You are on page 1of 17

Fernández Laviada, A.; Martínez, F.J. El riesgo operacional como desafío...

El riesgo operacional
como desafío para las entidades financieras.
Estudio empírico del caso español 1
Ana Fernández Laviada • Francisco Javier Martínez García
Universidad de Cantabria

RECIBIDO: 2 de febrero de 2006


ACEPTADO: 26 de julio de 2006

Resumen: Desde que el Nuevo Acuerdo de Capitales, conocido como Basilea II, incluyó, por primera vez, dotar
capital por riesgo operacional en las entidades financieras, este riesgo se ha convertido en un tema de gran tras-
cendencia y plena actualidad.
Reguladores, supervisores y entidades destinan importantes recursos y esfuerzos a gestionar el riesgo operacional.
Intrínsecamente ligado al control interno de las organizaciones, y aunque haya estado siempre presente, fruto del
aumento percibido en las pérdidas operacionales y responsable de gran parte de los escándalos financieros cono-
cidos, el riesgo operacional ha ido tomando un mayor protagonismo.
En los próximos años, veremos como el estudio del riesgo operacional, inherente a todo negocio, es abordado des-
de diferentes perspectivas y disciplinas: su registro y contabilización, su control y gestión, su integración en la or-
ganización y relación con el gobierno corporativo, su supervisión tanto interna como externa, su revisión por los au-
ditores, etc.
El objetivo de este trabajo es conocer el grado de avance alcanzado por las entidades financieras españolas en la
gestión de los aspectos claves del riesgo operacional, para lo que hemos seleccionado y encuestado en detalle a
una muestra representativa del sector.
Palabras clave: Riesgo operacional / Entidades financieras / Basilea II.
The Challenge of Operational Risk for Financial Institutions: The Empirical Case of Spain
Abstract: Operational risk has evolved as a significant current issue. This began when the New Capital Accord,
known as Basel II, included for the first time, a regulatory capital charge for OR in financial institutions.
Regulators, supervisors and other entities invest resources and efforts to manage the operational risk, which is clo-
sely linked with the internal control of the firms. Although OR is not a new concept, its importance is growing with the
increase in operational losses. This was also because most of the recent financial scandals were attributed to the
operational losses.
As a factor inherent to business, OR covers every single agent and process of an entity. Consequently, in the years
to come, research on this risk will get more attention and it will be studied from different perspectives and disciplines
– e.g. accounting, control and management, integration in the firms and its link to the corporate governance, internal
and external supervision, reviewing by auditors, etc.
The aim of this article is to conduct an in depth analysis of the current situation of the Spanish financial institutions in
the area of operational risk management. This is an exploratory study based on the survey of a representative and
selective sample of the industry
Key Words: Operational risk / Financial institutions / Basel II.

INTRODUCCIÓN siendo numerosos los escándalos y fracasos vin-


Desde que, el 24 de junio de 2004, el Comité culados, fundamentalmente, a él. Además, regu-
de Supervisión Bancaria de Basilea (CSBB) ladores, supervisores y entidades vienen dedi-
aprobó el Nuevo Acuerdo de Capitales (NACB), cando importantes recursos y esfuerzos a tratar
conocido como Basilea II, en el que, por primera el RO, que ha ido creciendo a medida que lo
vez, se exige a las entidades financieras capital hacían los propios mercados.
para cubrir el Riesgo Operacional (RO), este Sin embargo, sólo recientemente se ha llega-
riesgo se ha convertido en un tema de gran tras- do a un consenso sobre su definición. Hasta aho-
cendencia y plena actualidad, habiendo pasado a ra definido como todos los riesgos que no fueran
ocupar un lugar prioritario en las agendas de los de crédito ni de mercado, el tratamiento que re-
reguladores, de los supervisores, de las entida- cibía era puramente reactivo, de forma que las
des, de los investigadores, y de todos los intere- entidades respondían a estos riesgos a medida
sados en el sector financiero. que iban surgiendo, en lugar de gestionarlos de
Intrínsecamente ligado al control interno de un modo pro-activo.
las organizaciones, y a pesar de haber estado El RO, inherente a toda actividad, difícil de
siempre presente, es en los últimos años cuando discernir, cuantificar y gestionar, representa uno
el RO ha ido tomando un mayor protagonismo, de los grandes desafíos a los que se enfrentan las

Revista Europea de Dirección y Economía de la Empresa, vol. 16, núm. 2 (2007), pp. 111-128 111
ISSN 1019-6838
Fernández Laviada, A.; Martínez, F.J. El riesgo operacional como desafío...

entidades hoy día. Y es que, aunque la gestión encuestas realizadas para finalmente señalar en
del RO tampoco sea una tarea nueva, sí debemos el apartado cuatro las principales conclusiones
admitir que el enfoque actual, que integra la ges- alcanzadas.
tión de este riesgo en el conjunto de la entidad,
es ciertamente novedoso.
Este cambio en la percepción y atención INVESTIGACIÓN PREVIA Y
hacia el RO (Power, 2005) se ha debido funda- PLANTEAMIENTO DEL TRABAJO
mentalmente a dos motivos: Por una parte, la Durante 1998 y 1999, tres organizaciones: la
gestión del RO es reconocida como una de las International Securities Dealers Association3 (IS-
buenas prácticas dentro del sector de servicios DA), la British Bankers’ Association (BBA) y la
financieros debido a que mejora de forma consi- Robert Morris Associates4 (RMA) patrocinaron
derable el valor del accionista, optimizando los un estudio sobre la gestión del RO. Estas tres
procesos, la dirección corporativa, la continuidad asociaciones, junto a los servicios de la multina-
de los planes de la entidad y la transparencia fi- cional PricewaterhouseCoopers (PwC), llevaron
nanciera. Y por otra parte, como decíamos al a cabo un trabajo que culminó en diciembre de
comienzo, Basilea II ha sido clave2. La bancarro- 1999 con el informe titulado Operational Risk:
ta del Barings y la explosión de los derivados a The Next Frontier, en el que se analizó, por pri-
mediados de los noventa fueron entre otras las mera vez, amplia y detalladamente, la situación
razones que llevaron a revisar el Acuerdo de Ca- del RO en cincuenta y cinco instituciones finan-
pital de Basilea original de 1988. Las nuevas cieras de ámbito mundial.
exigencias normativas han determinado, sin lu- Desde que se emitió el primer borrador del
gar a dudas, la necesidad de las entidades de Nuevo Acuerdo de Capital de Basilea en junio
adaptarse. de 1999, el CSBB ha llevado a cabo varios estu-
Así pues, esta nueva visión del RO, como un dios de impacto, conocidos como QIS (Quantita-
sector emergente, ha supuesto que aquellas enti- tive Impact Study), al objeto de conocer mejor el
dades que aún no lo hayan hecho deban empezar efecto de sus medidas sobre las entidades afecta-
a destinar una parte importante de sus recursos a das. En relación al RO se han realizado, hasta la
gestionarlo de manera efectiva. Para ello, es im- fecha de nuestro trabajo, dos estudios.
prescindible que se produzca un cambio cultural El primero fue lanzado, como parte del QIS2,
en el seno de las propias organizaciones, impul- por el Risk Management Group (RMG) del
sado por la alta dirección y apoyado con todas CSBB en mayo de 2001. Los resultados de las
las inversiones necesarias, fundamentalmente 30 entidades colaboradoras fueron publicados,
formativas. en enero de 2002, en el documento The Quanti-
En consecuencia, y centrando nuestra aten- tative Impact Study for Operational Risk: Over-
ción en el contexto español, el objetivo de nues- view of Individual Loss Data and Lessons Lear-
tro trabajo (en adelante y para efectos de los grá- ned. Y en marzo de 2003, se publicó un resumen
ficos, UC 2004) es conocer el grado de avance tabulado de los datos individuales de pérdidas
alcanzado hasta estos momentos por nuestras en- por RO recopilados por el RMG entre las 89 en-
tidades financieras en la gestión de los aspectos tidades que respondieron al cuestionario 2002
clave del RO. Operational Risk Loss Data Collection Exercise
Así, en el siguiente apartado hacemos el aná- (LDCE) del QIS3.
lisis de algunas de las investigaciones empíricas Por otra parte, una división de la firma PwC,
previas que se han realizado al respecto en otros especializada en la gestión global del riesgo y
ámbitos o países, describiendo, a continuación, quien dispone de una unidad destinada a proveer
el planteamiento que vamos a seguir en nuestro soluciones de riesgo al sector financiero5, llevó a
trabajo, señalando los aspectos del estudio empí- cabo un estudio con el objetivo de conocer y
rico diseñado al efecto. describir el posicionamiento del sector financie-
Posteriormente, analizamos y presentamos en ro español respecto de las recomendaciones del
el apartado tres los resultados obtenidos de las CSBB. Para ello, analizó la situación de las prin-

112 Revista Europea de Dirección y Economía de la Empresa, vol. 16, núm. 2 (2007), pp. 111-128
ISSN 1019-6838
Fernández Laviada, A.; Martínez, F.J. El riesgo operacional como desafío...

cipales entidades financieras españolas en mate- blishing publicaba su estudio Operational Risk
ria de gestión del RO, considerando las mejores Management in the Financial Services Industry,
prácticas del sector en cada caso y la posición re- donde se recogen datos de más de 250 firmas de
lativa frente a los nuevos requerimientos pro- todo el mundo en relación con el RO.
puestos por el CSBB. Participaron 16 entidades La importancia creciente que en los últimos
financieras, bancos y cajas de ahorros6, y sus re- años ha adquirido el RO y su gestión, en especial
sultados fueron presentados en julio de 2002, en el sector financiero; el efecto que en un futuro
mediante un documento titulado Gestión del inmediato tendrá en los sistemas financieros de
riesgo operacional en las entidades financieras todos los países, pero particularmente en España,
españolas (en adelante, PwC 2002). la plena aplicación de Basilea II; la literatura
Durante el último trimestre de 2002 y tam- previa publicada en relación con esta línea de
bién dentro del sector financiero español, pero investigación emergente, en concreto la dirigida
centrados en las Cajas de Ahorros, realizamos un al sector financiero que señalamos en los párra-
primer estudio como aproximación al RO (al que fos anteriores; y el trabajo que venimos realizan-
do para estudiar y analizar la situación respecto a
nos referiremos como UC 2003). El cuestionario
su consideración y tratamiento en nuestro país,
fue enviado a las 46 Cajas de Ahorros que com-
justifica el objetivo que nos hemos propuesto en
ponen el sector, recibiendo 36 respuestas y cu- este momento, que entendemos oportuno y del
yos resultados fueron recogidos en detalle en la máximo interés, de conocer y mostrar el grado
tesis doctoral Control del riesgo operacional en de avance que en la actualidad presenta el siste-
las entidades financieras: análisis conceptual y ma financiero español.
contrastación empírica desde la perspectiva de Para alcanzar el objetivo propuesto elabora-
los derivados (Fernández Laviada y Martínez mos un cuestionario de 70 preguntas organizadas
García, 2006a). en ocho apartados7. Conscientes de que el sector
También en esa época, pero para el mercado estaba dando sus primeros pasos, y dada la es-
americano, The Risk Management Association tructura y contenido de la encuesta, considera-
(RMA) publicaba en octubre de 2003 los resul- mos que no podía ser enviado de forma masiva.
tados de su estudio Progress in Operational Risk Debíamos seleccionar una muestra que fuera re-
Management in the U.S. banking Industry, en- presentativa de la situación actual y de los avan-
viado a 479 entidades por e-mail y del que se ob- ces que se iban produciendo, permitiéndonos
tuvieron 46 cuestionarios completados. además mantener un contacto y seguimiento del
En enero de 2004, FitchRatings publicaba un proceso que garantizase el 100% de respuestas.
informe titulado The Oldest Tale But the Newest Así, para determinar los sujetos de la muestra
Story: Operational Risk and the Evolution of Its seleccionamos a aquellas entidades financieras
Measurement Under Basel II, en el que exami- con un importante peso específico dentro del
naba el progreso de la industria bancaria en el sector, con reconocida posición de liderazgo, y
desarrollo de metodologías para gestionar el RO. sobre todo que desde el principio habían demos-
Como continuación a dicho informe encuestó a trado una especial preocupación e interés por el
50 de las instituciones financieras mayores del RO, participando en diferentes foros e iniciativas
mundo de las que finalmente recibió 42 respues- como era la creación del primer consorcio de RO
tas de Australia, Canada, Europa, Japón, Suráfri- español.
ca y Estados Unidos. Los resultados de estas en- Finalmente fueron ocho entidades las selec-
cuestas se resumieron en el informe publicado en cionadas: tres cajas de ahorros y cinco bancos8,
abril de 2004 con el título Operational Risk Ma- que consideramos conforman una muestra lo su-
nagement & Basel II Implementation: Survey ficientemente representativa de la realidad del
Results, donde se identifican los aspectos claves sistema financiero español, ya que representan,
de la gestión del RO y la implantación de Basi- como se muestra en el gráfico 1, en términos de
lea II. inversión crediticia y débitos a clientes, una me-
Y por último, en junio de ese mismo año, la dia aproximada del 50% del mercado total (40%
compañía de software empresarial, SAS, en co- en el caso de las cajas de ahorro y el 70% del
laboración con la firma Incisive Financial Pu- mercado bancario).

Revista Europea de Dirección y Economía de la Empresa, vol. 16, núm. 2 (2007), pp. 111-128 113
ISSN 1019-6838
Fernández Laviada, A.; Martínez, F.J. El riesgo operacional como desafío...

Gráfico 1.- Representatividad de la muestra Es importante resaltar que Basilea no es sólo


80 71,67% 72,90% un punto de partida básico para una homogenei-
70 zación de criterios sino un marco de referencia,
60
50
52,23% 49,63% que permite analizar el grado de avance de las
40 38,38% 35,83%
entidades financieras en la gestión de este
30
20 riesgo.
10 La adopción de esta definición es una prácti-
0
Inversión crediticia Débitos clientes ca que también se viene observando a nivel in-
Cajas Bancos Total
ternacional9 y si lo comparamos con los resulta-
dos del estudio de PwC para todo el sector fi-
nanciero español en 2002 o el estudio sobre las
El cuestionario fue entregado personalmente, Cajas realizado en 2003 podemos destacar que
a principios de 2004, a los máximos responsa- los líderes en el sector español siguen las
bles de RO en las ocho entidades colaboradoras. mismas tendencias que los líderes internaciona-
Dada su extensión, por otra parte necesaria, y la les.
dificultad en algunos casos para mantener el
contacto con los encuestados hasta conseguir sus Gráfico 2.- Definición de riesgo operacional
respuestas, la mayoría de los cuales a su vez tu- No tienen Definición
vieron que seguir procesos internos para someter definición NC de Basilea
37%
la encuesta a la aprobación de sus superiores, la 22% 25%
recepción de las respuestas de la muestra en su
totalidad, que como señalamos era absolutamen- La
propuesta
te impresdincible para nuestros propósitos, resul- Definición en Proyecto Definición
No
definición
tó un proceso largo y laborioso, si bien finalmen- de Basilea Ceca propia propia
14%
te los resultados fueron muy satisfactorios. 63% 28% 11%
A continuación, y siguiendo la propia estruc- PwC 2002 UC 2003

tura del cuestionario, describimos los resultados


Además, y como se observó en el estudio de
obtenidos, para finalizar con algunas de las prin-
las Cajas de Ahorros, no sólo la han adoptado
cipales conclusiones sobre la situación en el sis-
sino que en su mayoría están de acuerdo con ella
tema financiero español en relación con la ges-
tión del RO. ya que únicamente a una entidad le seguía pare-
ciendo en parte confusa.

ANÁLISIS DE LOS RESULTADOS DEL CLASIFICACIÓN DEL RIESGO OPERACIONAL


CUESTIONARIO
A pesar de los esfuerzos hechos por el CSBB,
o por asociaciones como ORX10, este proceso de
DEFINICIÓN DE RIESGO OPERACIONAL
catalogación no es sencillo y así lo demuestran
Debido a la controversia existente en los úl- los resultados de las encuestas donde la mayoría
timos años, la primera pregunta que planteába- manifiesta su descontento con la clasificación. El
mos no podía ser otra que nos manifestaran cuál 87% considera que no están lo suficientemente
era su definición de RO, con el fin de ver si tal bien definidas las distintas categorías de RO y el
controversia iba desapareciendo y se estaba al- 62% cree que, además, no abarcan todas las po-
canzando el deseado consenso en un aspecto tan sibilidades. Y aunque a nivel 1 las opiniones so-
central como es el conceptual. Como era de es- bre su adecuación son en su mayoría (62%) fa-
perar, la rápida evolución que están experimen- vorables, todas salvo una entidad consideran que
tando las entidades en este campo ha propiciado no están bien definidos a nivel 2.
que todos los encuestados, sin excepción, habían Profundizando en los problemas que se les
adoptado a la fecha del estudio la definición de plantean en la práctica, la falta de detalle en las
Basilea, al menos a efectos de cumplir con los definiciones hace que en muchos casos un even-
requisitos legales. to sea susceptible de clasificación en varias de

114 Revista Europea de Dirección y Economía de la Empresa, vol. 16, núm. 2 (2007), pp. 111-128
ISSN 1019-6838
Fernández Laviada, A.; Martínez, F.J. El riesgo operacional como desafío...

las categorías, planteando problemas de duplici- Es importante seguir la evolución de estos in-
dades, por lo que los encuestados manifiestan la dicadores por categoría de riesgo ya que,
necesidad de que se aporten más ejemplos escla- como veremos más adelante, las entidades conti-
recedores. núan desarrollando sus bases de datos inter-
Por otra parte, y en relación con estas catego- nas.
rías de riesgo, quisimos conocer cuáles eran las
más importantes para las entidades encuestadas, Gráfico 4.- Tres categorías de riesgo más importan-
tanto por su frecuencia como por su severidad, y tes por severidad
así poder compararlo posteriormente con los da- Ejecución, entrega y
tos publicados por el CSBB en sus estudios de gestión de procesos 50% 25% 12,5%

impacto. Prácticas con clientes,


productos y negocios
12,5% 12,5%

Por la frecuencia de los eventos, las categorí- Fraude externo 12,5% 12,5%
as de riesgo más relevantes son, en primer lugar, Fraude interno 37,5% 50%
“la ejecución, entrega y gestión de los procesos”,
que además es la categoría más importante para 1ª 2ª 3ª
el 75% de los encuestados, y en segundo lugar,
“el fraude externo”, para el 50%. Por otra parte,
señalar el bajo nivel de dos categorías que nin- Asimismo, con los datos publicados por el
guna entidad ha señalado entre las tres más rele- CSBB en los dos documentos mencionados, y
vantes: “las relaciones laborales y seguridad en teniendo siempre presente que la distinta tipolo-
el puesto de trabajo” y los “daños en activos físi- gía de las entidades que han participado en
cos”. ambos estudios puede motivar las diferencias
apreciadas, podemos considerar lo siguien-
Gráfico 3.- Tres categorías de riesgo más importan- te:
tes por frecuencia
• En relación a la frecuencia, la principal dife-
Ejecución, entrega y
gestión de procesos
75% 25% rencia estriba en la mayor importancia que le
Incidencias en el negocio
y fallos en los sistemas
12,5% 50% conceden las entidades españolas a la cate-
Prácticas con clientes,
12,5% 37,5%
goría “prácticas con clientes, productos y ne-
productos y negocios
gocios”. Ambos estudios coinciden en que el
Fraude externo 12,5% 50% 37,5%
“fraude externo” y “la ejecución, entrega y
Fraude interno 12,5%
gestión de procesos” son las dos categorías
más relevantes, aunque los estudios de im-
1ª 2ª 3ª
pacto muestran una tendencia de aumento
de los riesgos vinculados al “fraude exter-
En cuanto a su severidad o impacto, no”.
nuevamente son las categorías de “ejecución, en- • Por lo que se refiere a la severidad, aunque las
trega y gestión de los procesos” y de “fraude ex- dos categorías más importantes coinciden en
terno”, y en ese orden, las que representan ambos, sí surgen importantes diferencias en
los riesgos más importantes. En este caso, resal- cuanto al tercer riesgo de mayor relevancia.
ta el “fraude interno” que, además de tener un Mientras que las entidades españolas no dan
nivel parecido al “fraude externo”, es para el importancia a la categoría de daños físicos
50% de los encuestados el tercer riesgo más re- (ninguna lo considera entre las tres categorías
levante. Al igual que antes, hay categorías que primeras), en los estudios del CSBB se ha pro-
no son consideradas por las entidades entre ducido un crecimiento exponencial de esta ca-
las tres más relevantes y, en este caso, por su tegoría en detrimento de “prácticas con clien-
severidad tampoco incluyen a las incidencias tes, productos y negocio”. Una diferencia muy
del negocio y fallos en los sistemas como un notable a la que nos referiremos posteriormen-
riesgo relevante. te.

Revista Europea de Dirección y Economía de la Empresa, vol. 16, núm. 2 (2007), pp. 111-128 115
ISSN 1019-6838
Fernández Laviada, A.; Martínez, F.J. El riesgo operacional como desafío...

Tabla 1.- Número e importe de pérdidas operaciona- Nuevamente si comparamos nuestros resulta-
les por tipo de evento dos con los datos proporcionados por Basilea
Tipo de riesgo
Frecuencia Severidad podemos comprobar que están en la misma línea,
2002 2001 2002 2001 ya que son precisamente esas tres líneas las que
Fraude Interno 3.3% 2.7% 7.2% 10.7%
Fraude Externo 42.4% 36.4% 15.5% 20.3% están expuestas a pérdidas operacionales en ma-
Relaciones laborales y segu-
8.5% 2.7% 6.8% 2.9%
yor número e impacto. Destaca de forma espe-
ridad en el trabajo cial la banca minorista por el elevado número de
Prácticas con clientes, pro-
ductos y negocios
7.2% 6.4% 13.1% 27.5% pérdidas registradas (61.1%), en relación al resto
Daños a activos físicos 1.4% 4.5% 24.3% 3% de las unidades mientras que, por su severidad,
Incidencias en el negocio y
1.1% 5.3% 2.7% 0.8% están casi a la par con la banca comercial, con un
fallos en los sistemas
Ejecución entrega y gestión
29.3% y 28.9%, respectivamente.
35.1% 42% 29.4% 34.8%
de procesos
FUENTE: www.bis.org Tabla 2.- Número e importe de pérdidas operaciona-
les por líneas de negocio
Basilea
LÍNEAS DE NEGOCIO Frecuencia Severidad
Unidades de negocio
2002 2001 2002 2001
Junto a la clasificación de los eventos, un Finanzas corporativas 0.9% 7.4% 3.5% 0.3%
Negociación y ventas 10.9% 19.1% 14.9% 4.9%
problema añadido al que se enfrentan las entida- Banca minorista 61.1% 39.4% 29.3% 67.4%
des es el referido a las líneas o unidades de ne- Banca comercial 7.2% 22.9% 28.9% 13.2%
gocio donde deben asignarse las pérdidas opera- Liquidación y pagos 3.9% 4.8% 3.25% 7.0%
cionales. Para la mayoría, 62%, de las encuesta- Servicios de agencia 1.5% 2.2% 4.25% 1.8%
Administración de activos 2.3% 2.1% 2.7% 1.6%
das, éstas líneas son confusas y, además, para un Intermediación minorista 6.9% 2.1% 11.7% 3.9%
25% no se ajustan adecuadamente a nuestro sis- FUENTE: www.bis.org
tema bancario.
Por otra parte, en cuanto a las soluciones que En cuanto al resto de las líneas, las finanzas
más destacan, está el definir claramente lo que se corporativas o los servicios de agencia, ni siquie-
incluye en cada una de esas líneas, e incluso ra indicados por las entidades españolas encues-
crear nuevas líneas que se ajusten mejor al mo- tadas, son igualmente las menos afectadas según
delo de banca español. Basilea.
Después a la hora de analizar el efecto global, Algo que sí nos sorprende, y creemos impor-
por frecuencia y severidad, que el RO tiene en tante destacar, son las diferencias, muy significa-
las distintas líneas de negocio, las más afectadas tivas en algunos casos, que se aprecian entre los
por este riesgo, en orden de importancia, son la dos estudios consecutivos de Basilea. Por ejem-
banca minorista, banca comercial y negociación plo, si nos fijamos en la frecuencia de las pérdi-
y ventas. Como complemento, en la siguiente das, mientras en banca minorista el número de
gráfica, recogemos las líneas más expuestas al eventos prácticamente se ha duplicado en un
RO en las entidades encuestadas, diferenciando año, en banca comercial se ha reducido a casi un
entre la primera, segunda y tercera más afectada. tercio. Y si nos fijamos en la severidad de esas
pérdidas las tendencias son contrarias y también
Gráfico 5.- Tres líneas de negocio más afectadas por significativas aunque no tan marcadas. En la
el RO banca minorista se ha reducido a algo más de la
Intermediación minorista 12,5% mitad, mientras que la banca comercial experi-
Admón. de activos 12,5% 12,5% mentaba un aumento similar.
Liquidación y pagos 12,5% Estas diferencias entendemos que se deben en
Banca comercial 75% 12,5% gran medida a la falta de definición y claridad
Banca minorista 75% 12,5% sobre las propias líneas, al igual que ocurría con
Negociación y venta 12,5% 62,5% la clasificación de los eventos, lo que ha llevado
a cambios entre líneas a medida que ha ido au-
1ª 2ª 3ª
mentando la concreción de las mismas.

116 Revista Europea de Dirección y Economía de la Empresa, vol. 16, núm. 2 (2007), pp. 111-128
ISSN 1019-6838
Fernández Laviada, A.; Martínez, F.J. El riesgo operacional como desafío...

ORGANIZACIÓN 87.5%, tienen además personal especializado


Definir un modelo organizativo adecuado es dentro de las diferentes unidades de negocio y
uno de los aspectos clave para configurar el mar- soporte y en el 50% de los casos se reporta a la
co de gestión del RO. Tradicionalmente el depar- dirección de riesgos al ser una unidad de riesgo
tamento de auditoría interna se responsabilizaba equivalente a las de crédito y mercado.
de verificar la existencia de los adecuados con-
Gráfico 6.- ¿Tiene un área independiente de RO?
troles para mitigar las pérdidas operacionales. El
gran reto de las entidades está en crear un mode- En
desarrollo
En
Sí desarrollo
lo organizativo que fomente el tratamiento ho- 25% 38% 38%

50%
mogéneo de la información sobre RO dentro de
toda la entidad, que asigne claramente las res-
ponsabilidades de gestión, control y supervisión
No No
y que cuente con una unidad centralizada de ges- 37% 12%
tión del RO independiente del departamento de PwC 2002 UC 2004
auditoría interna, tal y como recomienda Basilea.
Para empezar, debemos destacar cómo todas En cuanto a las funciones asignadas a esta
las entidades encuestadas ya han incorporado la unidad, se incluyen el definir las políticas y pro-
gestión del RO, aunque la mitad estén todavía cedimientos de gestión y control del RO, diseñar
desarrollando su implantación. Conscientes de la e implantar la metodología de evaluación y el
envergadura de este riesgo todas han asignado sistema de reporting del RO, así como su identi-
recursos a temas relacionados con el RO lo que ficación, evaluación y supervisión.
se demuestra especialmente al comprobar el per- Sin embargo, un tema menos avanzado es el
sonal que está dedicado a este riesgo parcial o relacionado con el comité de RO, y a pesar de
completamente. Lo que sí se aprecian son gran- que se ha duplicado el porcentaje de entidades
des diferencias entre ellas, encontrándonos desde que tienen o se plantean crearlo en relación al es-
entidades que tienen únicamente a dos personas tudio de PwC, tan sólo dos lo tenían implemen-
a tiempo parcial hasta una entidad con treinta y tado en su sistema de gestión, aunque también se
cinco personas dedicadas exclusivamente al RO debe reconocer que otras dos lo estaban desarro-
en diferentes tareas, algo que lógicamente ha re- llando en el momento de realizar este estudio.
dundado muy positivamente en el gran desarro-
llo alcanzado por dicha entidad. Gráfico 7.- ¿Tiene un comité de RO?
Dentro de esa estructura un primer paso es En En
No desarrollo Sí
definir y contar con un responsable y, para ello, desarrollo
12,5% Sí 75% 25%
75%
la creación de un departamento específico para 12,5%
RO ha sido la opción más adoptada por las enti-
dades encuestadas, por un 62%.
Los requerimientos de Basilea exigen la crea- No
50%
ción de una unidad independiente responsable de PwC 2002 UC 2004
la gestión del RO, algo que como vemos ya han
hecho o están desarrollando el 88% de las enti- Finalmente, vinculado al modelo organizativo
dades. Con este resultado apreciamos el avance de la entidad quisimos conocer qué otras áreas
que se está produciendo en el sector ya que ape- estaban implicadas en el proceso de gestión, ya
nas un año antes, y según los datos del estudio que como apuntábamos en el párrafo anterior es
de PwC, sólo un 38% de las entidades tenían esa un riesgo que está presente en toda la organiza-
unidad independiente desarrollada. ción. Aunque prácticamente todas fueron men-
Las entidades han ido centralizando las fun- cionadas, lógicamente son el área de RO y el de-
ciones vinculadas al RO en esa unidad, siguien- partamento de auditoría interna las dos áreas más
do las mejores prácticas del sector y el modelo implicadas, ya que son las más directamente vin-
propuesto por Basilea. Pero la mayoría, el culadas con todo el proceso.

Revista Europea de Dirección y Economía de la Empresa, vol. 16, núm. 2 (2007), pp. 111-128 117
ISSN 1019-6838
Fernández Laviada, A.; Martínez, F.J. El riesgo operacional como desafío...

En relación al departamento de auditoría in- HERRAMIENTAS


terna (DAI), el CSBB reconoce que puede El desarrollo del marco de gestión del RO se
tener la responsabilidad inicial de desarrollar la fundamenta en el empleo de un conjunto de
gestión del RO, especialmente en entidades con herramientas que permitan identificar y capturar
menores recursos, aunque después debe limitarse las pérdidas operacionales así como la evalua-
a tareas de supervisión y seguimiento del ción, seguimiento, control y reporting de los dis-
proceso. Las entidades encuestadas así lo de- tintos riesgos.
muestran, pues aunque el departamento de audi- Por ello quisimos conocer qué herramientas
toría sigue ocupando un lugar importante estaban siendo empleadas o su utilización estaba
dentro de las entidades, en cuanto a este riesgo prevista en las distintas entidades españolas. Así
se refiere, están ya asumiendo su nuevo pa- constatamos, en primer lugar, que todas emplean
pel. como mínimo tres tipos diferentes de herramien-
tas en su gestión y en particular el 62.5% de las
Gráfico 8.- ¿Cuál es el grado de participación del encuestadas emplean cinco de las seis herra-
DAI en la actualidad? mientas incluidas en la encuesta. En segundo lu-
Medio
50%
Alto
25%
gar, las bases de datos de pérdidas y las auto-
evaluaciones, seguidas de los indicadores de
riesgos, son las tres más importantes ya que son
utilizadas o su empleo está previsto por el 100%
Bajo
25%
de las entidades. Además, y en cuanto al futuro
empleo de otras herramientas, destacan las aler-
tas que hasta ahora sólo una entidad empleaba. Y
Este nuevo papel de la auditoría interna, no
en tercer lugar, tan sólo un 12.5% de las entida-
como responsable directo, función del área inde-
des declaró no utilizar ni tener previsto el uso de
pendiente de RO, sino supervisando, siguiendo y
las alertas y los mapas de riesgos.
aportando la información necesaria para el pro-
ceso de gestión del RO será el que deberán ir Gráfico 10.- ¿Qué herramientas se están empleando
asumiendo todas las entidades a medida que se o se tiene previsto utilizar en su entidad?
vaya afianzando el modelo de gestión del
RO. Cuadro de mando 25% 25%

Por último, en relación a las partes implicadas Mapas de riesgos 37,5% 25% 12,5%
Bases de datos de pérdidas 87,5%
en el proceso de gestión del RO queremos Autoevaluación
12,5%

62,5% 37,5%
destacar que el 100% de las encuestadas remite Alertas 12,5% 12,5%
información relacionada con el RO a la alta Indicadores de riesgo 50% 50%
dirección de su organización, en algunos casos
incluso mensualmente, mientras que al Consejo Usa Prevista No usa
de Administración tan sólo lo hacen la mitad de
las entidades, resultados que ya obtuvo PwC dos Si comparamos estos resultados con los obte-
años antes. nidos en el estudio de PwC podemos considerar
que:
Gráfico 9.- ¿Recibe información el Consejo de Ad-
ministración sobre el RO? • Todas las herramientas en conjunto han expe-
Está en
Sí desarrollo Sí
rimentado un aumento en su empleo.
50% 13% 49% • Las bases de datos de pérdidas, que representan
un elemento fundamental para la gestión glo-
bal, tanto cuantitativa como cualitativa, han al-
No No canzado el grado de aceptación y desarrollo
50% 38% esperado pasando a ser utilizadas por casi el
PwC 2002 UC 2004 100% de la población encuestada.

118 Revista Europea de Dirección y Economía de la Empresa, vol. 16, núm. 2 (2007), pp. 111-128
ISSN 1019-6838
Fernández Laviada, A.; Martínez, F.J. El riesgo operacional como desafío...

• Lo mismo sucede con las autoevaluaciones, De igual modo, al analizar los usuarios de la
que han pasado a ser utilizadas por el 62.5%, información, se observa como todos hacen uso
mientras que el resto lo tiene ya previsto. de ella aunque nuevamente sea el área de RO el
• Los mapas de riesgos y procesos son la única usuario principal. Aquí es importante destacar
herramienta que aún no ha conseguido gran cómo se aprecia el avance de las entidades ya
aceptación entre las entidades, tal vez por no que en el estudio de PwC el principal usuario de
ajustarse plenamente a este riesgo. la información generada por las herramientas era
el departamento de auditoría interna, quien ahora
Gráfico 11.- Herramientas que se están empleando o ha pasado a ocupar un lugar secundario.
tienen previsto utilizar Por lo que se refiere a la finalidad que se le
120% da a esta información, aunque también se utilice
100%
87,50%
100% 100%
para dirigir o soportar otros trabajos, destaca en
80% 75%
62% 62%
75%
69% primer lugar, como no podía ser de otro modo,
56%
ayudar a la gestión diaria, seguida del control y,
40%
en un tercer lugar, servir para la asignación de
0% capital. Está claro que aunque éste fuera inicial-
Indicadores Alertas Autoevaluac. Bases de Mapas mente el motivo por el cual se empezó a hablar y
de riesgos datos de de riesgos
pérdidas trabajar en RO no es ya el objetivo prioritario de
UC 2004
la información que se genera. La gestión diaria y
PwC 2002
alcanzar los objetivos de la entidad son motivos
que por sí solos avalan la importancia de gestio-
En la encuesta de 1999 realizada por BBA- nar adecuadamente este riesgo.
ISDA-RMA se señalaba que el 71% de los parti-
cipantes utilizaba o preveía utilizar las cinco Gráfico 13.- ¿Para qué fines se utiliza la informa-
herramientas y todavía casi un 30% no utilizaba ción que generan las herramientas?
las bases de datos de pérdidas. Estos resultados Control 12,5% 37,5%
nos sitúan no sólo en la línea de las entidades lí- Gestión estratégica 12,5% 12,5% 12,5%
deres a nivel internacional sino por encima, algo
que tampoco nos sorprende dado el horizonte Gestión diaria 37,5% 12,5%

temporal en que se desarrollaron ambos estudios. Asignación de capital 50%

Gráfico 12.- Herramientas que se están empleando o 1ª finalidad 2ª finalidad 3ª finalidad


tienen previsto utilizar
120%
100% 100% 100%
Entrando en el análisis de las herramientas
87% 87,50%
92%
88% más empleadas quisimos además conocer en de-
78% 75%
80% 71%
talle: quién las utiliza, con qué finalidad, cómo
40%
se desarrollan y las ventajas e inconvenientes
que les plantean.
0%
Indicadores Alertas Autoevaluac. Bases de Mapas ♦ INDICADORES Y ALERTAS. Como veía-
de riesgos datos de de riesgos
pérdidas mos al principio, el 100% de las encuestadas uti-
UC 2004 BBA_ISDA-RMA 2002
liza o tiene previsto utilizar estas herramientas
como sistema de predicción y seguimiento para
definir los niveles de RO en su entidad. En re-
En el 50% de los casos fueron las áreas de sumen podemos señalar:
RO las responsables de su impulso y promoción
aunque el departamento de auditoría interna, las • Las áreas de soporte son las que en mayor me-
áreas de riesgos o incluso la alta dirección dida utilizan los indicadores, seguidos de las
también lo hicieron en el 37.5% de los casos. áreas de negocio y el departamento de audito-

Revista Europea de Dirección y Economía de la Empresa, vol. 16, núm. 2 (2007), pp. 111-128 119
ISSN 1019-6838
Fernández Laviada, A.; Martínez, F.J. El riesgo operacional como desafío...

ría interna, mientras que sólo las áreas de so- tante, y como en ocasiones no es suficiente, las
porte y auditoría han establecido alertas sobre reuniones de trabajo, los cuestionarios o mapas
ellos. de procesos y el estudio de las medidas mitiga-
• La periodicidad de su seguimiento es variable doras son también importantes fuentes de infor-
en función del indicador o alerta concreto que mación.
se considere, aunque lo más habitual es hacerlo Si comparamos estos resultados con los pre-
trimestral o mensualmente. sentados en el estudio de PwC, podemos obser-
• Identificar problemas operacionales, tomar de- var como entonces eran las reuniones de trabajo
cisiones y analizar tendencias son las tres fina- la fuente principal mientras que las pérdidas re-
lidades principales para las que se utilizan los cogidas ocupaban un quinto lugar. Una situación
indicadores aunque también se emplean con lógica, por otra parte, ya que entonces apenas se
otros fines secundarios. disponía de información sobre las pérdidas ope-
racionales que experimentaban las entidades, lo
♦ AUTO-EVALUACIONES. Las unidades de que les llevaba a tener que apoyarse en otros
negocio del 62.50% de las entidades encuestadas medios como fuente de información.
ya utilizan esta herramienta para identificar los ♦ BASES DE DATOS. Como ya veíamos an-
riesgos inherentes a sus actividades, evaluar el teriormente, disponer de unos buenos datos de
nivel de control existente y determinar los pun- pérdidas es uno de los elementos más importan-
tos de mejora que deben realizar, estando ade- tes para la gestión y cuantificación del RO. Los
más prevista en el resto de las entidades a corto datos de pérdidas internas no son suficientes y
plazo. en la actualidad la forma de aumentar el abanico
de pérdidas es usando bases de datos de pérdidas
Gráfico 14.- ¿De qué fuentes obtiene la información externas o bien formar parte de algún consorcio
necesaria para realizar los procesos de auto-evalua- de datos. Por ello nos planteábamos las siguien-
ción? tes cuestiones sobre las encuestadas. ¿Qué bases
Revisión de planes 13% de datos de pérdidas tienen en sus entidades?,
planeados 13% ¿qué y para qué fines se utiliza la información
Revisiones de los 25% que suministran esos datos?, ¿cómo tienen pre-
cambios realizados 50% visto obtener más datos a parte de los internos? y
Comparación entre los
riesgos y las medidas o
25% ¿cuál es su participación en consorcios de RO?
acciones mitigadoras 0% Para empezar todas las entidades tienen ya
Información de pérdida de 38% una base de pérdidas operacionales aunque en
operaciones recopiladas 88%
una de ellas se estaba todavía desarrollando.
Análisis de riesgos
y controles
38% Prueba del proceso de concienciación sobre la
38%
necesidad de recopilar datos sobre las pérdidas y
Mapas de procesos
50%
del énfasis que viene haciendo el CSBB en su
50%
desarrollo son las claras diferencias con el estu-
63%
Cuestionarios sobre
procesos 50%
dio de PwC y que quedan reflejadas en los si-
guientes gráficos.
75%
Reuniones de trabajo
63%
Gráfico 15.- ¿Tiene su entidad una base de datos de
pérdidas operacionales?
PwC 2002 UC2004
Está en Está en
desarrollo Sí desarrollo
13% Sí
Para desarrollar estas auto-evaluaciones las 44% 18% 87%
entidades cuentan con diferentes fuentes de in-
formación pero principalmente es de las pérdidas
operacionales recopiladas de donde obtienen su No
mayor input, especialmente ahora que cada vez 38%
estos datos son más completos y fiables. No obs- PwC 2002 UC 2004

120 Revista Europea de Dirección y Economía de la Empresa, vol. 16, núm. 2 (2007), pp. 111-128
ISSN 1019-6838
Fernández Laviada, A.; Martínez, F.J. El riesgo operacional como desafío...

Todas esas bases están recogiendo datos de aunque sería más correcto afirmar que se han
manera efectiva, siendo la captura de los mis- ocultado deliberadamente.
mos, tanto manual como automatizadamente, Y entre las ventajas que les aporta disponer
mediante sistemas propios de la entidad. En la de dicha base, destacar que con ella no sólo
recogida de los datos, y para una mejor ges- conseguirían un benchmarking orientativo para
tión cualitativa y cuantitativa del RO, todas las su gestión, sino que les permitiría completar sus
entidades clasifican las pérdidas en función de bases internas y con ello mejorar sus modelos,
las diferentes unidades de negocio y por tipo de además de identificar áreas de riesgo que a lo
evento, algo que hace dos años, según los datos mejor hasta entonces no habían sido considera-
de PwC, sólo hacían el 36% de las entida- das por la entidad.
des. Y para el 1 de enero de 2007 la mayoría En consecuencia todas estas ventajas han lle-
contará con más de cuatro años de datos his- vado al 43% de las entidades a formar parte de
tóricos. algún consorcio y a que el 57% restante lo tenga
previsto para un futuro cercano.
Gráfico 16.- ¿De cuántos años será el período histó-
rico de observación de datos con el que contará su Gráfico 17.- ¿Forma su entidad parte de algún con-
entidad el 1 de enero de 2007? sorcio de pérdidas?
5 años Más de 5 años Está previsto Sí Está previsto
25% 25% 19% 12% 57%

4 años 3 años
37% 13% No Sí
69% 43%
PwC 2002 UC 2004
Entre las principales ventajas de contar con
una base de datos interna de RO está, en primer Aunque uno de los hechos que más prima a la
lugar, la posibilidad de analizar los errores, tanto hora de participar en un consorcio son la proxi-
por su frecuencia como por su impacto, así como midad geográfica y de negocio de las participan-
el conocer las causas de los mismos y el poder tes, motivo por el cual los consorcios nacionales
tomar medidas correctoras o mitigadoras de las son los más deseados, no podemos olvidar los
pérdidas. Por eso todas las entidades realizan es- efectos de la globalización a la que se enfrentan
tadísticas periódicas con los datos que recogen y las entidades y que ha hecho que los consorcios
con los fines señalados que acabamos de apun- de nivel mundial, como ORX o FIRST, hayan
tar. ganado en interés.
Como señalábamos uno de los aspectos en los
que el CSBB ha puesto más énfasis ha sido en la Gráfico 18.- ¿En qué tipo de consorcio de pérdidas
utilización de datos externos como medio para participa o estaría dispuesto participar?
completar los proporcionados por las bases in-
ternas. Y precisamente la necesidad de esos da- De ámbito europeo 10%
tos es lo que hace que todas las entidades
consideren apropiado crear una base de datos de PwC2002

pérdidas externas para todo el sector finan- De ámbito nacional 90%

ciero.
Entre los inconvenientes para lograr este ob-
jetivo que más apuntan las encuestadas destaca De ámbito mundial 50%
la gran heterogeneidad de los participantes y el
elevado coste que supone su elaboración, ambos 13%
UC2004 De ámbito europeo
por encima de hacer público los fallos o debili-
dades internas de la gestión, factores que siem- De ámbito nacional 63%
pre han sido determinantes para no publicarse,

Revista Europea de Dirección y Economía de la Empresa, vol. 16, núm. 2 (2007), pp. 111-128 121
ISSN 1019-6838
Fernández Laviada, A.; Martínez, F.J. El riesgo operacional como desafío...

REPORTING los requerimientos legales sobre RO. Todas las


Dentro de todo marco de gestión de RO debe entidades les remiten información sobre los in-
estar siempre incluida la función de reporting, dicadores de RO y de las auto-evaluaciones.
que para ser eficaz debe asegurar que la infor- • Departamento de auditoria interna: En todas las
mación es comunicada con un grado de detalle entidades reciben información de las estadísti-
diferente según su receptor. Lógicamente las cas de pérdidas, pero después al tener un papel
áreas de negocio y riesgos, junto al departamen- de supervisión no obtiene tanta información de
to de auditoría interna, recibirán más informa- manera directa, salvo que lo soliciten en el de-
ción y más detallada que la alta dirección y el sarrollo de sus funciones.
Consejo de Administración, pero todos deben
recibir informes sobre la situación del RO en la En relación a quién elabora esos informes y
entidad. la frecuencia con la que se entregan, son varios
Muestra de la importancia de esta función es los departamentos implicados, aunque mayorita-
que en las entidades encuestadas prácticamente riamente recae sobre tres: el área de RO, las
todas las partes reciben algún tipo de informa- áreas de soporte y las áreas de negocio, siendo
ción. No obstante, el hecho de que todavía estén su elaboración fundamentalmente desde trimes-
inmersas en un proceso de desarrollo hace que tral a mensual según la información de que se
dos de las entidades estén desarrollando los as- trate y a quién vaya dirigida.
pectos que preguntábamos y por lo tanto toma- Por último, quisimos conocer el grado de
remos los resultados a efectos meramente orien- preparación de las entidades para cumplir con
tativos. los requerimientos de divulgación del Pilar III de
Aunque son muchas las partes implicadas y Basilea. Aunque sólo una cuarta parte está ya
los diferentes tipos de información emitida en preparada para responder a esas exigencias, to-
una y otra dirección sí queremos destacar algu- das afirman que lo estarán para el 2007. Y un
nos de los resultados que consideramos más re- aspecto como la frecuencia con la que será su-
levantes. ministrada aún no ha sido decidido por la mayo-
ría, pero quien ya lo ha hecho afirma que lo hará
• Consejo de Administración: Al menos la mitad trimestralmente.
de las entidades indicaron que envían regular-
mente información de RO a su Consejo de
Administración, en particular resúmenes de las EXIGENCIAS DE CAPITAL
estadísticas de pérdidas y como mínimo el ca- Una de las novedades del NACB es precisa-
pital asignado por RO. mente la inclusión del RO entre los requerimien-
• Alta Dirección: Todas las entidades mantienen tos de capital regulatorio del mismo modo que se
informada a la Alta Dirección del RO. Alguna hacía ya con el riesgo de mercado y crédito. So-
sólo del capital asignado o de las estadísticas bre el tema ha existido, y aún persiste, una gran
de pérdidas pero la mayoría también les infor- controversia, y por ello quisimos conocer la opi-
ma de las mayores pérdidas sufridas y de las nión de las entidades españolas líderes del sector
tendencias de los indicadores. financiero. La mayoría, un 88%, está de acuerdo
• Áreas de negocio: A diferencia de los dos ante- con esta inclusión aunque para la mitad siguen
riores no reciben tan a menudo el nivel de capi- siendo excesivas las exigencias previstas y tan
tal asignado por este riesgo, pero sí reciben in- sólo un 12.5% se mantiene contraria al creer que
formación sobre los indicadores de RO, las estas pérdidas debieran tratarse mediante provi-
mayores pérdidas y los planes de acción dise- siones y nunca mediante capital.
ñados para la mejor gestión de este riesgo. FitchRatings revelaba, en su estudio de abril
• Dirección de riesgos: Son los principales re- de 2004, que la mayoría de las entidades, un
ceptores de la información y junto al departa- 75%, tratarían de implantar el enfoque avanzado
mento de auditoría interna los únicos que reci- propuesto por Basilea. Un resultado que cierta-
ben, en al menos uno de los casos, listados con mente ya esperaban puesto que las encuestadas

122 Revista Europea de Dirección y Economía de la Empresa, vol. 16, núm. 2 (2007), pp. 111-128
ISSN 1019-6838
Fernández Laviada, A.; Martínez, F.J. El riesgo operacional como desafío...

estaban entre las mayores entidades mundiales y esta información como análisis coste-beneficio
no tenían por qué reflejar la intención de firmas antes de tomar determinadas medidas, para iden-
más pequeñas tificar puntos críticos de la dirección y de los
Igualmente, en nuestro caso, de los tres enfo- gestores e, incluso, para revisar sus pólizas de
ques que ofrece Basilea para el cálculo del capi- seguros.
tal por RO ninguna optará por el básico y la ma-
yoría se dirige hacia un enfoque avanzado, fun- Tabla 3.- ¿Cuáles de los siguientes criterios cualitati-
damentalmente mediante la aproximación por vos impuestos por Basilea cumple ya su entidad?
distribución de pérdidas (LDA). Y en las entida- Los 10 principios del documento “Sound Practices” 75%
des donde estaba ya decidida su implantación se- Tener un sistema de gestión del RO que asigne responsa-
50%
bilidades claras a la unidad de gestión del RO.
rá total. Datos que coinciden con la voluntad Tener un sistema de evaluación del RO perfectamente in-
manifestada por más de la mitad de las entidades tegrado dentro de los procesos de gestión del riesgo de la 63%
encuestadas en el estudio de PwC de 2002. entidad.
Analizar de forma sistemática la información sobre el
No obstante, es posible que una vez publica- RO, incluidas las perdidas relevantes sufridas en cada una 63%
do el texto definitivo el 26 de junio de 2004 se de las líneas.
haya producido algún cambio o que la entidad Contar con un sistema periódico de información sobre las
que aún no se había decidido cuando se realizó exposiciones al RO, incluidas las pérdidas operacionales
25%
más relevantes, dirigido al Consejo de Administración, la
el estudio ya haya optado por uno. Alta Dirección y las diferentes unidades de negocio.
Contar con un sistema periódico de información sobre el
Gráfico 19.- ¿ Qué método/s tiene previsto establecer historial de pérdidas por RO, dirigido al Consejo de Ad-
38%
ministración, la Alta Dirección y las diferentes unidades
su entidad? de negocio.
No decidido Estándar Definir procedimientos destinados a adoptar las acciones
13% 13% necesarias según la información aportada por los infor- 38%
mes de la gestión del RO.
Documentar correctamente todo el sistema de gestión del
63%
RO.
Validar y examinar de forma periódica e independiente
Avanzado los procesos de gestión y el sistema de evaluación del 25%
74% RO.
El CSBB exige además que se cumplan una Que los auditores internos y/o externos realicen exámenes
periódicos de los procesos de gestión y de los sistemas de 13%
serie de criterios cualitativos para que se puedan evaluación del RO.
aplicar los diferentes métodos. La mayoría cum- Implantar técnicas que asignen los ingresos brutos o el
ple con los diez principios del documento de capital, según el método, a las diferentes líneas de nego-
50%
cio y que generen incentivos para la mejora de la gestión
“sound practices” pero tan sólo una afirma cum- del RO en toda la entidad.
plir con todos los requisitos cualitativos estable-
cidos por Basilea. Y mientras que otras dos casi Gráfico 20.- Una vez que el RO haya sido cuantifi-
llegan a dar cumplimiento a la mayoría, otra de cado ¿para que será utilizada la información en su en-
las entidades declaraba no tener aún ninguno cu- tidad?
bierto.
Cálculo de capital
Por lo tanto, este es un aspecto al que las en- económico por RO
37,5% 12,5% 12,5%

tidades, en su mayoría, deberán dedicar más Eval. y revisión de las pólizas


de seguros de la entidad
25% 25%
atención en el futuro si quieren aplicar el método Análisis coste-beneficio
25% 25%
avanzado elegido. Un resumen del grado de de las acciones a tomar

cumplimiento de estos criterios se recoge en la Evaluar el entorno


de control existente
12,5%

tabla 3. Identificar puntos críticos


25% 12,5%
♦ MÉTODOLOGÍA DE CÁLCULO. Des- para dirección y gestores

pués, una vez que las entidades hayan adoptado


1ª aplicación 2ª aplicación 3ª aplicación
el método de cálculo más apropiado a sus carac-
terísticas, los resultados de la cuantificación del
RO serán utilizados no sólo para cumplir con Por lo que se refiere a la medición del RO y
Basilea, aplicación prioritaria para el 37.50% de los problemas que esto les plantea a las entida-
las entidades, sino que todas prevén hacer uso de des, aunque en primer lugar está la complejidad

Revista Europea de Dirección y Economía de la Empresa, vol. 16, núm. 2 (2007), pp. 111-128 123
ISSN 1019-6838
Fernández Laviada, A.; Martínez, F.J. El riesgo operacional como desafío...

de las metodologías, es precisamente la falta de entidades aunque finalmente Basilea decidiera


datos, tanto internos como externos, lo que más eliminar el requerimiento de capital por este
dificulta en la actualidad la correcta cuantifica- riesgo, ya que se ha demostrado en este tiempo
ción de este riesgo. Situación que pone de mani- que su correcta gestión es necesaria para el buen
fiesto, nuevamente, la necesidad de desarrollar funcionamiento de cualquier entidad.
una base de datos de pérdidas internas y de com- En segundo lugar, entre las ventajas que es-
pletar la información con pérdidas externas, y peran obtener de la gestión correcta y completa
que coincide plenamente con la situación mani- del RO, no sólo está el reducir las pérdidas por
festada por PwC en 2002. fallos operacionales, que sí es la principal venta-
ja para el 50% de las encuestadas, o cumplir con
Gráfico 21.- ¿Cuáles son los mayores problemas a las exigencias regulatorias, sino también reducir
los que se enfrenta a la hora de realizar esta cuantifi- riesgos de control y mejorar la calidad de los
cación? servicios.
Complejidad de la metodología 37,5% 12,5% 12,5%
Gráfico 22.- ¿Qué ventajas espera obtener de la ges-
Falta de software adecuado 25%
tión correcta y completa del riesgo operacional?
Incrementar el 38%
Falta de datos externos 12,5% 25% conocimiento del RO
Obtener información
completa y consistente 63%
Falta de datos internos 25% 12,5% 12,5% del RO
Optimizar el gasto en 38%
control del RO
Primer problema Segundo problema Tercer problema Mejorar la estimación
25%
del RO
Reducir las pérdidas por 100%
♦ SEGUROS. Por último, y en relación a la fallos operacionales

posibilidad que tienen las entidades de reducir Reducir riesgos de control 75%

los requerimientos de capital por RO a través del Cumplir la normativa y


63%
efecto mitigador del riesgo que proporcionan los requerimientos de Basilea

seguros, tan sólo quisimos abordar dos cuestio- Mejorar la calidad de


nuestros servicios
50%

nes: si les parecía o no correcto incluir esta posi- Proteger el valor de


bilidad en los cálculo de capital y qué relación los accionistas
38%

existía entre las áreas de seguros y de gestión del


RO de sus entidades.
En tercer lugar, el principal reto al que deben
En cuanto a la primera, destacar que todas las
enfrentarse las entidades encuestadas es el de in-
entidades están conformes con esta posibilidad
troducir el RO en la cultura del riesgo de la enti-
aunque la mitad considera que aún podrían ser
más flexibles. dad, algo que como vimos es clave para el éxito
Y en relación al grado de integración entre del marco de gestión del RO. Motivar a la direc-
ambas áreas y sus políticas señalar que en la ma- ción y a la plantilla, reorganizar la estructura y
yoría sigue sin existir tal integración aunque al gestionar el RO según las políticas y planes que
menos ahora, el 63% tiene previsto que se haga previamente se hayan desarrollado al efecto son
en fases posteriores, con lo que la situación es igualmente problemas de difícil solución pero vi-
bastante similar a la descrita hace dos años. tales para garantizar todo el proceso.
Para lograr estos retos, las entidades apuntan
mayoritariamente a la impartición de cursos de
OTROS ASPECTOS formación a los diferentes responsables y la ela-
Como cierre del cuestionario hicimos las pre- boración de un manual detallado que sirva de
guntas cuyas respuestas resumimos a continua- guía como principales medidas a tomar.
ción. Finalmente, les pedimos que se autoevaluaran
En primer lugar, destacar que todas, sin ex- y al respecto podemos decir que la media está en
cepción, seguirían con el proceso iniciado en sus el aprobado, con un 5.25, aunque las calificacio-

124 Revista Europea de Dirección y Economía de la Empresa, vol. 16, núm. 2 (2007), pp. 111-128
ISSN 1019-6838
Fernández Laviada, A.; Martínez, F.J. El riesgo operacional como desafío...

nes son realmente dispersas y merecedoras de en la gestión del RO y, en consecuencia, en poco


una última reflexión. tiempo se han alcanzado importantes avances,
pudiendo afirmar que en líneas generales se en-
Gráfico 23.- ¿Cuál considera que es el mayor reto cuentra al nivel de los principales sistemas fi-
para su entidad? nancieros de otros países. No obstante, dentro de
Concienciar a la dirección las entidades líderes españolas también se apre-
del interés y necesidad
de gestionarlo
25%
cian diferencias, ya que mientras algunas han
Introducir el RO en la percibido rápidamente las ventajas que esta ges-
cultura del riesgo de la
entidad
100%
tión les va a reportar, asignando recursos y me-
Conseguir un lenguaje dios suficientes, otras aún están más impulsadas
25%
común de RO
por los requerimientos legales y no le dedican
Conseguir recursos
suficientes para su correcta 38%
toda la atención necesaria.
implantación Segundo. No podemos negar que el origen
Reorganizar la estructura
para incluir el RO en toda 50%
del creciente interés demostrado por este riesgo
su extensión está en las exigencias de capital de Basilea, con
Motivar a la dirección y
toda la plantilla para su 63% las que la mayoría de las entidades, aun siendo
composición excesivas, están conformes. Sin embargo, todas
Gestionar el RO según los
planes y políticas previstos 50% seguirían con sus procesos en este ámbito, aún
en el caso de que Basilea se hubiese retractado,
porque se ha comprobado que es necesario y
Podemos distinguir tres grupos diferenciados, ayuda a la creación de valor de las entidades.
primero, los que se dan una calificación sobresa- Tercero. Introducir de forma generalizada el
liente, seguros de su desarrollo y avance, segun- RO en la cultura de las organizaciones será el
do, los que consideran que simplemente están en principal reto al que deberán enfrentarse las en-
un nivel aceptable pero no destacable y, por úl- tidades que quieran implantar con éxito un mar-
timo, los que ni siquiera se dan el aprobado. co completo de gestión del RO. Sin embargo, la
Si volvemos a mirar en cada una de ellas el gestión correcta y completa de este riesgo no só-
personal que tienen dedicado a la implantación lo les servirá para cumplir con la normativa y re-
de este proceso, directa o indirectamente, a gulación vigente sino que les permitirá, además,
tiempo completo o parcial, no es de extrañar que reducir las pérdidas por fallos operacionales, los
aquellas que se ven más seguras sean las que riesgos de control y mejorar la calidad de los
más medios han dedicado y más seriamente se servicios, lo que finalmente redundará en una
han tomado la necesidad de avanzar en este ries- mayor protección del accionista.
go como previamente se hiciera en otros riesgos. Cuarto. En la actualidad todas las entidades
Sólo cabe esperar que en el futuro sigan tra- encuestadas ya han adoptado la definición de RO
bajando con el mismo interés y que aquellas que propuesta por Basilea, aunque la clasificación de
al principio tal vez sólo buscaban dar cumpli- eventos y la división por líneas de negocio sigue
miento a las exigencias legales descubran real- planteando problemas a la hora de su implanta-
mente las ventajas y beneficios que gestionar el ción en la práctica. Las pérdidas operacionales
RO puede aportar, y de hecho aporta, a todas las por “ejecución, entrega y gestión de procesos”,
entidades. junto con los “fraudes externos e internos” son
las categorías más frecuentes y de mayor impac-
to para la mayoría de las encuestadas. Mientras
CONCLUSIONES que la “banca minorista”, “banca comercial” y
Quisiéramos concluir este trabajo destacando “negociación y ventas” son las tres líneas de ne-
los aspectos que, a nuestro juicio, resumen la si- gocio más afectadas por pérdidas operacionales.
tuación actual del sector financiero español en la Quinto. Al menos la mitad de las entidades ya
gestión del RO. han introducido cambios para incorporar la ges-
Primero. En los últimos años el sistema fi- tión del RO dentro de su estructura, la mayoría
nanciero español ha realizado grandes esfuerzos ya cuenta o está desarrollando un área indepen-

Revista Europea de Dirección y Economía de la Empresa, vol. 16, núm. 2 (2007), pp. 111-128 125
ISSN 1019-6838
Fernández Laviada, A.; Martínez, F.J. El riesgo operacional como desafío...

diente encargada de definir las políticas y proce- Consideramos cumplido el objetivo que nos
dimientos para esta gestión, además de diseñar hemos propuesto de conocer el grado de avance
los sistemas de reporting y la metodología más que en estos momentos presentan las entidades
apropiada. financieras españolas con respecto al tratamiento
Sexto. Aunque todas las áreas y departamen- y gestión del RO. Hemos podido constatar el
tos de la entidad están de algún modo implicadas importante desarrollo alcanzado, como conse-
en este marco de gestión integral del RO, el de- cuencia de los esfuerzos realizados, pero tam-
partamento de auditoría interna, relegado a des- bién podemos afirmar que es necesario que las
empeñar un papel supervisor como establecen entidades y todos los implicados sigan trabajan-
los principios de Basilea, sigue ocupando un lu- do intensamente, pues aun es mucho el camino
gar destacado, al ser quien en la mayoría de los que queda por recorrer. Por nuestra parte, segui-
casos impulsó e inició el proceso. remos estudiando y analizando en trabajos poste-
Séptimo. Todas las entidades utilizan diversas riores la evolución que se produzca y los distin-
herramientas, especialmente indicadores de ries- tos aspectos vinculados a la futura implantación
go, auto-evaluaciones y bases de datos de pérdi- y gestión del RO.
das internas, siendo estas últimas imprescindi-
bles para la correcta medición del RO. En gene-
ral, la información que se obtiene de ellas es em- NOTAS
pleada no sólo para cuantificar el capital sino
también para ayudar a la gestión diaria de las en- 1. Financiado por la Fundación Marcelino Botín a
tidades, al permitir mediante las estadísticas ob- través de una de sus Becas de Post-Grado.
2. Véase Jiménez Rodríguez y Martín Marín (2005),
tenidas analizar las causas de las pérdidas, tomar
Nieto Giménez-Montesinos (2005), Gutiérrez Ló-
medidas correctivas y revisar las políticas esta- pez (2005), Arcenegui Rodrigo y Molina Sánchez
blecidas. (2004), Cabedo et al. (2001) y López Torres
Octavo. La necesidad de datos, tanto internos (2001).
como externos, que permitan completar las bases 3. Creada en 1985 con el nombre de International
de datos para cuantificar correctamente el RO ha Swap and Dealers Association, puede consultarse
llevado a las entidades a colaborar o formar parte a través de su página web: http:// www.isda.org
de diferentes consorcios, tanto de ámbito nacio- todo lo relativo a esta actividad.
nal como mundial, dado el entorno global en el 4. En la actualidad Risk Management Association.
que se mueven cada vez más las entidades finan- 5. La división Global Risk Management Solutions
cieras. (GRMS) dentro de la cual la unidad Financial
Risk Management (FRM) se ocupa del sector fi-
Noveno. La función de información es vital
nanciero.
para la correcta gestión del RO, por lo que todas 6. El perfil medio de las entidades que participaron
las entidades encuestadas ya han empezado a fue el de una organización con un número medio
remitir información sobre RO a la Alta Direc- de 1.125 oficinas y 8.330 empleados (PwC, 2002,
ción y al Consejo, además de facilitar una infor- p. 6).
mación más detallada y completa al resto de los 6 Cuestionario disponible a través de los autores.
responsables de las áreas de negocio, soporte y 7. Dado el planteamiento del trabajo, y sobre todo la
riesgos. petición expresa de confidencialidad de las enti-
Décimo. Pendientes de la publicación defini- dades colaboradoras, no podemos identificarlas,
tiva del Acuerdo de Capital, a la fecha de reali- pero su representatividad en el sistema financiero
zación de este estudio, la mayoría de las entida- español y el desarrollo posterior del sector han
puesto de manifiesto la validez de sus respuestas.
des se había decidido por el enfoque avanzado, y
Por ello, queremos nuevamente agradecerles a to-
a pesar de que algunas todavía lo debían valorar, das ellas su inestimable colaboración, ya que de
la mayoría de ellas lo pensaban implantar total- otro modo este estudio no hubiera podido llevarse
mente. Sin embargo, dado el escaso cumplimien- a cabo con éxito.
to de los requisitos cualitativos, sólo una entidad 8. Véase el informe final realizado por The Risk
los cumplía en su totalidad, las entidades debe- Management Association Progress in Operatio-
rán dedicar más tiempo y recursos a este aspecto nal Risk Management in the US. Banking Industry
si quieren alcanzar los enfoques avanzados. donde en conjunto el 82% de las entidades en-

126 Revista Europea de Dirección y Economía de la Empresa, vol. 16, núm. 2 (2007), pp. 111-128
ISSN 1019-6838
Fernández Laviada, A.; Martínez, F.J. El riesgo operacional como desafío...

cuestadas manifestaron utilizar la definición de FERNÁNDEZ LAVIADA, A.; MARTÍNEZ GARCÍA, F.J.
Basilea (RMA 2003). (2006a): “El riesgo operacional en las entidades fi-
9. Operational Risk Exchange Association (ORX) es nancieras: una aproximación empírica a las Cajas de
un consorcio internacional de datos de pérdidas Ahorros Españolas”, Revista Española de Financia-
operacionales establecido en 2002. Inicialmente ción y Contabilidad, vol. XXXV, núm. 129, pp.
en é participaron 12 firmas de primera línea a ni- 305-330.
vel internacional. Operativo desde 2003 permite FERNÁNDEZ LAVIADA, A.; MARTÍNEZ GARCÍA, F.J.
el intercambio de información de eventos de ma- (2006b): “Bases del marco conceptual del riesgo
nera anónima entre sus miembros, quienes pueden operacional: Fin de una etapa”, VI Jornadas sobre
adoptar, a efectos internos, las definiciones o me- Predicción de la Insolvencia Empresarial. Carmona
todologías que crean oportunas para registrar sus (Sevilla).
pérdidas internas pero cuatrimestralmente deberán FITCHRATINGS (2004a): The Oldest Tale But the Ne-
enviar a ORX los datos siguiendo las definiciones west Story: Operational Risk and the Evolution of
y normas del consorcio, publicadas en su página its Measurement Under Basel II. (Special Report).
web en febrero de 2004, http://www.orx.org . FitchRatings.
FITCHRATINGS (2004b): Operational Risk Manage-
ment & Basel II Implementation: Survey Results.
BIBLIOGRAFÍA (Special Report). FitchRatings.
FROST, C.; ALLEN, D.; PORTER, J.; BLOODWORTH, P.
ARCENEGUI RODRIGO, J.A.; MOLINA SÁNCHEZ, H. (2001): Operational Risk and Resilience, Unders-
(2004): “La auditoría interna y el riesgo operativo. tanding and Minimising Operational Risk to Secure
Estudio en las Cajas de Ahorros”, Revista de la Aso- Shareholder Value. Oxford: Butterworth Heine-
ciación Española de Contabilidad y Administración mann.
de Empresas, 69, pp.33-37. GUTIÉRREZ LÓPEZ, C. (2005): “El riesgo operacional:
BASEL COMMITTEE ON BANKING SUPERVISION el nuevo reto para el sector financiero”, Revista de
(2002a): The Quantitative Impact Study for opera- la Asociación Española de Contabilidad y Adminis-
tional Risk: Overview of Individual Loss Data and tración de Empresas, 70, pp. 22-27.
Lessons Learned. BIS. JIMÉNEZ RODRÍGUEZ, E.J.; MARTÍN MARÍN, J.L.
BASEL COMMITTEE ON BANKING SUPERVISION (2005): “El nuevo acuerdo de Basilea y la gestión
(2002b): Operational Risk Data Collection Exercise del riesgo operacional”, Universia Business Review,
– 2002. BIS. 7, pp. 54-67.
BASEL COMMITTEE ON BANKING SUPERVISION LÓPEZ TORRES, J.L. (2001): “El riesgo operacional en
(2003): The 2002 Loss Data Collection Exercise for el entorno del nuevo acuerdo de Basilea”, Perspec-
Operational Risk: Summary of the Data Collected. tivas del Sistema Financiero, 72, pp- 67-72.
BIS. NIETO GIMÉNEZ-MONTESINOS, M. (2005): “El trata-
BRITISH BANKERS ASSOCIATION; PRICEWATERHOU- miento del riesgo operacional en Basilea II”, Estabi-
SECOOPERS; INTERNATIONAL SWAPS AND DERIVA- lidad Financiera, núm. 6.
TIVES ASSOCIATION; ROBERT MORRIS ASSOCIATES ORX (2004): ORX Reporting Standards. ORX.
(1999): Operational risk: The Next Frontier. BBA, POWER, M. (2005): “The Invention of Operational
PwC, ISDA and RMA. Risk”, Review of International Political Economy,
CABEDO, J.D., GARCÍA, F.; MOYA, I. (2001): “El ries- 12, 4, (October), pp. 577-599.
go operacional en las normas del Comité de Basi- PRICEWATERHOUSECOOPERS (2002): Gestión del
lea”, Actualidad Financiera, (noviembre), pp.15-24. riesgo operacional en las entidades financieras es-
FERNÁNDEZ LAVIADA, A (2003): Control del riesgo pañolas. PwC.
operacional en las entidades financieras: análisis RISK MANAGEMENT ASSOCIATION (2003): Progress
conceptual y contrastación empírica desde la pers- in Operational Risk Management in the US Banking
pectiva de los derivados. (Tesis doctoral). Universi- Industry. RMA.
dad de Cantabria. SAS (2004): Operational Risk Management in the Fi-
nancial Services Industry. SAS and Incisive Media.

Revista Europea de Dirección y Economía de la Empresa, vol. 16, núm. 2 (2007), pp. 111-128 127
ISSN 1019-6838

You might also like