Professional Documents
Culture Documents
La farmacología es una ciencia dinámica, y eso se ha demostrado en los últimos años al mostrar un
avance enorme comparado con las últimas décadas, siendo así de gran ayuda para la mayoría de
sus especialidades médicas, suceso que no se ha replicado en la farmacología pediátrica en donde
muchas veces la prescripción para este grupo etario se realiza sobre la base empírica de un
organismo inmaduro.
Los fármacos generalmente siguen una serie de etapas, siendo estas la de absorción, distribución,
metabolismo o biotransformación y excreción (proceso ADME), proceso que depende de una serie
de variables fisicoquímicas del fármaco, fisiológicas de la persona, e incluso patológicas. Al
respecto, desde el nacimiento hasta la edad adulta se producen una serie de modificaciones
anatómicas, fisiológicas y bioquímicas, que afectan estos procesos farmacocinéticos, así como
también algunos aspectos farmacodinámicos que afectan la acción de las drogas, la biosíntesis
enzimática, la producción y distribución de receptores. Estas modificaciones son máximas en la
época perinatal con grandes cambios y necesidades adaptativas que condicionan las respuestas
farmacocinéticas y de los receptores.
Los diferentes medicamentos se diseñan para provocar efectos determinados en la mayoría de las
personas, aunque no siempre este efecto es el mismo, y a dosis iguales no provoca respuestas de
la misma magnitud en personas diferentes. Esta diferencia en la acción, en ocasiones es más
predecible, sobre todo cuando se trata de factores farmacocinéticos; por ejemplo, la interacción
entre el fármaco y el alimento, patologías hepáticas, vía de administración, entre otros. En otro caso,
la magnitud de la respuesta depende de los distintos mecanismos a través de los cuales el fármaco
afecta al organismo, es decir, los procesos farmacodinámicos a los que se ve sometido.
Cuando se habla de acción local, entendemos aquella que se produce en el lugar donde se
administra el fármaco, mientras que una acción sistémica hace mención a la acción del fármaco una
vez que es absorbida y distribuida por la sangre. La potencia de un fármaco relaciona la cantidad o
dosis administrada y la acción que produce y la eficacia de un fármaco hace referencia al efecto
máximo que ese fármaco es capaz de alcanzar.
Todos estos conceptos nos permitirán entender los mecanismos de acción, así como los efectos
terapéuticos no deseados que por lo general suelen ocurrir por incumplimiento o automedicación
del paciente.
OBJETIVOS GENERALES.
OBJETIVOS ESPECIFICOS.
- Absorción: Estudia el paso del fármaco desde el sitio de administración hasta su llegada a
la circulación sistémica. Se estudia la velocidad con la que el fármaco abandona el sitio de
administración y la medida en que lo hace, alcanzando la circulación. (1)
Se distinguen 2 conceptos:
Los fármacos circulan en la sangre, junto con los elementos formes del plasma y las
proteínas plasmáticas, principalmente de 2 formas:
Inactivación (detoxificación).
Activación: En caso de pro fármacos.
Mantenimiento de la actividad: Se trasforma en otra sustancia activa de mayor o
menor potencia a la original.
Aunque todos los tejidos tienen cierta capacidad de metabolizar fármacos, el hígado es el
principal órgano de Biotransformación. Otros tejidos que muestran considerable actividad
son el aparato digestivo, los pulmones, el plasma, la piel y los riñones. (1)
Vias de administración.
o Vía Enteral:
Vía ORAL: consiste en la administración a través de la boca (por deglución)
siendo absorbido en TGI. Puede ser mediante absorción gástrica dependiendo
del vaciamiento gástrico y absorción intestinal con gran área de absorción. Esta
vía es fácil, cómoda, no dolorosa, segura en caso de sobredosis y económica.
Sin embargo, no puede ser usada en pacientes sin capacidad de deglutir, tiene
acción lento, presenta el fenómeno del primer paso hepático, algunos fármacos
pueden generar irritación gástrica e incluso inactivarse en el estómago. (2)
o Vía Parenteral:
Vía INTRAMUSCULAR: consiste en administrar el medicamento dentro del tejido
muscular (tríceps, muslo o glúteo), se absorbe más rápido que en la vía SC
puesto que el musculo está más irrigado, sin embargo, debe evitar sustancias
irritables por riego de necrosis, y si es mal administrado puede o inyectarse en la
vena generando RAMS o lesionar algún nervio.
La mayor parte de los AINES tradicionales son ácidos orgánicos con valores de pKa
relativamente bajos. Por ello, los compuestos generalmente se absorben bien por vía oral, se
unen en alto grado a las proteínas plasmáticas y son excretados mediante filtración glomerular
o secreción tubular.
- Mecanismo de acción:
Los AINES ejercen la mayor parte de sus efectos farmacológicos y adversos por inhibir con
mayor o menor potencia y especificidad a las isoformas de ciclooxigenasas (COX), enzima
responsable de conversión del ácido araquidónico en prostaglandinas (PG).
Inhibición de COX:
- Farmacocinética:
o Vía de administración: La vía más usada es la oral, aunque algunos AINES pueden
administrarse por vía parenteral y tópica.
o Absorción: Se absorben de manera rápida y completa por VO, ofreciendo una buena
biodisponibilidad. La magnitud de la absorción puede estar influenciada por la presencia
de alimentos y la forma farmacéutica.
o Distribución: Al ser ácidos orgánicos poseen un pKa bajo, por lo que son muy
liposolubles. Se unen en alta proporción a la albúmina, y tiene volúmenes de distribución
bajos, pero se distribuyen ampliamente, hacia todos los líquidos orgánicos, con buena
penetración en el foco inflamatorio.
Paciente varón de 28 años de edad, acude a la consulta por presentar dolor e inflamación en el
tobillo izquierdo, a raíz de un golpe recibido durante un partido de fulbito, un día antes de la consulta.
El médico que lo atiende le diagnostica contusión de tobillo izquierdo y le indica un antiinflamatorio
no esteroideo, ibuprofeno por vía oral a la dosis de 400 mg cada 8 horas, durante cinco días.
DISCUSIÓN.
Al mismo tiempo, inhibe la migración de leucocitos a las zonas inflamadas para evitar la
liberación de citoquinas, así como de otras sustancias que afectan los receptores
nociceptivos.
Se puede administrar vía oral, puesto que el paciente no indica tener vómitos o problemas
para deglutir, por lo que se le indica tomar vía oral a la dosis de 400 mg cada 8 horas. Esta
dosis se calculó en base al tiempo de vida media del Ibuprofeno (2 horas), multiplicado por
4.
Por otro lado, hay que tener en cuenta que no se puede administrar este medicamento por
más de 5 días puesto que se elevarían los efectos adversos, tales como la gastrolesividad.
Cabe mencionar que los alimentos provocan que la velocidad de absorción se reduzca
considerablemente. Sin embargo, esto no afecta en el resultado final ya que, si bien se
reduce la velocidad de absorción, se mantiene la cantidad de ibuprofeno absorbido.
CUESTIONARIO
CONCLUSIONES
1. Brunton Laurence L., Lazo John S., Parker Keith L. “Goodman & Gilman. Las bases
farmacológicas de la Terapéutica”. 12va Edición. McGraw Hill. 2012.
2. Katzung B. Trevor A. Farmacología básica y clínica. 13va Edición. McGraw Hill. México
2016.
4. Rabadán Anta, M.Tª.; Flores Baeza, M.J.; Cayuela Fuentes, J, et al. Interacciones
medicamentosas en la administración de fármacos dentro del proceso de enfermería.
Murcia 2012. ISSN 1695-6141. (1): 1-23