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Cirugía del disco intervertebral


lumbar (exceptuando las prótesis
discales y artrodesis)
L. Balabaud, C. Mazel, P. Antonietti

La gran mayoría de las indicaciones de la cirugía lumbar corresponden al disco interver-


tebral, en especial a la hernia discal lumbar. Sin embargo, esta cirugía debe constituir
el último recurso después de un tratamiento médico, salvo complicaciones neurológicas,
aunque no existe un consenso sobre las indicaciones. Incluso aunque los resultados se
consideran muy buenos, el postoperatorio no siempre es favorable. Las hernias discales
pueden tener varias localizaciones: medial, posterolateral, foraminal y extraforaminal.
La estrategia quirúrgica debe adaptarse en función de la topografía de la hernia, del
antecedente de una recidiva, así como del estado de los platillos vertebrales adyacen-
tes. En este artículo se describe la discectomía por vía posterior medial, la discectomía
posterolateral según la técnica de Wiltse, las discectomías endoscópicas transforaminal
e interlaminar, así como la cirugía de reintervención discal. Las prótesis lumbares y las
artrodesis no se expondrán en este artículo.
© 2012 Elsevier Masson SAS. Todos los derechos reservados.

Palabras clave: Cirugía lumbar; Columna lumbar; Discectomía lumbar; Vía de Wiltse;
Discectomía endoscópica; Complicaciones de la discectomía lumbar

Plan ■ Cirugía de reintervención del disco lumbar 5


Dificultades quirúrgicas 5
■ Introducción 1 Procedimientos asociados 6
■ Discusión 6
■ Discectomía por acceso posterior 2
Colocación 2 ■ Conclusión 6
Vía de acceso 2
Discectomía 2
Procedimientos asociados 3
Cierre
Período postoperatorio
3
3
 Introducción
■ Discectomía por acceso posterolateral 3 La cirugía del disco intervertebral lumbar constituye sin
Colocación 3 duda la parte fundamental de las indicaciones de ciru-
Vía de acceso y resección de la hernia 3 gía lumbar, en especial la hernia discal lumbar. Aunque
Cierre 4 no existe consenso sobre las indicaciones, constituye el
■ Discectomía endoscópica por vía transforaminal 4 último recurso tras el fracaso del tratamiento médico o
Colocación 4 en el contexto de los trastornos neurológicos. Aunque
Vía de acceso y ablación de la hernia 4 los resultados se consideran muy buenos, el postopera-
Cierre 4 torio no siempre es sencillo y puede estar marcado por la
Período postoperatorio 5 aparición de lumbalgias, de radiculalgias residuales y de
■ Discectomía endoscópica por acceso interlaminar 5
recidiva herniaria. Por tanto, las indicaciones quirúrgicas
Colocación 5
deben plantearse de forma adecuada. La estrategia quirúr-
Vía de acceso y ablación de la hernia 5
gica debe tener en cuenta varios parámetros: la topografía
Cierre 5
de la hernia, que puede ser medial, posterolateral, forami-
Período postoperatorio 5
nal y extraforaminal, el antecedente de recidiva, así como
el estado del disco y de los platillos vertebrales adyacentes.

EMC - Técnicas quirúrgicas en ortopedia y traumatología 1


Volume 4 > n◦ 3 > septiembre 2012
http://dx.doi.org/10.1016/S2211-033X(12)62367-6
E – 44-156  Cirugía del disco intervertebral lumbar (exceptuando las prótesis discales y artrodesis)

En este artículo se describirán la discectomía por vía poste-


rior medial, la discectomía posterolateral según la técnica
de Wiltse, las discectomías transforaminal e interlaminar,
así como la cirugía de reintervención discal. Las prótesis
lumbares se describen en otro artículo.

 Discectomía por acceso


posterior
La discectomía por acceso posterior está indicada en las
hernias discales mediales y posterolaterales, pero también
en las foraminales. Constituye el patrón oro. Se puede
efectuar con microscopio o con gafas de aumento, aso- Figura 2. Acceso intracanalicular tras la exéresis del ligamento
ciadas a un fotóforo de luz fría. amarillo y laminotomía.

Colocación
El paciente se coloca en decúbito prono en una mesa
radiotransparente para realizar los controles radiográficos
intraoperatorios. Pueden emplearse varios modos de colo-
cación: sobre rodillos situados a nivel del tórax y de la
pelvis (con las caderas y rodillas flexionadas a 30◦ ), con
un rodillo torácico (caderas y rodillas flexionadas a 90◦ ) o
en posición genupectoral. Estas colocaciones deben cum-
plir dos exigencias: la ausencia de presión abdominal para
reducir la hemorragia intraoperatoria y la disminución de
la lordosis lumbar para abrir el espacio intervertebral. Es
obligatorio asegurarse de que no se comprimen los globos
oculares para prevenir el riesgo de ceguera. El cirujano se
coloca en el lado homo o contralateral a la hernia discal,
según su costumbre.
Figura 3. La raíz nerviosa se rechaza en sentido medial, lo que
permite acceder a la hernia discal.
Vía de acceso
asegurarse de que no existen adherencias entre las estruc-
Tras un control radioscópico preoperatorio, se realiza turas periféricas y la duramadre. El acceso intervertebral
una incisión vertical medial, centrada en el nivel corres- se completa en ocasiones con una pinza de Kerrison, rea-
pondiente. Se prolonga hasta el plano aponeurótico; suele lizando una laminotomía parcial y la resección completa
efectuarse un acceso unilateral interlaminar (Fig. 1). A del ligamento amarillo (Fig. 2).
continuación, se desciende legrando o desinsertando con
un bisturí eléctrico las apófisis espinosas y las láminas
de las vértebras adyacentes del espacio vertebral afec- Discectomía
tado. Sin embargo, si se debe asociar un procedimiento
de recalibrado o si la hernia discal es muy voluminosa, El acceso discal se efectúa con espátulas romas rectas
se recomienda realizar un acceso bilateral según el mismo y curvas, así como con una cánula fina que permite una
principio. A continuación, se coloca un separador asimé- aspiración suave. El objetivo es identificar la raíz nerviosa
trico o de Beckmann. Antes de comenzar el procedimiento y después rechazar con suavidad ésta y el saco dural en
intracanalicular, es obligatorio realizar un control radios- sentido medial, para acceder a la cara posterior del disco
cópico para verificar que se accede al nivel correcto. El en el hombro de la raíz (Fig. 3). El acceso a la cara posterior
acceso canalicular se comienza con una legra pequeña, del disco en la axila de la raíz debe evitarse, pues puede
con la que se limpian los bordes de las láminas, la cara provocar lesiones radiculares definitivas. En el caso de una
posterior del ligamento amarillo y el borde medial del hernia discal excluida, el fragmento libre suele ser visible
macizo articular posterior. El ligamento amarillo se reseca en este estadio y su ablación se realiza con una pinza de
a continuación con cautela usando un bisturí de hoja disco. Suele ser necesario realizar hemostasia de una vena
n.◦ 11 o una espátula roma. A continuación, se introduce epidural con la pinza bipolar, en especial en el disco L5-
una espátula roma curva en el conducto raquídeo para S1. La aplicación de pequeñas torundas por encima y por
debajo del espacio discal puede permitir mantener el saco
dural y la raíz nerviosa separados, o si no la utilización de
la espátula roma o de separadores de raíz permite efectuar
el procedimiento con total seguridad. A continuación, se
puede comenzar la ablación de la hernia discal, incidiendo
la cara posterior del disco en sentido longitudinal en el
sentido de la raíz nerviosa con un bisturí de hoja n.◦ 11.
La hernia protruye desde el disco y suele ser fácil resecarla
con una pinza de disco recta (Fig. 4). La exéresis discal se
realiza a continuación con unas pinzas de disco rectas y
anguladas. La discectomía se considera finalizada cuando
con la pinza no se extrae más material discal. La raíz se
moviliza para verificar que no existe compresión residual.
Hay que asegurarse de forma sistemática de que no que-
dan fragmentos libres supra e infraligamentarios, así como
Figura 1. Acceso posterior interlaminar para una discectomía. foraminales, mediante una espátula curva y/o un gancho

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Figura 4. Resección de la hernia discal con una pinza de disco. Figura 5. Vía posterolateral de Wiltse, que pasa entre los mús-
culos multífido (1) y longísimo (2).
romo. Por último, el disco se puede lavar con suero estéril
introducido a presión en el espacio discal. No se deben
legrar los platillos vertebrales.

Procedimientos asociados
Si existe una estenosis foraminal asociada, la dis-
cectomía se completa con una foraminotomía, que es
más sencilla cuando el cirujano se coloca en el lado
contralateral del paciente. En caso de recidiva o en algu-
nas discopatías inflamatorias documentadas, puede ser
necesario asociar a la discectomía un procedimiento com-
plementario de tipo artrodesis lumbar o de estabilización
dinámica. Estos temas no se describen en este artículo.
No existe consenso sobre estos métodos y son objeto de
controversia.

Figura 6. Acceso posterolateral de Wiltse, espacio intertrans-


Cierre versario.
Tras la colocación de un drenaje de redón a nivel
profundo, el plano aponeurótico se sutura con hilo
reabsorbible, si es posible dando puntos en el espacio inte-
respinoso y en las apófisis espinosas. No existe consenso Vía de acceso y resección de la hernia
sobre la colocación de un drenaje de redón, sobre todo
cuando existe un desgarro dural. En este último caso, si se Después de realizar un control radiográfico preopera-
toma la decisión de emplear el drenaje, es obligatorio que torio, la incisión longitudinal y unilateral de la piel se
sea sin vacío. El cierre cutáneo se efectúa con una sutura realiza a dos dedos del eje de las apófisis espinosas. Tras
continua intradérmica o con suturas clásicas. la disección del plano subcutáneo, la fascia lumbosa-
cra se incide en longitudinal. La disección se prosigue
con el dedo hasta las apófisis transversas adyacentes
Período postoperatorio del agujero correspondiente entre los músculos multi-
fidus y longissimus, que están separados por un tejido
El paciente se levanta por primera vez la misma tarde de celuloadiposo (Fig. 5). Después de colocar separadores
la intervención o el día siguiente. El drenaje de redón se a nivel lateral y medial, la disección se prosigue para
retira a las 24-48 horas. No existe una limitación postural visualizar las bases de las apófisis transversas, el macizo
estricta, ni uso de contención. La flexión del tronco, car- articular posterior, así como la cara posterior del liga-
gar peso y las actividades físicas intensas deben evitarse mento transverso y el músculo intertransverso (Fig. 6).
durante 6 semanas. Este último debe individualizarse a la perfección y des-
pués desinsertarse, con legras rectas y curvas, de la apófisis
transversa cefálica, de la cara dorsal del pedículo y de
 Discectomía por acceso la cara lateral del macizo articular posterior. A continua-
ción, puede resecarse el ligamento intertransverso con
posterolateral una pinza de Kerrison. En L4-L5 y a veces en L3-L4, es
necesario resecar de forma muy parcial el macizo arti-
Esta vía fue descrita inicialmente por Wiltse [1, 2] . La dis- cular posterior e inferior y la apófisis transversa cefálica,
cectomía por acceso posterolateral está indicada en las para visualizar la parte inferomedial de la raíz nerviosa
hernias foraminales y extraforaminales. Se desaconseja (Fig. 7). La identificación de la raíz nerviosa se realiza
acceder al disco L5-S1 por esta vía por dos motivos: la con un disector romo, tras lo que se separa en sentido
distancia muy corta existente entre la apófisis transversa lateral para exponer la hernia discal y el disco inter-
de L5 y el sacro, así como el ala ilíaca, que limita el acceso vertebral. Si el fragmento discal está excluido, se reseca
a la cara lateral del disco. con una pinza de disco (Fig. 8). En caso contrario, es
necesario incidir la cara posterolateral del disco con un
bisturí de hoja del n.◦ 11, tras lo que se efectúa la
Colocación discectomía como se ha descrito previamente. La hemos-
tasia debe ser meticulosa, en especial sobre la arteria
El paciente se coloca igual que en el acceso posterior, radicular y las venas foraminales. Se debe realizar con una
por lo que deben respetarse los mismos requisitos. pinza bipolar.

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Figura 7. Aspecto tras la resección del ligamento intertransver-


Figura 9. Vías endoscópicas transforaminal (en azul) e interla-
sario y parcialmente del macizo articular posterior y de la apófisis
minar (en rojo).
transversa cefálica. Visualización de la parte inferomedial de la
raíz nerviosa.

Figura 8. La raíz nerviosa se separa en sentido lateral para Figura 10. Una cánula espinal se introduce hasta el macizo
exponer la hernia discal y el disco intervertebral. La resección de articular inferior de la vértebra caudal en sentido posterolateral
la hernia discal se realiza con una pinza de disco. respecto al agujero.

Cierre corpulencia del paciente (Fig. 9). Todos los procedimien-


Tras la colocación de un drenaje de redón a nivel tos siguientes se realizan bajo control radioscópico. Una
profundo, el plano aponeurótico se sutura con hilo reab- cánula espinal se introduce por el punto de entrada hasta
sorbible. el macizo articular inferior de la vértebra caudal a nivel
posterolateral respecto al agujero (Fig. 10). Se introduce
una aguja guía y la cánula espinal se retira. A continua-
 Discectomía endoscópica ción, hay que realizar una pequeña incisión cutánea. Se
coloca un dilatador sobre la aguja guía mediante movi-
por vía transforaminal mientos rotatorios hasta el agujero y después se retira
la aguja guía. La vaina de trabajo biselada se introduce
Desde la década de 1980, varios autores han descrito las sobre el dilatador, que se retira a continuación. Por esta
técnicas de acceso endoscópico del disco lumbar por vía vaina, se introducen el endoscopio, los instrumentos espe-
posterolateral [3] . Las indicaciones abarcan a todas las her- cíficos y la irrigación continua. Suele ser necesario un
nias discales lumbares, pero parecen más adecuadas para procedimiento adicional de resección ósea para mejorar
las que están en posición foraminal y extraforaminal. Al la exposición o para tratar una estenosis foraminal de ori-
igual que para la vía posterolateral de tipo Wiltse, esta vía gen osteofítico. Esta resección ósea se realiza en el borde
suele ser difícil en el nivel L5-S1, donde es muy frecuente lateral del macizo articular posterior, con fresas y con una
que haya una cresta ilíaca alta y un agujero de pequeño pinza de Kerrison que se introducen bajo control visual
tamaño. por la vaina de trabajo, con el fin de visualizar de forma
adecuada el borde inferior del pedículo cefálico, la raíz
nerviosa y el espacio discal (Fig. 11). Esta resección debe
Colocación realizarse con cautela y de forma limitada, para no deses-
tabilizar el nivel raquídeo operado. A continuación, es
El paciente se coloca igual que en el acceso posterior, por necesario rechazar con suavidad la raíz nerviosa hacia
lo que deben respetarse los mismos requisitos. Es obligato- abajo con un separador de raíz, para exponer la hernia
rio realizar controles radiográficos preoperatorios y poder discal. El fragmento discal se reseca con una pinza de
efectuarlos de forma intraoperatoria. disco (Fig. 12) y se realiza la discectomía complementa-
ria.
Vía de acceso y ablación de la hernia
El acceso transforaminal se orienta mediante referen- Cierre
cias externas, que se colocan bajo control radioscópico,
en los planos frontal y sagital del disco intervertebral. A continuación, los instrumentos, el endoscopio y la
Las referencias externas del punto de entrada cutáneo vaina de trabajo se retiran con suavidad. El cierre cutáneo
se indican con un marcador y se sitúan a unos 10 cm se realiza con una sutura continua intradérmica o con un
de la línea interespinosa, distancia que varía según la pequeño apósito adhesivo.

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romo hasta el ligamento amarillo. La vaina de trabajo


biselada se introduce sobre el dilatador, que se retira a
continuación.
Acto seguido, se introduce un endoscopio en la vaina
de trabajo, lo que permite continuar la intervención bajo
control visual. Se mantiene una irrigación continua. Se
efectúa una resección ósea a expensas del borde inferior
de la lámina superior y del borde medial del macizo arti-
cular posterior con una fresa motorizada y/o una pinza de
Kerrison. El ligamento amarillo se reseca con una pinza
de Kerrison. Después, es posible visualizar la cara lateral
de la médula y la raíz nerviosa. Suele ser necesario realizar
hemostasia de los plexos venosos, con una pinza bipolar.
A continuación, es preciso rechazar con suavidad la raíz
nerviosa, que es poco móvil, en sentido medial con un
Figura 11. Exposición del borde inferior del pedículo cefálico, separador de raíz, para exponer la hernia discal. Después
de la raíz nerviosa y de la hernia discal. de abrir el ligamento vertebral posterior, se reseca el frag-
mento discal con una pinza de disco. Este procedimiento
puede completarse con una discectomía en función del
estado de los fragmentos discales.

Cierre
A continuación, los instrumentos, el endoscopio y la
vaina de trabajo se retiran con suavidad. El cierre cutáneo
se realiza con una sutura continua intradérmica o con un
pequeño apósito adhesivo.

Período postoperatorio
El paciente puede levantarse por primera vez el mismo
día de la intervención. Esta cirugía puede realizarse de
forma ambulatoria. No hay limitaciones estrictas en
Figura 12. La raíz nerviosa se rechaza con un separador de
cuanto a la postura, ni contención.
raíz, para exponer la hernia discal. La ablación del fragmento
discal se realiza con una pinza de disco.

Período postoperatorio
 Cirugía de reintervención
del disco lumbar
El paciente puede levantarse por primera vez el mismo
día de la intervención. Esta cirugía puede realizarse de Se trata de una cirugía difícil que requiere estar seguro
forma ambulatoria. No hay limitaciones estrictas en de la existencia de una recidiva de la hernia discal. Sólo
cuanto a la postura, ni contención. La flexión del tronco, una resonancia magnética (RM) con inyección de gadoli-
cargar peso y las actividades físicas intensas deben evitarse nio permite distinguir entre la existencia de una recidiva
durante 6 semanas. herniaria y un tejido cicatrizal. Aunque la reintervención
mediante una cirugía convencional es habitual, pocos
autores proponen la utilización de las vías endoscópicas
 Discectomía endoscópica para las recidivas [6] .
por acceso interlaminar
Dificultades quirúrgicas
Este método reciente fue descrito a fines de la década
de 1990 [4] y sus indicaciones se limitan a las hernias blan- Las dificultades quirúrgicas se deben básicamente a la
das en posición posterolateral de tamaño moderado, sobre existencia de tejido cicatrizal, que complica la disección y
todo para el disco L5-S1, pues éste suele ser de difícil acceso hace en ocasiones que la identificación de las estructuras
por vía transforaminal [5] . Esta técnica también es intere- neurológicas sea laboriosa. Es indispensable conocer de
sante en pacientes obesos, al permitir reducir el tamaño forma preoperatoria qué acceso se empleó en la primera
de la incisión. intervención (existencia de una laminectomía, complica-
ción). El acceso canalicular debe evitar que se produzca un
desgarro dural. Es obligatorio liberar las estructuras óseas
Colocación (láminas supra y subyacentes y macizos articulares poste-
riores) con una pequeña legra. El acceso canalicular debe
El paciente se coloca igual que en el acceso posterior, por realizarse con cautela, disecando progresivamente el saco
lo que deben respetarse los mismos requisitos. Es obligato- dural de las paredes óseas laminares y articulares poste-
rio realizar controles radiográficos preoperatorios y poder riores, utilizando espátulas romas o disectores según la
efectuarlos de forma intraoperatoria. costumbre del cirujano y realizando el despegamiento con
una pequeña legra, cuya parte convexa se coloca hacia el
Vía de acceso y ablación de la hernia saco dural. Las adherencias residuales se seccionan con
suavidad y/o se desinsertan a ras de las superficies óseas,
El punto de entrada es lo más medial posible y se guía con un bisturí de hoja n.◦ 11 o con una espátula roma.
mediante control radioscópico en proyección frontal y Si existe un tejido cicatrizal abundante, es necesario acce-
lateral. Se realiza una incisión limitada en el lado de la her- der por una zona sana no operada (lado contralateral o
nia (Fig. 9). Todos los procedimientos siguientes se llevan a laminotomía ampliada). Antes de plantear cualquier pro-
cabo bajo control radioscópico. Se introduce un dilatador cedimiento discal, es imperativo haber visualizado todo el

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trayecto de la raíz nerviosa. Por último, la movilización de discal subligamentaria o excluida). Tras la secuestrecto-
dicha raíz puede ser muy difícil, debido al tejido cicatrizal mía, se observaría una menor frecuencia de lumbalgias,
y a veces es necesario evaluar la pertinencia de una movi- una menor duración de la intervención y una reanuda-
lización que puede ser traumática para la raíz nerviosa y ción más rápida de la actividades, pero la tasa de recidiva
causar lesiones definitivas con una repercusión funcional podría ser mayor [17–25] . Sin embargo, esto requeriría una
y dolorosa postoperatoria. En tal caso, hay que conten- confirmación mediante estudios de nivel I. Este resultado
tarse con un procedimiento de liberación radicular a lo parece confirmarse para las discectomías endoscópicas [26] .
largo de todo el trayecto del nervio, en especial foraminal. La otra controversia incumbe a las ventajas de las
La discectomía no difiere de la descrita con anterioridad. técnicas endoscópicas comparadas con las de la discecto-
Si se produce un desgarro dural, se debe suturar, si es mía clásica. Los partidarios de las técnicas endoscópicas
posible con un hilo monofilamento no reabsorbible 5/0 han señalado unas ventajas que suelen ser más teóri-
mediante puntos separados o con una sutura continua. Si cas que realmente demostradas, como el carácter menos
se produce una lesión con una pérdida de sustancia consi- traumático para los tejidos musculares paravertebra-
derable, se debe plantear el uso de un parche sintético de les, la posibilidad de realizar esta cirugía de forma
duramadre o de aponeurosis muscular lumbar. También ambulatoria y, por tanto, una duración de la hos-
puede ser necesario completar las suturas con adhesivo pitalización más corta [27–30] , una mejor recuperación
tisular para lograr una sutura totalmente hermética. No postoperatoria con una reanudación de las actividades
existe consenso sobre el drenaje del lecho quirúrgico. Si más rápida [29] , una tasa menor de infección [31, 32] y menos
se realiza, es obligatorio que no sea aspirativo. dolor postoperatorio inmediato [27, 28] . De hecho, varios
estudios [27, 28, 30, 32–47] , entre ellos diversas revisiones de la
literatura [48–50] , han permitido concluir que no hay dife-
Procedimientos asociados rencias significativas desde el punto de vista estadístico
en cuanto a los resultados clínicos entre las discectomías
De forma preoperatoria, es necesario determinar si se
tradicionales con o sin microscopio y las discectomías
debe asociar una artrodesis. No existe consenso sobre las
endoscópicas a medio y largo plazo. Sin embargo, los
modalidades técnicas y las indicaciones, por lo que suelen
resultados suelen ser heterogéneos, e incluso discordan-
ser variables según las costumbres de los cirujanos. Para
tes, con estudios de calidad desigual. En cualquier caso,
tomar esta decisión se evalúan varios parámetros, como
teniendo en cuenta la ausencia de diferencias significati-
la edad del paciente, el número de recidivas, las caracte-
vas en cuanto a los resultados clínicos entre las distintas
rísticas del disco y de los discos adyacentes, así como los
técnicas y las ventajas demostradas o teóricas de las téc-
factores asociados (estado general, deformaciones y ano-
nicas endoscópicas, parecería lógico orientarse hacia estas
malías raquídeas). La realización de la artrodesis lumbar
últimas. De hecho, se debe destacar que existe una serie
se describe en otro artículo.
de inconvenientes. Varios autores subrayan que la curva
Como se ha indicado previamente, puede ser nece-
de aprendizaje de las técnicas endoscópicas es larga y que
sario realizar un procedimiento de liberación radicular
este período da lugar a más complicaciones [30, 51, 52] , pero
complementario por foraminotomía. Ésta se realiza mejor que después no existen diferencias significativas respecto
colocándose en el lado contralateral para tener la visión a estas complicaciones. Arts et al [53] han demostrado que
más completa posible sobre el agujero. La foraminotomía la discectomía endoscópica no reduce los traumatismos
se realiza con una pinza de Kerrison. de los tejidos paravertebrales musculares y que hay más
lumbalgias durante el primer año. Las técnicas endoscópi-
cas requieren una exposición a las radiaciones mayor que
 Discusión en la discectomía convencional, tanto para el paciente
como para el equipo quirúrgico [54] . Estos inconvenientes
Los resultados de las discectomías por vía posterior parecen suficientes para limitar aún más su difusión.
engloban la evaluación de las lumbalgias y las radiculal-
gias con herramientas objetivas como las escalas visuales
analógicas (EVA) y con escalas funcionales. Según estos
criterios, se considera que la discectomía por vía poste-  Conclusión
rior tiene resultados buenos y excelentes en el 70-90%
de los casos, que se mantienen a largo plazo [7–9] . Los La cirugía discal lumbar, que a menudo se considera
factores esenciales de malos resultados parecen ser la erróneamente una técnica anodina con excelentes resulta-
duración preoperatoria de la baja por enfermedad [9] , el dos clínicos, debe basarse en unas indicaciones adecuadas
estado de las compensaciones laborales y una edad más y rigurosas. La información ofrecida al paciente debe ser
avanzada [10] . Resulta bastante sorprendente constatar una precisa y no hay que minimizar las complicaciones a largo
cierta contradicción entre los resultados excelentes según plazo, como las lumbalgias, las secuelas como las radicu-
estos criterios objetivos y la existencia de complicaciones lalgias y las recidivas, pues si no, tanto el médico como
a largo plazo tras la discectomía, como las lumbalgias, que el paciente pueden quedar decepcionados. Por otra parte,
deberían modificar estos resultados. Las lumbalgias pos- surgen dudas sobre las causas de estas secuelas dolorosas,
toperatorias a largo plazo son frecuentes y se estiman en sobre todo en cuanto a la proporción de culpa que tiene la
un 32-75% [11–13] . Por otra parte, la tasa de recidivas es del afección discal inicial y cuál la intervención quirúrgica. La
5-15% [8, 14, 15] y parece ser más frecuente en los discos de técnica de referencia sigue siendo la discectomía por vía
una altura adecuada [13] . Asch et al [10] destacan que se debe posterior a cielo abierto con o sin microscopio. Las técni-
moderar el optimismo expresado por algunos autores. Por cas endoscópicas aún deben demostrar su superioridad en
último, es necesario dedicar unas palabras al uso de un estudios de calidad científica satisfactoria. Por otro lado, el
drenaje. Parece que la utilización de un drenaje no influye desarrollo de pruebas de imagen intraoperatorias sin irra-
en el riesgo de infección o de hematoma raquídeo [16] . diación para el personal y el paciente debería favorecer las
Sin embargo, si se produce un hematoma postoperatorio, técnicas endoscópicas.
sería reprochable la ausencia de drenaje; por el contra-
rio, no se puede criticar su utilización, aunque no existe
ninguna actitud de consenso al respecto.
En la actualidad, existe controversia sobre la realización  Bibliografía
de un procedimiento de discectomía complementaria tras
la resección de la hernia discal, lo que limita la inter- [1] Wiltse LL. The paraspinal muscle splitting approach to the
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6 EMC - Técnicas quirúrgicas en ortopedia y traumatología


Cirugía del disco intervertebral lumbar (exceptuando las prótesis discales y artrodesis)  E – 44-156

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L. Balabaud (laurent.balabaud@imm.fr).
C. Mazel.
Institut Mutualiste Montsouris, 42, boulevard Jourdan, 75014 Paris, France.
P. Antonietti.
Clinique Ambroise Paré, 27, boulevard Victor-Hugo, 92200 Neuilly, France.

Cualquier referencia a este artículo debe incluir la mención del artículo: Balabaud L, Mazel C, Antonietti P. Cirugía del disco intervertebral
lumbar (exceptuando las prótesis discales y artrodesis). EMC - Técnicas quirúrgicas en ortopedia y traumatología 2012;4(3):1-8 [Artículo
E – 44-156].

Disponibles en www.em-consulte.com/es
Algoritmos Ilustraciones Videos/ Aspectos Información Informaciones Auto- Caso
complementarias Animaciones legales al paciente complementarias evaluación clinico

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