You are on page 1of 65

JOSE JULIAN PEREZ MERCADO

OFICIAL DE CUBIERTA
•Adquirir una visión general de la componente atmosférica del sistema climático y
sus relaciones con otros sistemas como son el océano.

• Entender el funcionamiento del planeta Tierra como un sistema climático global


que recibe su energía del Sol y que está formado por grandes subsistemas que
interaccionan dando lugar al clima.

• Tener un amplio abanico de conocimientos meteorológicos para mi futura vida


como marino y de toda aquella persona interesada en el tema.

• Adquirir los conocimientos básicos que me permitan identificar y explicar los


fenómenos meteorológicos y climatológicos de mayor importancia en el medio
ambiente.

• Clasificar y reconocer los climas.


Es la ciencia que se ocupa de los fenómenos que
ocurren a corto plazo en las capas bajas de la
atmósfera, o sea, donde se desarrolla la vida de plantas
y animales.

La meteorología estudia los cambios atmosféricos que


se producen a cada momento, utilizando parámetros
como la temperatura del aire, su humedad, la presión
atmosférica, el viento o las precipitaciones. El objetivo
de la meteorología es predecir el tiempo que va a hacer
en 24 o 48 horas y, en menor medida, elaborar un
pronóstico del tiempo a medio plazo.
La Meteorología Marina es la
aplicación de la ciencia y de los
servicios meteorológicos a las
actividades en alta mar, aguas
costeras y aguas interiores.
Contempla a su vez dos
temáticas, la primera enfocada a
la investigación sobre la
interacción entre el océano y la
atmósfera y la segunda
encaminada a suministrar
servicios de pronóstico a los
usuarios que desarrollan
actividades económicas o habitan
en las zonas costeras del país.
Dependiendo de la latitud y de la altura, los cambios
meteorológicos a lo largo del año pueden ser
mínimos, como en las zonas tropicales bajas, o
máximos, como en las zonas de latitudes medias.

En estas zonas se pueden distinguir periodos, que


llamamos estaciones, con características más o menos
parecidas, que afectan a los seres vivos. En general, se
habla de cuatro estaciones: primavera, verano, otoño e
invierno, aunque hay zonas de la Tierra donde sólo
existen dos, la húmeda y la seca (zonas monzónicas).
Inicio H. norte H. sur Días Inclinación
duración
20-21 marzo Primavera Otoño 92,9 0°

21-22 Junio Verano Invierno 93,7 25,5° Norte

23-24 Otoño Primavera 89,6 0°


Septiembre
21-22 Invierno Verano 89,0 23,5° Sur
Diciembre
A causa de las variaciones climáticas que sufre la Tierra, el año está dividido
en cuatro períodos o estaciones. Estas variaciones en el clima son más
acusadas en las zonas frías y templadas, y más suaves o imperceptibles entre
los trópicos. Las cuatro estaciones son: primavera, verano, otoño e invierno.
Las dos primeras componen el medio año en que los días duran más que las
noches, mientras que en las otras dos las noches son más largas que los
días.

Las variaciones se deben a la inclinación del eje terrestre. Por tanto, no se


producen al mismo tiempo en el hemisferio Norte (Boreal) que en el
hemisferio Sur (Austral), sino que están invertidos el uno con relación al
otro.

Mientras la Tierra se mueve con el eje del Polo Norte inclinado hacia el Sol,
el del Polo Sur lo está en sentido contrario y las regiones del primero
reciben más radiación solar que las del segundo. Posteriormente se invierte
este proceso y son las zonas del hemisferio boreal las que reciben menos
calor.
Las cuatro estaciones están determinadas por cuatro
posiciones principales en la órbita terrestre, opuestas dos a
dos, que reciben el nombre de solsticios y equinoccios.
Solsticio de invierno, equinoccio de primavera, solsticio de
verano y equinoccio de otoño.

En los equinoccios, el eje de rotación de la Tierra es


perpendicular a los rayos del Sol, que caen verticalmente
sobre el ecuador. En los solsticios, el eje se encuentra
inclinado 23,5º, por lo que los rayos solares caen verticalmente
sobre el trópico de Cáncer (verano en el hemisferio norte) o
de Capricornio (verano en el hemisferio sur).
El clima es el conjunto fluctuante de las condiciones atmosféricas, caracterizado por
los estados y evoluciones del estado del tiempo, durante un periodo de tiempo y un
lugar o región dados, y controlado por los denominados factores forzantes, factores
determinantes y por la interacción entre los diferentes componentes del denominado
sistema climático (atmósfera, hidrosfera, litosfera, criósfera, biosfera y antropósfera).
Debido a que el clima se relaciona generalmente con las condiciones predominantes
en la atmósfera, este se describe a partir de variables atmosféricas como la
temperatura y la precipitación, denominados elementos climáticos; sin embargo, se
podría identificar también con las variables de otros de los componentes del sistema
climático.
El clima es el resultado de numerosos factores que
actúan conjuntamente. Los accidentes geográficos,
como montañas y mares, influyen decisivamente en sus
características.

Para determinar estas características podemos


considerar como esenciales un reducido grupo de
elementos: la temperatura, la humedad y la presión del
aire. Sus combinaciones definen tanto el tiempo
meteorológico de un momento concreto como el clima
de una zona de la Tierra.
La temperatura atmosférica es el indicador de la cantidad de energía
calorífica acumulada en el aire. Aunque existen otras escalas para otros
usos, la temperatura del aire se suele medir en grados centígrados (ºC) y,
para ello, se usa un instrumento llamado "termómetro".

La temperatura depende de diversos factores, por ejemplo, la


inclinación de los rayos solares. También depende del tipo de sustratos
(la roca absorbe energía, el hielo la refleja), la dirección y fuerza del
viento, la latitud, la altura sobre el nivel del mar, la proximidad de masas
de agua.

Sin embargo, hay que distinguir entre temperatura y sensación térmica.


Aunque el termómetro marque la misma temperatura, la sensación que
percibimos depende de factores como la humedad del aire y la fuerza
del viento. Por ejemplo, se puede estar a 15º en manga corta en un lugar
soleado y sin viento. Sin embargo, a esta misma temperatura a la sombra
o con un viento de 80 km/h, sentimos una sensación de frio intenso.
La humedad indica la cantidad de vapor de agua presente en el aire.
Depende, en parte, de la temperatura, ya que el aire caliente contiene
más humedad que el frio.

La humedad relativa se expresa en forma de tanto por ciento (%) de


agua en el aire. La humedad absoluta se refiere a la cantidad de vapor
de agua presente en una unidad de volumen de aire y se expresa en
gramos por centímetro cúbico (gr/cm3).

La saturación es el punto a partir del cual una cantidad de vapor de


agua no puede seguir creciendo y mantenerse en estado gaseoso, sino
que se convierte en líquido y se precipita.

Para medir la humedad se utiliza un instrumento llamado


"higómetro".
La presión atmosférica es el peso de la masa de aire por cada unidad de
superficie. Por este motivo, la presión suele ser mayor a nivel del mar que en
las cumbres de las montañas, aunque no depende únicamente de la altitud.

Las grandes diferencias de presión se pueden percibir con cierta facilidad.


Con una presión alta nos sentimos más cansados, por ejemplo, en un
bochornoso día de verano. Con una presión demasiado baja (por ejemplo, por
encima de los 3.000 metros) nos sentimos más ligeros, pero también
respiramos con mayor dificultad.

La presión "normal" a nivel del mar es de unos 1.013 milibares y disminuye


progresivamente a medida que se asciende. Para medir la presión utilizamos
el "barómetro".

Las diferencias de presión atmosférica entre distintos puntos de la corteza


terrestre hacen que el aire se desplace de un lugar a otro, originando los
vientos. En los mapas del tiempo, los distintos puntos con presiones similares
se unen formando unas líneas que llamamos "isobaras“.
La radiación solar es la energía
emitida por el sol, que se propaga
en todas las direcciones a través
del espacio mediante ondas
electromagnéticas. Esa energía es
el motor que determina la
dinámica de los procesos
atmosféricos y el clima. La
energía procedente del sol es
radiación electromagnética
proporcionada por las reacciones
del hidrógeno en el núcleo del
sol por fusión nuclear y emitida
por la superficie solar.
El Sol emite una gran cantidad de energía a
la Tierra, de la cual sólo un 7% corresponde a
la radiación ultravioleta (UV). Esta radiación
ultravioleta (UV) es una forma de energía
radiante invisible que cubre el rango de
longitudes de onda entre los 100 y los 400
nanómetros y usualmente es clasificada en
tres categorías (constituida por longitudes
de onda ascendentes que van desde el UV-C,
UV-B y UV-A) de acuerdo con la longitud de
onda (mientras más corta sea la longitud de
onda de la radiación UV, biológicamente es
más dañina):
UV-A entre 320 y 400 nm
UV-B entre 280 y 320 nm
UV-C entre 100 y 280 nm
El ozono es un gas incoloro e inestable de tres átomos de oxígeno (su formula
química es O3), además, es un oxidante fuerte, muy fácil de producir pero a la vez
muy frágil y fácil de destruir. Este gas reacciona fácilmente con muchos compuestos
químicos y es explosivo en pequeñas cantidades.

El ozono es uno de los muchos gases constituyentes de la atmósfera y juega un papel


importante en el sistema climático. Aunque su proporción es pequeñísima en
comparación con otros componentes, ya que existe una relación de 120 moléculas de
ozono por cada 10 millones de moléculas de aire (valor aproximado en el lugar de
máxima concentración dentro de la capa de ozono) en la alta atmósfera, es de vital
importancia porque protege la vida del planeta, absorbiendo los rayos ultravioleta
(particularmente la radiación UV-B en el rango de 290 a 320 nanómetros de longitud
de onda) procedentes del sol, los cuales son peligrosos para la salud humana, para
los animales y las plantas, incluyendo al plancton marino, contribuyendo así al
calentamiento de la estratósfera, que se manifiesta con el aumento de la temperatura
con la altura, lo cual genera resistencia a los movimientos verticales. Por otro lado, el
ozono es un gas de efecto invernadero (GEI) que absorbe y emite radiación infrarroja
con lo cual contribuye al calentamiento de la tropósfera y en la baja atmósfera y sobre
superficie, el ozono se constituye en un contaminante nocivo para la salud.
El término “lluvia ácida”, se refiere a uno de los fenómenos
relacionados con el cambio global de la atmósfera, el cual se ha
generado a partir de la interacción entre la emisión y formación de
gases contaminantes, y la dinámica atmosférica. La lluvia ácida se
caracteriza principalmente por la formación de precipitaciones
con un carácter de acidez (que incluyen la lluvia, la nieve y la
depositación de partículas), las cuales causan efectos importantes
sobre el medio.
Se denomina tiempo al conjunto de
variaciones a corto plazo que
experimentan la temperatura, la
nubosidad, la precipitación y los
vientos en la atmosfera. Se aplica el
termino precipitación al agua, ya
sea en estado liquido o solido, que
llega a tierra procedente de la
atmosfera. Lo son pues, la lluvia y la
nieve, pero también el granizo, el
rocío y la escarcha, aunque, en
general, solo las dos primeras
constituyen significativamente a las
cantidades totales de precipitación.
Las lluvias se clasifican habitualmente el tres tipos principales:
Convectiva, ciclónica y orográfica, dependiendo de cómo haya sido la
elevación del aire que haya dado lugar a la formación de nubes.
La precipitación de tipo
convectivo es la que se da
asociada a los cúmulos y
cumulonimbos , nubes que se
forman habitualmente por el
avance de frentes fríos , en bajas
térmicas, en las gotas frías y en
los ciclones tropicales. Se trata
de un tipo de precipitación a
menudo en forma de granizo o
piedra, de tipo tormentoso, con
intensidades altas e irregulares y
duraciones cortas ( excepto los
huracanes), y a veces con mucha
actividad eléctrica.
La precipitación de tipo ciclónico
es la que esta asociada al ascenso
del aire por convergencia en una
zona de bajas presiones. Este tipo
de precipitaciones presenta
intensidades moderadas y
regulares , y duraciones mas
largas que en el caso anterior en
áreas mucho mas extensas.

La precipitación orográfica es la
que se produce cuando el ascenso
del aire ha sido provocado por la
orografía. En general, el efecto
de la orografía es aumentar la
precipitación en los sistemas
convectivos y en los ciclónicos.
TORMENTAS
Pueden dividirse en dos grupos:
tormentas locales y tormentas
organizadas. Las tormentas locales tienen
una duración corta, de una o dos horas.
Estos fenómenos se producen por los
cumulonimbos, nubes que se desarrollan
cuando la atmósfera está inestable. Se
entiende por atmósfera inestable aquella
situación en la que se producen
importantes movimientos del aire en
sentido vertical. Esto pasa cuando el aire
es más frío de lo habitual en la parte más
alta de la troposfera, lo que suele ocurrir
cuando pasa un frente frío o bien en
situaciones de bajas presiones.
Se desarrolla según el siguiente proceso:
•El calentamiento de la tierra origina una corriente de aire ascendente. Este aire se
enfría progresivamente hasta condensarse con la consiguiente formación de pequeños
cumulus.
•A diferencia de las situaciones de buen tiempo, la corriente ascendente no se para y la
nube crece rápidamente en sentido vertical.
•El cumulus continúa creciendo en sentido vertical y está a punto de convertirse en una
nube de tormenta. Cuando alcanza la isoterma de los ºC, las cargas eléctricas que se han
ido generando comienzan a ordenarse dentro de la nube. La parte superior será positiva
y la inferior negativa. Además, se comienzan a formar dentro de la nube grandes gotas o
partículas de granizo. La fuerte corriente ascendente los mantiene en suspensión.
•El cumulus se ha transformado ya en un cumulunimbus que puede llegar a tener hasta
10 km de altura. En su parte superior la temperatura puede ser muy baja (-20ºC o -30ºC).
Esto favorece una intensa sobresaturación del aire que origina una gran cantidad de
gotas de lluvia o de granizo, algunas de las cuales caerán en forma de precipitación.
•La nube de tormenta se desgasta al desaparecer la corriente ascendente que la
alimentaba. La tierra ya se ha enfriado y fuertes corrientes descendentes de viento
provocan chubascos de gran intensidad que acaban por deshacer la nube. La tormenta
ha acabado y algunas capas de cirrus o cirroestratus serán los únicos restos de este
extraordinario fenómeno de la naturaleza.
Las tormentas formadas por convección o por un frente frío suelen
tener una duración corta ya que, como hemos visto, cuando la tierra
se enfría la tormenta se acaba.
Las depresiones también pueden formar tormentas cuya duración
suele ser más larga ya que se acostumbran a formar numerosos
cumulunimbus.
En las zonas del litoral también se producen formaciones de
tormentas que pueden llegar a ser muy virulentas ya que las
corrientes ascendentes tardan mucho en pararse porque el agua del
mar se enfría muy lentamente. Y eso hace que se formen nubes de
tormenta durante varias horas.
Uno de los hechos más característicos de las tormentas es el
acompañamiento a las mismas de fenómenos eléctricos: rayos,
relámpagos y truenos.
Durante el transcurso de una tormenta se favorece la formación de iones
particulares que contiene la atmósfera. Los iones positivos en la parte alta
y los negativos en la parte baja de la nube. Además, la tierra también se
carga de iones positivos. Todo ello genera una diferencia de potencial de
millones de voltios que acaban originando fuertes descargas eléctricas
entre distintos puntos de una misma nube, entre nubes distintas o entre la
nube y la tierra: a dicha descarga eléctrica la denominamos rayo. El
relámpago es el fenómeno luminoso asociado a un rayo, aunque también
suele darse este nombre a las descargas eléctricas producidas entre las
nubes.
El calor producido por la descarga eléctrica calienta el aire y lo expande
bruscamente y después se contrae al enfriarse, dando lugar a ondas de
presión que se propagan como ondas sonoras. Estas ondas sonoras que se
propagan a la velocidad del sonido (300 m/s) son el denominado trueno.
Puede determinarse, de una forma aproximada, la distancia en metros a la
que se produce la descarga eléctrica, para ello se multiplica por 300 los
segundos transcurridos entre el momento de producirse el rayo y el
momento que oímos el trueno.
TORNADO
El Tornado es un fenómeno
meteorológico que se produce a
raíz de una rotación de aire de
gran intensidad y de poca
extensión horizontal, que se
prolonga desde la base de una
nube madre, conocida como
Cumulonimbos. La base de esta
nube se encuentra a altitudes por
debajo de los 2 Km y se
caracteriza por su gran desarrollo
vertical, en donde su tope alcanza
aproximadamente los 10 Km de
altura hasta la superficie de la
tierra o cerca de ella.
La nube es de color blanco o gris claro mientras que el
embudo permanece suspendido de la nube madre, cuando
éste hace contacto con la tierra se presenta de un color gris
oscuro o negro debido al polvo y escombros que son
succionados del suelo por el violento remolino.
Estos torbellinos llamados también chimeneas o mangas,
generalmente rotan en sentido contrario a las manecillas del
reloj, en el hemisferio Norte. En algunas ocasiones se
presentan como un cilindro, cuyo diámetro varía entre la
base de la nube y la superficie del suelo y su diámetro
inferior es aproximadamente de 1 Km alcanzando algunas
veces los 100 metros.
a. El tornado se forma en conexión con una nube de tormenta, llamada
“Cumulonimbu”.
b. El tornado aparece en la base de la nube “Cumulunimbu” y se extiende
hacia abajo hasta alcanzar el suelo en forma de embudo o manga.
c. Comúnmente un tornado va acompañado por lluvia, granizo, relámpagos,
rayos y de la oscuridad propia de las nubes.
d. Una característica común, es la baja presión atmosférica (fuerza por
unidad de área, ejercida sobre una superficie determinada) en el centro de la
tormenta y enorme velocidad del viento.
e. El efecto de destrucción de un tornado es mayor en el área afectada que el
de un huracán, debido a que la energía por liberar se concentra un área más
pequeña. Por tanto el efecto de la velocidad del viento y la baja presión hace
que el daño sea mayor.
f. Los tornados se desplazan aproximadamente a 50 Km/h, sin embargo,
algunos se mueven lentamente, mientras otros alcanzan velocidades de 100
Km/h o más. La trayectoria promedio de un tornado es de unos 400 metros
de ancho y unos cuantos kilómetros de largo. Algunas de éstas han alcanzado
valores excepcionales de 1.6 Km de ancho y 480 Km de largo.
La chimenea del tornado es una nube constituida por gotitas de agua
mezcladas con polvo y partículas de desechos, las cuales nacen en las bases de
las nubes y descienden hacia la superficie.
En las proximidades del suelo el polvo y los desechos son muy abundantes,
debido a la baja presión atmosférica existente que contribuye a que el aire
circule hacia dentro y ascienda.
En el interior, en las paredes que forma el ojo del tornado normalmente se
producen descargas eléctricas. Algunos tornados están constituidos por una
sola chimenea, mientras que otros forman un sistema de varias chimeneas.
Unos duran pocos segundos, otros persisten durante decenas de minutos.
La mayoría se producen por la inestabilidad atmosférica, debido al
calentamiento diurno y la gran cantidad de humedad o frentes fríos (línea de
separación entre dos masas de aire una fría y seca y, la otra, cálida y húmeda, se
caracteriza por que la masa de aire frío va seguida de la masa de aire cálido) que
se encuentran activos, agrupados en familias o en conexión con tormentas
aisladas de gran intensidad.
El desplazamiento de los tornados tiende a ser dominado por el movimiento de
la tormenta o nube madre, a veces se observa que el embudo se libera de la
base moviéndose en forma errática.
Los tornados se producen generalmente en la zona de
transición entre las masas de aire polar y tropical, entre los 20º
y 50º de latitud, a ambos lados del ecuador, siendo poco
frecuentes en latitudes mayores de 60º, donde el aire no
contiene la humedad y la temperatura necesaria para la
formación de este fenómeno y en la región ecuatorial, donde la
atmósfera no tiene la inestabilidad necesaria para desarrollar
una tormenta severa de tal magnitud.
Cuando el tornado se origina en el océano o en el mar en vez de formarse en
tierra firme, se denomina: Tromba Marina.
Las trombas o mangas marinas siguen una dirección vertical, aunque
algunas veces se inclinan o encorvan. Su color es gris oscuro, sin embargo,
cuando las ilumina el sol toman un color amarillento.

Después de formadas aumentan su tamaño.


Su duración por lo general es de media hora.
Antes de desaparecer empiezan por
disminuir su diámetro hasta que el mar
recobra su aspecto normal.
Estos torbellinos de agua y viento son muy
frecuentes en el Océano Pacífico, en las
cercanías de la China y del Japón. Sus efectos
son muy desastrosos, en especial para la
embarcación pequeña
HURACANES
un huracán es un viento muy
fuerte que se origina en el mar,
que gira en forma de remolino
acarreando humedad en enormes
cantidades, y que al tocar áreas
pobladas, generalmente causa
daños importantes o incluso
desastres.
Los huracanes se clasifican de acuerdo a la siguiente escala:
Escala de huracanes Saffir/Simpson, Esta escala se basa en la intensidad actual de
los huracanes y es utilizada en los países de América del Norte, el Caribe, Centro
América y el norte de Sudamérica.

Categoría Vientos en
km/h
uno 119-153
dos 154-177
tres 178-209
cuatro 210-249
cinco mayor de 250
Es el nombre genérico que se le da al viento huracanado que se traslada
girando a gran velocidad, donde la presión disminuye en su interior y
adquiere una circulación rotacional organizada en el sentido contrario a
las manecillas del reloj en el hemisferio norte, y en el sentido opuesto en
el hemisferio sur.
La evolución de un ciclón tropical puede ser dividida en las cuatro etapas siguientes:
1. Nacimiento (depresión tropical). Primero se forma una depresión atmosférica, que
se caracteriza porque el viento empieza a aumentar en superficie con una velocidad
máxima (media en un minuto) de 62 km/h o menos; las nubes comienzan a
organizarse y la presión desciende hasta cerca de las 1000 hpa (hectopascales).
2. Desarrollo (tormenta tropical). La depresión tropical crece o se desarrolla y
adquiere la característica de tormenta tropical, lo que significa que el viento continúa
aumentando a una velocidad máxima de entre 63 y 117 km/h inclusive, las nubes se
distribuyen en forma de espiral y empieza a formarse un ojo pequeño, casi siempre en
forma circular, y la presión se reduce a menos de 1000 hpa.
3. Madurez (huracán). Se intensifica la tormenta tropical y adquiere la característica
de Huracán, es decir, el viento alcanza el máximo de la velocidad, pudiendo llegar a
370 km/h, y el área nubosa se expande obteniendo su máxima extensión entre los 500
y 900 km de diámetro, produciendo intensas precipitaciones. El ojo del huracán cuyo
diámetro varía entre 24 a 40 km, es una área de calma libre de nubes. La intensidad
del ciclón en esta etapa de madurez se gradúa por medio de la escala de Saffir-
Simpson.
4. Disipación (fase final). Este inmenso remolino es mantenido y nutrido por el cálido
océano hasta que se adentra en aguas más frías o hasta que entra a tierra firme,
situación ésta última en la que el ciclón pierde rápidamente su energía y empieza a
disolverse debido a la fricción que causa su traslación sobre el terreno.
Los ciclones tropicales constituyen una clase especial de grandes sistemas de vientos
en rotación y poseen características únicas de circulación, completamente distintas
de los sistemas ciclónicos típicos de latitudes medias y de los tornados de escala
menor, de las trombas marinas y de los remolinos de polvo.
Los ciclones se forman y se intensifican cuando están situados sobre océanos
tropicales o subtropicales en ambos hemisferios, en donde la fuerza de rotación de la
tierra (Coriolis) es suficientemente fuerte para que se inicie el movimiento de
rotación alrededor del centro de baja presión y cuyas temperaturas de agua a nivel de
la superficie son de 27° C o más cálidas. Las regiones matrices no son estables en
cuanto a su ubicación, ya que ésta obedece a la posición de los centros de máximo
calentamiento marítimo, los que a su vez están influidos por las corrientes frías de
California y la contracorriente cálida ecuatorial en el océano Pacífico, así como por la
deriva de las ramificaciones de la corriente cálida del "Gulf Stream". Además, no se
mantienen por sí mismos sobre tierra, independientemente de la temperatura
superficial.
Tienen un núcleo central cálido, se desarrollan en entornos de débiles cortantes del
viento vertical y su parte central se inclina sólo ligeramente.
Los vientos más fuertes se dan en los niveles bajos, donde el contacto con la superficie
terrestre origina una fuerte disipación por rozamiento. Esta disipación aumenta con
la potencia de orden dos de la velocidad del viento y por esta razón los ciclones
tropicales pueden ser muy destructivos.
Las nubes se forman cuando el aire se
eleva calentado por la irradiación
terrestre. Cuando se calienta, el aire
sube y se eleva hasta su punto de rocío,
momento en el cual el vapor de agua se
condensa en pequeñas gotitas de agua o
cristales de hielo. La forma de las nubes
varía al igual que su textura,
dependiendo del calor que las impulse,
la composición atmosférica y el viento
que las empuje determinando su altura.

Las gotas de agua que forman las nubes son esféricas y muy pequeñas (entre 0,004 y
0,1mm). Estas gotas se encuentran suspendidas en el aire y sometidas a corrientes
ascendentes y otras fuerzas, de tal forma que se encuentran en constante
movimiento dentro de la nube, chocando unas con otras y agrupándose entre ellas.
Según las condiciones atmosféricas existentes, se puede producir un aumento de su
espesor hasta el punto de que su peso supere las fuerzas ascendentes y caigan hacia la
tierra en forma de lluvia o precipitación.
Cuando dos grandes masas de aire con temperaturas distintas y uniformes se
encuentran, se produce un choque que genera una variación brusca de la
humedad y de la temperatura. La línea de choque se llama "frente“

Se llama frente frio cuando el aire frio avanza hacia el caliente y frente cálido si
el aire caliente se abre paso hacia el frio. La zona alterada como consecuencia
del choque se llama ciclón, borrasca o depresión. Por el contrario, la zona
donde la atmósfera es más estable, con altas presiones, se llama anticiclón.

Las isobaras son las líneas que unen los puntos en que la presión atmosférica
al nivel del mar es la misma. Suelen expresarse en milibares y son muy útiles
para la predicción meteorológica. En ocasiones las isobaras forman familias de
curvas encerradas unas en otras alrededor de una región donde la presión es
más alta o más baja que en los puntos de su alrededor. En el primer caso
constituye un anticiclón y en el segundo un ciclón.

Se llama sistema frontal a un par de frentes, el primero cálido y el segundo


frío, que van con unidos a una depresión o borrasca.
Una borrasca o ciclón es una zona de baja presión
atmosférica rodeada por un sistema de vientos que
en el hemisferio norte se mueven en sentido
opuesto a las agujas del reloj, y en sentido contrario
en el hemisferio sur. El término ciclón se ha
utilizado con un sentido más amplio aplicándolo a
las tormentas y perturbaciones que acompañan a
estos sistemas de baja presión, en particular a los
violentos huracanes tropicales y a los tifones,
centrados en zonas de presión extraordinariamente
baja.

Un anticiclón es una zona donde la presión atmosférica es más alta que en las zonas
circundantes. Las isobaras suelen estar muy separadas, mostrando la presencia de vientos
suaves que llegan a desaparecer en las proximidades del centro.
El aire se mueve en la dirección de las agujas del reloj en el hemisferio Norte y en sentido
contrario en el hemisferio Sur. El movimiento del aire en los anticiclones se caracteriza por
los fenómenos de convergencia en los niveles superiores y divergencia en los inferiores. El
aire que baja se va secando y calentando, por lo que trae consigo estabilidad y buen tiempo,
con escasa probabilidad de lluvia. En invierno, sin embargo, el aire que desciende puede
atrapar nieblas y elementos contaminantes bajo una inversión térmica y llegar a formar el
denominado "smog".
Por su forma

Cirriforme
Forma de plumero de color blanco y aspectro
fibroso. Incluyen a los cirrus, cirrostratus y
cirrocumulus.

Estratiforme
Aparecen en forma de capas grises que cubren
uniformemente el cielo. Incluyen a los
estratus, nimbostratus, altostratus y
cirrostratus.

Cumuliforme
Son nubes con la base plana, de color blanco y
aspecto denso. Incluyen a los cumulus,
estratocumulus, cumulonimbus, altocumulus
y cirrocumulus.
Por su altura

Altas
Entre 6.000 y 13.000 m
Formadas de hielo, con temperaturas inferiores a -35º C, y de contornos
indefinidos. Incluyen a los cirrus, cirrostratus y cirrocumulus.

Medias
Entre 2.000 y 6.000 m
Formadas por agua y hielo, con temperaturas que oscilan entre -35º C y -10º C,
y aspecto mixto. Incluyen a los altocumulus, altostratus y nimbostratus.

Bajas
Hasta 2.000 Km
Formadas por agua, con temperaturas superiores a los -10º C e incluso por
encima de 0º C, y de contornos perfectamente definidos. Incluye a los
stratocumulus y stratus, además de las nubes de evolución vertical (desde 600
hasta 7.000 m) cumulus y cumulonimbus.
Por su altura y forma (géneros)
Alta
Cirrus Ci
Nubes separadas en forma de filamentos blancos y delicados
o de bancos de formas estrechas, blancos o en su mayor
parte. Estas nubes tienen un aspecto fibroso (de cabellos) o
un brillo sedoso, o ambas cosas.

Cirrostratus Cs
Velo nuboso transparente y blanquecino, de aspecto fibroso
(de cabellos) o liso, que cubre total o parcialmente el cielo,
dando lugar por lo general a fenómenos de halo.

Cirrocumulus Cc
Banco, manto o capa delgada de nubes blancas, sin sombras
propias, compuesta por elementos muy pequeños en forma
de gránulos, de ondas, etc., soldados o no, y
dispuestos más o menos regularmente; la mayoría de los
elementos tienen una anchura aparente inferior a un grado.
Media
Altocumulus Ac
Banco, manto o capa de nubes blancas o grises, o a la vez blancas y grises que tienen
generalmente sombras propias, compuestos por laminillas, guijarros, rodillos, etc.,
de aspecto a veces parcialmente fibroso o difuso, soldados o no; la mayor parte de
elementos pequeños dispuestos con regularidad tienen generalmente una anchura
aparente comprendida entre uno y cinco grados.

Altostratus As
Manto o capa nubosa grisácea o azulada, de aspecto estriado, fibroso o uniforme, que
cubre total o parcialmente el cielo, presentando partes suficientemente delgadas
para dejar ver el Sol al menos vagamente, como a través de un vidrio deslustrado.
Este género no presenta fenómenos de halo.

Nimbostratus Ns
Capa nubosa gris, frecuentemente sombría, cuyo aspecto resulta borroso por las
precipitaciones más o menos continuas de lluvia o nieve que, en la mayoría de los
casos, alcanzan el suelo. El espesor de esta capa es en todas sus partes suficiente para
para ocultar completamente el Sol. Por debajo de la capa, existen frecuentemente
nubes bajas desgarradas, soldadas o no con ella.
Altocumulus

Altostratus Nimbostratus
Baja
Stratocumulus Sc
Banco, manto o capa de nubes grises o blanquecinas, que tienen casi siempre partes
oscuras, compuestos por losas, guijarros, rodillos, etc., de aspecto no fibroso, excepto
cuando en su parte inferior se forman regeros de precipitaciones verticales u oblicuas
(virga) que no alcanzan el suelo. La mayor parte de los elementos pequeños dispuestos
con regularidad tienen una anchura aparente superior a cinco grados.

Stratus St
Capa nubosa generalmente gris, con base bastante uniforme, que puede dar lugar a
llovizna, prismas de hielo o granizo blanco. Cuando el Sol es visible a través de la capa,
su contorno es claramente discernible. Este género no da lugar a fenómenos de halo,
salvo eventualmente a muy bajas temperaturas. A veces se presenta en forma de
bancos desgarrados.

Cumulus Cu
Nubes separadas, generalmente densas y con contornos bien delimitados, que se
desarrollan verticalmente en forma de redondeces, de cúpulas o de torres, cuya región
superior protuberosa parece frecuentemente una coliflor. Las partes de estas nubes
iluminadas por el Sol son amenudo de un blanco brillante; su base, relativamente
oscura, es sensiblemente horizontal. Están a veces desgarradas.
Cumulonimbus Cb
Nube densa y potente, con un dimensión vertical considerable, en forma de montaña
o de enormes torres. Una parte al menos de su región superior es generalmente lisa,
fibrosa o estriada, y casi siempre aplastada; esta parte se extiende frecuentemente
en forma de yunque o de amplio penacho. Por debajo de la base de esta nube, a
menudo muy sombría, existen frecuentemente nubes bajas desgarradas, soldadas o
no con ella, y precipitaciones, a veces en forma de regeros verticales u oblicuos
(virgas) que no alcanzan el suelo.
Stratocumulus Stratus

Cumulus Cumulonimbus
El viento es el desplazamiento horizontal de las masas de aire, causado
por las diferencias de presión atmosférica, atribuidas a la variación de
temperatura sobre las diversas partes de la superficie terrestre. Es decir,
las distintas temperaturas existentes en la tierra y en la atmósfera, por la
desigual distribución del calentamiento solar y las diferentes propiedades
térmicas de las superficies terrestres y oceánicas, producen corrientes de
aire. Las masas de aire más caliente tienden a subir y en su lugar se ubican
masas de aire más denso y frío.
Lo que caracteriza a los vientos son la intensidad y la dirección. La
primera se mide según la escala de Beaufort que va desde el 0 (calma
absoluta) hasta el 12 (huracán). La intensidad es directamente
proporcional a la diferencia de presión entre el lugar de origen del viento
y el de su llegada. Por otra parte la dirección está relacionada con la
rotación terrestre.
Al formarse un área ciclónica el viento se desvía a la derecha en el
hemisferio norte y a la izquierda en el hemisferio sur. Lo contrario sucede
en las zonas anticiclónicas donde el viento corre hacia la izquierda en el
hemisferio boreal y hacia la derecha en el austral.
Dependiendo de la dirección que adquieran los vientos se dividen en
constantes, que soplan todo el año en la misma dirección aunque la
intensidad varía, y en periódicos, que no tienen regularidad en su
dirección.
El aparato empleado para medir la dirección del viento es la veleta que
marca la dirección. La velocidad del viento se mide con el anemómetro,
que es un molino de tres brazos, separados por ángulos de 120º, que se
mueve alrededor de un eje vertical. Los brazos giran con el viento y
permiten medir su velocidad. Hay anemómetros de reducidas
dimensiones que pueden sostenerse con una sola mano que son muy
prácticos aunque menos precisos.
Los vientos se clasifican en: globales, estacionales, locales, ciclónicos y
anticiclónicos.
En las áreas anticiclónicas la
presión es superior a lo normal a
diferencia de las ciclónicas
donde la presión es inferior a lo
normal.
El aire nunca se encuentra en
absoluta calma, porque en las
áreas ciclónicas se forma una
especie de vacío a donde acuden
las masas de aire vecinas que
están a presión más alta. Son
estos movimientos de masas de
aire los llamados "vientos".
•Los vientos globales son aquellos que determinan las características
del tiempo en el planeta, y se originan por las diferencias de presión
y temperatura existentes en todo el mundo.

•El viento en zonas cercanas al ecuador, sube hacia capas altas de la


atmósfera, debido a la bajas presiones existentes en el lugar, por ser
una zona de aire muy caliente. Al subir el viento, este se desplaza en
dirección norte y sur.

• Cercano a los 30º de latitud en ambos hemisferios del ecuador


existe una zona de altas presiones, que produce el descenso de este
aire.
•El viento ya existente en esta zona,
que está a nivel del suelo, se
desplaza hacia la zona de bajas
presiones cercana al ecuador desde
el hemisferio norte y sur. Estos
vientos con conocidos como
“vientos alisios”, que dependiendo
de la dirección desde la que vengan
cambiarán de nombre.

• En la zona de los polos existe una


banda de alta presión debido a las
bajas temperaturas del lugar, por lo
que el viento se va desplazando en
dirección hacia el ecuador.
• Los vientos estacionales se producen debido a
que el aire sobre la tierra es más caliente en
verano y más frío en invierno, en comparación
con el aire presente en el océano cercano, en la
misma estación.

• Es por esto que, en el verano, los continentes


presentan vientos más fríos que provienen del
mar; y en invierno se producen vientos más
calientes que van hacia los océanos desde los
continentes.

El viento monzón es un ejemplo de viento


estacional. Se caracteriza por ser un viento que
cambia de dirección según las estaciones del
año. Este viento sopla desde el Suroeste, entre
abril y octubre, y en dirección Noreste, desde
octubre a abril. El monzón del suroeste, o de
verano, suele estar acompañado por fuertes
lluvias en zonas de la India y de Indochina.
BRISAS MARINAS

• Los vientos locales ocurren por las


variaciones diarias de temperatura
entre la tierra y el agua, las que se dan
principalmente en verano. La tierra,
debido a la presencia del sol, se
caliente más rápidamente que el mar
durante el día. El aire caliente que
proviene de la tierra se eleva,
dirigiéndose hacia el mar, y es
reemplazado a nivel del suelo por el
aire frío del mar. Esto produce vientos
llamados “Brisas Marinas”.
BRISAS TERRESTRES
• Durante la noche se produce lo
contrario. La tierra está más fría que el
mar, lo que origina que el aire frío
descienda sobre la tierra y se dirija hacia
el mar. El aire marino que ahora esta
más caliente, se eleva y es reemplazado
por el aire frío de la tierra. Estos vientos
son conocidos con el nombre de “Brisas
Terrestres”. Estas brisas son de menor
velocidad que las anteriores, debido a
que en la noche existen menores
diferencias de temperatura entre la
tierra y el mar.
Estas brisas generadas por las
diferencias de temperatura pueden
llegar hasta unos 50 Km. tierra y mar
adentro.
0 Grado - Calma < 1 nudos < 2 Km/h. Mar
como un espejo.

1 Grado - Ventolina 1-3 nudos 2-6 Km/h.


Rizos como escamas de pescado, pero sin
espuma.

2 Grado - Flojito (Brisa muy débil) 4-6


nudos 7-11 Km/h. Pequeñas olas, crestas de
apariencia vitrea, sin romperse.
3 Grado - Flojo(Brisa débil) 7-10 nudos
12-19Km/h. Pequeñas olas, crestas
rompientes, espuma de aspecto vitreo
aislados vellones de espuma.

4 Grado - Bonacible(Brisa moderada)


11-16 nudos 20-30 Km/h. Olas un poco
largas. Numerosos borreguillos.

5 Grado - Fresquito(Brisa fresca) 17-21


nudos 31-39 Km/h. Olas moderadas y
alargadas. Gran abundancia de
borreguillos y eventualmente algunos
rociones.
6 Grado - Fresco(Brisa fuerte) 22-27 nudos
40-50 Km/h. Comienza la formación de olas
grandes. Las crestas de espuma blanca se
ven por doquier. Aumentan los rociones y la
navegación es peligrosa para embarcaciones
menores.

7 Grado - Frescachón(Viento fuerte)


28-33 nudos 51-61 Km/h. La espuma es
arrastrada en dirección del viento. La mar es
gruesa.

8 Grado - Temporal(Viento duro)


34-40 nudos62-74 Km/h. Olas altas con
rompientes. La espuma es arrastrada en nubes
blancas.
9 Grado – Temporal Fuerte(Muy duro)
41-47 nudos 75-87 Km/h. Olas muy gruesas.
La espuma es arrastrada en capas espesas.
La mar empieza a rugir. Los rociones
dificultan la visibilidad.

10 Grado – Temporal Duro(Temporal)


48-55 nudos 88-102Km/h. Olas muy gruesas
con crestas empenachadas. La superficie de
la mar parece blanca. Visibilidad reducida. La
mar ruge.

11 Grado - Temporal Muy Duro(Borrasca)


56-63 nudos 103-117 Km/h. Olas
excepcionalmente grandes (los buques de
mediano tonelaje se pierden de vista). Mar
Completamente blanca. Visibilidad muy
reducida.
12 Grado – Temporal
Huracanado(Huracán)
64-71> nudos 118-132> Km/h.
El aire está lleno de espuma y de
rociones. La visibilidad es casi
nula.
0 Grado – Calma: altura 0 mts
La mar está como un espejo.

1 Grado – Rizada: altura 0-0,2 mts


Mar rizada con pequeñas crestas sin
Espuma

2 Grado – Marejadilla: altura 0,2-


0,5 mts
Pequeñas ondas cuyas crestas
empiezan a
romper
3 Grado – Marejada:
altura 0,5-1,25 mts. Olas pequeñas que
rompen.
Se forman frecuentes borreguillos.

4 Grado – Fuerte Marejada


altura 1,25-2,5 mts. Olas moderadas de
Forma alargada. Se forman muchos
borreguillos.

5 Grado – Gruesa: altura 2,5-4 mts.


Se forman grandes olas con crestas de
espuma blanca por todas partes
6 Grado -Muy Gruesa: altura 4-6 mts
La mar empieza a amontonarse y la espuma
blanca de las crestas es impulsada por
el viento.

7 Grado – Arbolada: altura 6-9 mts


Olas altas. Densas bandas de espuma en
la dirección del viento y la mar empieza a
romper. El agua pulverizada dificulta la
visibilidad.

8 Grado – Montañosa: altura 9-14 mts


Olas muy altas con crestas largas y
rompientes. La espuma va en grandes masas
en la dirección del viento y la superficie del
mar aparece casi blanca.
Las olas rompen brusca y pesadamente.
Escasa visibilidad.
9 Grado – Enorme:
altura > 14 mts
El aire está lleno de espuma y
agua pulverizada.
La mar completamente blanca.
Visibilidad prácticamente nula.
Un satélite meteorológico es un tipo
de satélite artificial que se utiliza
principalmente para supervisar el
tiempo atmosférico y el clima de la
Tierra. Sin embargo, ven más que las
nubes. Las luces de la ciudad,
fuegos, contaminación, auroras,
tormentas de arena y polvo,
corrientes del océano, etc., son otras
informaciones sobre el medio
ambiente recogidas por los satélites.

Otros satélites pueden detectar cambios en la vegetación de la Tierra,


el estado del mar, el color del océano y las zonas nevadas.
http://www.tiempodelsur.cl/descargas/instrumentos.pdf

http://www.youtube.com/watch?v=JL82raPWj3Y&feature=related

http://www.youtube.com/watch?v=3iysU-HlmUI&feature=related

You might also like