantes

(emotividad, actividad y resonancia), que tipifican al individuo; siendo factores

caracterológicos fuertes que cada uno los presenta en diferentes grados (Berger, 1964,

citado por Vicuña, 2006); la segunda; “son esfuerzos conductuales y cognitivos que utiliza

el individuo para hacer frente a situaciones estresantes, así como para reducir el estado

de malestar inducido por el estrés” (Lévano, 2003, p. 36).

5
En este sentido, se planteó como objetivo general, determinar la asociación entre los

tipos caracterológicos de personalidad y las estrategias de afrontamiento al estrés en

pacientes con cáncer de un hospital de Chiclayo, en agosto de 2016. Para concretar dicho

objetivo, se plantearon como objetivos específicos, describir los tipos caracterológicos de

personalidad predominante y las estrategias de afrontamiento al estrés más utilizadas en la

población en estudio.

En congruencia con los objetivos de investigación, se planteó la siguiente hipótesis

general, existe asociación entre los siguientes tipos caracterológicos de personalidad y

las estrategias de afrontamiento al estrés: Flemático con planificación, colérico con

afrontamiento activo, nervioso con desentendimiento conductual, sanguíneo con enfocar y

liberar emociones. Como hipótesis específicas estuvieron, los tipos caracterológicos de

personalidad predominantes en dichos pacientes son sentimental y pasional; y las

estrategias de afrontamiento más utilizadas son búsqueda de apoyo social, acudir a la

religión y la reinterpretación positiva.

Debido a que en los últimos tiempos las investigaciones se han enfocado en el estudio

de las variables biológicas, psicológicas y sociales de mayor trascendencia en pacientes

que padecen cáncer tales como: personalidad, afrontamiento, soporte social, estrés, ansiedad,

depresión, rotulación y evaluación del problema (Llull, Zanier & García, 2003); el interés

científico del presente estudio se justifica y se enfoca en describir los estilos caracterológicos

de personalidad predominantes y las estrategias de afrontamiento al estrés más utilizadas en

pacientes con cáncer y determinar la asociación entre ambas variables.

Asimismo servirá como antecedentes para futuras investigaciones que deseen

profundizar en el tema; además de contribuir en la formación académica de los

6
investigadores, desarrollar habilidades investigativas y ampliar sus conocimientos en la

rama de la psicooncología.

Tomando como referentes teóricos de mayor relevancia para dicho estudio tenemos

a Berger (1964), quien afirma que una persona es el resultado de muchas transformaciones

que lo han convertido en lo que efectivamente es, determinado por las experiencias de su

vida y constituyendo un todo que se llama personalidad (citado por Vicuña, 2006).

Asimismo, Allport (1975, citado por Montaño, Palacios, & Gantivia, 2009) considera

que la personalidad “Es la integración de todos los rasgos y características del individuo

que determinan la forma de comportarse” (p.85).

Otro de los referentes teóricos esenciales están Lazarus y Folkman (1986), quienes

describen al afrontamiento como “aquellos esfuerzos cognitivos y/o conductuales

constantemente cambiantes que se desarrollan para manejar las demandas específicas

externas y/o internas que son evaluadas como excedentes o desbordantes de los recursos

del individuo” (citado por Zúñiga, 2013).

Aunque hay una investigación donde se reveló que no existe relación evidente entre

las dimensiones de la personalidad y las estrategias de afrontamiento, los investigadores

decidieron realizar un estudio en un contexto más específico, es decir en un hospital de

Chiclayo, con la finalidad de corroborar o no los resultados de dicha investigación. Otros

estudios revelan que las categorías predominantes están el “acudir a la religión”,

“reinterpretación positiva y crecimiento” y “planificación”.

Este informe está estructurado en cuatro capítulos; en el primero presentamos el

marco teórico; en el segundo se plantea la metodología aplicada, en el tercero se presentan

los resultados obtenidos en dicho estudio; y en el cuarto capítulo se expone la discusión de

los mismos. Finalmente se presentan las conclusiones, recomendaciones y sugerencias.


7
CAPÍTULO I

MARCO TEÓRICO: ESTUDIO DE LA PERSONALIDAD Y SUS EFECTOS EN EL


MODO DE AFRONTAMIENTO.

1.1. Antecedentes de investigación

1.1.1. Internacional

Conde (2014), realizó una investigación en Valencia, denominada “Dimensiones básicas

de la personalidad, afrontamiento y adaptación en pacientes oncológicos”, con el objetivo de

determinar la relación entre las dimensiones de la personalidad y las estrategias de

afrontamiento. Concluyendo que aquellos pacientes que presentan puntuaciones elevadas en

neuroticismo, específicamente en las facetas de ansiedad y depresión, afrontarán la

enfermedad con estrategias de ansiedad y preocupación ansiosa y no de enfrentamiento y

lucha activa. Además se concluyó que no existe relación evidente entre ambas variables.

Orosco, Palacios, Corredor y Cuartas (2005), realizaron un estudio de tipo decriptivo-

correlacional en Bogotá, denominado “Estilos de afrontamiento y patrones de personalidad

en pacientes con artritis reumatoide”, el cual buscó identificar la relación existente entre el

tipo de personalidad (Tipo A y Tipo C), las estrategias de afrontamiento y la presencia de

artritis reumatoide (AR) en 40 participantes (20 con AR y 20 sin AR). Los resultados

mostraron que el 35% de son de tipo A, mientras que el 65% no lo son. En tanto a la

personalidad Tipo C, se encontró que el factor de racionalidad es mayor en los pacientes

con AR, lo cual indica que utilizan la razón y la lógica como un modo general de enfrentarse

al mundo. Sin embargo, el factor de comprensión es mayor en los participantes sin AR,

indicando que éstos intentan ponerse en el lugar de los otros y entenderlos. En cuanto a las

estrategias de afrontamiento más utilizadas en los pacientes con AR son el desarrollo

8
personal y resolver el problema; siendo las menos utilizadas apoyo social al problema y

desconexión conductual. Los investigadores concluyeron que no existe relación, ni

diferencias significativas entre las variables en estudio y la AR en ambos grupos.

Molina, Hernández y Sarquis (2009), en su estudio “Patrón de personalidad tipo C y su

relación con el cáncer de mama y cérvico-uterino”, plantearon como objetivo general

determinar la relación existente entre el patrón de personalidad tipo C en 40 mujeres de la

ciudad de Veracruz- México, que padecen cáncer de mama y cérvico-uterino. Esta relación

se determinó con la aplicación del “Autoinforme de Personalidad tipo C. De acuerdo con los

resultados, el 100 % de las mujeres con cáncer muestran este patrón de personalidad,

independientemente del tipo de cáncer que se tenga.

1.1.2. Nacional

Rojas (2016), en su estudio “Calidad de vida relacionada a la salud y afrontamiento en

pacientes con cáncer gastrointestinal”, planteó como uno de los objetivos, identificar los

estilos y estrategias de afrontamiento en un grupo de pacientes con cáncer gastrointestinal.

La muestra estuvo constituida por 38 pacientes, entre 31 y 70 años, de tres hospitales de

Lima. Para ello se utilizó el inventario de estimación de afrontamiento COPE. Hallándose

que el afrontamiento de mayor uso es el estilo centrado en la emoción y la estrategia acudir

a la religión.

En tanto Díaz (2015), en su estudio “Estilos de personalidad, modos de afrontamiento y

clima social familiar en pacientes amputados de miembro inferior”, planteó como objetivo

correlacionar las variables en estudio. Para ello se utilizaron el Inventario de estilos de

personalidad de Millon (MIPS), el Cuestionario de modos de afrontamiento al estrés (COPE);

9
y la Escala de Clima Social Familiar de Moos. De acuerdo con los resultados obtenidos el

mayor promedio en el modo de afrontamiento centrado en el problema, lo obtuvo la

búsqueda de soporte social; el mayor promedio en cuanto al modo centrado en la emoción,

fue el acudir a la religión; y en otros modos de afrontamiento el mayor promedio lo obtuvo

el enfocar y liberar emociones. Según sexo, señalan que las mujeres presentaron mayor

promedio en búsqueda de soporte social que los hombres. Mientras que en acudir a la

religión tanto hombres y mujeres obtuvieron mayor promedio. Por último en otros modos

de afrontamiento los hombres obtuvieron mayor promedio en enfocar y liberar emociones

que las mujeres. El mayor promedio de los estilos de personalidad lo obtuvieron la

individualidad, innovación y decisión.

Por su parte, Lostaunau y Torrejón (2013), en su investigación “Estrés, afrontamiento

y calidad de vida relacionada a la salud en pacientes con cáncer de mama”, plantearon como

uno de los objetivos; examinar los estilos de afrontamiento en mujeres diagnosticadas con

cáncer de mama. Llegando a la conclusión que el estilo más utilizado corresponde al

orientado a la emoción; mientras que el menos utilizado fue el afrontamiento por evitación.

Baiocchi, Lugo, Palomino y Tam (2013), realizaron un estudio descriptivo en Lima,

denominado “Estilos de afrontamiento en pacientes con cáncer de cuello uterino”, con el

objetivo de determinar los estilos de afrontamiento. La muestra estuvo conformada por 150

pacientes en un hospital nacional de enfermedades neoplásicas. Para la recolección de datos

se utilizó un cuestionario validado, estructurado con 30 preguntas relacionadas con estilos

de afrontamiento: problema, emoción, adicionales Los resultados indicaron que el estilo

más empleado enfocado a la emoción fue: busco la ayuda de Dios (87%); el enfocado al

problema fue: elaboró un plan de acción (73,3%); y el estilo adicional fue: me vuelco en el

trabajo y en otras actividades para apartar cosas de mi mente (65%). Concluyendo que, los

10
estilos de afrontamiento más empleados por la población fueron los estilos positivos y

enfocados a la emoción.

Ojeda y Martínez (2012), en su estudio descriptivo “Afrontamiento de las mujeres

diagnosticadas de cáncer de mama”, plantearon como objetivo determinar las estrategias de

afrontamiento en mujeres con cáncer de mama. Los resultados obtenidos arrojaron que el 80%

utiliza el reordenamiento de prioridades en la respuesta cognitiva; mientras que el 12.5%

utiliza la evitación. Además se revela que la estrategia más utilizada en la respuesta

conductual fue la aproximación dirigida al problema (97.5%); mientras que la menos

utilizada fue conductas autodestructivas (12.5%).

Soto (2012), realizó el estudio “Sintomatología depresiva y afrontamiento en pacientes

con cáncer de mama”, con el objetivo de describir la relación entre sintomatología depresiva

y los estilos y estrategias de afrontamiento. Los instrumentos aplicados fueron el Inventario

de Depresión de Beck-II y el Cuestionario de Estimación del Afrontamiento (COPE).

Concluyéndose que existe una relación altamente significativa entre sintomatología

depresiva con el estilo evitativo de afrontamiento y la estrategia enfocar y liberar

emociones. Por otro lado, las pacientes en estadio III del cáncer, reportaron mayor empleo

de estrategias orientadas al problema, mientras que las del grupo con mastectomía presentan

mayor orientación hacia estrategias de afrontamiento emocional.

Así mismo Díaz y Yaringaño (2010), llevaron a cabo un estudio descriptivo

correlacional, titulado “Clima familiar y afrontamiento al estrés en pacientes Oncológicos”,

dirigido a describir y relacionar las dimensiones del clima familiar y los modos de

afrontamiento en dicha población, utilizándose el Cuestionario de Afrontamiento al estrés

en pacientes oncológicos (CAEPO). Los resultados indicaron que las pacientes mujeres

tienden a usar estrategias activas cognitivas de reinterpretación positiva en mayor medida

11
que los pacientes hombres, y las pacientes con cáncer de mama, usan estrategias positivas

de afrontamiento al estrés en relación con otros tipos de cáncer.

1.1.3. Local

Chanduví y Granados (2014), en su investigación “Asociación entre calidad de vida y

afrontamiento al estrés en pacientes oncológicos de un hospital en Chiclayo”, tuvo como

objetivo determinar la asociación entre ambas variables, en el cual según los resultados

obtenidos, se concluyó que no existe asociación entre el nivel de calidad de vida y una

determinada estrategia de afrontamiento. Además, revelaron que las estrategias de

afrontamiento que predominaron en los pacientes oncológicos fueron: “el acudir a la

religión”, “reinterpretación positiva y crecimiento”, y “planificación”.

Por su parte Díaz, Salazar y Santa Cruz (2013), realizaron un estudio cualitativo, titulado

“Afrontamiento de pacientes con cáncer, en tratamiento con quimioterapia en el servicio de

oncología de un hospital de Chiclayo”, con el objetivo de caracterizar y comprender el

afrontamiento de los pacientes. Resultando que las estrategias más utilizadas fueron de

evitación, autocontrol y apoyo de redes, lo que implica regular las respuestas emocionales

al problema que causa estrés; disminuyendo momentáneamente sentimientos negativos

causados por las condiciones estresantes, por el contrario el no expresar los sentimientos

conllevaría a sentimientos de frustración, desesperanza, rabia, entre otros.

1.2. Base Teórica.

Debido que la presente investigación está dirigida a pacientes con cáncer; surge la

necesidad de revisar la literatura concerniente a ello. Así también es necesario revisar las

aproximaciones teóricas referidas a la personalidad, que según Suls, David, y Harvey (1994,

12
citado por Conde, 2014), supone un determinante del afrontamiento, ya que según estos

autores predispone a la persona a utilizar determinadas estrategias de afrontamiento.

1.2.1. Cáncer

Según el MINSA (2010), considera el cáncer como una enfermedad que resulta del

crecimiento incontrolable de células anormales que se originan en alguna parte del cuerpo

y suelen vivir más tiempo que las células normales, pueden formar tumores, destruir las

partes vecinas y diseminarse por todo el cuerpo.

Para la Asociación Española contra el Cáncer (2015), esta enfermedad se origina cuando

las células normales se transforman en cancerígenas, es decir, adquieren la capacidad de

multiplicarse descontroladamente e invadir tejidos y otros órganos vecinos.

Hernández y Cruzado (2013), refieren que la presencia del cáncer, implica un importante

sufrimiento psicológico, alcanzando niveles de malestar emocional en la mayoría de las

personas que lo padecen, acompañado incluso de trastornos psicopatológicos y reacciones

sintomáticas como: ansiedad y depresión en más del 30% de los casos.

Estadificación del cáncer

De acuerdo con el Instituto Nacional del Cáncer (2015), describe las etapas o estadios del

cáncer de la siguiente manera:

Estadio 0: refiere que existen células anómalas presentes, pero no se han esparcido al tejido

cercano. Se llama también carcinoma in situ (CIS), es decir que no es cáncer, pero puede

convertirse.

13
Estadio I, Estadio II y Estadio III: Hay cáncer presente. Entre más alto sea el número del

estadio, el cáncer se ha extendido más, ya sea porque el tumor ha crecido o porque ha

invadido órganos vecinos.

Estadio IV: El cáncer se ha diseminado a partes distantes del cuerpo, produciendo metástasis,

formando nuevos tumores.

1.2.2. Personalidad.

Uno de los temas que más ha preocupado a la psicología de la salud desde que se puso

en evidencia la posible relación entre conducta y mente, ha sido el estudio de la posible

conexión entre factores psicológicos y la influencia en el inicio y desarrollo del cáncer. Tras

dicha especulación se han realizado diversas investigaciones con el interés de estudiar

variables psicosociales como predictoras de la aparición de esta afección (Oblitas, 2010).

Por su parte Eysenck (1972, citado por Oblitas, 2010, p. 55) afirma que “Las personas

con bajas puntuaciones en neuroticismo y psicoticismo; y altas en extraversión, están

genéticamente predispuestas a presentar patrones de depresión e indefensión ante situaciones

estresantes, incrementando el riesgo a desarrollar neoplasias cancerígenas”. Sin embargo la

investigación sobre el cáncer pone de manifiesto que la etiología de esta enfermedad es una

cuestión altamente compleja y difícil de determinar. Este mismo autor menciona que el

estudio de la personalidad, es relevante no sólo para la psiquiatría, sino para toda la

medicina, afirmando que se debe tratar a la persona, no únicamente a la enfermedad.

Berger (1964), describe la personalidad afirmando que, al llegar a la madurez, una

persona es el resultado de muchas transformaciones que lo han convertido en lo que

14
realmente es, determinado por las experiencias de su vida y constituyendo un todo que se

llama individualidad (citado por Vicuña, 2006).

Por su parte Claude (1989), considera que “La personalidad es la configuración única

que toma a lo largo de la historia de un individuo, el conjunto de los sistemas

responsables de su conducta” (p.7).

Allport (1975) lo define como “La integración de todos los rasgos y características del

individuo que determinan una forma de comportarse” (citado por Montaño et al., 2009, p. 85)

Beck (1990), refiere que es una “Organización de sistemas integrados, cognitivos,

afectivos, motivacionales y conductuales, que trabajan juntos para mantener la homeostasis

y promover la adaptación al ambiente” (Citado por Gómez, 2015, p. 54)

Millon y Davis (1996), definen los estilos de personalidad como características distintivas

de los modos de percibir, sentir, pensar, afrontar y comportarse de una persona frente a su

entorno, motivo por el cual hace a cada ser diferente uno de otro (citado por Díaz, 2015).

Como podemos evidenciar existen diversos autores que definen la personalidad,

coincidiendo con los autores de la presente investigación, al indicar que es el conjunto de

rasgos, características y experiencias vividas lo que la determinan, siendo factores

responsables de la conducta del ser humano, considerándose un ser único e individual.

1.2.3. Teorías de la personalidad

Costa y McCrae (1985, citado por Conde, 2014, p.49), proponen el Modelo de los Cinco

Grandes, definiendo la personalidad en función de cinco áreas; las cuales son:

15
Neuroticismo: tendencia a sentimientos negativos e ideas irracionales, menor capacidad de

controlar los impulsos y el estrés.

Extraversión: sociable, asertivo, activo, alegre, animosos, enérgicos y optimistas. El

introvertido en cambio es reservado, independiente, constante.

Apertura a la experiencia: personas interesadas por el mundo exterior e interior, sociable y

no autoritario.

Amabilidad: persona altruista, dispuestos a ayudar. Por el contrario, la persona antipática

es egocéntrica, suspicaz con respecto a las intenciones de los demás y opositora.

Responsabilidad: responsables, voluntariosos, porfiados y decididos.

Uno de los constructos más estudiados acerca de la personalidad ha sido el Patrón de

Conducta Tipo C (PCTC), término que fue acuñado por primera vez por Morris y Greer

(1980). En su estudio “Evaluación del patrón de conducta tipo C en pacientes crónicos”,

afirman que los pacientes con cáncer presentan un perfil caracterizado por utilizar la razón

y la lógica para evitar las emociones conflictivas e inclinación a velar por el equilibrio en

las relaciones interpersonales. Asimismo concluyeron que el PCTC no es característica

exclusiva de personas con cáncer, sino que además podría constituir un estilo de

personalidad prototípico de padecer una enfermedad crónica. Asimismo, Tozzi y Pantaleo

(1985) consideran el patrón de Tipo C como un factor vulnerable que determina el

padecimiento de cáncer u otras enfermedades crónicas; identificando una característica de

personalidad común en dichas personas, la represión emocional (citado por Anarte, López,

Ramírez & Esteve, 2000).

A continuación se describen los siguientes tipos de personalidad:

16
Patrón de personalidad tipo A: en su mayoría padecen de hipertensión arterial y arritmias

cardiacas. Tienden a la sobrecarga en la competencia de tipo social. Son bastante agresivos

en la búsqueda por el éxito y ocupan la posición de líderes. Son personas extremadamente

activas (Friedman y Rosenman, 1959, citado por Molina et al., 2009).

Patrón de personalidad tipo B: patrón de personalidad con mayor equilibrio emocional.

Las características principales de este tipo de personas son serenidad, seguridad y apertura a

las emociones, incluidas las hostiles (Manieri, citado por Molina, et al., 2009).

Patrón de personalidad tipo C: estilo de personalidad caracterizado por la inhibición

de sus emociones ante situaciones estresantes, en especial de enfado o ansiedad. Son personas

cooperativos, pasivos, serviciales, conformistas, perfeccionistas y con tendencia a la

depresión. Además evitan todo tipo de conflictos y buscan la armonía. Las estrategias de

afrontamiento que más utilizan son desesperanza, negación y represión emocional (Morris

& Greer, 1959, citado por Anarte et al., 2000, p.176)

Oblitas (2004), coincide al indicar que las personas con patrón de personalidad Tipo C

son “racionales y distantes y el estilo de afrontamiento utilizado es el represivo” (citado por

Molina, et al., 2009, p.176)

Por su parte Berger (1964, citado por Vicuña, 2006), formuló tres dimensiones

fundamentales del carácter (Emotividad-Actividad-Resonancia), que combinadas dan origen

a ocho tipos de personalidad (colérico, pasional, nervioso, sentimental, sanguíneo, flemático,

amorfo y apático)

Colérico (E.A.P): se caracterizan por ser persuasivos, emprendedores y de gran iniciativa.

Por lo general son optimistas y alegres, aunque pasan fácilmente y con rapidez de unos

sentimientos a otros, entusiastas en el desarrollo de sus actividades, están llenos de vitalidad.

Tienen inclinación innata de comunicar lo que piensan y sienten, con facilidad de palabra.
17
Hombre dado a los extremos, ya que no puede resignarse con miras estrechas ni términos

medios. Ante las injurias reaccionan violentamente de palabra. En los momentos de peligro

se exaltan y llenan de entusiasmo lanzándose a la acometida sin calcular las consecuencias.

Cuando ha cometido una falla se indigna consigo mismo, y ante las ajenas las reprende.

Aspectos positivos: valentía, ideales elevados, emprendedores y expresivos.

Aspectos negativos: impulsividad, orgullo, vanidad.

Pasional (E.A.S): son personas serviciales, constantes, metódicas e imaginativas. Ante las

ofensas se enfurecen, sin embargo son escasas las veces que la exteriorizan. Su ira es

duradera, mostrándose violentos y dominantes en casos extremos.

Aspectos positivos: consagración y abnegación en sus actividades, rigor lógico, sentido de

responsabilidad.

Aspectos negativos: susceptible, crítico, desconfiado, testarudo, tiende al rencor y la

venganza.

Nervioso (E.NA.P): les gusta llamar la atención, seres subjetivos, extravagantes, con

actitudes negativas e inconstantes en sus amistades. Hombres de problemas interiores y

tensiones. Aman lo que les causa placer momentáneo, sienten prontamente las injurias y

demuestran ello con alteraciones de genio brusco, aunque pasajeras; esta excitabilidad

puede hacerles muy indisciplinado, rebelde y duro en el trato con quienes lo hieren o creen

que los ofenden. Su imaginación le agiganta los peligros y se acobarda con facilidad. En

la actividad es ágil, pero no persevera mucho en su esfuerzo continuo y penoso; es

enemigo de todo lo que exija esfuerzo y disciplina, fácilmente cambia de parecer.

Aspectos positivos: sumamente generosos y serviciales.

18
Aspectos negativos: altamente sensible, inconstante, indisciplinado y superficial.

Sentimental (E.NA.S): Seres introvertidos, retraídos, viven fijados en hechos pasados,

son serios, gustan de la soledad y la melancolía. Son seres afectivos, se autoanalizan. Son

pasivos ante situaciones de peligro.

Aspectos positivos: honrado, sencillo, humilde, fidedigno y generoso.

Aspectos negativos: indecisión, desánimo, pesimismo (subestima sus propias cualidades) y

timidez.

Sanguíneo (NE.A.P): personas de sentimientos y sensaciones poco profundas e intensas.

Por lo general tienen una sonrisa en el rostro, denotando así su alegría y son muy

locuaces. Hombre socialmente atento y cortés, gusta del compañerismo y las amistades.

Seres que aman la libertad, sus pasiones no son muy fuertes, son extrovertidas. Expansivo y

efusivo, todo lo dice, discute y comunica a los demás. No se irrita fácilmente ante las

ofensas, y si lo hace, se lanza sin reflexionar. Dan prueba de iniciativa y de gran flexibilidad.

Aspectos positivos: práctico, afable, bondadoso, calmado ante los problemas, animoso y

comunicativo.

Aspectos negativos: inconstante, superficial (se deja llevar fácilmente de apariencias), esquiva

todo lo que requiera esfuerzo, e inclinación a la vanidad.

Flemático (NE.A.S): son personas extremadamente tranquilas, casi nada les puede

enfadar, rara vez se muestra violentos o elevan la voz. Se caracterizan por no tener

sentimientos intensos, pero si constancia y tenacidad en la acción, Hombres sin grandes

pasiones, se mantiene en constante tranquilidad afectiva, pasivos en las relaciones sociales,

poco comunicativos. Minuciosamente ordenados y metódicos en todo su proceder. Le gusta

lo habitual y la costumbre, sencillos y nada vanidosos, perseverantes aunque lentos.

19
Muestran gran rectitud moral, casi inflexible, y casi siempre están de humor alegre. En

momentos de peligro son indecisos.

Aspectos positivos: equilibrado, amable, eficiente, puntual, reflexivo, realista.

Aspectos negativos: apático, poco comunicativo e indeciso.

Amorfo (NE.NA.P): personas muy influenciables por el ambiente, optimistas, amables en

el trato, sociables. Se caracterizan por la falta de actividad, pereza, impuntualidad, dejando

todo para el último momento, se fatigan rápidamente. Gustan mucho del afecto del hogar.

Son conciliadores, indiferentes al pasado y al futuro.

Aspectos positivos: pasividad, capacidad de acomodación, sociabilidad y practicidad.

Aspectos negativos: pereza, impuntualidad y negligentes.

Apático (NE.NA.S): hermético, enigmático, vueltos hacia sí mismos, pero sin una vida

interior intensa. Su aislamiento no se debe al deseo de llevar la contraria, sino que evita

por su mismo carácter el mezclarse con el trato y actividad de los otros. No es que los

compañeros le causen fastidio, sino que no suele significar nada para él; no despiertan

ningún eco en su afectividad. Ríen muy rara vez. Prefieren la vida tranquila, independiente,

monótona, de pocos ajetreos sociales. Se caracterizan generalmente por ser dóciles y

conformistas por esencia, poco comunicativos, aman la soledad, son honestos y respetables.

Aspectos positivos: Disciplinado y automatizado.

Aspectos negativos: Falta de dinamismo psíquico, falta de altruismo, tienden a la pasividad.

20
1.2.4. Afrontamiento al estrés.

Existen principalmente dos tipos de afrontamiento; uno centrado en el problema, y otro

en la emoción. En el primero se generan esfuerzos para eliminar o alterar dicha situación

controlable; el segundo caso está dirigido a cambiar cómo la persona reacciona ante esa

situación percibida como incontrolable. Estos mismos autores agregan gran importancia en

los estilos de personalidad en cuanto al afrontamiento y a los efectos del estrés según la

cronicidad del acontecimiento vivido (Suls, David, y Harvey, 1996, citado por Conde, 2014,

p. 49).

Lazarus y Folkman (1986, citado por Ascencio, 2013), definen el afrontamiento como

“aquellos esfuerzos cognitivos y/o conductuales constantemente cambiantes que se

desarrollan para manejar las demandas específicas externas y/o internas que son

evaluadas como excedentes o desbordantes de los recursos del individuo”. Estos autores

proponen dos funciones principales de afrontamiento

Afrontamiento Instrumental: enfocado al problema, concretado en acciones: definir el

problema, búsqueda de información, consideración de alternativas, exploración de recursos,

elección de la solución; entre otros.

Afrontamiento Paliativo: se suscitan acciones y pensamientos positivos, percepción

selectiva, negación, evitación, distanciamiento, minimización, evasión y extracción de

aprendizajes de la situación estresante, entre otros, con la finalidad de regular respuestas

emocionales en el paciente.

Por su parte Zeidner y Hammer (1990), definen afrontamiento como las “Características

o conductas en curso que capacitan a los individuos para manejar los estresores de forma

más efectiva, experimentar pocos síntomas o menos severos y recuperarse más rápidamente”

(citado por Morán, Landero & Gonzales, 2010, p. 544)

21
Cobra gran relevancia el grado de amenaza percibida, valoraciones o atribuciones,

además de rasgos de personalidad, experiencias previas con la enfermedad, aspectos

culturales, las connotaciones y el significado que se otorga a la situación estresante dentro

del proceso de afrontamiento del cáncer (Crespo & Cruzado, 1998, citado por Ascencio,

2013, p. 22).

Silberfarb (1982), señala ante la presencia del cáncer, “el afrontamiento estaría centrado

en los aspectos más estresantes de la enfermedad o en los momentos más críticos de la

misma”. (Citado por Asencio, 2013, p.22). Durante el transcurso de la enfermedad, cuando

dura un tiempo prolongado sería más adecuado hablar de adaptación a la enfermedad y

no de afrontamiento puesto que no todos los momentos o condiciones de la enfermedad

son igualmente estresantes según este autor.

Ascencio (2013), afirma que el afrontamiento busca la respuesta adaptativa del

individuo, a los cambios experimentados en su ambiente.

1.2.5. Estilos y estrategias de afrontamiento al estrés.

Para canalizar y modificar la influencia de los agentes o situaciones estresantes, tanto

estables como transitorios, es necesaria la utilización de estrategias de afrontamiento para

enfrentar las demandas externas e internas, permitiendo el buen funcionamiento y madurez

personal (Amarís, Madariaga, Valle & Zambrano, 2013).

Abascal (1997), considera que los estilos de afrontamiento son los responsables de las

preferencias individuales en el uso de unos u otros tipos de estrategias de afrontamiento.

Por tanto, los estilos son considerados disposiciones generales que llevan a la persona a

22
pensar y actuar de forma más o menos estable ante diferentes situaciones; mientras que las

estrategias se establecerían en función de cada contexto y pueden ser altamente cambiantes

dependiendo de las situaciones desencadenantes (Citado por Felipe & León, 2010).

Por su parte Pelechano (2000, citado por Felipe & León, 2010, p. 246), considerada que

“Los estilos representan formas estables de afrontamiento a las situaciones estresantes; y

las estrategias comportamientos específicos de la situación”

Por otro lado Baggley y Preece (2005), refieren que las estrategias de afrontamiento son

el “Conjunto de recursos cognitivos y comportamentales, guiados a resolver el problema,

reducir y/o eliminar la respuesta emocional” (citado por Gantiva, Viveros, Dávila & Salgado,

2010, p. 64)

A continuación se presenta la tipología elaborada por Delucchi y Marmissolle (2001), según

investigaciones acerca de la evolución del cáncer y su relación con la forma de afrontarla

(citado por Oblitas, 2010, p.75)

Espíritu luchador: Respuesta activa, donde el paciente acepta el diagnóstico y adopta una

actitud optimista, decide luchar contra la enfermedad y participar activamente en la toma de

decisiones del tratamiento. Está relacionado con una mejor evolución.

Evitación (negación): El paciente rechaza el diagnóstico de la enfermedad o minimiza la

seriedad, evitando pensar acerca de la presencia del cáncer. Se relaciona con una mejor

evolución, aunque ha habido conclusiones opuestas.

Fatalismo (aceptación estoica): Se presenta cuando el paciente acepta el diagnóstico, y por el

contrario al espíritu luchador, adopta una actitud fatalista y de resignación. Está relacionada

con una peor evolución.

23
Preocupación ansiosa: El paciente está frecuentemente preocupado y pensando en su cáncer;

con miedo de que cualquier dolor indique una recurrencia o propagación de la enfermedad.

Está asociada con una peor evolución.

Desesperanza: Son pacientes que adoptan una actitud totalmente pesimista, se rinden ante la

enfermedad.

A modo de resumen, según Oblitas (2010) comenta que “Los individuos que reaccionan

pasivamente ante las enfermedades malignas (con fatalismo, preocupación ansiosa y

desesperanza) se les asocia con una mala evolución, siendo mejor cuando los afectados

adoptan una actitud luchadora” (p. 76).

En tanto Carver (1989, citado por Ascencio, 2013, pp. 20-22), planteó tres estilos de

afrontamiento, estos son:

Estilos de afrontamiento centrado en el problema: comprenden actividades dirigidas a la

modificación o minimización de la situación crítica. Comprende las siguientes estrategias:

Afrontamiento Activo: el paciente ejecuta acciones directas, con el fin de evitar o

aminorar los efectos negativos del estresor.

Planificación: implica organizar estrategias de acción, pensando qué paso tomar y

estableciendo cuál será la mejor forma de manejar el problema.

La Supresión de actividades distractores: Significa no dejarse distraer por otras

actividades, con la finalidad de concentrase en evitar a toda costa el estresor.

24
La postergación de afrontamiento: el paciente evita hacer algo prematuramente que

empeore la situación, por lo que espera la oportunidad propicia para actuar sobre el

problema.

La búsqueda de apoyo social por razones instrumentales: el paciente busca en los

demás algún consejo, asistencia e información con el fin de buscar soluciones adecuadas

al problema.

Estilos de afrontamiento centrado en la emoción: involucra esfuerzos para regular

emociones negativas ocasionadas por el estresor. Comprende estrategias como:

Búsqueda de Apoyo social por razones emocionales: el paciente busca en los demás

apoyo moral, empatía y comprensión, con la finalidad de aliviar las reacciones emocionales

negativas.

Reinterpretación positiva: Consiste en evaluar la situación vivida de manera positiva,

otorgándole connotaciones favorables a la experiencia en sí misma y asumiéndola como un

aprendizaje a futuro.

Aceptación: Engloba dos aspectos durante el proceso de afrontamiento. El primero se

realiza cuando la persona acepta que la enfermedad realmente existe, y el segundo cuando

acepta la realidad y que no se podrá modificar, donde la persona tendrá que convivir con la

enfermedad.

Negación: es el momento en el que el individuo se rehúsa a creer que la enfermedad

existe o alimentar pensamientos de que el estresor no es real.

Acudir a la religión: Tendencia a volcarse en la religión en situaciones de estrés con la

intención de reducir la tensión existente.

25
Estilos de afrontamiento centrado en otros estilos: conocido también como afrontamiento

evitativo; debido a las conductas de evitación o descompromiso con la situación estresante.

Enfocar y liberar emociones: Consiste en centrarse en las consecuencias emocionales

desagradables propias de la situación, expresando abiertamente estas emociones.

Desentendimiento conductual: Consiste en la disminución del esfuerzo dirigido al

estresor, dándose por vencido antes de luchar contra la enfermedad, ya que el estresor está

interfiriendo.

Desentendimiento mental: La persona permite que una amplia variedad de actividades la

distraigan del problema.

1.2.6. Aspectos psicológicos del cáncer y su afrontamiento.

La enfermedad de cáncer es considerado uno de los principales problemas crónicos de

salud pública, llegando a afectar el bienestar general del paciente. Siendo el impacto en

todos los niveles (físico, psicológico, social e incluso espiritual), es necesario un tratamiento

multidisciplinario (Arrivillaga, Correa & Salazar, 2007).

Las reacciones emocionales de tal diagnóstico son variadas; las cuales están en función

de la edad, sexo, las creencias religiosas, estilos de afrontamiento frente a situaciones

estresantes, consideraciones previas a la enfermedad, nivel de tolerancia a la frustración,

recursos individuales y la presencia y eficacia de las redes de apoyo social (Hipkins,

Whitworth, Tarrier & Jayson, 2004, citado por Arrivillaga, et al., 2007).

Es de gran relevancia considerar características personales en los procesos psicológicos

del paciente. “Habiendo personas que frente al diagnóstico, presentan estados de shock,

cayendo en confusión, considerando incluso el diagnóstico de cáncer como erróneo,

26
experimentando así comportamientos de aislamiento social y distanciamiento de la

situación, sin efectuar ningún tipo de cambio” (Iwamitsu, 2005, citado por Arrivillaga,

Correa & Salazar, 2007, p. 9).

Fonnegra (1999), afirma que, la negación es una de las formas más comunes de

responder al diagnóstico de cáncer. Esta reacción se presenta en la fase inicial e incluso

en etapas avanzadas de la enfermedad, esto dependerá de las características, recursos y

estrategias de afrontamiento que suela utilizar el paciente. Cabe mencionar que esta

respuesta cumple la función de amortiguador, permitiendo al paciente asimilar la situación

gradualmente y movilizar defensas menos radicales para asumir los retos de su enfermedad

de manera activa y adaptativa en etapas ulteriores (Citado por Arrivillaga et al., 2007).

Otras de las reacciones emocionales más frecuentes en estos pacientes son los estados de

ansiedad y depresión. La primera es generada debido a un estado de aturdimiento y temor

confuso, siendo el individuo consciente de que su estilo de vida cambiará, enfrentándose a la

incertidumbre de curarse o no, de ser visto como una carga para la familia, o que procesos

médicos no funcionen y hayan posibles complicaciones, y la preocupación principal, el

temor a la muerte. En cuanto a la segunda, los pacientes con cáncer suelen experimentar la

depresión, tiempo después de conocido el diagnóstico; esto sucede cuando se hacen

evidentes ciertas limitaciones de su nueva condición de vida, esencialmente en su desempeño

laboral y grado de autonomía para asistirse a sí mismos (Taylor, 1986, citado por Arrivillaga,

Correa y Salazar, 2007, p .10).

27
CAPÍTULO II

MÉTODO

2.1. Tipo de investigación

El presente estudio respondió al paradigma cuantitativo, debido a que siguió un proceso

secuencial y estructurado, es decir cada etapa precedió a la siguiente. Además es una

investigación aplicada; ya que confronta la realidad con los hechos (Hernández, Fernández

& Baptista, 2010).

2.2. Diseño de la investigación

No experimental: El estudio se realizó sin manipular deliberadamente las variables y los

datos se recolectaron en su ambiente natural (Hernández, et. al 2010).

Transversal: porque los datos se recolectaron en un único momento (agosto 2016)

(Hernández, et. al 2010).

Correlacional: ya que el interés científico de la investigación se orientó en establecer la

asociación existente entre los tipos caracterológicos de la personalidad y las estrategias de

afrontamiento al estrés en pacientes con cáncer de un hospital de Chiclayo, agosto 2016

(Hernández, et. al 2010).

Prospectiva: debido que se analizaron situaciones actuales de los sujetos en estudio

(Hernández, et. al 2010).

28
El diseño del presente estudio se esquematizó de la siguiente manera:

Leyenda:

C= Pacientes con cáncer.

P= Tipos caracterológicos de personalidad.

A= Estrategias de afrontamiento.

r = relación de variables.

2.3. Población y Muestra

2.3.1. Población

“Conjunto de todos los elementos a los cuales se refiere la investigación” (Fracica citado

por Bernal, 2010, p.160).

La población estuvo conformada por 60 pacientes con cáncer, atendidos en un hospital

de Chiclayo, en agosto de 2016, y que cumplieron con los siguientes criterios.

29
Criterios de inclusión

 Pacientes diagnosticados con cáncer, atendidos en consulta ambulatoria en un hospital

de Chiclayo en agosto de 2016, que desearon ser partícipes voluntarios de la

investigación y que firmaron el consentimiento informado.

 Pacientes de ambos sexos, con edades entre 20 y 60 años.

 Pacientes que se encontraron en la fase I, II y III de la enfermedad.

Criterios de exclusión

 Pacientes analfabetos.

 Pacientes que dejaron inconcluso los instrumentos aplicados; o que marcaron dos

respuestas en un mismo ítem.

2.3.2. Muestra

Según Calderón et al. (2016), es la “Pequeña proporción representativa y adecuada de la

población, a partir del cual el investigador va a obtener datos que son puntos de partida de

las generalizaciones” (p.97).

Se trabajó con una población muestral, debido a que la población en estudio fue reducida,

por ende no fue necesario utilizar ningún método de muestreo.

La muestra poblacional estuvo conformada por 60 pacientes diagnosticados con cáncer,

atendidos en un hospital de Chiclayo, de ambos sexos, entre 20 y 60 años de edad; que

firmaron el consentimiento informado; y con un nivel cultural mínimo, dado que los

enunciados de los instrumentos utilizados para la recolección de datos fueron de fácil

comprensión.

30
2.4. Técnicas e instrumentos de recolección de datos

2.4.1. Técnicas

Según Calderón et al. (2016, p. 106), es el “Conjunto de reglas y procedimientos que le

permiten al investigador establecer la relación con el objeto o sujeto de estudio”.

Para determinar las variables se utilizó la encuesta, definida como el “Método descriptivo

que consiste en obtener información de los sujetos en estudio, proporcionados por ellos

mismos, sobre opiniones, conocimientos, actitudes y sugerencias” (Calderón et al., 2016,

p.107).

2.4.2. Instrumentos

Los instrumentos utilizados fueron un cuestionario y un inventario; los cuales contienen

preguntas y alternativas bien establecidas, brindando datos específicos de las variables en

estudio.

“Cuestionario caracterológico de personalidad de Gastón Berger” (Anexo1)

Este cuestionario está dirigido a adolescentes y adultos de ambos sexos, con un nivel

cultural mínimo, se puede administrar de manera individual o colectiva, con una duración

aproximada de 20 minutos. Tiene como objetivo determinar los tipos caracterológicos de

personalidad de los pacientes con cáncer. Está compuesto por 30 ítems con enunciados

de doble opción, excepto el ítem 26 que presenta tres alternativas. Estos ítems están

distribuidos en orden secuencial según los factores a evaluarse: Emotividad (1 al 10);

Actividad (11 al 20) y Resonancia (21 al 30), y que al combinarlos se obtienen ocho tipos

caracterológicos de personalidad (sanguíneo, flemático, amorfo, apático, colérico, pasional,

nervioso y sentimental).

31
Debido a que el cuestionario no estuvo aplicado a la población en estudio, los

investigadores decidieron determinar la validez, confiabilidad y baremos del instrumento,

aplicando la prueba a 80 pacientes del mismo centro hospitalario.

Calificación

Primero se obtendrá el puntaje total de la suma de los ítems, luego se procederá a ubicar

dicho puntaje en el cuadro de calificación, para obtener los tres factores caracterológicos

predominantes, que al combinarlos proporcionarán un tipo caracterológico de los ocho

posibles.

Tabla 1

Baremos del Cuestionario Caracterológico de Personalidad de Gastón Berger.

EMOTIVO ACTIVO SECUNDARIO


Hombres Mujeres
MA 61 a + 64 a + 83 a + 79 a +
A 43 a 60 59 a 63 75 a 82 75 a 78
TA 36 a 42 43 a 58 67 a 74 71 a 74
TB 35 35 a 42 59 a 66 67 a 70
B 24 a 34 19 a 34 43 a 58 56 a 66
MB 10 a 23 10 a 18 10 a 42 10 a 55
NO EMOTIVO NO ACTIVO PRIMARIO

“Inventario de estimación de afrontamiento-COPE” (Anexo 2)

Este inventario tiene por objetivo identificar las estrategias de afrontamiento que utilizan

los pacientes ante su enfermedad. Está estructurado por 52 ítems, distribuidos en 3 estilos

de afrontamiento: Estilo de afrontamiento enfocado en el problema, enfocado en la emoción

y otros estilos; organizados a su vez en 13 dimensiones, que permiten obtener perfiles de

afrontamiento organizados en las siguientes estrategias: afrontamiento activo, planificación,

supresión de actividades competentes, postergación del afrontamiento, búsqueda de apoyo

32
social por razones instrumentales, búsqueda de apoyo social por razones emocionales,

reinterpretación positiva, aceptación, acudir a la religión, negación, enfocar y liberar

emociones, desentendimiento conductual y desentendimiento emocional. El inventario se

aplica de manera individual o colectiva con un tiempo aproximado de 20 minutos.

Calificación

Para hallar los resultados primero se suma cada ítem que conforma cada categoría,

obteniendo una puntuación mínima de 4 y máxima de 16 puntos. La estrategia que obtenga

el puntaje más elevado será el que predomina en el individuo.

2.5. Procedimiento de recolección de datos.

El plan para la recolección de datos se llevó a cabo, según la siguiente secuencia de

actividades:

Primero se solicitó una carta de presentación a la casa de estudios de los investigadores

para presentarlo a la institución hospitalaria (Anexo 4). Luego de presentar dicha carta a las

autoridades del hospital; se solicitó la autorización correspondiente al director del área

de oncología (Anexo 5) para obtener la accesibilidad a los pacientes con cáncer.

Posteriormente se procedió a aplicar las encuestas a todos los pacientes con cáncer que

cumplían con los criterios de inclusión preestablecidos, no sin antes haberles explicado el

objetivo de la investigación y haber firmado el consentimiento informado (Anexo 6).

33
2.6. Métodos del procesamiento de la información.

Para el procesamiento de la información, se utilizaron los programas estadísticos

EXCEL y SPSS versión 22. Los estadígrafos utilizados en este estudio fueron el percentil

y el porcentaje (Bernal, 2010).

Así mismo se utilizó la prueba estadística Chi-cuadrado de Pearson, para determinar la

asociación entre los tipos caracterológicos de personalidad y estrategias de afrontamiento

al estrés en los pacientes con cáncer.

Para facilitar el análisis de los datos obtenidos, se ordenaron y presentaron los resultados

en tablas y figuras; con el propósito de hacer mayor comprensible los resultados presentados

(Calderón et al., 2016).

2.7. Principios éticos

Para cumplir con los tres principios éticos según el Reporte Belmont (1979, citado por

Instituto nacional de ciencias médicas y nutrición Salvador Zubiran, 2012), tenemos:

En cuanto al principio del respeto a las personas, la participación de la investigación

fue de libre albedrio: haciendo mención que, si durante la aplicación de los instrumentos

el participante no se sentía cómodo, tenían el derecho de retirarse de la misma.

Para cumplir con el principio de beneficencia, a cada participante se le asignó un código;

el cual permitió brindar los resultados de los instrumentos aplicados al participante que así

lo deseaba.

34
Por último, el principio de justicia se evidenció, al tratar de manera justa y sin diferencias

a todos los participantes de la investigación.

2.8. Criterios de cientificidad

El presente estudio de investigación es objetivo, dado que los instrumentos que se

utilizaron son válidos y confiables.

Puesto que el Cuestionario Caracterológico de Personalidad de Gastón Berger no fue

aplicado a la población en estudio, los investigadores decidieron determinar la validez,

confiabilidad y baremos del instrumento. La confiabilidad fue hallada a través del cálculo

de los coeficientes de consistencia interna, alfa de Cronbach y del método de división

por mitades. Para el alfa de Cronbach se obtuvieron coeficientes aceptables en las

dimensiones de Emotividad (0.69) y Actividad (0.67); mientras que en Resonancia fue

regular (0.51). En cuanto al método de división por mitades se obtuvieron coeficientes

aceptables en las dimensiones de Emotividad (0,67) y Actividad (0.70); mientras que en

Resonancia el coeficiente fue regular (0.61).

Se determinó la validez concurrente del instrumento a través del método de contrastación

de grupos para las tres dimensiones. El cálculo de la T de Student reveló que existían

diferencias significativas (p<0.05) entre los grupos altos y bajos para Emotividad (t=21.22;

gl=51), Actividad (t=17.12; gl=35) y Resonancia (t=13.78; gl=35). De esta manera se pudo

concluir que las tres dimensiones eran válidas.

En el Inventario de Estimación de Afrontamiento-COPE, la validez se estableció con un

nivel de significancia de 0.05 a través de la composición factorial de acuerdo al análisis de

los factores, encontrándose que existe hasta 13 factores con carga positiva. Posee un nivel

35
de confiabilidad que oscila entre 0.45 a 0.92, el cual se halló un coeficiente interno de

Cronbach.

En el caso de la confidencialidad, se mantuvo en el anonimato la identidad de los

participantes, pidiendo como únicos datos referenciales la edad y sexo. Así mismo, los

resultados obtenidos, fueron utilizados para fines estrictamente académicos y dar respuesta

a los objetivos planteados.

Teniendo en cuenta la coherencia entre las diferentes etapas del proceso de investigación

y el amplio referencial teórico, la investigación se considera consistente (Zamudio, 2013).

36
CAPÍTULO III

RESULTADOS

A continuación se presentan los resultados obtenidos del presente estudio, teniendo en

cuenta los objetivos planteados. Es así que, en primera instancia, se reportan los hallazgos

referidos a los tipos caracterológicos de personalidad en la población en general y según

sexo. En segundo lugar las estrategias de afrontamientos al estrés más utilizadas en los

pacientes con cáncer. Y finalmente se presentan los resultados obtenidos acerca de la

asociación de las variables en estudio.

Figura 1: Tipos Caracterológicos de personalidad en pacientes con cáncer de un hospital

de Chiclayo, agosto 2016.

Como se observa en la Figura 1, el tipo caracterológico predominante en los pacientes con

cáncer es el flemático con un 28 %, seguido del sanguíneo con un 22 %.

37
Figura 2: Tipos Caracterológicos de personalidad en pacientes con cáncer de un

hospital de Chiclayo, según sexo.

Como se observa en la Figura 2, el tipo caracterológico predominante en los hombres

es el nervioso (60%); mientras que en las mujeres es el flemático (34%), seguido del

sanguíneo (26%).

38
Figura 3: Estrategias de afrontamiento al estrés en pacientes con cáncer de un hospital de

Chiclayo, agosto 2016.

Como se observa en la Figura 3, las estrategias usadas con mayor frecuencia son el

desentendimiento conductual con un 35%, enfocar y liberar emociones con un 25%; y

planificación, búsqueda de apoyo social por razones emocionales y acudir a la religión con

un 23.3 % cada uno.

39
Tabla 2

Coeficiente de correlación Chi-cuadrado de Pearson entre los tipos caracterológicos de

personalidad y las estrategias de afrontamiento al estrés.

Sig. asintótica
Variables Valor gl
(bilateral)

Tipos caracterológicos y
5,327a 6 .503
estrategias de afrontamiento
al estrés.
Nivel de Significancia p<0.05

Las pruebas estadísticas realizadas evidencian que no existen asociación entre los tipos

caracterológicos de personalidad y las estrategias de afrontamiento al estrés; puesto que el

nivel de significancia de Chi-cuadrado de Pearson no alcanza el mínimo requerido de

Significancia p<0.05.

40
CAPÍTULO IV

DISCUSIÓN

En este capitulo se describen los resultados obtenidos del presente estudio, referidos

a la asociación entre los tipos caracterológicos de personalidad y las estrategias de

afrontamiento al estrés en pacientes con cáncer de un hospital de Chiclayo en agosto de

2016.

En relación al primer objetivo específico, describir los tipos caracterológicos de

personalidad más predominantes en los pacientes con cáncer, tenemos el flemático (28%)

y el sanguíneo (22%) (Figura 1). Según el sexo, se evidencia que el tipo caracterológico

predominante en los hombres es el nervioso (60%); mientras que en las mujeres es el

flemático (34%), seguido del sanguíneo (26%) (Figura 2).

Las personas de tipo flemático, se caracterizan por no experimentar sentimientos

intensos, son muy pacientes, poco comunicativas y poco sociables, se muestran en constante

tranquilidad afectiva, no se alteran ante las ofensas; por ello rara vez se muestran

violentos y casi nunca elevan la voz. Ante situaciones estresantes son indecisos; gustan de

lo habitual y la costumbre (Berger, 1964, citado por Vicuña, 2006). A pesar que este tipo

caracterológico tiene otra denominación, se asemeja con las características del Patrón de

conducta tipo C descritas por Morris y Greer (1980), caracterizadas por la supresión de

emociones negativas especialmente de enfado y ansiedad, personas sumamente cooperativos

y pasivos e inclinación por mantener la armonía (citado por Anarte et al., 2000). En

definitiva se puede concluir que ambos tipos de personalidad, tienden a reprimir emociones

especialmente de ira, con el afán de mantener buenas relaciones interpersonales y evitar

conflictos a toda costa.

41
Las características del tipo flemático, pudieron evidenciarse en los pacientes en estudio

al mostrar sosiego y pasividad ante la presencia de su enfermedad, titubeando a someterse

a los diversos tratamientos prescritos por el médico, además de ser personas poco expresivas

y reprimir emociones de enfado para evitar conflictos.

Con respecto a las personas de tipo caracterológico sanguíneo, al igual que los flemáticos,

se caracterizan por no poseer sentimientos y sensaciones intensas, no se irritan fácilmente

ante las ofensas y si lo hacen se lanzan sin reflexionar en posibles consecuencias. Sin

embargo, se diferencian de los flemáticos, en cuanto a su efusividad, inconstancia, locuacidad

y extroversión (Berger, 1964, citado por Vicuña, 2006).

Después de analizar este hallazgo, se puede deducir que si bien es cierto las personas de

tipo sanguíneo son comunicativas y manifiestan lo que piensan y sienten; no lo hacen de

forma asertiva, dejándose llevar por su efusividad, actuando sin premeditar conveniencias

y desventajas, evidenciándose inadecuado manejo de sus emociones y poca asertividad

para comunicarse. Además por la marcada inconstancia en actividades que requieren de

esfuerzos mayores; les cuesta iniciar o continuar los tratamientos con resultados a largo

plazo. Estas acciones se asocian a un mayor progreso de la enfermedad e inadecuada calidad

de vida.

El tipo caracterológico predominante en los hombres es el nervioso con un 60%. Estas

personas son de humor variable, indiferentes a la objetividad, por lo que tienden a

embellecer la realidad. Sienten prontamente las ofensas y demuestran ello con alteraciones

de genio brusco, aunque pasajeras; esta excitabilidad puede hacerles muy indisciplinados,

rebeldes y duros en el trato con quienes los hieren o creen que los ofenden. Su

imaginación le agiganta los peligros y se acobardan con facilidad. En la actividad son

42
ágiles, pero inconstantes; siendo enemigos de todo lo que exija esfuerzo y disciplina,

cambiando fácilmente de parecer (Berger, 1964, citado por Vicuña, 2006).

Estas actitudes pueden observarse en los pacientes hombres al ser animosos para

afrontar su enfermedad; no obstante los diversos tratamientos que implican resultados a

largo plazo, hacen que el paciente renuncie a ellos, dándose por vencido antes de haber

logrado resultados concretos. Otra de las cosas por la que optan es maquillar la realidad

actual, siendo indiferentes a la presencia del cáncer, dedicándose a seguir su vida sin

tomar medidas para controlar su enfermedad.

Los resultados planteados por Molina et al., 2009, se asocian con la perspectiva de la

teoría psicosomática, misma que relaciona el patrón de conducta tipo C con el cáncer;

concluyendo que la mayoría de mujeres con cáncer muestran este patrón de conducta. Tal

como lo señalan Greer y Watson (1985), la supresión emocional representa un importante

factor en el inicio y progresión del cáncer (citado por Rodríguez, Esteve & López, 2000).

Por su parte Orosco et al., 2005, encontraron que el factor de racionalidad es mayor en

los pacientes con enfermedades crónicas, lo que significa que utilizan la razón y la lógica

como forma de afrontamiento a los acontecimientos de la vida, restándole importancia a las

emociones. Más específicamente, Oblitas (2004) menciona que las personas con el patrón

de conducta Tipo C, se caracterizan por ser racionales y distantes, considerando que un

rasgo importante de este patrón de conducta es el estilo represivo de afrontamiento (citado

por Molina et al., 2009).

43
De acuerdo a los resultados, es pertinente rechazar la primera hipótesis específica,

donde se planteó que los tipos caracterológicos de personalidad predominantes en los

pacientes con cáncer serían el sentimental y pasional; puesto que se halló como

predominantes el flemático y el sanguíneo.

Al remitirse a los resultados obtenidos en cuanto a las estrategias de afrontamiento

al estrés en los pacientes con cáncer, entre las más utilizadas se encuentran el

Desentendimiento conductual (35%), Enfocar y liberar emociones (25%); seguido de

Planificación, Búsqueda de apoyo social por razones emocionales y Acudir a la

religión (23.3% c/u) (Figura 3).

En función a la primera estrategia de afrontamiento más utilizada, se caracteriza por

la disminución del esfuerzo dirigido al estresor, dándose por vencido antes de haber

intentado lograr metas, evidenciándose ausencia de compromiso con la situación

estresante (Carver, 1989, citado por Ascencio, 2013).

Contextualizando la utilización de esta estrategia en la población en estudio, se

presume que dichos pacientes al negar la presencia del cáncer, no logran asimilar la

enfermedad, sintiéndose incapaces y derrotados anticipadamente por la misma, mostrando

escaso compromiso y renuencia a los tratamientos necesarios, empeorando así su situación

actual. Lo anteriormente mencionado se puede explicar al considerar la vivencia del

cáncer como una situación altamente estresante que fuerza al individuo a enfrentarse

con temas tan inconmensurables como el sufrimiento, el deterioro y la propia muerte

(Barroilhet, Forjaz, & Garrido, 2005). Por su parte Iwamitsu (2005), refiere incluso que la

persona puede presentar estados de shock generando automáticamente comportamientos

44
de aislamiento social y distanciamiento de la situación, motivo por el cual el paciente

no efectúa ningún tipo de cambio (citado por Arrivillaga et al., 2007).

A partir de las investigaciones de Delucchi y Marmissolle (2001, citado por Oblita,

2010) acerca de la evolución de la enfermedad en relación con la forma de afrontamiento

del paciente, afirman que la evitación y/o negación se relacionan con una mejor evolución.

Considerando, según Fonnegra (1999) que la negación funciona como amortiguador

después de una noticia inesperada; permitiéndole al paciente recobrarse de manera

gradual y movilizar otras defensas menos radicales para asumir en forma activa las

etapas siguientes de su enfermedad (citado por Arrivillaga et al., 2007). De igual manera

Morrinson y Bennett (2008), mencionan que la negación parece ser adaptativa como

respuesta inicial al diagnóstico o aparición de la enfermedad; ya que permite al paciente

afrontar la angustia que siente. Sin embargo en etapas posteriores, la negación y la

estrategia ligada a la evitación tienden a interferir y se relacionan con un mayor

malestar. Por su parte Lazarus y Folkman (1986) señalan que la negación, evitación,

distanciamiento, minimización y evasión de la situación se encargan de regular la

respuesta emocional del paciente y reducir el grado de trastorno emocional (Citado por

Zúñiga, 2013).

Desde la postura de los investigadores de dicho estudio, consideran que la negación

tiene un rol esencial en las primeras etapas de la enfermedad, puesto que actúa como

mecanismo para asimilar la situación estresante, permitiendo un afrontamiento adaptativo

y eficaz frente a la enfermedad. Por el contrario, la persistencia de ésta en etapas

ulteriores, conllevará a un afrontamiento desadaptativo e ineficaz, lo que significa mayor

malestar y progreso de la enfermedad.

45
En cuanto a la estrategia de afrontamiento, enfocar y liberar emociones, el paciente

centra sus pensamientos en las consecuencias emocionales desagradables, expresando

abiertamente estas emociones (Carver, 1989, citado por Ascencio, 2013). En este caso el

paciente piensa y expresa aquellas emociones negativas que está sintiendo tras la

vivencia del cáncer; reflejando falta de habilidad o rechazo al alterar simbólicamente la

situación (Krzemien & Urquijo, 2009).

Se deduce entonces que la utilización de esta estrategia, puede traer consigo

repercusiones desfavorables, ya que el paciente al centrarse en aquellas consecuencias

negativas, vivenciará emociones desagradables, aumentando así los niveles de ansiedad del

paciente.

Cabe señalar que las estrategias de afrontamiento “desentendimiento conductual” y

“enfocar y liberar emociones”, pertenecen a otros estilos de afrontamiento, también

denominados como estilos por evitación, caracterizados por la ausencia de acciones

concretas de afrontamiento, conductas evasivas y negación. Siendo considerado como un

estilo de afrontamiento desadaptativo e ineficaz, prolongándose así el proceso de

asimilación y adaptación a la enfermedad (Lazarus & Folkman, 1986, citado por Krzemien

& Urquijo, 2009).

Otras de las estrategias más utilizadas por los pacientes con cáncer son “planificación”,

“búsqueda de apoyo social por razones emocionales” y “acudir a la religión” con un 23.3%

cada uno. Respecto a la primera; el paciente piensa en cómo manejarse frente al estresor,

organizando estrategias de acción, pensando qué paso tomar y estableciendo cuál será la

mejor forma de manejar el problema. En relación a la segunda, los pacientes buscan en

los demás apoyo moral, empatía y comprensión; con el afán de aliviar la reacción

46
emocional negativa. En función a la tercera estrategia de afrontamiento, se da cuando la

persona tiende a volcarse a la religión en situaciones de estrés con la intención de reducir

la tensión existente (Carver, 1989, citado por Ascencio, 2013).

Es necesario indicar que la religión hace referencia a un conjunto de creencias,

prácticas y valores, compartidos por una comunidad o amparados por una institución

organizada (Emmons y Paloutzian, citado por Núñez, Enríquez & Irarrázaval, 2011). En

tanto Längle (2008), refiere que la espiritualidad es la experiencia fundamental de

cualquier religiosidad; pues afirma que una religiosidad que no contacte con la

espiritualidad es vacía.

El Instituto Nacional del Cáncer en España, señala que diversos estudios han

demostrado que la religión y la espiritualidad se relacionan significativamente con

medidas de adaptación y adherencia al tratamiento en pacientes con cáncer. Relacionándose

con índices inferiores de incomodidad, hostilidad, ansiedad y aislamiento social en dichos

pacientes. Refiere además que, características específicas de creencias religiosas sólidas

como esperanza, optimismo y satisfacción por la vida se han asociado con una mejor

adaptación al momento de recibir el diagnóstico e influir positivamente en la calidad de

vida de los pacientes (citado por Laos, 2010).

Por su parte Ringdal (citado por Laos, 2010) en su investigación referida a la

“Relación entre religiosidad, calidad de vida y supervivencia entre los pacientes con

cáncer”; encontró que hay una asociación negativa entre religiosidad y sentido de

amenaza, y una asociación positiva entre religiosidad y satisfacción general con la

vida.

47
Laos (2010), menciona que las personas, con enfermedad grave, como el cáncer;

necesitan sentirse activos, hacer algo constructivo para hacer frente a su enfermedad. Tras

su investigación encontró que, el 96% de las mujeres le rezan a Dios para agradecerle; el

94% reza a Dios para pedir ayuda; el 92% transmite su fé a personas cercanas; y el 66%

asiste a la iglesia o templo. Estas actividades, producen en el paciente una sensación de

bienestar producto de su fé, esperanza y gratitud. Concluyendo que la oración y otras

prácticas religiosas, pueden ser útiles tanto en la reducción del dolor como en el curso

de la enfermedad.

Según evidencias observadas dentro del escenario de estudio, los pacientes que

utilizan la estrategia “acudir a la religión”, optan por acercarse más a Dios, por lo que

rezan más que de costumbre, piden a Dios que les ayude y ponen toda su confianza en

él; y además en muchas ocasiones forman parte de alguna comunidad religiosa a la

cual asisten periódicamente. Estos datos hacen suponer que dichos pacientes encuentran

alivio y consuelo en sus creencias religiosas, aumentando la seguridad y tranquilidad al

creer en la existencia de un ser supremo; reduciendo los niveles de angustia y ansiedad

que la enfermedad les puede generar. Pues según Laos (2010), refiere que la religión

promueve dentro de sus doctrinas, creencias de salvación que calan en las mentes de sus

fieles, generándoles sensaciones de optimismo y bienestar.

Las estrategias de “planificación” y “búsqueda de apoyo social por razones emocionales”,

se evidencian en los pacientes que estratégicamente realizan acciones para afrontar su

enfermedad, buscan apoyo moral en sus familiares y amigos más cercanos, e incluso

buscan ser comprendidos por personas con la misma enfermedad, logrando un

afrontamiento efectivo y adaptativo. Según Lévano (2003), el afrontamiento efectivo juega

un rol importante en la recuperación rápida y eficaz de la enfermedad.

48
Debido a los resultados obtenidos, se rechaza parcialmente la segunda hipótesis

específica, en la cual se planteó que las estrategias de afrontamiento más utilizadas serian

búsqueda de apoyo social, acudir a la religión y reinterpretación positiva. Puesto que

entre las estrategias de afrontamiento más utilizadas están el “desentendimiento

conductual”, “enfocar y liberar emociones”, “planificación”, “búsqueda de Apoyo social por

razones emocionales” y “acudir a la religión”.

Los resultados de la presente investigación concuerdan con lo presentado por Díaz

(2015), quien reveló en su estudio, que entre las estrategias de afrontamiento de mayor

uso está el enfocar y liberar emociones. Asimismo Rojas (2016), concuerda al concluir

que la estrategia más utilizada fue el acudir a la religión. Mientras que los resultados

presentados por Chanduví y Granados (2014) difieren parcialmente, al concluir que las

estrategias predominantes en los pacientes oncológicos son el “acudir a la religión”,

“planificación” y “reinterpretación positiva”.

En tanto lo presentado por Orosco et al., (2005), difieren concluyendo que la estrategia

de afrontamiento menos utilizada fue la desconexión conductual y la negación. De igual

manera Baiocchi, Lugo, Palomino y Tam (2013), difieren al concluir que la estrategia

más utilizada en los pacientes con cáncer es el desentendimiento mental.

Finalmente con respecto al objetivo general; determinar la asociación entre los tipos

caracterológicos de personalidad y las estrategias de afrontamiento al estrés en pacientes

con cáncer, no se encontró asociación entre ambas variables (Tabla 2). Esto indica que las

variables en estudio son independientes, es decir que cualquier estrategia de afrontamiento

puede estar presente en cualquiera de los tipos caracterológicos de personalidad.

49
Este resultado permite rechazar la hipótesis general, donde se planteó que existe

asociación entre los siguientes tipos caracterológicos de personalidad y las estrategias

de afrontamiento al estrés: Flemático con planificación, colérico con afrontamiento activo,

nervioso con desentendimiento conductual, sanguíneo con enfocar y liberar emociones.

Dichos resultados pueden deberse a que los pacientes utilizan más de una estrategia

de afrontamiento frente al cáncer. Otra de las posibles causas, puede ser la cantidad

limitada de la población con la que se trabajó (60 pacientes con cáncer). Por lo que

se sugiere que para futuras investigaciones se trabaje con mayor número de

pacientes.

Los resultados mencionados anteriormente, concuerdan con lo presentado por

Valencia (2014), quien concluyó en su estudio que no existe relación evidente entre las

dimensiones de la personalidad y el afrontamiento en pacientes oncológicos.

Frente a escasas investigaciones relacionadas a la asociación de las variables en

estudio en pacientes con cáncer, fue pertinente tomar en cuenta investigaciones que

trabajaron las mismas variables, pero en poblaciones distintas. Tal es el caso de Orosco

et al., (2005), quienes coinciden con los resultados presentados, al concluir que no

existe relación, ni diferencias significativas entre los estilos de afrontamiento y los

patrones de personalidad en pacientes con una enfermedad crónica. En tanto Díaz

(2015), difiere con los resultados, al revelar correlaciones positivas y negativas

significativas entre los estilos de personalidad y el modo de afrontamiento.

Las dos últimas investigaciones citadas, son justificadas ya que la vivencia de una

enfermedad crónica, al igual que el cáncer, es altamente estresante (Barroilhet et al.,

50
2005). Por lo que el paciente tendrá que asumir restricciones relacionadas con su nueva

condición y la posibilidad de que se produzca un declive paulatino de su salud; lo que

implica que tendrá que afrontar la enfermedad, emprendiendo acciones concretas para

impedir que su salud se deteriore aún más (Morrison & Bennett, 2008).

51
CONCLUSIONES

1. Los tipos caracterológicos de personalidad predominantes en los pacientes con

cáncer, son flemático (28%) y sanguíneo (22%). Estos resultados permiten rechazar la

primera hipótesis específica.

2. Con respecto al tipo caracterológico según sexo, predomina en los hombres el

nervioso con un 60%; y en las mujeres el flemático con un 34%.

3. Las estrategias de afrontamiento al estrés más utilizado en los pacientes con cáncer

es el desentendimiento conductual (35%), seguido de enfocar y liberar emociones

(25%), además de “planificación”, “búsqueda de apoyo social por razones

emocionales” y “acudir a la religión” (23.3% c/u). Dado los resultados obtenidos, se

rechaza parcialmente la segunda hipótesis específica, en la cual se planteó que las

estrategias de afrontamiento más utilizadas serían búsqueda de apoyo social, acudir a

la religión y reinterpretación positiva.

4. La prueba estadística Chi-cuadrado de Pearson, permite determinar que no existe

asociación entre los tipos caracterológicos de personalidad y las estrategias al

afrontamiento al estrés en pacientes con cáncer. Dichos resultados permiten rechazar

la hipótesis general.

52
RECOMENDACIONES Y SUGERENCIAS

Promover la formación de grupos de pacientes oncológicos dentro del centro hospitalario,

donde se trabajen técnicas y estrategias psicoterapéuticas (técnicas de respiración y

relajación, Tai chí, yoga, biodanza, entre otros), horas antes de someterse a las cirugías,

quimioterapias, radioterapias, entre otros; con la finalidad de reducir la tensión emocional y

responder positivamente a dichos tratamientos.

Que los pacientes reciban orientación sobre aspectos religiosos, ya que según estudios

científicos, ello es considerado un componente terapéutico que suscita la recuperación;

aumenta el bienestar personal, contribuye en la rehabilitación, y reduce el impacto

psicológico generado por la enfermedad.

Ampliar investigaciones referidas a la psicooncología, ya que en la actualidad el cáncer

es considerado una enfermedad médica y emocional. Por ende es necesario el asesoramiento

constante y la contención emocional que se le otorgue al paciente, lo que evitará la

confusión, el prejuicio, la falta de aceptación entre otras alteraciones psicológicas poco

benéficas para su recuperación, provocadas por el tratamiento o la enfermedad misma.

Se recomienda que para futuras investigaciones que se trabajen con la población en

estudio, se tome en cuenta variables tales como: nivel socioeconómico, sociocultural, edad

y estadificación del cáncer en el que se encuentra el paciente, ya que estos pueden ser

factores influyentes en relación al modo de afrontamiento de la enfermedad.

53
REFERENCIAS

Adán, G. (2013). Teoría factorial de la personalidad Raymond Bernard Cattell. Recuperado

de http://www.ibesinvestigacion.com/wp-content/uploads/2013/03/80.-

Teor%C3%ADa-de-la-personalidad-de-CatellG.-Adan.-UIB.-mar131.pdf

Amarís, M., Madariaga, C., Valle, M. y Zambrano, J. (Abril del 2013).Estrategias de

afrontamiento individual y familiar frente a situaciones de estrés psicológico.

Psicología desde el caribe. Recuperado de

http://rcientificas.uninorte.edu.co/index.php/psicologia/article/view/2051/6906

Anarte, M.T., López, A.E., Ramírez, C. y Esteve, R. (20000). Evaluación del patrón de

conducta tipo C en pacientes crónicos. Anales de psicología, 16 (2), 133-141.

Recuperado de http://www.um.es/analesps/v16/v16_2/03-16_2.pdf

Arrivillaga, M., Correa, D. y Salazar, I.C. (2007). Psicología de la salud. Abordaje integral

de la enfermedad crónica. Recuperado de

https://es.scribd.com/doc/282168864/Abordaje-Integral-de-la-Enfermedad-Cronica-

Marcela-Arrivillaga-pdf

Ascencio, A.J. (2013). Resiliencia y estilos de afrontamiento en mujeres con cáncer de mama

de un hospital estatal de Chiclayo 2013. (Tesis de pre-grado, Universidad Santo

Toribio de Mogrovejo). Recuperado de

http://tesis.usat.edu.pe/jspui/bitstream/123456789/438/1/TL_Ascencio_Puicon_AnaisJ

ackelin.pdf

54
Asociación Española contra el cáncer. (2015). Origen de la enfermedad: el cáncer.

Recuperado de

https://www.aecc.es/SobreElCancer/elcancer/Paginas/Origendelaenfermedad.aspx

Baiocchi, A., Lugo, E., Palomino, N., &Tam, E. (2013). Estilos de afrontamiento en pacientes

con cáncer de cuello uterino. (Tesis de pregrado, Universidad Peruana Cayetano

Heredia). Recuperado de

http://www.upch.edu.pe/faenf/images/pdf/Revistas/2013/enero/04%20Uterino.pdf

Barroilhet, S., Forjaz, M.J., & Garrido, E. (2005). Conceptos, teorías y factores psicosociales

en la adaptación del cáncer. La academia, 33(6), 390-397. Recuperado de

http://www.academia.edu/19767600/Conceptos_teor%C3%ADas_y_factores_psicosoci

ales_en_la_adaptaci%C3%B3n_al_c%C3%A1ncer

Bermúdez, J., Pérez, A.M., Ruiz J.A., Sanjuan, P., & Rueda, B. (2012). Psicología de la

Personalidad. Recuperado de https://books.google.com.pe/books?isbn=8436265068

Bernal, C. (Ed.). (2010). Metodología de la investigación: administración, economía,

humanidades y ciencias sociales. Recuperado de

https://docs.google.com/file/d/0B7qpQvDV3vxvUFpFdUh1eEFCSU0/edit?pref=2&pl

i=1.

Chanduví, L & Granados, F. (2014). Asociación entre calidad de vida y estrategias de

afrontamiento al estrés en pacientes oncológicos de un Hospital de Chiclayo 2014.

(Tesis de pregrado). Universidad Privada Juan Mejía baca, Chiclayo, Perú.

55
Conde, A.G. (2014). Dimensiones básicas de la personalidad, afrontamiento y adaptación en

pacientes oncológicos. (Tesis doctoral, Universidad de Valencia). Recuperado de

http://mobiroderic.uv.es/bitstream/handle/10550/37194/Tesis%20doctoral%20(Ana%2

0G-C).pdf?sequence=1&isAllowed=y

Cornejo, D. (2014, 04 de abril). Cáncer en América Latina tiene mayor mortalidad que en

EE.UU. y Europa. América economía. Recuperado de

http://www.thelancet.com/journals/lanonc/issue/current

Díaz, A.G. (2015). Estilos de personalidad, modos de afrontamiento y clima social familiar en

pacientes amputados de miembro inferior. Repositorio académico de la USMP.

Recuperado de

http://www.repositorioacademico.usmp.edu.pe/bitstream/usmp/1089/3/D%C3%ADaz

_AA.pdf

Díaz, E.Y., Salazar, L.M., & Santa Cruz, E.R. (2013). Afrontamiento de pacientes con cáncer,

en tratamiento con quimioterapia en el servicio de oncología de un hospital de

Chiclayo 2013. Revista salud y vida. 1(2), p.36.

Díaz G., & Yaringaño, J. (2010). Clima familiar y afrontamiento al estrés en pacientes

oncológicos. (Tesis de pregrado, Universidad Nacional Mayor de San Marcos).

Recuperado de

http://revistasinvestigacion.unmsm.edu.pe/index.php/psico/article/view/3737

56
Felipe, E. y León, B. (2010). Estrategias de afrontamiento del estrés y estilos de conducta

interpersonal. International Journal of Psychology and Psychological Therapy, 10 (2),

pp. 245-257. Recuperado de http://www.ijpsy.com/volumen10/num2/260/estrategias-

de-afrontamiento-del-estrs-ES.pdf

Frieden, T. (2016, 03 de Febrero). Control de cáncer a nivel internacional. Centros para el

control y la prevención de enfermedades. Recuperado de

http://www.cdc.gov/spanish/cancer/international/index.htm

Gantiva, C.A, C., Viveros, A.L; Dávila, A.M & Salgado, M.J. (2010). Estrategias de

afrontamiento en personas con ansiedad. Revista Avances de la disciplina, 4(1), pp.

63-72. Recuperado de http://www.redalyc.org/pdf/2972/297224086006.pdf

Gómez, L.P. (2015). Rasgos de personalidad en individuos que han pertenecido a grupos

armados al margen de la ley en el municipio de Yarumal. (Tesis de maestría,

Universidad de Antioquia). Recuperado de

http://200.24.17.74:8080/jspui/bitstream/fcsh/303/1/GomezLayner_rasgospersonalidad

individuosgruposarmadosmargenleymunicipioyarumal.pdf

Hernández, M & Cruzado J. (2013). La atención psicológica a pacientes con cáncer: de la

evaluación al tratamiento. Revista clínica y salud, 24(1). Recuperado de http://iasp

pain.org/files/Content/ContentFolders/GlobalYearAgainstPain2/CancerPainFactSheets

/PsychologicalAspects_Spanish.pdf

57
Hernández, R., Fernández, C. & Baptista, P. (2010). Metodología de la investigación.

Recuperado de

https://www.esup.edu.pe/descargas/dep_investigacion/Metodologia%20de%20la%20i

nvestigaci%C3%B3n%205ta%20Edici%C3%B3n.pdf

Instituto Nacional de estadística y geografía. (2015). Estadística a propósito del día mundial

de la lucha contra el cáncer de mama. Recuperado de

http://www.inegi.org.mx/saladeprensa/aproposito/2015/mama0.pdf

Instituto nacional de ciencias médicas y nutrición Salvador Zubiran (2012). Informe de


Belmont. Recuperado de
http://www.innsz.mx/opencms/contenido/investigacion/comiteEtica/informe_belmont.
html

Krzemien, D. y Urquijo, S. (2009). Estilos y estrategias de afrontamiento a eventos de vida


críticos y estilos de personalidad en mujeres adultas mayores. Avances
Iberoamericanos: CIIPME-CONICET. Recuperado de
http://www.aacademica.org/sebastian.urquijo/96.pdf

Längle, A. (2008). La Espiritualidad en psicoterapia Entre inmanencia y trascendencia en el

Análisis Existencial. Revista de Psicología - UCA, 4 (7), 5-22. Recuperado de

http://www.webaholics.at/userfile/doc/Espiritualidad-en-la-psicoterapia-UCA-08.pdf

Laos, K.S. (2010). Calidad de vida y religiosidad en pacientes con cáncer de mama. (Tesis de

pregrado, Pontificia Universidad Católica del Perú). Recuperado de

http://tesis.pucp.edu.pe/repositorio/bitstream/handle/123456789/668/LAOS_MANRIQ

UE_KATHERINE_CALIDAD_VIDA_RELIGIOSIDAD.pdf?sequence=1

58
Lévano, J.R. (2003). El patrón de conducta tipo A y tipo B y los estilos de afrontamiento al

estrés en una muestra de personal militar. (Tesis de Maestría, Universidad Nacional

Mayor de San Marcos). Recuperado de

http://sisbib.unmsm.edu.pe/bibvirtualdata/Tesis/Salud/Levano_MJ/T_completo.pdf

Llull, D.M., Zanier, J & García, F. (2003). Afrontamiento y calidad de vida. Un estudio de

pacientes con cáncer .Psico-USF, 8 (2), 175-182. Recuperado de

http://www.scielo.br/pdf/pusf/v8n2/v8n2a09.pdf

Lobillo, J.A. (24 de julio, 2011). Psicología de la personalidad. [Desde el grado de la

psicología]. Recuperado de http://alumno-

psicologo.blogspot.pe/2011/07/atribuciones.html

Lostaunau, A.V. & Torrejón, C.S. (2013). Estrés, afrontamiento y calidad de vida

relacionada a la salud en pacientes con cáncer de mama. (Tesis de maestría,

Pontificia Universidad Católica del Perú). Recuperado de

http://tesis.pucp.edu.pe/repositorio/bitstream/handle/123456789/5175/LOSTAUNAU_

CALERO_TORREJON_SALMON_ESTRES_CANCER.pdf?sequence=1&isAllowed

=y

Längle, A. (2008). La Espiritualidad en psicoterapia Entre inmanencia y trascendencia en el

Análisis Existencial. Revista de Psicología - UCA, 4 (7), 5-22. Recuperado de

http://www.webaholics.at/userfile/doc/Espiritualidad-en-la-psicoterapia-UCA-08.pdf

59
Ministerio de salud del Perú. (2010). El cáncer se previene y se puede curar si se detecta a

tiempo. Recuperado de

http://www.minsa.gob.pe/portada/Especiales/2010/cancer/datos.a

Molina, C.E., Hernández, O.R., Sarquis, Z.E. (2009). Patrón de personalidad tipo c y su

relación con el cáncer de mama y cérvico-uterino. Revista electrónica de psicología

Iztacala, 12 (4), 172. Recuperado de

http://www.iztacala.unam.mx/carreras/psicologia/psiclin/vol12num4/Vol12No4Art11.

pdf

Montaño, M.R., Palacios, J.L., &Gantiva, C.A. (2009). Teorías de la personalidad, Un

análisis histórico del concepto y su medición. Psychologia: Avances de la disciplina, 3

(2), 81-107. Recuperado de http://www.redalyc.org/pdf/2972/297225531007.pdf

Morán, C., Landero, R. & Gonzales, M.T (2010, 10 de enero). COPE-28: un análisis

psicométrico de la versión en español del Brief COPE. Universidad psicológica.

Recuperado de http://pepsic.bvsalud.org/pdf/up/v9n2/v9n2a20.pdf

Morrison, V., & Bennett, P. (2008). Psicología de la salud. Recuperado de

https://es.scribd.com/doc/309575070/Psicologia-de-la-salud-pdf

Núñez, P., Enríquez, D. & Irarrázaval, M.E. (2011). La espiritualidad en el paciente

oncológico: una forma de nutrir la esperanza y fomentar un afrontamiento positivo a la

enfermedad. Ajayu, 10 (5), 84-1000. Recuperado de

http://www.scielo.org.bo/pdf/rap/v10n1/v10n1a5.pdf

60
Oblitas, L.A. (2010). Psicología de la salud y calidad de vida. Recuperado de

https://books.google.com.pe/books?id=LXR_dkV_XNcC&pg=PR2&dq=Oblitas,+L.A

.+(2010).+Psicolog%C3%ADa+de+la+salud+y+calidad+de+vida.&hl=es&sa=X&ved

=0ahUKEwilrpyruMnQAhWD5CYKHZLmB8wQ6AEIIjAA#v=onepage&q=Oblitas

%2C%20L.A.%20(2010).%20Psicolog%C3%ADa%20de%20la%20salud%20y%20ca

lidad%20de%20vida.&f=false

Ojeda, S. & Martínez, C. (2012). Afrontamiento de las mujeres diagnosticadas de cáncer de

mama. (Tesis de pregrado, Universidad Peruana Cayetano Heredia). Recuperado de

http://www.upch.edu.pe/faenf/images/pdf/Revistas/2012/febrero/04%20CANCER%20

DE%20MAMA.pdf

Oliveros, E., Barrera, M., Martínez, S., & Pinto, T. (2010). Afrontamiento ante el diagnóstico

de cáncer. Revista de Psicología GEPU, 1 (2), 19 - 29. Recuperado de

http://revistadepsicologiagepu.es.tl/Afrontamiento-ante-el-Diagnostico-de-

C%E1ncer.htm

Organización Panamericana de la Salud (2006). Guía práctica de salud mental en situaciones

de desastres. Recuperado de

http://www.who.int/mental_health/paho_guia_practicade_salud_mental.pdf

Orozco, A.M., Palacios, X., Corredor, D.C. y Cuartas, G.C. (s.f.). Estilos de afrontamiento y

patrones de personalidad en pacientes con artritis reumatoide: Estudio descriptivo

correlacional. Cuadernos hispanoamericanos de psicología, 5(2), 111-125.

Recuperado de

61
http://www.uelbosque.edu.co/sites/default/files/publicaciones/revistas/cuadernos_hisp

anoamericanos_psicologia/volumen5_numero2/articulo_1.pdf

Ramos, W. C. & Venegas, D.R. (2013). Análisis de la Situación del Cáncer en el Perú.

Recuperado de http://www.dge.gob.pe/portal/docs/asis_cancer.pdf

Rojas, R.L. (2016). Calidad de vida relacionada a la salud y afrontamiento en pacientes con

cáncer gastrointestinal. (Tesis de pregrado, Universidad de Pontificia Universidad

Católica del Perú). Recuperado de

http://tesis.pucp.edu.pe/repositorio/handle/123456789/7086

Salazar, M.R., Regalado, R., Navarro, J.M., Montanez, D.M., Abugattas, J.E. &Vidaurre, T.

(2013). El instituto Nacional de Enfermedades Neoplásicas en el control del cáncer en

el Perú. Revista peruana de Medicina Experimental y Salud Publica, 30(1), 105-112.

Recuperado de http://www.scielosp.org/pdf/rpmesp/v30n1/a20v30n1.pdf

Soto, R. (2012). Sintomatología depresiva y afrontamiento en pacientes con cáncer de mama.

(Tesis de pregrado, Pontificia Universidad Católica del Perú). Recuperado de

file:///C:/Users/Usuario/Downloads/SOTO_BUSTAMANTE_ROCIO_SINTOMATO

LOGIA%20(1).pdf

Urpeque, H. (19 de Octubre del 2015). Aumentan casos de cáncer de mama en la región de

Lambayeque. RRP NOTICIAS. Recuperado de

http://rpp.pe/peru/lambayeque/aumentan-casos-de-cancer-de-mama-en-la-region-

lambayeque-noticia-906226

62
Vicuña, L.A. (Ed.). (2006). Cuestionario caracterológico de Gastón Berger. Manual. Perú:

LAVP

Zúñiga, P. (2013). Afrontamiento. Catedra de psicología de la salud I. Recuperado de

http://www.nubelo.com/files/uploadResources/0000198195/portfolioFiles/thumb_AF

RONTAMIENTO_doc.pdf

63
01
01

Anexo 1

UNIVERSIDAD PRIVADA JUAN MEJIA BACA

Carrera Profesional de Psicología

Cuestionario Caracterológico de Personalidad

de Gastón Berger.

Somos estudiantes de la carrera profesional de Psicología, quienes estamos realizando una


investigación, cuyo objetivo es identificar los tipos caracterológicos de personalidad, en
pacientes con cáncer de un hospital de Chiclayo, por lo que le solicitamos su participación.
Gracias.

Instrucciones: Esta es una prueba que le ayudará a conocerse a sí mismo mejor. Para
conseguirlo, solo deberá contestar las preguntas indicando su respuesta de la siguiente
manera:

Al final de cada grupo de respuestas hay un número (1,5 ó 9), deberás elegir la respuesta
que mejor describa una característica tuya y luego encerrar con un círculo el número
correspondiente en la hoja de respuestas.

Ejemplo: ¿Le gusta salir a pasear con sus amigos? ..........

o ¿Prefiere salir solo (a)?......................................

De esta manera responderás a todas las preguntas, de la forma más sincera posible.
Recuerda que de ello dependerá el mejor conocimiento de tu carácter.

Edad: ___________ Sexo: ____________

64
1. ¿Toma Ud. a pecho las pequeñas cosas cuya importancia sin embargo sabe que es
mínima? ¿Se trastorna a veces por
insignificancias?.......................................................................................

o ¿Solo le perturban los acontecimientos graves?................................

2. ¿Se entusiasma o se indigna con facilidad?............................................

o ¿Acepta Ud. tranquilamente las cosas tal como son?.........................

3. ¿Es Ud. susceptible, se siente herido (a) fácilmente y de manera profunda por una
crítica algo viva o por una observación poco amable o
burlona?.....................................................................................................

o ¿Soporta las criticas sin sentirse menoscabado?................................. ..

4. ¿Se turba con facilidad ante un suceso imprevisto? ¿Se sobresalta cuando lo llaman
intempestivamente? ¿Palidece o se ruboriza con
facilidad?....................................................................................................

O ¿No se desconcierta Ud. sino muy difícilmente?....................................

5. ¿Se acelera Ud. al hablar? ¿Eleva la voz en una conversación? ¿Siente la necesidad de
emplear términos violentos o palabras demasiado
expresivas?..................................................................................................

o ¿Conversa Ud. con calma, sin prisa, de una manera reposada?..........

6. ¿Se siente Ud. angustiado frente a una tarea nueva o ante perspectiva de
cambio?........................................................................................................

o ¿Afronta Ud. la situación con serenidad?..................................................

7. ¿Pasa Ud. alternativamente de la exaltación al abatimiento, de la alegría a la tristeza y


viceversa, por tonterías y aún sin razón aparente?...............

o ¿Es de humor constante?........................................................................

65
8. ¿Se siente frecuentemente perturbado con dudas y escrúpulos, frente a actos sin
importancia? ¿Conserva Ud. a menudo en la mente un pensamiento completamente
inútil y que lo hace sufrir?.............................

o ¿No conoce más que por excepción este penoso estado de


preocupación?..............................................................................................

9. ¿A veces Ud. experimenta estados de miedo que le impiden realizar cualquier


movimiento, o timidez que no le deja articular una sola
palabra?......................................................................................................

o ¿Por el contrario, jamás los ha experimentado?......................................

10. ¿Se siente con frecuencia desgraciado?..................................................

o ¿Esta generalmente contento de su suerte, y aún cuando las cosas no sucedan como
Ud. quiera, piensa más en lo que será menester cambiar, que en sus propios
sentimientos?......................................................................

11. ¿Suele usted ocuparse activamente durante sus horas libres (estudios suplementarios,
alguna acción social, trabajos manuales o en cualquier tarea
voluntaria)?...................................................................................................

o ¿Para largos ratos sin hacer nada, soñando, meditando o simplemente distrayéndose
(con lecturas entretenidas, escuchando la radio, etc.)?........

12. ¿Lleva a cabo inmediatamente y sin dificultad lo que ha decidido


hacer?...........................................................................................................

o ¿Necesita usted realizar mucho esfuerzo para pasar de la idea a la acción, de la


decisión a la acción?............................................................................

13. ¿Se siente estimulado por las dificultades y motivado por la idea del esfuerzo a
realizar?..................................................................................................

o ¿Se desanima usted fácilmente ante las dificultades o ante una tarea que se anuncia
demasiado ardua? ...................................................................

66
14. ¿Prefiere Ud. pasar a la acción directamente o por lo menos forjar proyectos que
realmente lo preparan para el porvenir?..............................................

o ¿Le gusta soñar y meditar, ya sea sobre el pasado o sobre el futuro, o también acerca
de cosas puramente imaginarias?.....................................

15. ¿Hace Ud. lo que tiene que hacer enseguida y sin que le cueste mucho (por ejemplo,
escribir una carta, arreglar un problema, etc.)?...........................

o ¿Se siente inclinado a postergar cosas?.................................................

16. ¿Toma Ud. decisiones rápidamente, aun en los casos difíciles? .............

o ¿Es indeciso y vacila generalmente por largo tiempo?...........................

17. ¿Es Ud. movedizo e inquieto (gesticula, se levanta súbitamente de su silla, va y viene
por la habitación, etc.) en ausencia de toda emoción
viva?...............................................................................................................

o ¿Esta generalmente quieto cuando una emoción no lo agita?................

18. ¿Jamás vacila usted al emprender una transformación útil cuando sabe que exigirá un
gran esfuerzo de su parte?...........................................................

o ¿Retrocedo ante el trabajo a realizar y prefiere contentarse, por dicha causa, con el
estado de cosas en el que se encuentra?...............................

19. ¿Cuándo han impartido instrucciones para una determinada tarea, ¿Vigila su realización
de cerca, asegurándose que todo quede bien hecho en las condiciones y en el momento
requerido?.....................................................

o ¿Se desentiende de la ejecución con el sentimiento de haberse desembarcado de una


preocupación?..........................................................

20. ¿Le gusta más actuar que observar pasivamente, resultándole aburrido el simple
espectáculo?.......................................................................................

67
o ¿Prefiere Ud. mirar que hacer (siente placer por ejemplo, en observar a menudo y
largamente el desarrollo de un juego que no practica?.................

21. ¿Esta Ud. a menudo guiado en su acción por la idea de un porvenir lejano (ahorrar
para la vejez, acumular o reunir materiales y datos para un trabajo a largo plazo, etc.) o
por las consecuencias lejanas que puede
tener?.......................................................................................................

o ¿Se interesa especialmente por los resultados inmediatos?.................

22. ¿Prevé Ud. “todo lo que puede hacer” y se prepara cuidadosamente para cada
caso (por ejemplo, en ocasión de sus viajes o paseos hace equipajes minuciosos,
estudios de itinerarios, previsión de posibles accidentes,
etc.)?.......................................................................................

o ¿Prefiere atenerse a la inspiración del momento?.................................

23. ¿Tiene Ud. principios estrictos a los que trata de ceñirse?......................

o ¿Prefiere adaptarse a las circunstancias con flexibilidad?....................

24. ¿Es Ud. constante en sus proyectos? ¿Termina siempre lo que ha


comenzado?................................................................................................

o ¿Abandona con frecuencia una tarea antes de terminar empezándolo todo sin
concluir nada?................................................................................

25. ¿Es Ud. constante en sus simpatías (continua con sus amistades de infancia o
frecuenta regularmente a las mismas personas y los mismos
círculos)?......................................................................................................

o ¿Cambia a menudo de amigos (dejando por ejemplo, sin razón alguna de ver a
personas que antes frecuentaba)?.....................................................

68
26. ¿Después de un exceso de cólera o después de una afrenta se reconcilia con su
circunstancial enemigo? .................................................................

o ¿Durante cierto tiempo permanece de mal humor?................................

o más aún ¿Es difícil de reconciliar (resentimiento persistente)?............

27. ¿Tiene Ud. hábitos sumamente estrictos a los que está apegado? ¿Se siente atraído por
el retorno regular de ciertos hechos?..............................

o ¿Siente horror por todo lo que es habitual o previsto de antemano, siendo para Ud. lo
espontáneo un elemento esencial de su vida?...............................

28. ¿Le gusta el orden, la simetría, la regularidad?.........................................

o bien ¿El orden le parece aburrido y siente la necesidad de encontrar por doquiera
huella de fantasía?.......................................................................

29. ¿Prevé con antelación el empleo de su tiempo y de sus fuerzas? ¿Es amigo de hacer
planes fijos, horarios y trazar programas?..........................

o ¿Se lanza a la acción sin regla precisa, fijada de antemano?...................

30. ¿Cuándo ha adoptado una opinión se aferra a ella con obstinación?.....

o ¿Se convence fácilmente de lo contrario y se deja seducir por la novedad de una


idea?................................................................................................

69
01
01

Anexo 2

UNIVERSIDAD PRIVADA JUAN MEJIA BACA

Carrera Profesional de Psicología

Inventario de Estimación de Afrontamiento

(COPE)

Somos estudiantes de la carrera profesional de Psicología, quienes estamos realizando una


investigación, con la finalidad de identificar la forma en cómo usted responde cuando se
enfrentan a acontecimientos difíciles o estresantes en sus vidas. Este inventario le pide
señalar qué es lo que usted generalmente hace o siente cuando experimenta ese tipo de
dificultades. Por lo que le solicitamos su participación. Gracias.

Instrucciones: En este inventario usted deberá anotar su edad y sexo, además de responder
a cada uno de los ítems según las alternativas planteadas (casi nunca, a veces, generalmente
y casi siempre hago eso).

Elija sus respuestas concienzudamente y haga que sean sinceras, por tanto elija aquella
respuesta que es más adecuada para usted.

Por favor, conteste a todas las preguntas, recordando que no existen respuestas "buenas" o
"malas". Escoja la alternativa que le parezca más apropiada. Ante cualquier duda puede
consultar a los evaluadores.

Edad: ___________ Sexo: ____________

70
1 2 3 4
Afirmaciones Casi nunca A veces Generalmente Casi siempre
hago eso hago eso hago eso hago eso

1. Me esfuerzo mucho con


tal de superar mis
problemas
2. Trato de encontrar cuáles
son las cosas que tengo
que hacer para solucionar
mis problemas.
3. Me dedico solamente a
mis problemas y dejo de
lado todo lo demás.
4. Me obligo a esperar el
momento adecuado para
hacer algo que me ayude a
solucionar mis problemas.
5. Pregunto a personas con
problemas similares a los
míos lo que hicieron para
solucionarlos.
6. Le cuento a alguien cómo
me siento.
7. Trato de encontrar el lado
positivo de mis
problemas.
8. Aprendo a vivir con mis
problemas.
9. Le pido a Dios que me
ayude
10. Me molesto y expreso
todo lo que siento.
11. Actúo como si nada
hubiera ocurrido.
12. Dejo de esforzarme por
conseguir lo que quiero.
1 2 3 4
Afirmaciones Casi nunca A veces Generalmente Casi siempre
hago eso hago eso hago eso hago eso
13. Me dedico al trabajo o
hago otra cosa para no
pensar en mis problemas.

71
14. Me esfuerzo mucho por
algo respecto a mis
problemas.
15. Pienso bien en las cosas
que tengo que hacer para
solucionar mis problemas.
16. Me dedico totalmente a
mis problemas y, si es
necesario, dejo de lado
otras cosas
17. No hago nada hasta que la
solución se aclare
18. Le pido a alguien que me
aconseje sobre lo que
tengo que hacer.
19. Busco el apoyo de mis
amigos o parientes.
20. Trato de entender mis
problemas de otra manera
para que se vean más
positivos.
21. Acepto mis problemas y el
hecho de que no puedo
cambiarlos.

22. Pongo mi confianza en


Dios.

23. Expreso lo que siento.

24. Me hago a la idea de que


nada ha ocurrido.

25. Dejo de intentar conseguir


lo que quiero.

26. Me voy al cine o veo


televisión para no pensar
tanto en mis problemas.

72
1 2 3 4
Afirmaciones Casi nunca A veces Generalmente Casi siempre
hago eso hago eso hago eso hago eso
27. Hago paso a paso lo que
debe hacerse para
solucionar mis problemas.
28. Pienso bien en lo que
tengo que hacer para
resolver mis problemas.
29. No me dejo distraer por
otros pensamientos o
actividades.
30. Me aseguro de no
empeorar las cosas
actuando rápidamente sin
pensar.
31. Hablo con quien pueda
darme más información
sobre la situación.

32. Le cuento a alguien cómo


me siento.

33. Aprendo algo bueno de


mis problemas.

34. Me hago a la idea de que


el hecho ya sucedió.

35. Trato de encontrar


consuelo en mi religión.
36. Siento que me altero
mucho y que expreso
demasiado todo lo que
siento.
37. Hago como si ningún
problema hubiera
ocurrido.

38. Reconozco que no puedo


más con mis problemas y
dejo de hacer algo para
resolverlos.

73
39. Pienso en cosas diferentes
a mis problemas.

40. Hago lo que tengo que


hacer para solucionar mis
problemas.

1 2 3 4
Afirmaciones Casi nunca A veces Generalmente Casi siempre
hago eso hago eso hago eso hago eso
41. Pienso en cómo podría
enfrentar mejor mis
problemas.
42. Trato de evitar que otras
cosas interfieran en mis
esfuerzos por resolver mis
problemas.
43. Me controlo para no hacer
las cosas
apresuradamente.
44. Hablo con alguien que
pueda hacer algo concreto
sobre mis problemas.
45. Voy donde alguien que me
acepte y me comprenda.
46. Trato que los problemas
vividos me ayuden a
madurar.
47. Acepto la realidad de lo
sucedido.
48. Rezo más que de
costumbre.
49. Me molesto y me doy
cuenta de ello.

50. Me digo “no puedo creer


esto que me esté pasando
a mi”
51. Me esfuerzo menos por
solucionar mis problemas.

52. Duermo más de lo usual.

74
Anexo 3

UNIVERSIDAD PRIVADA “JUAN MEJIA BACA”

Carrera Profesional de Psicología

Consentimiento Informado

Los estudiantes de psicología Nelly del Rosario Gonzales Yovera y Geraldo Yampieri
Granados Mori, asesorados por la Mg. Lizzeth Aimée García Flores, están realizando una
investigación titulada “Asociación entre tipos caracterológicos de personalidad y estrategias
de afrontamiento al estrés, en pacientes con cáncer de un hospital de Chiclayo, agosto
2016”, con el objetivo de determinar la asociación entre ambas variables.

Para ello necesitamos de su participación, llenando el Cuestionario caracterológico de


personalidad de Gastón Berger y el Inventario de Afrontamiento – COPE, que demandarán
un tiempo aproximado de 20 a 25 minutos cada uno, aseverándoles que no les causará ningún
perjuicio y que los datos obtenidos se mantendrán en absoluta reserva.

Es importante informarle que su participación es totalmente voluntaria, y que usted puede


renunciar a participar aun habiendo aceptado antes; sin ocasionarle ningún perjuicio.

Conociendo los objetivos y el carácter de mi participación, acepto formar parte de este


trabajo de investigación.

Chiclayo, agosto 2016.

Firma de participante Firma del autor Firma del autor

75

You might also like