APRENDIZAJE AUTORREGULADO Y DISPOSICION PARA APRENDER

El estudiante es quien otorga significado y sentido a los materiales que procesa y el que
decide lo que tiene que aprender, así como la manera de hacerlo.

El interés no se centra en saber cuánto conocimiento ha adquirido, sino, sobre todo, en

conocer la estructura y la calidad de ese conocimiento, así como los procesos utilizados
para aprenderlo.

Algunos estudiantes construyen sus propias "herramientas" cognitivas, motivacionales y

conductuales para conseguir un aprendizaje eficaz (Winne, 1995)

Pintrich y De Groot (1990) señalan cómo los tres componentes descritos del aprendizaje
autorregulado se asocian con la utilización de diferentes estrategias de aprendizaje
(estrategias metacognitivas, estrategias de manejo de recursos y estrategias cognitivas).
Pero para que el alumno emplee estas estrategias es preciso que tenga una disposición para
aprender. No sólo es preciso tener habilidad ("skill") para aprender, sino que hace falta
también voluntad ("will")

Ausubel (1968), quien señaló la necesidad de que el estudiante tuviera una disposición o
actitud favorable al aprendizaje para que pudiera realizarse un aprendizaje significativo.

Las capacidades del estudiante pueden ser ineficaces si no van acompañadas de las
disposiciones que hagan viable su ejercicio (Beltrán, 1995).

Partiendo de las anteriores premisas o postulados y analizando los resultados de ambos test
el estilo de aprendizaje predominante en mi proceso académico es el reflexivo y considero
que como docente de lengua castellana y literatura, y ahora como estudiante de psicología,
concuerda con mi forma de llevar a cabo mi profesión y mi proceso académico, ya que a
partir de la lectura y el análisis literario se me facilita analizar, generar lluvia de ideas, ser
reflexivo, lo que me permite argumentar a partir del análisis y de inferencias de lecturas de
diferentes campos del saber y según el postulado de Ausubel (1968) el aprendizaje se
convierte en significativo cuando el estudiante asume una disposición actitud favorable
frente a su proceso pedagógico, siendo esta la esencia del conocimiento.