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Resumen cuarta lectura obligatoria-Artículo de Zabaltza

En este texto se va a tratar el tema de la lengua, el dialecto, sus diferencias, sus variantes históricas y
geográficas, y motivos por los cuales una de las lenguas se impuso a la otra.

El autor comienza el texto introduciendo las definiciones de lengua en el Diccionario de la Real


Academia Española, con dos definiciones que presentan algunas diferencias que el autor explica a
través de ejemplos de diversos dialectos españoles. Por ejemplo en la primera definición, que dice que
la lengua es un sistema de comunicación propio de un pueblo o nación, tiene cabida el astur-leonés,
sin embargo, en la segunda definición, que dice que lengua es un sistema lingüístico plenamente
definido y, entre otras cosas, que se ha impuesto a otros sistemas lingüísticos, no tiene cabida, pues no
se ha impuesto a ninguno otro sistema lingüístico.
De ahí el autor extrae que una lengua sin Estado no es tal. Y partiendo de esta premisa, utiliza al autor
Joshua A. Fishman para reforzar esa idea.

A continuación, expone la definición de dialecto extraída del Diccionario de la Real Academia


Española, y la analiza, explicando que diferentes formas, tanto el castellano como el astur-leonés son
dialectos.
Después, afirma que una lengua es algo creado artificialmente, que ha sufrido cambios y que en la
mayoría de casos proviene de otra lengua. A partir de aquí, nombra lenguas de diversos orígenes y
lugares y explica de donde provienen, que tienen en común, en que momento pasaron a formas
distintas lenguas…como el francés y el italiano, el polaco, el bielorruso y el ucraniano, el holandés y
los distintos tipos de alemanes…

Tras estos ejemplos, llega al concepto de glotofagia, que es la muerte de una lengua, y de su caso
opuesto, la glotogénesis, explicando este concepto a través de la desaparición de la antigua
Yugoslavia y cómo, mientras que esta aun existía, todos los países pertenecientes hablaban una única
lengua, el serbocroata, sin embargo, tras su desaparición y por orden de las autoridades, comenzaron a
utilizar lenguas distintas, apareciendo así el serbio, el croata, el bosnio, y el montenegrino. También
nombra, a continuación, el mismo ejemplo en otros lugares de Europa Occidental. De los conceptos
de glotofagia y glotogenesis se extrae la correspondencia entre lengua y nación.

A continuación explica que la jerarquización de las distintas lenguas depende exclusivamente de


motivos históricos, y que es ajena a la lingüística. Apoya esta idea a través de diversas lenguas como
el griego o el francés explicando cuales fueron sus orígenes y los hechos históricos que llevaron a
estas lenguas a ser como son hoy en día.
Continua con la idea de la utilización de la lengua como distinción de clases, explicando que los
pobres y la sociedad de clase baja utilizaba los dialectos mientras que la clase alta utilizaba la lengua.
De esta idea llega a un nuevo concepto, la diglosia, que se da cuando dos variedades de una lengua
coexisten en una comunidad, como pueda ser el catalán, y el castellano.

Tras estos diversos conceptos, llega al tema del clasismo lingüístico y como este ha estado presente en
las obras de la mayoría de autores en las lenguas de cultura, escogiendo a Ferdinand de Saussure para
ejemplificar la idea, exponiendo lo que este ha aportado sobre los conceptos de lengua y dialecto y
como no ha tenido una teoría firme, pues se contradijo en varias ocasiones. También explica que este
autor afirma que no solo hay una diferencia de cantidad entre ambos conceptos, sino también de
naturaleza.
También, siguiendo con las teorías de este autor, expone que la literatura pudo convertir algunas
lenguas, y posteriormente, siendo opuesto a los románticos, afirma que son las administraciones
estatales las que elevan un dialecto a la categoría de lengua nacional y no que emanan del espíritu del
pueblo.
El autor llega a la conclusión de que no existen diferencias objetivas entre lengua y dialecto y que son
los órganos estatales y el pueblo los que jerarquizan estas lenguas.
Tras su conclusión, retoma el tema de la antigua Yugoslavia intentando demostrar que los cambios
producidos en la lengua fueron independientes de los conflictos producidos entre sus pueblos. Para
demostrarlo lleva a cabo un repaso histórico: en 1836 se distinguían cuatro lenguas eslavas: el ruso, el
polaco, el bohemio-eslovaco, y el ilirio.
Unos años después, en 1918, los distintos partidos continuaban manteniendo unidos a los diversos
pueblos pertenecientes afirmando que solo existía una lengua. Continua con los padres de la lengua
literaria serbocroata y los distintos hechos sucedidos a lo largo de la historia en estos países. Primero,
trataran de minimizar las diferencias entre las distintas lenguas, después, en la Convención de Viena
de 1850 se escogió el ijekavski como variante literaria de todos los pueblos eslavos, pero esto no fue
aceptado y cada pueblo mantuvo su lengua aumentando de manera constante sus diferencias. Después,
en 1954 se trato de llegar a un acuerdo común que duró menos de 15 años y finalmente, en 1967 con
la aparición de un diccionario de serbocroata que establecía la lengua hablada en Serbia como la
estándar y la croata como el dialecto, se produjo el momento mas complicado, pues los croatas lo
rechazaron buscando el reconocimiento de su lengua como otra diferente. Bosnios y montenegrinos
siguieron sus pasos, aumentando aun mas sus diferencias. Continua mostrando una gran cantidad de
conflictos producidos entre los distintos países con motivos de sus respectivas lenguas, a estos
conflictos se incorporó Macedonia, y fue finalmente con la independencia de Bulgaria en 1878 cuando
se afirmó su autonomía lingüística.

A continuación realiza una distinción similar a la anterior pero esta vez entre el checo y el eslovaco,
que contiene un elemento religioso, pues los checos son protestantes y los eslovacos católicos. Explica
que la lengua oficial era el checoslovaco y que dependiendo de la región, se usaba el checo o el
eslovaco.
Lo mismo ocurre con países occidentales como Italia y Francia, con la diferencia de que esta existía
como Estado desde hace dos siglos y la lengua estándar había asimilado los dialectos, permaneciendo
el galoitálico en varias regiones. Ejemplos similares con las lenguas germánicas y como la Primera
Guerra Mundial fue decisiva en estas.

Para concluir, el autor trata el tema opuesto al tratado durante toda la obra, ahora expone algunas
lenguas que pretenden fundirse en un neolenguas de difusión mayor, como la paneslava, pancéltica,
panturca, panchina, escandinava y panibérica. Expone distintos autores históricos que han mostrado
sus teorías que tratan de llevar a cabo esta unión y finaliza con el que nos es mas cercano, el de la
península ibérica, con fusión del castellano y el portugués, con autores como Ignacio Hernando de
Larramendi que buscaba la creación de una lengua mixta castellano.portuguesa. Por último, comenta
una propuesta muy sorprendente de Ion Heliade-Radulescu que buscaba la unión del rumano y el
italiano.
El autor cierra este capitulo comentando como las panlenguas pueden servir para que sobrevivan los
dialectos retorromances.

Como conclusión, decir que a partir de este texto he extraído principalmente dos idea: es
enormemente complicado poder distinguir lengua de dialecto, pues incluso con gran cantidad de
ejemplos no es posible llevar a cabo diferencias objetivas. En cuanto a la segunda parte que trata las
panlenguas, creo pueden ser muy útiles como elemento literario y de supervivencia de los dialectos
más antiguos, pero no como creación de nueva lengua oficial de un país.

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