Dios Tiene un Proyecto con Nosotros
Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a
bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.
Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que
fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo…. Romanos 8:28-
29
Según estos versículos, ¿Cuál es el propósito que Dios tiene para cada uno
de sus hijos?
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SER SANTO EN EL MUNDO DE HOY
LA SANTIDAD.- Los santos son aquellos cristianos que
están en el cielo y que han sido declarados como tales
por la autoridad de la Iglesia. Son propuestos como
modelos para los cristianos y como intercesores ante
Dios.
Al principio del cristianismo se veneraba a los mártires.
Después se veneró a otros cristianos que habían dado
un testimonio ejemplar de vida cristiana.
En la vida de algunos santos ha habido cosas extraordinarias (milagros,
visiones, éxtasis) pero no son santos por esas cosas, sino por su amor a
Dios y al prójimo.
Las circunstancias en las que han vivido los miles de santos canonizados
han sido muy distintas: algunos han sobresalidos por sus obras de caridad
otros por el martirio, otros por su amor a la Virgen, etc. Pero en todos ellos
podemos descubrir unos rasgos comunes.
1.- Aman a Dios sobre todas las cosas. Este es el principal rasgo de la
santidad; el deseo de amar a Dios, de adorarle, de darle toda la vida.
2.-Viven de fe: los santos han tratado siempre de conocer la voluntad de
Dios y de cumplirla fielmente.
3.-Renuncian a cosas de la tierra: a los hombres, a los placeres, al triunfo.
Tenían puesta su esperanza en Dios, no en las cosas de la tierra.
4.-Aman al prójimo: viviendo el mandamiento del amor que nos dio Jesús,
en primer lugar con los más próximos y después, atendiendo a enfermos y
pobres, orientando a los ignorantes, etc.
5.-Luchan por vivir todas las virtudes: en grado heroico: la fe, la esperanza,
la caridad, la pobreza, la castidad, la obediencia, la generosidad, la audacia.
6.-Tienen espíritu de penitencia: para hacer lo que saben que el Señor les
pide. A veces hacen grandes penitencias para reparar los pecados de los
pecadores; otras veces sufren el martirio.
7.-Son muy alegre: No encontraremos una persona que esté cerca de Dios
que sea triste. Los santos son personas muy felices, aun en medio de las
dificultades.
TODOS ESTAMOS LLAMADOS A LA
SANTIDAD: Jesucristo pedía a todos sus
discípulos que fuesen Santos: “Sed santos
como mi Padre celestial es santo”
(Mt.5, 48).Así lo entendieron los primeros cristianos. Ser cristiano era en
los primeros siglos algo heroico, pues muchas veces se perseguía a los
crista nos hasta el martirio. Más tarde, al convertirse el rey se bautizaban
todos sus súbditos. Esto trajo un relajamiento en la exigencia personal
cristiana en muchas personas. Y en los tiempos actuales, muchos cristianos
son sólo cristianos de nombre.
El concilio “Vaticano II” ha recordado la importancia de la vocación
CRISTIANA: Dios llama a todos a seguirle de cerca, llama a la santidad por el
hecho de estar bautizado. Cristiano quiere decir discípulo de Cristo con
todas sus consecuencias. Todos los cristianos estamos llamados a seguir de
cerca a Jesucristo, viviendo en plenitud y con heroísmo las virtudes
cristianas (la fe, la esperanza y la cardad, la pobreza, la castidad, la
generosidad, etc.). Por eso, cada cristiano, también los jóvenes, han de
plantearse seriamente la vida cristiana. Preguntarse qué les pide Dios y
tratar de cumplirlo en sus vidas. ¡Todos estamos llamados a ser
santos!...es viviendo con amor y ofreciendo el testimonio personal
cristiano en las ocupaciones diarias que estamos llamados a ser santos.
Y cada uno en la condición y estado de vida en que se
encuentra» consagrados, casados, bautizados solteros, padres, abuelos,
catequistas, profesores o voluntarios. «Cualquier forma de vida lleva a la
santidad si se vive en comunión con el Señor y al servicio de los
hermanos». ¡Sí! ¡Todos estamos llamados a ser santos! Dios mismo "nos ha
elegido en Él antes de la fundación del mundo, para ser santos e
inmaculados en su presencia, en el amor" (Ef 1, 4). Ése es el camino de
plenitud al cual nos invita el Señor Jesús: "Sed perfectos como es perfecto
vuestro Padre celestial" (Mt 5, 48). No basta, pues, con ser buenos, con
llevar una vida común y corriente como todo el mundo, sin hacerle mal a
nadie. El Señor Jesús nos invita a conquistar un horizonte muchísimo más
grande y pleno: la gran aventura de la santidad. Ésa es la grandeza de
nuestra vocación: "Porque ésta es la voluntad de vuestro Dios: vuestra
santificación" (1Tes 4, 3).
SANTOS EN MEDIO DEL MUNDO: Las características de nuestro tiempo nos
muestran un modelo de santidad para el creyente moderno. Sin negar la
validez de otros modelos de santidad, el santo de nuestro tiempo no
destaca por una forma de existencia extraordinaria, llamativa y fuera de lo
común, sino que es aquel que vive su vida ordinaria con tal intensidad, que
hace de ella un culto agradable a Dios, así como un elocuente testimonio
del amor de Cristo en medio del mundo.
El santo de nuestro tiempo descubre en las realidades terrenas un ámbito
de realización personal querido por Dios. Su presencia y compromiso en
medio del mundo según el designio divino configuran tanto su identidad
personal como su propia realización y felicidad. Esta presencia se traduce
en acción transformante por medio del amor, acción que brota de un
compromiso profundo con el Señor y que se manifiesta en el silencio de las
actividades ordinarias de cada día, a semejanza de nuestra Madre María.
Ser santo es participar de la santidad de Dios. Nuestro Padre, nos creo
para ser santos. Dios nos ha llamado y nos capacita a todos a ser
santos: "Sean santos... porque Yo, el Señor, soy santo" (Lev 19,2; Mt 5,
48). Cristo vino al mundo para hacer posible nuestra santidad. Es por eso
que en el Nuevo Testamento se le llama "santos" a loscristianos (1Cor 1,
12; Rm 1, 5; 1Pe 1, 15-16). Son santos solo si viven su fe (Apoc 21,
2.10). Los santos del cielo murieron en gracia de Dios. Su santidad
comenzó en la tierra.
Los santos «han entregado su vida a la causa de nuestro Señor Jesucristo»
(Hechos de los Apóstoles,15, 26). El cristiano, «ya es santo, pues el
Bautismo le une a Jesús y a su misterio pascual, pero al mismo tiempo
tiene que llegar a ser santo, conformándose con Él cada vez más
íntimamente».
«Dios les invita a todos a formar parte de su pueblo santo. El “Camino” es
Cristo, el Hijo, el Santo de Dios: nadie puede llegar al Padre si no por Él».
"Los santos no son personas que nunca han cometido errores o pecados,
sino quienes se arrepienten y se reconcilian". Dijo Benedicto XVI
comentando sobre San Pablo y Bernabé. Añadió: "Por tanto, también entre
los santos se dan contrastes, discordias, controversias...Son hombres como
nosotros, con problemas complicados... La santidad crece con la capacidad
de conversión, de arrepentimiento, de disponibilidad para volver a
comenzar, y sobre todo con la capacidad de reconciliación y de perdón". "Y
todos podemos aprender este camino de santidad". Perseverar en la
santidad es mantenerse en comunión con Cristo quien salva y da vida
eterna. Dios quiere que todos se salven (1Tm 2,4), pero no todos se abren a
la gracia que santifica. Para salvarse es necesario renunciar al pecado y
seguir a Cristo con fe. Por eso San Pablo nos exhorta: "Hermanos: Buscad la
paz con todos y la santificación, sin la cual nadie verá al Señor" (Hb. 12,14)
Al final no importara otra cosa, la única verdadera desgracia es no ser
santos.
El Apóstol Pablo comienza su carta a los Corintios de esta manera…
“… a la iglesia de Dios … a los santificados en Cristo Jesús,
llamados a ser santos con todos los que en cualquier lugar invocan
el nombre de nuestro Señor Jesucristo..” - 1 Corintios 1:2
Según las ideas populares en nuestra comunidad, ¿Qué es un “santo”?
………………………………………………………………………………………………… Todos estamos llamados a ser santos: Lev 20, 26; Mt 5, 48; Ef 1, 4;
1Tes 4, 3; 1Pe 1, 15-16.
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La santidad es camino de plenitud: Dt 30, 9; Sal 128(127), 1; Mc 10,
Dios Tiene un Proyecto con Nosotros
29-30; Rom 8, 1-2.11; 1Cor 1, 4-8.
Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a
bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados. Exige nuestra activa cooperación: Jer 17, 1; Jer 31, 18; Zac 1, 3; Mt 7,
Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que 21-27.
fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo…. Romanos 8:28-
29 La santidad consiste en conformarnos a Cristo: Rom 8, 29; Gál 2, 19-
Según estos versículos, ¿Cuál es el propósito que Dios tiene para cada uno 20; Ef 3, 17-19; Flp 1, 21; Flp 3, 7-14.
de sus hijos?
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Textos bíblicos para trabajar el tema de santidad