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APROXIMACIONES CRITICAS AL ANALISIS DEL TEXTO. Se le llama estructura de un texto a la combinacién de todos los elementos litera- rios, al resultado final. Los criticos emplean varias merodologéas y aproximaciones ceriticas para analizarla. Las aproximaciones que dependen exclusivamente de 1a ‘materia textual se llaman formalistas, pues se basan en un examen de los aspectos formales de la obra. Otras tienen un punto de enfoque extratextual y provienen de luna consideracién de la obra en funci6n de otro sistema: biogrifico, sociohistérico, filoséfico, psicol6gico, lingUistico, etcétera. Un estudio del desarrollo de la trama de una obra o de la perspectiva narrativa o de la creacién de imagenes, tendria, una base formalist. Al contratio, una comparacién entre la temética filosofica de una obra y sus antecedentes teéricos 0 el andlisis de un personaje literario segin las teorfas psicoanaliticas de Sigmund Freud (1856-1939) o arquetipicas de Carl Jung (1875-1961) 0 también el andlisis de un texto como documento biogréfico sobre el autor, tendrjan una base extratextual. Las aproximaciones més modems, tales como el estructuralismo, la semictica y la fenomenologia, se basan en inves- tigaciones linguifsticas y filos6ficas. Al analizar los textos literarios ponen énfasis ya sea en la produccién de estructuras y significaciones (estructuralismo), en los ‘complejos signos que forman un texto (la semiética) o en la revelacién de la con- iencia autorial (la fenomenologéa), en la revelacién de la significacién a través del juego de presencia y ausencia (la desconstruccién) y, en términos generales, en el acto complejo y agradable de leer un texto. (Ver Apéndice 3.) PRACT —$—$—$—$— _ 1. Analice el punto de vista de cada uno de los fragmentos siguientes, ;Qué tipo de narrador se presenta? {primera o tercera persona? ;Quién habla? cel Protagonista? :un personaje secundario? ;un testigo u observador externo? 4. Call me Ishmael Some years ago—never mind how long precsel;—having litle or 19 money in my purse, and nothing particular to interest me on shore, thought ‘Would sai about a itl and see the watery pat of the world. It isa way Thave of ‘ving off the spleen, and regulating the cieculation. Whenever [find myself growing rim about the mouth; whenever its a damp, drizzly November in my soul When- ever I find mysef involuntarily pausing before coin warehouses, and binging up the rear of every funeral I meet and especially whenever my hypos get such an upper hand of me, tht it requites a strong moral principle to prevent me from deliberately Stepping into the street, and methodically knocking people's hats off—then I account it hgh ime to get wo sea as soon a an (Herman Melville, Moby Dick, 1851) Aquella noche Laura no poda dormir, Pensaba una vez y tra en la modista, en tn, en el bolso, que bia que limpiar para que disimulara un poco ls seales del mucho uso, pero sobre todo en el sombrero, Don Manvel, mientras tanto, pensaba: «Estos subalteros, estos sales Fue una debilidad mia invite» (Felicidad Blanc, «El cock tis, 1947) (Habla el Dr, Watson, compaiero del famoso detective Sherlock Holmes.) "Thad seen litte of Holmes lately. My marrage had drifted us away from each othe. MC Jaro LGU John F o-07-¢ ESPAK Francis Michox oo7e TRAD 0-07. CON Tish 0-07 GR lon oo wu | ome on h ‘My own complete happiness, andthe home-centered interests which rise up around ‘the man who first finds himself master of his own establishment, were sufficient to absorb all my attention; while Holmes, who loathed every form of society with his ‘whole Bohemian soul, remained in our lodgings in Baker Street, buried among his, ‘old books, and alternating. from seek to week between cocaine and ambition, the drowsiness of the drug, and the fierce energy of his own keen nature. He was stil, & ever, deep tracted by the study of crime, and occupied his immense faculties and cextmondinary powers of observation in following out thse clues, and clearing up those mysteries, which had been abandoned as hopeless by the official police (Sir Arthur Conan Doyle, “A Scandal in Bohemia,” ‘The Adventures of Sherlock Holmes, 1900) 4d. Martina, ta criada, era una muchacha ata y robusta, con una gruesa trenza, negra y ie cient, arrollada en la nuca. Martina tena los modales bruscos y la vor dspera. También tenia fara de mal genio, y en la cocina del abuelo [el abuelo de Ia mujer que habla] todos sabian que no se le ‘gastar bromas ni burl... Yo a recuerdo eargando _randes baldes de ropa sobre sus ancas de yogus, y drigiéndose al rio descalza, con las ‘desnudas piemas, gruesas y morenas, brillando al sol. Martina tenfa la fuerza de dos Ihombres, segin decfa Marta la cocinera, y el genio de cuatro sargentos. (Ana Maria Matute, «Envidian, Historias de la Artémilo, 1961) €. Billy Tully was a fry cook in a Main Street lunchroom, His fe, a youthful pink, was Tined around the mouth. There was a dent inthe middle of his nose. Thin scars lay ‘one above another at the outer edges of his brows. Crew-cut on top and combed back Jong on the sides, his rust-colored hair was abundant. He was short, deep-chested, ‘compact, neither heavy or thin nor very muscular his bones thik, his flesh spare. It was the size of his neck that gave his clothed figure its look of strength. The result of years of exercise, of lifting en- and twenty-pound weights with a headstrap, it had been developed for a single purpose—to absorb the shock of blows. ‘Tully had not had a out since his wife had left him, but lastnight he had hi man in the Ofis Inn. What the argument involved be could no longer clearly recall, and he gave it litle thought. What concemed him was what had been revealed about Dimselt. He had thrown one punch and the man had dropped. Tully now believed he ‘had given up his career too soon, He was still only twenty-nine. (Leonard Gardner, Fat Ciy, 1969) [La mujer de Demetrio Macias, loca de alegria, salié encontrarlo por la vereda de la sierra, llevando de la mano al ni. {Casi dos afi de ausencia! Se abrazaron y permanecieron muds; ella embargada por los sollozos y ls Ligri- emetrio, pasmado, vefa a su mujer envejecida, como si diez o vein aos hu bieran transcurrido ya. Luego mins al niflo, que clavaba en 61 sus ojos con azoro. ¥ su ‘corazén dio un vueico cuando reparé en la eproducei6a de las mismas lineas de acero de su rostr y el brilloflamante de sus ojos. ¥ quiso atraero y abrazario; pero el chiquillo, muy asustado, se refugi en el regazo de la mare. is tu padre, hijo! iE tu padre! (Mariano Azuela, Los de abajo, 1916) {8 (El fragmento se refer a Delia Grinstead, una mujer al brde de una crisis de identida.) Halfway home, she had a sudden realization: she should have given him the groceries he had picked out. Good heavens—all that pasta thas litle grains of orzo, and now she remembered his eonsommé too. Consommé madrlene: she wasn't even sure how to pronounce it, She was driving away with property that belonged to someone else, and it was shameful how pleased she felt, and how lucky. and how rich. 20 LA NARRATIVA, (Anne Tyler, Ladder of Years, 1995) Fh, (Lo que sigue son las primeras oraciones del cuento «Paulo Pumilion,) Soy plenamente conscient, al inicar la estructura de estos folios, de que mis contem- Pordneos no ssbrén comprenderme. Entre mis maltples desgracias se cuenta la dela imoportunidad con que nacf: vine al mundo demasiado pronto o demasiado tarde. En ‘cualquier caso, fuera de mi época. Pasarén muchos as antes de que los lectores de esta confesién sean capaces de entender mis razones, de calibrar mi desarolladasen- sibilidad amén de la grandeza épica de mis actos. Coren tempos banales y chatos en los que no hay lugar para epopeyas, Me Haman eriminal, me tackan de loco y de de~ enerado. Y, sin embargo, yo sé bien que todo lo que hice fue equitativo,digno y ra zonable, (Rosa Montero, «Paulo Pumilio», 1982) 2 {Cémo se puede clasificar al narrador de cada uno de los trozos siguientes? GES fidedigno o indigno de confianza? ‘a, (Aquf se presenta a Ia protagonista Benina, una mujer dispuesta a ayudar a los demés toda costa, Por sus actos benéficos,lega a ser considerada como una verdadera santa) ‘La mujer de negro vestida, més que vieja, envejecida prematurament, era, ademés de ‘nueva fente los mendigos), emporera, porque acu a la mendicidad por lapsos de tiempo mis 0 menos lagos, y alo mejor desapareeta, sin duda por encontrar un buen ‘acomodo o almas caitativas que la socorieran. Respondia al nombre dela sefd Be- nina (de lo cual se infere que Benigna se lamaba), y era la ms callada y humilde de 4a comunidad, si asf puede decirse: bien criada, medosa y con todas las trazas de per fectasumisin a la divina voluntad, ...Con todas y con todos hablaba el mismo lenguaje afable y comedido. (Sigue una descripein fisica.] Con este pesvenio y la ex- presin sentimental y dulce de su rosto, todavia bien compuesto de lineas,parecfa ‘una Santa Rita de Casia que andaba por e! mundo en penitencia (Benito Pérez Galdss, Misericondia, 1897) ). (Se presenta a «Timoteo el incomprendido» en relacién con su devocisn al ate pure.) ‘Timoteo Moragona y Juarrucho era un artista incomprendido. Las vecinas se eachon deaban de él y de deca: —1Que, Timoteo, le han encargado a usted algin San Roque?! —iNo sefir! {No me han encargado ningtin San Rogue! ;Yo no soy un artista de encargos! [La vecina mis atrevida continda burléndose de él] Y¥ entonces, Timoteo le pegé una patada en el vienre y la tits por encima del puestecillo de una vieja que vendia chufas y cacahvetes. —Tome usted! ;Para que escarmiente y no se vuelva a meter con fo artistas! (Camilo José Cela, «Timoteo el incomprendido», 1982) "in. 07 you ding some werk on commision? (El narrador es un personaje sin nombre, un inglés —segdn le ama la gente— que ‘narra la historia del trador John Vincent Moon, quien denuncié aun amigo suyo en 1a époce de la lucha por a independencia irlandesa. La narracién termina ast) Yo soy Vincent Moon. Ahora desprécieme, lorge Luis Borges, «La forma dela espadan, Ficciones, 1944) 3. ;Cual es el término que seftala el papel de los «sefiores» que aparecen en los dos pasajes siguientes y a quienes va dirigida la narrativa? Yo, seo, soy de Segovia. Mi padre se llamé Clemente, natural del mismo pueblo; Dios te tenga en el cielo, (Prancisco de Quevedo, El Buscén, 1626)

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