¿Diseñadores o empresarios?

Introducción

En un entorno donde el éxito (en cierta parte) es resultado de la innovación y el conocimiento del
mercado, los roles dentro de una empresa y las profesiones relacionadas a esta área se han ido
adaptando a estos procesos. Para el diseño gráfico esta transición empieza a vincularse con la
gestión y el rubro empresarial de manera más cercana, empezando por el pensum formativo que
empieza a incluir temas empresariales que antes podrían haber pensado que eran un tanto ajenos
al ejercicio profesional como diseñadores. Sin embargo, surge la cuestión de ¿Qué tanta
importancia se le debe dar el tema de negocios dentro del diseño gráfico?

El concepto que se ha construido del diseño gráfico deriva de sus inicios artísticos y de
comunicación poco definidos. El área como tal se consolidó en el área industrial y de negocios que
solventaban necesidades, y el diseño en la creación de piezas gráficas que comunicaran y
cumplieran objetivos.

Su evolución hasta la actualidad fue similar dado que ambas se debían adaptar al entorno de cada
época y un mercado cambiante. Si nos vamos a sus definiciones básicas el diseño gráfico se ve
como una actividad de comunicación mediante un producto gráfico que forma parte de un
proceso en la planificación de un proyecto en una empresa. Este vínculo entre áreas hace que
compartan conceptos e ideas, pero siempre se vieron como cosas diferentes y no como algo
equivalente, hasta ahora. La gestión de negocios llega a un mercado competitivo en donde se
necesita innovar dentro de la planeación de cada proyecto para poder alcanzar el éxito, para
Kotler en el quinto pecado de su libro “Los 10 principios del Nuevo Marketing” “el éxito en la
generación de nuevas oportunidades es la innovación en base a la generación de ideas.” en base a
este planteamiento se encuentra una similitud en los procesos de ambas áreas, pero con diferente
enfoque.

Al introducir conocimientos empresariales en la formación de los diseñadores les da una fortaleza

competitiva en el mercado del diseño gráfico, pero esto no quiere decir que deban abarcar las
tareas de otras áreas, si no conocer, analizar el mercado y poder generar soluciones a los
problemas teniendo en cuenta factores de organización y gestión de los recursos de manera
integral junto con las empresas. El saber cómo funcionan los procesos de desarrollo en una
empresa añade mayor valor al trabajo que los diseñadores realizan y los diferencia de aquellos
cuyo enfoque es estrictamente gráfico. Para los ejecutivos como diseñadores que no tomen en
cuenta que la forma de trabajo va cambiando y asumen que tanto su entorno como el mercado
siguen funcionando de la misma manera les representará una debilidad.

Conclusión

El diseño gráfico no es algo que en esta época se pueda desvincular de la gestión y el área
empresarial. Tanto ejerciendo como diseñadores para determinada empresa o gestionando un
proyecto personal, conocer el funcionamiento de las empresas, es entender que sus propuestas
para la solución de un problema de diseño o comunicación deben generar un retorno de la
inversión realizada, siendo así no es algo que se pueda ignorar.