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INGREDIENTES
150 ml de agua
4 cucharadas de maicena
Paso 1
Primero preparamos el jugo de naranja, le quitamos la piel, sus semillas y la licuamos.
El bol metálico ayuda a mantener la temperatura a los ingredientes sean fríos o calientes.
Paso 2
Procedemos a batir todo hasta que nos quede una crema homogénea, añadimos los trozos de naranja.
Es muy importante que no queden grumos de la maicena, la mezcla debe ser 100% homogénea.
En este momento, la cubriremos con un papel film, lo pondremos un mínimo de dos horas en el
frigorífico.
Si además deseas saber cómo hacer un helado en tu propia casa solo haz click aquí y aprende cómo.
Paso 3
Transcurridas las dos horas o más en la refrigerador, procedemos a notar que empieza a cuajar, aquí
hemos llegado a un momento cúspide.
No solo cuajará, ahora los sabores se integrarán entre sí, los ingredientes comenzarán a interactuar unos
con otros ofreciendo toda su divina explosión de sabores únicos, haciendo un solo sabor característico.
El secreto está en que procedemos a tener la precaución de cada 30/45 minutos sacarla para darle unas
vueltas con una espátula, así evitaremos que se nos cristalice el azúcar, quedarían trozos muy sólidos,
como pedazos de dulce lo cual no nos serviría.
De este modo mantendremos la mezcla homogénea, cremosa, con un mismo sabor parejo, sin grumos ni
trozos que afean su apariencia y alteran su sabor.
Paso 4
Una vez finalizado el proceso, agregaremos el resultado en los vasos que tenemos previsto para ello, los
llenamos y colocamos las paletas en cada uno de ellos.
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próspero negocio propio de helados.
En este momento, otra receta acerca de como hacer helados light:
HELADO DE UVA
INGREDIENTES
150 ml de agua
1 uva grande
4 cucharadas de maicena
Paletas o vasos según tu elección
Paso 1
Lo primero es alistar la uvas, debemos lavarla muy bien y quitarles cuidadosamente la piel.
Es muy importante que no quede muy líquido, debe poseer una consistencia pastosa, como una crema o
puré.
Es de vital importancia no dejar hervir, solamente elevaremos su temperatura para que la azúcar se
disuelva 100%.
También es muy útil utilizar un bol metálico, ayuda a que el frío actúe más eficientemente.
El bol metálico ayuda a mantener la temperatura a los ingredientes sean fríos o calientes.
Paso 2
Procedemos a batir todo hasta que nos quede una crema homogénea.
Es muy importante que no queden grumos de nada, la mezcla debe ser 100% homogénea.
En este momento, la cubriremos con un papel film, lo pondremos un mínimo de dos horas en el
frigorífico.
Si además deseas saber cómo hacer un helado en tu propia casa solo haz click aquí y aprende cómo.
Paso 3
Transcurridas las dos horas o más en la refrigerador, procedemos a notar que empieza a cuajar, aquí
hemos llegado a un momento cúspide.
No solo cuajará, ahora los sabores se integrarán entre sí, los ingredientes comenzarán a interactuar unos
con otros ofreciendo toda su divina explosión de sabores únicos, haciendo un solo sabor característico.
El secreto está en que procedemos a tener la precaución de cada 30/45 minutos sacarla para darle unas
vueltas con una espátula, así evitaremos que se nos cristalice el azúcar, quedarían trozos muy sólidos,
como pedazos de dulce lo cual no nos serviría.
Paso 4
Una vez finalizado el proceso, agregaremos el resultado en los vasos que tenemos previsto para ello, los
llenamos y colocamos las paletas en cada uno de ellos.
Al momento que se vaya a consumir es preferible sacarlo 10/15 minutos antes, así podemos servirlo
adecuadamente, no estará tan sólida, brindará una consistencia cremosa, pero firme.