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Consejos prácticos
La Oncología Médica está impulsando y promoviendo la formación y
funcionamiento de Unidades de Consejo Genético y los servicios de
información para pacientes y familiares afectados por una mutación del gen
BRCA.
En estas Unidades de Consejo Genético se determinan los programas de
seguimiento más adecuados para cada paciente. Se ofrecen consejos
individualizados sobre cómo modificar los factores de riesgo que puedan
influir en el riesgo de cáncer de mama (tratamiento anticonceptivo,
embarazo, etc.), cómo realizar un diagnóstico precoz y apoyo en la toma de
decisiones preventivas quirúrgicas, como mastectomíau ooforectomía o
farmacológicas.
FACTORES DE RIESGO
Un factor de riesgo es cualquier cosa que incrementa la posibilidad de tener
una enfermedad, como el cáncer.
Cada tumor tiene unos factores de riesgo conocidos y que pueden ser
diferentes unos de otros.
Tener un factor de riesgo, o varios, no significa que vaya a aparecer la
enfermedad. Además, muchas mujeres que tienen cáncer de mama no
tienen factores de riesgo aparente o conocido. Poseer un riesgo mayor para
el cáncer de mama no implica la certeza de que se vaya a padecer la
enfermedad en algún momento de la vida, sólo indica cierta predisposición.
Se han identificado una serie de factores que pueden aumentar el riesgo de
desarrollar un cáncer de mama a lo largo de la vida. Algunos factores son
más importantes que otros y pueden variar con el tiempo. En el 50% de los
casos no se observa ningún factor de riesgo.
Sexo
El ser mujer es el factor de riesgo más importante. Las mujeres tienen una
glándula mamaria más desarrollada que los hombres, pero lo importante es
que las células de esta glándula están sometidas al estímulo constante de los
factores de crecimiento hormonales, los estrógenos y la progesterona. Los
hombres pueden tener cáncer de mama pero la incidencia es muy baja: 100
veces menor que en la mujer.
Edad
El riesgo de padecer cáncer aumenta con la edad. Alrededor del 18% de los
cánceres de mama se diagnostican en la década de los 40 y el 77% por
encima de los 50 años. Por encima de los 75 años el riesgo disminuye.
Raza
Las mujeres de raza blanca son las que tienen un riesgo más elevado de
padecer cáncer de mama. Las asiáticas y africanas son las que tienen menor
riesgo. Las razones verdaderas son desconocidas todavía. Hasta ahora se
considera que la relación con el estilo de vida es la razón más importante.
1. Disminuye el riesgo:
2. Aumenta el riesgo:
Primera regla antes de los 12 años.
Menopausia después de los 55 años.
Existen una serie de factores de riesgo que podemos modificar, y por tanto
contribuir a la prevención del desarrollo del cáncer de mama. Estos son lo
relacionados con la descendencia, factores hormonales exógenos, así como
la dieta y el ejercicio físico.
Descendencia
1. Disminuye el riesgo:
2. Aumenta el riesgo:
Edad primer parto después de los 35 años.
Ausencia de embarazo.
1. Disminuye el riesgo:
FACTORES INCIERTOS
FACTORES AMBIENTALES
Estudios en marcha
Los estudios en marcha están evaluando a otros fármacos: Los moduladores
selectivos de los receptores estrogénicos (SERMs) o a los Inhibidores de la
Aromatasa (AIs). El Raloxifeno, es un SERM, que está aprobado para el
tratamiento y prevención de la osteoporosis en mujeres postmenopáusicas.
Se han realizado dos estudios:
Conclusiones
La quimioprevención puede ser considerada para reducir el riesgo de cáncer
de mama en mujeres con lesiones benignas de la mama de alto riesgo y
lesiones proliferativas, siendo Tamoxifeno el tratamiento estándar. Datos
más limitados sugieren que el Tamoxifeno puede ser considerado en las
mujeres que son portadoras de mutaciones de los genes BRCA1/2.
Es muy importante que los riesgos y el perfil de efectos secundarios del
tratamiento con Tamoxifeno sean considerados de forma individualizada y
que los modelos de riesgo sean presentados a los pacientes así como un plan
terapéutico con la programación de las mamografías, exámenes físicos y un
apropiado seguimiento auxiliar. En los estudios futuros se espera la
contribución de otros SERMs y de los Inhibidores de la Aromatasa en reducir
el riesgo de cáncer de mama.
¿Se puede prevenir el cáncer de
ovario?
La mayoría de las mujeres presenta uno o más factores de riesgo de cáncer de ovario.
Sin embargo, la mayoría de los factores comunes aumenta el riesgo de la mujer sólo
ligeramente, de manera que explican sólo en parte la frecuencia con que se presenta
esta enfermedad. Hasta ahora, lo que se conoce sobre los factores de riesgo no se ha
traducido en formas prácticas de prevenir la mayoría de los casos de cáncer de ovario.
Usted puede reducir el riesgo de padecer el tipo de cáncer de ovario más común, el
cáncer ovárico epitelial. Se sabe mucho menos acerca de las maneras para reducir el
riesgo de padecer tumores del estroma y de células germinales de los ovarios, de
modo que esta información no aplica a estos tipos. Es importante entender que
algunas de estas estrategias reducen su riesgo sólo ligeramente, mientras que otras lo
reducen mucho más. Algunas estrategias son fáciles de seguir, mientras que otras
requieren cirugía. Si está preocupada por su riesgo de cáncer de ovario, consulte con
los profesionales de la salud, ya que ellos le pueden ayudar a considerar estas ideas a
medida que apliquen a su propia situación.
Anticonceptivos orales
Usar anticonceptivos orales (píldoras anticonceptivas) reduce el riesgo de padecer
cáncer de ovario para las mujeres en riesgo promedio y portadoras de la mutación
BRCA, especialmente en mujeres que los usan por varios años. En comparación con
mujeres que nunca tomaron anticonceptivos orales, las que sí los tomaron por 5 años
o más tienen aproximadamente 50% menos riesgo de padecer cáncer de ovario. Aun
así, las píldoras anticonceptivas conllevan algunos riesgos y efectos secundarios graves,
como un riesgo ligeramente mayor de padecer cáncer de seno. Las mujeres que
consideran tomar estos medicamentos por alguna razón deben hablar primero con sus
médicos sobre los posibles riesgos y beneficios de los mismos.
Cirugía ginecológica
Aunque la ligadura tubárica y la histerectomía pueden reducir la probabilidad de
padecer ciertos tipos de cáncer de ovario, los expertos concuerdan que estas
operaciones se deben hacer sólo en caso de razones médicas válidas y no por sus
efectos en el riesgo de cáncer de ovario.
Si usted se va a someter a una histerectomía por una razón médica válida y tiene un
antecedente familiar contundente de cáncer de ovario o de seno, es posible que usted
quiera considerar la extirpación de ambos ovarios y las trompas de Falopio
(salpingooforectomía bilateral) como parte de ese procedimiento.
Aun cuando usted no tenga un mayor riesgo de padecer cáncer de ovario, algunos
médicos recomiendan que se extirpen los ovarios y el útero si la mujer ya comenzó la
menopausia o está próxima a comenzarla. Si usted tiene más de 40 años y se va a
someter a una histerectomía, debe consultar con su médico sobre los riesgos y
beneficios potenciales de la extirpación de sus ovarios.
Otra opción para las mujeres de riesgo promedio que no desean la extirpación de sus
ovarios porque no quieren perder la función ovárica (y pasar temprano por la
menopausia) consiste en extirpar solamente las trompas de Falopio (una
salpingectomía bilateral) junto con el útero (una histerectomía). Estas mujeres pueden
optar por la extirpación de sus ovarios posteriormente. Esta opción no ha sido
estudiada tan bien como la extirpación de ambos ovarios y las trompas de Falopio al
mismo tiempo, pero hay bastante información que puede considerarse una opción
para reducir el riesgo de cáncer de ovario en mujeres de riesgo promedio.
Estrategias de prevención para mujeres que
tienen antecedentes familiares de cáncer de
ovario o mutación BRCA
Si sus antecedentes familiares sugieren que usted (o un familiar cercano) podría tener
un síndrome asociado con un alto riesgo de cáncer de ovario, puede que quiera
considerar la asesoría y las pruebas genética. Durante la asesoría genética (por un
asesor en genética o un profesional de la salud con capacitación en la evaluación del
riesgo genético), se revisa su historial clínico y familiar. Esto puede ayudar a predecir si
es probable que usted tenga una de las mutaciones genéticas que está asociada con un
mayor riesgo de cáncer de ovario.
El asesor también le orientará sobre los beneficios y las desventajas potenciales de las
pruebas genéticas. Las pruebas genéticas pueden ayudar a determinar si usted o sus
familiares tienen ciertas mutaciones genéticas que causan un alto riesgo de cáncer de
ovario. Aun así, los resultados no siempre son claros, y un asesor genético puede
ayudarle a entender lo que los resultados significan para usted.
Para algunas mujeres con fuertes antecedentes familiares de cáncer de ovario, saber
que no tienen la mutación que aumenta su riesgo de esta enfermedad puede ser un
gran alivio, tanto para ellas como para sus hijos. El hecho de saber que sí se tiene esa
mutación puede ser estresante; sin embargo, para muchas mujeres esta información
es muy útil para tomar decisiones importantes sobre ciertas estrategias preventivas
para sí mismas y sus hijos. Si desea obtener más información, consulte Genética y
cáncer.
Una manera en la que las mujeres de alto riesgo (mujeres con mutaciones BRCA1 y
BRCA2) pueden reducir el riesgo de padecer cáncer de ovario es mediante el uso de
anticonceptivos orales. Sin embargo, los anticonceptivos orales pueden aumentar el
riesgo de cáncer de seno en mujeres con o sin estas mutaciones. Este riesgo es más
alto mientras las mujeres están activamente tomando pastillas anticonceptivas, pero
puede continuar incluso después de suspender las pastillas. La investigación continúa
para conocer más sobre los riesgos y los beneficios que tomar anticonceptivos orales
representa para las mujeres que tienen alto riesgo de padecer cáncer de ovario y de
seno.
La ligadura tubárica también puede reducir eficazmente el riesgo de cáncer de ovario
en las mujeres que tienen mutaciones BRCA1 o BRCA2. Generalmente este tipo de
cirugía no se hace sola y normalmente se hace por razones distintas a la prevención del
cáncer ovario.
A veces una mujer puede desear considerar la extirpación de los ovarios y las trompas
de Falopio (una salpingooforectomía bilateral) para reducir su riesgo de cáncer de
ovario antes de que incluso se sospeche de cáncer. Si los ovarios son extirpados para
prevenir el cáncer de ovario, la cirugía se llama reducción de riesgo o profiláctica. Por
lo general, la salpingooforectomía se puede recomendar en mujeres con un riesgo muy
alto después de haber terminado de tener hijos. Esta operación reduce el riesgo de
cáncer de ovario en gran manera, pero no lo elimina por completo. Esto se debe a que
algunas mujeres con un alto riesgo de este cáncer ya tenían cáncer al momento de la
cirugía. Estos cánceres de ovario pueden ser tan pequeños que sólo se pueden
encontrar cuando se observan los ovarios y las trompas de Falopio en el laboratorio
(después de haber sido extirpados). Además, las mujeres con las mutaciones
genéticas BRCA1 o BRCA2 tienen un mayor riesgo de carcinoma peritoneal primario.
Aunque el riesgo es bajo, este cáncer aún se puede presentar después de extirpar los
ovarios y las trompas de Falopio.
Lactancia materna
Durante los primeros seis meses de vida, el mejor alimento que podemos ofrecer a
nuestro bebé es la leche materna.
Así coinciden tanto la Organización Mundial de la Salud (OMS), el Comité de Lactancia
Materna de la Asociación Española de Pediatría, como asociaciones y organizaciones
de peso en temas de lactancia de todo el mundo, expresando que la lactancia materna
es la manera normal y natural de alimentación y debe ser el método de elección para
alimentar a todos los bebés de manera exclusiva durante los seis primeros meses de
vida.
A pesar de que la leche materna es el único alimento que toma el niño en esta etapa,
cubre todas la necesidades de energía y nutrientes que necesita el bebé para un
óptimo crecimiento y desarrollo, adaptándose a éste en cada momento. Para que así
sea, la lactancia materna debe ser exclusiva y a demanda.
Conclusiones
Para eliminar las posibles barreras que dificultan la lactancia materna y que esta sea lo
más satisfactoria posible es importante la ayuda de profesionales sanitarios, de la
familia y de los grupos de apoyo que acompañan a la madre en toda esta etapa. En
Alimmenta podemos ayudarte a conseguir una lactancia materna exitosa.
Antes de que nazca el bebé, aprenda más sobre lo que sucede durante este control médico. Esto le
ayudará a:
Es una buena señal escuchar llorar al bebé en la sala de parto. El llanto le ayuda a eliminar el exceso de
fluidos que posiblemente aún tenga en los pulmones, la nariz o la boca. Por este motivo, los médicos
suelen animar al bebé a que llore. Si el bebé tiene problemas para respirar, el profesional médico hará la
reanimación cardiopulmonar.
Cuando el bebé estaba en el vientre, recibía nutrición y oxígeno por el cordón umbilical que lo
conectaba a usted. Ahora que el bebé ha nacido y respira por sí mismo, la corriente sanguínea se
reencauza a los pulmones; entonces el personal médico puede cortar y colocar una pinza en el cordón
umbilical.
Puntuación Apgar
La puntuación Apgar fue creada para controlar el estado del bebé al primer minuto y a los 5 minutos de
haber nacido. Se controlan cinco cosas del bebé:
A – Actividad; tono muscular
P – Pulso; frecuencia cardíaca
G – Gesto; irritabilidad refleja Ésta se mide colocando una jeringa de bulbo o aspirador nasal en la nariz
del bebé para ver su reacción.
A – Apariencia; coloración de la piel
R – Respiración
A cada categoría se le asigna una puntuación de 0 a 2. Luego se suman los números para calcular la
puntuación final. Los bebés con una puntuación Apgar de 7 o más probablemente hayan pasado sin
problemas por el parto y están en buenas condiciones de salud. Los que tienen puntuaciones más bajas
deberán ser vigilados atentamente o atendidos especialmente aunque la mayoría de ellos no tendrá
problemas.
Inyección de Vitamina K
Al bebé se le dará una inyección de vitamina K inmediatamente después de nacer. Durante los primeros
días después del parto, los recién nacidos no pueden elaborar vitamina K, la cual es necesaria para
coagular la sangre. La inyección protege al bebé contra problemas de sangrado graves y poco comunes
que pueden afectar a los recién nacidos.
Se tratarán los ojos del bebé con gotas o ungüento medicado. De esta forma se protegen los ojos de las
infecciones bacterianas que pudo haberse contagiado durante el parto.
Se hará una punción en el talón del bebé para sacar unas gotas de sangre. Esta muestra de sangre se
analiza para detectar trastornos genéticos y bioquímicos. Es posible que estos defectos de
nacimiento en el bebé no sean obvios al principio. Pero, a menos que se detecten y traten pronto,
pueden causar problemas físicos, retraso mental y, en algunos casos, la muerte. La mayoría de los bebés
tiene buenos resultados en estas pruebas.
También es posible que le hagan una prueba de audición al bebé. Ésta mide cómo el bebé responde a
los sonidos. Se coloca un auricular o un micrófono pequeño y suave en el oído del bebé. Sin esa prueba,
no se puede detectar por lo general la pérdida de la audición hasta que el niño tenga aproximadamente
2o 3 años de edad. Para ese entonces, es posible que el niño ya tenga problemas del habla y lenguaje. El
tratamiento temprano ayuda a prevenir estos problemas.
Actualmente cada estado o región maneja su propio programa de pruebas de detección para recién
nacidos. Los programas estatales varían en la cantidad y tipo de condiciones para las cuales se realizan
pruebas. March of Dimes recomienda que se les realicen a todos los bebés pruebas para al menos 31
trastornos, incluso la pérdida de la audición.
Lo más probable es que los resultados de las pruebas indiquen que su bebé está saludable. Pero para los
pocos bebés con resultados distintos, el diagnóstico temprano y el tratamiento adecuado pueden
significar la diferencia entre el desarrollo sano y problemas de por vida.
Es probable que su bebé reciba la primera dosis de la vacuna contra la hepatitis B. Esta inyección
protege al bebé contra el virus que puede provocar daños graves en el hígado.
Medidas: Se medirá el peso, la altura y el tamaño de la cabeza del bebé para verificar que esté
dentro del rango saludable según las semanas de embarazo.
Baño: Una vez que la temperatura corporal del bebé sea estable, se le dará su primer baño.
Huellas del pie y brazaletes médicos: Como parte del primer historial médico del bebé, se le
tomarán las huellas del pie y se añadirán al expediente médico. Por lo general, se le colocan dos
brazaletes de identidad al bebé, uno para el pie y el otro para el brazo. A usted también le darán un
brazalete igual al del bebé.
Cuidados especiales
Algunos bebés se enfrentan a ciertos desafíos después de nacer. Los bebés que necesitan cuidados
especiales se llevarán a la unidad de cuidados intensivos neonatales (NICU). Es un área del hospital
donde reciben cuidado por parte de profesionales médicos especialmente capacitados y se les atiende
con tecnología avanzada.
Tener un bebé en la NICU puede crearles estrés y tristeza a muchos padres. Si bien estará separada de
su bebé durante un tiempo, reconfórtese al saber que aun así podrá establecer un lazo afectivo
importante con él. Quédese tranquila porque los adelantos científicos en este campo médico están
ayudando a más bebés a sanar y regresar pronto al hogar.