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ACTAS DEL

ENCUENTRO DE ORNITOLOGÍA EN ÁLAVA


Contribuciones recientes al estudio
y conservación del patrimonio faunístico
ACTAS DEL

ENCUENTRO
DE ORNITOLOGÍA
EN ÁLAVA
Contribuciones recientes al estudio
y conservación del patrimonio faunístico

Vitoria-Gasteiz, septiembre de 2003

Proceedings of the Ornithology Meeting in Álava

ARABAKO ORNITOLOGIA JARDUNALDIAREN AKTAK


En emocionado recuerdo
de Iñaki Zorrakin
Coordinador: José María Fernández
Autores: Antonio Bea
Joseba Carreras
Jorge Echegaray
José María Fernández
José Antonio Gainzarain
Aitor Galarza
Benjamín Gómez
Andrés Illana
Luis Lobo
Diana Paniagua
Juan Manuel Pérez de Ana
Jonathan Rubines
Nerea Ruiz de Azua
Ibon Telletxea
© Autores y Diputación Foral de Álava
Euskera: Joserra Diez, Ibai Portu
Fotocomposición: Arriaga, SL
Edita: Diputación Foral de Álava. www.alava.net
Imprime: Imprenta de la Diputación Foral de Álava
ISBN: 84-7821-661-8
Depósito legal: VI-560/06

Queda prohibida la reproducción total o parcial de esta obra sin citar la referencia bibliográfica.
AURKEZPENA / PRESENTACIÓN

A rabako Foru Aldundia atsegin handiz lotu


zaio Ignacio Aldecoa Kultura Etxean egin
zen Arabako Ornitologia Bileran aurkeztutako
L a Diputación Foral de Álava acomete con
agrado la publicación de esta colección de
ponencias impartidas en el Encuentro de Ornito-
hitzaldi multzo hau argitaratzeari. Horrela, gure logía en Álava, celebrado en la Casa de Cultura
natura ondarea ezagutzeko hain ekarpen handia Ignacio Aldecoa. Pretende así contribuir al desa-
egiten duen jarduera horren garapenean lagundu rrollo de esta actividad, que tanto aporta al cono-
egin nahi du. Eskertu behar zaizkie beren ahale- cimiento de nuestro patrimonio natural. Es nece-
ginak hizlariei –zeintzuk, 2003. urtean aurkeztu- sario agradecer su esfuerzo a los ponentes –que
tagkoekin alderatuz, liburuki honetako datuak ere incluso han actualizado los datos contenidos en
eguneratu bait dituzte–, baita Arabako lurraldeko este volumen respecto a los presentados original-
hegazti fauna egunez egun aztertu eta ezagutaraz- mente en 2003–, pero también a todos los demás
ten ari diren gainerako ornitologo guztiei ere. Be- ornitólogos que, día a día, estudian y divulgan la
reziki, eskertzekoa da José Luis Telleria irakaslea- avifauna del territorio alavés. Especialmente, con-
ren parte-hartzea, gonbidatu moduan hitzaldi bat viene reconocer la participación del profesor José
eman baitzuen Bileran. Balio beza horrek guztiak Luis Tellería, que impartió una conferencia invi-
herritarrengan hegaztiekiko eta oro har Izadiare- tada en el Encuentro. Sirva todo ello para que se
kiko begirunea eta estimazioa areagotu daitezen, incremente en la ciudadanía el aprecio y el respeto
hazkunde kultural eta moralaren adierazgarri gar- por las aves y por la naturaleza en general, signo
biak baitira. inequívoco de crecimiento cultural y moral.

Federico Verástegui
Diputado Foral de Cultura, Juventud y Deportes
Kultura, Gazteria eta Kirolako Foru Diputatua
ÍNDICE

J. M. FERNÁNDEZ
Introducción. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 13
A. GALARZA
Factores determinantes de la distribución de los paseriformes en el País Vasco. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 15
J. A. GAINZARAIN & J. M. FERNÁNDEZ
Tendencias poblacionales recientes de la avifauna del País Vasco y de Navarra,
según las variaciones de su distribución. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 25
L. LOBO
La restauración del humedal de Salburua: consecuencias sobre la avifauna . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 41
J. CARRERAS
Actuaciones de la Diputación Foral de Álava en el marco del proyecto LIFE
sobre el águila de Bonelli Hieraaetus fasciatus . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 53
N. RUIZ DE AZUA, J. M. FERNÁNDEZ, A. BEA & J. CARRERAS
Situación de la población nidificante de avión zapador Riparia riparia en Álava . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 57
J. M. PÉREZ DE ANA
Situación y problemática de las aves rupícolas en Sierra Salvada . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 67
A. ILLANA & D. PANIAGUA
El águila real Aquila chrysaetos en Álava.
Análisis de la situación y perspectivas de futuro . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 87
J. RUBINES & B. GÓMEZ
Técnicas de caracterización genética de poblaciones de becada Scolopax rusticola . . . . . . . . . . . . . . 93
I. TELLETXEA
Evolución reciente de la población de perdiz roja Alectoris rufa en Álava . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 101
J. ECHEGARAY
Distribución y hábitat de la lavandera cascadeña Motacilla cinerea, el mirlo acuático
Cinclus cinclus y el martín pescador común Alcedo atthis en el río Bayas
(Álava, País Vasco) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 107
INTRODUCCIÓN

esulta desalentadoramente sencillo componer una trayectoria histórica de la Ornitología


R en Álava, porque no abundan los referentes ni las contribuciones sobre las aves de este
territorio en los tratados cinegéticos, en las crónicas de viajes, en la literatura costumbrista
y ni siquiera en las descripciones enciclopédicas que nutrieron los conocimientos de la inci-
piente ciencia ornitológica hasta la época moderna. Y ello a pesar de ser Álava patria chica
de uno de los más ilustres antecedentes, Pero López de Ayala (1332-1407), autor de El libro
de la caza de las aves, donde a un didáctico compendio de técnicas de cetrería, que mantuvo
su influencia durante siglos, se añaden jugosos pasajes sobre historia natural, patología y aun
migración. Los ilustrados del siglo XVIII, a pesar de la actividad de la Real Sociedad Bascon-
gada, no realizaron grandes aportaciones, quizá por su mayor dedicación a temas netamente
prácticos, aplicables al desarrollo económico y social del país. Las nuevas corrientes del pen-
samiento científico europeo, profundamente interesadas en la catalogación de los seres vivos,
apenas contaron en Álava con el breve reflejo de Joaquín José de Landázuri (1734-1806) y su
Historia civil de la MN y ML provincia de Álava. Durante el XIX y primera mitad del XX, la
brecha respecto a los países culturalmente avanzados se agudizó, y desde nuestra perspectiva
más localista ni siquiera contamos con descripciones comentadas de la avifauna o con apor-
taciones de científicos o colectores extranjeros, como las que sí se produjeron en territorios
vecinos: el Catálogo de las aves observadas en Guipúzcoa y Vizcaya de Julián Aldaz (1918) o
los ensayos de Howard Irby (1883), Howard Saunders (1884) y Henry Witherby (1922) sobre
aves pirenaicas y cantábricas en la revista británica Ibis son algunos ejemplos. En 1913, el
botánico alavés Federico Gredilla escribía:
«Vitoria será probablemente la capital de España que mayor contingente de
naturalistas ha proporcionado. Esta circunstancia no debe extrañar, porque
los vitorianos son muy dados a contemplar las bellezas de la naturaleza, ha-
ciendo con tal fin frecuentes excursiones»
No es plausible que tan entusiasta afirmación, seguramente justificada en cierta medida,
pueda hacerse extensible a la rama de las Ciencias Naturales que estudia y describe el pobla-
miento avifaunístico.
Por tanto, sólo hasta mediados del siglo XX puede remontarse el inicio de una explora-
ción más sistemática de la avifauna alavesa, con el trabajo de algunos pioneros como Fede-
rico Puente -merecedor de un homenaje pendiente por parte de los naturalistas alaveses- que
se apoyaron necesariamente en agrupaciones cercanas y consolidadas, como la Sociedad de
Ciencias Aranzadi de San Sebastián. Paralelamente, el lento pero progresivo desarrollo de la
Sociedad Española de Ornitología, fundada en 1954, propició el lanzamiento de programas de
inventariado avifaunístico de amplio alcance, en los que pudieron participar jóvenes aficiona-
dos, desde el seminal censo postal de cigüeñas impulsado por Francisco Bernis (1948) hasta
14

los recuentos de aves acuáticas invernantes (iniciados aquí en 1972) o el primer censo de bui-
treras (1979). El Atlas ornitológico de Álava, Vizcaya y Guipúzcoa (1985) constituyó un hito
destacable, que resolvió por fin y con brillantez la catalogación de la avifauna alavesa, y a
partir del cual se abrieron nuevas perspectivas en las que nos hallamos inmersos hoy en día.
En este tipo de esfuerzos colectivos se hallan los albores de lo que hoy se llama «ciencia
ciudadana», concepto acuñado para definir la investigación dirigida por científicos profesio-
nales pero elaborada en colaboración con el público, y que tiende un puente entre Ciencia y
Sociedad. La Ornitología es, de manera unánimemente reconocida, la ciencia biológica que
más está contribuyendo a estrechar la distancia entre esos dos ámbitos, que tan a menudo se
ignoran mutuamente. El atractivo estético e incluso sentimental de las aves favorece el interés
de los ciudadanos, y cultivando su observación o registrando sus presencias se generan con-
tribuciones significativas al conocimiento, a la divulgación y a la conservación. La Ornitolo-
gía, término que en castellano y en sentido lato aúna todavía a la contemplación puramente
recreativa (el birdwatching de los ingleses) y a la actividad más académica, contiene esas tres
facetas que conciernen a la Ciencia, a la Cultura y al Interés Público.
Durante las últimas dos décadas, una creciente nómina de ornitólogos alaveses ha apor-
tado su esfuerzo para poder situar a este territorio, pequeño pero diverso, en el mapa de la
avifauna ibérica y continental. Conviene reivindicar, y tal es la pretensión del Encuentro de
Ornitología y de este libro, la existencia de canales en los que se visualicen aportaciones de
este tipo, de manera que crezcan tanto el rigor exigible a una actividad que emplea el método
científico, como su utilidad en términos de progreso social y cultural.

José María Fernández


Instituto Alavés de la Naturaleza
FACTORES DETERMINANTES DE LA DISTRIBUCIÓN
DE LOS PASERIFORMES EN EL PAÍS VASCO

AITOR GALARZA

Diputación Foral de Bizkaia • Avenida de Madariaga, 1. 48014 Bilbao


agalarza@ telefonica.net

Resumen
Se examina la relación entre una serie de variables ambientales con la riqueza y abundancia de
las comunidades de paseriformes en los hábitats más extendidos del País Vasco, desde la costa de
Bizkaia hasta la Rioja Alavesa. Las variables utilizadas fueron la temperatura y la precipitación
anual media, la densidad media de troncos con <10 cm y >30 cm de diámetro, la cobertura de
arbustos y herbáceas, la de cultivos cerealistas y mediterráneos, y la de coníferas y planifolios.
La distribución de la abundancia específica parece estar condicionada por una gran variedad de
factores ambientales. Durante el invierno, las variables climáticas tienen mayor influencia, mien-
tras que en primavera ganan peso las fisonómicas. Las variables paisajísticas y las florísticas
parecen tener una importancia similar durante ambas épocas del año. Tanto la abundancia como
la riqueza de las comunidades se asocian positivamente a la densidad del arbolado durante la
primavera, mientras que durante el invierno dependen de la distribución de las temperaturas.
Palabras clave: paseriformes, comunidades, abundancia, riqueza, País Vasco.

Summary
Factors influencing bird distribution in the Basque Country
We examine the relationship between certain environmental variables, richness and abundance
of bird communities across Bask Country habitats, from the coast of Bizkaia to Rioja Alavesa.
Analized variables were average temperature and rainfall, densities of trees thinner than 10 cm
diameter and thicker than 30 cm, the coverage of shrub and pastureland, cereal and Mediterra-
nean cultures, pinewood and oakwood. Distribution of species abundance seems to be influenced
by an ample variety of environmental factors. In winter, climate has a major influence, while
in spring structural variables increase their importance. Landscape and floristic variables could
have similar relevance in both seasons. Community abundance and richness are positively as-
sociated to tree density in spring, but in winter they depend on temperature distribution.
Key words: avian communities, abundance, richness, Basque Country.

Laburpena
Paseriformeen banaketaren faktore mugatzaileak Euskal Herrian
Zenbait ingurune-aldagairen eta paseriforme-komunitateen aberastasunaren eta ugaritasunaren
arteko erlazioa aztertzen da, Bizkaiko kostaldetik Arabako Errioxarainoko habitat hedatuenetan.
Erabilitako aldagaiak hurrengo hauek dira: urteko batezbesteko temperatura eta prezipitazioa,
<10 cm eta >30 cm Ø-ko batezbesteko enbor-dentsitateak, zuhaizka-estaldura eta belarkara
estaldura, mediterraniar eta zereal-laborantzen estaldura, eta konifero- eta ostozabal-estaldura.
Aldagai klimatikoek eragin handiagoa dute negualdian, fisonomikoen garrantzia udaberrian
16 A. GALARZA

handitzen den bitartean. Aldagai paisajistikoek eta floristikoek antzeko pisua dutela urtearen
sasoi bietan ematen du. Ikerturiko komunitateen dentsitatea zein aberastasuna zuhaitz-dentsi-
tateak igotzen ditu udaberrian; negualdian aldiz temperatura-banaketarekin erlazionatuta daude
hegaztien dentsitate eta aberastasun horiek.
Hitz gakoak: paseriformeak, komunitateak, aberastasun, ugaritasun, Euskal Herria.

Introducción el papel de la estacionalidad sobre los factores


determinantes de la distribución de este grupo de
Los factores ambientales determinantes de la aves. El objetivo de este trabajo es, precisamente,
distribución de las aves son aún poco conocidos. explorar el significado de una serie de factores
Mientras que ciertos autores consideran de impor- paisajísticos, fisonómicos, florísticos y climáti-
tancia relevante la estructura fisonómica del pai- cos sobre la distribución de los paseriformes en
saje (Hilden, 1965), otros dan mayor importancia el País Vasco durante el período reproductor y la
al papel de la composición florística del medio invernada. Este objetivo general se concreta en
(Wiens & Rotemberry, 1981; Rice et al., 1984; los siguientes objetivos parciales:
Rotemberry, 1985), a la incidencia del clima
a) Describir los patrones de covariación entre
(Root, 1988a y 1988b) o a ciertos aspectos histó-
la abundancia de las especies y las variables
ricos relacionados con el pasado climatológico o
ambientales seleccionadas.
geológico de las áreas estudiadas (Moreau, 1954;
Blondel, 1985). En realidad, una buena parte de b) Comparar la incidencia de los diferentes fac-
esta aparente falta de concreción puede deberse tores ambientales en primavera e invierno.
al hecho de que los factores determinantes de la Aunque se sabe que hay notables desviacio-
distribución de abundancias de las aves pueden nes en la selección de hábitat entre estaciones,
cambiar según las peculiaridades biológicas de las faltan estudios que cuantifiquen estos cambios
especies estudiadas, las escalas de aproximación y permitan sacar conclusiones generales sobre
y la propia metodología de estudio. Por ello, es los grandes determinantes de la distribución de
importante ampliar los conocimientos empíricos la avifauna en una región dada, obviando las
sobre este tópico, abordándolo desde diferentes peculiaridades propias de cada especie.
escalas geográficas y grupos taxonómicos (ver c) Analizar las diferentes respuestas de las
Gaston, 1994 para una revisión). especies según su origen biogeográfico.
En este trabajo, abordamos el estudio de los El País Vasco, a caballo entre las regiones
factores determinantes de la distribución de las Eurosiberiana y Mediterránea, alberga aves
aves en el País Vasco. Hemos seleccionado a los de procedencia geográfica diversa, y requeri-
paseriformes (O. Passeriformes) por constituir mientos ambientales supuestamente peculia-
un taxon relativamente homogéneo desde un res (Brown, 1984), que pueden clasificarse,
punto de vista biológico, además de ser el gru- según su distribución, en norteñas, paleárti-
po cuantitativa y cualitativamente dominante en cas y sureñas (ver Tellería & Santos, 1994).
el contexto de la avifauna del área de estudio. Es previsible que estos grupos respondan de
forma diferente a la incidencia de los factores
Aunque su análisis ha sido ya abordado a escala
ambientales considerados.
de la Península Ibérica y en una parte del País
Vasco (Tellería & Santos, 1982, 1985 y 1993; Te- d) Estudiar, finalmente, la incidencia de los dife-
llería, 1987; Santos & Tellería, 1985; Tellería et rentes factores ambientales considerados so-
al., 1992), faltan estudios más integrados en los bre la densidad y riqueza de las comunidades
que para una misma región geográfica se valore de aves estudiadas.
FACTORES DETERMINANTES DE LA DISTRIBUCIÓN DE LOS PASERIFORMES
EN EL PAÍS VASCO 17

Material y métodos

Se eligieron 23 localidades de muestreo (17 para


los muestreos invernales) a lo largo del territo-
rio de la Comunidad Autónoma del País Vasco.
Estas localidades se seleccionaron teniendo en
cuenta la representatividad de los hábitats en los
diferentes pisos bioclimáticos. En cada locali-
dad de muestreo se midió la abundancia de la
avifauna y diversos factores ambientales. Dado
que la abundancia de las especies puede estar
determinada por una combinación de diferentes
factores que pueden estar interrelacionados, se
realizó un análisis de correlación parcial con el
fin de resolver el problema de interacción en-
tre las variables. Se utilizó, además, un análisis
de regresión múltiple por pasos para evaluar el
porcentaje de la varianza explicada por las prin-
cipales variables ambientales. Para obtener dis-
tribuciones normales, las variables expresadas
en porcentaje se transformaron angularmente
Figura 1. Robledal de Godamo, Belunza
(arcsen√p), mientras que el resto se transformó (foto: Nerea Ruiz de Azua).
a escala logarítmica (log (x+1)). [Godamo Common Oak forest, Belunza].

Las localidades fueron muestreadas en los


períodos mayo/junio y enero/febrero por el mé-
todo del transecto con banda de 25 m (Järvinen
& Väisanen, 1975). Las densidades específicas
obtenidas, así como la abundancia total y la ri- entre 25-200 cm de altura (CARB), la cobertu-
ra herbácea (CHER) y la cobertura de cultivos
queza específica (s) en cada hábitat fueron trans-
cerealistas y mediterráneos (CCLT). Por último,
formadas logarítmicamente.
la influencia de la composición florística en la
Se seleccionaron varios parámetros cli- abundancia de las aves se analizó utilizando las
máticos como variables independientes con el variables cobertura de coníferas (CONF) y co-
fin de reflejar las variaciones de temperatura y bertura de planifolios (PLNF), según fuera la
precipitación a lo largo del área de estudio. Los identidad de la especie arbórea dominante en
datos climáticos se tomaron de Ortubay (1994). cada medio.
Al encontrarse fuertes correlaciones entre los
valores de temperatura anual media (TEAM) y
precipitación anual media (PRAM) y los valo-
Resultados
res mínimos y máximos de dichos parámetros,
se seleccionaron las dos primeras variables. La Se contabilizaron 56 especies durante el período
estructura fisonómica de la vegetación se midió reproductor y 41 durante el invierno, aunque 14
mediante la densidad media de troncos con <10 y 8 especies fueron excluidas, respectivamente,
cm (TRJV) y >30 cm (TRAD) de diámetro a por presentar una distribución muy restringida.
1,5 m de altura. Como variables paisajísticas se El conjunto de especies considerado está mayo-
utilizaron la cobertura de arbustos comprendidos ritariamente constituido por especies de prefe-
TEAM PRAM CARB CHER CCLT TRAD TRJV CONF PLNF R2 F 18
Especies norteñas
Anthus trivialis - -
Prunella modularis 0,444* 0,291 0,35 5,47*
Sylvia borin 0,309 -0,236 0,008 0,469* 0,61 7,11**
Phylloscopus collybita 0,518* 0,774*** 0,695*** 0,68 21,18***
Erithacus rubecula -0,518* 0,694*** 0,752*** 0,617** 0,82 44,49***
Turdus philomelos -0,382 0,732*** 0,331 0,76 20,44***
Parus palustris 0,384 0,441* 0,37 5,92*
Lanius collurio 0,540** 0,29 8,67**
Pyrrhula pyrrhula 0,410* 0,17 4,23*
Emberiza citrinella - -
Especies paleárticas
Alauda arvensis -0,574** 0,33 10,32**
Motacilla flava 0,527** 0,28 8,08**
Motacilla alba 0,572** 0,33 10,32**
Sylvia atricapilla -0,449* 0,785*** 0,779*** 0,62 33,71***
Muscicapa striata - -
Oenanthe oenanthe - -
A. GALARZA

Turdus merula -0,462* 0,475* 0,676*** 0,601* 0,46 17,69***


Turdus viscivorus - -
Aegithalos caudatus 0,446* 0,484* 0,23 6,42*
Parus ater 0,670*** 0,721*** 0,61 15,77***
Parus major -0,453* 0,387 0,751*** 0,767*** -0,278 0,82 29,38***
Parus caeruleus 0,408* 0,588** -0,237 0,700*** 0,67 12,98***
Parus cristatus 0,580** 0,322 0,658*** 0,55 12,11***
Sitta europaea 0,472* -0,086 0,43 7,41**
Troglodytes troglodytes 0,412* -0,426* 0,788*** 0,62 34,44***
Fringilla coelebs -0,485* 0,547** 0,663*** 0,515* 0,72 26,02***
Carduelis carduelis 0,559* 0,636*** 0,58 13,63***
Carduelis chloris 0,435* -0,418* 0,19 4,91*
Carduelis cannabina -0,567** 0,411* -0,478* 0,44 7,89**
Garrulus glandarius 0,565** 0,607** 0,608** 0,60 15,16***
Pica pica - -
TEAM PRAM CARB CHER CCLT TRAD TRJV CONF PLNF R2 F
Especies sureñas
Hippolais polyglotta 0,378 0,426* 0,453* 0,38 6,17**
Regulus ignicapillus -0,251 0,662*** 0,537** 0,633** 0,330 0,84 33,68***
Saxicola torquata 0,432* -0,405* -0,589** -0,467* 0,50 9,82**
Certhia brachydactyla 0,246 -0,331 0,704*** 0,489* 0,69 14,35***
Miliaria calandra -0,681** -0,459* 0,865*** 0,75 62,14***
Emberiza cirlus -0,478* 0,23 6,22*
Serinus serinus 0,406* -0,300 0,407* 0,58 8,90***
Phylloscopus bonelli - -
Cettia cetti 0,489* 0,24 6,60*
Cisticola juncidis 0,471* 0,562* 0,43 7,67**
Petronia petronia 0,561** 0,598** 0,36 11,99**
DENSIDAD 0,580** 0,627** 0,449* 0,57 13,21***
RIQUEZA (s) 0,480* 0,23 6,23*
Tabla 1. Correlaciones parciales entre la abundancia de especies y las variables ambientales estudiadas durante la primavera. Se subrayan las variables ambientales seleccionadas en el análisis
de regresión múltiple por pasos. También se muestran los coeficientes de determinación (R2) y los resultados del análisis de la varianza.
* p<0.05, ** p<0.01, *** p<0.001. TEAM: temperatura media anual; PRAM: precipitación media anual; CARB: cobertura de arbustos; CHER: cobertura herbácea; CCLT: cobertura de
cultivos; TRAD: densidad de troncos de >30 cm de diámetro; TRJV: densidad de troncos de <30 cm de diámetro; CONF: cobertura de coníferas; PLNF: cobertura de planifolios.
[Partial correlations between species abundance and each environmental variable in spring. Environmental variables selected in a stepwise multiple regression analysis are underlined. Also
EN EL PAÍS VASCO

coefficients of determination (R2) and analysis of variance are shown.

* p<0.05, ** p<0.01, *** p<0.001. TEAM: average annual temperature; PRAM: average annual rainfall; CARB: shrub coverage; CHER: grass coverage; CCLT: farmland coverage; TRAD: density
of trunks >30 cm diametre; TRJV: density of trunks <30 cm diametre; CONF: coniferous coverage; PLNF: broadleaves coverage.]

TEAM PRAM CARB CHER CCLT TRAD TRJV CONF PLNF R2 F


Especies norteñas
Anthus pratensis 0,551* 0,786*** 0,196 0,89 5,44*
Prunella modularis
Phylloscopus collybita 0,537* 0,29 6,09*
FACTORES DETERMINANTES DE LA DISTRIBUCIÓN DE LOS PASERIFORMES

Erithacus rubecula 0,665** 0,525** 0,150 0,69 9,59**


Turdus philomelos 0,647** 0,001 0,652** 0,86 27,71***
Turdus iliacus 0,418** 0,42 10,77**
Parus palustris - -
Pyrrhula pyrrhula -0,052 0,488* -0,093 0,75 13,15***
19
TEAM PRAM CARB CHER CCLT TRAD TRJV CONF PLNF R2 F 20
Especies paleárticas
Alauda arvensis -0,116 0,27 5,44*
Motacilla alba 0,579* 0,33 7,55*
Sylvia atricapilla 0,516* 0,27 5,44*
Turdus merula - -
Turdus viscivorus -0,460 0,060 0,288 0,56 5,51*
Aegithalos caudatus 0,651* 0,700** 0,49 14,42**
Parus ater 0,621** 0,891*** 0,79 58,01***
Parus major 0,526* 0,28 5,47*
Parus caeruleus 0,216 0,419 0,577 -0,227 0,491* 0,82 13,42***
Parus cristatus 0,658** 0,645** 0,43 11,47**
Sitta europaea -0,130 0,459 -0,158 0,471* 0,90 38,34***
Troglodytes troglodytes 0,484* 0,573* 0,382 0,61 6,89**
Fringilla coelebs - -
Carduelis carduelis - -
Carduelis chloris 0,652** 0,571* 0,43 11,12**
Carduelis cannabina -0,691** 0,829*** 0,69 33,03***
Garrulus glandarius -0,247 0,780*** 0,611** 0,75 21,49***
A. GALARZA

Pica pica - -
Especies sureñas
Regulus ignicapillus -0,103 0,620** 0,560* 0,80 17,18***
Saxicola torquata 0,146 0,471* 0,22 4,28*
Certhia brachydactyla 0,491* 0,24 4,78*
Miliaria calandra 0,815*** 0,66 29,63***
Emberiza cirlus 0,704** 0,50 14,71**
Serinus serinus - -
Cettia cettii - -
DENSIDAD 0,651** 0,075 0,61 11,12**
RIQUEZA (s) 0,550* 0,30 6,55*
Tabla 2. Correlaciones parciales entre la abundancia de especies y las variables ambientales estudiadas durante el invierno. Se subrayan las variables ambientales seleccionadas en el análisis
de regresión múltiple por pasos. También se muestran los coeficientes de determinación (R2) y los resultados del análisis de la varianza. Símbolos como en la tabla 1.
[Partial correlations between species abundance and each environmental variable in winter. Environmental variables selected in a stepwise multiple regression analysis are underlined. Also
coefficients of determination (R2) and analysis of variance are shown. Symbols as in table 1.]
FACTORES DETERMINANTES DE LA DISTRIBUCIÓN DE LOS PASERIFORMES
EN EL PAÍS VASCO 21

rencias forestales (60 %), rasgo que determina sin embargo, relaciones más dispares. La distri-
marcadamente la importancia de las variables bución de las especies sureñas parece depender
asociadas a la estructura del bosque. De las 378 durante la primavera de una combinación mayor
y 297 (9 variables para 42/33 especies respec- de factores ambientales. Resulta especialmen-
tivamente) correlaciones parciales posibles du- te llamativo el papel del clima como potencial
rante la primavera y el invierno respectivamente condicionante de su distribución (tienden a pre-
75 (19,8 %) y 34 (11,4 %) fueron significativas sentarse en los ambientes más secos y cálidos),
(p<0,05) (tablas 1 y 2). Sin embargo, esta dife- algo que no ocurre en las aves norteñas durante
rencia en el número de correlaciones no se aso- este período. Durante el invierno, por el contra-
ció a una pérdida en el poder explicativo de las rio, se invierten los términos al ser la climatolo-
variables utilizadas, dado que no se observaron gía (ocupación de los hábitats más térmicos) el
diferencias en el coeficiente de determinación principal factor asociado a la distribución de las
medio (R2) entre la primavera (0,417) y el invier- aves norteñas.
no (0,424) (z=0,1181; p=0,9060, test de la U de
Finalmente, puede verse cómo tanto la den-
Mann-Whitney). La varianza media explicada
sidad como la diversidad de las comunidades
por estos modelos fue alta si se la compara con
de aves estudiadas se asocian positivamente a
los resultados obtenidos por el mismo procedi-
la densidad del arbolado durante la primavera,
miento en estudios realizados a pequeña escala
mientras que durante el invierno dependen de
(Morrison et al., 1987) y equivalente a la obte-
nida en primavera para las aves forestales de la la distribución de las temperaturas (tablas 1 y
Península Ibérica (Tellería & Santos, 1994). En 2). Esto coincide con el cambio estacional del
consecuencia, la modelización de la distribución protagonismo del clima y la estructura del arbo-
de las especies en el área de estudio mediante las lado sobre las aves observado a nivel específico
variables encartadas parece ser satisfactoria, en (tabla 3).
especial si consideramos la previsiblemente di-
fícil modelización de la distribución de las aves
durante el invierno, período en el que están suje- Discusión
tas a movimientos interhábitats e interregionales
a menudo impredecibles. La distribución de la avifauna es un fenóme-
no complejo, resultado de multitud de factores
En lo que concierne al cambio estacional en ambientales, que ha merecido la atención de
la importancia de los diferentes factores ambien- numerosos autores (ver Wiens, 1989 y Brown,
tales determinantes de la distribución, se observa 1995 para una revisión). Para poder interpretar
que hay un significativo protagonismo de los di- las diferencias de opinión existentes a la hora de
ferentes grupos de variables analizadas (tabla 3). determinar la importancia de los diferentes fac-
Durante el invierno, las variables climáticas ad- tores ambientales sobre la distribución de la avi-
quieren un protagonismo relativo mayor, mien- fauna, se ha sugerido que los factores climáticos
tras que las fisonómicas reducen su influencia tienen una mayor influencia cuando se estudia la
durante este período.
distribución de las aves a gran escala mientras
En lo referente al comportamiento de los que su valor predictivo disminuye al plantearse
diferentes grupos biogeográficos, se observa el análisis en un marco geográfico más regional
que en ambas épocas del año son los factores (Myers & Giller, 1988). En el presente trabajo, el
descriptivos de la estructura y composición flo- grado de asociación que muestran las diferentes
rística del arbolado los principales determinan- variables ambientales con la distribución de las
tes de la distribución de las especies paleárticas abundancias de las aves no es uniforme. Sin em-
(tabla 4). Las aves norteñas y sureñas presentan, bargo, ninguna de estas variables aparece como
22 A. GALARZA

Primavera Invierno χ2 parcial


Climáticas 8 (10 %) 7 (20 %) 3,63
Paisajísticas 23 (31 %) 12 (35 %) 0,46
Fisonómicas 29 (39 %) 8 (24 %) 7,56
Florísticas 15 (29 %) 7 (21 %) 0,02
TOTAL 75 (100 %) 34 (100 %) 11,67 (p=0,0086)
Tabla 3. Diferencias en la distribución de las correlaciones parciales significativas entre grupos de variables en primavera e invierno.
Se incluye también el resultado de un test de la χ2.
[Differences in distribution of significant partial correlations among groups of variables in spring and winter. The result of a χ2 test is
also included.]

Norteñas Paleárticas Sureñas


Climáticas 0/20 (0,0 %) 3/42 (7,1 %) 5/22 (22,7 %)
Paisajísticas 4/30 (13,3 %) 10/63 (15,9 %) 9/33 (27,3 %)
Primavera
Fisonómicas 6/20 (30,0 %) 18/42 (42,9 %) 5/22 (22,7 %)
Florísticas 3/20 (15,0 %) 9/42 (21,5 %) 3/22 (13,6 %)
Climáticas 4/16 (25,0 %) 3/36 (8,3 %) 0/14 (0,0 %)
Paisajísticas 4/24 (16,7 %) 5/54 (9,3 %) 3/21 (14,3 %)
Invierno
Fisonómicas 1/16 (6,3 %) 6/36 (16,7 %) 2/14 (14,3 %)
Florísticas 0/16 (0,0 %) 6/36 (16,7 %) 1/14 (7,1 %)
Tabla 4. Distribución de las correlaciones parciales significativas (numerador) sobre el total de correlaciones posibles
(denominador) entre los grupos de variables y los tres grupos biogeográficos de aves, en primavera e invierno. Se expresa entre
paréntesis el porcentaje de correlaciones significativas.
[Distribution of significant partial correlations (numerator) over all posible correlations (denominator) among variables and
biogeographical groups, in spring and winter. In brackets, percentage of significant correlations.]

dominante o explica de forma exclusiva esta dis- La tendencia contraria que muestra esta asocia-
tribución, tal y como también se ha observado en ción en el presente trabajo puede estar causada
la distribución de los paseriformes forestales a lo por la menor riqueza que muestran los hábitats
largo de la Península Ibérica (Tellería & Santos, deforestados. La capacidad predictiva de las va-
1994). riables fisonómicas sobre la distribución de las
El marcado carácter forestal del territorio y especies se reduce significativamente durante el
de su avifauna parece ser el principal determi- invierno, debido al abandono del área de estudio
nante de que las variables fisonómicas y florís- de especies relacionadas con los espacios abier-
ticas adquieran un relevante protagonismo, en tos y a una mayor ubicuidad de las especies de
especial durante la primavera. La componente carácter forestal, muchas de las cuales pasan a
florística predice de forma preferente la distribu- depender de las campiñas atlánticas y los culti-
ción de las especies de distribución biogeográ- vos mediterráneos durante este período en el que
fica amplia, aunque no se observan preferencias las aves se comportan de modo menos selecti-
florísticas significativas entre los distintos gru- vo (Alatalo, 1981; Bilcke, 1984). Asimismo, la
pos. La relación negativa entre la riqueza de las marcada dicotomía estructural que se produce
comunidades de aves y la densidad de troncos entre los medios forestales y los espacios abier-
resulta una característica típica de los medios fo- tos determina el alto poder predictivo que mues-
restales durante la primavera (James & Wamer, tran también las variables paisajísticas durante
1982; Swift et al., 1984; Tellería et al., 1992). ambos períodos.
FACTORES DETERMINANTES DE LA DISTRIBUCIÓN DE LOS PASERIFORMES
EN EL PAÍS VASCO 23

El clima adquiere un alto protagonismo a demuestran, por lo menos a la escala de nuestro


la hora de explicar la distribución de las aves estudio, la inadecuación de proponer un único
en ambas épocas del año. Pese a la ya comen- grupo de variables ambientales como determi-
tada común interpretación de otorgar al clima nante básico de la distribución de las aves.
un elevado valor predictivo a grandes escalas
geográficas (Myers & Giller, 1988; Root, 1988a
y 1988b), los resultados de este trabajo indican
Referencias
que los factores climáticos pueden tener una gran
importancia a pequeña escala, especialmente si ALATALO, R. V. 1981. Habitat selection of forest
la variabilidad climática de la región estudiada birds in a seasonal environment in Finland. An-
es grande. Durante la primavera, las variables nales Zoologici Fennici, 18: 103-114.
climáticas se asocian positivamente con especies BILCKE, G. 1984. Seasonal changes in habitat use of
que ocupan espacios abiertos, especies de ca- resident passerines. Ardea, 72: 95-99.
rácter mediterráneo, que han visto favorecida su BLONDEL, J. 1985. Historical and ecological eviden-
área de distribución por el incremento histórico ce on the development of Mediterranean avifau-
de las superficies agrícolas y el atemperamiento nas. Proceedings XVIII International Congress
general del clima. Como cabría esperar, la capa- Ornithology Moscow, 2: 373-386.
cidad predictora de la temperatura aumenta en BROWN, J. H. 1984. On the relationships between
invierno, dada su relación con la disponibilidad abundance and distribution of species. Ameri-
trófica (Newton, 1981). El endurecimiento in- can Nauralist, 124: 255-279.
vernal de las condiciones climáticas en el piso BROWN, J. H. (1995). Macroecology. University
montano de la región eurosiberiana y en el piso Chicago Press. Chicago.
supramediterráneo (Santos & Tellería, 1985; Or-
GASTON, K. J. 1994. Rarity. Chapman and Hall.
tubay, 1994), trae como consecuencia el aban- London.
dono masivo de la avifauna y una importante
HILDEN, O. 1965. Habitat selection in birds. Annales
reducción de la diversidad, más manifiesta en
Zoologici Fennici, 2: 53-75.
los medios forestales, medios que mantienen al-
tos valores de abundancia y diversidad durante JAMES, F. C. & WAMER, N. O. 1982. Relationships
between temperate forest bird communities and
la primavera. Por el contrario, en los espacios
vegetation structure. Ecology, 63: 159-171.
abiertos del tramo costero (Tellería, 1983; Telle-
ría & Santos, 1982 y 1985; Tellería et al., 1988) MOREAU, R. E. 1954. The main vicissitudes of the
y también en la Depresión del Ebro se producen European avifauna during the Pliocene. Ibis, 96:
411-431.
importantes concentraciones de aves invernantes
debido al mantenimiento de la actividad vege- MORRISON, M. L.; TIMOSSI, I. C. & WITH, K. A.
tativa y la actividad de los artrópodos en estos 1987. Development and testing of linear re-
sectores más atemperados. La temperatura re- gression models predicting bird-habitat rela-
tionships. Journal of Wildlife Management, 51:
sulta, además, la variable que mejor predice la
247-253.
distribución de la abundancia y la riqueza de las
comunidades en el País Vasco. MYERS, A. A. & GILLER, P. S. 1988. Introduction.
En Myers, A. A. & Giller, P. S. (eds.): Analytical
En conclusión, la distribución de la avifauna Biogeography, pp. 15-21. Chapman and Hall.
en el País Vasco parece venir condicionada por London.
una gran variedad de factores ambientales. Ello NEWTON, I. 1981. The role of food in limiting bird
es reflejo probable del amplio rango de variación numbers. En Klomp, H. & Wolderdrop, J. W.
del clima y la estructura de la vegetación a lo (eds.): The integrated study of bird populations,
largo de este territorio. Los resultados obtenidos pp. 11-30. Amsterdam.
24 A. GALARZA

ORTUBAY, A. 1994. Relación clima-vegetación en TELLERÍA, J. L. 1987. Biogeografía de la avifauna


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cias Naturales), 35: 93-100. associations and community structure of birds
in shrubsteppe environments. Ecology Mono-
graphs, 51: 21-41.
TENDENCIAS POBLACIONALES RECIENTES
DE LA AVIFAUNA DEL PAÍS VASCO Y DE NAVARRA,
SEGÚN LAS VARIACIONES DE SU DISTRIBUCIÓN

JOSÉ MARÍA FERNÁNDEZ & JOSÉ ANTONIO GAINZARAIN

Instituto Alavés de la Naturaleza • Apartado de correos 2.092. 01080 Vitoria


ian-ani@terra.es

Resumen
Se analizan las variaciones experimentadas por la distribución de las poblaciones de aves del
País Vasco y de Navarra entre los periodos 1982-1984 y 1998-2001, según los respectivos atlas
ornitológicos en cuadrículas UTM de 100 km2. Previa corrección independiente de las series de
datos para el aumento del esfuerzo de muestreo, se comprobó cómo el grupo de las aves ligadas
a agrosistemas y las migradoras transaharianas habrían tenido un comportamiento desfavorable,
en relación con otras tipologías ecológicas y migratológicas. Buena parte de los procesos im-
plicados en estos cambios podrían estar operando a una escala muy amplia. Aunque este tipo de
análisis resultan útiles, desde el punto de vista aplicado, para evaluar el estado de conservación
de las poblaciones, es necesario insistir en el requisito de la estandarización del esfuerzo para
asegurar la comparabilidad.
Palabras clave: avifauna, tendencias, distribución, estado de conservación, País Vasco, Nava-
rra.

Summary
Recent bird population trends for the Basque Country and Navarra, evaluated through range
variations
We analyzed range variations for bird populations in the Basque Country and Navarra between
1982-1984 and 1998-2001, as shown by ornithological atlases using UTM 100 km2 grid. Once
that both independent data sets were corrected regarding increasing sampling effort, we ob-
served how farmland and long distance migrating birds were having an unfavourable status,
relative to other ecological and migratological types. Many of the responsible processes could
be operating on large scale. Although this kind of analysis is quite useful from an applied point
of view, it is necessary to stress the standardization of sampling efforts as a requisite to allow
comparability.
Key words: birds, trends, distribution, conservation status, Basque Country, Navarra.

Laburpena
Euskadi eta Nafarroako hegazti populazioen azken tendentziak, atlas erregionaletako datuetatik
abiatuta
1982-1984 eta 1998-2001 epealdietan Euskadi eta Nafarroako hegazti populazioen banaketak
izan dituen aldakuntzak aztertzen dira, 100 km2-ko kuadrikuletan oinarrituriko lurraldeko atlas
ornitologikoak aintzat hartuz. Laginketa ahalegina handitzeko datu serieak independienteki
zuzendu ostean, nekazal sistema eta migratzaile transahariarrek osaturiko multzoak jokabide
26 J.M. FERNÁNDEZ & J.A. GAINZARAIN

desfaboragarria izango luketela ikusi zen, beti ere beste tipologi ekologiko eta migratzaileekin
alderatuz. Aldakuntza hauekin loturiko prozesuen zati handi bat eskala handi batean jarduten
egongo litzateke. Nahiz eta aplikagarriak diren ikuspuntutik begiratuz gero, era hontako anali-
siak populazioen kontserbazio-egoera ebaluatzeko baliagarriak suertatzen diren, beharrezkoa da
konparabilitatea bermatzeko esfortzuen estandarizarioaren baldintza behin eta berriz kontutan
hartzea.
Hitz gakoak: abifauna, tendentziak, banaketa, kontserbazio-egoera, Euskadi, Nafarroa.

Atlas de aves y cartografiado Estado de conservación


de su distribución y seguimiento de poblaciones

En España, los primeros trabajos para des- La monitorización de poblaciones de aves


cribir la distribución de las especies de aves em- se ha convertido, en las últimas décadas, en una
pleando la metodología “atlas” se realizaron, a de las temáticas más recurrentes de la Ornitolo-
partir de los años 70 del siglo XX, en ámbitos gía aplicada, y se están dedicando considerables
regionales. El primer atlas ornitológico publica- esfuerzos al desarrollo de protocolos eficaces y
do fue el de La Rioja (De Juana, 1980), al que si- fiables para ello. El conocimiento de los cambios
guieron los de Cataluña (Muntaner et al., 1983), en las poblaciones y de las tendencias a largo
Galicia (López & Guitián, 1983), País Vasco (Ál- plazo se consideran herramientas principales
varez et al., 1985) y Navarra (Elósegui, 1985). para la evaluación de su estado de conservación
Con excepción del primero, empleaban la malla y para la gestión (Sutherland, 2000). Además,
UTM de 100 km2 para expresar sus resultados. las poblaciones de aves se vienen utilizando ya
como indicadores de cambio ambiental global,
Entretanto, el proyecto de un atlas ornitológico
más a causa de su facilidad de detección y cuan-
nacional había sido iniciado en 1975 (Purroy,
tificación, y a la amplitud de los conocimientos
1975). En este caso, la recolección de datos se
disponibles sobre su ecología, que al cumpli-
verificó sobre unidades del Mapa Topográfico
miento de las condiciones estrictas que deben
Nacional, que comprende 1.073 cuadrículas
satisfacer idealmente los indicadores ambienta-
de 26-30 x 18,5 km cada una. La información
les (Gregory & Vorisek, 2003).
aportada por observadores voluntarios fue reco-
gida durante un extenso periodo de 20 años, y Con el fin de describir el estado de conser-
finalmente este trabajo vio la luz (Purroy, 1997) vación de las poblaciones de aves en España, De
convirtiéndose en una referencia para la ornito- Juana (2004) ensaya el análisis de los cambios
logía ibérica. acaecidos entre sucesivas listas rojas, pero este
es un ejercicio extremadamente sensible a las
En el marco de la iniciativa Inventario de percepciones de los ornitólogos redactores de
hábitats y taxones del Ministerio de Medio Am- cada una. Los programas actuales de monitoriza-
biente, SEO/Birdlife comenzó el desarrollo de ción se aprovechan del desarrollo de las técnicas
un nuevo atlas ornitológico español en 1997. En de censo de poblaciones de aves para conseguir
este caso, el trabajo de campo para la recogida de información a largo plazo sobre su evolución, a
citas se verificó fundamentalmente entre 1998 y escala regional, nacional o incluso continental.
2001, y se utilizaron las 5.571 cuadrículas UTM Estos programas, frecuentemente basados en la
de 100 km2. El resultante Atlas de las aves repro- aportación de voluntarios, son diseñados para
ductoras (Martí & Del Moral, 2003) proporciona recoger de manera estandarizada las variacio-
una completa y actualizada imagen de la distri- nes espaciales y temporales en la distribución y
bución de las especies de aves en España. la abundancia de las poblaciones, y deben tener
TENDENCIAS POBLACIONALES RECIENTES DE LA AVIFAUNA DEL PAÍS VASCO Y DE NAVARRA,
SEGÚN LAS VARIACIONES DE SU DISTRIBUCIÓN 27

objetivos definidos (Gilbert et al., 1998). En vasco y navarro (tabla 1) aconsejaron tratar sus
España en su conjunto, los programas de segui- datos por separado. En segundo, el hecho de que
miento operativos (además de los dedicados a en los atlas antiguos no se prospectaran los terre-
unas pocas especies amenazadas o cinegéticas) nos no pertenecientes a la Comunidad Autóno-
son los censos de aves acuáticas invernantes, las ma Vasca o a Navarra en cuadrículas periféricas,
estaciones de anillamiento de esfuerzo constante obligó a buscar un umbral de superficie a partir
y el seguimiento de aves comunes reproductoras del cual no se apreciase influencia de ésta sobre
(SACRE), que desarrolla índices poblacionales la riqueza media. La relación entre la superficie
anuales a partir de una red de estaciones de escu- de la cuadrícula y el coeficiente de determina-
cha repartida por cuadrículas UTM de 100 km2. ción (R2) de la superficie sobre la riqueza media
No obstante, el SACRE -promovido por SEO/ muestra que un umbral del 30 % puede ser un
Birdlife- comenzó a suministrar datos a partir de criterio razonable para la admisión de datos en
1997, y aún debe incrementar su cobertura y su el análisis (figura 2). Las cuadrículas con da-
alcance temporal para poder detectar tendencias tos finalmente consideradas para el País Vasco
fiables a largo plazo (Del Moral et al., 2002). y Navarra se reflejan en la figura 3. También
se excluyeron unas pocas especies amenazadas,
¿Cuáles han sido, por tanto, las tendencias
cuya distribución no había sido presentada en
recientes experimentadas por las poblaciones de
los atlas antiguos en cuadrículas UTM de 100
aves? En este artículo se emplea una aproxima-
km2, así como todos aquellos registros que no
ción complementaria, analizando las distribucio-
nes de las especies a principios de los años 80 y hubieran correspondido a los periodos básicos
a finales de los 90 del siglo XX, expresadas en de muestreo.
dos atlas regionales disponibles (País Vasco y El hecho de que la identidad de los obser-
Navarra) y en el nuevo atlas nacional. Aunque vadores y su número hayan variado entre los
tampoco sea un ejercicio exento de limitaciones, atlas antiguos y el moderno, así como que las
conviene aprovechar una oportunidad de este posibilidades de locomoción y el conocimiento
tipo para contribuir al conocimiento objetivo geográfico y ornitológico del territorio se hayan
del estado de conservación de las poblaciones incrementado en este lapso de 15 años, han debi-
de aves (Donald & Fuller, 1998). do contribuir a una mejora general de la “cober-
tura”, expresada teóricamente como la propor-
ción de especies detectadas sobre el listado ideal
Comparación de las series o potencial. Como para los atlas antiguos no se
de datos conoce el esfuerzo de muestreo (en términos de
horas de trabajo de campo por cuadrícula, por
El trabajo de campo para los atlas ornitoló- ejemplo), las posibilidades de estandarización
gicos del País Vasco (Álvarez et al., 1985) y de se reducen al uso del volumen de datos en cada
Navarra (Elósegui, 1985) se realizó, en ambos serie (tabla 1). Este tipo de factor de corrección
casos, entre 1982 y 1984. Por su parte, el atlas ha sido aplicado por Robbins et al. (1989) para
español recogió datos durante el periodo 1998- la detección de variaciones en la distribución
2001. Todos ellos utilizaron la misma unidad de aves a escala regional en Norteamérica, por
de muestreo, la cuadrícula UTM de 100 km2. Yeatman-Berthelot & Jarry (1995) para la eva-
Sin embargo, fue necesario realizar una serie de luación de tendencias en Francia, y por Gibbons
correcciones en las series de datos para permitir et al. (1993) para explorar la comparabilidad de
comparaciones. coberturas en Gran Bretaña e Irlanda.
En primer lugar, las diferencias en riqueza En realidad, este procedimiento tiene as-
media por cuadrícula existentes entre los atlas pectos discutibles, porque es necesario asumir
28 J.M. FERNÁNDEZ & J.A. GAINZARAIN

que no se ha producido incremento real de la se de nidificantes gregarios, muy detectables y


riqueza media. Ésta depende tanto del esfuerzo bien estudiados (anátidas y fochas, ardeidas y
de muestreo como de la diversidad de hábitats gaviotas); no se han empleado sus datos para el
en cada cuadrícula (Estrada et al., 2004), pero cálculo del factor de corrección.
aquí toda la variación detectada se atribuiría al Por último, se advierte que los incrementos
aumento de la cobertura. Además, es posible que de distribución de aquellas especies con repar-
éste no haya sido homogéneo entre especies. En tición “saturada” en el territorio no pueden ser
el caso más extremo, se han identificado una evaluados con este método. La significación
veintena de especies para las que es razonable estadística de las variaciones de distribución se
pensar que no está justificado el empleo de un exploró con las pruebas χ2, G y la corrección de
factor de corrección para la cobertura, al tratar- Williams (Fowler & Cohen, 1999).

Riqueza media (especies evaluadas) Factor de corrección (volumen de datos)


1982-1984 1998-2001
País Vasco 64,58 85,82 1,31
Navarra 82,78 91,29 1,09
Tabla 1. Riqueza media en cada atlas y factor de corrección aplicado a las series de datos antiguas para la variación de esfuerzo.
[Average richness in each atlas and correction factor for old data sets to cope with effort variation.]

Figura 1. Portadas del Atlas de los vertebrados continentales de Álava, Vizcaya y Guipúzcoa (Álvarez et al., 1985) y del Atlas de las
aves reproductoras de España (Martí & Del Moral, 2003).
[Covers of Atlas de los vertebrados continentales de Álava, Vizcaya y Guipúzcoa (Álvarez et al., 1985) and Atlas de las aves
reproductoras de España (Martí & Del Moral, 2003).
TENDENCIAS POBLACIONALES RECIENTES DE LA AVIFAUNA DEL PAÍS VASCO Y DE NAVARRA,
SEGÚN LAS VARIACIONES DE SU DISTRIBUCIÓN 29

Resultados R2
40
Se detectaron un total de 25 especies que
35
mostraron incremento areal tanto en el País Vas-
30
co como en Navarra: nuevos nidificantes durante
25
el periodo 1998-2001 o con aumento estadísti-
20
camente significativo de su distribución (tabla
15
2). De ellas, doce resultaron incorporaciones a
10
la avifauna nidificante del País Vasco y cinco a
la de Navarra. Entre las especies que exhibieron 5

los incrementos cuantitativamente más espec- 0


0 10 20 30 40 50 60 70 80 90
taculares figuran podicipédidos (somormujo la-
Umbral de superficie de cuadrícula
vanco Podiceps cristatus y zampullín común Ta-
chybaptus ruficollis), ardeidas (garza real Ardea Figura 2. Relación entre el umbral de superficie de cuadrícula
y el coeficiente de determinación (R2) de la superficie sobre
cinerea y garza imperial A. purpurea), cigüeña la riqueza media, tomando los datos del Atlas ornitológico de
blanca Ciconia ciconia, anátidas (ánade azulón Álava, Vizcaya y Guipúzcoa (Álvarez et al., 1985).
Anas platyrhynchos, ánade friso A. strepera), [Relationship between threshold of square surface and
coefficient of determination of square surface over average
rálidas (focha común Fulica atra, rascón eu- richness, using data from Atlas ornitológico de Álava, Vizcaya
ropeo Rallus aquaticus), limícolas (cigüeñuela y Guipúzcoa (Álvarez et al., 1985).]

común Himantopus himantopus, chorlitejo chi-


co Charadrius dubius), accipítridas (buitre leo-
nado Gyps fulvus, aguililla calzada Hieraaetus
pennatus), tórtola turca Streptopelia decaocto,
críalo Clamator glandarius, pícidos (pico menor
Dendrocopos minor, pico mediano D. medius)
y sílvidos (curruca cabecinegra Sylvia mela-
nocephala, curruca tomillera S. conspicillata).
En los casos de la tórtola turca y de la curruca
cabecinegra, estudios particulares documentan
igualmente el aumento de distribución experi-
mentado por sus poblaciones en el norte de la
Península Ibérica (Bernis et al., 1985; Pérez de
Ana, 1993). Figura 3. Cuadrículas UTM de 100 km2 del País Vasco y de
Navarra que han sido incluidas en el análisis de las distribuciones.
Varias de estas especies (acuáticas, cigüeña [Basque Country and Navarre UTM 100 km2 squares included
in analysis of distributions.]
blanca y buitre leonado) son objeto de censos
regulares, que señalan objetivamente el incre-
mento del tamaño de sus poblaciones repro-
de las especies abundantes y comunes. Sin em-
ductoras durante las dos últimas décadas. La
bargo, una hipótesis alternativa hace referencia
relación genérica entre abundancia regional y
al “efecto de muestreo”, ya que es probable que
distribución espacial, ampliamente descrita (p.
las especies abundantes sean fácilmente inventa-
ej. Gaston et al., 2000) apoyaría el uso de la mo-
riadas en un mayor número de localidades, y por
nitorización de la distribución de las especies
tanto su distribución parezca más extensa.
como técnica de seguimiento poblacional. Como
revisa Newton (2003), la base ecológica de esta El porcentaje de incremento areal está muy
relación se encontraría en la capacidad de ex- probablemente sobreestimado en especies de
plotar un amplio abanico de recursos por parte distribución dispersa, que usan hábitats margi-
30 J.M. FERNÁNDEZ & J.A. GAINZARAIN

nales, efímeros o con baja penetrabilidad, como Vasco para ambas especies se aproximó a 1, en
el chorlitejo chico, el rascón europeo, la curruca Navarra el aumento poblacional fue muy supe-
tomillera o los pícidos. La inventariación avi- rior (figura 4). Estas tasas diferenciales podrían
faunística en estas condiciones ha sido compa- estar asociadas a una mayor capacidad receptora
rativamente menos intensa, como lo prueba el de inmigrantes o a un incremento de la producti-
hecho de que, por ejemplo, la población alavesa vidad en poblaciones de muy pequeño tamaño,
de pico mediano no fuera descubierta hasta 1994 que se ralentizan a medida que influyen factores
(Arambarri & Rodríguez, 1996). denso-dependientes (como la competencia o la
Para muchas especies, el porcentaje de in- disponibilidad de lugares de nidificación), en
cremento areal experimentado en el País Vasco un patrón de crecimiento típico de poblaciones
ha sido netamente superior al de Navarra, lo que colonizadoras (Fernández et al., 1998; revisión
puede reflejar bien que la corrección genérica general en Newton, 1998).
efectuada para la gran variación del esfuerzo de El fenómeno puede reflejarse también en el
muestreo en el País Vasco resulta insuficiente grupo de 16 especies que mostraron porcentajes
con determinadas especies, bien una evolución de cambio positivo en ambos territorios (tabla
más positiva de las poblaciones en este territo- 3), aunque éste sólo resultara estadísticamente
rio. En algunas adecuadamente monitorizadas significativo en el País Vasco, con la excepción
–en las que se conoce por tanto el cambio real del aguilucho lagunero occidental Circus aero-
de sus poblaciones-, como las ya mencionadas ginosus, que presentó la evolución más incues-
cigüeña blanca y buitre leonado, el porcentaje tionablemente favorable. Se han incluido aquí
de incremento areal en el País Vasco ha sido, especies que, como el zampullín cuellinegro Po-
respectivamente, nueve y dos veces superior al diceps nigricollis, el avetoro común Botaurus
de Navarra. Mientras la razón entre el porcenta- stellaris y la avefría europea Vanellus vanellus,
je de incremento areal y poblacional en el País han experimentado una evolución favorable en
Navarra pero no se han incorporado todavía a la
avifauna nidificante del País Vasco.
1.800
Porcentaje de incremento poblacional

La explicación probable acerca de los porcen-


1.500
tajes de cambio más alejados entre ambos territo-
1.200 rios (milano real Milvus milvus, roquero solitario
Monticola solitarius, bisbita campestre Anthus
900
campestris) es de nuevo la sobreestimación en el
600 País Vasco. Como contraste, en el caso del mila-
300
no censos específicos realizados en 1994 y 2004
apuntaron tendencias de reducción o estabilidad
0
300 600 900 1.200 1.500 1.800 del tamaño de población (Cardiel, 2005).
Porcentaje de incremento areal
La única especie para la que se detectó una
País Vasco Navarra
tendencia negativa con significación estadística
Figura 4. Relación entre los porcentajes de incremento areal fue la tórtola europea Streptopelia turtur. No obs-
(entre 1982-1984 y 1998-2001) y de tamaño poblacional (entre tante, quince más mostraron porcentajes de cam-
1984 y 1999), para dos especies adecuadamente monitorizadas
bio desfavorables, incluyendo a sisón común Otis
en el País Vasco y Navarra: cigüeña blanca Ciconia ciconia y
buitre leonado Gyps fulvus. tetrax, ganga ortega Pterocles orientalis (ambas
[Relationship between percentages of range (1982-1984 to exclusivas de Navarra), escribano palustre Em-
1998-2001) and population increases (1984 to 1999) in two species
adequately monitored in the Basque Country and Navarre: White
beriza schoeniclus, currucas mosquitera Sylvia
Stork Ciconia ciconia and Griffon Vulture Gyps fulvus]. borin y zarcera S. communis, torcecuello Jynx
TENDENCIAS POBLACIONALES RECIENTES DE LA AVIFAUNA DEL PAÍS VASCO Y DE NAVARRA,
SEGÚN LAS VARIACIONES DE SU DISTRIBUCIÓN 31

torquilla, gorrión molinero Passer montanus, al- Phoenicurus phoenicurus), la hipótesis de la so-
caudón común Lanius senator y triguero Miliaria brestimación en el País Vasco –que enmascararía
calandra (tabla 4). una tendencia real negativa- es la más consistente
La grajilla Corvus monedula se apartó de ambos
Por último, para diez especies se constataron
patrones, ya que se detectó una reducción areal en
tendencias de distinto signo en cada una de las
el País Vasco pero no en Navarra.
zonas de estudio. En algunos casos, la explicación
podría radicar en una evolución divergente de las
respectivas poblaciones. Así, no es descartable Hábitats y comportamiento
que determinadas núcleos disjuntos (pirenaico y
migratorio
cantábrico de reyezuelo sencillo Regulus regulus,
costero y del valle del Ebro de carricero tordal Con el fin de explorar eventuales procesos
Acrocephalus arundinaceus) estén sometidos a genéricos asociados a la expansión o contracción
dinámicas diferentes. En otros (mochuelo europeo de las áreas de distribución, se procedió a agru-
Athene noctua, lechuza común Tyto alba, chota- par las especies caracterizadas anteriormente
cabras gris Caprimulgus europaeus, colirrojo real según tipo de hábitat de nidificación e identidad

PAÍS VASCO NAVARRA


1982-1984 1998-2001 % G 1982-1984 1998-2001 % G
AVES ACUÁTICAS
Anas platyrhynchos 17 61 359 0,01 51 83 150 0,05
Anas strepera 0 4 nueva 1 3 300 0,1
Anas clypeata 0 2 nueva 0 4 nueva
Aythya ferina 0 1 nueva 0 4 nueva
Tachybaptus ruficollis 6 30 382 0,01 19 40 193 0,05
Podiceps cristatus 0 15 nueva 6 22 367 0,01
Bubulcus ibis 0 2 nueva 0 3 nueva
Ardea cinerea 0 4 nueva 0 14 nueva
Ardea purpurea 0 4 nueva 10 19 190 0,1
Ciconia ciconia 1 15 1500 0,01 22 36 164 0,1
Fulica atra 6 27 450 0,01 16 29 181 0,1
Rallus aquaticus 6 21 267 0,05 16 35 201 0,05
Himantopus himantopus 0 1 nueva 3 16 533 0,01
Charadrius dubius 4 23 439 0,01 23 45 180 0,05
OTRAS ESPECIES
Gyps fulvus 9 32 356 0,01 30 44 147 0,1
Hieraaetus pennatus 12 55 350 0,01 55 94 157 0,01
Streptopelia decaocto 2 54 2061 0,01 1 83 7629 0,01
Clamator glandarius 0 2 nueva 11 31 259 0,01
Dendrocopos minor 10 69 527 0,01 10 39 358 0,01
Dendrocopos medius 1 6 458 0,1 1 7 643 0,05
Sylvia melanocephala 0 21 nueva 8 58 666 0,01
Sylvia conspicillata 0 3 nueva 16 31 178 0,1
Tabla 2. Especies con incremento areal simultáneo y estadísticamente significativo (o bien de nueva nidificación) en el País Vasco y
Navarra. Se indica el número de cuadrículasUTM de 100 km2 ocupadas en los atlas de 1982-1984 y de 1998-2001, el porcentaje de
incremento y su significación con el estadístico G.
[Species that showed a statistically significant range increase (or otherwise new breeders) both in the Basque Country and Navarre.
Number ot UTM 100 km2 squares occupied in 1982-1984 and 1998-2001 atlasses, percentage of increase and its significance with a
G test are shown.]
32 J.M. FERNÁNDEZ & J.A. GAINZARAIN

PAÍS VASCO NAVARRA


1982-1984 1998-2001 % G 1982-1984 1998-2001 % G
Milvus milvus 6 32 407 0,01 77 86 103 ns
Milvus migrans 38 80 161 0,01 90 106 108 ns
Circus aeruginosus 1 5 362 ns 8 34 391 0,01
Pernis apivorus 18 66 280 0,01 31 45 133 ns
Falco subbuteo 22 66 229 0,01 55 77 129 ns
Gallinula chloropus 27 69 195 0,01 66 73 102 ns
Asio otus 9 34 288 0,01 42 56 123 ns
Dendrocopos major 45 84 142 0,05 76 97 117 ns
Anthus campestris 10 30 229 0,01 62 73 108 ns
Monticola solitarius 2 19 725 0,01 20 24 110 ns
Sylvia undata 34 73 164 0,01 77 88 105 ns
Cisticola juncidis 30 64 163 0,05 50 69 127 ns
Loxia curvirostra 9 28 237 0,01 19 25 121 ns
Tabla 3. Especies con incremento areal en los dos ámbitos de estudio, pero con significación estadística sólo en uno de ellos.

[Species that showed range increase in both study areas, but only one statistically significant.]

PAÍS VASCO NAVARRA


1982-1984 1998-2001 % G 1982-1984 1998-2001 % G
Alectoris rufa 32 40 95 ns 82 80 90 ns
Coturnix coturnix 50 61 93 ns 105 100 88 ns
Streptopelia turtur 48 38 60 0,05 79 70 81 ns
Upupa epops 31 33 81 ns 77 78 93 ns
Jynx torquilla 65 82 96 ns 100 87 80 ns
Oenanthe hispanica 7 7 76 ns 54 53 90 ns
Sylvia borin 68 74 83 ns 96 87 83 ns
Sylvia communis 50 53 81 ns 77 71 85 ns
Lanius senator 12 9 57 ns 64 62 89 ns
Passer montanus 52 60 88 ns 76 73 88 ns
Emberiza schoeniclus 3 1 25 ns 5 2 37 ns
Emberiza cirlus 62 72 89 ns 99 102 95 ns
Emberiza calandra 55 61 85 ns 99 94 87 ns
Tabla 4. Especies con regresión areal o menor incremento del esperado en los dos ámbitos de estudio.
[Species that showed range decrease or a minor range increase than expected, in both study areas.]

PAÍS VASCO NAVARRA


1982-1984 1998-2001 % G 1982-1984 1998-2001 % G
AUMENTO
Podiceps nigricollis 0 0 0 4 nueva
Botaurus stellaris 0 0 1 6 600 0,05
Vanellus vanellus 0 0 1 6 551 0,1
DISMINUCIÓN
Otis tetrax 0 0 33 24 67 ns
Pterocles orientalis 0 0 37 30 75 ns
Acrocephalus
3 1 25 ns 0 0
schoenobaenus

Tabla 5. Especies presentes sólo en uno de los ámbitos de estudio, que mostraron variaciones areales.
[Species appearing in just one of the study areas, that showed range variation.]
TENDENCIAS POBLACIONALES RECIENTES DE LA AVIFAUNA DEL PAÍS VASCO Y DE NAVARRA,
SEGÚN LAS VARIACIONES DE SU DISTRIBUCIÓN 33

migratológica de la población reproductora. En plantaciones de pino insigne como hábitats su-


cuanto al hábitat, la clasificación se realizó con bóptimos (piquituerto Loxia curvirostra). Estos
base en los conocimientos sobre preferencias, medios ocupan más del 21 % de la superficie
descritos en el País Vasco (Galarza, 1996) y en el total del País Vasco, y aunque el manejo selví-
conjunto de España (Martí & Del Moral, 2003); cola exclusivamente orientado a la producción
la calificación migratológica se efectuó según de madera es poco compatible con el manteni-
Díaz et al. (1996) y Tellería et al. (1999), aunque miento de ornitocenosis maduras, típicas de los
en algunos casos existe incertidumbre acerca de robledales atlánticos originales, se ha producido
la caracterización de las poblaciones nidificantes su colonización por parte de las especies más
en País Vasco y Navarra. tolerantes (Carrascal & Tellería, 1990). La cu-
rruca mosquitera, vinculada a bosques densos
Los resultados se ofrecen en las figuras 6 y 7.
o abiertos pero principalmente caducifolios,
Se encontró que el signo de los cambios areales po-
escapa de este panorama exhibiendo tendencia
día depender del tipo de hábitat utilizado por cada
areal regresiva.
grupo de especies (χ2=54, p<0,01), y también de su
comportamiento migratorio (χ2=8,21, p<0,05). Las Las especies ligadas a pastizales y matorrales
especies vinculadas a agrosistemas y las migran- utilizan ambientes de escasa complejidad estructu-
tes de largo recorrido fueron las menos proclives a ral y volumen de vegetación, independientemente
mostrar áreas de distribución expansivas. de factores abióticos como la altitud o la integra-
ción de parches de ese tipo de hábitat en matrices
Sobre 20 especies propias de humedales,
agrícolas. La collalba rubia Oenanthe hispanica es
sólo dos habrían experimentado recesión areal
la única para la que se detectó recesión areal, si
en el periodo que va desde 1982-1984 a 1998-
bien cuantitativamente poco importante.
2001. Se trata del escribano palustre y del ca-
rricerín común Acrocephalus schoenobaenus, Por el contrario, en el grupo de especies de
ligados ambos a marismas costeras, hábitat que agrosistemas, el predominio es nítido para las
ha sufrido considerable reducción superficial que mostraron declives, con sólo bisbita cam-
y deterioro funcional en el País Vasco, tanto pestre y buitrón Cisticola juncidis en el sector fa-
en tiempos históricos como contemporáneos; vorable. Para la segunda especie se ha notificado
aproximadamente un 90 % de las marismas una posible tendencia histórica expansiva en el
costeras originales han sido transformadas en norte ibérico durante la segunda mitad del siglo
zonas agrícolas, urbanas, industriales o recrea- XX, pero también se han documentado procesos
tivas (Rivas & Cendrero, 1992). Por el contrario, de extinción y recolonización causados por olas
algunos humedales de interior han sido restau- de frío intensas (Galarza, 1993).
rados o adecuados para favorecer a las aves y
De acuerdo con la clasificación migratoló-
otros muchos construidos con fines agrícolas,
gica adoptada, un 60 % de las especies cuyas
proporcionando nuevas oportunidades para ar-
poblaciones se consideran migrantes de largo
deidas, zampullines, anátidas, fochas, cigüeñas
recorrido (fundamentalmente transaharianas) se
y aguilucho lagunero.
encontrarían en el sector desfavorable, frente a
En los ambientes forestales también son cla- un 25 % de sedentarias y ninguna de las migran-
ramente mayoritarias las especies con tendencia tes de corto recorrido (presaharianas o circunme-
favorable. Destacan a este respecto los pícidos ditérraneas, pero que en todo caso parecen aban-
(pico menor y pico picapinos Dendrocopos ma- donar la mitad norte ibérica fuera de la época de
jor), algunas rapaces (aguililla calzada, halcón cría). La asociación entre parámetros demográ-
abejero Pernis apivorus, milano negro Milvus ficos de poblaciones de aves que nidifican en
migrans) y paseriformes capaces de utilizar las Europa y determinados factores que operan en
34 J.M. FERNÁNDEZ & J.A. GAINZARAIN

sus áreas de invernada africanas, se ha puesto de ejes físicos que vertebran el NE peninsular, Pi-
manifiesto en diversas ocasiones. Así, se han po- rineo y valle del Ebro. Estrada et al. (2004) han
dido correlacionar los índices poblacionales de comparado las variaciones experimentadas por
algunos paseriformes (carricerín común, curru- la distribución de las poblaciones de aves entre
ca mosquitera, avión zapador Riparia riparia), los periodos 1981-1982 y 1999-2002, medidas
ardeidas (garza imperial) y cigüeña blanca con a través del porcentaje de cambio en cuadrículas
las precipitaciones anuales en el Africa subsa- UTM de 100 km2 respecto al primer atlas or-
hariana (Baillie & Peach, 1992; Newton, 1998). nitológico disponible (Muntaner et al., 1984) y
En otros casos, como el de la tórtola común, se controlando según el esfuerzo de muestreo.
ha acusado a la presión de captura ejercida en
De manera general y en términos relativos,
áreas de paso e invernada de ser responsable, en
el comportamiento desfavorable de las especies
parte, del deterioro de su estado de conservación
de agrosistemas, favorable de las forestales y de
(Rocha & Hidalgo, 2002).
matorrales, y muy favorable de las acuáticas, se-
rían fenómenos verificables a escala amplia. Por
tanto, los factores que operan sobre estas pobla-
¿Procesos globales ciones se presentarían de modo homogéneo en el
o procesos locales? conjunto, aunque también se pueda plantear la
hipótesis alternativa de una influencia ambien-
La aparición de variaciones en las poblacio-
tal más restringida geográficamente, pero cuyos
nes de aves se puede relacionar con el periodo
efectos repercuten en poblaciones aledañas a tra-
de tiempo observado, ya que en estudios pro-
vés de mecanismos de dispersión y migración
longados es más probable detectar fluctuaciones
entre ellas.
interanuales, tendencias a largo plazo e incluso
cambios en la ocupación de hábitats sucesio- En cualquier caso, previa corrección de los
nales que originan modificaciones en las áreas datos con el mismo criterio seguido en las series
de distribución, sin que se produzca aumento o del País Vasco y Navarra, se observa que para un
disminución global de éstas. Por otra parte, los 80 % de las especies incluidas en las tablas 2, 3
patrones de variación dependen también de la y 4 la tendencia descrita en Cataluña es de signo
escala espacial, de manera que la tendencia en idéntico. Algunos casos discrepantes podrían
una localidad o sector concreto puede estar go- corresponder a poblaciones que ciertamente han
bernada por factores locales, capaces de enmas- exhibido dinámicas diferenciadas: aumento en
carar otros de influencia más global (Newton, País Vasco-Navarra y estabilidad en Cataluña
1998; revisión de la hipótesis de los centros de (focha común, rascón europeo, curruca cabe-
abundancia por Sagarin et al., 2006). cinegra, gallineta común Gallinula chloropus
y curruca rabilarga Sylvia undata); aumento
En este análisis, la utilización de un criterio
en País Vasco-Navarra y regresión en Cataluña
exigente -coincidencia en cuanto al signo del
(críalo y curruca tomillera).
cambio manifestado para dos áreas geográficas
contiguas y de tamaño semejante, muestrea- También es posible apuntalar por esta vía la
das de forma independiente- avala con mayor fuerte distorsión originada por la sobreestima-
fiabilidad los resultados. Pero adicionalmente, ción de variaciones en el País Vasco, que ha im-
es posible comparar los patrones específicos o pedido constatar probables regresiones areales
grupales deducidos con los descritos en Cata- –a juzgar por los datos coincidentes de Navarra
luña, una región considerablemente mayor que y Cataluña- en especies a las que se prestó poca
cualquiera de las aquí estudiadas (38.500 km2) y atención durante los atlas de los años 80. Es el
situada en el extremo opuesto de los dos grandes caso de determinadas rapaces nocturnas (lechu-
TENDENCIAS POBLACIONALES RECIENTES DE LA AVIFAUNA DEL PAÍS VASCO Y DE NAVARRA,
SEGÚN LAS VARIACIONES DE SU DISTRIBUCIÓN 35

za común, mochuelo común) y paseriformes


forestales (colirrojo real, papamoscas cerrojillo
Ficedula hypoleuca), cuya detección puede exi-
gir esfuerzos específicos a causa de su menor
detectabilidad (hábitos nocturnos, baja densidad
y/o distribución agregada).
En definitiva, no es descartable que factores
de rango local jueguen un papel en la determi-
nación de tendencias para algunas especies. La
diferente incidencia espacial de ciclos de sequía,
presión cinegética e intervenciones directas para
protección en humedales, junto con las tasas de
superficies incendiadas, podrían explicar algunas
de las discrepancias descritas entre País Vasco-
Navarra y Cataluña, regiones ubicadas en extre-
mos opuestos de un gradiente de mediterraneidad
climática. Por ejemplo, las tres acuáticas que han
experimentado tendencias divergentes son rálidas,
familia integrada por especies con actitud disper-
siva poco acusada y menor movilidad que otras Figura 5. Focha común Fulica atra (foto: Nerea Ruiz de Azua).
acuáticas (Díaz et al., 1996), lo que quizá las haga [Coot Fulica atra]

más proclives a manifestar respuestas numéricas


ante fenómenos de alcance local.
La importancia relativa de algunos motores Los mecanismos genéticos o autoecológicos
globales de variación en la distribución de las que subyacen en las respuestas demográficas y
poblaciones de aves, como el cambio climático distributivas de las poblaciones no han sido,
y la intervención humana en los ecosistemas, es en general, suficientemente descritos, pero sí
objeto de debate; para cada caso específico, po- se cuenta con análisis de selección a escala de
cas veces se dispone de evidencias directas sobre paisaje, macro y microhábitat, y con modeliza-
causalidad (Newton, 2003). Aunque el cambio ciones sobre los efectos de determinados ma-
climático pasa por ser responsable principal de nejos en los hábitats. En agrosistemas ibéricos,
numerosas variaciones históricas, es más proba- por ejemplo, se ha establecido una clara relación
ble que la modificación de los hábitats, de los re- entre la disminución de la heterogeneidad pai-
cursos que éstos proporcionan o de la mortalidad sajística asociada a la intensificación agrícola y
por persecución generen tasas de cambio obser- al regadío, y la reducción de la diversidad or-
vables en periodos relativamente cortos (Sanz, nitocenótica (Díaz et al., 1993; Brotons et al.,
2002), como los utilizados en este estudio. En 2004). Las tendencias desfavorables en especies
todo caso, el desplazamiento de las áreas de dis- vinculadas a agrosistemas y estepas se vienen
tribución de las aves, una de las predicciones en denunciando tanto en la Península Ibérica (Del
el marco del cambio climático, puede verse di- Moral et al., 2002; Estrada et al., 2004) como en
ficultada o impedida por el deterioro y fragmen- el conjunto de Europa occidental (Siriwardena
et al., 1998).
tación de los hábitats (Moreno et al., 2005), con
consecuencias sinérgicas y desfavorables para el En cuanto a los sistemas forestales, se ha su-
estado de conservación de las poblaciones. gerido que la maduración de las masas arboladas
36 J.M. FERNÁNDEZ & J.A. GAINZARAIN

durante las últimas décadas, consecuencia de la en el tiempo y tendencia poblacional. Diversas


reducción del manejo selvícola por la bajada de evidencias teóricas y empíricas que asocian fre-
su rentabilidad económica, habría favorecido a cuencia y abundancia se encuentran en la base de
especies que seleccionan este rasgo, como los la moderna metodología cuantitativa de los atlas
pícidos. Los excedentes poblacionales habrían de distribución (Bart & Kloeisewski, 1989; Gib-
encontrado biotopos para colonizar en las nue- bons et al., 1993; Schmid et al., 1998), y éstos a
vas áreas forestales surgidas por abandono de su vez están convirtiéndose en una herramienta
tierras agrarias y evolución de sistemas de ma- fundamental para la identificación de presiones
torrales (Tellería, 2001). La comparación de los ambientales sobre las aves en Europa (Hustings
inventarios forestales disponibles para el País & Verger, 2002).
Vasco y Navarra confirma la maduración de
Sin embargo, la sensibilidad y el tamaño de
las masas forestales durante la última década
la unidad de muestreo son dos elementos clave.
(incremento de la proporción de pies en clases
En nuestras dos zonas de estudio, el empleo de
diamétricas superiores, tanto en coníferas como
cuadrículas de 100 km2 limitó las posibilidades
en frondosas; Villanueva, 2003). Por su parte,
de detectar variaciones poblacionales, porque
la formación de nuevas superficies boscosas se
incluso cambios de magnitud importante pudie-
habría ralentizado durante el mismo periodo,
ron quedar enmascarados. Esto se aplica parti-
tanto a escala regional como local, según datos
cularmente a paseriformes, con dominios vitales
de los propios inventarios forestales (Pardo et
mucho menores que la unidad de muestreo, y
al., 2003; D. Sáenz, com. pers.) y del progra-
que pueden experimentar variaciones no perci-
ma Corine Land Cover (European Environment
bidas mediante la representación convencional
Agency, 2005). La recesión de torcecuello y cu-
de su distribución (Pullin, 2002). Al contrario,
rruca zarcera permanece sin explicación clara,
las especies con dominios más amplios y las
aunque hipótesis no excluyentes las atribuyan a
más raras –precisamente aquellas cuya moni-
baja supervivencia en las áreas de invernada o
torización en programas anuales presenta más
a variaciones en las zonas abiertas periforesta-
dificultades- serían más proclives a ser vigiladas
les, campiñas arboladas y ecotonos, que ambas con este método.
utilizan preferentemente para la búsqueda de
recursos tróficos (Estrada et al., 2004). En este sentido, cuando se detecta una varia-
ción areal con significación estadística, posible-
mente haya tenido lugar un cambio poblacional
de entidad. O en otras palabras, convendría tener
Atlas ornitológicos en el marco
en cuenta las variaciones estadísticamente no sig-
de programas de seguimiento e nificativas, ya que pueden alertar sobre procesos
indicadores ambientales menos pronunciados o en estadios iniciales, pero
con relevancia para la conservación (Ceballos &
Robbins et al. (1989) y Rheinwald (2001)
Ehrlich, 2002).
comprobaron cómo los cambios de distribución
mostrados por datos de atlas se correlacionaban Una limitación fundamental en nuestro estu-
con cambios poblacionales derivados de censos dio ha sido la falta de estandarización del esfuer-
anuales, y por tanto eran útiles para monitori- zo de muestreo en los atlas. Para el del periodo
zar tendencias, al menos a escala local. Estos 1998-2001 se conoce el número de horas de
autores proponen diversos requisitos, como la prospección “principal” dedicadas por obser-
homogeneidad de la cobertura, para asegurar vador y cuadrícula, y se estimó que la riqueza
una relación adecuada entre la proporción de las media alcanzaba el 90-100 % del valor real, pero
unidades de muestreo con presencia de la espe- ambos datos son desconocidos en relación con
cie y su abundancia, y por tanto entre cambios los atlas de 1982-1984.
TENDENCIAS POBLACIONALES RECIENTES DE LA AVIFAUNA DEL PAÍS VASCO Y DE NAVARRA,
SEGÚN LAS VARIACIONES DE SU DISTRIBUCIÓN 37

Otro problema es la imposibilidad de de- tuación del País Vasco y Navarra, entre las regio-
tectar variaciones positivas en las especies más nes atlántica y mediterránea, puede influir en la
comunes, cuya distribución inicial –medida a sobreestimación del cambio areal para abubilla
través de la retícula UTM de 100 km2- abarcaba Upupa epops, collalba rubia y perdiz roja Alec-
la práctica totalidad de las áreas de estudio. La toris rufa. Otros procesos, como interacciones
metodología no es eficaz con este tipo de es- competitivas (entre los alopátricos estornino
pecies, que presentan una distribución saturada pinto Sturnus vulgaris y negro S. unicolor, por
a esta escala. Además, la existencia de barreras ejemplo) o saturación de hábitats disponibles
biogeográficas o ecológicas de tipo específico (chova piquirroja Pyrrhocorax pyrrhocorax)
dificulta la corrección de las distribuciones en también podrían distorsionar las tendencias dis-
función de las variaciones de cobertura. La si- tributivas observadas.

100% 100%
Porcentaje de especies

Porcentaje de especies

80% 80%

60% 60%

40% 40%

20% 20%

0% 0%
Humedales Bosques Matorrales Cultivos Otros Migrantes de Migrantes de Sedentarios
(n=20) (n=11) (n=5) (n=14) (n=4) largo recorrido corto recorrido (n=29)
(n=17) (n=8)
Tipos de hábitat
Tipología migratoria
Especies que aumentan más de lo esperado
Especies que disminuyen o aumentan menos de lo esperado Especies que aumentan más de lo esperado
Especies que disminuyen o aumentan menos de lo esperado

Figura 6. Porcentaje de especies con variaciones del mismo Figura 7. Porcentaje de especies con variaciones del
signo en ambas áreas de estudio, según tipos de hábitat de mismo signo en ambas áreas de estudio, según tipología
nidificación. migratológica.
[Percentage of species that showed either positive or negative [Percentage of species that showed either positive or negative
range variation in both study areas, in relation to breeding range variation in both study areas, in relation to migrating
habitats.] habits.]

Figura 8 .Cuando el dominio vital es


muy inferior al tamaño de la unidad de
muestreo, es posible que variaciones
importantes en el área de ocupación no
sean detectadas (tomado de Pullin, 2002).
[When territory size is much smaller than
sample units, the possibility of overlooking
relevant range variations arises (from
Pullin, 2002).]
38 J.M. FERNÁNDEZ & J.A. GAINZARAIN

En un contexto de preocupación ambiental tinentales de Álava, Vizcaya y Guipúzcoa (ex-


creciente, científicos, técnicos y políticos están cepto Chiroptera). Gobierno Vasco. Bilbao.
prestando atención a la evolución de las pobla- ARAMBARRI, R. & RODRÍGUEZ, A. F. 1996. Distri-
ciones de aves, a la búsqueda de indicadores de bución y estima poblacional del pico mediano
biodiversidad cuantitativos, simples y sensibles. (Dendrocopos medius) en Álava. Ardeola, 43:
No obstante, no son muchas las investigaciones 221-224.
empíricas que han analizado ventajas e inconve- BAILLIE, S. R. & PEACH, W. J. 1992. Population
nientes de las aves como grupo indicador (Gre- limitation in Palaearctic-African migrant pas-
gory et al., 2001). En el País Vasco, Ramírez serines. Ibis, 134: 120-132.
(2000) demostró que la riqueza de especies de
BART, J. & KLOEISEWSKI, S. P. 1989. Use of pre-
aves no siempre predecía adecuadamente la de sence-absence to measure changes in avian
otros taxones. Autores como Prendersgast & density. Journal of Wildlife Management, 53:
Eversham (1997) o Lawton (1996) –entre otros- 847-852.
mantienen que, a escala regional, las diferencias
BERNIS, F.; ASENSIO, B. & BENZAL, J. 1985. So-
en cuanto a requerimientos ecológicos mediati-
bre la expansión y ecología de la tórtola turca
zan las coincidencias de distribución entre gru-
(Streptopelia decaocto) con nuevos datos del
pos. A pesar de esto, la facilidad que otorgan las interior de España. Ardeola, 32: 279-294.
aves para cartografiar su distribución, aconseja
BROTONS, L.; MAÑOSA, S. & ESTRADA, J. 2004. Mo-
abordarla de manera rutinaria, mientras se desa-
delling the effects of irrigation schemes on the
rrollan criterios más elaborados.
distribution of steppe birds in Mediterranean
Pocos países europeos –Reino Unido y Ho- farmland. Biodiversity and Conservation, 13:
landa entre ellos- disponen de programas de 1.039-1.058.
seguimiento de aves sostenidos a largo plazo y CARDIEL, I. 2005. Resumen del II Censo nacional
bien organizados, capaces de alimentar sistemas de milano real. Inédito.
de indicadores políticamente relevantes. Se está
CARRASCAL, L. M. & TELLERÍA, J. L. 1990. Impac-
avanzando a buen ritmo en la confección de un in- tos de las repoblaciones de Pinus radiata sobre
dicador paneuropeo (Gregory & Vorisek, 2003). A la avifauna forestal del norte de España. Ardeo-
escala regional, en el País Vasco ya se han adopta- la, 37: 247-266.
do las tendencias de poblaciones de aves como un
CEBALLOS, G. & EHRLICH, P.R. 2002. Mammal po-
componente de los indicadores de biodiversidad
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LA RESTAURACIÓN DEL HUMEDAL DE SALBURUA:
CONSECUENCIAS SOBRE LA AVIFAUNA

LUIS LOBO

Centro de Estudios Ambientales. Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz


Casa de la Dehesa de Olarizu. 01006 Vitoria
llobo@vitoria-gasteiz.org

Resumen
Los humedales de Salburua se ubican en las cercanías de Vitoria (Álava). Su formación se debe
al afloramiento natural de un acuífero. Fueron desecados paulatinamente en actuaciones suce-
sivas, hasta que a mediados de los años 90 del siglo XX se inicia su restauración hidrológica
y ambiental, que aún está en curso. La zona constituye en la actualidad uno de los enclaves
avifaunísticos más relevantes de su entorno geográfico, especialmente en lo referente a aves
acuáticas. En este sentido, Salburua es el segundo lugar más importante de la CAPV para la
reproducción de este tipo de aves, y también acoge importantes contingentes migratorios e in-
vernantes. La presencia regular de muchas especies amenazadas remarca aún más su importancia
ornítica. La espectacular mejora ecológica de la zona durante la última década ha motivado su
designación como LIC y como sitio Ramsar.
Palabras clave: aves acuáticas, restauración, Salburua.

Summary
The restoration of Salburua wetlands: results for birds
Salburua wetlands lie to the outskirts of Vitoria (Álava). Their origin is associated with natural
outflows of an aquifer. The drying of these wetlands was undertaken successively, until mid
90’s, when hidrological and environmental restoration began, and still in course. Currently, the
area is regarded as one of the main ornithological sites in its region, specially referring to water-
birds. In this sense, Salburua is the second most important place for waterbird breeding, and also
holds relevant migrating and wintering numbers. Regular presence of many endangered species
stresses these aspects. Notable ecological improvement across the last decade has supported its
designation as SCI and Ramsar site.
Key words: waterbirds, restoration, Salburua.

Laburpena
Salburuaren hezegunearen errestaurazioa: hegaztientzako ondorioak
Salburuako hezeguneak Gasteizko (Araba) inguruan kokaturik daude. Bere sorrera akuifero na-
tural baten azaleratze naturalean dago. Etengabeko ekintzen bitartez apurka-apurka lehortu egin
ziren, aurreko mendearen 90. hamarkadaren erdialdean bere errestaurazio hidrologikoari eta eko-
logikoari ekin arte. Lehengoratze-lan horiek oraindik diraute. Gaur egun, hegaztien ikuspuntutik
Salburua bere inguru geografikoaren gune garrantzitsuenetarikoa da, bereziki uretako hegaztiei
dagokienez. Zentzu horretan, espezie horien ugalketari dagokionez, EAEko hezeguneen artean
Salburua bigarren postuan legoke. Era berean, hegazti migratzaile eta negutar kopuru handiak
jaso ohi ditu ere. Espezie mehatxatuen ohiko agerpenak Salburuak duen garrantzi ornitologikoa
nabarmentzen du. Azken hamarkadetan, hezegune honen hobekuntza ekologikoa ikusgarria izan
da eta, ondorioz, Garrantzi Komunitarioko Lekua (GKL) eta Ramsar lekua izendatua izan da.
Hitz gakoak: uretako hegaztiak, errestaurazioa, Salburua.
42 L. LOBO

Salburua: origen e historia antiguo los habitantes de la zona persiguieran la


desecación del espacio y su puesta en cultivo. En
Salburua es un complejo de varias lagunas 1857 la Diputación Foral de Álava lleva a cabo
que se encuentra situado lindando con el borde la primera actuación encaminada en este senti-
oriental de la ciudad de Vitoria. En este sector del do. A raíz de la instalación de la Granja Modelo
amplio valle de la Llanada Alavesa se ubica un de Arkaute se construye el denominado “Canal
importante acuífero, el más grande del País Vas- de la Balsa” que consigue drenar Larregana, la
co, cuyas aguas afloran precisamente en las lagu- laguna más septentrional del complejo. Con
nas de Salburua. Se trata, por tanto, de un sistema el paso de los años y la mejora de los medios
ecológico natural, sujeto a fuertes oscilaciones en tecnológicos (maquinaria pesada, etc.) se van
el nivel de sus aguas, que abarcan desde los perio- sucediendo diferentes actuaciones impactantes,
dos de estiaje, en que las lagunas pueden llegar a entre las que destacan modificaciones de cursos
secarse casi por completo, hasta los meses inver- de agua, tala de masas forestales, mejora de los
nales en que el nivel de inundación es máximo. sistemas de drenaje y rellenos de los vasos lagu-
La fauna y la flora del lugar están perfecta- nares para su uso urbano.
mente adaptadas a estos cambios estacionales, De este modo, a principios de los años no-
que también han sido secularmente aprovechados venta del siglo pasado el sistema lagunar ori-
por los lugareños de los pueblos colindantes para ginario se encontraba profundamente transfor-
acometer diferentes aprovechamientos. Así, los mado. Sus dos lagunas más orientales, balsas
habitantes de pueblos comarcanos como Zurbano, de Arkaute y Larregana, estaban desecadas y
Betoño, Elorriaga, Arkaute o de la propia ciudad roturadas, en su mayor parte para su puesta en
de Vitoria acudían a las lagunas en los meses in- cultivo, mientras la más occidental, la de Beto-
vernales para la caza de las aves acuáticas que se ño, había sido rellenada en una porción conside-
concentraban en gran número en el lugar, mien- rable para la instalación de un complejo depor-
tras los primaverales eran aprovechados para la tivo. Precisamente esta última se erigía como el
pesca de ranas, cangrejos y peces. A medida que, último vestigio palustre de Salburua donde so-
con la llegada del verano, las aguas iban retro- brevivían, a duras penas, los últimos retazos de
cediendo, en sus fértiles suelos se desarrollaban plantas y animales característicos de los medios
pastos aprovechados para alimentar al ganado. La húmedos de la zona. Tampoco los bosques se
leña y la madera de los extensos bosques -sobre libraron de esta dinámica destructora: de los ex-
todo robledales- que se desarrollaban a la vera del tensos robledales antaño existentes en Salburua
agua también fueron ampliamente utilizadas. sólo perduraba por esas fechas una pequeña
Sin lugar a dudas, antaño Salburua constituyó mancha al norte de Arkaute, y en las márgenes
uno de los complejos de lagunas más valiosos de de los ríos y acequias pervivían algunas riberas,
este sector del valle del Ebro. No hay que olvidar en general en precario estado de conservación.
que a la rica biodiversidad propia de cualquier El elenco de impactos ambientales no terminaba
humedal se une, en el caso de Salburua, su pecu- ahí, sino que se sucedía en forma de vertidos de
liar situación biogeográfica. A caballo entre las residuos, rellenos urbanísticos, furtivismo y un
regiones mediterránea y atlántica, en Salburua se largo etcétera.
dan cita plantas y animales de una y otra región,
Es entonces cuando desde el Centro de Es-
dotando al espacio de una singularidad ecológica
tudios Ambientales del Ayuntamiento de Vito-
muy destacable.
ria-Gasteiz se empieza a barajar la idea de aco-
Sin embargo, la secular percepción negativa meter un proyecto de restauración ambiental de
que se ha tenido de los medios palustres, unida a las lagunas de Salburua. El proyecto se enmarca
la fertilidad de sus suelos, motivaron que desde dentro de una visión más amplia de los espacios
LA RESTAURACIÓN DEL HUMEDAL DE SALBURUA:
CONSECUENCIAS SOBRE LA AVIFAUNA 43

Figura 1. Aspecto invernal de las balsas de Salburua (foto: Nerea Ruiz de Azua).
[Salburua lagoons in winter.]

cercanos a la periferia de Vitoria, con la idea de como embalses capaces de acoger un importante
dignificar estas zonas de borde urbano y posibi- volumen hídrico de los arroyos de la zona, que
litar una transición amable entre el medio rural y de otro modo contribuiría a los desbordamientos
la ciudad. Salburua se constituye así en el princi- que periódicamente se han venido produciendo
pal eslabón por el este de lo que se ha venido en en diversas zonas urbanas e industriales del en-
llamar “Anillo Verde de Vitoria”. torno de Salburua. En años posteriores se han
restaurado otras lagunas menores, de tal manera
Las actuaciones se iniciaron en la primavera
que a fecha de julio de 2006 la superficie inunda-
de 1995 con la anulación del drenaje existente en
ble en aguas altas ascendía a un total de 67 ha.
la balsa de Betoño, que posibilitó la restauración
de unas 37 hectáreas, el embrión del futuro par- La restauración, lógicamente, no se ha ceñi-
que. Hubo que esperar tres años más para aco- do exclusivamente a la reinundación de los es-
meter la regeneración ecológica de las lagunas pacios antiguamente ocupados por las lagunas.
más orientales, las balsas de Arkaute y Larre- También se deben destacar las repoblaciones
gana. En este caso, la potencialidad ambiental forestales con planta autóctona acometidas en
del espacio no fue el único argumento esgrimido 54 hectáreas de terrenos perimetrales a la zona
para su restauración, ya que este proyecto com- húmeda y en 1.300 metros lineales de setos ar-
binó este aspecto, puramente ecológico, con la bustivos. Es esta una línea de trabajo en la que se
lucha contra las inundaciones en el propio cas- va a seguir haciendo hincapié en años venideros,
co urbano de la ciudad de Vitoria. Así, en caso para intentar remedar la magnífica orla forestal
de avenidas extraordinarias, las lagunas actúan que contorneaba estos humedales.
44 L. LOBO

Por tanto, se debe destacar que el proyecto vaguardar de las molestias antrópicas las zonas
de Salburua no ha concluido aún y todavía resta centrales. Estas áreas ajenas a la influencia hu-
por actuar en una importante superficie de terre- mana actúan como refugios muy querenciosos
nos que pasarán a estar restaurados en el futuro. para la alimentación, el reposo y la reproducción
Se trata, sobre todo, de 14 ha situadas al norte del de muchas especies, incluidas las aves acuáticas.
espacio, que se han visto afectadas por diversas Este efecto de reserva es más acentuado en la
obras hidráulicas y de urbanización. En total, balsa de Arkaute, donde la existencia de un reba-
una vez consolidado el conjunto de las actua- ño de ciervos introducido para el manejo natural
ciones de restauración, el Parque de Salburua se de la vegetación palustre justifica la existencia
extenderá por una superficie de unas 215 ha. de un vallado que impide el acceso del público
hasta la orilla de la laguna.
Tampoco debe pasarse por alto la revitaliza-
ción que de forma natural han sufrido determi- Por último, se deben destacar los manejos
nados biotopos una vez que han mejorado las que se han venido llevando a cabo en diferentes
condiciones ambientales para su desarrollo. En biotopos para favorecer a distintas especies de
este sentido, destaca la espectacular expansión aves, principalmente acuáticas. En esta línea, se
que ha sufrido la formación de grandes cárices, han revestido islas con diferentes sustratos, se
una de las singularidades botánicas más relevan- han instalado islas flotantes, posaderos y nidos
tes y valiosas de Salburua y que ha dado lugar a artificiales y se han realizado algunos manejos
de vegetación (desbroces, etc).
la descripción de una nueva comunidad botánica
para la ciencia. El incremento de la humedad
edáfica motivado por la retención de las aguas El seguimiento de las aves
en las lagunas también ha permitido un incre-
mento de la superficie ocupada por los prados Desde el inicio de las tareas de restauración
juncales, en detrimento de los pastos mesófilos se han llevado a cabo importantes esfuerzos de
y los cultivos. cara a conocer las diferentes especies de aves
que visitan el espacio y su importancia numé-
Naturalmente, a medida que la superficie res-
rica. Así, se ha participado anualmente en los
taurada ha ido aumentando, lo ha ido haciendo censos coordinados para todo Álava en lo refe-
en paralelo su capacidad de acogida avifaunís- rente a aves acuáticas nidificantes e invernantes.
tica, sobre todo de aves acuáticas. Este aspecto Además, a partir de la restauración de la balsa
se desarrollará más adelante, pero sirva como de Arkaute en noviembre de 1998, se realizan
indicador de la mejora de la aptitud ecológica de conteos mensuales de este grupo de aves a lo
Salburua un dato: el desarrollo de orilla, es decir, largo de todo el año (Lobo, 2004).
la longitud de la interfase zona seca-zona inun-
dada, se quintuplica en el período 1995-2002. Aparte de los censos, se han registrado las
citas de aves recogidas en otro tipo de visitas,
A nadie se le escapa que teniendo en cuenta incluidas las correspondientes a los servicios de
la situación de los humedales de Salburua, a las guardería y atención al público del Parque y las
puertas de una ciudad de más de 200.000 habi- obtenidas por otros observadores fiables. Esto
tantes, el éxito en el asentamiento de especies supone que, incluso en los meses invernales, la
faunísticas sensibles a la presencia humana sólo media de visitas mensuales al espacio no des-
puede alcanzarse si se ordena y regula adecuada- ciende de quince. El verano, con la concurren-
mente el trasiego de los visitantes por el espacio. cia diaria de monitores, supone una frecuencia
Para ello, se ha abordado un diseño de sendas e de visita cercana al 100 % de los días. Queda
itinerarios totalmente periféricos a las lagunas de manifiesto, por tanto, el intenso seguimiento
principales, de tal manera que fuera posible sal- realizado a lo largo de todo el año.
LA RESTAURACIÓN DEL HUMEDAL DE SALBURUA:
CONSECUENCIAS SOBRE LA AVIFAUNA 45

Para el estudio de especies de baja detectabi- lagunas de Salburua. La reinundación de la Bal-


lidad visual o hábitos muy discretos o nocturnos sa de Betoño en 1995-1996 supone la aportación
se realizan escuchas todas las primaveras. Entre de 27 especies nuevas. Por su parte, en los dos
estas especies se encuentran las polluelas (género primeros años tras la regeneración ecológica
Porzana), avetorillo común Ixobrychus minutus, de la balsa de Arkaute se incorporan 63 nuevas
martinete común Nycticorax nycticorax, rapaces especies de aves al elenco de Salburua, lo cual
nocturnas y pico menor Dendrocopos minor. supone una tercera parte del total detectado en
Por último, el anillamiento ha sido otra de las el período de estudio. Queda en evidencia, por
herramientas usadas para conocer mejor la avi- tanto, la enorme repercusión que la recuperación
fauna de Salburua. Así, se han anillado pollos de de las láminas de agua ha tenido en el incremen-
cigüeñuela común Himantopus himantopus y de to de la capacidad de acogida avifaunística del
chorlitejo chico Charadrius dubius con anillas espacio.
metálicas y de PVC de lectura a distancia du-
Sin lugar a dudas, la importancia ornitoló-
rante las temporadas de cría de los años 2000 y
gica de Salburua reside fundamentalmente en
2001. A partir del verano de 2003 también se ha
aquellas especies que requieren para sus nece-
puesto en marcha una estación de anillamiento
sidades vitales de la existencia de ecosistemas
de paseriformes, especialmente dirigida a detec-
ligados al agua. Por este motivo, es este el grupo
tar la presencia del carricerín cejudo Acrocepha-
de aves en que mayor hincapié se va a realizar
lus paludicola en la zona.
a la hora de describir la comunidad ornitológica
del espacio.

Resultados ornitológicos: relación


de especies detectadas Aves acuáticas reproductoras
Hasta septiembre de 2005 se han registrado En la tabla 1 y figura 4 se recogen los resul-
en Salburua 202 especies de aves, de las cuales
tados del seguimiento de la comunidad de aves
el 43 % están ligadas a los medios húmedos (fi-
acuáticas que ha venido utilizando Salburua para
gura 2). Una parte importante, el 49 % (78 espe-
su reproducción. Analizando el numero de espe-
cies), usa este lugar para reproducirse. De ellas,
cies reproductoras se observa cómo a partir de
23 especies se pueden considerar directamente
la primavera de 1999, tras la recuperación de la
relacionadas con los humedales (Lobo, 2003).
balsa de Arkaute, el número aumenta progresi-
Comparando estos datos con los del primer infor-
vamente hasta situarse, durante los últimos años,
me faunístico de la zona (Lobo, 1995), que sólo
abarcaba la comunidad de aves reproductoras, entre 12 y 15 especies nidificantes.
se observa cómo se ha producido un incremento Destaca la nidificación de especies muy es-
de 54 a 78 especies reproductoras (+ 44 %) y se casas en el ámbito geográfico cercano, como
ha pasado de 7 especies nidificantes ligadas a los los porrones europeo Aythya ferina y moñudo
ambientes húmedos a 23 (+ 328 %). A. fuligula, cuchara común Anas clypeata, ána-
En la figura 3 se refleja el número de espe- de friso A. strepera) y garza real Ardea cinerea.
cies de aves presentes en Salburua a lo largo del Todas ellas manifiestan en los últimos años una
período de estudio, comprendiendo cada año clara tendencia a la estabilidad de su contingente
hidrológico los meses de octubre a septiembre reproductor (excepto en el caso del porrón mo-
(excepto 1995 que cubre de enero a septiembre). ñudo). El avetorillo común y el martinete común
Se observa cómo hay dos fechas claves, coinci- también se reproducen asiduamente en la zona,
dentes con la restauración de las dos principales en lo que constituye uno de los escasísimos pun-
46 L. LOBO

tos conocidos de cría en la Comunidad Autóno- Respecto a la abundancia del plantel repro-
ma del País Vasco (Martí & Del Moral, 2003a). ductor (figura 4) se constata cómo, tras la res-
tauración de la balsa de Betoño en el año 1995,
En la situación contraria se encuentra la
criaban en Salburua entre 10 y 14 parejas de
tendencia demográfica de algunas especies co-
acuáticas. Sin embargo, después de la restaura-
munes y abundantes como zampullín común Ta-
ción de la balsa de Arkaute en 1999, esta cifra
chybaptus ruficollis y focha común Fulica atra,
sufre un ascenso espectacular, y el contingente
sobre todo en la balsa de Arkaute (figura 5). A
oscila entre 150-250 parejas según los años.
pesar de que la espesura cada vez mayor de la
vegetación acuática pudiera estar influyendo en
la detectabilidad de los nidos, parece clara una
tendencia regresiva de estas especies, cuyas cau- Aves acuáticas invernantes
sas se desconocen.
Se han reflejado en la tabla 2 y figura 5 los da-
Más drástica es la pauta regresiva de la ci- tos referentes a las aves acuáticas que permanecen
güeñuela común que desaparece como reproduc- en Salburua durante el invierno y su importancia
tora en Salburua en el año 2003, tras un claro numérica. De nuevo se observa la gran influencia
declive poblacional desde el año 2000, aunque que ha tenido la restauración de las lagunas más
recoloniza la zona en 2005 (figura 5). Factores orientales. Así, hasta el invierno 1997-1998 se
como la escasa disponibilidad de alimento tras el registraban 7-8 especies invernantes, en número
lluvioso verano de 2002, la proliferación vegetal cercano a la centena de individuos, mientras en
en las islas de la balsa de Arkaute o las moles- los años sucesivos se ronda las 17-23 especies con
tias provocadas por los ciervos en sus zonas de cifras por encima de 1.000 y 1.900 ejemplares.
cría se barajan como posibles hipótesis de esta
situación. Salburua constituía el único punto
donde esta ave se reproducía en toda la Comu- Aves que usan Salburua
nidad Autónoma. Tendencia similar ha seguido
en sus migraciones
la población nidificante de chorlitejo chico, cuya
reproducción es irregular en las últimas tempo- Los movimientos migratorios permiten dis-
radas de cría. Esporádicamente, en Salburua se frutar de la presencia regular de todas las espe-
han reproducido otras especies de interés como cies esperables en estas latitudes, incluidas las
la cerceta carretona Anas querquedula. más raras o amenazadas.

n=202 n=78

Especies ligadas Reproductoras ligadas


al agua al agua
49% 30%

Especies no ligadas Reproductoras no ligadas


al agua al agua
51% 70%

Figura 2. Número de especies de aves detectadas en Salburua durante el periodo 1995-2005


(a la izquierda todas las especies, a la derecha sólo las reproductoras).
[Number of bird species recorded in Salburua for the period 1995-2005 (all kind of species to the left, only breeders to the right).]
LA RESTAURACIÓN DEL HUMEDAL DE SALBURUA:
CONSECUENCIAS SOBRE LA AVIFAUNA 47

220

200
202
196
180 188
185
180
174
160
Número de especies

140 152

120
104
96
100 111

80 69

60
41
40
27 22
20 8
8 7 6 5 3 6
0
0
1995

1995-1996

1996-1997

1997-1998

1998-1999

1999-2000

2000-2001

2001-2002

2002-2003

2003-2004

2004-2005
Años

Incremento anual Especies de aves

Figura 3. Evolución del número de especies de aves en Salburua.


[Trend in number of bird species recorded in Salburua.]

1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005
Anas platyrhynchos 4 1 3 3 19 35 24 26 63 44 53
Anas strepera - - - - - - 2 3 10 6 7
Anas querquedula - - - - - 1 - - - 2 2
Anas clypeata - - - - 3 3 4 1 4 5 5
Aythya ferina - - - - - - 1 2 12 10 12
Aythya fuligula - - - - - 1 5 4 5 3 -
Tachybaptus ruficollis 1 2 3 2 16 41 18 13 8 28 28
Podiceps cristatus - - - - - 1 - - 6 5 8
Ardea cinerea - - - - - - - 1 3 3 4
Ixobrychus minutus - - - - - 2 2 3 1 2 2
Nycticorax nyctycorax - - - - - 1 - - - 1 1
Rallus aquaticus 2 3 - 2 4 3 4 4 6 7 12
Gallinula chloropus 2 4 5 5 7 6 7 4 4 10 7
Fulica atra 1 4 3 2 67 152 84 78 67 124 79
Himantopus himantopus - - - - 13 59 32 22 - - 8
Charadrius dubius - - - - 2 12 7 - - 3 -
Número de especies 5 5 4 5 8 13 12 12 12 15 14
Total parejas 10 14 14 14 131 316 190 161 189 253 228

Tabla 1. Resultados de los censos de aves acuáticas nidificantes en Salburua, en número de parejas. Período 1995-2005.
[Number of pairs of waterbirds breeding in Salburua lagoons, for the period 1995-2005.]
48 L. LOBO

Dentro de las aves migratorias merece espe- cialmente beneficiadas por la restauración de los
cial atención el carricerín cejudo, ya que se trata humedales.
del único pequeño pájaro europeo amenazado
Para obtener una rápida visión de la impor-
de extinción a escala mundial (Tucker & Heath, tancia ornitológica de Salburua respecto a su en-
1994). Tras haber sido observado en Salburua du- torno geográfico, se han relacionado en la tabla
rante los últimos años en unas pocas ocasiones, en 3 el número de especies de aves presentes con
verano de 2003 se puso en marcha una estación las de la Comunidad Autónoma y España. Así,
de anillamiento centrada en las fechas preferentes en Salburua se han citado el 78 % de las especies
de paso de la especie. Por medio del anillamiento existentes en la Comunidad Autónoma del País
se perseguía confirmar su presencia y valorar la Vasco (Bea & Fernández de Mendiola, 1998) y
importancia de estos humedales para la especie. el 38 % respecto al total existente en España (De
Los resultados de la estación de anillamiento su- Juana, 1998). Estas cifras ponen de manifiesto la
peraron las previsiones más optimistas (Consul- gran importancia ornitológica del lugar, teniendo
tora de Recursos Naturales SL, 2005), ya que se en cuenta, además, que estos porcentajes serían
consiguieron capturar hasta el verano de 2005, todavía superiores si se segregasen de los lista-
35 carricerines cejudos (32 anillamientos, 2 auto- dos de referencia las especies ajenas al ámbito de
controles y una recuperación de un ave con anilla Salburua (alpinas, marinas, etc.).
francesa). Salburua se convierte así en el lugar
Centrando el análisis exclusivamente en las
de la Península Ibérica en que más ejemplares de aves acuáticas, se constata cómo, en el período
esta especie se capturan, tras la palentina laguna reproductor, el 75 % de las especies que crían en
de La Nava. Por tanto, gracias a este estudio, ha Álava también lo hacen en Salburua. Numéri-
quedado de manifiesto la querencia de tan discre- camente esto supone que, según los años, entre
ta y amenazada ave por estos humedales. una cuarta parte y la mitad del contingente alavés
Por último, entre las rarezas observadas en de aves acuáticas reproductoras cría en Salburua
estos años destacan una hembra de falaropo tri- (Fernández de Montoya & Nuevo, 1995-2005).
color Phalaropus tricolor el 19 de mayo de 1999, Además, en la zona nidifican especies poco ha-
una cerceta aliazul Anas discors el 18 de junio bituales en el ámbito peninsular como cuchara
del mismo año y un ansar piquicorto Anser bra- común o cerceta carretona. Otras especies rele-
vantes por su escasez en el entorno geográfico
chyrhynchus en varias ocasiones en noviembre de
del País Vasco son avetorillo común, martinete
2002. Otras especies menos extrañas han acumu-
común, garza real, ánade friso y porrón europeo.
lado algunos registros en la zona: avetoro común
Estos datos convierten a Salburua en el segun-
Botaurus stellaris, porrón pardo Aythya nyroca,
do lugar más importante para la reproducción de
tarros blanco Tadorna tadorna y canelo T. ferru-
aves acuáticas de la Comunidad Autónoma, tras
ginea o canastera común Glareola pratincola.
el embalse de Ullibarri-Gamboa.
La importancia de estos humedales para los
fenómenos migratorios es también muy elevada,
Valoración avifaunística
ya que hasta la fecha se han observado prácti-
de los humedales de Salburua camente todas las especies esperables en estas
Hasta septiembre de 2005, en Salburua se latitudes, incluyendo algunas en grave riesgo de
han registrado 202 especies de aves, de las cua- extinción.
les 98 están directamente relacionadas con los Por último, la mayor versatilidad de las aves
ecosistemas acuáticos en algún momento de su acuáticas a la hora de elegir lugares de invernada
ciclo fenológico y, por tanto, se han visto espe- provoca que la importancia de Salburua en este
LA RESTAURACIÓN DEL HUMEDAL DE SALBURUA:
CONSECUENCIAS SOBRE LA AVIFAUNA 49

1995- 1996- 1997- 1998- 1999- 2000- 2001- 2002- 2003- 2004-
1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005
Anser anser - - - 6 1 16 - 18 22 1
Anas penelope - 2 - 51 83 75 48 86 147 90
Anas strepera - 4 - 100 301 387 220 64 213 115
Anas crecca - - - 450 282 266 490 240 176 110
Anas platyrhynchos 3 26 29 274 469 449 430 403 368 201
Anas clypeata - 5 7 4 102 213 154 214 148 128
Anas acuta - - - 43 20 7 21 62 28 16
Aythya ferina - - - 76 36 88 32 46 32 48
Aythya fuligula - - - 2 23 26 8 27 13 15
Tachybaptus ruficollis - - 1 1 3 13 1 22 8 5
Podiceps cristatus - - - - - - - 1 1 2
Podiceps nigricollis - - - - - 1 - - - -
Phalacrocorax carbo - - - 1 2 9 5 13 10 1
Botaurus stellaris - - - - - - - 1 - -
Bubulcus ibis - - - - 1 - - - - -
Egretta garzetta - - - - - - - 2 - -
Ardea cinerea - - - 8 8 9 16 9 13 15
Ciconia ciconia - - - 3 1 3 - 1 3 7
Circus aeruginosus - - - 2 1 - - 1 - -
Rallus aquaticus - - 1 1 - 2 1 2 - 4
Gallinula chloropus - 2 5 8 11 15 9 5 2 10
Fulica atra - 7 12 1 210 558 205 520 163 202
Recurvirostra avosetta - - - - - - - 1 - -
Vanellus vanellus - - 3 32 142 5 98 6 5 3
Calidris alpina - - - - - 1 - 1 - -
Philomachus pugnax - - - - 1 1 - 3 2 2
Gallinago gallinago 8 50 35 4 9 11 2 4 1 1
Numenius arquata - - - - 2 - - - - -
Tringa ochropus - - - 1 - - - - 1 1
Larus ridibundus - - - - 137 8 1 172 44 -
Alcedo atthis - - - - - 1 1 1 4
Número de especies 2 7 8 20 22 22 18 27 22 22
Total ejemplares 11 96 93 1.068 1.845 2.163 1.742 1.925 1.401 982
Tabla 2. Resultados de los censos de aves acuáticas invernantes en Salburua, en número de individuos. Período 1995-2005.
[Number of waterbirds wintering in Salburua lagoons, in 1995-2005.]

Especies de aves presentes % presente en Salburua


Salburua 185 -
CAPV 260 78
España 532 38
Tabla 3. Comparación del número de especies de aves registradas en Salburua, en la Comunidad Autónoma del País Vasco y en España.
[Comparing the number of bird species recorded in Salburua, in the Basque Country and Spain.]
50 L. LOBO

16 400

14 350

12 300
Número de especies

250

Número de parejas
10

8 200

6 150

4 100

2 50

0 0
1995

1996

1997

1998

1999

2000

2001

2002

2003

2004

2005
Nº de especies Nº de parejas

Figura 4. Evolución del número de especies y del número de parejas de aves acuáticas nidificantes en Salburua.
[Trend in number of species and number of pairs of waterbird breeding in Salburua lagoons.]

160

140
Número de parejas

120

100

80
Figura 5. Evolución del contingente
60 reproductor de focha común Fulica atra,
40 zampullín común Tachybaptus ruficollis y
cigüeñuela común Himantopus himantopus en
20 la balsa de Arkaute.
0 [Trend of Coot Fulica atra, Little Grebe
1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 Tachybaptus ruficollis and Black-winged Stilt
Himantopus himantopus breeding in Arkaute
Focha común Zampullín común Cigüeñuela común
lagoon.]

30 2500

25 2000
Número de especies

Número de parejas

20
1500

15
1000
10

500
5

0 0
1995-1996

1996-1997

1997-1998

1998-1999

1999-2000

2000-2001

2001-2002

2002-2003

2003-2004

2004-2005

INVIERNO

Total especies Total ejemplares

Figura 6. Evolución del número de especies de aves acuáticas invernantes y del número de ejemplares en Salburua.
[Trend in number of species and number of waterbirds wintering in Salburua.]
LA RESTAURACIÓN DEL HUMEDAL DE SALBURUA:
CONSECUENCIAS SOBRE LA AVIFAUNA 51

período sea menor en el contexto regional. En de Ullibarri-Gamboa y, en menor medida, con las
cualquier caso, es posible observar en invierno balsas de riego agrícola existentes en sus inmedia-
el 75-80 % de las especies de aves acuáticas in- ciones. Este complejo de humedales protegidos,
vernantes en Álava, en concentraciones numéri- cercanos entre sí, sin duda también contribuye a
cas que suponen en torno al 15 % del total alavés que este sector de la Llanada Alavesa cada vez sea
(Fernández de Montoya, 1988; Fernández de más atractivo para las aves, especialmente para
Montoya et al., 1995; Fernández de Montoya & las acuáticas.
Nuevo, 1996-2005). Con estos datos, Salburua
se convierte en la séptima zona más importante
numéricamente para la invernada de aves acuáti- Conclusiones
cas en la Comunidad Autónoma del País Vasco,
tras el embalse de Ullibarri y algunas zonas hú- La restauración de las zonas húmedas de
medas costeras como Urdaibai o El Abra, entre Salburua ha supuesto un importante vuelco en
otras (Galarza, 1989; Martí & Del Moral, 2003b; el panorama ornitológico de su entorno, sobre
Andrés et al., 2004). todo en lo referente a aves ligadas a los medios
acuáticos. De entre las actuaciones de restaura-
En lo referente a especies amenazadas, en Sal-
ción acometidas, ha sido la recuperación de las
burua se dan cita 81 aves en riesgo de desaparición, lagunas más orientales la que ha tenido mayores
lo cual supone el 44 % de las que usan estos hume- repercusiones avifaunísticas. En la actualidad se
dales. De entre ellas, 47 especies (60 % del total de puede considerar que Salburua constituye uno de
amenazadas en Salburua) dependen en algún mo- los enclaves de mayor importancia ornitológica
mento de su ciclo vital de los medios palustres (Bea de su ámbito geográfico en todos los periodos
& Fernández de Mendiola, 1998; Bea, 1999; Blan- fenológicos, tanto en número de especies, como
co & González, 1992; Tucker & Heath, 1994). en abundancia de las mismas o en presencia de
Las especies de presencia no accidental en taxones amenazados de desaparición.
Salburua y que se encuentran en mayor riesgo de Es de destacar que los valores ambientales
extinción a escala autonómica, estatal o europea que a fecha de hoy atesora Salburua han permiti-
son avetorillo común, garcilla cangrejera Ardeola do que sea propuesto como “lugar de importancia
ralloides, garza imperial Ardea purpurea, cigüeña comunitaria” (LIC), para formar parte de la futu-
negra Ciconia nigra, cigüeña blanca Ciconia ci- ra red europea de espacios naturales protegidos.
conia, espátula común Platalea leucorodia, ánade Así mismo, recientemente ha sido incluido den-
friso, ánade rabudo Anas acuta, cerceta carretona, tro del listado de humedales de importancia in-
milano real Milvus milvus, milano negro M. mi- ternacional emanado del Convenio de Ramsar, el
grans, aguilucho pálido Circus cyaneus, aguilu- mecanismo internacional más importante para la
cho lagunero C. aeruginosus, halcón peregrino preservación de estos ecosistemas. En definitiva,
Falco peregrinus, perdiz roja Alectoris rufa, co- Salburua ha pasado de ser -hace menos de diez
dorniz común Coturnix coturnix, chorlitejo chico, años- un lugar marginal cuyo futuro parecía pasar
correlimos común Calidris alpina, aguja coline- ineludiblemente por su definitiva destrucción, a
gra Limosa limosa, fumarel cariblanco Chlido- convertirse en uno de los humedales continentales
nias hybridus, fumarel común Ch. niger, abubi- más valiosos de la Comunidad Autónoma Vasca
lla Upupa epops, avión zapador Riparia riparia, y por ende, del norte peninsular.
alondra común Alauda arvensis, colirrojo real
Queda por delante en los años venideros la
Phoenicurus phoenicurus y carricerín cejudo.
consolidación de las tareas de restauración del
También se debe destacar la estrecha interrela- espacio y la implementación de medidas de pro-
ción existente entre Salburua y el cercano embalse tección adecuadas, especialmente en lo referente
52 L. LOBO

al control de la calidad de las aguas y la minimi- F ERNÁNDEZ DE M ONTOYA , E. 1988. Aves de las
zación de los posibles impactos generados por las zonas húmedas alavesas. Diputación Foral de
Álava. Vitoria.
nuevas urbanizaciones cercanas a la periferia de
FERNÁNDEZ DE MONTOYA, E.; GAINZARAIN, J. A. &
los humedales.
NUEVO, J. Á. 1995. Censos de aves acuáticas
en las zonas húmedas alavesas. Censo de in-
vernantes. Año 1995. Informe inédito
Agradecimientos FERNÁNDEZ DE MONTOYA, E. & NUEVO, J. Á. 1995-
2005. Censos de aves acuáticas en las zonas
húmedas alavesas. Censos de nidificantes. In-
Fernando de Juana revisó el texto original
formes inéditos.
aportando valiosas mejoras al mismo
FERNÁNDEZ DE MONTOYA, E. & NUEVO, J. Á. 1996-
2005. Censos de aves acuáticas en las zonas
húmedas alavesas. Censos de invernantes. In-
formes inéditos.
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ACTUACIONES DE LA DIPUTACIÓN FORAL DE ÁLAVA
EN EL MARCO DEL PROYECTO LIFE SOBRE
EL ÁGUILA DE BONELLI Hieraaetus fasciatus

JOSEBA CARRERAS

Diputación Foral de Álava • Plaza de la Provincia, s/n. 01001 Vitoria


jcarreras@alava.net

Resumen
Durante los años 2001 a 2004 se ha desarrollado un proyecto LIFE-Naturaleza por parte de la
Diputación Foral de Álava con el fin de mejorar las condiciones del hábitat y asegurar la conser-
vación de la exigua población de águila de Bonelli Hieraaetus fasciatus, mediante la puesta en
marcha del plan de gestión aprobado en 2001. Las acciones fundamentales han sido la corrección
de tendidos eléctricos para reducir la mortalidad por electrocución y colisión, la adecuación de
planes técnicos en cotos de caza, la vigilancia de los territorios de cría, el control de la repro-
ducción, la investigación sobre aspectos biológicos y particularmente sobre la dispersión de los
jóvenes, y la sensibilización sobre la problemática que afecta a la población.
Palabras clave: águila de Bonelli, Hieraaetus fasciatus, Álava, LIFE.

Summary
Actions taken by Diputación Foral de Álava in relation to LIFE-Nature project for Bonelli’s
Eagle
During years 2001 to 2004, a LIFE-Nature project has been run by Diputación Foral de Álava
with the goal of improving habitat condition and conservation status of the small Bonelli’s Eagle
Hieraaetus fasciatus population, through implementation of an action plan passed in 2001. Main
actions have been correction of electric power lines to mitigate electrocutions and collisions,
adaptation of technical rules for game reserves, surveillance of breeding territories, control of
reproduction performance, investigation over biological trates an particularly over offspring
dispersion, and public awareness about conservation problems of this population.
Key words: Bonelli’s Eagle, Hieraaetus fasciatus, Álava, LIFE.

Laburpena
Arabako Foru Aldundiak Bonelli arranoaren Hieraaetus fasciatus LIFE proiketuaren arloan
egindako jarduerak
2001 eta 2004 urte bitartean Arabako Foru Aldundiak “LIFE-Nature” proiektu bat garatu du,
Bonelli arranoaren populazio bakana kontserbatu eta bere habitataren baldintzak hobetzeko
helburuaz. Honetarako 2001. urtean onetsi zen kudeaketa plana abian jarriz. Jarduera nagusiak
honakoak izan dira: elektrokuzio nahiz talka bidezko heriotzak murrizteko elektrizitate-ha-
riak zuzendu, ehiza barrutietan kudeaketa planen moldaketa, kumatze-lurraldeak zelatatzea,
ugalketaren inguruan kontrola eraman, alor biologikoen, eta, batez ere, gazteen dispertsioaren
inguruko ikerketa, eta bukatzeko populazioak pairatzen duen problematikaren inguruko sent-
sibilizazioa bultzatu.
Hitz gakoak: Bonelli arranoa, Hieraaetus fasciatus, Araba, LIFE.
54 J. CARRERAS

Proyecto LIFE-Naturaleza del águila incluyó al águila de Bonelli como especie “en
de Bonelli peligro de extinción” en el Catálogo vasco de
especies amenazadas (Orden 8 de julio del Con-
El Proyecto LIFE-Naturaleza de recupe- sejero de Industria, Agricultura y Pesca del Go-
ración del aguila de Bonelli en Álava (LIFE- bierno Vasco). En 2000 se incluyeron los dos
00NAT/E/7336) ha sido desarrollado por la territorios ocupados y los tres enclaves recien-
Diputación Foral en todo el Territorio Histórico temente abandonados por el águila de Bonelli
de Álava. Las medidas específicas de gestión y dentro de la propuesta del Gobierno Vasco para
mejora del hábitat se han aplicado en las ZEPA la ampliación de la Red Natura 2000 (Acuerdo
con parejas reproductoras y/o territorios aban- de Consejo de Gobierno de 28 de noviembre de
donados por el águila de Bonelli: «ES21000245 2000). Por último, en 2001 se aprobó el Plan de
Valderejo-Sierra Árcena» y «ES21000246 Sie- gestión y se declararon seis áreas de interés es-
rras Meridionales en Álava». El proyecto, con
pecial para el águila de Bonelli en Álava (Orden
una duración de cuatro años (2001-2004) y un
Foral 612/2001).
presupuesto total de 314.630 euros, ha sido fi-
nanciado en un 60 % por los fondos LIFE de la Para la adecuación de la red de tendidos eléc-
Comisión Europea y ha contado con la colabo- tricos, en 2000 se efectuó una revisión de todos
ración de Iberdrola SA y de Red Eléctrica Espa- los tendidos aéreos existentes en las ZEPA y se
ñola, que han costeado el 25 % y el 100 % de las elaboraron informes previos de corrección para
inversiones efectuadas en sus instalaciones. cada uno de los 14 tendidos con riesgo para la
avifauna. Para acometer su corrección, en 2001
La finalidad general del proyecto LIFE ha
se firmó con Iberdrola SA un convenio marco
sido facilitar la puesta en marcha en las ZEPA
de colaboración, por el que la principal empresa
rupícolas alavesas del Plan de gestión del águila
distribuidora de energía en Álava se compro-
de Bonelli, cuyos objetivos operativos son:
metió a realizar las correcciones acordadas y a
a) Reducir la mortalidad adulta y juvenil de financiar el 25 % de las inversiones. Mediante
origen antrópico ocasionada por electrocu- reuniones periódicas con los técnicos de Iber-
ción/colisión y persecución directa. drola se han desarrollado anualmente acuerdos
b) Aumentar la productividad reduciendo las de colaboración específicos y, paralelamente, se
afecciones e interferencias en las áreas de ha consensuado con la empresa la aprobación de
cría. una normativa electrotécnica, que se encuentra
c) Restaurar el hábitat en los territorios abando- actualmente en tramitación.
nados con vistas a su recolonización.
d) Mejorar los conocimientos regionales sobre
la especie que permitan una aplicación más Tareas únicas de gestión del biotopo
eficaz de las medidas de gestión.
Se han corregido 14 tendidos peligrosos (13
e) Aumentar la sensibilización de la opinión
líneas de Iberdrola, tres de las cuales incluían
pública hacia la situación crítica del águila
pequeñas derivaciones de propiedad particular,
de Bonelli en Álava.
y un tendido de transporte de REE) y 89 km de
línea, incluyendo la corrección de 177 apoyos y
Acciones preparatorias la señalización de 129 vanos. Las correcciones
y planes de gestión efectuadas en las tres derivaciones de propiedad
particular han sido íntegramente financiadas por
Para sentar las bases legales y facilitar el la Diputación Foral de Álava. En los dos primeros
posterior desarrollo del proyecto, en 1997 se años del LIFE se priorizaron las correcciones que
ACTUACIONES DE LA DIPUTACIÓN FORAL DE ÁLAVA EN EL MARCO DEL PROYECTO LIFE
SOBRE EL ÁGUILA DE BONELLI Hieraetus fasciatus 55

afectaban a territorios ocupados, mientras que en Anualmente se ha comprobado para cada pa-
2003-2004 se han corregido las instalaciones sitas reja la permanencia de los adultos en los territo-
en territorios recientemente abandonados. rios, el uso de los nidos, la fecha de ovoposición,
el éxito o fracaso en la incubación y crianza, el
Para mitigar los problemas de colisión se han
número de pollos volados y la supervivencia ju-
señalizado mediante balizas espirales los hilos
venil predispersiva. Se han recopilado también
de tierra de los tendidos de transporte y con “X”
todas las citas de ejemplares no territorializados.
de neopreno los conductores de los de distribu-
ción, utilizando cadencias de 1 baliza cada 5 m. En la temporada 2003 se desplomó por dos
Para evitar el riesgo de electrocución en tendidos veces un nido utilizado por una de las parejas,
de distribución, se han eliminado los aisladores por lo que se estimó conveniente reforzar su es-
rígidos en apoyos de alineación, sustituyéndolos tructura para evitar nuevas pérdidas. El trabajo
por armados en bóveda con aisladores suspen- de reforzamiento consistió en la colocación de 5
didos. Por su parte, en apoyos de amarre se han barras metálicas en la repisa que originalmente
reinstalado los puentes flojos suspendidos por soportaba el nido. Las barras, dispuestas en hori-
debajo de los travesaños, o se han colocado mén- zontal, se han anclado mediante taladros y suje-
sulas que mantienen el puente flojo central sus- ción con resinas sintéticas. Sobre ellas se colocó
pendido lateralmente. En los apoyos especiales, un entramado de ramas y parte del material del
se han reinstalado los elementos en tensión en un nido que se había desplomado.
travesaño inferior y se han aislado con material
Para conocer la dieta del águila de Bonelli en
termorretráctil las bajantes.
Álava se han recogido un total de 33 presas pro-
También se han elaborado planes técnicos de cedentes de los nidos de una pareja. Dentro de la
caza para los tres acotados enclavados en ZEPA y muestra analizada, los mamíferos constituyen el
que afectan a territorios del águila de Bonelli en 30,3 % de las presas, las aves el 67,7 % (n=22) y
Álava. Estos planes, con una vigencia de cuatro los reptiles el 3 % restante. Entre los mamíferos
años, han sido redactados por los técnicos de la destaca la contribución del conejo (24,2%), mien-
Asociación de Cotos de Caza de Álava teniendo tras que entre las aves son las perdices (30,3 %)
en cuenta las directrices emanadas del Plan de y las palomas (15,2 %) los grupos más frecuente-
gestión del águila de Bonelli, y prevén medidas mente predados.
de mejora del hábitat en los acotados, que debe-
rán ser puestas en práctica por los adjudicatarios En caso de fracaso reproductor, se han reco-
con la ayuda de subvenciones de la Diputación gido muestras de los huevos infecundos, de las
Foral de Álava (Decreto Foral 36/1999). cáscaras y de los pollos abandonados en los ni-
dos, que se han remitido al Laboratorio Forense
de Vida Silvestre. Con las cáscaras y huevos infe-
cundos se han efectuado análisis de la ultraestruc-
Acciones de seguimiento y gestión tura y espesor relativo de la cáscara, así como de
periódica los niveles de contaminantes de organoclorados
y metales pesados. Con los pollos muertos se ha
El trabajo de campo de vigilancia, control de
realizado una inspección forense para conocer las
la población y seguimiento de la reproducción
causas de la muerte, incluyendo pruebas micro-
ha corrido a cago de la guardería de la Diputa-
biológicas para detección de Trichomonas.
ción Foral de Álava, apoyados por los asesores
externos contratados. Para facilitar su función, Toda la información recopilada, acumulada
se han mantenido anualmente dos reuniones de a los datos de comunidades limítrofes (La Rioja
coordinación y se han impartido cursillos de for- y Navarra), ha servido para estimar -a nivel re-
mación. gional- tasas de mortalidad y reposición adulta,
56 J. CARRERAS

parámetros reproductivos, fenología de la puesta, Acciones de sensibilización y


períodos y causas de fracaso reproductor y super- divulgación
vivencia juvenil predispersiva.
Durante el proyecto LIFE se ha desarrollado
Por otro lado, en 2002 se realizó una experien-
una campaña de sensibilización de la opinión pú-
cia de radio-seguimiento vía satélite del proceso
blica y de divulgación de los resultados. En ella
de dispersión juvenil de uno de los pollos nacidos
se han elaborado, editado y distribuido diver-
en Álava. “Prudencio” fue equipado, mediante un
sos materiales, entre los que figuran una página
arnés tipo mochila, con un PTT-100 de 45 g de
web, paneles informativos que se han expuesto
Microwave, y seguido vía satélite a través del sis-
en congresos y reuniones, trípticos y folletos
tema Argos. Los trabajos de radio-marcaje fueron
divulgativos, etc. Además, se han elaborado in-
realizados por Víctor García, experto del Ministe-
formes técnicos anuales sobre el desarrollo del
rio de Medio Ambiente. El pollo fue marcado con
proyecto, con hincapié en aquellas experiencias
anilla metálica y de lectura a distancia 3CX.
útiles para iniciativas semejantes, y periódica-
“Prudencio” se dispersó de forma temprana, mente se ha remitido a la prensa noticias sobre
casi 15 días antes que su hermana, dirigiéndose aspectos concretos.
inicialmente hacia el oeste hasta alcanzar San
La continuidad de las actuaciones puestas en
Andrés de Teixido en La Coruña, para luego rea-
marcha en el marco del proyecto LIFE-Natura-
lizar un viaje de vuelta que le llevó a escasos ki-
leza ha quedado garantizada por la promulga-
lómetros de su territorio natal en la Rioja Alavesa.
ción del Plan de gestión del águila de Bonelli
Posteriormente, enfiló hacia el sur, atravesando la
en Álava, así como por el establecimiento del
Sierra de Guadarrama hasta alcanzar y asentarse
convenio marco de colaboración con Iberdrola
en Malpica de Tajo (Toledo). El período disper-
SA para la corrección anual de tendidos eléctri-
sivo duró 45 días, recorriendo en ese tiempo más
cos, la aprobación de los planes técnicos de caza
de 1.200 km. En Toledo “Prudencio” se asentó
y la inclusión en la Red Natura 2000 de todos los
durante tres meses, hasta que murió electrocutado
territorios del águila de Bonelli en Álava.
en un tendido de distribución.

Figura 1. Corrección de tendido eléctrico Figura 2. Área utilizada por“Prudencio” en Toledo durante
(foto: Joseba Carreras). su dispersión (foto: Joseba Carreras).
[Correction of electric power line.] [Area in Toledo province where “Prudencio” stayed during
dispersion period.]
SITUACIÓN DE LA POBLACIÓN NIDIFICANTE
DE AVIÓN ZAPADOR Riparia riparia EN ÁLAVA

NEREA RUIZ DE AZUA1, JOSÉ MARÍA FERNÁNDEZ2, ANTONIO BEA1,


& JOSEBA CARRERAS3

1
Ekos Estudios Ambientales SL • Plaza del Caddie, 1. 20160 Lasarte (Gipuzkoa)
ekos@ekos-sl.com
2
Instituto Alavés de la Naturaleza • Apartado de correos 2.092. 01080 Vitoria
ian-ani@terra.es
3
Diputación Foral de Álava • Plaza de la Provincia, s/n. 01001 Vitoria
jcarreras@alava.net

Resumen
En el marco del plan de gestión aprobado por la Diputación Foral de Álava en el año 2000, se
vienen desarrollando desde entonces actuaciones para el seguimiento de la población nidificante
de avión zapador Riparia riparia, en Álava y en zonas limítrofes. Inicialmente se revisaron todos
los posibles enclaves de nidificación y se inventariaron las colonias detectadas, abandonadas y
activas. La población reproductiva ha sido censada anualmente mediante el conteo de los nidos
ocupados, en tres distintas fases del ciclo. Aunque el tamaño de la población habría aumentado
durante el periodo analizado, la reducción del área de distribución, del número de colonias
activas ubicadas en emplazamientos naturales y la concentración en graveras en explotación
implicaría un incremento de su vulnerabilidad. Las principales limitaciones de origen humano
operando en el área de estudio serían la destrucción directa de emplazamientos ocupados en
graveras, que condicionaría el éxito reproductor, y la falta de renovación y creación de nuevos
taludes aptos para la nidificación en tramos fluviales.
Palabras clave: avión zapador, Riparia riparia, población, Álava.

Summary
Status of the breeding population of Sand Martin Riparia riparia in Álava
In the frame of the management plan passed by Diputación Foral de Álava in year 2000, the
monitoring of the breeding population of Sand Martin Riparia riparia in Alava and neighbouring
area has taken place. First, every possible breeding sites were checked, and an inventory of co-
lonies –both active and abandonned- was made. Breeding population has been censused on an
annual basis through counting ocupied nests, at three different phases of the cicle. Even though
population size would have increased during this period, reduction of distribution range, of num-
ber of active colonies settled in natural sites and concentration in gravel pits would mean higher
levels of vulnerability. The main limiting factors of human origin proposed in the study area
would be direct destruction of breeding sites in gravel pits, that may have an effect on breeding
performance, and lack of turnover and appearance of new useful riverine banks.
Key words: Sand Martin, Riparia riparia, population, Álava.
58 N. RUIZ DE AZUA, A. BEA, J.M. FERNÁNDEZ & J. CARRERAS

Laburpena
Uhalde-enararen Riparia riparia populazio habiagilearen egoera Araban
Arabako Foru Aldundiak 2000. urtean onetsitako kudeaketa planaren esparruan zenbait jarduera
egin dira ordudanik, Araba eta mugakide zaizkion lurraldeetan uhalde-enararen Riparia riparia
populazio habiagileraren jarraipena egiteko helburuaz. Hasiera batean habi-toki izan zitezkeen
leku denak aztertu ziren eta bertan antzemandako koloniak inbentariatu ziren (bizirik zeudenak
nahiz lagatakoak). Populazio ugaltzailea urtero zenbatua izan da, beteta zeuden kabiak zenbatuz,
zikloaren hiru fase desberdinetan. Nahiz eta populazioaren tamainak gorakada bat jasan izango
lukeen ikertutako denboraldian, bere zaurkortasunak ere halaxe egin du, banaketa lurraldearen
gutxitzearen, gune naturaletan kokaturiko kolonia aktiboen murriztearen eta populazio hauek
ustiatze prozesuan dauden legardietan kontzentratzearen ondorioz. Banaketa lurraldean giza-
jatorrizko mugak honakoak lirateke: legardietan espezieak betetako guneen deusezpena, zeinak
birsortze arrakasta baldintzatuko lukeen, ezponden berritze falta (gaur egun dauden tokietan)
eta ibai guneetan ezponda berriak eraikitzearen gabezia.
Hitz gakoak: uhalde-enara, Riparia riparia, populazio, Araba.

Introducción 2004). En España no hay una estimación fiable


de su abundancia, que ha sido cifrada en el am-
El avión zapador Riparia riparia es un pase- plio rango que va de 100.000 a 700.000 parejas
riforme de la familia Hirundinidae, que agrupa (Purroy, 1997; SCV, 1998).
a golondrinas y aviones. Se trata de una especie
con una amplísima distribución holártica, si bien En el País Vasco está incluido en la catego-
han sido descritas varias subespecies. La región ría “vulnerable” del Catálogo vasco de especies
Paleártica Occidental está ocupada por R. ripa- amenazadas (Decreto 167/1996). En Álava fue
ria riparia. Entre sus rasgos ecológicos más des- aprobado por Decreto Foral 22/2000 un plan de
tacados figuran la acusada tendencia gregaria, gestión, instrumento legal que contiene directri-
tanto de cara a la formación de colonias de cría ces y medidas para promover la recuperación y
como de concentraciones postreproductoras, y la conservación de sus poblaciones y el manteni-
utilización como sustratos de nidificación -casi miento de sus hábitats en dicho territorio.
invariablemente- de taludes arenosos o areno- En el marco de las actuaciones previstas en
limosos con partículas finas (Heneberg, 2001) dicho plan, el Departamento de Urbanismo y
en los que excava túneles terminados en cámaras Medio Ambiente de la Diputación Foral de Ála-
de nidificación. La aparición de estos cortados se va viene ejecutando tareas encaminadas a inven-
encuentra ligada generalmente a los cursos me- tariar y evaluar los enclaves de reproducción de
dios y bajos de los ríos y a sus llanuras aluviales. la especie. En este sentido, en el año 2000 se ini-
Los condicionantes fisiográficos mencionados ció la prospección exhaustiva en balsas, riberas
provocan que, en la mayoría de las regiones, la y cauces fluviales de la zona central de Álava.
especie presente una distribución contagiosa o En la siguiente campaña del 2001, se completó
parcheada (Cramp, 1988). Explota el plancton la búsqueda en el resto de cuencas del territorio
aéreo (dípteros, áfidos) a baja altura.
susceptibles de albergar núcleos reproductores,
En Europa las poblaciones pudieron sufrir un sumando un total de 218 km de tramos fluviales
fuerte declive hasta los años 90 del siglo XX. A inspeccionados detalladamente, a pie en su ma-
partir de ahí se considera que sus efectivos han yor parte. y se estimó el tamaño de la población
ido recuperándose ligeramente, aunque todavía nidificante mediante censos repetidos en cada
el tamaño de población se encontraría por debajo una de las colonias localizadas. Desde el 2002
del nivel que tenía antes de su declive (Burfield, se viene realizando un seguimiento más inten-
SITUACIÓN DE LA POBLACIÓN NIDIFICANTE DE AVIÓN ZAPADOR Riparia riparia EN ÁLAVA 59

so de cada una de las colonias “activas” cono- Historial de las colonias conocidas
cidas, con el fin de determinar el tamaño de la
población nidificante y obtener información de a) Santa Cruz de Campezo (cuadrícula UTM
relevancia demográfica y ecológica. También se WN52). Esta colonia es seguida desde el
lleva a cabo un seguimiento menos intenso de las año 2001, aunque los aviones debían ha-
colonias clasificadas como “no activas o aban- berse instalado ya en alguna temporada
donadas”, así como de las colonias “activas” en anterior (R. Arambarri & J. A. Gainzarain,
terrenos limítrofes de Álava. com. pers.). Se localiza en los taludes de una
escombrera, actualmente clausurada. El nú-
mero máximo de nidos ocupados se mantie-
ne relativamente constante desde la primera
Métodos de censo campaña (figura 1): 17 en 2001 (junio), 14
en 2002 (junio), 18 en 2003 (mayo), 18 en
El trabajo de campo se realizó entre los me-
2004 (mayo) y 17 en 2005 (junio).
ses de abril y septiembre, durante el cual se ins-
peccionaron los emplazamientos de cría ubica- b) Labastida (WN11). Esta colonia se ubica
dos en Álava y en zonas limítrofes, considerados en una gravera en explotación. En un talud
como integrados en la misma población. Se con- de arena en desuso se censaron un máximo
sideraron dentro de la misma “colonia” aquellas de 8 nidos activos en 2001, 7 en 2002 y 5
agrupaciones de nidos, aun situadas en diferen- en 2003. En ese mismo año se detectó otro
tes frentes o taludes, que se hallaban separadas emplazamiento dentro de la misma gravera,
menos de 250 m entre sí, criterio útil también aunque quizá no fuera enteramente nuevo,
para describir el mantenimiento interanual o la ya que muchos de los agujeros podían ser
desaparición de una “colonia”. A las colonias antiguos. En la campaña de 2004 únicamen-
activas se efectuaba como mínimo tres visitas te se observaron nidos en este segundo talud
–segundas quincenas de mayo, junio y julio-, -situado en una balsa de agua-, y el emplaza-
durante cada una de las cuales se registraba el miento inicial fue derruido fuera de la época
número de nidos activos (agujeros en los que se reproductora. Se contaron 13 nidos activos
observaba entrada y salida de adultos o pollos) en 2004 y 9 en 2005 (figura 2).
como indicador del número de parejas nidifican- c) Elorriaga (WN24). Esta colonia se ubica en
tes y el número máximo de individuos vistos al taludes del arroyo Errekaleor. La utilización
mismo tiempo como estimador de los efectivos de este tramo fluvial se conoce al menos des-
globales de la colonia. Esta misma metodolo- de 1993 (Lobo, 1994). En 2000 se constató
gía se ha venido utilizando desde el año 2001, la ocupación, pero no así en 2001 ni 2002.
y desde el 2003 se han empleado fotografías de A partir de 2003 la colonia se instaló en un
cada frente de talud con agujeros para anotar con pequeño talud, con 14 nidos activos en ese
precisión los nidos ocupados. año (junio), 19 en 2004 (junio) con una ocu-
Para ello, un observador vigilaba atentamen- pación tardía –mediados de mayo- y sólo 6
te la colonia durante un periodo de tiempo, fijado en 2005 (junio, figura 3). En la actualidad, el
en una hora para el “cómputo de nidos activos”, entorno de la colonia se ha visto fuertemente
ya que en ese lapso se contabiliza el 75–100 % modificado como consecuencia del desarro-
llo urbanístico de la ciudad de Vitoria, y en
de los nidos ocupados (Ekos Estudios Ambienta-
un futuro inmediato las infraestructuras ur-
les SL, 2003; González & Villarino, 1997). Los
banas ocuparán toda la zona.
conteos se realizaban siempre con condiciones
meteorológicas adecuadas, es decir, sin lluvia, d) Laguardia (WN30). Este emplazamiento
ni viento. se localiza en las proximidades de la ribe-
60 N. RUIZ DE AZUA, A. BEA, J.M. FERNÁNDEZ & J. CARRERAS

ra del Ebro, en un cerro explotado para la e) Andaverde (WN11). Se situaba en una an-
extracción de arena, con taludes fáciles de tigua gravera naturalizada a orillas del río
horadar. Fue ocupado por primera vez en el Ebro, en el término de Labastida. Desde su
2003, y la colonia pudo instalarse aquí como apertura, los taludes arenosos en los que se
consecuencia del relleno y destrucción de ubican los nidos se han derrumbado progre-
un emplazamiento cercano en suelo de La sivamente como consecuencia de las creci-
Rioja, que en las dos campañas anteriores das del río Ebro, y de la fuerte dinámica de
había albergado unos 70 nidos activos. revegetación natural. Esta es la causa proba-
Procesos de traslado semejantes han sido ble de que en la actualidad hayan dejado de
descritos con anterioridad en esta especie ser ocupados por los aviones zapadores. En
(Mead, 1979). En 2003 se contaron hasta las temporadas 2000 y 2001 este emplaza-
599 agujeros construidos, aunque el número miento era utilizado por un amplio número
máximo de nidos activos fue 182 (finales de de parejas reproductoras, registrándose en el
junio). En la campaña del 2004, a pesar de 2001 hasta un máximo de 17 nidos activos.
que una parte de la colonia se derrumbó, el En el 2002 la población descendió súbita-
máximo de nidos ocupados fue 314 (finales
mente, con un máximo de 3 nidos activos
de junio). En el censo de julio se observó un
y en el 2003 se observaron algunos indivi-
descenso significativo en el número de ni-
duos, pero ya no se constató que criaran,
dos activos (39). La colonia estuvo ocupada
como tampoco en 2004 ni 2005.
hasta mediados de agosto. Durante este año
se amplió el viñedo colindante y se llevó a f) Mártioda (WN14). Esta colonia se situaba
cabo el emparrado de una parte de las vi- en la margen del río Oca. Estuvo activa al
ñas. En 2005 se detectaron nidos activos en menos desde el año 2000 hasta el 2002, con
tres taludes diferentes. El primero coincide 5-7 nidos ocupados por temporada. Consta
con el de años anteriores, aunque el número la nidificación en la zona desde principios
de nidos disminuyó en buena medida (27 a de los años 80 del siglo XX (obs. pers.). No
finales de junio). Otro grupo de nidos (66 obstante, desde el 2003 –año en que parte
activos a mediados de mayo) se ubicó en un del talud se derrumbó a causa de las crecidas
frente en explotación, pero cuyo derrumbe del río- no se ha vuelto a detectar a la espe-
provocó el movimiento de la mayoría de cie.
las aves hacia un tercer talud. En éste úl-
timo se contaron 71 nidos activos y varios g) Yurre (WN24). Esta pequeña colonia se
más en plena construcción, a finales de ju- ubicaba en los bancales de las huertas que
nio. Durante esta temporada se observó un ocupan el antiguo meandro del río Zadorra.
fuerte descenso en el número de nidos con Se tiene constancia de la reproducción de
segundas puestas: de 129 nidos ocupados a la especie en este enclave durante los años
finales de junio se pasó a 21 en julio (figura 2002 y 2003, aunque en el 2001 se observa-
4). En este emplazamiento también nidifican ron varios individuos durante el paso pre-
gorrión chillón Petronia petronia, colirrojo nupcial. Lobo (1994) cita la reproducción en
tizón Phoenicurus ochruros y una pareja de este paraje, por lo que probablemente fuera
cernícalo vulgar Falco tinnunculus. Estos un emplazamiento tradicional. En el 2004 se
últimos han sido observados habitualmente detectó una única pareja, haciendo un nuevo
efectuando ataques de caza sobre los aviones nido en un pequeño bancal, pero no llegaron
zapadores, y se han recogido restos aporta- a culminar la cría. En el año 2005 ya no se
dos como presas al nido. observó ningún avión zapador.
SITUACIÓN DE LA POBLACIÓN NIDIFICANTE DE AVIÓN ZAPADOR Riparia riparia EN ÁLAVA 61

UTM 100
Colonia Sustrato 2000 2001 2002 2003 2004 2005
km2
Azúa WN35 Talud embalse Activa Destruida por obras de camino
Ezquerococha WN44 Talud balsa Activa Abandonada o sin nidos activos
Matauco- 2 nidos
WN34 Talud pozo Abandonada o sin nidos activos
Argómaniz II activos
Antezana WN24 Talud río Activa Abandonada o sin nidos activos
3-4 nidos
Puentelarrá VN93 Talud río ¿? Abandonada o sin nidos activos
activos
Abandonada
Gravera- 2 nidos
Labastida II WN11 o sin nidos
escombrera activos
activos
Lapuebla de
WN30 Talud río Activa Abandonada o sin nidos activos
Labarca
Destruida
10 nidos
Laserna WN40 Gravera antigua ¿? por obras de
activos
polígono
Tabla 1. Colonias de avión zapador Riparia riparia en las que se constató actividad reproductiva en un único año,
durante el periodo 2000-2005.
[Sand Martin Riparia riparia colonies where breeding activity was recorded for just one year, in the period 2000-2005.]

UTM 100 CAMPAÑAS


Colonia Sustrato
km2 2000 2001 2002 2003 2004 2005
Albaina (BU) WN22 Gravera antigua Activa 30 19 15 19 28
Bardauri I (BU) WN02 Gravera-escombrera Activa Destruida
Bardauri II (BU) WN02 Gravera ¿? 51 27
Bardauri III (BU) WN02 Gravera 10
Suzana I (BU) WN02 Gravera 9 Destruida
Gravera en 5
Suzana II (BU) WN02 9 8 0 0
explotación Destruida
5
Suzana III (BU) VN93 Gravera Activa ¿? 3 2
Destruida
Montañana (BU) VN93 Talud balsa 40 19 ¿? 36 3
54
Montañana-Cano Gravera en
VN93 7 Activa 42 Varios taludes 129
(BU) explotación
destruidos
Bozoo (BU) VN93 Gravera ¿? 0 0
Gravera en
El Cortijo I (LO) WN40 70 68 Destruida 9 25-30
explotación
El Cortijo II (LO) WN30 Talud río 25-30
Tabla 2. Colonias de avión zapador en zonas limítrofes a Álava, y número máximo de nidos activos contados en la segunda quincena
de junio de cada campaña.
[Sand Martin colonies in neighbouring areas to Álava, and maximum number of active nests counted in the second fortnight of June.]

h) Matauco (WN34). Esta colonia se ubica en plares volando en las balsas de regadío de
un pequeño pozo con paredes pedregosas Argómaniz, muy próximas al pozo. En 2001
rodeado de fincas agrícolas. La localidad ya y 2002 sí se constató su ocupación, con un
fue citada por Lobo (1994). En la campaña máximo de 2 nidos activos, pero no en las
del 2000 se clasificó entre las colonias en temporadas sucesivas.
desuso, si bien se detectaron varios ejem-
62 N. RUIZ DE AZUA, A. BEA, J.M. FERNÁNDEZ & J. CARRERAS

i) Otros emplazamientos. En la tabla 1 se citan Tendencia de la población


otras colonias en las que, durante el periodo reproductora
de seguimiento, sólo se ha constatado ocu-
pación en un único año. Durante el periodo 2000-2005, los datos re-
cogidos en Álava reflejan un descenso paulatino
del número de emplazamientos ocupados y un
aumento del número total de nidos activos en
Antiguas colonias
la segunda quincena de junio, estimador del ta-
En el curso de los trabajos se han detectado maño de la población reproductora. Este último
otros emplazamientos que albergaron colonias incremento se ha visto truncado durante la tem-
en el pasado, pero fueron abandonados con an- porada 2005 (figura 5).
terioridad al año 2000. Bien se han recogido re- Tal evolución debe ser interpretada teniendo
ferencias sobre su uso por los aviones zapado- en cuenta la población en su conjunto. La súbita
res, o bien se conservan restos de agujeros que aparición de la colonia de Laguardia en 2003,
inequívocamente pueden atribuirse a la actividad
en la cual se ha asentado un 78,5, 86 y 75,2 %
de los aviones. En taludes de ríos se han inven-
de los efectivos anuales desde entonces, proba-
tariado colonias antiguas en las localidades de
blemente tenga su origen primario en un tras-
Mendoza, Subijana-Morillas, Hereña, Arcaya,
vase a partir de otras colonias cercanas, y sólo
Miñano Menor, Rivabellosa y Laguardia; en
secundariamente en una mejora demográfica de
taludes de graveras en Comunión y Zambrana;
la población. De todas formas, la hipótesis de
y en taludes de viñedos en Baños de Ebro. Las
una estabilidad global del número de reproduc-
referencias escritas y orales sobre estos enclaves
tores durante el periodo de estudio es consistente
datan su utilización entre finales de los años 70
a la luz de los resultados del seguimiento, pero
y principios de los 90 del siglo XX (De Juana,
es necesario tener en cuenta que en las zonas
1980; Álvarez et al., 1985; Lobo, 1994; J. A.
limítrofes la vigilancia de las colonias ha sido
Gainzarain, com. pers.).
menos constante.
Para superar este obstáculo se han analiza-
do los datos de los conteos mediante el progra-
Colonias en zonas limítrofes
ma Trends and indices for monitoring data 3.2
Se han censado también las colonias ubicadas (TRIM; Pannekoek & Van Strien, 2005), que
en zonas limítrofes a Álava (margen derecha del genera índices de abundancia basados en la re-
río Ebro, cuenca de Miranda y Treviño), ya que gresión loglineal de Poisson, corregida consi-
se pueden considerar integradas funcionalmente derando correlaciones seriales, y recalculando
en la misma población y se toma así un área de valores perdidos en función de los obtenidos
estudio coherente desde el punto de vista de un en años anteriores y posteriores. Se empleó el
seguimiento poblacional a medio y largo plazo modelo de datos imputados con efecto temporal
(Kuhnen, 1978). De hecho, este seguimiento am- para la producción de índices anuales, ya que no
plio ha permitido tener una idea más clara de la se consiguió el ajuste de un modelo de tenden-
magnitud real de la población y explicar determi- cia lineal para la obtención de un índice general
nados comportamientos, como el surgimiento de para el periodo 2001-2005 (χ2=831, 48, gl=51,
nuevas colonias por sustitución de emplazamien- p<0,05). En la figura 6 se observa que el tamaño
tos destruidos. En la provincia de Burgos se han de la población global habría sufrido cambios
muestreado diez enclaves y dos en La Rioja. La de tendencia en 2002 y 2004, con un saldo neto
tabla 2 recoge la ubicación de cada uno y el núme- positivo. De acuerdo con los parámetros de pen-
ro máximo de nidos activos por cada campaña. diente multiplicativa y sus intervalos de confian-
SITUACIÓN DE LA POBLACIÓN NIDIFICANTE DE AVIÓN ZAPADOR Riparia riparia EN ÁLAVA 63

20

16
Número de nidos activos

12

0
II - May II - Jun II - Jul I - Ago I - Sep

2001 2002 2003 2004 2005

Figura 1. Colonia de Santa Cruz de Campezo. Número máximo de nidos activos contados durante las temporadas 2001 a 2005.
[Santa Cruz de Campezo colony.Maximum number of active nests counted in 2001- 2005 breeding seasons.]

14 20

12
16
Número de nidos activos
Número de nidos activos

10

12
8

6
8

4
4
2

0 0
II - May II - Jun II - Jul I - Ago II - May II - Jun II - Jul I - Ago

2003 2004 2005 2003 2004 2005

350 (superior izquierda)


Figura 2. Colonia de Labastida. Número máximo de nidos ac-
300 tivos contados en los taludes de la balsa de agua durante las
temporadas 2003 a 2005.
Número de nidos activos

250
[Labastida colony. Maximum number of active nests recorded
in the pond bank in 2003- 2005 breeding seasons.]
200
(superior derecha)
150 Figura 3. Colonia de Elorriaga. Número máximo de nidos acti-
vos contados durante las temporadas 2003 a 2005.
100 [Elorriaga colony. Maximum number of active nests recorded
in 2003-2005 breeding seasons.]
50
(izquierda)
0 Figura 4. Colonia de Laguardia. Número máximo de nidos acti-
II - May II - Jun II - Jul I - Ago vos contados durante las temporadas 2003 a 2005.
[Laguardia colony. Maximum number of active nests recorded
2003 2004 2005 in 2003-2005 breeding seasons.]
64 N. RUIZ DE AZUA, A. BEA, J.M. FERNÁNDEZ & J. CARRERAS

za, en una proyección a 20 años el tamaño de la competencia interespecífica- por el deterioro pro-
población experimentaría un crecimiento signi- gresivo de las superficies expuestas, sometidas a
ficativamente distinto de cero pero leve (menor procesos de meteorización física y química, a la
del 20 %). erosión y a la colonización vegetal. El colapso
de los túneles, la depredación favorecida por el
Desde una perspectiva geográfica, la vulne-
aumento de la anchura de las bocas y la disminu-
rabilidad de la población habría aumentado du-
ción de la pendiente del talud, o el incremento del
rante el periodo de estudio, como consecuencia
coste energético de la excavación serían posibles
de su notable concentración y de la reducción
causas últimas que estimularián la deserción de
del área de distribución. Todas las pequeñas co-
frentes viejos y la apertura de nuevos agujeros en
lonias conocidas en la Llanada Alavesa (6 en el
otros. Evolutivamente, la especie se encontraría
año 2000) habrían desaparecido en la actualidad,
bien adaptada a esta inestabilidad del sustrato de
con la excepción de Elorriaga, cuyo futuro es
nidificación, y la movilidad de los emplazamien-
además muy incierto como consecuencia del de- tos dentro de cada colonia, y de éstas mismas,
sarrollo urbanístico previsto. En cuanto al valle ha sido señalada abundantemente en la literatura
del Ebro, un emplazamiento ha sido destruido siempre que se han llevado a cabo seguimien-
y dos más han desaparecido como consecuen- tos interanuales (Mead, 1979). La alteración de
cia aparente del deterioro morfológico de los la fisiografía y dinámica natural de los ríos, con
taludes, mientras algunos ubicados en graveras escasos tramos sometidos a procesos de destruc-
en funcionamiento están expuestos a reduccio- ción y creación de taludes por avenidas, podría
nes esporádicas o sistemáticas del éxito de cría. condicionar tanto la progresiva desaparición de
Por el contrario, hay colonias con estabilidad y colonias en taludes ribereños (a falta de empla-
reproducción ininterrumpida, en algún caso al zamientos alternativos) como el uso preferente
menos desde 1986 (Albaina; obs. pers.; Román y mayoritario de graveras y lugares artificiales,
et al., 1996). donde la actividad humana sí descubre periódi-
Los factores limitantes de origen humano camente hábitats sustitutivos. P. ej., en España se
más importantes descritos para esta especie son citan proporciones de colonias en sustratos artifi-
la alteración y destrucción de los taludes de cría, ciales del 27 % (Asturias; Álvarez et al., 1991),
sean éstos naturales (encauzamientos en tramos 67 % (Extremadura; De Lope et al., 1987), 83 %
fluviales) o artificiales (eliminación o relleno (Álava y zona limítrofe), 88 % (Madrid; SCV,
durante la época de cría en graveras en explota- 1999) y 95 % (Orense; González & Villarino,
ción), la disminución de los recursos tróficos a 1997). Todas las colonias que han sido abando-
causa del empleo de pesticidas en cultivos, y las nadas en el periodo 2000-2005 en Álava y zonas
limítrofes, se ubicaban en taludes de origen na-
molestias provocadas por vehículos o personas
tural o bien en lugares donde no era posible –en
(Tucker & Heath, 1994; Burfield, 2004; Martí &
ausencia de erosión o de actividad humana- la
Del Moral, 2003). No obstante, se ha demostra-
exposición de nuevas superficies adecuadas para
do que la dinámica poblacional puede estar pri-
la excavación de nidos. De hecho, analizando con
mordialmente influida por factores climáticos,
TRIM la tendencia del tamaño de población, pero
como las sequías en los cuarteles de invernada
introduciendo como covariante la tipología de las
africanos que reducen la supervivencia (Szep,
colonias (graveras en explotación versus resto de
1995; Norman & Peach, 2003).
sustratos, que comprenden taludes en riberas y
El abandono de determinados emplazamien- excavaciones o cortes abandonados), se aprecia
tos anteriormente ocupados puede estar motivado la evolución divergente experimentada por unas
–dejando aparte procesos ecológicos por estu- y otras, claramente negativa en los emplazamien-
diar, como el efecto de la carga parasitaria y la tos sin posibilidad de renovación (figura 6).
SITUACIÓN DE LA POBLACIÓN NIDIFICANTE DE AVIÓN ZAPADOR Riparia riparia EN ÁLAVA 65

600 14

12
500
Número de nidos activos

10

Número de colonias
400

8
300
6

200
4

100 2

0 0
2001 2002 2003 2004 2005

Nidos activos en Álava Nidos activos en zonas limítrofes Colonias Álava Colonias zonas limítrofes

Figura 5. Evolución del número de colonias y del número de parejas reproductoras (“número máximo de nidos activos contados en la
segunda quincena de junio”) en Álava y en zonas limítrofes, entre los años 2001 y 2005.
[Trend in number of colonies andnumber of breeding pairs (“maximum number of active nests recorded in second fortnight of
June”) in Álava and neighbouring areas, in 2001-2005.]

3,5

3,0

2,5

2,0
Figura 6. Índices anuales de tendencia de la
Índice

1,5 población nidificante de avión zapador en Álava


y zonas limítrofes (índice 2001=1): global, en
1,0 graveras en explotación y en otro tipo de sustratos,
generados por el programa TRIM usando el modelo
0,5
de datos imputados con efecto temporal.
0,0 [Trend of annual breeding population indexfor
2001 2002 2003 2004 2005 Sand Martin in Álava and neighbouring areas (index
Años 2001=1): global, for gravel pits in exploitation and
for other substrates, generated with TRIM using
Global Graveras en explotación Resto de sustratos imputed model with time effect.]

Agradecimientos Referencias

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También a Arturo Campino y un reconocimiento MENDIOLA, Í. 1985. Atlas de los vertebrados
especial a Carlos y Rebeca Santamaría, por su continentales de Álava, Vizcaya y Guipúzcoa
interés y contribución en la protección de la co- (excepto Chiroptera). Gobierno Vasco. Bil-
lonia ubicada en sus terrenos. bao.
66 N. RUIZ DE AZUA, A. BEA, J.M. FERNÁNDEZ & J. CARRERAS

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de Medio Ambiente. Madrid. International. Cambridge.
SITUACIÓN Y PROBLEMÁTICA DE LAS AVES RUPÍCOLAS
EN SIERRA SALVADA

JUAN MANUEL PÉREZ DE ANA

Sociedad de Ciencias Naturales de Sestao • Apartado de Correos 41. 48910 Sestao


perezdeana@hotmail.com

Resumen
En 1997, 1998 y 2001 censamos el tamaño de la población reproductora de varias aves rupíco-
las en Sierra Salvada (Álava y Bizkaia): alimoche común, 2-3 parejas; buitre leonado, 68-78
parejas; águila real, 0-1 parejas; halcón peregrino, 4-6 parejas; búho real, ninguna pareja; chova
piquigualda, 44-71 parejas; y chova piquirroja, 281-392 parejas. La población nidificante de
buitre leonado se ha duplicado en los últimos ocho años. Las poblaciones reproductoras de
alimoche común y halcón peregrino, en cambio, han permanecido estables. Por primera vez
en las últimas décadas, una pareja de águila real inició la reproducción en 1998, pero fracasó.
La prohibición de abandonar ganado muerto en el monte no tuvo ningún efecto negativo en la
reproducción del buitre leonado en 2001. Evaluamos varias afecciones negativas sobre estas
especies: parques eólicos, líneas eléctricas, el mal de las vacas locas, molestias humanas en el
área de cría y venenos.
Palabras clave: Sierra Salvada, rapaces rupícolas, chovas, problemática.

Summary
Status and problems of cliff raptors and choughs in Sierra Salvada
In 1997, 1998 and 2001 we censused breeding populations of several cliff bird species at Sierra
Salvada (Álava and Bizkaia): there were 2-3 pairs for Egyptian Vulture, 68-78 for Griffon Vultu-
re, 0-1 for Golden Eagle, 4-6 for Peregrine Falcon, none for Eagle Owl, 44-71 for Alpine Chough
and 281-392 for Red-billed Chough. Breeding population of Griffon Vulture has doubled in last
eight years, whereas those of Egyptian Vulture and Peregrine Falcon remained stable. For the
first time in recent decades, a pair of Golden Eagle began breeding in 1998, but failed. The ban
about leaving cattle carcasses in the field apparently had no negative effect on Griffon Vulture
breeding performance, in 2001. We analyse some impacts on these populations: wind farms,
power lines, bovine spongiform encephalopathy illness, human disturbance and poison.
Key words: Sierra Salvada, cliff raptors, choughs, problems.

Laburpena
Salbada Mendizerrako hegazti harkaiztarren egoera eta problematika
1997, 1998 eta 2001 urteetan Salbada Mendizerrako (Araba eta Bizkaia) zenbait hegazti har-
kaiztarren populazio habiagilearen tamaina zentsatu genuen: sai zuria, 2-3 bikote; sai arrea,
68-78 bikote; arrano beltza, 0-1 bikote; belatz handia, 4-6 bikote; hontza handia, bikoterik ez;
belatxinga mokohoria, 44-71 bikote eta belatxinga mokogorria, 281-392 bikote. Sai arrearen
68 J.M. PÉREZ DE ANA

populazio habiagilea bikoiztu egin da azken zortzi urteetan. Sai zuriaren eta belatz handiaren po-
pulazio ugaltzaileek, aldiz, egonkortasuna erakutsi dute. Azken hamarkadetan lehenengo aldiz,
arrano beltzaren bikote batek ugalketa hasi zuen, baina arrakastarik gabe. 2001 urtean, hildako
abereak mendian uzteko debekuak ez zuen ondorio kaltegarririk ekarri sai arrearen ugalketan.
Bide batez, harrapari harkaiztar hauen gaineko zenbait afekzio negatibo ebaluatu genituen ere:
linea elektrikoak, behi eroen gaitza, umatze-arean dauden giza-eragozpenak eta pozoiak.
Hitz gakoak: Salbada Mendizerra, harrapari harkaiztarrak, belatxingak, problematika.

Sierra Salvada rente erosión de estos materiales condiciona el


relieve general existente. Su máximo exponente
Sierra Salvada es uno más de esos territorios se alcanza en el cañón del Nervión, cerca de De-
de frontera, tan olvidados como bien conserva- lika, donde la erosión remontante de este río ha
dos, que a la vez unen y separan. Sus bosques y excavado un profundo barranco de más de 400
cantiles tienen continuación hacia el oeste, en las m de desnivel. La red fluvial está integrada por
sierras burgalesas de la Carbonilla y de la Magda- numerosos arroyos que descienden por las laderas
lena. En conjunto, sesenta kilómetros de laderas septentrionales de Sierra Salvada y confluyen en
agrestes y cortados que caen desde los 900 metros los ríos Artziniega, San Miguel, Izalde, Izoria y
de altitud que tiene aquí la meseta castellana hasta Nervión (Lizaur et al., 1996).
los 400 de los valles cantábricos.
Hay que destacar la importancia que tienen
Esta sierra se localiza en el norte de la Penín- los roquedos calizos como zona de nidificación
sula Ibérica, en el extremo occidental de la Co- para algunas especies de aves como el alimoche
munidad Autónoma del País Vasco. Incluye parte común Neophron percnopterus, el buitre leona-
de los siguientes términos municipales: Ayala y do Gyps fulvus, el águila real Aquila chrysaetos,
Amurrio en Álava, y Orduña en Bizkaia, hacien- el cernícalo vulgar Falco tinnunculus, el halcón
do frontera con los de Cuartango y Urkabustaiz peregrino F. peregrinus, el búho real Bubo bubo,
(Álava) y los burgaleses de Junta de Villalba de el cuervo Corvus corax, la grajilla C. monedula,
Losa, Valle de Losa y Berberana. la chova piquigualda Pyrrhocorax graculus, la
El monte Eskutxi (1.180 m) es la cima de chova piquirroja P. pyrrhocorax, el avión roquero
Sierra Salvada. Otras cumbres sobresalientes Ptyonoprogne rupestris, el avión común Delichon
son Aro (1.127 m), Ungino (1.105 m), Tologorri urbicum, el vencejo real Tachymarptis melba, el
(1.066 m), Bedarbide (1.041 m), Solaiera (1.039 roquero rojo Monticola saxatilis y el acentor alpi-
m), Txarlazo (927 m) y Arando (943 m). Estas no Prunella collaris. También el quebrantahuesos
cumbres se sitúan en el límite de un cantil prác- Gypaetus barbatus nidificó en los cantiles de Sie-
ticamente ininterrumpido, de 31 km de longitud. rra Salvada hace unas décadas.
Sólo el Puerto de Orduña, y seis portillos (del Aro,
Sierra Salvada forma parte del Área Impor-
de Ungino, de Menerdiga, de La Barrerilla, de
tante para las Aves (IBA, su acrónimo en inglés,
Goldetxo y del Pico del Fraile), comunican los
en adelante) número 33 “La Losa-Orduña (Sierra
valles cantábricos de Ayala, Orduña y Delika con
Salvada)” (Grimmet & Jones, 1989; Viada, 1999).
el burgalés Valle de Losa, ya en la meseta caste-
En Sierra Salvada, 3.839 hectáreas fueron decla-
llana.
radas zona de especial protección para las aves
Geológicamente, Sierra Salvada está consti- (ZEPA, en adelante) en 2001 mediante acuerdo
tuida por calizas duras y dolomías del Cretácico del Gobierno Vasco, quedando fuera de la ZEPA
Superior en las zonas altas, y por margas y calizas el territorio del IBA que se encuentra por debajo
arcillosas en las laderas y en los valles. La dife- de la cota de los 600 metros de altitud.
SITUACIÓN Y PROBLEMÁTICA DE LAS AVES RUPÍCOLAS EN SIERRA SALVADA 69

Metodología mos el criterio de considerar como colonias dis-


tintas aquéllas en las que los nidos más cercanos
En 1986 hicimos el primer censo de la bui- están separados al menos por 1.000 m de distan-
trera de Tertanga o Pico del Fraile en Sierra cia (Del Moral & Martí, 2001). Empleamos pris-
Salvada, y desde ese año visitamos anualmente máticos de 8-10x y, principalmente, telescopios
varias veces la sierra, aumentando progresiva- de 20-60x. En el caso de las chovas piquirroja y
mente nuestro conocimiento de la misma y de piquigualda realizamos recuentos del número de
su avifauna. Ante el anuncio de la construcción individuos que entraban o salían de los cantiles.
de parques eólicos en Sierra Salvada, nos deci- A partir del valor medio de estos conteos en cada
dimos a presentar un proyecto de censo de varias colonia, estimamos el número de parejas. Para el
especies. Así, en 1997, 1998 y 2001 censamos búho real, siguiendo la metodología más habi-
la población de aves rapaces y chovas nidifi- tual, hicimos escuchas nocturnas que incluían la
cantes en los cantiles de Sierra Salvada (Gonzá- reproducción de sus voces en un magnetófono.
lez-Oreja & Pérez de Ana, 1998; Pérez de Ana,
2002). Las especies objeto de estos estudios es- En 1997 y 1998 el trabajo de campo se desa-
tán incluidas en el Catálogo vasco de especies rrolló en fechas tardías, provocando con segu-
amenazadas de la fauna y flora (Ley 16/1994 ridad una subestimación del número de parejas
de conservación de la naturaleza del País Vasco reproductoras, ya que no contamos las parejas
y Decreto 167/1996), que cataloga al alimoche que se establecieron, el número de ellas que
común y al águila real como “vulnerables”, al iniciaron la puesta, el número de huevos que
halcón peregrino y al búho real como “raras” y eclosionaron, ni los pollos que murieron en las
al buitre leonado, a la chova piquigualda y a la primeras semanas. En realidad, nuestros censos
chova piquirroja como “de interés especial”. de 1997 y 1998 se acercaron más a un censo de
pollos volanderos (éxito reproductor) que a un
Los objetivos de estos estudios fueron actua-
censo de parejas reproductoras.
lizar el censo de las poblaciones reproductoras
de las distintas especies dentro de la ZEPA, así En el año 2001, siguiendo la metodología
como determinar las tendencias poblacionales más habitual en este tipo de censos, y a diferencia
de cada especie. Con los datos de los censos de de los de 1997 y 1998, consideramos reproduc-
1997 y 1998, establecimos las orientaciones y ción segura la observación de adulto incubando
emplazamientos que selecciona el buitre leo- y la observación de huevo o pollo en el nido.
nado para instalar sus nidos. En el 2001 anali- En el resto de los casos, debido generalmente a
zamos el éxito reproductor del buitre leonado, la localización de los nidos, que hizo imposible
que empleamos como parámetro indicador de la su observación, y siempre que hubo otros indi-
incidencia de las disposiciones legislativas que cios claros, anotamos reproducción probable. Se
actualmente prohíben el abandono de ganado consideraron indicios claros la entrada y salida
muerto en el monte. reiterada de adultos junto con la presencia de
abundantes excrementos en el exterior del nido,
Con el objetivo de conocer el tamaño de la
siempre que hubiera suficientes garantías de que
población reproductora del alimoche común, el
no se trataba de un posadero.
buitre leonado, el águila real y el halcón pere-
grino, realizamos recorridos de observación por En el año 2001, siguiendo estudios preceden-
el borde y por debajo de los cantiles, empleando tes (Del Moral & Martí 2001), determinamos el
como método el conteo directo de nidos (Telle- éxito reproductor del buitre leonado. Para ello,
ría, 1986), localizándolos con la mayor precisión anotamos los nidos en los que observamos aves
posible en mapas topográficos a escala 1: 50.000 incubando en el censo de enero y febrero y, pos-
y 1: 25.000. En el caso del buitre leonado, segui- teriormente, si había pollo en el segundo censo
70 J.M. PÉREZ DE ANA

de finales de mayo a mediados de agosto. Si ha- No descartamos la posibilidad de que en 2001


bía ave incubando en el primer censo y pollo en también nidificase la pareja reproductora del
el segundo se anotó como éxito reproductor, y monte Arando, aunque no obtuvimos datos que
como fracaso si no había pollo durante el segun- nos hicieran sospechar que así ocurriera.
do censo aun cuando en el primero se observara
En la tabla 1 mostramos la evolución de la
ave incubando.
población de alimoche común en Sierra Salva-
da, compuesta por 3 parejas reproductoras, si
bien alguna de ellas fracasó en la reproducción
Alimoche común o ni siquiera llegó a iniciarla. Ya en el censo de
1992 de la Sociedad Ornitológica Lanius (1992)
Especie estival de presencia ligada a roquedos
fueron 3 las parejas reproductoras registradas,
y cantiles, indiferente a la intensidad de las activi-
aunque dos de los emplazamientos no han sido
dades humanas y a la abundancia de alimento (De
vueltos a encontrar en nuestros censos de 1997,
Juana, 1989). La población europea se estimó en
1998 y 2001. Estos datos indican que la pobla-
2.900-7.200 parejas (Heath et al., 2000) y la es-
pañola entre 1.324 y 1.373 parejas en 1987-1988 ción de alimoche común de Sierra Salvada se
(Perea et al., 1990). En 2000 se volvió a censar ha mostrado bastante estable durante la última
la población española con un resultado similar, década.
en concreto 1.320-1.480 parejas, 37 de ellas en la Respecto al emplazamiento de los nidos, el
CAPV (Del Moral & Martí, 2002). del Tologorri está orientado al este, el del Txar-
En 1998 la pareja del Tologorri crió con lazo al sureste y el del Arando al norte. Los tres
éxito un pollo, que vimos el 4 de agosto en la se localizan en cuevas.
entrada de su nido de visibilidad difícil. Ya en
1997 (González-Oreja & Pérez de Ana, 1998)
encontramos asentada esta pareja aquí. Tam- Buitre leonado
bién es probable que se reprodujeran con éxito
otras dos parejas, una en el Arando y la otra en Especie principalmente sedentaria, cuya pre-
el Txarlazo. sencia está determinada por la cabaña ganade-
ra existente y por la repartición de los distintos
En 2001 la pareja del monte Tologorri se re-
tipos de roquedo (De Juana, 1989). En 1999 se
produjo con éxito, en el mismo nido en el que
estimaron en España entre 53.745 y 55.924 indi-
lo hizo en 1998, donde observamos el pollo en
viduos, habiéndose censado un total de 17.337-
la entrada de su nido, de dificultosa visibilidad,
18.070 parejas reproductoras, 484 de ellas en la
el 18 de agosto. En el año 2001 también nidi-
CAPV (Del Moral & Martí, 2001).
ficó con éxito la pareja reproductora que tiene
su nido en el monte Txarlazo, donde vimos el Incluimos en la tabla 2 el número de parejas
pollo, ya muy crecido, los días 4 y 18 de agosto. seguras y probables de cada colonia. En Sierra

Año Ungino Tologorri Txolope Txarlazo Arando Total


1992 Sí No Sí Sí No 3
1997 No Sí No No Sí 2
1998 No 1 pollo No Sí Sí 3
2001 No 1 pollo No 1 pollo ¿? 2
Tabla 1. Parejas reproductoras de alimoche común Neophron percnopterus en Sierra Salvada en los años 1992, 1997, 1998 y 2001.
[Egyptian Vulture Neophron percnopterus breeding pairs in Sierra Salvada, in years 1992, 1997, 1998 and 2001.]
SITUACIÓN Y PROBLEMÁTICA DE LAS AVES RUPÍCOLAS EN SIERRA SALVADA 71

Número de parejas
1997 1998 2001
Colonia SEG PRO Total SEG PRO Total SEG PRO Total
Portillo del Aro-
13 3 16 17 2 19 2 8 10
Portillo de los Unginos
Portillo de los Unginos-
2 3 5 1 0 1 1 0 1
Portillo Goldetxo
Portillo Goldetxo-
15 1 16 23 2 25 30 8 38
Puerto de Orduña
Puerto de Orduña-
20 3 23 23 0 23 21 8 29
Portillo Bagate
TOTAL 50 10 60 64 4 68 54 24 78
Tabla 2. Número de parejas reproductoras censadas en las colonias de buitre leonado en Sierra Salvada, en 1997, 1998 y 2001
(SEG, parejas seguras; PRO, parejas probables).
[Number of breeding pairs recorded in Griffon Vulture colonies in Sierra Salvada, in 1997, 1998 and 2001 (SEG, confirmed pairs;
PRO, probable pairs).]

Orientación
NW NE SE SW Total
6,3 km 16 km 6,6 km 2,1 km 31 km
1997
Seguro 12 32 2 4 50
Probable 1 7 2 0 10
Total 13 39 4 4 60
1998
Seguro 18 37 6 3 64
Probable 0 4 0 0 4
TOTAL 18 41 6 3 68
Tabla 3. Orientación de los nidos de buitre leonado localizados en Sierra Salvada en 1997 y 1998.
[Orientation of Griffon Vulture nests in Sierra Salvada, in years 1997 and 1998].

Emplazamiento
Repisa Cueva Repisa cubierta Total
1997
Seguro 26 16 8 50
Probable 9 1 0 10
Total 35 17 8 60
1998
Seguro 31 28 5 64
Probable 3 1 0 4
TOTAL 34 29 5 68
Tabla 4. Emplazamiento de los nidos de buitre leonado localizados en Sierra Salvada en 1997 y 1998.
[Substrate for Griffon Vulture nests in Sierra Salvada in 1997 and 1998].

Repisa Cueva Total


Éxito reproductor 16 7 23
Fracaso reproductor 5 0 5
21 7 28
Tabla 5. Número de nidos de buitre leonado en los que se constató éxito o fracaso reproductor en Sierra Salvada en 2001.
[Number of Griffon Vulture nests with and without confirmed breeding success in Sierra Salvada in year 2001.]
72 J.M. PÉREZ DE ANA

Figura 1. Buitre leonado Gyps fulvus adulto, en un nido de la buitrera del Pico del Fraile (foto: Juan Manuel Pérez de Ana).
[Adult Griffon Vulture Gyps fulvus, in a nest of Pico del Fraile colony.]

Figura 2. Buitre leonado, nido con pollo en la buitrera del Pico del Fraile (foto: Juan Manuel Pérez de Ana).
[Griffon vulture, nest with chick at Pico del Fraile colony.]
SITUACIÓN Y PROBLEMÁTICA DE LAS AVES RUPÍCOLAS EN SIERRA SALVADA 73

Figura 3. Vista panorámica parcial de la buitrera del Pico del Fraile (foto: Juan Manuel Pérez de Ana).
[Partial panoramic view of Pico del Fraile colony.]

Figura 4. Otros paredones de la buitrera del Pico del Fraile (foto: Juan Manuel Pérez de Ana).
[Different cliffs at Pico del Fraile colony.]
74 J.M. PÉREZ DE ANA

Salvada había 4 colonias en 1997, que ya sólo A este respecto, la evolución de la población
eran 3 en 1998, al igual que en 2001; la colonia reproductora de la buitrera del Pico del Fraile
de 4 parejas reproductoras que encontramos en resulta clarificadora. En los años 1986, 1987,
el monte Solaiera en 1997 desapareció en 1998, 1988, 1991, 1992, 1993, 1996 y 2001 censamos
cuando sólo quedó una pareja aislada, la cual el número de parejas nidificantes entre el 31 de
tampoco fue encontrada durante el censo de enero y el 17 de marzo, anotando los nidos en los
2001. Por lo tanto, actualmente no hay ninguna que se observaron adultos incubando, huevos o
colonia en el tramo vizcaíno de Sierra Salvada, pollos. Como puede observarse en la figura 6,
donde sólo hemos encontrado una pareja aislada, el incremento fue pequeño entre 1986 y 1992
en el cantil del Bedarbide. (una media del 3,03 % anual) y casi cuatro veces
Mientras en 1997 el número de parejas de mayor entre 1993 y 2001 (una media del 11,97
3 de las 4 colonias fue similar, en 2001 una de % anual). No incluimos nuestros datos de 1997
las colonias desapareció (sólo había una pareja y 1998 por proceder de censos realizados con
aislada), en otra disminuyó el número de pare- posterioridad al 10 de mayo, por lo que no se
jas y en las dos restantes aumentó el número de contaron las parejas nidificantes que fracasaron
parejas en un alto porcentaje, especialmente en antes de esta fecha.
la colonia Portillo Goldetxo-Puerto de Orduña. Tanto en 1997 como en 1998 las orienta-
A lo largo de estos tres censos hemos observado ciones de mayor a menor frecuencia fueron las
una tendencia progresiva a la concentración de siguientes: NE, NW, SE = SW (tabla 3). Tras
los nidos, habiendo aumentado el número de ni- comparar el número de nidos observados en
dos en los cantiles con mayor densidad previa, y cada orientación con el número esperado en fun-
disminuyendo, a veces hasta desaparecer, en los ción de la longitud de cantil con esa orientación,
cantiles con menor densidad (González-Oreja & vemos que los nidos con orientación SE fueron
Pérez de Ana, 1998; Pérez de Ana, 2002). menos frecuentes que lo esperado tanto en 1997
En la figura 5 se muestra que, teniendo en (χ2 = 8,164; g. l. = 3; p = 0,042) como en 1998
cuenta el censo de la Sociedad Ornitológica La- (χ2 = 11,778; g. l. = 3; p = 0,008).
nius (1993), el de 1999 de Del Moral & Martí Respecto al emplazamiento del nido en
(2001) y los nuestros (González-Oreja & Pérez función de la orientación (tabla 4), empleando
de Ana, 1998; Pérez de Ana, 2002), la pobla- una χ2 con la corrección de continuidad de Ya-
ción nidificante de Sierra Salvada se ha dupli- tes, resulta que el buitre leonado en Sierra Sal-
cado ampliamente en 8 años. En concreto, ha vada seleccionó positiva y significativamente
aumentado un 117 %, de lo que se obtiene una
las orientaciones al norte (NE+NW) tanto en
media de incremento anual del 15 % entre 1993
1997 (χ2=5’74; g.l.=1; p<0,05) como en 1998
y 2001. Se trata, sin embargo, de un porcentaje
(χ2=6’69; g.l.=1; p<0,01), al contrario de lo que
inferior al 26 % de incremento anual registra-
sucede en los Pirineos, donde parecen evitarlas
do para el conjunto del País Vasco entre 1989
(Leconte, 1977). En Sierra Salvada quizás se-
y 1999 (Del Moral & Martí, 2001). Además, se
leccione negativamente las orientaciones al sur
observa una clara tendencia a la estabilización
debido a la menor presencia de cuevas y repi-
del número de parejas nidificantes, ya que el in-
sas en las paredes orientadas al sur (obs. pers.),
cremento registrado entre los censos de 1993 y
mientras que los factores climatológicos podrían
1997 equivale a una media anual del 17 %, que
determinar la selección negativa de las orienta-
disminuye a un 13 % entre los censos de 1997
ciones al norte en los Pirineos (Donázar, 1993).
y 1998 y sigue disminuyendo hasta alcanzar un
incremento anual de un 5 % de media entre los Aunque el número de nidos en los que pudi-
censos de 1998 y 2001. mos determinar el éxito reproductor (porcentaje
SITUACIÓN Y PROBLEMÁTICA DE LAS AVES RUPÍCOLAS EN SIERRA SALVADA 75

90

80
Número de parejas nidificantes

70

60

50

40

30

20

10
Figura 5. Evolución de la población nidificante de buitre leonado en
0 Sierra Salvada entre 1993 y 2001.
1993

1994

1995

1996

1997

1998

1999

2000

2001

[Trend of Griffon Vulture breeding population in Sierra Salvada,


1993-2001.]
Año

30

25
Número de parejas nidificantes

20

15

10

0
1986

1987

1988

1989

1990

1991

1992

1993

1994

1995

1996

1997

1998

1999

2000

2001
Año
Figura 6. Evolución de la población nidificante de buitre leonado en la buitrera del Pico del Fraile entre 1986 y 2001.
[Trend of Griffon Vulture breeding population in Pico del Fraile colony, 1986-2001.]

de parejas que se reproducen con éxito) en el año Como observaciones destacables, señalare-
2001 fue sólo de 28, sí parece que el éxito repro- mos que el día 2 de marzo de 1987 localizamos
ductor de los nidos emplazados en cuevas (100 un nido con dos huevos en la buitrera del Pico
%) fue mayor que el de los situados en repisas del Fraile. Las puestas dobles son excepciona-
(76 %), ya sean cubiertas o no (tabla 5), de lo les, aunque existen registros de este tipo (Elo-
que se deduce que los nidos emplazados en cue- segi, 1989). Según Snow & Perrins (1998), se
vas presentaron ventajas frente a los situados en deberían muy probablemente a la puesta de dos
repisas. Se intuye que las condiciones meteoro- hembras. Por otra parte, el 14 de febrero de 1988
lógicas, más concretamente las precipitaciones, observamos en la misma colonia un pollo de una
influyeron en el éxito reproductor del buitre leo- o dos semanas de edad, que habría nacido más de
nado en Sierra Salvada en función del grado de dos semanas antes del inicio del período conoci-
cobertura que ofrecía el emplazamiento del nido, do de estancia de los pollos en el nido (Donázar,
siempre mayor en cueva que en repisa. 1993).
76 J.M. PÉREZ DE ANA

Figura 7. Chovas piquirrojas Pyrrhocorax pyrrhocorax, Pico del Fraile (foto: Juan Manuel Pérez de Ana).
[Red-billed Choughs Pyrrhocorax pyrrhocorax, Pico del Fraile.]

Águila real Halcón peregrino


Especie principalmente sedentaria, que ge- Especie fundamentalmente sedentaria, cuya
neralmente nidifica en roquedos (Díaz et al., presencia está determinada por la de cantiles ro-
1996). En España se estimó en 1990 una pobla- cosos apropiados donde situar sus nidos (Díaz
ción de entre 1.192 y 1.265 parejas reproduc- et al., 1996). En España se estimó en 1986 una
toras (Arroyo et al., 1990a). Actualmente se población de 1.685-1.751 parejas (Heredia et
estima en 1.273-1.294 parejas, 8 de ellas en la al., 1988). Más recientemente Gainzarain et al.
CAPV, concretamente en Álava (Martí & Del (2002) estiman en 2.384-2.690 parejas el tamaño
Moral, 2003). de su población nidificante en España.
En 1998 una pareja inició la reproducción En 1997 encontramos 5 parejas nidificantes
en Sierra Salvada por primera vez en varias dé- en Sierra Salvada, una más que en 1994 (Socie-
cadas. Esta pareja nidificante, formada por una dad Ornitológica Lanius, 1991), cuya localización
hembra subadulta y un macho adulto, después omitimos para evitar posibles expolios. De ellas,
de ser vista en repetidas ocasiones copulando una no obtuvo ningún pollo y las otras 4 criaron
y transportando material y alimento, estuvo in- un pollo cada una (González-Oreja & Pérez de
cubando durante un mínimo de 40 días, aban- Ana, 1998). En 1998 confirmamos la reproduc-
donando finalmente el nido los dos individuos ción de las 5 parejas localizadas en 1997, más una
de la pareja. sexta. De estas 6 parejas, sólo dos se reprodujeron
con éxito, una crió un pollo y la otra dos.
SITUACIÓN Y PROBLEMÁTICA DE LAS AVES RUPÍCOLAS EN SIERRA SALVADA 77

En el año 2001 confirmamos la nidificación La meteorología durante la época de cría,


de 4 parejas reproductoras. Dos de ellas criaron principalmente la lluvia, es el factor que en ma-
con éxito un pollo, otra dos pollos, y una cuarta, yor medida influye en el éxito reproductor de esta
de éxito reproductor desconocido, tenía su nido especie, sobre todo cuando coincide una elevada
en un pequeño agujero, donde vimos entrar y sa- pluviosidad con el mes de eclosión de las puestas
lir a los adultos. Este año detectamos un reajus- (Ratcliffe, 1984; Mearns & Newton, 1988; Ol-
te en la localización de los nidos instalados en sen & Olsen, 1989a y 1989b). En Sierra Salvada,
1998. Tres de las 4 parejas reproductoras locali- durante el mes de puesta de esta especie, abril, la
zadas en 1997 y 1998 en el sector más oriental de pluviosidad suele ser muy elevada, ya que esta
Sierra Salvada variaron ligeramente la ubicación sierra es la primera gran barrera orográfica que
de sus nidos, una lo trasladó 1 km hacia el oeste, encuentran en su camino los frentes del norte
otra 1 km al este, otra 2 km hacia el este, donde y noroeste que penetran, en esta zona, desde el
ya lo tuvo antes de 1997; sólo la cuarta pareja lo Mar Cantábrico hacia el interior de la Península
mantuvo en el mismo emplazamiento. Probable- Ibérica. Quizás la búsqueda de emplazamientos
mente debido a fracasos reproductores tempra- más resguardados (cuevas, agujeros y grietas en
nos, no detectamos las dos parejas nidificantes lugar de repisas) sea una de las explicaciones a
en el sector occidental. Ya en 1998 fracasaron esos porcentajes tan distintos encontrados para los
en la reproducción estas dos parejas. La tasa de emplazamientos de los nidos de las parejas nidifi-
vuelo (número de pollos por pareja de las que se cantes en Sierra Salvada por un lado y el conjunto
reprodujeron con éxito) resultante para el hal- de los emplazamientos de las de Álava por el otro.
cón peregrino en Sierra Salvada en 1997, 1998 Sirva como ejemplo que en la primavera de 1998
y 2001 fue de 1,22 (11/9), muy por debajo de se observó un adulto incubando entre la nieve en
2,17, que es el valor encontrado para 45 parejas el único nido emplazado en repisa que hemos en-
estudiadas en el conjunto de Álava en 1996 y contrado en Sierra Salvada (Í. Zuberogoitia, com.
1997 (J. A. Gainzarain, in litt.). pers.). El éxito reproductor en 2001 ha sido supe-
Por la localización de los territorios de las 4 rior al de 1998; así, mientras en 1998 sólo volaron
parejas nidificantes en 2001, deducimos que el pollos en 2 nidos de las 6 parejas reproductoras,
número de parejas reproductoras de Sierra Sal- en 2001 lo hicieron en 3 de ellos.
vada debía seguir siendo de 6, al igual que en
1998. Si fuera así, el número de parejas repro-
ductoras habría permanecido estable entre esos Búho real
dos años. En cualquier caso, no registramos nin-
gún aumento poblacional, al igual que sucede en La población europea se estimó en 12.000-
el Parque Natural de Urkiola y al contrario de 42.000 parejas (Heath et al., 2000). La población
lo observado en la costa acantilada de Bizkaia, española mínima se estima actualmente en 2.345
donde sí ha aumentado el número de parejas re- parejas (Martí & Del Moral, 2003). Se trata de
productoras (J. Hidalgo, com. pers.). una especie fundamentalmente sedentaria que ni-
difica principalmente en roquedos (Sáez-Royuela,
De los 7 emplazamientos de nidos locali-
1990). Al menos en nuestro ámbito geográfico, su
zados en Sierra Salvada en nuestros censos de
distribución parece estar ligada a la disponibilidad
1997, 1998 y 2001, 6 se encontraron en cuevas,
de presas y roquedos (Donázar et al., 1989).
agujeros o grietas (86 %) y sólo uno en repisa (14
%). Por el contrario, en 44 nidos localizados en En la provincia de Burgos, Román et al.
Álava en 1996 y 1997 (J. A. Gainzarain, in litt.), (1996) estimaron una población de 74-85 parejas,
sólo 15 de ellos se encontraron en cuevas, aguje- de las cuales 3-4 se localizaron en los Valles de
ros o grietas (34 %) y 29 en repisas (66 %). Losa y Mena, limítrofes con Sierra Salvada. Faus
78 J.M. PÉREZ DE ANA

(1985) sólo localizó 2 parejas en el sureste de la Durante nuestro estudio de 1997 localizamos
CAPV. Fernández (1993), con una intensidad de 9 colonias reproductoras ocupadas por un núme-
muestreo muy superior, localizó 12 parejas en ro variable de 1-2 a 21-30 parejas. Las colonias
Álava y el Condado de Treviño (Burgos). En 1994 más numerosas son las de Eskutxi (25±5) y Ter-
se localizó 1 pareja entre la Comunidad Autóno- tanga (15±5). Estimamos una población total de
ma de Cantabria y la provincia de Vizcaya (So- 44-71 parejas para la zona.
ciedad Ornitológica Lanius, 1994). Azkarraga et
al. (1995) consideraron posible la nidificación de
una pareja de la especie en la zona del Tologorri, Chova piquirroja
donde localizaron algunos individuos en época
estival y encontraron plumas en varios posaderos. La población europea se estimó en 16.000-
Zuberogoitia & Torres (1997) localizaron un total 72.000 parejas (Heath et al., 2000). La española
de 3 parejas en Vizcaya, ninguna de ellas dentro se estima en un mínimo de 16.943 parejas, 200-
del área de estudio. 400 de ellas en la CAPV (Martí & Del Moral,
2003).
Aunque existen referencias vagas e impreci-
sas, dentro del territorio alavés del área de estu- Durante nuestro estudio de 1997 localiza-
dio se obtuvieron resultados siempre negativos mos 13 colonias reproductoras ocupadas por
un número variable de 1-2 a 125-175 parejas.
en escuchas realizadas durante los inviernos de
Las colonias más numerosas son las de Tertan-
1990 y 1991 en Delika, Tertanga y Madaria. El
ga (150±25), Aro (55±5), Aro-Eskutxi (35±5)
alejamiento de los roquedos de los posibles ca-
y Eskutxi (25±5). Entre Peña de Aro y Eskutxi
zaderos de valle, y las fuertes pendientes con sus
hay un total de 115±15 parejas. Estimamos una
implicaciones energéticas a la hora de volar, jun-
población total de 281-392 parejas.
to con la escasez de recursos tróficos, deben ser
factores cruciales (J. M. Fernández, com. pers.).
Quizás se trate de áreas de estancia flemática, sin
permanencia constante de la especie (Fernández Quebrantahuesos
1993). El 18 de mayo de 1996, Aitor Ramos en-
La población europea se estima en 190-210
contró un ejemplar adulto muerto en la ladera del
parejas reproductoras (Heath et al., 2000). La
monte Solaiera (Í. Zuberogoitia, com. pers.).
población española es de 81 parejas, aunque el
En 1997 realizamos tres escuchas nocturnas número de territorios es mayor. Dos territorios
con el apoyo de reclamos para localizar posibles han sido colonizados en los Montes Vascos, a
individuos. En 1998 realizamos 21 escuchas en 40 kilómetros de la pareja pirenaica más próxi-
otras 3 jornadas, también con el empleo de recla- ma, uno de ellos regentado por una pareja des-
mos. Los resultados fueron siempre negativos, lo de 1995, que ha realizado su primera puesta en
que nos lleva a pensar que el búho real es una es- 2002. En conjunto, el número de parejas se ha
pecie probablemente ausente de Sierra Salvada. duplicado durante la última década (Martí & Del
Moral, 2003).
Durante el siglo XX, se extinguió en los
Chova piquigualda principales macizos montañosos de la Penínsu-
la Ibérica, siguiendo la tendencia general de la
La población europea se estimó en 63.000- población europea (Martí & Del Moral, 2003).
200.000 parejas (Heath et al. 2000). La española En 2003 he podido saber que en la continuación
se estima actualmente en 10.000-11.000 parejas en territorio burgalés de la alineación montañosa
(Martí & Del Moral, 2003). de Sierra Salvada, existió un nido de Quebranta-
SITUACIÓN Y PROBLEMÁTICA DE LAS AVES RUPÍCOLAS EN SIERRA SALVADA 79

huesos, más concretamente, en las peñas sobre Problemática: parques eólicos


la localidad de El Ribero, dentro del municipio
burgalés de Merindad de Montija. La persona En 1997 estaba proyectada la construcción
entrevistada, Carmelo Uriarte, recuerda que de un parque eólico en la zona alavesa de Sierra
veían de vez en cuando al quebrantahuesos, a Salvada (“Salvada 1 y 2”) y otro en territorio
veces usando un rompedero que se encontraba burgalés (“Orduña 1 y 2”). Según la Sociedad
Española de Ornitología (1995), deberían valo-
en la cuadrícula UTM VN6166, según me seña-
rarse el impacto de los aerogeneradores y sus
ló en un mapa cartográfico. Actualmente, justo
infraestructuras acompañantes sobre las aves,
aquí se asienta una cantera en explotación, como
considerando la importancia ornitológica de la
también sabe el entrevistado. En el año 1947 re-
zona. En los espacios naturales no protegidos
cuerda que accedieron al lugar donde se encon-
pero de reconocida importancia internacional,
traba el nido, en la cuadrícula UTM VN6165 o
como las zonas IBA, sólo deberían autorizarse
VN6164 y cómo, tras trepar entre las rocas y fi-
estas instalaciones si tras la realización de es-
nalmente subirse un joven encima del otro (eran
tudios detallados sobre su impacto, este fuera
dos: Carmelo Uriarte y un hijo del veterinario),
mínimo sobre la avifauna.
llegaron a ver, coger y llevarse el huevo único
que se encontraba en el nido, que era de color En 1997 estimamos el impacto sobre la
ladrillo y del tamaño de los huevos de pavo, se- avifauna rupícola de cada uno de los emplaza-
gún su testimonio. También recuerda el nombre mientos de los parques eólicos proyectados, si-
que recibía el lugar donde se encontraba el nido: guiendo la metodología del estudio de Energía
Cueva Labrada. Tras robarle el huevo en 1947 Hidroeléctrica de Navarra (1994). Para ello cal-
a la pareja de quebrantahuesos, ésta no volvió a culamos qué porcentaje de la población repro-
ductora en la CAPV nidificaba dentro de un área
utilizar este nido entre los años 1948 y 1950, ni
circular, centrada en el parque eólico, de radio
recuerda haber vuelto a verlos en la zona. Aun-
10 km para el alimoche común y el águila real,
que quizás la pareja sólo cambió de nido dentro
20 para el buitre leonado, y 5 para el halcón pe-
de su territorio, ya que aún en la década de los 50
regrino. El tamaño de la población reproductora
existía un nido en la cercana localidad de Berce-
de cada especie (número de parejas) en Sierra
do (Román et al., 1996).
Salvada fue el que determinamos en 1997 (1
En Sierra Salvada se han producido varias pareja de alimoche común, 60 de buitre leona-
observaciones puntuales: un juvenil el 10 de do, 1 de águila real y 5 de halcón peregrino), y
abril de 1995 (Lorenzo & González-Oreja/So- en la CAPV fue el considerado por la Sociedad
ciedad de Ciencias Naturales de Sestao, 1995), Ornitológica Lanius (1992) para el alimoche co-
un ave el 1 de marzo de 1997 (Conde, 1997), un mún (42 parejas), por la Sociedad Ornitológica
inmaduro el 17 de marzo de 2000 (Conde, 2000) Lanius (1993) y Rodríguez & Arambarri (1996)
y una más ya en Burgos, en la adyacente Peña para el buitre leonado (310 parejas), por Arroyo
Angulo el 7 de abril de 1991 (Vadillo, 1991). et al. (1990a) para el águila real (8 parejas), y por
Aunque no existen datos que hagan suponer que la Sociedad Ornitológica Lanius (1991) para el
su expansión como reproductor desde los Piri- halcón peregrino (48 parejas).
neos hacia el oeste esté produciendo un aumento El parque eólico “Salvada” afectaría al 7,1 %
de su presencia en Sierra Salvada, parece lógico de la población reproductora de alimoche común
que esta sierra, por sus características, junto con de la CAPV, al 22,9 % de la de buitre leonado,
su continuación en territorio burgalés, pudiera al 11,1 % de la de águila real, y al 2,1 % de la de
acoger en el futuro un nuevo territorio de que- halcón peregrino. Por su parte, el parque eólico
brantahuesos. “Orduña” afectaría al 7,1 % de la población re-
80 J.M. PÉREZ DE ANA

productora de alimoche común de la CAPV, al mente sensibles a un aumento de la mortalidad,


22,9 % de la de buitre leonado, al 11,1 % de la de de modo que las poblaciones se vienen abajo
águila real, y al 8,3 % de la de halcón peregrino. cuando ésta es elevada (Donázar & Fernández,
1990). Todo ello implica que cualquier mínima
En general, el porcentaje de la población
disminución en el tamaño de población de un
de cada especie que resultaría afectado por los
área concreta puede tener graves consecuencias
parques eólicos proyectados sería alto, siendo
para la conservación local o regional de la espe-
previsible un impacto global elevado e inadmi-
cie afectada (Donázar, 1993).
sible. Una de las líneas de aerogeneradores de
“Salvada 2” se situaría sobre la colonia de buitre
leonado de Peña del Aro-Monte Ungido; una de
Líneas eléctricas
las líneas de aerogeneradores de “Orduña 1” se
situaría a menos de 500 m de la colonia de buitre El de las aves es probablemente el grupo ani-
leonado de Tertanga y aproximadamente a un mal que con mayor frecuencia y peor fortuna
km de uno de los nidos de halcón peregrino; y la resulta afectado por las líneas eléctricas. Exis-
línea de aerogeneradores de “Orduña 2” se situa- ten dos tipos fundamentales de accidentes en
ría sobre los nidos aislados de buitre leonado del tendidos eléctricos: la electrocución en el apo-
Monte Solaiera y aproximadamente a un kilóme- yo o poste (más frecuente en aves de mediana
tro de otro de los nidos de halcón peregrino. o gran envergadura, como las rapaces, y en las
líneas inferiores a 45 kV), y la colisión contra los
Ahora bien, Sierra Salvada se localiza en el
cables (Ferrer & Negro, 1992), especialmente
límite de la CAPV con la provincia de Burgos. en condiciones de escasa visibilidad (Donázar,
Por lo tanto, para realizar una correcta evalua- 1993). Las aves rapaces seleccionan a menudo
ción del impacto sobre la avifauna de los parques posaderos situados en zonas de contacto entre
eólicos proyectados deberían tenerse en cuenta diferentes hábitats o en collados y cumbres. Esta
no sólo las poblaciones de las parejas afectadas circunstancia incrementa significativamente la
dentro de la CAPV, sino también las de la Sierra peligrosidad de determinados apoyos que reci-
de la Carbonilla y la Sierra de la Magdalena o ben a la mayoría de las aves que acuden a posar-
Montes de La Peña, localizadas dentro de los se en la línea, y llegan a ser auténticos puntos
radios de acción antes definidos, pero ya dentro negros (Donázar, 1993). Para más información,
de la provincia de Burgos. véase la monografía de Ferrer & Janss (1999).
Una valoración ecológica de estos resultados En 1997 valoramos el impacto de las líneas
necesitaría tener en cuenta algunos aspectos de eléctricas existentes sobre la avifauna rupícola.
la biología de la conservación de estas especies. Dos líneas cruzan Sierra Salvada en sentido nor-
Todas ellas son predadoras o carroñeras, que se te-sur, una atravesando el borde de cantil por el
sitúan en lo más alto de las pirámides tróficas, Portillo de Goldetxo (45 kV) y la otra junto al
lo que limita su escasa abundancia natural. Por monte Bedarbide (380 kV). Estimamos el im-
otro lado, son “estrategas de la K”, siendo ca- pacto sobre la avifauna realizando itinerarios de
racterísticas de su reproducción: un reducido ta- búsqueda de cadáveres bajo los tendidos. En el
maño de puesta en cada intento reproductor, una caso de la línea de 45 kV utilizamos una banda
baja productividad, y una gran inversión para de 5 a 10 metros a cada lado del recorrido, y de
asegurar el futuro de la descendencia. La capa- 15 a 20 metros para la línea de 380 kV.
cidad de carga del medio para estas especies, de Durante nuestro estudio recorrimos los si-
gran longevidad, es generalmente baja, y viven guientes tramos de las líneas eléctricas: 3.400
en condiciones normales cerca de dicho límite. metros de la línea de 380 kV el 7 de junio de
Las grandes rapaces carroñeras son extremada- 1997 y 2.100 metros el 14 de junio de 1997; para
SITUACIÓN Y PROBLEMÁTICA DE LAS AVES RUPÍCOLAS EN SIERRA SALVADA 81

la de 45 kV, prospectamos 2.000 metros el 12 de buena parte del ganado muerto acababa como ali-
julio de 1997. No encontramos ningún indicio mento de la fauna carroñera. Pero para contener
de accidentes (electrocuciones y choques) para el brote epidémico de la EBB, se ha hecho más
las especies estudiadas. No obstante, nos cons- efectivo el cumplimiento de dichas disposiciones
ta que al menos un buitre leonado se encontró legislativas y han entrado en vigor otras tres:
muerto, poco antes del inicio de nuestro estudio,
a) Real Decreto 1911/2000, de 24 de noviembre,
fuera del tramo recorrido de la línea de 380 kV
por el que se regula la destrucción de los mate-
(J. Zuberogoitia, com. pers.). Además, en agosto
riales especificados de riesgo en relación con las
de 1997 se encontró un cuervo dentro del tramo
encefalopatías espongiformes transmisibles.
recorrido de la línea de 45 kV (J. I. García, com.
pers.). En cualquier caso, se sabe que algunos b) Real Decreto 3454/2000, de 22 de diciembre,
depredadores recorren las líneas eléctricas (obs. por el que se establece y regula el Programa
pers.) y aprovechan los cadáveres que aparecen integral coordinado de vigilancia y control de
bajo ellas, por lo que su tiempo de permanencia las encefalopatías espongiformes transmisibles
es reducido (Bevanger et al., 1994). de los animales.
Tanto el alimoche común como el buitre leo- c) Real Decreto-Ley 4/2001, de 16 de febrero, so-
nado resultan afectados por los tendidos eléctri- bre el régimen de intervención administrativa
cos en mayor o menor grado (Perea et al., 1990; aplicable a la valorización energética de harinas
Arroyo et al., 1990b). Estos últimos autores de origen animal procedentes de la transforma-
señalaron que la proximidad de tendidos a los ción de despojos y cadáveres de animales.
cantiles de nidificación constituye una amenaza
de impacto desconocido sobre la población de Ahora los cadáveres de bovino, ovino y capri-
buitre leonado en Álava. Esto hace que, local- no, y desde el 1 de marzo de 2001 también los de
mente y en determinadas circunstancias, puedan equino, porcino y avícola, son considerados mate-
producirse bajas importantes por electrocución riales específicos de riesgo (MER) y, según la le-
o choques en la población de algunas de estas gislación vigente, deben ser eliminados mediante
especies (Donázar, 1993). Para minimizar estos incineración o inhumación y nunca abandonados
riesgos, deberían aislarse (Negro et al., 1989) y en el monte o muladares más o menos controla-
señalizarse convenientemente los tendidos que dos y legales, salvo excepciones amparadas por
discurran por las proximidades de colonias y el Real Decreto 1098/2002. En este caso, el cum-
en los sectores de mayor densidad. En algunas plimiento riguroso de unas disposiciones legisla-
zonas de España, los tendidos eléctricos suponen tivas necesarias para eliminar la EBB de entre la
un problema para la conservación del águila real, cabaña ganadera afectaría a la conservación de
pues sufre numerosas bajas por electrocución especies incluidas en los diferentes catálogos de
(Martí & Del Moral, 2003). especie amenazadas, puesto que la fauna carro-
ñera depende del ganado muerto. En el ámbito
de la CAPV, las poblaciones de alimoche común
y buitre leonado seguramente dependen más del
El mal de las vacas locas
ganado que queda muerto en el monte ilegalmente
Aunque ya existían restricciones antes del que del trasladado a los muladares o “buitreras”
brote epidémico de la encefalopatía espongiforme legalmente constituidos. Y no olvidemos que en
bovina (EBB, en adelante), enfermedad más cono- el primer caso se estarían incumpliendo las nor-
cida como “mal de las vacas locas” (Real Decreto mas legislativas, ya no sólo desde la entrada en
2224/1993 sobre normas sanitarias de eliminación vigor de esas tres nuevas disposiciones en los
y transformación de animales muertos y desperdi- años 2000 y 2001, sino desde 1993 por el Real
cios de origen animal, y Ley 10/1998 de residuos), Decreto 2224/1993.
82 J.M. PÉREZ DE ANA

En el año 2001 pudimos estudiar el éxito re- leonado (Arroyo et al., 1990b) recomendadas en
productor de las parejas reproductoras de buitre España es controlar la construcción de nuevas
leonado, factor clave a la hora de determinar la in- pistas y carreteras, especialmente si pueden fa-
fluencia de las disposiciones legislativas que pro- vorecer el trasiego masivo de turistas cerca de
híben el abandono de ganado muerto en el monte los cantiles.
con el objetivo de frenar la expansión de la EBB.
Así, teniendo en cuenta un total de 28 parejas en Las molestias ocasionadas por visitantes y
las que se encontró adulto incubando en enero y excursionistas son los principales factores de
febrero, resultó que en 23 de los nidos había pollo riesgo que afectan al buitre leonado en Ála-
crecido en los censos de finales de mayo a media- va (Arroyo et al., 1990b). Del mismo modo,
dos de agosto, lo que supone un éxito reproductor Azkarraga et al. (1995) señalaron al progresi-
de un 82 %, superior al porcentaje registrado en vo aumento del número de visitantes en Sierra
1999 para el País Vasco y el conjunto de España Salvada como posible causa de molestias a las
(un 75 % en ambos casos). De esto se deduce que poblaciones nidificantes de alimoche común,
la prohibición de abandonar ganado muerto en el buitre leonado y halcón peregrino. Durante
monte no tuvo ningún efecto en el éxito reproduc- nuestro estudio hemos detectado dos zonas en
tor, donde más rápidamente se hubiera detectado las que este tipo de impacto es presumiblemente
cualquier influencia negativa, ya que la carroña alto: buitrera de Tertanga o Pico Fraile y el tramo
en el monte no disminuyó lo suficiente. Tam- entre el mirador Esquina Rubén y la cascada del
poco tuvo ninguna afección negativa la práctica Nervión, donde un sendero promocionado con
supresión del muladar de Carranza, a 25 km de fines excursionistas (“Senda del Cortado”, de 3
la colonia más cercana de Sierra Salvada, desde km de longitud) discurre justo al borde del cantil
donde se trasladarían al mismo según sugerían las sobre los nidos.
direcciones de vuelo observadas. Sin duda, el ré-
gimen extensivo de la ganadería en las zonas altas También Gainzarain (1998a) señala que la
de Sierra Salvada y otras áreas cercanas provee escasa productividad del alimoche común en
de carroña suficiente, ante la imposibilidad o la Álava puede deberse a las actividades al aire li-
desidia a la hora de cumplir con las disposicio- bre y al trasiego humano (paseantes y ciclistas
nes legislativas que prohíben abandonar ganado de mountain-bike) en las inmediaciones de los
muerto en el monte. nidos. Por ello, y teniendo en cuenta las cate-
gorías en las que se encuentran catalogadas las
especies estudiadas, sería necesario estudiar con
Molestias humanas en el área de cría mayor profundidad este punto, incluyendo la re-
gulación de estas actividades.
En numerosas ocasiones se ha señalado el
Además de las molestias, también se ha se-
efecto negativo que tienen las molestias ocasio-
ñalado el vuelo libre y la escalada como factores
nadas por el ser humano sobre el éxito repro-
de riesgo para las aves rapaces carroñeras, por
ductor de las aves rapaces debido a visitas con-
lo que se ha propuesto la prohibición de estas
tinuas por parte de excursionistas, fotógrafos,
actividades en los cantiles durante la época de
naturalistas o cazadores. Otro factor causante
reproducción (Perea et al., 1990). Desconoce-
de fallos en la reproducción de las grandes ca-
mos la posible incidencia del vuelo en ultrali-
rroñeras son las molestias derivadas de estudios
geros, ala-delta y parapente en Sierra Salvada,
e investigaciones sobre las propias aves; este
estas dos últimas practicadas junto a la buitrera
riesgo es particularmente elevado en el caso de
de Tertanga o Pico del Fraile.
las especies coloniales (Donázar, 1993). Una de
las medidas de conservación de las poblaciones Una de las causas que podría explicar el fraca-
de alimoche común (Perea et al., 1990) y buitre so reproductor de la pareja de águila real en 1998
SITUACIÓN Y PROBLEMÁTICA DE LAS AVES RUPÍCOLAS EN SIERRA SALVADA 83

fueron las molestias humanas. En concreto, la bién se cita como una de las amenazas para el
práctica de los deportes de ala-delta y parapente águila real (Martí & Del Moral, 2003).
desde el monte Arando (A. Conde y J. Maguregi,
Azkarraga et al. (1995) señalaron la muerte
com. pers.). Gainzarain (1998b) señala entre los
por envenenamiento en 1991 de 10 buitres leo-
factores limitantes para el águila real las molestias nados en Sierra Salvada. Durante nuestro estudio
ocasionadas durante la época de reproducción, no hemos encontrado ningún ejemplar muerto de
como las derivadas del excursionismo, la foto- las especies consideradas. No obstante, recorda-
grafía y la escalada, que pueden hacer fracasar la mos el macabro espectáculo que se produjo en
crianza. Durante el censo de 2001 no vimos a nin- los primeros meses de 1991, cuando media doce-
guno de los miembros de esta pareja reproducto- na de buitres quedaron muertos en los posaderos
ra. Quizás la alta frecuencia de excursionistas por de la buitrera de Tertanga o Pico del Fraile y
la senda entre los dos miradores del Monumento algunos más bajo ella, tal y como suele suceder
Natural de Monte Santiago, inmediatamente en- tras alimentarse de carroña envenenada.
frente del emplazamiento del nido, haya influido
también en el abandono del nido construido en
1998. El trasiego de gente en las zonas de nidi-
Agradecimientos
ficación del águila real es, de hecho, la segunda
amenaza más importante sobre el éxito reproduc- Los datos de este artículo tienen su origen
tor de la especie (Arroyo et al., 1990a). en tres estudios realizados por la Sociedad de
Ciencias Naturales de Sestao y subvencionados
por el Departamento de Agricultura y Pesca del
Venenos Gobierno Vasco en 1997, 1998 y 2001. Serafín
Alarcón, José Antonio González-Oreja y Juan
Pocos países como España han tenido y tie- Carlos Lorenzo participaron en el trabajo de
nen todavía una tradición tan arraigada en el uso campo. En 1997 también colaboraron Javier Ca-
de venenos para el control de especies animales ñada y Roberto González. Agradecemos la ayu-
no deseadas. La consecuencia de estas actuacio- da desinteresada de Iñaki Alonso, Alfredo Con-
nes para las aves carroñeras es bien conocida: la de, Eneko Díaz, José María Fernández, Mikel
cadena de envenenamientos secundarios es in- de Francisco, José Antonio Gainzarain, Rafael
controlable y acaba finalmente en las aves carro- Garaita, José Ignacio García, Jon Hidalgo, Jon
ñeras. Es posible que las especies habitualmente Maguregi, Francisco José Martínez, José Ángel
consumidoras de pequeños cadáveres, como el Nuevo, Íñigo Zuberogoitia y Julen Zuberogoi-
alimoche común, sean más susceptibles de re- tia. También agradecemos la ayuda y paciencia
sultar afectadas que los buitres leonados (Do- de Maite Garrigós, que nos acompañó en varias
názar, 1993). Sin embargo, el 64 % de las muer- ocasiones.
tes conocidas de buitre leonado, producidas en
las últimas décadas en España, se han debido a
venenos. Como medidas de conservación se ha Referencias
propuesto aplicar con todo rigor las penas pre-
ARROYO, B.; FERREIRO, E. & GARZA, V. 1990a. El
vistas en la ley contra el uso de venenos (Arroyo
águila real (Aquila chrysaetos) en España.
et al., 1990b). En el caso del alimoche común, Censo, distribución, reproducción y conserva-
el uso ilegal de sustancias para control de de- ción. Ministerio de Agricultura, Pesca y Ali-
predadores se considera una de las principales mentación. Madrid.
amenazas actuales (Del Moral & Martí, 2002). ARROYO, B.; FERREIRO, E. & GARZA, V. 1990b. II
El repunte en el uso del veneno en España tam- Censo nacional de buitre leonado (Gyps ful-
84 J.M. PÉREZ DE ANA

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EL ÁGUILA REAL Aquila chrysaetos EN ÁLAVA.
ANÁLISIS DE LA SITUACIÓN
Y PERSPECTIVAS DE FUTURO

ANDRÉS ILLANA & DIANA PANIAGUA

Grupo Alavés para la Defensa y Estudio de la Naturaleza (GADEN)


Apartado de correos 899. 01080 Vitoria
aillana@wanadoo.es

Resumen
La población de águila real en Álava, la única del País Vasco, ha mantenido 13 territorios ocupa-
dos durante los años 90 del siglo XX, distribuida exclusivamente por las montañas de transición
y meridionales. Se ha podido constatar la pérdida de una decena de territorios desde los años 50,
aunque a partir de los 80 la población podría haber alcanzado una fase de estabilidad. La dieta se
basa en el consumo de conejos y otros pequeños mamíferos, junto con algunas aves. La media
de nidos por territorio se acerca a cuatro. Las molestias humanas en época de cría y el deterioro
de los hábitats podrían ser los principales factores de amenaza.
Palabras clave: águila real, Aquila chrysaetos, Álava, País Vasco, distribución, conservación.

Summary
The Golden EagleAquila chrysaetos in Álava. Situation and future perspectives
The population of Golden Eagle in Álava, the only one for the Basque Country, consisted on 13
occupied territories during the 90’s, and was distributed around central and Southern mountains.
We came to know the lose of about ten territories since the 50’s, although from the 80’s the
population is showing a period of stability. Main food is rabbit and some other small mammals,
together with birds. Average number of nests per territory is nearly four. Human disturbance in
nesting period and habitat deterioration could be the most important limiting factors.
Key words: Golden Eagle, Aquila chrysaetos, Álava, Basque Country, distribution, conserva-
tion.

Laburpena
Arrano Beltza Aquila chrysaetos Araban. Azterketa eta etorkizunerako perspektibak.
Euskadin aurkitzen den arrano beltzaren populazio bakarra Araban kokatzen da, eta XX. Mendeko
90. hamarkadan 13 lurraldez osatua zegoen, denak ere Hegoaldeko nahiz Trantsiziozko mendietan
banatuak. 50. hamarkadatik aurrera hamarren bat lurralderen desagerpena egiaztatu da, 80. hamar-
kadan populazioa egonkortasun garai baten sartu den arren. Arrano Beltzaren elikadura untxi eta
beste ugaztun txikietan oinarritzen da nagusiki, baina zenbait hegazti ere harrapatzen du. Bataz
beste, lurralde bakoitzeko lau kabi daude. Ugalketa sasoian jazotzen diren giza-eragozpenak eta
habitatarenn hondaketa especie honentzako mehatxu nagusiak izan daitezke.
Hitz gakoak: Arrano beltza, Aquila chrysaetos, Araba, Euskadi, banaketa, kontserbazioa.
88 A. ILLANA & D. PANIAGUA

Introducción perdido desde los años 50 entre cuatro y cinco


territorios. En los últimos años se han observado
Hemos estudiado la población de águila real
ejemplares dispersantes en los macizos de Aralar
Aquila chrysaetos en la provincia de Álava du-
y Gorbea.
rante los últimos 15 años, efectuando un segui-
miento de los territorios ocupados y anotando En las montañas y altos valles de transición
datos sobre reproducción y biología (Illana et se habrían perdido al menos dos territorios du-
al., 1991; Illana, 1994). La población alavesa es rante las últimas décadas, mientras que en las
en la actualidad la única del País Vasco (Martí montañas meridionales habrían desaparecido al
& Del Moral, 2003). menos tres parejas. Por tanto, desde la década de
los 50 la población habría disminuido en el País
Vasco al menos un 40 %. Esta regresión ha sido
Distribución espacial
y tamaño de la población mayor que la descrita para el conjunto de la po-
blación europea, que se ha cifrado en un 30 %.
Durante los años 90 se han contabilizado 13
territorios ocupados. En 12 casos hemos podi- Las décadas de los 60 y 70 vivieron el decli-
do confirmar intentos reproductivos y sólo en ve más acusado de la especie en el País Vasco.
uno esto no ha sido posible. Conviene señalar la En los 80 se asistió a una lenta pero continuada
ausencia de territorios en zonas aparentemente modificación de la tendencia y, según apuntan
óptimas para la especie (Sierra Salvada, Valde- todos los indicios, la población de águila real
rejo, etc.), lugares donde sabemos que existían habría alcanzado en la actualidad una fase de
parejas nidificantes en tiempos pasados. estabilidad.
Si analizamos la distribución de la especie
según los sectores naturales de la Comunidad
Autónoma del País Vasco, podemos observar Alimentación
cómo falta en la franja litoral, en los valles at-
lánticos y subatlánticos, así como en los valles Durante el curso de nuestros trabajos hemos
submediterráneos y Rioja Alavesa. Los valles podido analizar 106 restos de presas, recogidos
subatlánticos y submediterráneos se caracteri- en 10 nidos correspondientes a 7 parejas. El es-
zan por la falta de zonas montañosas y no son pectro trófico del águila real en Álava incluye 22
favorable para la nidificación de las águilas. Por especies de vertebrados además de la carroña.
su parte, la Rioja Alavesa es una zona abrupta Solamente 5 especies (3 mamíferos y 2 aves su-
pero sin grandes roquedos. El águila real aparece peran) el 5 % del total de presas.
solamente en dos sectores naturales: montañas y El conejo es la presa más frecuente (28,3 %).
altos valles de transición (7 parejas) y montañas
Le siguen el zorro con una frecuencia de 10,37 %
meridionales (6 parejas).
y la liebre con 9,43 %. Entre las aves, la urraca y
La distancia media internido es de 11,44 km. la perdiz son las presas más frecuentes. En con-
La densidad sería de 1 pareja cada 36,47 km2. La junto, los mamíferos son el grupo mejor repre-
especie muestra un espaciamiento regular de los sentado con una frecuencia del 60,35 %, frente
nidos (GMSAD=0,90). al 36,75 % de las aves. El 23,5 % de las presas
del águila está constituido por otros depredadores,
tanto mamíferos (gato doméstico, zorro, coma-
Tendencias poblacionales dreja) como rapaces diurnas (halcón peregrino,
En la franja litoral de la Comunidad Autóno- cernícalo vulgar) y nocturnas (cárabo, búho chico,
ma Vasca no se tiene constancia histórica recien- etc.). Los reptiles han aparecido en un porcentaje
te de que haya existido ningún territorio ocupa- muy pequeño (1,8 %), pero su importancia real en
do. En las montañas septentrionales se habrían la dieta seguramente sea superior.
EL ÁGUILA REAL Aquila chrysaetos EN ÁLAVA.
ANÁLISIS DE LA SITUACIÓN ACTUAL Y PERSPECTIVAS DE FUTURO 89

Figura 1. Distribución aproximada de los territorios de águila real Aquila chrysaetos en el marco de los sectores naturales de la
Comunidad Autónoma del País Vasco. Se señalan en azul territorios conocidos durante las décadas de los 50-70 del siglo XX pero
desocupados en la actualidad.
[Distribution of Golden Eagle Aquila chrysaetos breeding territories, in relation to natural regions in the Basque Country. In blue,
known territories for 1950’s and 1970’s, but currently abandonned.]

Reptiles Carroña Vulpes


2% 1% Córvidos
11%
16%

Lepus Otros
9% 26%
Aves Alectoris
37% Mamíferos 6%
60% Oryc
Strix
4% 28%

Figura 2. Frecuencia de aparición de tipos de presa (arriba) y de especies-presa (debajo) en la dieta del águila real en Álava,
según restos recuperados en nidos.
[Frequency of types of prey (above) and prey-species (below) in Golden Eagle diet in Álava,
deduced from feeding remains taken at nests.]

Número de parejas controladas 9,2


Número de nidificaciones 8,3
Número de fracasos 1,7
Pollos que nacen 7,9
Pollos que vuelan 7,1
Productividad 0,77
Éxito reproductor 0,84
Tasa de vuelo 1,08
Porcentaje de parejas con éxito 78,66
Tabla 1. Parámetros reproductores anuales medios de la población de águila real en Álava, durante el periodo 1989-1997.
[Breeding parametres of Golden Eagle population in Álava, 1989-1997.]
90 A. ILLANA & D. PANIAGUA

Las águilas de Álava y Burgos, presentan la seguridad ante posibles predadores o ante las
una diversidad trófica mayor que las de Navarra, molestias humanas condicionaría la ubicación
Extremadura o Sierra Morena. Se concluye que de los nidos situados en la parte baja del cantil.
las poblaciones donde el conejo es abundante En cualquier caso, parece que las águilas reales
presentan una afinidad trófica importante. prefieren instalar los nidos en los tercios central
y superior de las paredes.
Aparentemente, a mayor distancia de una
Reproducción pared a la pista forestal más cercana, más pro-
babilidades existen de que en esa pared exista
En total hemos localizado 47 nidos, pertene-
cientes a 12 parejas de esta población. Todos los un mayor número de nidos. Los nidos situados
nidos estaban ubicados en sustratos rocosos. a más distancia son estadísticamente utilizados
un mayor número de años. Los más cercanos a
La media de nidos por territorio ocupado es las pistas forestales tenderían a situarse a mayor
de 3,9, una cifra bastante elevada. Sin embargo, altura en la pared, mientras que aquellos cuya
el que una pareja tenga muchos nidos no quie- distancia es mayor, se ubican en la parte central
re decir que utilice todos ellos; hemos podido o inferior del cantil.
determinar como aquellas parejas que tienen
menos nidos (1-3), tienden a utilizar todos de Los parámetros reproductores hallados para
forma alternativa, mientras que las parejas que esta población en el periodo 1989-1997 se expo-
tienen un número superior, tan sólo utilizan un nen en la tabla 1.
pequeño porcentaje de ellos para la cría, aunque
mantengan en buen estado el resto.
El número de nidos en una misma pared está Problemática y estado
determinado por las propias características de de conservación
ésta, por lo que hay más posibilidades de en-
contrar varios nidos en paredones continuos y Sólo dos parejas crían en el interior de un es-
en hoces y cañones que en las agrupaciones de pacio natural protegido bajo la figura de parque
riscos y en los riscos aislados. La especie parece natural. Por otro lado, únicamente cuatro parejas
sentir una cierta predilección por las paredes cu- tendrían la mayor parte de su territorio en Álava,
biertas con algo de vegetación. La altura de las ya que el resto las compartimos con las provin-
paredes utilizadas para la instalación de nidos cias vecinas. Uno de los principales problemas
oscila entre 10 y 50 metros. que presenta la especie es la baja tasa de vuelo.
Los nidos de una misma pareja se encuentran Los principales factores de amenaza identifica-
más o menos agrupados, con un rango de dis- dos son las molestias humanas en época de cría y
tancia que ha oscilado entre los 0 y los 3.400 m. la alteración del hábitat de nidificación (Arroyo
La mayoría de los nidos se localizan en cuevas et al., 1990).
y grietas, así como en salientes con apoyo en La conservación de la población alavesa de
vegetación. águila real pasa sin lugar a dudas por la protec-
Los factores climáticos no parecen influir ción de los lugares de nidificación y por evitar
a la hora de seleccionar una zona cubierta o actividades humanas que alteren dichos lugares.
descubierta para la instalación de un nido. Sin Las dos parejas que tienen sus nidos en un par-
embargo, la altura del punto seleccionado hasta que natural han fracasado en su reproducción en
la base de la pared sí parece que puede deter- el año 2003. Dos de las parejas estudiadas tienen
minar esta cuestión. En este sentido, los nidos un futuro incierto. No obstante, en el año 2003 se
situados a menos de 5 m de la base de la pared ha instalado una nueva pareja que ha conseguido
tienden a estar cubiertos. Según estos resultados, criar satisfactoriamente.
EL ÁGUILA REAL Aquila chrysaetos EN ÁLAVA.
ANÁLISIS DE LA SITUACIÓN ACTUAL Y PERSPECTIVAS DE FUTURO 91

Referencias
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y reproductor en Álava. Premio Gonzalo Nár- rio de Medio Ambiente. Madrid.
diz de Etología 1993, pp. 75-126. Gobierno
Vasco. Vitoria.
TÉCNICAS DE CARACTERIZACIÓN GENÉTICA DE
POBLACIONES DE BECADA Scolopax rusticola

JONATHAN RUBINES & BENJAMÍN J. GÓMEZ-MOLINER

Departamento de Zoología y Biología Celular Animal. Universidad del País Vasco


Paseo de la Universidad, 7. 01006 Vitoria
kayult@yahoo.es

Resumen
La Universidad del País Vasco, el Museo Nacional de Ciencias Naturales y el Club de Caza-
dores de Becadas (CCB), han iniciado estudios de caracterización genética de las poblaciones
europeas de becada. Actualmente se están poniendo a punto marcadores moleculares, tanto
mitocondriales como nucleares, que permitan caracterizar las diferentes subpoblaciones. Entre
los objetivos concretos del proyecto, se pretende diferenciar las poblaciones sedentarias de las
migradoras y conocer si existe flujo génico entre ellas. Además, una vez caracterizadas cada
una de las subpoblaciones, se podrán conocer las rutas migratorias seguidas por los individuos
durante la época invernal, así como el origen de los efectivos invernantes en el sur de Europa.
Se tratará de evaluar el polimorfismo de las poblaciones de becadas del norte de la Península
Ibérica durante los últimos 20 años, para conocer su estado de conservación. Por último, se
estudiarán las relaciones filogenéticas de las poblaciones de becada europeas y de las islas
atlánticas, tratando de inferir la filogeografía de la especie. Las muestras están siendo cedidas
por el CCB, la Federación de Asociaciones Nacionales de Becaderos del Paleártico Occidental
(FANBPO) y la Real Federación Española de Caza (RFEC).
Palabras clave: Becada, Scolopax rusticola, genética, subpoblaciones, Europa.

Summary
Techniques of genetic characterization of Woodcock Scolopax rusticola
Basque Country University and Natural Science National Museum, with collaboration of Wo-
odcock Hunter Club (CCB), have promoted studies about genetic characterization of European
Woodcock populations. Currently, molecular markers, both mithocondrial and nuclear, are be-
ing developed to define different subpopulations. Among particular objectives, resident and
migratory populations will be separated, and genetic flow between them will be quantified.
Besides, after this genetic characterization, we will be able to precise migrating routes, and the
origin of birds wintering in Southern Europe. We will try to evaluate population polimorfics in
Northern Iberian population for the last 20 years, to ascertain the conservation status. Finally,
phylogenetic relationships in European and Atlantic islands populations will be investigated,
to study the species phylogeography. Samples for the study are provided by CCB, Federation
of National Associations of Woodcock Hunters (FANBPO) and the Spanish Royal Federation
for Hunting (RFEC).
Key words: Woodcock, Scolopax rusticola, Genetics, subpopulations, Europe.
94 J. RUBINES, B.J. GÓMEZ-MOLINER

Summary
Oilagorraren Scolopax rusticola populazioen karakterizazio genetikorako teknikak
Euskal Herriko Unibertsitateak, Natur Zientzen Museo Nazionalak eta Oilagorraren Ehiztarien
Elkartearekin batera, Europako oilagorraren populazioen karakterizazio genetikoaren ikerlanak
abian jarri dituzte. Gaur egun, espezie honek Europan dituen azpipopulazioak karakterizatu
ahal izateko markatzaile molekularrak, mitokondrialak zein nuklearrak, prest ari dira jartzen.
Proiektuaren helburu zehatzen artean populazio sedentarioak eta migratzaileak bereiztea dago
eta, era berean, populazio hauen artean fluxu genikoa ote dagoen ezagutzea ere. Horrez gain,
azpipopulazio bakoitzaren karakterizazioa burutu ondoren, negu-garaian oilagorrek erabiltzen
dituzten migrazio-bideak ezagutu ahal izango dira, bai eta Europako hegoaldean negua ematen
duten aleen jatorria ere. Aldi berean, azken 20 urteetako Iberiar Penintsulako iparraldeko oila-
gor-populazioen polimorfismoa ebaluatzen saiatuko dira, populazio horien kontserbazio-egoera
ezagutu ahal izateko. Azkenik, Europako eta irla atlantiarretako oilagorren arteko harreman
filogenetikoak aztertuko dira, espeziaren filogeografia ondorioztatzeko asmoz. Aipaturiko azter-
keta guztiak egiteko beharrezkoak diren laginak CCB, Mendebaldeko Paleartikoko Oilagorren
Ehiztarien Elkarteen Federazioa (FANBPO) eta RFEC erakundeak errazten ari dira.
Hitz gakoak: Oilagorra, genetika, azpipopulazioak, Europa.

Introducción pertenece a la familia Scolopacidae. Es un ave


atípica dentro de su orden, debido a sus cos-
Durante los últimos años, las técnicas en bio- tumbres solitarias y su preferencia por hábitats
logía molecular han demostrado ser de gran uti- boscosos, aunque presenta características mor-
lidad en la gestión de especies cinegéticas. Tal es fológicas propias del grupo, como su largo pico
el caso de la codorniz japonesa Coturnix japoni- preparado para la búsqueda de invertebrados en-
ca (Tanaka et col., 2000; Nishibori et col., 2001), tre los limos. Presenta una distribución amplia,
la perdiz roja Alectoris rufa (Randi & Lucchini, ocupando zonas templadas de todo el Paleártico
1998) o la paloma bravía Columba livia (Traxler occidental, desde las islas Canarias e islas Britá-
et col., 2000) entre otras. Estos estudios permiten nicas hasta China y las islas de Japón. En Europa
profundizar en el conocimiento de la biología de se encuentra aproximadamente un tercio de la
las especies, conocer su variabilidad genética o población reproductora mundial, presentando las
los fenómenos evolutivos que explican el estado principales zonas de cría en el Norte y Noreste
actual de las poblaciones. (Rusia y Escandinavia; Hoodless, 1995). Esta
A pesar de la importancia cinegética que tie- población migra en invierno hacia la Europa
ne la becada Scolopax rusticola a nivel europeo, mediterránea. Es aquí donde esta población so-
llama la atención la casi nula presencia de tra- lapa su distribución con la población sedentaria,
bajos sobre genética que se han realizado para presente en el sur de Europa (y Macaronesia,
esta especie, apareciendo un único trabajo de donde las poblaciones no se solapan), al parecer
cierta antigüedad (Burlando, 1996). Este hecho durante todo el año.
contrasta con la relativa abundancia de estudios
Se desconoce si existen diferencias poblacio-
en otros charadriformes (Wenink et col., 1994;
nales o algún tipo de cruce entre las poblaciones
Friesen et col., 1996; Crochet & Desmarais,
migradoras del norte y las sedentarias del sur
2000; Moum & Arnason, 2001).
de Europa. Ambas parecen tener un comporta-
La becada, también denominada pitorra, sor- miento reproductivo diferencial, mostrando las
da, chocha perdiz, oilagorra, arcea o gallineta, poblaciones sedentarias una época reproductora
TÉCNICAS DE CARACTERIZACIÓN GENÉTICA
DE POBLACIONES DE BECADA Scolopax rusticola 95

más temprana, lo que pudiera deberse a diferen- de Buruaga, 2000) y que va en aumento debido
cias genéticas, o simplemente a las diferencias al creciente interés de esta especie y al abandono
climatológicas. Se desconoce también en qué de otras especies cinegéticas, como el conejo o
proporción se capturan las becadas sedentarias la perdiz roja (Onrubia, 2003).
durante el periodo de caza, y en qué medida
Para tratar de abordar la problemática actual
afectan las capturas al futuro de esta población.
de la becada en Europa y conocer su tendencia
Se piensa que la población sedentaria puede
poblacional, la interacción entre la población
realizar pequeños desplazamientos migratorios
durante el invierno (Lucio & Sáenz de Buruaga, sedentaria y la migradora, y colaborar en la rea-
2000), o que no es más que un remanente de la lización de planes de gestión cinegéticos efec-
población migradora que no regresa a su zona tivos, el Laboratorio de Zoología de la Facultad
de cría habitual, pasando la época estival en el de Farmacia de la Universidad del País Vasco,
sur de Europa. en colaboración con el Museo Nacional de Cien-
cias Naturales/CSIC, está llevando a cabo desde
En España, la becada está ampliamente dis- el 2003 un ambicioso proyecto a nivel europeo
tribuida durante la invernada, con mayor abun- sobre la genética de la becada. El trabajo se está
dancia en la zona norte, donde se encuentra, a su
realizando, además, en coordinación con el Club
vez, la población nidificante. En Canarias, cría
de Cazadores de Becada (CCB), y está financia-
en Gran Canaria, Tenerife, La Gomera, El Hierro
do por la RFEC.
y La Palma. Se piensa que esta población realiza
desplazamientos estacionales entre islas. Se ha El objetivo principal del proyecto consiste en
citado su posible reproducción en Baleares (Pu- poner a punto diferentes técnicas de estudio que
rroy & Lucio, 1990). permitan realizar una caracterización genética de
las poblaciones de becada, y utilizarlas de for-
No existen estimas fiables de la población
ma sistemática para conocer aspectos básicos de
sedentaria, estimándose en 3.600-4.000 parejas
su biología y dinámica de poblaciones, de apli-
(Purroy et col., 1997). Si bien su número preci-
so es desconocido, su tendencia poblacional es cación práctica en la gestión cinegética y en la
totalmente incierta, aunque se sospecha que se conservación de la especie. Para conseguir este
está produciendo un descenso progresivo, debi- objetivo general se van a estudiar tanto el ADN
do a la disminución en el número de citas fuera mitocondrial como el ADN nuclear. La región
del periodo de caza. Por su parte, las becadas control del ADN mitocondrial y los microsaté-
migradoras en España se calculan en 646.000- lites nucleares son los marcadores moleculares
680.000 individuos (BirdLife International/Eu- más utilizados para caracterizar poblaciones de
ropean Bird Census Council, 2000). A pesar de una misma especie debido a su alta variabilidad
las variaciones anuales, desde los colectivos de (Wenink et col., 1993; Tarr & Feischer, 1999).
cazadores se pone de manifiesto un preocupante La posibilidad de obtener estos marcadores me-
descenso en el número de capturas. Los datos diante PCR a partir de mínimas cantidades de
son tremendamente variables en función de la ADN (procedente de plumas, sangre, etc.) per-
región y existe un debate constante acerca de mite realizar con éxito la caracterización genéti-
la salud de la población migradora, por lo que ca de poblaciones de interés cinegético (Taberlet
se precisa confirmar si existe un declive de la & Bouvet, 1991; Taberlet & Luikart, 1999; Stor-
población reproductora europea y las causas ch & Segelbacher, 2000).
que podrían propiciar este descenso. Entre otros
Los objetivos concretos de este proyecto son:
factores, se podrían citar la pérdida de hábitats
favorables para la cría o la intensa presión cine- a) Desarrollar marcadores genéticos que per-
gética que soporta (ONC, 1998; Lucio & Sáenz mitan caracterizar las poblaciones de becada
96 J. RUBINES, B.J. GÓMEZ-MOLINER

sedentarias del sur de Europa y las migrado- y/o sangre conservadas en seco. El ADN será
ras invernantes. purificado con los métodos rutinarios de diges-
b) Identificar si las poblaciones sedentarias y tión con proteinasa K y posterior extracción con
migradoras son genéticamente diferentes. fenol/cloroformo. En primer lugar, un pequeño
c) Establecer o confirmar las rutas seguidas por fragmento de la muestra es sumergido en 600ul
los animales en sus desplazamientos migra- de tampón de homogeneizado (buffer CTAB),
torios. que incluye CTAB 2 %, 1,4 M de NaCl, 2 %
β-mercaptoetanol, 20 mM EDTA y 100 mM
d) Conocer el origen de las poblaciones inver-
tris/HCl pH 8. Se añaden 10 μl de proteinasa K
nantes del sur de Europa y el flujo génico
(10 mg/ml), se agita y se deja incubar durante
entre éstas y las nidificantes sedentarias.
48 horas en un baño con agitación constante a
e) Determinar los cambios genéticos acon-
47º C.
tecidos en las poblaciones del norte de la
Península Ibérica y sur de Francia durante Para purificar el ADN se procede a su se-
los últimos 20 años y evaluar su estado de paración del medio líquido mediante la adición
conservación actual. de fenol (300μl) y cloroformo-isoamilalcohol
f) Estudiar las relaciones filogenéticas de las po- 24:1 (300 μl), con agitación constante durante
blaciones de becada europeas y de las islas at- 10 minutos. Después se centrifuga durante 10
lánticas, e inferir la filogeografía de la especie minutos a 13.000 rpm. Se recupera la fase acuo-
y su historia evolutiva (cómo ha ido poblando sa y se añaden 400 μl de cloroformo-isoamialco-
las diferentes regiones de Europa desde los hol, agitando 10 minutos y centrifugando otros
refugios glaciares hasta la actualidad). 10 a 13.000 rpm. La fase acuosa se recupera de
nuevo. Se añaden 1000 μl de solución de preci-
pitado (50 μl de acetato sódico 2 M y 1000 μl de
Material y métodos. etanol absoluto a -20º C), dejando las muestras
Recogida de muestras durante toda la noche a -20º C. De esta forma
el ADN disuelto precipita, pudiéndose observar
Las muestras proceden de alas enteras secas
tras 15 minutos en centrifugación a 13.000 rpm,
cedidas tanto por los cazadores del CCB de toda
en forma de pastilla (pellet). Se desecha todo el
España, como del resto de Europa a través de la
material líquido y se realiza un lavado con etanol
Fundación de Asociaciones Nacionales de Be-
al 80 % frío. Tras centrifugar y eliminar el sobre-
caderos del Paleártico Occidental (FANBPO) de
nadante, se deja secar el tubo con el precipitado
la RFEC. Además, también se están recogiendo
de ADN bajo la lámpara unos 10 minutos, resus-
muestras procedentes de los anillamientos cien-
pendiendo por último el contenido en 80 μl de
tíficos de becada, actividad que se está realizan-
do por los diferentes clubes de becaderos en toda agua autoclavada. Para confirmar el éxito de la
Europa. Se estudiarán un total de 35 muestras de extracción, se migran 4 μl de la solución en gel
cada una de las subpoblaciones de becada, que de agarosa 0,7 % durante 30 minutos.
incluyen subpoblaciones del norte, centro y sur En caso de no disponer de 35 muestras de
de Europa, en este último caso, de individuos plumas o sangre de animales nidificantes se pue-
invernantes y nidificantes. de recurrir al análisis de excrementos. En este
caso, el protocolo de extracción está basado en
una digestión con GuSCN (guanidinisotiocia-
Extracción de ADN nato) y la adición de silica-gel a las muestras
Se parte preferentemente de músculo seco, a estudiar. El éxito de la extracción se realiza
aunque se puede trabajar a su vez con plumas siempre de la misma manera.
TÉCNICAS DE CARACTERIZACIÓN GENÉTICA
DE POBLACIONES DE BECADA Scolopax rusticola 97

Secuenciación de ADN mitocondrial Construcción de las librerías


Se amplifica un fragmento de unas 600 pares genómicas mediante genotecas
de bases de la región control del ADN mitocon- enriquecidas
drial, para lo que se han diseñado primers espe-
Para la construcción de la genoteca de beca-
cíficos. Las amplificaciones se realizan añadien-
da, el ADN genómico es digerido con el enzima
do el ADN extraído a una solución conteniendo
de restricción RsaI. Se verificará si los tamaños
dNTP (0,2 mM), MgCl2 (2,5 mM), buffer (10X),
obtenidos tras la digestión se encuentran entre
primer forward (20 pmol), primer reverse (20
0,5 y 1,5 kb. Mediante una técnica basada en
pmol), taq polimerasa (1,25 U) y BSA (20 μg),
DNAbeads, seleccionamos aquellos fragmen-
en un volumen total de 25 μl.
tos del genoma ricos en GTs y AGs mediante el
El éxito del amplificado se comprueba me- uso de fragmentos de ADN adheridos a las bo-
diante migración de 4μl en gel de agarosa al 1,5 las magnéticas (DNAbeads). Se clonan los frag-
%. La secuenciación se realiza mediante la téc- mentos seleccionados en el plásmido pGemT.
nica de secuenciación cíclica con primer marca- Los productos de ligamiento son introducidos
do en un secuenciador ABI PRISM model 310 en bacterias Escherichia coli XGold competen-
(Applied Biosystems). tes. Las bacterias transformadas son sembradas
en placas con ampicilina, IPTG y X-Gal. Se
seleccionan las colonias blancas que contienen
PCR-RFLPs plásmidos recombinantes. Se han analizado al
Se amplifica una región altamente polimórfi- menos 100 clones por genoteca.
ca del ADN mitocondrial que comprende el gen
ND6 (nicotinamida-adenín-dinucleótido deshi-
drogenasa subunidad 6) y la primera parte de la Análisis de recombinantes
región control, para lo que se han diseñado pri-
mers específicos. Los amplificados se realizan del La detección de aquellos clones que conten-
mismo modo que anteriormente, con la solución gan un inserto con un microsatélite se realiza
propia, y con el uso de la metodología adecuada mediante hibridaciones, utilizando como sonda
para conseguir múltiples copias del fragmento de microsatélites marcados con digoxigenina (DIG-
ADN deseado. Tras una incubación previa a 95º 11-dUTP; Roche) en el extremo 5’. Para ello,
C durante 5 minutos, las muestras son expuestas se siembran las colonias con plásmidos recom-
a 35 ciclos de amplificación mediante el uso de binantes y se transfieren a membranas de nylon
un termociclador Bio-Rad iCycler version 2.039 Hybond. Las membranas son incubadas en so-
(Bio-Rad). Cada ciclo consiste en una desnatura- lución de desnaturalización, solución neutraliza-
lización de 1,30 minutos a 94º C, un periodo de dora y lavadas con SSC (3 M NaCl, 0,3 M citrato
un minuto de anillamiento a 57º C y una extensión sódico). El ADN es fijado a los filtros mediante
de 1,30 min a 72º C. exposición de 2-5 minutos a rayos ultravioleta
(312 nm).
Sobre este amplificado de unas 2000 pares de
bases, se está ensayando una batería de endonu- Las membranas son prehibridadas durante
cleasas, seleccionando aquellas que presenten pa- una hora a 65º C en presencia de SSC, SDS, solu-
trones de restricción idóneos para la identificación ción Denhardt (2 % BSA, 2 % Ficoll, 2 % PVP) y
y diferenciación de poblaciones. Las digestiones ADN de esperma de salmón sonicado. Las sondas
enzimáticas se llevarán a cabo en un baño a 37º C son desnaturalizadas a 100º C durante 5 minutos y
durante toda la noche, y el resultado de la actividad añadidas a la solución de prehibridación. Se incu-
se observará en gel de agarosa al 3 %. ban durante al menos 4 horas a 65º C. A continua-
98 J. RUBINES, B.J. GÓMEZ-MOLINER

ción se realizan lavados con distintas condiciones técnicas de extracción de ADN a partir de diferen-
de astringencia (distintas concentraciones salinas tes tejidos, como plumas, músculo o excrementos
y diferentes temperaturas). Los clones positivos y actualmente se está extrayendo el material ge-
son identificados en una reacción de revelado nético de las más de 100 muestras almacenadas
utilizando un conjugado anti-DIG–fosfatasa al- durante la temporada de caza 2002-2003.
calina y el sustrato quimio-luminiscente CSPD y
En cuanto a los amplificados, se han dise-
tras una exposición entre 5-20 minutos en placas
ñado los primers necesarios y se han puesto a
autorradiográficas.
punto las condiciones óptimas de PCR. Una vez
Los clones positivos son secuenciados a partir conseguidos los amplificados, actualmente se
de primers universales que reconocen las secuen- están ensayando las endonucleasas que permitan
cias flanqueantes al lugar de inserción en el pGe- conseguir unos patrones de restricción adecua-
mT. La secuenciación se realiza en un ABI PRISM dos para la caracterización de cada una de las
model 310 (Applied Biosystems). Para aquellos subpoblaciones europeas de becada.
clones que presenten un microsatélite potencial-
Por otro lado, en cuanto al diseño de micro-
mente interesante (perfectos y con un número de
satélites, ya se han realizado las genotecas en
repeticiones superior a 10) se diseñan pares de pri-
el Museo Nacional de Ciencias Naturales. Se
mers de PCR en las regiones flanqueantes.
dispone de más de 150 colonias positivas, que
progresivamente se están secuenciando para
la búsqueda de microsatélites óptimos para un
Análisis con microsatélites de seguimiento más profundo de las poblaciones
la estructura genética de las ibéricas y del sur de Francia.
poblaciones de becada

Una vez determinados los microsatélites


potencialmente más interesantes (procedentes Trabajos paralelos y búsqueda de
de la literatura y de la genoteca), se marcan con muestras de becadas nidificantes
fluoresceína (6-FAM, TET y HEX) cada uno de
Debido al desconocimiento de gran parte de
los dos primers de PCR que amplifican cada lo-
la biología de la becada y al interés que despierta
cus. La longitud de los microsatélites se analiza
tanto científica como cinegéticamente, se están rea-
corriendo los fragmentos en un gel de poliacri-
lizando muchos esfuerzos en cuanto a propuestas
lamida en un ABI Prism Model 310 (Applied
de estudios relacionados con esta especie. Desde
Biosystems). Los geles son analizados mediante
la temporada 2002-2003, se vienen desarrollando
el programa GeneScan 3.0. Los parámetros para
anillamientos científicos de becadas, coordinados
describir el nivel de polimorfismo del microsa-
por el CCB en todo el norte de la Península Ibé-
télite y la estructura y variabilidad genética de
rica y también desde la Asociación de Cazadores
las poblaciones analizadas se obtendrán con el
de Álava (ACCA). Estos estudios, además de pro-
programa Arlequin v2.0.
porcionar la información propia sobre migración y
presión cinegética, aportan más muestras para los
estudios genéticos.
Resultados esperados
Debido a la dificultad de encontrar muestras
Este ambicioso proyecto, pionero a nivel eu- de becadas autóctonas, se está realizando un
ropeo, está enfocado como tesis doctoral, y pro- gran esfuerzo en la recogida de citas fuera de
gramado para una duración de cuatro años. En la época de caza, y en la prospección de zonas
estos primeros meses ya se han puesto a punto las de nidificación históricas. Gracias a este trabajo,
TÉCNICAS DE CARACTERIZACIÓN GENÉTICA
DE POBLACIONES DE BECADA Scolopax rusticola 99

se pudo localizar un nido de becada el 28 de ju- Agradecimientos


nio de 2003, en el interior del Parque Natural de
Izki, en Álava (figura 1). Así, se pudo confirmar A Rafael Zardoya (codirector del proyecto) y
la presencia de nidificación en este territorio, re- a todo el equipo investigador del Museo Nacional
cogiéndose todos los datos pertinentes acerca de de Ciencias Naturales y del Laboratorio de Zoo-
este hecho. Tras la eclosión de los cuatro huevos logía de la Facultad de Farmacia de Vitoria. A los
que se encontraban en el nido, se pudo extraer clubes de cazadores que están cediendo muestras
ADN a partir de pequeños restos de sangre pe- y mostrando un gran interés en la realización de
gados a la cáscara, y así, se están analizando del este proyecto: CCB, RFEC y ACCA. Y por últi-
mismo modo que el resto de las muestras. Por mo, a las personas que, sin formar parte de ningún
último, el CCB está comenzando a realizar un colectivo, han buscado muestras desinteresada-
proyecto a gran escala sobre seguimiento me- mente: Alejandro Onrubia, Javier López de Luzu-
diante radio-telemetría vía satélite de becadas riaga, Ramón Rubines, Luis Lobo, Oscar Berdión
durante sus desplazamientos migratorios. e Iker Ayala. Este proyecto se está llevando a cabo
gracias a las becas predoctorales de formación de
No cabe duda que todos estos trabajos, en co- investigadores del Gobierno Vasco.
ordinación con las experiencias de seguimiento
de la especie en el campo, ayudarán a conocer
cada vez mejor la biología de esta misteriosa
especie, y a alcanzar programas de gestión cine-
gética sostenibles a nivel europeo.

Figura 1. Nido de becada Scolopax rusticola encontrado en Izki en junio de 2003. Las muestras recogidas aportan una información
muy valiosa para el estudio de la población reproductora ibérica (foto: Ibon Telletxea).
[Woodcock Scolopax rusticola nest found in Izki forest in June 2003. Samples taken contain valuable information about Iberian
breeding population.]
100 J. RUBINES, B.J. GÓMEZ-MOLINER

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EVOLUCIÓN RECIENTE DE LA POBLACIÓN DE PERDIZ ROJA
Alectoris rufa EN ÁLAVA

IBON TELLETXEA

Asociación de Cotos de Caza de Álava (ACCA)


Calle de Vicente Aleixandre, 38. 01003 Vitoria
itelletxea@accazalava.es

Resumen
La población de perdiz roja en Álava experimentó una regresión durante el siglo XX (quizá más
acusado en su segunda mitad) hasta, aproximadamente, el año 1990. En este período su área
de distribución se vio reducida, desapareciendo de la zona cantábrica alavesa. Los estudios de
campo iniciados por la Asociación de Cotos de Caza de Álava en 1992 muestran que, durante
estos últimos años, se ha detenido el declive de la perdiz roja en Álava, evolucionando su po-
blación ligeramente al alza.
Palabras clave: perdiz roja, Alectoris rufa, evolución, Álava.

Summary
Recent trend of Red-legged Partridge Alectoris rufa population in Álava
The Red-legged Partridge population in Álava showed a decline through the 20th century (maybe
more pronounced in the second half) till, approximately, year 1990. In this period the species
range was reduced, disappearing from the Cantabric area. Field work promoted by Asociación de
Cotos de Caza de Álava since 1992 points out that, in recent years, Red-legged Partridge decline
has been stopped or even reversed, with its population trend performing slightly upwards.
Key words: Red-legged Partridge, Alectoris rufa, population trend, Alava.

Laburpena
Eper gorriaren Alectoris rufa populazioaren azken eboluzioa Araban
Araban eper gorriaren populazioak atzerapen handia jasan zuen XX. mendearen zehar (beharba-
da nabarmenagoa mendearen bigarren erdialdean) gutxi gorabehera 1990. urtera arte. Denboral-
di horretan, espeziaren banaketa-area murriztu zen eta Arabako isurialde kantauriar aldean erabat
desagertu. 1992. urtean Arabako Ehiza-barrutien Elkarteak hasitako landa-ikerketek espeziearen
urripena gelditu egin dela azken urteotan eta bere populazioa hazi egin dela erakusten dute.
Hitz gakoak: Eper gorria, Alectoris rufa, eboluzioa, Araba.

Evolución histórica
de la perdiz roja en Álava
Según Madoz (1850), a mediados del siglo te por toda la geografía de Álava y de Euskadi,
XIX la perdiz roja Alectoris rufa estaba presen- cazándose incluso en localidades costeras de Gi-
102 I. TELLETXEA

puzkoa y Bizkaia. El gran incremento demográ-


fico experimentado con el proceso de industria-
lización en el País Vasco (fundamentalmente en
Gipuzkoa y Bizkaia), el abandono de la siembra
de cultivos de cereal y su sustitución por pastiza-
les para el ganado, la transformación del medio
y la presión humana y de caza hicieron desapa-
recer progresivamente a la perdiz de todo el área
de influencia cantábrica (SIRN SA, 1990; Bea
& Fernández de Mendiola, 1998) hasta quedar
relegada (ver figura 1) a la zona central y meri-
dional alavesa (menos humanizada y de hábitat
más favorable).
Si observamos el mapa de las zonas climáti-
cas definidas en Euskadi (figura 2), se aprecia que Figura 1. Distribución actual y abundancia relativa de la
el área de distribución actual de esta especie coin- perdiz roja Alectoris rufa en Álava.
[Current distribution and relativa abundante of Red-legged
cide aproximadamente con las áreas de clima sub- Partridge Alectoris rufa in Álava.]
cantábrico y mediterráneo (siendo más abundante
en esta última zona), faltando por el contrario en
el área cantábrica (Álvarez et al., 1986).

Evolución reciente según los


resultados de las tablas de capturas
La actividad cinegética puede aportar valiosa
información acerca del estado de las poblaciones
objeto de caza. En el caso de los partes de captu-
ra, la Diputación Foral de Álava estableció hace
unos años la obligatoriedad de cumplimentar
partes individuales para cada cazador. En ellos
Cantábrico Subcantábrico Mediterráneo
se indican los ejemplares vistos y capturados de
cada una de las especies cinegéticas. El resumen Figura 2. Sectores bioclimáticos en el País Vasco.
de la temporada es enviado por cada cazador al [Bioclimatic regions in the Basque Country.]
coto de caza, y son los responsables de éstos los
encargados de realizar el cómputo global del
acotado y de comunicarlo a Diputación.
adoptando los cotos de forma individual, como
Así, en la figura 3 se indica la evolución de
la reducción de jornadas de caza, los cupos dia-
las capturas anuales de perdiz en Álava, desde
rios y, en algún caso, las repoblaciones.
la temporada 1984-1985 hasta la 2004-2005.
Se observa cómo en apenas siete años, desde la En el año 1991, con el nacimiento de ACCA,
temporada 1984-1985 hasta la 1990-1991, las se dio un giro importante en el panorama cine-
capturas se habían reducido algo más de un 50 gético alavés que supuso, entre otras cosas, el
%. Esta preocupante situación llevó a aplicar comienzo de una gestión global de las especies
medidas para el fomento de la perdiz, que iban de caza. En el caso de la perdiz roja, las direc-
EVOLUCIÓN RECIENTE DE LA POBLACIÓN DE PERDIZ ROJA
Alectoris rufa EN ÁLAVA 103

trices iniciales constaban de dos pilares básicos: Evolución reciente según los
trabajar exclusivamente con la perdiz roja au- resultados de los muestreos de
tóctona, descartando las repoblaciones y sueltas campo: metodología y resultados
con ejemplares de granja, frecuentes en aquellos
años, y la instauración de muestreos de campo En la actualidad, en los cotos con aprove-
para conocer el estado de la población en las dis- chamiento de perdiz roja de nuestro territorio
tintas comarcas alavesas y poder, sobre la base asociados a ACCA se realizan muestreos en dos
de dichos muestreos, ajustar el aprovechamiento épocas del año: primavera y verano, con la fina-
cinegético cada temporada. lidad de estudiar tanto la abundancia de repro-
ductores antes del período de cría como el éxito
Si observamos los resultados de las captu-
reproductivo y el estado de la población antes
ras durante la última década, vemos que se ha
del comienzo de la temporada de caza. Estos pa-
conseguido detener el declive, tendiendo a una
rámetros son necesarios para la elaboración de
situación más estable, con oscilaciones relacio-
los planes de seguimiento cinegético y la planifi-
nadas fundamentalmente con el éxito reproduc-
cación, por tanto, de la temporada de caza.
tor de cada temporada.
Las batidas en mano (también denomina-
El análisis de las capturas nos permite una
das “censo en banda”) se realizan a pie sobre
aproximación a la situación de la perdiz, pero
recorridos prefijados por los técnicos de ACCA,
existen factores que influyen en los resultados
por equipos compuestos por 4 o 5 personas, se-
obtenidos, como la realización o no de sueltas
paradas entre sí unos 50 m. Hay que resaltar la
y repoblaciones, la disminución actual de días
cada vez mayor implicación de los cazadores en
de caza por temporada o la menor presión cine-
estos muestreos de perdiz, de forma que en cada
gética actual por la disminución del número de
temporada de censos un alto porcentaje de los
licencias de caza (ver figura 4) o por el traspaso
recorridos son realizados exclusivamente por
de cazadores hacia otras modalidades de caza.
cazadores de los cotos.
Por todo ello, debemos analizar otros datos para
intentar conocer los resultados de la gestión ci- Los recorridos transcurren por zonas de
negética de la perdiz roja. distinta capacidad potencial de acogida para la

10.000

9.000

8.000

7.000

6.000

5.000

4.000

3.000

2.000

1.000

0
1984-1985

1985-1986

1986-1987

1987-1988

1988-1989

1989-1990

1990-1991

1991-1992

1992-1993

1993-1994

1994-1995

1995-1996

1996-1997

1997-1998

1998-1999

1999-2000

2000-2001

2001-2002

2002-2003

2003-2004

2004-2005

Figura 3. Capturas de perdiz roja en Álava, según los partes compilados por la Diputación Foral de Álava.
[Annual Red-legged Partridge hunting bag in Álava, regarding hunters information compiled by Diputación Foral de Álava.]
104 I. TELLETXEA

16.000

14.000

12.000

10.000

8.000

6.000

4.000

2.000

0
1993

1994

1995

1996

1997

1998

1999

2000

2001

2002

2003
Figura 4. Número de licencias de caza tramitadas por la Diputación Foral de Álava.
[Number of hunting licenses issued by Diputación Foral de Álava.]

realizados éstos por las patrullas de guardas par-


ticulares del campo de ACCA. Dichos muestreos
consisten en transectos en vehículo, llevados a
cabo durante las primeras horas del día, sobre
unos recorridos prefijados, con la participación
de dos personas. En estos recorridos se van ano-
tando las distintas observaciones de especies ci-
negéticas, obteniéndose un índice kilométrico de
abundancia (IKA) para cada una de ellas.
En ambos casos, muestreos en banda y tran-
sectos en vehículo, los resultados obtenidos no
se emplean para intentar determinar el número
total de ejemplares de perdiz presentes en cada
coto, sino que son aplicados como indicadores
de la evolución de la abundancia de perdiz roja
a lo largo del tiempo. Los resultados de estos
Figura 5. Sectores de gestión para la caza menor en Álava.
[Regions for management of small game in Álava.]
muestreos son analizados de forma conjunta
para todo el área de estudio, pero, además, se
estudia la evolución por zonas (ver figura 5) y
perdiz roja, muestreándose aproximadamente el finalmente coto a coto.
10 % de la superficie hábil para la especie en
En la figura 6 se indican los resultados globa-
cada coto. Los resultados obtenidos se expre-
les obtenidos en los muestreos de perdiz median-
san mediante un índice de densidad (número de
te batidas en mano, tanto en primavera (excepto
perdices/ha).
los años 1992, 1994 y 1996) como en verano. La
Además de estos recorridos, que se vienen superficie total muestreada en cada temporada
repitiendo con la misma metodología desde el de censos oscila entre las 7.500-8.000 hectáreas.
verano del año 1992, y como fuente de informa- El índice de densidad obtenido en primavera, so-
ción complementaria, durante la primavera de bre población reproductora, ha pasado de 0,111
1999 se puso en marcha otro tipo de muestreos, perdices por hectárea en el año 1993 a 0,197 en
EVOLUCIÓN RECIENTE DE LA POBLACIÓN DE PERDIZ ROJA
Alectoris rufa EN ÁLAVA 105

0,500

0,450

0,400

0,350

0,300

0,250

0,200

0,150

0,100

0,050

0,000
1992

1993

1994

1995

1996

1997

1998

1999

2000

2001

2002

2003

2004

2005
Primavera Verano

Figura 6. Densidades de perdiz roja (número de ejemplares/ha) a partir de los resultados de batidas en mano realizadas por ACCA.
[Red-legged Partridge densities (number of birds/ha) deduced from ACCA censuses.]

el 2005. Los datos de verano, supeditados en 0,350

gran medida al mayor o menor éxito reproductor 0,300

de cada año, muestran también una tendencia al 0,250


alza, alcanzando el máximo valor (0,481 per- 0,200
dices/ha) durante el verano de 2004, en el cual 0,150
se constató una muy buena reproducción de la
0,100
perdiz roja en la mayoría del territorio alavés.
0,050

En la figura 7 se expresan los resultados 0,000


1999

2000

2001

2002

2003

2004

2005

globales obtenidos en los transectos en vehícu-


lo realizados entre los años 1999 y 2003, en los
Figura 7. Índices kilométricos de abundancia de perdiz roja,
cuales se vienen recorriendo al año, aproxima- calculados en base a los transectos primaverales con vehículo
damente, 600 km. El resultado máximo se ha realizados por ACCA.
obtenido en la primavera de 2005, con un IKA [Red-legged Partridge relative abundante (number of birds/
de 0,308 perdices/km. km), deduced from ACCA spring censuses.]

Conclusión
Sobre la base de estos resultados podemos to continuado de las poblaciones de perdiz, a tra-
concluir que la población de perdiz en Álava ha vés de los muestreos, se está mostrando como
mostrado una tendencia regresiva hasta comien- una herramienta fundamental para el fomento de
zos de los años 90, momento a partir del cual se la perdiz roja en Álava. Además, otros trabajos
consigue detener el declive e iniciar un ligero iniciados en el campo de la Genética o los pro-
proceso de recuperación a escala general (Telle- yectos de mejora del hábitat deben contribuir a
txea & Markina, 2000). La planificación de la la conservación de esta emblemática especie de
actividad cinegética sobre la base del seguimien- la fauna cinegética alavesa.
106 I. TELLETXEA

Primavera Verano
Perdices/hectárea Perdices/hectárea
Llanada Oriental 0,070 0,144
Llanada Occidental 0,137 0,363
Estribaciones Gorbea 0,055 0,219
Cantábrica - -
Valles 0,189 0,426
Lantarón-Ribera Baja 0,227 0,781
Montaña Alavesa 0,100 0,237
Rioja Alavesa 0,163 0,530
Tabla 1. Densidades de perdiz roja por sectores, para el año 2003.
[Regional Red-legged Partridge densities, year 2003.]

Primavera • Perdices/km
Llanada Oriental 0,061
Llanada Occidental 0,191
Estribaciones Gorbea 0,023
Cantábrica 0,000
Valles 0,428
Lantarón-Ribera Baja 0,792
Montaña Alavesa 0,084
Rioja Alavesa 0,761
Tabla 2. Índices kilométricos de abundancia por sectores, durante el año 2003.
[Regional relative abundante (number of birds/km), year 2003.]

Referencias MADOZ, P. 1850. Diccionario geográfico esta-


dístico histórico de España y sus posesiones
ÁLVAREZ, J.; BEA, A.; FAUS, J. M.; CASTIÉN, E. & de Ultramar. Madrid.
MENDIOLA, I. 1986. Vertebrados de la Comu-
nidad Autónoma del País Vasco. Gobierno TELLETXEA, I. & MARKINA, F. A. 2000. Perdiz, lie-
Vasco. Vitoria. bre y conejo en Álava. Accazadores, 5: 41-44.

BEA, A. & FERNÁNDEZ DE MENDIOLA, J. A. (co- SIRN SA. 1990. Estudio de diagnosis y orde-
ord.). 1998. Vertebrados continentales. Si- nación cinegética y de pesca continental
tuación actual en la Comunidad Autónoma en el ámbito territorial de la CAV. Informe
del País Vasco. Gobierno Vasco. Vitoria. inédito.
DISTRIBUCIÓN Y HÁBITAT DE LA LAVANDERA CASCADEÑA
Motacilla cinerea, EL MIRLO ACUÁTICO Cinclus cinclus Y EL
MARTÍN PESCADOR COMÚN Alcedo atthis EN EL RÍO BAYAS
(ÁLAVA, PAÍS VASCO)

JORGE ECHEGARAY

Apartado de Correos 899 • 01080 Vitoria • echegarayjorge@hotmail.com

Resumen
La lavandera cascadeña, con 50-60 parejas, se encuentra repartida por toda la cuenca, pero está
ligada a la existencia de microzonas de aguas someras entre sectores de curso más rápido, de
pendiente moderada y en tramos fluviales de anchura intemedia. El mirlo acuático, con unas 7-9
parejas, es la especie con mayor carácter bioindicador, puesto que su distribución guarda relación
muy significativa con la altitud, número de rápidos por km, pH, pendiente y, en menor medida,
con la orla riparia de los tramos fluviales que ocupa. El martín pescador común, que cuenta con
4-7 parejas, usa sobre todo tramos de río anchos, zonas de los cursos medios o bajos, las áreas
de menor altitud y de aguas menos turbulentas, con baja pendiente, y muestra indiferencia por
variables como el pH.
Palabras clave: lavandera cascadeña, Motacilla cinerea, martín pescador común, Alcedo atthis,
mirlo acuático, Cinclus cinclus, selección de hábitat, Álava.

Summary
Distribution and habitat of Grey Wagtail Motacilla cinerea, Dipper Cinclus cinclus and Kin-
gfisherAlcedo atthis at the river Bayas (Álava, Basque Country)
The Grey Wagtail, with 50-60 breeding pairs, occurs all over the river basin, but is related to the
existence of superficial water microareas among zones of speedly watercourses, moderate slope
and medium width. The Dipper, with 7-9 breeding pairs, was pointed out as the best biondicator
bird species, because its distribution kept a close and significant relationship with altitude, num-
ber of rapids per kilometer, pH, slope and, to a lesser extent, with the presences of river forests.
The Kingfisher, with 4-7 breeding pairs, prefers and selects positively wider and slower water
sections corresponding to the lowest elevations, but does not show significant relationship with
other parameters such as pH.
Key words: Grey Wagtail, Motacilla cinerea, Kingfisher, Alcedo atthis, Dipper, Cinclus cinclus,
habitat selection, Álava.

Laburpena
Buztanikara horia Motacilla cinerea, ur-zozoa Cinclus cinclus eta martin arrantzalearen Alcedo
atthis hedapena eta habitata Baias ibaian
108 J. ECHEGARAY

Buztanikara horia, 50-60 bikoterekin, arro osoan zehar banatuta dago, baina urlasterren arteko
azaleko uretara lotuta dago. Tarteko aldapa eta zabalerak nahiagu ditu ere. Ur-zozoa, 7-9 biko-
terekin, adierazle biologikorik hoberena da espezie hauen artean. Bere banaketak goratasuna,
kilometroko urlasterren zenbakia, pH-a eta aldaparekin erlazio estua erakusten du, baita ibai-tar-
teetako erripako landaretzarekin ere (hein txikiago batean). Martin arrantzaleak, 4-7 bikoterekin,
ibaibide tarteko eta baxuan aurkitzen da batez ere. Beraz, okupatzen dituen ibai-tarteak zabalak
eta goratasun gutxikoak dira, malda txikiak eta ur lasaiekin. Uraren pH-ak, beste aldagiaen
artean, ez du eragin handirik bere banaketan.
Hitz gakoak: buztanikara horia, Motacilla cinerea, martin arrantzalea, Alcedo atthis, ur-zozoa,
Cinclus cinclus, habitat-hautespena, Araba.

Objetivos plena depresión del Ebro, a 450 m. En cuanto a


la sectorización biogeográfica, el río nace en la
Con la realización de este trabajo se ha in- región Eurosiberiana, desembocando en el Ebro
tentado diagnosticar el estado de conservación, en la Mediterránea.
estudiar los condicionantes de la distribución
y los patrones de selección del hábitat de tres Este río se caracteriza por su excepcional va-
especies de aves estrechamente ligadas al eco- lor de conservación, en el contexto del País Vas-
co. Su peor estado de conservación se encuentra
sistema fluvial. Como objetivo aplicado, se pre-
en el tramo final, situado en pleno polo industrial
tende aportar información para evaluar la salud
y químico de Miranda de Ebro (Burgos). Acusa
del ecosistema fluvial en el área de estudio del
severamente la infiltración que recarga el acuífe-
río Bayas (Álava). De manera más concreta:
ro de Subijana, motor de regadíos y extracciones
a) Estudio de la biología, ecología y estatus masivas de agua para la agricultura de la zona.
poblacional del mirlo acuático Cinclus cin-
Para la localización y estudio de las especies
clus, martín pescador común Alcedo atthis y
de aves se realizaron transectos a pie a lo lar-
lavandera cascadeña Motacilla cinerea, en el
go del río por las orillas (Järvinen & Väisänen,
río Bayas y afluentes.
1975a; Järvinen & Väisänen, 1975b; Asbirk,
b) Estudiar su cohabitación, grado de simpatría 1983; Tellería, 1986, Peris et al., 1991; Bibby
o segregación interespecífica. et al., 1993; Santamarina, 1995; SCV, 2000),
de longitud y duración en el tiempo variables,
c) Diagnosis del papel de bioindicadores, que
con un recorrido mínimo de 5 km (2,5 km curso
pueden desempeñar esas especies en función
arriba y 2,5 km curso abajo). Fueron realizados
de sus requerimientos de hábitat, caracterís-
aprovechando las horas de máxima actividad y
ticas y parámetros abióticos y bióticos del
detectabilidad de las aves (alba y crepúsculo)
medio que ocupan.
durante la época de cría. Los transectos se dis-
tribuyeron uniformemente de febrero a julio del
Material y métodos 2001 y 2002. En total se efectuaron un total de
90 km recorriendo, una vez al menos, los tramos
El área de estudio es la cuenca del río Bayas,
susceptibles de albergar poblaciones de las aves
la segunda en extensión del Territorio Histórico
objeto de estudio.
de Álava tras la del Zadorra, y comprende una
superficie de más de 270 km2. El Bayas tiene Para el estudio de los factores bióticos y
una longitud de 63,5 km. La máxima cota de abióticos que sirvieran para indicar algún tipo
altitud de la cuenca se encuentra en el monte de selección de hábitat, se confeccionó una fi-
Gorbea, con 1.481 m de altitud y la mínima en cha específica de registros, con las variables de
DISTRIBUCIÓN Y HÁBITAT DE LA LAVANDERA CASCADEÑA Motacilla cinerea,
EL MIRLO ACUÁTICO Cinclus cinclus Y EL MARTÍN PESCADOR COMÚN Alcedo atthis
EN EL RÍO BAYAS (ÁLAVA, PAÍS VASCO) 109

interés a priori: altitud, pendiente, pH, anchura Gobierno Vasco, 1988; Gobierno Vasco, 1999),
y profundidad aproximada del cauce, tipo de y se empleó la misma escala de categorías de I a
vegetación, anchura de la orla riparia e índices VI, de mayor a menor calidad, respectivamente,
bióticos de calidad (BMWP). La metodología según dicho índice.
empleada para caracterizar las distintas variables
Se calcularon los estadísticos descriptivos
ha estado en función del tipo de magnitud. Así,
básicos (media y desviación típica) de cada una
variables como el pH, la anchura (m) y altitud
de las variables. Para comprobar la normalidad
(m), que son cuantitativas, se midieran para cada
de éstas, se realizó el test de Kolmogorov-Smir-
punto de registro y/o contacto. Para caracteri-
nov (Sokal & Rohlf, 1981) con corrección de
zar el hábitat disponible se eligieron 29 puntos
la significación de Lilliefors (Ferrán, 1996). El
al azar, uniformemente distribuidos por toda la
análisis de los datos se realizó mediante la prue-
cuenca, que pudieran ser comparados con los
ba U de Mann-Whitney, comparando el estadís-
puntos en los que se obtuvieron registros con
tico U con los valores críticos tabulados (Fowler
las especies objeto de estudio.
& Cohen, 1999).
La “anchura” se valoró efectuando una pon-
El material de campo empleado fueron botas
deración mínima para aquellos cursos fluviales
de pescador, calzado de montaña, prismáticos,
inferiores a dos metros, un valor medio para los
cuaderno de campo, cartografía militar y mapa
tramos de dos a diez metros de anchura y un
del Parque Natural de Gorbea 1:25.000, pHme-
valor máximo para aquellos tramos superiores
tro de bolsillo Milwaukee 600 de resolución y
a los diez metros de anchura, aplicados para los
precisión 0,1 pH, y GPS.
puntos de contacto con las especies.
El “número de rápidos por km” se evaluó
registrando el número de discontinuidades en el
discurrir del agua en tramos fluviales de 1 km de Resultados
longitud, mediante una escala de ponderación En cuanto a la lavandera cascadeña, se en-
que tenía un valor mínimo para un número de contraron 31 parejas seguras, 14 probables y 10
rápidos inferior a diez, uno intermedio de diez a posibles. El tamaño de la población debe situar-
veinte rápidos, y un valor máximo para más de se en el entorno de las 50-60 parejas nidificantes
veinte rápidos. Preferimos utilizar esta variable en la cuenca del Bayas. Para el cálculo de abun-
antes que la superficie de rápidos (en unidades dancias, empleando el número de km de curso
de superficie por unidad de longitud), dado el fluvial aptos para la especie (cercano a los 80
grado de complejidad y temporalidad que a km) y el número máximo estimado de parejas,
nuestro juicio plantea esta última. se obtendrían valores de 0,75 parejas/km de río
La “pendiente”, medida en metros por km, (1 pareja/1,33 km). Si se tuvieran en cuenta sólo
es el desnivel entre dos puntos situados a 500 m las parejas seguras y probables, se obtendrían
aguas arriba y aguas abajo del punto de registro de abundancias promedio de 0,6875 parejas/km o,
las especies. Fue calculada cartográficamente. lo que es lo mismo, 1 pareja/1,45 km.
La variable “orla riparia” fue medida mediante Tras el análisis estadístico mediante el test
una evaluación subjetiva de la calidad y represen- de la U de Mann-Whitney, el único parámetro
tación del soto fluvial (extensión, complejidad, es- que mostró diferencias altamente significativas
tructura, naturalidad, etc...). Se utilizó una escala fue la orla riparia (p<0,001). También se detec-
con un valor mínimo de 0 y un máximo de 3. taron diferencias significativas para la anchura
(p=0,011) y la pendiente (p=0,025; tabla 1).
Los “índices bióticos de calidad (BMWP)”
se obtuvieron mediante consulta en la biblio- En relación con el mirlo acuático, estimamos
grafía (Alba-Tecedor & Sánchez-Ortega, 1988; un número de parejas entre 7 y 9 en el área de
110 J. ECHEGARAY

Puntos con presencia de


Puntos al azar
lavandera cascadeña
Media SD Media SD U de Mann-Whitney g. s.
Altitud (m) 556,21 69,27 592,689 92,7652 534,00 0,189
Anchura (m) * 2,72 0,59 2,31 0,76 453,00 0,011
Índice biótico (BMWP) 5,21 1,80 5,53 1,38 610,00 0,428
Número de rápidos/km 1,55 0,74 1,60 0,72 624,00 0,724
Orla riparia *** 2,97 0,91 1,84 0,85 261,00 0,0006
Pendiente (m/km) * 15,45 9,33 31,6531 31,3950 450,50 0,025
pH 7,70 0,51 7,5844 0,7061 481,50 0,056
Tabla 1. Variables consideradas para la caracterización del hábitat de la lavandera cascadeña Motacilla cinerea durante la época
de nidificación (* p<0,05; ** p<0,01; *** p<0,001).
[Variables used to describe Grey Wagtail Motacilla cinerea breeding habitat (* p<0,05; ** p<0,01; *** p<0,001).]

Puntos con presencia de


Puntos al azar
lavandera cascadeña
Media SD Media SD U de Mann-Whitney g. s.
Altitud (m) *** 556,21 69,27 672,00 42,5 73,50 0,0008
Anchura (m) *** 2,72 0,59 2,08 0,33 117,50 0,0004
Índice biótico (BMWP) 5,21 1,80 6,00 1,83 129,00 0,115
Número de rápidos/km *** 1,55 0,74 2,77 0,44 44,00 0,0003
Orla riparia * 2,97 0,91 2,15 1,07 133,50 0,034
Pendiente (m/km) ** 15,45 9,33 35,5631 20,0874 67,00 0,001
pH ** 7,70 0,51 7,2385 0,3305 82,500 0,003
Tabla 2. Variables consideradas para la caracterización del hábitat del mirlo acuático Cinclus cinclus durante la época
de nidificación (* p<0,05; ** p<0,01; *** p<0,001).
[Variables used to describe Dipper Cinclus cinclus breeding habitat (* p<0,05; ** p<0,01; *** p<0,001).]

Puntos con presencia de


Puntos al azar
martín pescador
Media SD Media SD U de Mann-Whitney g. s.
Altitud (m) * 556,21 69,27 500,67 42,5 73,50 0,049
Anchura (m) 2,72 0,59 2,89 0,33 117,50 0,492
Índice biótico (BMWP) 5,21 1,80 5,11 1,83 129,00 0,799
Número de rápidos/km 1,55 0,74 1,44 0,53 126,50 0,876
Orla riparia * 2,97 0,91 2,11 1,05 71,00 0,033
Pendiente (m/km) 15,45 9,33 20,1367 15,2627 106,00 0,400
pH 7,70 0,51 7,8444 0,3678 94,00 0,205
Tabla 3. Variables consideradas para la caracterización del hábitat del martín pescador Alcedo atthis durante la época de nidifica-
ción (* p<0,05; ** p<0,01; *** p<0,001).
[Variables used to describe Kingfisher Alcedo atthis breeding habitat (* p<0,05; ** p<0,01; *** p<0,001).]
DISTRIBUCIÓN Y HÁBITAT DE LA LAVANDERA CASCADEÑA Motacilla cinerea,
EL MIRLO ACUÁTICO Cinclus cinclus Y EL MARTÍN PESCADOR COMÚN Alcedo atthis
EN EL RÍO BAYAS (ÁLAVA, PAÍS VASCO) 111

estudio. Señalamos 6 parejas seguras, 1 probable frecuente de la especie en los cauces de orden pri-
y 2 más posibles. Estos datos darían un rango de mario (arroyos de cabecera, tramos marginales
abundancia de 4,15–5,6 parejas/10 km. La especie de afluentes), que presentan generalmente menor
ocupa principalmente los tramos de cabecera. desarrollo y calidad de los bosques de ribera.
En cuanto a las variables descriptoras de la Aparece con mayor frecuencia en aquellos
presencia del mirlo acuático (tabla 2), diremos tramos de ríos de anchura intermedia y pendiente
que ocupó tramos de altitud media de 672 m moderada, con predilección por tramos de aguas
(SD=46,48), anchura del cauce superior a 2 m someras y más tranquilas entre zonas de rápidos,
seleccionando preferentemente los de 2 a 15 m,
definidos por una cierta heterogeneidad fisiográ-
pendientes medias de 35,56 m/km (SD=20,0874),
fica. En los casos de ríos amplios y anchos, o de
pH=7,23 (SD=0,3305), así como cauces con una
sectores montanos, la existencia de microzonas
orla riparia buena o excelente. Se observó una
de aguas someras entre zonas de curso más rápi-
significación estadística muy alta (p<0,001) para
las variables altitud, número de rápidos por km y do, con afloramientos de piedras, se ha revelado
anchura del río. La pendiente y el pH fueron con- como una característica relevante para explicar la
sideradas como altamente significativas (p<0,01), distribución de esta especie (Román et al., 1996;
mientras que la variable orla riparia resultó esta- Purroy, 1997; Tellería et al., 1999).
dísticamente significativa (p<0,05). Las parejas nidificantes de mirlo acuático
Por último, para el martín pescador común quedan acantonadas entre el valle de Cuartango
apuntamos un total de 4-7 parejas nidificantes, y la cabecera del Bayas, incrementándose su pre-
desglosables en 4 seguras, 1 probable y 2 posi- sencia y densidad gradualmente hacia el norte.
bles, ocupando los tramos medio y bajo del río La presencia de individuos en otros puntos de la
Bayas. cuenca puede obedecer a dispersiones fuera de la
Si tuviéramos que caracterizar su hábitat época de cría, tras la cual los límites territoriales
(tabla 3), nos quedaríamos con que evita las zo- de las parejas se flexibilizan. Así, los adultos pue-
nas de mayor cota altitudinal del Bayas y usa den aparecer ocupando tramos menos aptos o fue-
tramos anchos (no utiliza aquellos de anchuras ra de sus lugares habituales, explotando recursos
inferiores a los 2 m), así como los tramos con estacionales. Ahora bien, aunque efectivamente
pH moderadamente básico (promedio global de el mirlo acuático presenta movimientos locales,
pH=7,78). La orla riparia (p=0,001) y la altitud éstos suelen ser breves y limitados (Masa 1991;
(p=0,040) fueron las variables más significativas Román et al., 1996; Purroy, 1998).
a la hora de explicar la selección de hábitat.
La abundancia obtenida en el area de estudio
sería ligeramente superior a la estimada para la
Sierra de Madrid (3,9 parejas/10 km; SCV, 2000)
Discusión y similar a la obtenida para la provincia de Sala-
manca (5,42 parejas/10 km; Peris et al., 1991) y
La lavandera cascadeña es la especie más
para Galicia (4,5-6 parejas/10 km; Santamarina,
distribuida y la que mayor variedad de biotopos
puede ocupar, porque se la ha podido encontrar 1991). Purroy (1997) cita valores extremos de
incluso fuera de los ríos y arroyos, aunque siem- 3-10 parejas/10 km para la región gallega. En la
pre ligada a sus inmediaciones. Este comporta- zona óptima del Bayas, de unos 6 km de longitud,
miento más generalista dificulta la descripción la abundancia del mirlo de agua alcanzaría 8 pare-
de patrones claros. No obstante, parece elegir, en jas/10 km, pero se reduce considerablemente en
el ámbito de estudio del Bayas, aquellos tramos sectores menos adecuados (p. ej. en el río Ugal-
con menor cobertura de sotos. Estos resultados des, donde en una extensión de más de 2 km sólo
concordarían con la presencia relativamente más se pudo registrar una pareja).
112 J. ECHEGARAY

En tramos con densidades bajas y cobertura


de vegetación en orillas, es posible que algún
territorio haya pasado desapercibido durante las
prospecciones de campo No obstante, el método
de muestreo parece el más apropiado para censar
poblaciones de esta especie (Roman et al., 1996;
SCV, 2000).
La altitud y el número de rápidos/km son las
variables más influyentes sobre la presencia del
mirlo acuático. Éste ocupa los tramos de cota ele-
vada, más accidentados y los que presentan mayor
número de rápidos. La mayor parte de los regis-
tros se ha obtenido en tramos de río de anchura
moderada-baja (de 2 a 15 m), en zonas de cabece-
ra con escasa o baja representación de orla riparia
(en forma de saucedas arbustivas y/o principios de
alisedas-fresnedas). Las mayores pendientes (150
m/km) se localizan también en cabeceras. En los
tramos medio y bajo la pendiente disminuye, con
mínimas de 4,2 m/km en el tramo final y ausen-
cia de mirlo acuático. Los rasgos fisiográficos del Figura 1. Pequeño cauce de montaña
territorio y la calidad físico-química de las aguas (foto: Nerea Ruiz de Azua).
(Rodríguez & Wright, 1988; Bogardi et al., 1991; [Mountain river stream.]
Carbonell-Martín, 1996) son determinantes para
la presencia de ésta especie (Noval, 1967; Elóse-
gui, 1985; Monig, 1985; Galarza, 1989; Grandío En relación al pH, comprobamos que el mirlo
& Belzunce, 1989; Gainzarain, 1990; Peris et al., acuático aparece en aguas ligeramente básicas y,
1991; Tucker & Health, 1994; Santamarina, 1995; en el contexto del Bayas, las aguas tienen un pH
Galarza, 1996, Román et al., 1996; Tellería et al., medio moderadamente básico. Peris et al. (1991)
1996; Purroy, 1997; Tucker & Evans, 1997; Te- señalan que los factores abióticos que limitan
llería et al., 1999). la distribución y abundancia del mirlo acuático
La pendiente y la altitud son dos de los facto- serían la pendiente y la acidez del agua. En con-
res que guardan relación directa con la presencia junto, las variables altitud, número de rápidos,
y abundancia de mirlo acuático en numerosos pendiente y pH son las que definirían el carácter
ríos europeos estudiados (Peris et al., 1991; SCV, bioindicador de esta especie en el Bayas.
2000), ya que condicionan a su vez la disponibi- Llama la atención el escaso número de pare-
lidad de cazaderos y recursos tróficos (plecópte- jas nidificantes de martín pescador común dadas
ros) en zonas profundas y turbulentas. Los valores las características y longitud del Bayas, con alta
elevados del índice BMWP se vinculan con una potencialidad piscícola y buena calidad de aguas.
oferta trófica óptima en forma de riqueza de ma- Por un lado, este hecho pudiera estar relacionado
croinvertebrados bénticos, alimento primordial con la escasez de biotopos idóneos (taludes areno-
de pollos y adultos, aunque es cierto que en oca- sos) para la nidificación, o con una fase de regre-
siones se ha descrito que la mayor abundancia de sión demográfica achacable a inviernos duros o
macroinvertebrados-presa se produce en tramos malas temporadas de cría (Martín & Pérez, 1990).
fluviales con menor pendiente (2,5-20 m/km en También se apunta la tendencia generalizada de
el Reino Unido, Peris et al., 1991). descenso poblacional señalada ya por algunos au-
DISTRIBUCIÓN Y HÁBITAT DE LA LAVANDERA CASCADEÑA Motacilla cinerea,
EL MIRLO ACUÁTICO Cinclus cinclus Y EL MARTÍN PESCADOR COMÚN Alcedo atthis
EN EL RÍO BAYAS (ÁLAVA, PAÍS VASCO) 113

tores para esta especie (Tucker & Health, 1994; Referencias


Tucker & Evans, 1997; Purroy, 1997).
ALBA-TECEDOR, J. & SÁNCHEZ-ORTEGA, A. 1988.
Parece existir un patrón de segregación altitu- Un método rápido y simple para evaluar la ca-
dinal entre el martín pescador y el mirlo acuático, lidad biológica de las aguas corrientes basado
evitando el primero las zonas altas de la cabecera en el de Hellawell. Limnetica, 4: 51-56.
del Bayas. Los tramos bajos, de menor altitud, ÁLVAREZ, J.; BEA, A.; FAUS, J. M.; CASTIÉN, E., &
aguas tranquilas, escasa pendiente y con mayor MENDIOLA, I. 1985. Atlas de los vertebrados
biomasa de peces, se adaptan al hábitat óptimo continentales de Álava, Vizcaya y Guipuzcoa
para el martín pescador común (Álvarez et al., (excepto Chiroptera). Gobierno Vasco. Bil-
1985; Tellería et al., 1996; Purroy, 1997; Bea et bao.
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si tenemos en cuenta que no existe competencia bird census programmes in physical planning
trófica entre ambas especies; mientras el martín in Denmark. En Purroy, F. J. (ed.): Bird Census
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Los rasgos definitorios de esta segregación es- Universidad de León. León.
pacial se encontrarían en la selección de la fisio- BEA, A. (ed). 1998. Vertebrados continentales. Si-
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cuanto a altitud, pendiente y turbulencia. País Vasco. Gobierno Vasco. Vitoria.
BIBBY, C.J.; BUGESS, N. D. & HILL, D. A. 1993.
Fuera de la época de cría sí parece registrar-
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se un aumento poblacional del martín pescador
don.
común debido a la instalación de efectivos inver-
nantes y a los nomadeos dispersivos de indivi- BIRDLIFE INTERNATIONAL/EUROPEAN BIRD CENSUS
COUNCIL. 2000. European Bird Populations:
duos inmaduros. También aumenta el grado de
Estimates and Trends. BirdLife Internacional.
simpatría entre ambas especies.
Cambridge.
Aunque careciendo de significación estadís- BOLETÍN OFICIAL DEL PAÍS VASCO. 1996. Decreto
tica, puede observarse que el martín pescador 167/1996, de 9 de Julio, por el que se regula el
común utiliza áreas con un menor número de Catálogo vasco de especies amenazadas de la
rápidos que la media obtenida para el conjunto fauna y flora, silvestre y marina.
del Bayas y elige tramos de anchura algo supe- BOGARDI, L.; KUZELKA, R. D. & ENNENGA, W. G.
riores a la media. El pH de aguas que utiliza son 1991. Nitrate contamination: exposure, conse-
los correspondientes a la zona neutra o de pH quence and control. NATO ASI series G/Ecolo-
más básico del Bayas (la zona de tramos medio gical Sciences, Vol. 30. Springer-Verlag. Nueva
York.
y bajo del río).
CARBONELL, G. 1996. Diagnóstico de procesos
toxicológicos en peces y organismos acuáticos.
Actas del curso sobre procesos toxicológicos
Agradecimientos ambientales y valoración del impacto ambien-
tal producido por explotaciones ganaderas, pp.
Para la realización de este trabajo se contó 42-49.
con una beca del Instituto Alavés de la Natura- CRAMP, S. 1988. Handbook of the Birds of Europe,
leza. Diana Paniagua, José Antonio Gainzarain, the Middle East and North Africa. The Birds of
Andrés Illana y Jose María Fernández presta- the Western Paleartic. Vol. V. Oxford Univer-
ron su colaboración a la hora de la realización y sity Press. Oxford.
preparación de este trabajo. Alberto Hernando y ELÓSEGUI, J. 1985. Navarra: atlas de aves nidifi-
Félix Martínez de Lecea también aportaron sus cantes. Caja de Ahorros de Navarra. Pamplo-
experiencias con estas especies. na.
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