10 suculentas que deberías tener en tu jardín

Rosa de Mármol, Echeveria Pollux

Echeveria Pollux es una de las plantas suculentas conocidas como Rosas de Mármol que más se
cultiva y se comercializa en la actualidad por la bella disposición de sus hojas. Esta especie se
caracteriza por tener hojas alargadas terminando en una pequeña protuberancia con forma de espina.
Las hojas se disponen en rosetas y pueden alcanzar más de 10 centímetros de largo si crece en
vasijas muy grandes. Es muy fácil de cultivar y solo necesita lugares muy iluminados, temperaturas
cálidas, riegos escasos y un sustrato con un drenaje perfecto.

Planta Rosa de Mármol, Echeveria Pollux

Cactus Mammillaria prolifera

Mammillaria prolifera es uno de los cactus más fáciles de cultivar y reproducir. Se caracteriza por ser
un cactus globoso con numerosas espinas que se disponen en mamilas. Es una especie de pequeño
porte porque no gasta energía en el crecimiento del tallo central, es decir, esta especie comienza a
formar plantas hijas en los laterales con mucha rapidez. Puede cubrir grandes espacios en poco
tiempo. Las flores son amarillas con numerosos pétalos y frutos cónicos de color rojo intenso. Florece
en verano y fructifica en invierno.

Mammillaria prolifera florecido

Portulacaria afra (Árbol de la Abundancia)

Esta especie es muy popular en los jardines y en las colecciones de plantas suculentas. Es una
planta suculenta con tallos leñosos (con el tiempo), ramificados y delgados que crece lentamente.
Posee hojas generalmente ovaladas que surgen en pares opuestos en cada nudo. Las hojas tienen
un color verde intenso que con el contraste del marrón de los tallos, hacen a esta planta preciosa. Su
cultivo es muy sencillo y su principal enemigo son las temperaturas muy bajas. Necesita poca agua,
sustrato con buen drenaje, buena iluminación (no pleno sol) y temperaturas altas durante todo el año.
Portulacaria afra, Árbol de la Abundancia

La Planta Fantasma o Madre perla, Graptopetalum paraguayense

Graptopetalum paraguayense es una crasulácea muy frecuente de encontrar por casi cualquier lugar
donde se cultiven algunas plantas. Es una de las suculentas más fáciles de reproducir porque sus
hojas tienden a brotar raíces con rapidez. Esta especie se caracteriza por tener hojas en rosetas muy
carnosas y lanceoladas. Las hojas son grisáceas con tonalidades de verde; estas solo se disponen al
final de tallo. Es una de las crasuláceas más fáciles de cultivar porque resiste muy bien la falta de
agua; solo necesita bastante luz, temperaturas elevadas, suelo con buen drenaje y riego cada 15
días.

Plantas Fantasmas o Madres Perlas, Graptopetalum paraguayense

Crassula muscosa, Cordón de San José

Crassula muscosa es una planta suculenta muy peculiar que todos deberíamos cultivar. Esta especie
posee tallos delgados muy ramificados que son casi invisibles por la compactación de las hojas que lo
cubren completamente. Las hojas se disponen en rosetas donde las hojas se superponen mucho.
Estas poseen una coloración verde oscura muy vistosa. Se reproduce fácilmente por esquejes de
ramificaciones. Su cultivo es muy sencillo y necesita lugares poco iluminados (no completamente
oscuros), sustrato permeable, temperaturas superiores a los 20°C y riego frecuente.

Cordón de San José, Crassula muscosa

La Cebrita de Jardín, Haworthia fasciata

Esta especie de planta suculenta es muy apreciada por los coleccionistas por el colorido de sus hojas
y fácil cultivo. Las hojas se disponen en pequeñas rosetas de hojas algo alargadas. Esta planta no
tiene tallo evidente y su sistema de raíces es muy pequeño y compacto permitiéndole crecer en
lugares con poco sustrato (profundidad). Su principal atractivo radica en la combinación del color
verde intenso de sus hojas y protuberancias (bandas y puntos) blancas que las cubren. Para cultivarla
adecuadamente, debemos ubicarla en un lugar con buena iluminación, altas temperaturas
ambientales, riegos periódicos y sustrato muy permeable.

La Cebrita de jardín y sus hojas peculiares, Haworthia fasciata

Echeveria runyonii y sus peculiares hojas

Esta planta suculenta es muy común en los puntos de venta o viveros y ha ganado mucha
popularidad por la forma típica de sus hojas. Las hojas son alargadas y arqueadas hacia el centro de
la roseta; la misma hoja es curvada en sus laterales y llega a formar un surco muy evidente. En la
punta de cada hoja encontramos una protuberancia con forma de espina. Su cultivo es muy sencillo y
solo necesita un lugar iluminado, temperaturas elevadas, sustrato con buen drenaje y riegos escasos
(cuando el sustrato este completamente seco).
Planta Echeveria runyonii con sus hojas curvadas

Melocactus matanzanus, un cactus fantástico

Este cactus es uno de los más cultivados del género Melocactus pero se encuentra en grave peligro
de extinción en la naturaleza. Esta especie es endémica de una pequeña región de Cuba (Matanzas)
y solo crece allí de forma silvestre. Se caracteriza por ser un cactus globoso de pequeño porte (no
llega a los 10 cm de altura); posee entre 8-12 costillas y numerosas espinas gruesas de color marrón
o blancas. La floración es espectacular porque surge una estructura cubierta de pelos llamada cefalio
que puede alcanzar más de 10 cm de altura en algunos casos.

Cactus Melocactus matanzanus

Kalanchoe tomentosa

Esta especie es muy apreciada por los coleccionistas de plantas del género Kalanchoe y por todos
los amantes de las plantas. Esta especie se caracteriza por tener hojas (forma de lanzas) cubiertas de
pequeños pelos blanquecinos y los márgenes manchados con matices marrones. Su crecimiento es
bastante lento pero en algunos casos llega a superar más de 80 cm de altura. En algunas variedades
las hojas son bastante grandes mientras que en otras ocurre todo lo contrario. Su cultivo es sencillo y
solo requiere de un sitio iluminado (no al sol), riegos solo cuando se seque su sustrato y temperaturas
superiores a los 15°C.
Las hermosas hojas del Kalanchoe tomentosa

Cleistocactus winteri

El cactus Cleistocactus winteri es una especie muy cultivada en las regiones tropicales por sus
inigualables y bellas flores. Se caracteriza por tener un tallo alargado y algo ramificado que puede
llegar al metro de altura con el tiempo. Su tallo es poco probable que lo encontremos erguido cuando
tiene un gran tamaño, es decir, es una especie que generalmente crece horizontalmente. Las flores
son espectaculares y son muy vistosas; son de color rosa y poseen numerosos pétalos. Su cultivo es
muy sencillo necesitando de abundante luz, riegos en dependencia de la temperatura y sustrato
permeable.

Floración del cactus Cleistocactus winteri