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Acuerdo socio-ambiental
Entre las problemáticas ambientales que surgieron en las mesas técnicas de trabajo, se
comenzará a trabajar en la producción de plantas nativas, específicamente “El
Caldén”.
Los ambientes naturales cumplen un papel esencial en el bienestar humano, tanto desde
el punto de vista biológico como de una perspectiva económica, social y cultural. La
importancia de conservar los sistemas ecológicos reside en los beneficios que nos
proveen, los cuales contribuyen a una buena calidad de vida. Entre ellos podemos
destacar:
1. Regular el ciclo del agua: el agua de lluvia queda retenida en el follaje bajando
lentamente por tallos y troncos. Al llegar al suelo, éste actúa como una especie de
esponja que absorbe gran cantidad de agua recargando los acuíferos que alimentan a
los diferentes cursos de agua como vertientes, arroyos y ríos. Cuando la cobertura
vegetal está degradada o es insuficiente, aumentan las posibilidades de crecientes
sorpresivas, inundaciones de centros urbanos, etc.
2. Producir energía química: la energía que irradia el sol, es captada por los vegetales y
convertida en energía química almacenada (fotosíntesis). Durante este proceso se
libera oxígeno a la atmósfera, el cuál necesitamos para respirar y vivir.
3. Conservar la biodiversidad: las plantas actúan como hábitats de una gran variedad
de especies de animales.
4. Suministrar materia prima: como la madera con la cuál se fabrican los muebles de
nuestra casa, leña usada para calefacción y carbón para uso forestal y energético,
fibras para lanas y telas, celulosa para fabricar papel y cartón, etc.
5. Aportar materia orgánica: la que es procesada por animales, e incorporada al suelo
en forma de nutrientes.
6. Reducir la erosión producida por acción del viento y la lluvia: el follaje de árboles y
arbustos disminuye la velocidad de las gotas de lluvia y reduce el efecto del golpe
sobre el suelo.
7. Brindar sombra: el follaje evita la llegada directa de los rayos solares.
8. Atenuar vientos y sonidos: actúan como una barrera natural.
9. Representar el patrimonio del lugar: brinda un lugar de esparcimiento y recreación,
como reservas naturales y parques. Representa la espiritualidad del poblador y su
sentido de pertenencia.
10. Usos culturales: los pobladores utilizan frutos, hojas, cortezas y raíces para
consumo, medicina tradicional, artesanías, etc.
Los viveros familiares y escolares permiten generar una actitud de respeto hacia los
recursos naturales y contribuyen a que los niños y la comunidad en general puedan tener
un contacto directo con las plantas, y en este caso El Caldén, lo cual ayudará a su
revalorización.
La producción de plantines de Caldén, el plantado en campo y los cuidados posteriores
necesarios hasta que el árbol está en condiciones de subsistir sin la intervención
permanente de la mano del hombre, requiere un conjunto de tareas en un tiempo
variable de acuerdo a muchos factores que influyen en el proceso. Se incluyen los
cambios climáticos, la humedad, la insolación, etc.
Por eso, el instructivo que les presentamos a continuación, no pretende ser una fórmula
única para todos los procedimientos, sólo es una guía general.
Cada persona, docente o estudiante que emprenda un proyecto de producción de
plantines, deberá profundizar sus conocimientos y adecuar sus prácticas en función de
su propio proceso de producción.
Para el trabajo de producción de plantines y árboles se van a aprovechar y reutilizar
residuos que se generan en los domicilios. A continuación, recomendaremos los
elementos a utilizar en el armado del micro vivero.
Recipientes:
Tierra
En el vivero familiar y escolar se utilizará para producir el sustrato, en envases
individuales, tierra negra común hasta 3cm antes del borde del envase y en los 2cm
superiores una mezcla hecha con 50% de arena y 50% de tierra negra.
La tierra no tiene que ser muy compacta ni tener cascotes así las semillas germinan sin
dificultad. La arena agregada, permitirá el drenaje adecuado.
Conviene que la tierra sea zarandeada para separar y eliminar las piedras o restos
vegetales grandes que puedan entorpecer la germinación. Se recomienda utilizar una
zaranda que tenga 5 mm de luz aproximadamente en sus entramados.
Se pueden utilizar cajones de madera como los que se descartan en las verdulerías a
modo de contenedores. Esa es una forma sencilla y práctica que permite manipular y
trasladar con comodidad, alrededor de 15 plantines por cajón.
No sólo es importante brindar la cantidad necesaria de agua a las plantas, sino también
regar en tiempo y forma. El exceso de humedad propicia el ataque de hongos (que
también puede ocurrir por excesos en los riegos y la falta de luz). En el Caldén el exceso
de humedad provoca mortandad de plántulas con podredumbre del cuello de la raíz. Un
plantín desecado se arranca de la tierra completo, en cambio si muere por exceso de
agua, se corta a nivel de cuello de raíz. En caso de ataque de hongos, se deben descartar
los envases con los plantines afectados y al resto, se les debe disminuir la humedad,
aumentar la exposición al sol y agregar una delgada capa de arena fina sobre el sustrato.
El riego de las plantas pequeñas, debe hacerse con cuidado, en forma de lluvia fina y
suave para no golpear los plantines.
No debe regarse en horas de máxima insolación debido a que si caen gotas sobre las
hojas, pueden producir quemaduras. Si se riega en momentos de máxima insolación, se
debe tener cuidado que el agua no toque las hojas.
Es preferible hacer un riego moderado día por medio, en vez de un riego abundante una
vez por semana. La tierra no debe convertirse en "un barro", simplemente tiene que
mantenerse húmeda. Para ello el mejor control es tocar la superficie de la misma con el
dedo.
Un vez que las plantas adquieren el tamaño adecuado y están en buena condición, deben
ser trasladadas al exterior para su aclimatación antes de ser plantadas en campo.
Siempre es conveniente protegerlas de las heladas, por ejemplo, cubriéndolas con una
tela media sombra, ubicarlas en una galería o protegerlas por el sur con un muro
soleado.
Algunas especies de árboles, poseen semillas con protección natural que impiden o
retardan la germinación como mecanismo de supervivencia para defenderse de
condiciones ambientales desfavorables. Tal es el caso del caldén, motivo por el cual, se
sugiere realizar un tratamiento pre-siembra consistente en la hidratación de semillas a
temperatura ambiente.
Siembra
Luego se debe colocar en el envase, una base de tierra rociada con un poco de
agua, apisonada con una varilla de madera (aplastador de 3 cm de diámetro)
hasta que quede compacta a 3 cm de altura.
Se rellenan los envases con tierra hasta tres o cuatro cm del borde
aproximadamente. Se debe humedecer bien el sustrato antes de colocar las
semillas.
Se colocan las semillas recién ya hidratadas. Se las ubica en la zona central. En
general se suele colocar una semilla por envase, ya que el caldén tiene un alto
porcentaje de germinación pero también, se pueden colocar 2 por envase,
previendo que alguna sea defectuosa. Si germinan más de una, elegimos una de
las plantas para repicarla a otro envase que no tenga planta.
Se debe presionar levemente la semilla, para que quede al ras de la tierra y bien
en contacto con ella.
Se cubren las semillas con dos centímetros del sustrato. Si contamos con
mantillo, podemos hacer este paso con una mezcla de tierra negra con algo de
mantillo.
Una vez aparecidos los cotiledones, es necesario intensificar los cuidados referidos a la
exposición a la luz. Si las plantas se alargan y toman una coloración verde claro y si, en
general, toman un aspecto poco saludable, probablemente se deba a la falta de luz.
Entonces, deberán ubicarse en un lugar más soleado.
Una vez iniciado el proceso de germinación, es irreversible. Por ello, si se seca un
plantín (o la semilla) se pierde totalmente, por más que posteriormente se agregue buena
cantidad de agua, debido a la desecación interna. Es importante regar en el momento
adecuado, sobre todo si se advierte un ligero desecamiento en la superficie del sustrato.
Es preciso tener en cuenta que la sanidad de las plántulas, se logra utilizando un buen
sustrato, buena aireación y evitando el exceso de agua.
El hoyo debe ser amplio como para que Si la raíz presenta un rulo o codo, debe
quede tierra removida abajo y a los eliminarse cortándolo.
costados del pan de tierra y a una
profundidad suficiente para realizar la
casuela.
El tutor se clava lo más profundo posible Las podas de plantación y de formación
sin dañar el pan de tierra y se lo ata al se realizan eliminando las ramas
árbol con tiras de trapo en forma de “8”, secundarias bajas, con cortes al ras.
con doble vuelta al tutor para que la tira
no se caiga.
Bibliografía Consultada