¿Que quiere enseñarnos Lacan con Hamlet en relación a la introducción del fantasma

en el grafo del deseo?

Hamlet detiene su acto de matar al hombre que mato a su padre y caso con su
madre, para una mejor ocasión.

Hay entonces una situación de inhibición del acto, por un apego narcisista, que toca a
la cuestión del falo y necesariamente al castigo, via del sacrificio. Este planteo nos
lleva de cabeza al problema del deseo en Hamlet, por la via indirecta del objeto de
amor. ¿Lacan se pregunta si ese objeto de amor, es homosexual?.

Lacan nos introduce en Hamlet, para articular el lugar del analista y el sentido del
análisis, ubicando al deseo, por fuera de la normalización o adaptación, en cuanto,
que el mismo requiere una organización de discurso no armónica.

Aristoteles sostiene que los hombres buscamos la felicidad, el bien y el utilitarismo

ingles lo articula con el principio del placer.

Entonces, vamos a ubicar la situación del deseo, en la misma constitución

significante, entre el principio del placer y el principio de realidad.

La filosofía pretende dar cuenta del objeto de satisfacción, que no es otro, que el
deseo de conocimiento, como objeto de deseo.

El Psicoanalisis, ubica a la estructura del fantasma, como soporte del deseo y es ahí,
donde ubica al objeto a, donde el sujeto se constituye en el campo del deseo del
Otro. El deseo del Otro es el equivalente al discurso del Otro, como lo inconciente,
donde el sujeto se instaura, como lugar de la palabra y es donde el sujeto encuentra
su identificación.

Tanto Freud como Lacan, buscaron que no nos distraigamos con nuestra novela
familiar, que podríamos equivaler a la estructura del fantasma, para reubicarnos,

en la via del deseo, que se organiza en el campo del Otro, de ahí, que el sujeto debe
pagar por su existencia, es decir, su existencia no viene a titulo gratuito. De allí que
será necesario un tiempo de desfallecimiento del sujeto, en relación a su búsqueda
de garantía de respuestas en ese campo del Otro y a eso los Psicoanalisistas
llamamos, operación de castración. Lo que implica un limite a lo imaginario y la
posibilidad de introducir el registro de lo real, en la cadena significante, para que el
sujeto pueda acceder al deseo como tal.

Pagar este precio, significa reemplazar esta relación del sujeto al significante, donde
no puede designarse como sujeto, sino sobre el plano del inconciente. Lo real del
sujeto que esta en relación a ese Otro, en cuanto barradura, lugar que lleva a que el
sujeto desfallezca, para instaurar la vía del deseo.
Si en el mejor de los casos, el falo, es nuestro primer lugar como sujeto, en el campo
del Otro, que nos instaura, en la alienación estructural, el objeto de la castración, no
es otro, que el falo y que necesariamente nos lleva, a uno de los problemas cruciales
del hombre al decir de Freud, la posición homosexual al padre.

Este objeto a, esta en posición de soporte, de causa del sujeto, que nos lleva a la
suposición de supuesto saber de ese Otro, en relación al sujeto y ese allí, donde se
instaura la palabra, para convertirse en demanda.

Toda demanda del sujeto es demanda de amor y esta dirigida al Otro, lugar donde el
sujeto de constituye como objeto de la demanda, mediante el acto de palabra, que
articula la cuestión de presencia/ausencia. Hay en esa demanda del sujeto, una
trampa de significación, ya que el sujeto pretende vehiculizar su deseo por via de la
demanda. En este sentido, el fantasma soporta esa relación de demanda de amor,
del sujeto al Otro, como relación ejercida que se instala a nivel del signo, gratificante
o frustrante, que conforma la historia del sujeto.

Lacan sostiene, que hay sujeto, cuando el mismo puede concebir que no hay Otro
del Otro. Es decir, cuando no hay garantía del Otro, ya que la falta produce al Otro,
como lugar de la palabra, por eso Lacan, cuando se pregunta que buscamos en
análisis, se contesta que desde la posición del Otro, cuando este le responde al sujeto
en su demanda, el sujeto puede interrogarle y es desde allí, el sujeto se constituye en
relación al habla.

El sujeto puede creer que es mirado por el Otro y que puede interpretarlo. Es decir,
en esa relación entre el sujeto y el Otro, hay una estructura de promesa en juego, a
lacuestion de la verdad, en cuanto que ese Otro podría a responder a la pregunta
quien soy o que me quiere el Otro. La cuestión, es que el sujeto no puede encontrar
respuestas a este tipo de preguntas, a nivel del significante. La estructura del
fantasma permite al sujeto el soporte, respecto a su interrogante, por la via del
deseo, en cuanto sostener el lugar de lo real, a diferencia del sujeto de conocimiento,
producto de la cadena articulada.

Paso ahora a dar cuenta de la función del fantasma en el grafo del deseo. En el
primer piso del grafo, el sujeto demandara ante el Otro las respuestas a sus
preguntas fundamentales, buscando apelar a nivel de sus identificaciones, para no
querer saber nada de la inconsistencia de la cadena significante como tal, para tal fin.
En definitiva, es a través de la estructura del fantasma, que el sujeto, ocupara unlugar
de objeto en relaion al Otro, que lo llevará al sujeto a desaparecer.

Entonces, que quiere decir interpretar el fantasma?. El fantasma es un punto de

identificación del sujeto, que pone en juego, la estructura masoquista, que puede
llevar a la tendencia al fracaso en el sujeto.
Interpretar el fantasma es el corte que hace pasar el cuchillo por las articulaciones,
sin estropearlas. El fantasma del sujeto cuenta con un soporte imaginario, que no
puede articular el sujeto con su discurso inconciente. Esta relación de objeto en el
fantasma, está en via del corte, en tanto puede soportar lo imaginario. En el piso
inferior, el objeto juega un rol de espejismo, es por eso que Lacan nos dice, que la
función del fantasma implica la metonimia a nivel del deseo. Es decir, el deseo se
manifiesta a nivel de la metonimia.

Paso ahora a la lectura que hace Lacan de la arquitectura de Hamlet:

Lacan utiliza este texto de Hamlet, para dar cuenta de la relación del sujeto con la
verdad, resalta la función del ghost, desde la conciencia. ¿Lacan se pregunta porque
es engañado Hamlet, en cuanto a su creencia que el Otro no miente?. Nos recuerda
Lacan, que para Einstein, Dios es astuto, pero honesto.

Freud hace equivaler en la interpretación de los sueños, a Hamlet con Edipo. Tiene
como objetivo elaborar el complejo de castración.

Freud introduce Edipo en el texto los sueños de muertes en las personas queridas.

Toma el sueño del hijo que no sabía de la muerte de su padre y afirma que el
inconciente encarna la imagen del sujeto de su propio deseo, en cuanto deseo de
muerte del padre, como reprimido y llega a la hipótesis, que en estos sueños, están
los gérmenes del Edipo.

¿Lacan se pregunta es es lo que impide a Hamlet cumplimentar el fantasma del

padre?.

Hamlet no puede vendarse del hombre que mato a su padre y desposo a su madre.

El padre aparece como fantasma a Hamlet y cuenta de la traición del tio.

Lacan lee en Hamlet, la estructura de la tragedia moderna, en cuanto que los

modernos son más neuróticos que los antiguos. Hamlet a diferencia de Edipo, sabe
por anticipado quien mató a su padre, porque el fantasma de su padre, se lo hace
conocer. Hamlet tiene un cierto dominio el significante respecto a la articulación con
el mundo. En otras palabras, Claudio cumple el deseo de Hamlet, pero Hamlet tiene
escrúpulos de conciencia, para rivalizar con Claudio, lo que ubica a Hamlet, en una
relación particular respecto a su deseo y al acto. Es decir, Hamlet conoce el crimen
de existir, pero se queda con la culpa del ser o no ser, dormir y nada más y no puede
pagar y deja la deuda abierta en relación al acto.

Hamlet cumple con su acto, junto a su acción terminal de morir, que lo introduce en
el complejo de castración.
Hamlet, divide la vida de Shaquespeare en dos épocas. Una de las interpretaciones
compara a Hamlet, con una mujer disfrazada de hombre, que busca seducir a
Horacio.

¿Hamlet, es en flojo o un cobarde?. Muestra el drama edipico. La lucha con el padre.

Lo que quiere Hamlet es sorprender al otro en exceso de placeres en relación a la
madre. Hamlet es un espejo, donde cada uno nos podemos ver a nuestra manera.

Cuando lo vienen a interrogar, hace trampas y es incapaz de leer sus motivos.

Hamlet es una estructura equivalente a Edipo.

La tragedia de Edipo, lo lleva al autocastigo. Edipo no sabe el crimen de existir, que

está en relación al paso de una generación a otra.

Lacan equipara la tragedia de Hamlet, a la tragedia del deseo y esto le sirve para
ubicar el deseo y su interpretación en el análisis.

Hamlet reprime su deseo por la madre, que no le permite la acción encomendada, de

vengar la muerte de su padre y de haber desposado a su madre. Hamlet se siente un
criminal y ese es el deseo edipico que está en juego en relación al Superyó.

Hamlet nos enseña, si lo articulamos en el grafo, que hay un más allá de la demanda,
que tiene un carácter arbitrario, que lleva a la fragmentación del ser, que está en
relación al discurso del sujeto, que es cercano a la primera relación al Otro. El deseo
del sujeto esta más ala del Otro y esta sometido a cierto regulación determinada por
vía del retorno del código inconciente, sobre el plano imaginario.

El fantasma ordena la situación del deseo, por la via del retorno en relación al
inconcinte, como esta en el grafo, entre la relación a la demanda del sujeto al Otro y
el mensaje inconciente.

Ahora ¿que podemos articular de la escena de Hamlet frente a la madre?.

Si el deseo del hombre es el deseo del Otro, este dirige al sujeto a su voluntad. El
sujeto intenta encontrar en el nivel del código la ley y vuelve a caer en un punto de
detención. Entonces el problema del objeto del deseo en Hamlet, toca la cuestión
narcisista del yo, la imagen del yo, en relación al problema del duelo, que ya Freud en
su texto Duelo y Melancolía, sostiene que ante la muerte de un ser amado, puede
introyectarse el mismo, como objeto perdido, ocupando el yo, la sombra del objeto.

Hamlet representa al deseo en el neurótico obsesivo, en cuanto deseo imposible,

aunque Lacan señala, que estaría más en relación a la histeria, en cuanto reencontrar
el lutar de su deseo, creándose un deseo insatisfecho.
Entonces, Hamlet se encuentra con la muerte, como punto clave en esta obra, ir hacia
la muerte, en vez del acto y lo sustituye con su compulsión a pensar, donde Freud,
encuentra el deseo de la madre. Es decir, el drama de Hamlet, da cuenta del sujeto
que habla, en esta relación compleja al significante, en cuanto a la relación a la
demanda y al lugar de la verdad, como lugar de la palabra instaurada en el lugar del
Otro.

La pregunta del sujeto, a nivel del fantasma, ¿Qué quiere el Otro en mi?, es una
pregunta mas alla de la demanda, que nos lleva a la alienación del discurso del sujeto
y que convoca al sujeto a su pregunta que es lo que quiero?

Entonces, Hamlet nos muestra la neurosis obsesiva, como función del deseo, como
sostén del fantasma, a través de su pregunta. En otras palabras, la función del
obsesivo será mantener a distancia el encuentro con el deseo, hacer esperar.

Paso ahora a preguntar, que distingue a Hamlet de Edipo.

Hamlet, sabia de su crimen y esto está en relación a la línea superior del grafo, el
inconciente. En cambio, la línea superior, es resultado del significado del Otro, por la
el lado del amor al padre. Ese lugar de la verdad, es un lugar desfalleciente, es el
lugar donde se instaura la palara, como forma disfrazada del conjunto de
sifnfiicantes, donde falta algo, que se inscriba, en el sentido que no hay Otro del
Otro, en el sentido, que no hay garantía del Otro en la palabra del sujeto.

Lacan plantea las inclinaciones sexuales de Hamlet y se pregunta por el objeto del
deseo en Hamlet. ¿Son las mujeres?. Hay entonces una distancia entre el deseo y su
objeto,, en cuanto tal, que se busca expresar en el grafo, que estructura el fantasma,
at raves de su formula S losange a.

El objeto es el lugar donde se sitúa el sujeto, en relación al deseo. Hamlet se

comporta con Ofelia con gran crueldad. Ofelia esta ahí para interrogar el secreto de
su deseo. El sujeto está sometido a la cita de su destino y esto está en relación al
análisis.

La enseñanza de Hamlet, en relación nos lleva al problema de la intervención

analítica, que busca restablecer la cadena significante, a nivel del inconciente y ahí,
nos topamos con la resistencia. El análisis se engancha en una vía falsa, en tanto
concibe a ese objeto con falta de finalidad, entonces de que se trata el objeto del
deseo.
Este objeto, es ese personaje, que muestra en Hamlet la tragedia del deseo. Ese deseo esta
relación del sujeto al significante.
No podemos dar la cuenta la experiencia analítica,, partiendo de que el significante seria un
producto de las relaciones interhumanas, como un instrumento. La vía de su deseo en
Hamlet es ese significante, que el destino se articula, que es el reverso de un mensaje que
no es el suyo, ya que el drama del deseo, está en relación al deseo del Otro, la madre, es
decir, el sujeto primordial de la demanda. Ese deseo de la madre, se presenta como ese
objeto idealizado y ese objeto despreciado que es Claudio.
El fantasma del padre se encargo de transmitirle su mensaje.
Se trata de ver en la tragedia de Hamlet, en el grafo, el punto de interrogación del che voi. , lo
que podemos llamar el ajuste imaginario de lo que constituye el soporte del deseo, como
pregunta del sujeto. , que es algo que simboliza por ese sujeto en presencia del a, que
llamamos el fantasma, que en la economía psíquica representa algo , que en el fondo de toda
pasión humana, está marcado por rasgos perversos.
El misterio del fantasma, que es el último termino del deseo. Es el psicoanálisis el que intenta
interpretar ese fantasma. Por eso Lacan dice que el deseo es la interpretación misma, e
intenta interpretar el fantasma en tanto perverso , donde lo que lo articula es a través de
otra cadena significante.
Como funciona en la tragedia de Hamlet, la perturbación del deseo, como regulación
imaginaria? El fantasma siendo el soporte, el sustrato imaginario del deseo, que se distigue
de la demanda y de la necesidad. La noción de relación de objeto, se articula con el modo de
aprehensión del mundo y está en relación a la dialéctica de la demanda.
Ese engaño del ser, que es el objeto del deseo, da cuenta de su carácter fetiche, como
una de las dimensiones mismas del mundo humano.
Marx, lee esa relación con los objetos, por su carácter fetiche de la mercancía, lo que
implica según Lacan, introducir el nivel del significante. Entonces, las relaciones
significantes, las relaciones de valor, la subjetividad y la fetichización se inscribirán
en la dialéctica significante.
La relación del sujeto al tiempo, esta en la base misma del la relación del sujeto con
su objeto a nivel del fantasma. En la neurosis, el objeto se carga conn esa
significación buscada en la hora de la verdad. El objeto esta siempre en la hora
anterior o posterior, por eso en la histeria se funda el deseo en tanto insatisfecho y
en la neurosis obsesiva se funda el deseo, en tanto imposible.
El fundamento del neurótico, es que busca leer su hora, La estructura de Hamlet,
esta en la dependencia respecto del deseo del Otro, el deseo de la madre. Hamlet,
esta suspendido en la hora del Otro y eso hasta el fin. Hamlet acepta todo. Es a la
hora de sus padres que se queda ahí, a la hora que los otros suspenden su crimen.
Hamlet se hace el loco, porque sabe que es el más débil. Es la dimensión
propiamente moderna. El que sabe está en una posición peligrosa como tal ,
designada por el fracaso y el sacrificio. Si algo vacila en su fantasma, es la experiencia
de despersonalización, donde los limites imaginarios entre el sujeto y el objeto
pueden cambiar, en el orden de lo fantasmatico. Hay un desequilibrio en Hamlet,
hacia el objeto del lado perverso, Ofelia deviene para el la portadora de todos los
pecados. ¿Por qué Ofelia es el falo en ese momento?. Esta bajo su forma de rechazo.
Shakespeare ha insistido en un punto totalmente extremo y singular del deseo. El
habla del objeto de su amor, que como todos saben, es del de su mismo sexo.
Se trata de articular el punto en el que estamos como analistas, el encuentro de
nuestra función de analistas y del sentido del análisis.
El deseo no es algo que podemos considerarlo como normalizado. El deseo es
presentado con un carácter ciego en la búsqueda de fuerza como el tormento del
hombre.
¿Cuál es la verdadera articulación entre el deseo y su objeto?.
El fantasma asegura la estructura mínima que debe el soporte del deseo, que hace pasar la
asunción del sujeto por el a. El sujeto tiene como tal este deseo en el Otro. El Otro es el
inconciente, algo falta en relación al sujeto que instaura la relación del sujeto al Otro, en
tanto lugar de la palabra, algo al nivel del Otro, falta que permite al sujeto identificarse ahí.
El sujeto pagando el precio necesario para este punto de referencia desfalleciente, que se
llama deseo, lo que implica pagar la castración.
El significante tiene que tocar el registro de lo real, lo cual, limite la relación imaginaria. El
descubrimiento freudiana atañe al deseo como tal.
El sujeto que paga debe reemplazar esta relación del sujeto al significante, donde el no
puede designarse como sujeto.
Es sobre el plano inconciente, no lo simbólico, sino, lo real del sujeto en relación al a , donde
el sujeto desfallece, para resignarse al nivel de una instancia que va por la via del deseo.
El a es un efecto de la castración. El objeto de la castración es el falo.
El objeto es el fantasma, en tanto que el sujeto es deseo producto de la relación castratoria,
El objeto esta en posición de soporte.
No es esa historia lo que perseguimos en el análisis, sino la posición del Otro,como responde
el Otro a la demanda, ya que el sujeto lo interroga, como sujeto, ya que el sujeto se
constituye en relación al sujeto que habla.
Nos interesa la instauración y base misma de los principios de nuestra historia y también
que eso se repite al nivel mas profundo de su destino.
El sujeto de la palabra, busca respuesta y no la encuentra en el Otro, hay un hueco, un vacio.
No hay garantía a nivel del significante.
¿Dónde se plantea la interrogación del es. El objeto del deseo entra en juego a nivel del
fantasma, donde el sujeto se desvanece ante la carencia de significante que responde al
nivel del Otro. El fantasma es el enfrentamiento de ese sujeto tachado, en tanto marca el
momento de fatiga del sujeto, donde no encuentra nada en el Otro, que lo garantice de una
manera cierta.
El objeto a interviene en la estructura del fantasma. El sujeto esta interrogado en ese real,
no en el sujeto del conocimiento.
La constitución de ese objeto pre genital, llega a cumplir una función significante en el
fantasma.
¿Qué es interpretar el fantasma?.
La primera captura en la cadena significante, se presenta en punteado como viniendo del
Otro, bajo la pregunta del Che voi ¿Qué me quiere el Otro?. No hay ahí nada en la
significancia que pueda articularse en forma significante. Es aquí que llegamos a nuestro
fantasma.
La arquitectura de Hamlet, da cuenta de la relación del sujeto con la verdad. Lafuncion del
ghost esta desde el comienzo de Hamlet. La traición es lo absoluto yla fidelidad es a esa
mujer.
¿Dónde somos engañados?. Esta aceptado que un muerto no miente. Einstein afirmaba que
Dios es pillo pero honesto.
Hamlet no puede soportar la cita, esta es siempre demasiado temprano o la retarda. La
procastinacion queda como una de las dimensiones esenciales de la tragedia de Hamlet.
Cuando el actúa es siempre con precipitación, el actúa de golpe o sino, como una forma de
huida. El se precipita cuando mata a Polonio. Esto nos pone en la pista en la relación con la
vida del neurótico. Hamlet siempre está en la hora del Otro. No hay mas que la hora de la
perdida, lo que especifica su destino. Hamlet le falta en todo momento el lenguaje
comunicable.
Hamlet es alguien que no sabe lo que quiere, es una de las claves de su dimensión de la
tragedia . ¿Qué soy si mi padre muerto y una madre mancillada, son dos motivos para
dormir.
La estructura del fantasma da cuenta de la relación de sujeto al significante, que tiene
relación con la coyuntura imaginaria, conel objeto del deseo, el a, en realidad con el objeto
en el deseo. El sujeto esta privado de algo de si mismo que ha tomado valor de significante,
incluso de su alienación. Ese algo es el falo. El sujeto esta privado de algo de su vida misma,
por lo que ha tomado valor de lo que lo liga al significante, es en tanto que esta en esta
posición que un objeto particular deviene objeto de deseo.
Partamos del final, del punto de encuentro, de la hora de la cita Este alto merece ser
llamado,
apresuramiento y padecimiento.. Este acto final, nos muestra la estructura del fantasma.
La referencia a la imagen del otro está ahí a propósito de los meritos de Laertes presentada
ciertamente inflada, el amaneramiento, es algo que tiene su precio ms alto en ese momento.
Aquel que más se admira es aquel que se combate, aquel que es el ideal del yo, según la
formula Hegeliana de la imposibilidad de coexistencia, debemos matar. Lo que se presenta
como agresivo es un señuelo, un espejismo, que es a pesar suyo quien va a perder la vida y
va al encuentro de la realización de su acto y de su propia muerte.
Donde está la falta, en la particularidad de la posición de Hamlet como sujeto. La cuestión
de los floretes embotonados, no es sino un engaño. . Hay al menos uno que no esta
embotonado, que en el momento de la distribución de espadas fue cuidadosamente
marcada por adelantado para dársela a Laertes. Lo que se trata es de mostrar el
instrumento de muerte, como el mas velado del drama. Hamlet solo puede recibirlo del
Otro, el instrumento que hace morir, es algo que está en otra parte distinta de la
materialmente representable. Es en este encuentro con el Otro que Hamlet va por fin de
identificarse con el significante fatal. Son las condiciones mismas, en las cuales el duelo ha
sido pactado, a saber Hamlet no tiene ninguna posibilidad de ganar. La espada de Laertes
que ha herido de muerte a Hamlet, va a tener en la mano para terminar su itinerario y matar
al mismo tiempo, a su adversario.
 Una de las funciones de Hamlet es hacer todo el tiempo un juego de palabras, dobles
sentidos y jugar con el equívoco. Hay en sus palabras, una identificación del sujeto ál falo
mortal. Hamlet le dice, yo seré vuestro estuche para favorecer vuestro merito, pero lo que
ocurrirá en un instante es que verdaderamente la espada de Laertes, que ha herido de
muerte a Hamlet, será la que va a terminar su itinerario con la muerte de su adversario, y
que es el ultimo objeto de su misión, a saber el rey al que debe hacer perecer
inmediatamente después. Este juego de significante no está ahí por azar. Una de las
dimensiones donde se lleva a cabo la tensión de Hamlet es este perpetuo equivoco.. Lo que
se juega entre Claudio, el tirano, el usurpador y el asesino Hamlet es desenmascarar las
intensiones de Hamlet, porque se hace el loco. Hay un acertijo, un juego que se establece a
nivel de los significantes, en la dimensión del sentido. Sostiene el espíritu de la obra.
El duelo entre Hamlet y su semejante o su doble, se refleja en el nivel inferior de nuestro
grafo, el i (a). Este semejante va a permitirle al menos por un instante sostener en su
presencia la apuesta humana de ser el también un hombre. Es la consecuencia de lo que se
manifiesta en la situación del sujeto en presencia del otro como objeto del deseo, la esencia
inmanente del falo, que no puede aparecer aquei en su función formal sino con la
desaparición misma del sujeto.
Uno de los puntos salientes de la tragedia es el celo del duelo.
¿Qué relación hay entre lo que hemos aportado bajo la forma de la fórmula del fantasma, en
Hamlet se condujo con Ofelia de una forma despreciativa y cruel. Lacan insiste sobre el
carácter agresivo desvalorizante, que ha devenido el símbolo mismo del rechazo como tal de
su deseo. Es en esos términos que comienza el desafio dirigido a Laertes. Es de algún modo
en la medida que el objero de su deseo se ha vuelto un objeto imposible que vuelve a ser
objeto de su deseo. Acá nos encontramos con una de las características del deseo del
obsesivo. , que no es tanto que el objeto de su deseo sea imposible, en tanto que por la
estructura misma de los fundamentos del deseo siempre hay esta nota de imposibilidad en el
objeto del deseo. , lo que lo caracteriza es que pone el acento sobre el encuentro con esta
imposibilidad. . Se las arregla para que el objeto de su deseo tome valor esencial de
significante de esta imposibilidad en lo concerniente a la constitución del objeto en el deseo
y el duelo?.
¿Es porque el objeto del duelo esta en relación de identificación o se lo incorpora con el
sujeto?. ¿Qué puede tener esta identificación del duelo?. ¿Cuál es la función del duelo?.
¿Qué est esta incorporación del objeto perdido?. ¿En que consiste el trabajo del
duelo?.
En lo que concierne al muerto, no se han cumplido los ritos funerarios. ¿Qué son los
ritos funerarios?. Lo que se llama la memoria de la muerte, está en relación al juego
simbólico. Este trabajo de duelo, se presenta primero como una satisfacción de
elementos significantes, para hacer frente al agujero creado en la experiencia.
Si la tragedia de Hamlet, es la tragedia del deseo, de un extremo a otro, no se habla
más que de duelo.
La primera observación de Hamlet, es el casamiento precoz de la madre y las
palabras alusivas de Hamlet, la comida de los funerales servirán para la comida de los
nupciales, economía, economía. .
Acá se desconoce los valores rituales.. El rito introduce el duelo y abre una hiancia o
falta simbólica.
¿Qué relación hay entre el drama del deseo y el duelo.
Lo abordamos en el sentido del objeto del deseo. Abordamos la cuestión del objeto,
que el sujeto se identifica allí en el duelo, el puede reintegrarlo a su ego. Lo que
aacabo de decir, del duelo en Hamlet, no nos permite ocultar que en el fondo de ese
duelo, tanto como en Edipo, hay un crimen.
En el crimen de Edipo, reconocemos su trama esencial, la relación del sujeto con el
Otro, el lugar donde se inscribe la ley, es decir, las relaciones del sujeto, con el crimen
original. Este mito, esta ligado con el orden de la ley primordial. Ese crimen del
asesinato primitivo del padre, que es para el exigido.
Vemos la disimetría entre Edipo y Hamlet. Edipo es inocente, es inconciente, cumple
el crimen sin saberlo. En esta sanción, la castración, queda encerrada la clave, que es
la humanización de la sexualidad en el hombre, donde giran los accidentes del deseo.
El crimen se produce en Edipo, en el nivel de la generación del héroe. En Hamlet, se
produce en el nivel de la generación precedente, no sabiendo lo que hace y guiado
por el destino.
En cambio Hamlet ha sido sorprendido en la flor de sus pecados. Ell sujeto sabe lo
que esta sucediendo. El drama de Hamlet, no parte, donde esta crimen, donde esta el
culpable, parte de la denuncia del crimen sacado a luz en el oído del sujeto, que se
desarrolla a partir de la revelación del crimen. Con el crimen es introducido en el
dominio del infierno, es decir, de una deuda que el no ha podido pagar.
Edipo ha pagado, se presenta como aquel que lleva en el destino del héroe la carga
de la deuda cumplida, retribuida.
En Hamlet, el tiempo ha salido de sus casillas, las palabras que están en juego en el
sujeto, es la injusticia del mundo. Posiblemente reconozcan el extravió del alma
bella. Hamlet parece ilustrar una forma decadente de Edipo, lo que Freud llama en da
vida individual.
En la tragedia de Hamlet hay un vinculo en relación al falo. Hay una exaltación
idealizante de su padre muerto. Lo que el quiere decir es evidentemente lo
contrario. El rechazo, el desprecio.
El se detiene para sorprenderlo en la flor de su pecado. Eso es lo que se trata del
falo. , de todo su apego narcisista. Habla del objeto de su amor que como todos
saben era de su mismo sexo.
El sujeto que se plantea como mirado por el Otro, efecto de su interpretación, en un
momento, en el mejor de los casos, deja de creer que ese Otro sabe de el, como acto
de separación, para conformar una estructura del fantasma, con esa posibilidad
interrogativa en relación a ese Otro, para no quedar suspendido en el tiempo del
Otro y inscribir su subjetividad en ese vacío, hueco del Otro.
Ese objeto del fantasma, como objeto a, tiene su vertiente imaginaria, como objeto
del deseo, que entra en juego en el fantasma, pretendiendo el sujeto, que sea desde
el lugar del Otro a su pregunta, quien soy.
Hamlet queda encerrado en esa revelación del ghost del padre.
Hay un secreto que jamás podrá ser revelado. Se trata del fantasma, a pesar de la
curiosa elección del veneno vertida en la oreja del padre de Hamlet y aquí lo que
cumple la función de veneno es la palabra de su padre. Alguien dijo que la sombra
mentía. Claudio fue el culpable de la muerte. Fue el sobrino de Claudio que lo
enveneno?. La función del fantasma parece diferente a las novelas policiales.
¿Qué debe regular nuestra acción en el análisis, con el inconciente del sujeto?.
Nuestro objetivo es que no pierdan la ruta, poniendo en primer plano el ser.
No hay otro malestar en la cultura que el malestar del deseo. ¿Qué es realizar el
deseo.?.
La comedia es lo mas profundo en este acceso al mecanismo de la escena de la
descomposición espectral de lo que es su situación al mundo, esta mas alla de este
pudor. La tragedia termina con el nombre el héroe y con la total identificación del
héroe. Hamlet es Hamlet.
La comedia es un atrapa deseo, Es el deseo que aparece donde no se lo esperaba. En
la comedia, el deseo esta desenmascarado, pero no refutado. Ese deseo podemos
atraparlo por la cola, a saber en el fantasma.
El sujeto en tanto que desea, no sabe dónde está en relación a la articulación
inconciente que se repite. El sujeto no está en lo que desea, sino en alguna parte del
fantasma.
En el caso de Hamlet, el tiene que elegir entre no ser nadie o ser tomado en el
deseo devorante de la mujer, para ser, el falo, el del Otro.
En el caso de Hamlet, , el tiene que elegir entre no ser nadie o ser tomado en el
deseo devorante de la mujer, para ser, el falo, el del Otro.
El deseo del neurótico nace cuando no hay Dios como garante supremo. El neurótico
esta ocupado haciendo valijas en un viaje que no realiza o en su examen de
conciencia.