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APUNTES COMPROMISO MORAL DEL CRISTIANO

26 de Julio 2018 sesión 1:


Propuesta mirar el libro compromiso moral del cristiano, hablar de moral tendríamos que hablar
de cristo, pero no se pudo el semestre pasado, por tanto trataremos dos libros el anterior y el
catecismo moral.
¿Qué se entiende por moral?  la entiendo como un grupo de normativas, directivas por medio
de las cuales podríamos dirigir la vida propia.
Moral: tiene que ver a la conducta, las leyes y las normas, están más dada a la ética, la diferencia
entre la ética (a las normas establecidas por las costumbres) y moral (mi comportamiento y la
forma de actuar)
Moral cristiana  los modos de comportamiento y acción basados en el ejemplo de cristo.
Estamos llamados a vivir en una moral fundamental y en la moral cristiana, ojo con la moral
relativista, la doble moral, etc.
(diferenciar entre ética, moral, moral cristiana, moralismo, moralina)
Vamos a ir identificando la moral cristiana, desde el evangelio, las virtudes cristianas, que
contrarrestan los pecados capitales y de allí, cuál es mi compromiso, llamados desde la perspectiva
cristiana, pero no solo se queda aquí, sino que nos lleva a un compromiso con responsabilidad,
con sí mismo, la iglesia.
El mundo vende morales, y de allí nuestro compromiso, desde toda la sociedad nos atacan con sus
morales, de allí como debemos actuar según nuestro compromiso, aquí entra la libertad,
conciencia. Al cual ingresamos desde el bautismo, el curso es para ir mirando la vida. El curso no es
tan teórico sino como vivimos nuestra vida moral, y cuál es mi compromiso y responsabilidad, en
parte es la cruz, donde todo vale, nosotros seguimos a cristo.

Vamos a biblioteca y mirar que es la moral, y que temas; qué es moral y la diferencia con la ética,
cada uno entrega su definición.
Moral: en el vocabulario diario se relaciona no solo con lo bueno y lo malo sino también con el
estado de ánimo de la persona, moral comporta una vivencia que pocas veces se explica a nivel de
lo consciente porque involucra una herencia del pasado (infancia) sin ulterior desarrollo.
La reflexión sobre el significado de la moral tiene un potencial liberador ya que no sólo requiere un
ejercicio académico de delimitación de conceptos sino, aun más importante, revela la propia
vivencia. La pregunta sobre qué es la moral (teoría) llega a ser la pregunta sobre cómo vivo la
moral (vivencia).
REFERENTE ÉTICO: la palabra ética, tiene dos fuentes la griega y la latina, en la griega viene de
ethos con dos significados a. residencia, morada, lugar donde se habita. Se pasa de una
comprensión de un lugar exterior (país o casa) al lugar interior (actitud). Así en Aristóteles llega a
significar modo de ser y carácter, pero no en el sentido pasivo del temperamento como estructura
psicológica sino en un modo de ser que se va adquiriendo e incorporando a la propia existencia. B.
segundo significado es hábito o costumbre (ητθος carácter) (εθος costumbre).
En latín sólo existe una palabra para expresar los dos significados de ethos; el término mos y
significa costumbre.
Siguiendo la etimología griega, se dan distintas etapas en la adquisición de un modo de ser. Asi: “el
más bajo sería del pathos, el de los sentimientos, que son ciertamente míos, pero tal vez
pasajeros, escasamente dependientes de mi voluntad. Las costumbres significan ya un grado mas
alto de posesión. Por encima de ellas el carácter, constituye una impresión de rasgos en la persona
misma: el carácter es la personalidad que hemos conquistado a través de la vida, lo que hemos
hecho de nosotros mismo viviendo”
Por tanto, mos, en sentido pleno, significa, pues como eethos, modo de ser o carácter, pero el
carácter se adquiere por hábito, se adquiere viviendo… mos significa, pues, también costubre.
Suma teológica, I-II, q.58, art 1.
Al traducirlo al latín se traduce como habitus.

En nuestros días algunos emplean la palabra ética y moral sin mayor distinción, otros distinguen:
a. Ética: reflexión exclusivamente racional (filosofía) y la moral se emplea para una
consideración religiosa (teología)
b. Ética: mundo de principios y de los valores, y moral: normas y códigos del
comportamiento humano.
Distinciones peligrosas porque pueden llevar a una separación entre razón y fe, o normas y
principios. En una sociedad pluralista es de particular importancia presentar la racionalidad
inherente a toda postura ética para generar un diálogo entre todos; además, toda norma es una
traducción práctica de principios.
Lo cristiano no constituye tanto un elemento discriminatorio entre ética (filosofía) y moral
(teología) sino más bien el horizonte de sentido desde el cual se elabora el discurso ético. No es
tanto…

Clase: veremos temas como conciencia, responsabilidad, compromiso, libertad

Sesión 2. 02 agosto 2018.


MORAL LA VIDA EN CRISTO
3 momentos, 1. Acercamiento a la moral en cristo, 2. Reflexión con la sagrada escritura

La moral se toma desde cristo, que se lee desde la experiencia de la iglesia, la misión que hay que
vivir y enseñar esta moral (pastoral), todo con fundamento en la santísima Trinidad.
Veremos la moral desde una experiencia de fe.

LA VIDA EN CRISTO
San León magno:
 “Cristiano, reconoce tu dignidad
 Puesto que ahora participas de la naturaleza divina,
 No degeneres volviendo a la bajeza de tu vida pasada.
 Recuerda a qué Cabeza perteneces y de qué Cuerpo eres miembro.
 Acuérdate de que has sido arrancado del poder de las tinieblas para ser trasladado a la luz del
reino de Dios”

 Nosotros llamados a la santidad, por qué nos volvemos a la vida pasada, por qué nos
degeneramos, por qué rompemos nuestra alianza con el señor.
 Todos llamados a vivir una moral específica la cristiana, y no vivir una doble vida, no volver a la
vida pasada, ni justificarla.

EL CAMINO DE CRISTO “LLEVA A LA VIDA”:


GOZO Y LAS EXIGENCIAS DEL CAMINO DE CRISTO
 Espíritu santo, maestro interior de la vida según Cristo, dulce huésped del alma que inspira,
conduce, rectifica y fortalece esta vida.
 La gracia, pues por ella somos salvados y nuestras obras pueden dar fruto para la vida eterna.
 Hay que estar vigilantes, viviendo en el Espíritu Santo. Al justificar mi pecado o mi propia
voluntad hacemos que Dios de adecue a mi voluntad, la voluntad de Dios es clara.

 Las bienaventuranzas, el camino de Cristo está resumido en las bienaventuranzas, único


camino hacia la dicha eterna a la que aspira el corazón del hombre.
 El pecado y del perdón, porque sin reconocerse pecador, el hombre no puede conocer la
verdad sobre sí mismo, condición del obrar justo, y sin el ofrecimiento del perdón no podría
soportar esta verdad. Concupiscencia.
 Las virtudes humanas que haga captar la belleza y el atractivo de las rectas disposiciones para
el bien.
 Las virtudes cristianas de la fe, esperanza y caridad que se inspire ampliamente en el ejemplo
de los santos.
 El doble mandamiento de la caridad desarrollada en el decálogo
 Vida eclesial, pues en los múltiples intercambios de los “bienes espirituales” en la “comunión
de los santos” es donde la vida cristiana puede crecer, desplegarse y comunicarse.

LA VOCACIÓN DEL HOMBRE:


LA VIDA EN EL ESPÍRITU
 La vida en el Espíritu Santo realiza la vocación del hombre.
 Está hecha de caridad divina y solidaridad humana.
 Es concedida gratuitamente como una salvación.

 Nuestros actos humanos son para la salvación o para la condenación, no hay medios.

EL HOMBRE A IMAGEN DE DIOS


 Cristo, el nuevo adán, en la misma revelación del misterio del Padre y de su amor, manifiesta
plenamente el hombre al propio hombre y le descubre la grandeza de su vocación.
 En Cristo, redentor y salvador, la imagen divina alterada en el hombre por el primer pecado ha
sido restaurada en su belleza original y ennoblecida con la gracia de Dios.
 Dotada de un alma espiritual e inmortal, la persona humana es la única criatura en la tierra a
la que Dios ha amado por sí misma, desde su concepción está destinada a la bienaventuranza
eterna.
 La persona humana participa de la luz y la fuerza del espíritu divino. Por su voluntad es capaz
de dirigirse por sí misma a su bien verdadero. Encuentra su perfección en la búsqueda y el
amor de la verdad y el bien.

Ejercicio 1 cor 1-2; Ga 4,6. Ga 5, 16-25.: revisar la experiencia de vida y reflexionar en cada una de
las obras descritas por San Pablo. Realizar una tabla. Compromisos para fortalecer o para cambiar.
Obras del Espíritu πνεúμatóς Las obras contra el Espíritu σarkóς
Amor Adulterio
gozo Fornicación
paz Inmundicia
paciencia Lujuria
benignidad Idolatría
bondad Hechicería
fe Enemistades
mansedumbre pleitos
templanza (dominio propio) celos
iras
contiendas
divisiones
herejías
envidias
homicidios
borracheras
orgías
y cosas semejantes a estas
 En las obras del Espíritu he visto un crecimiento, que se que no es propio, y me alegra, de ellos
me falta mucho la templanza, de hecho a relucido por ahí.
 De las obras de la carne con la gracia del Espíritu santo he batallado con algunas, con sus
perdidas y victorias, no dejaré de pelear contra ellas hasta estar con el Señor plenamente, sigo
rogando al señor la gracia de mantenerme en su gracia, sin ella cualquiera de las obras de la
carne me destruirían y destruiría a los demás. He de trabajar contra la gula de toda índole y
contra la pereza, es decir en buscar la templanza.

Tarea: en un diccionario teológico o de moral cristiana católica buscar la definición de: y dar uno o
varios ejemplos de la vida real: escribir a mano: libertad, responsabilidad, actos humanos.
Dar dos o mas ejemplos de la vida real, según formato, escribir a mano. De 3 a 5 hojas.
Libertad:
Responsabilidad:
Actos humanos:

Encabezado.
Seminario mayor Santiago apóstol.
Nombre:
Compromiso moral cristiano.
Fecha:

La Libertad es un concepto central en el pensamiento filosófico occidental, se puede definir


ontológicamente como:
“la capacidad que tienen las personas de disponer de sí mismas, de autodeterminarse y que exige
al mismo tiempo una particular atención a los condicionamientos biopsíquicos y socio-culturales
que determinan profundamente el ser y el obrar de las personas” (Compagnoni et al, 1992).
Hay que notar que es una capacidad humana, que consiste en disponer de sí mismas, para poder
hacer de sí mismo como desee pero que además tiene en cuenta los condicionamientos externos y
no solo los internos, y la interacción de éstos determinaran su ser y su obrar.
Hay que agregar que la libertad es “la capacidad efectiva que tenga la persona para orientar la
propia existencia” (Compagnoni et al, 1992) es como un timonel con el cual va a la deriva en sus
vivencias, pero no es una libertad que se tenga como sentido a sí misma sino que requiere anclar
la libertad moral en un horizonte general de sentido, que ilumine globalmente la experiencia
humana y por otra, de tener en cuenta los significados parciales que asume en contacto con las
dinámicas de la existencia histórica de las personas.
Es de gran importancia el concepto de libertad para la vida moral , es el núcleo mismo de la
experiencia subjetiva, ayudándonos a esclarecer la estructura misma de la conciencia como
ámbito del desarrollo de los procesos de asentimiento a los valores por parte del hombre.
Ejemplo 1: una persona que en un proceso de discernimiento decida según sus capacidades, sin
coerción externa social o familiar, optar por la vida ministerial.
Ejemplo 2: El padre de familia que asume su rol desde la estructura de convivencia que acarrea el
ser padre, sin ser cohibido de manera externa para realizar tal función.

Responsabilidad, es la capacidad de descubrir los niveles en los que se ejerce de hecho la libertad,
sin recortar su alcance, pero tampoco sin ampliarla indebidamente. Analiza los procesos que
conducen a las decisiones básicas, a las opciones en las que se decide el sentido global del obrar
humano, y las que le dan sentido a la propia vida.

La responsabilidad deberá buscarse en las intencionalidades últimas que guían sus opciones y el
constante dinamismo que caracteriza al crecimiento humano en sus diversos estadios de
maduración.

Ejemplo 1: un padre de familia que al ganar su sueldo, teniendo la libertad de despilfarrarlo, lo


invierte en el bienestar de su familia; porque una parte importante del sentido de su vida es el ser
padre de familia.

Ejemplo 2: un seminarista que tiene una abanico de posibilidades de actuar, decide someter su
libertad en la obediencia que requiere un proceso de formación, en vista a la vida ministerial.

Actos humanos, según Santo Tomás de Aquino son “los medios que le permiten a la persona
realizar su proyecto ético”(qq 18-114) luego los especifica en la vida moral organizada según las
virtudes teologales y cardinales. Asi podemos considerar los acto humanos como el espacio de
actividades del hombre que se extiende desde los actos que deciden su destino, elegir una carrera,
a los que no requieren ni de su voluntad, ni de su pensamiento, como respirar. Pero para la moral
el acto humano requiere tanto de la voluntad como de su pensamiento. Y para el obrar moral
cristiano además deberá tener en cuenta la presencia del espíritu “El espíritu Santo, que habita en
la mente, no sólo enseña lo que debemos hacer, iluminando el entendimiento, sino que inclina la
voluntad a obrar rectamente” (Santo Tomás, Com. In Rom. 8,2, lect 1).
Ejemplo 1: una persona que para ser coherente con su fe cristiana (acto cristiano), decide realizar
una obra de caridad (acto moral), como visitar un preso (acto humano), esto sería un acto humano
moral y cristiano.
Ejemplo 2: obedecer (acto humano) las leyes de tránsito (acto humano y moral) para mayor gloria
de Dios (acto humano, moral y cristiano)

Bibliografía
COMPAGNONI, PIANA, PRIVETERA, VIDAL. Nuevo diccionario de teología moral, Ediciones
paulinas, Madrid, 1992

09/AGOSTO/2018

LIBERTAD: Un concepto central del pensamiento filosófico occidental. Según San Agustín, es una
gracia que libera de la esclavitud interior, sin libertad no hay pecado, comporta 2 elemento a.
autodeterminación de la voluntad y b. orientación al bien.
Santo Tomás de Aquino, la libertad esta en la razón, como un trabajo de la voluntad por medio del
entendimiento, nadie puede determinarla.
Hegel: no es el azar sino la determinación racional del propio ser.

Definición: se conquista por las acciones libres, enriquecedoras para el hombre, buscar su propio
bien, independencia y emancipación, esto es una visión cerrada sobre sí mismo. La libertada
supera el plano de lo individual y tiene un plano de proyección social.

Definición: “la capacidad que tienen las personas de disponer de sí mismas, de autodeterminarse y
que exige al mismo tiempo una particular atención a los condicionamientos biopsíquicos y socio-
culturales que determinan profundamente el ser y el obrar de las personas” (Compagnoni et al,
1992). O “la capacidad efectiva que tenga la persona para orientar la propia existencia”
(Compagnoni et al, 1992)

Clase:
LA LIBERTAD DEL HOMBRE
 Dios ha creado al hombre racional confiriéndole la dignidad de una persona dotada de la
iniciativa y del dominio de sus actos.
 Quiso Dios “dejar al hombre en manos de su propia decisión” (si 15,14) de modo que
busque a su creador sin coacciones y adhiriéndose a él, llegue libremente a la plena y feliz
perfección”.
 Al acercarse más a Dios, el hombre se hace más libre, por acercase al que es
verdaderamente libre, y al acercase más a Dios más feliz se es.

LIBERTAD Y RESPONSABILIDAD
 La libertad es el poder, radicado en la razón y en la voluntad, de obrar o no obrar, de
hacer esto o aquello, de ejecutar así por sí mismo acciones deliberadas.
 Por el libre arbitrio cada uno dispone de sí mismo.
 La libertad es en el hombre una fuerza de crecimiento y de maduración en la verdad y la
bondad.
 La libertad alcanza su perfección cuando está ordenada a Dios, nuestra bienaventuranza.
 La libertad implica la posibilidad de elegir entre el bien y el mal, y por tanto, de crecer en
perfección o de flaquear y pecar. La libertad caracteriza los actos propiamente humanos.
 La libertad hace al hombre responsable de sus actos en la medida en que éstos son
voluntarios. El progreso en la virtud, el conocimiento del bien, y la ascesis acrecientan el
dominio de la voluntad sobre los propios actos.
 Imputabilidad y la responsabilidad de una acción puede quedar disminuidas e incluso
suprimidas a causa de la ignorancia, la inadvertencia, la violencia, el temor, los hábitos, los
afectos desordenados y otros factores psíquicos o sociales.
 Todo acto directamente querido es imputable a su autor: Gn 3,13. Gn 4, 10; 2S 12,7-15

16 agosto 2018
 Una acción puede ser indirectamente voluntaria cuando resulta de una negligencia
respecto a lo que se habría debido conocer o hacer, por ejemplo, un accidente provocado
por la ignorancia del código de la circulación.
 La libertad se ejercita en las relaciones entre los seres humanos. Toda persona humana,
creada a imagen de Dios, tiene el derecho natural de ser reconocida como un ser libre y
responsable- todo hombre debe prestar a cada cual el respeto al que éste tiene derecho.
 Este derecho debe ser reconocido y protegido civilmente dentro de los límites del bien
común y del orden público.

LA LIBERTAD HUMANA EN LA ECONOMÍA DE LA SALVACIÓN


LIBERTAD Y PECADO:
 La libertad del hombre es finita y fiable
 El hombre erró. Libremente pecó . al rechazar el proyecto del amor de Dios, se engañó a sí
mismo y se hizo esclavo del pecado. Esta primera alienación engendró una multitud de
alienaciones.
 La historia de la humanidad, desde sus orígenes, atestigua desgracias y opresiones nacidas
del corazón del hombre a consecuencia de un mal uso de la libertad.
AMENAZAS PARA LA LIBERTAD:
 El ejercicio de la libertad no implica el derecho a decir y hacer cualquier cosa.
 Es falso concebir al hombre “sujeto de esa libertad como un individuo autosuficiente que
busca la satisfacción de su interés propio en el goce de los bienes terrenales y
espirituales”.
 Situaciones de ceguera y de injusticia gravan la vida moral y colocan tanto a los fuertes
como a los débiles en la tentación de pecar contra la caridad.
 Al apartarse de la ley moral, el hombre atenta contra su propia libertad, se encadena a sí
mismo, rompe la fraternidad con sus semejantes y se rebela contra la verdad divina.
LIBERACIÓN Y SALVACIÓN:
 Por su Cruz Gloriosa, Cristo obtuvo la salvación para todos los hombres. Los rescató del
pecado que los tenía sometidos a esclavitud.
 Ga 5,1- Jn 8,32. 2co 3,17. Rm 8,21.
LIBERTAD Y GRACIA
 La gracia de Cristo no se opone de ninguna manera a nuestra libertad cuando ésta
corresponde al sentido de la verdad y del bien que Dios ha puesto en el corazón del
hombre.
 En la oración, a medida que somos más dóciles a los impulsos de la gracia, se acrecientan
nuestra íntima verdad y nuestra seguridades en las pruebas, como también ante las
presiones y coacciones del mundo exterior.

LA MORALIDAD DE LOS ACTOS HUMANOS


 La libertad hace del hombre un sujeto moral.
 Cuando actúa de manera deliberada, el hombre es, por así decirlo, el padre de sus actos.
 Los actos humanos, es decir, libremente realizados tras un juicio de conciencia, son
calificables moralmente; son buenos o malos.

LAS FUENTES DE LA MORALIDAD


 La moralidad de los actos humanos depende:
 Del objeto elegido.
 Del fin que se busca o la intención.
 De las circunstancias de la acción.
 El objeto, la intención y las circunstancias forman las “fuentes” o elementos constitutivos de la
moralidad de los actos humanos.
 El objeto elegido:
 Es un bien hacia el cual tiende deliberadamente la voluntad.
 Es la materia de un acto humano.
 El objeto elegido específica moralmente el acto del querer, según que la razón lo
reconozca y lo juzgue conforme o no conforme al bien verdadero.
 La intención:
 Se sitúa del lado del sujeto que actúa.
 Por estar ligada a la fuente voluntaria de la acción y por determinarla en razón del fin, es
un elemento esencial en la calificación moral de la acción.
 El fin es el término primero de la intención y designa el objeto buscado en la acción.
 Es un movimiento de la voluntad hacia un fin; mira al término del obrar. Apunta al bien
esperado de la acción emprendida. No se limita a la dirección de cada una de nuestras
acciones tomadas.
 Una intención buena (por ejemplo: ayudar al prójimo) no hace ni bueno ni justo un
comportamiento en sí mismo desordenado (como la mentira y la maledicencia). El fin no
justifica los medios.
 Las circunstancias:
 Comprendidas en ellas las consecuencias, son los elementos secundarios de un acto
moral.
 Agravan o disminuyen la bondad o la malicia moral de los actos humano (por ejemplo, la
cantidad de dinero robado).
 Pueden también atenuar o aumentar la responsabilidad del que obra (como actuar por
miedo a la muerte)
 No pueden de suyo modificar la calidad moral de los actos; no pueden hacer ni buena ni
justa una acción que de suyo es mala.
(el mundo de la vida, el mundo circundante, el horizonte de eventos).

LOS ACTOS BUENOS Y LOS ACTOS MALOS


 El acto moralmente bueno supone a la vez la bondad del objeto, del fin y de las circunstancias.
 Una finalidad mala corrompe la acción, aunque su objeto sea de suyo bueno (como orar y
ayunar “para ser visto por los hombre”)
 El objeto de la elección puede por sí solo viciar el conjunto de todo el acto.

LOS ACTOS BUENOS Y LOS ACTOS MALOS


 El acto moralmente bueno supone a la vez la bondad del objeto, del fin y de las circunstancias.
 Una finalidad mala corrompe la acción, aunque su objeto sea de suyo bueno (como orar y
ayunar “para ser visto por los hombres”).
 El objeto de la elección puede por sí solo viciar el conjunto de todo el acto.
 Es erróneo juzgar de la moralidad de los actos humanos considerando sólo la intención que los
inspira o las circunstancias (ambiente, presión social, coacción o necesidad de obrar, etc) que
son su marco
 Hay actos que, por sí y en sí mismos, independientemente de las circunstancias y de las
intenciones, son siempre gravemente ilícitos por razón de su objeto: la blasfemia y el perjurio,
el homicidio y el adulterio.
 No está permitido hacer el mal para obtener un bien.
LA MORALIDAD DE LAS PASIONES
 La persona humana se ordena a la bienaventuranza por medio de sus actos deliberados:
las pasiones o sentimientos que experimenta pueden disponerla y contribuir a ello.
(escrupuloso-puritano)
 El término “pasiones” pertenece al patrimonio del pensamiento cristiano.
 Los sentimientos o pasiones designan las emociones o impulsos de la sensibilidad que
inclinan a obrar o a no obrar en razón de lo que es sentido o imaginado como bueno o
como malo.
 Las pasiones son componentes naturales del psiquismo humano, constituyen el lugar de
paso y aseguran el vínculo entre la vida sensible y la vida del espíritu. Nuestro señor señala
al corazón del hombre como la fuente de donde brota el movimiento de las pasiones: Mc
7,21
 El amor:
 Las pasiones son numerosas
 La más fundamental es el amor que la atracción del bien despierta
 El amor causa el deseo del bien ausente y la esperanza de obtenerlo.
 Este movimiento culmina en el placer y el gozo del bien poseído.
 La aprehensión del mal causa el odio, la aversión y el temor ante el mal que puede
sobrevivir.
 Este movimiento culmina en la tristeza a causa del mal presente o en la ira que se opone a
él.
PASIONES Y VIDA MORAL
 En si mismas, las pasiones no son buenas ni malas.
 Solo reciben calificación moral en la medida en que dependen de la razón y de la voluntad.
 Las pasiones se llaman voluntarias “o porque están ordenadas por la voluntad, o porque la
voluntad no se opone a ellas”.
 Pertenece a la perfección del bien moral o humano el que las pasiones estén reguladas por
la razón.
 Los sentimientos más profundos no deciden ni la moralidad, ni la santidad de las personas;
son el depósito inagotable de las imágenes y de las afecciones en que se expresa la vida
moral.
 Las pasiones son moralmente buenas cuando contribuyen a una acción buena.
 Son malas en el caso contrario.
 La voluntad recta ordena al bien y a la bienaventuranza los movimientos sensibles que
asume
 La voluntad mala sucumbe a las pasiones desordenadas y las exacerba. Las emociones y
los sentimientos pueden ser asumidos en las virtudes, o pervertidos en los vicios.
 En la vida cristiana, el Espíritu santo realiza su …
 Ejercicio: ef 4, 17-5, 20
 Tarea: conciencia: psicología, neurociencia y realizar mapa mental: dignidad de la persona
humana hasta moral de las pasiones.

Conciencia
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Este aviso fue puesto el 12 de febrero de 2017.

Para otros usos de este término, véase Conciencia (desambiguación).


La conciencia (del latín conscientia, «conocimiento compartido», y éste de cum scientĭa, «con
conocimiento», el mismo origen que tiene consciencia, ser conscientes de ello) se define, en
términos generales, como el conocimiento que un ser tiene de sí mismo y de su entorno.
También puede referirse a la moral o a la recepción normal de los estímulos del interior y el
exterior por parte de un organismo.
Existe debate sobre en qué consiste exactamente la conciencia. En el área de la inteligencia
artificial se ha trabajado la idea de crear máquinas o programas suficientemente complejos
como para dar lugar a una conciencia artificial,[cita requerida] pero algunos han negado la
posibilidad de que una computadora pueda dar lugar a algo genuinamente indistinguible de
una conciencia.
La prueba de Turing (test de Turing), propuesta en 1950, aborda ese problema, hasta la
actualidad (2018) ningún programador ha conseguido con éxito superar satisfactoriamente
esta prueba (si bien un bot conversacional bautizado como Eugene Goostman de 2014, logró
engañar gran parte de un jurado de humanos que fueron usados para dicha prueba). Sin
embargo, el objetivo de dicho examen no es que un programa tenga conciencia, sino que nos
haga creer que la tiene.

Índice

 1Término
 2Conciencia en humanos
 3Conciencia en animales
 4Conciencia en la inteligencia artificial
 5Véase también
 6Referencias
 7Bibliografía
 8Enlaces externos

Término[editar]
El término conciencia se utiliza para distintos aspectos:

 El primero y de uso más extenso, se refiere a la captación, reconocimiento del sentido y la


relevancia de cualquier aspecto de la realidad o de uno (a) mismo (a). El término
conciencia no tiene por qué ser simplemente intelectual. Dentro del mismo podemos
diferenciar dos aspectos importantes:
 El psicológico: se refiere a la percepción de un objeto, situación o de uno mismo, por
lo que este acto de conciencia puede confundirse con el de autoconciencia.
 El gnoseológico-metafísico: La gnoseología es la rama de la filosofía que estudia el
origen, la naturaleza y los límites del conocimiento humano en general. Su
denominación se remonta a la antigua Grecia, donde filósofos se han ocupado de
estudiar cuestiones de la vida de los seres humanos. Se puede definir como la teoría
general del conocimiento, que se refleja en la concordancia del pensamiento entre el
sujeto y el objeto. En este contexto, el objeto es algo externo a la mente, una idea, un
fenómeno, un concepto, etc. El objetivo de la gnoseología es reflexionar sobre el
origen, la naturaleza o la esencia, y los límites del conocimiento, del acto cognitivo
(acción de conocer), por el sujeto.
La metafísica es una rama de la filosofía que estudia la naturaleza y la realidad,
además de aquellos aspectos de la realidad que son inaccesibles a la investigación
científica, es decir, lo inmaterial. Según Immanuel Kant, una afirmación metafísica se
produce cuando se traban los combates sin fin de la razón y para Aristóteles,
metafísica es la filosofía que trata las causas primeras abordando también la teología
y cosmología. Todo esto engloba el significado de gnoseológico-metafísico, que
podemos definir como la dependencia de la conciencia en el propio sujeto o el mismo
Yo.

 El segundo es el reconocimiento de aquello que está bien y de lo que está mal. Desde un
sentido moral, también podemos hablar de la toma de conciencia social o política, que se
puede definir como el conocimiento que tiene una persona sobre los demás integrantes de
su comunidad; y la concienciación ecológica, que es la aceptación y el intento por cambiar
los aspectos negativos producidos por el ser humano en la naturaleza.

Conciencia en humanos[editar]
Artículos principales: Conciencia (psicología) y Conciencia (psiquiatría).

En la especie Homo sapiens, la conciencia implica varios procesos


cognitivos interrelacionados. Se traduce del griego sy‧néi‧dē‧sis, de syn -'con'- y éi‧dē‧sis -
'conocimiento'-, de modo que significa co-conocimiento, o conocimiento con uno mismo.
Conciencia se refiere al saber de sí mismo, al conocimiento que el humano tiene de su propia
existencia, estados o actos. Conciencia se aplica a lo ético, a los juicios sobre el bien y el mal
de nuestras acciones. Una persona cloroformizada recobra la conciencia al cesar los efectos
del anestésico. Una persona "de conciencia recta" no comete actos socialmente reprobables.
La conciencia en psiquiatría puede también definirse como el estado cognitivo no abstracto
que permite la interactuación, interpretación y asociación con los estímulos externos,
denominados realidad. La conciencia requiere del uso de los sentidos como medio de
conectividad entre los estímulos externos y sus asociaciones.
Los humanos adultos sanos tienen conciencia sensitiva y conciencia abstracta, aunque
también el pensamiento abstracto se presentaría en otras especies animales, hasta un punto
que debe clarificarse.12 Filósofos como Aristóteles afirmaron y trataron de demostrar que el ser
humano es un animal racional a diferencia de los demás. [cita requerida]

Conciencia en animales[editar]
Artículo principal: Etología

El 7 de julio de 2012, científicos prominentes de diferentes ramas de las neurociencias, entre


ellos David Edelman del Instituto de Neurociencia en La Jolla, California; Philip Low de la
Universidad de Stanford y Christof Koch del Instituto de Tecnología de California, se dieron
cita en la Universidad de Cambridge para celebrar la Conferencia Conmemorativa Francis-
Crick,3 la cual trató sobre la conciencia en humanos y animales. .Al finalizar las conferencias
se firmó, en presencia de Stephen Hawking, la Cambridge Declaration On Consciousness4
(Declaración de Cambridge sobre la Conciencia5), la cual resumió los hallazgos más
importantes de la investigación allí expuesta y discutida:
"Decidimos llegar a un consenso y hacer una declaración para el público que no es científico. Es obvio,
para todos en este salón, que los animales tienen conciencia, pero no es obvio para el resto del mundo.
No es obvio para el resto del mundo occidental ni el lejano Oriente. No es algo obvio para la sociedad."
Philip Low, en la presentación de la Declaración de Cambridge sobre la Conciencia, 7 de julio de 2012

Algunos estudios han hablado de altos niveles de conciencia en algunas especies de


animales, comparándolos con niveles humanos.678910

Conciencia en la inteligencia artificial[editar]


Artículo principal: Inteligencia artificial

Existen dudas sobre la naturaleza de la conciencia y como se relaciona ella con la inteligencia
artificial; y no se sabe con seguridad si la conciencia como fenómeno cognitivo es sólo el
resultado de la complejidad computacional (o neuronal en los seres vivos), y/o es
un fenómeno emergente de la interacción de la materia.
Roger Penrose se ha ocupado del problema de la realidad física de la inteligencia y ha
analizado diversas pretensiones teóricas por parte de la inteligencia artificial de simular o
construir artefactos que posean algún tipo de conciencia.1112 Penrose clasifica las posturas
actuales ante la cuestión de si la conciencia es o no computable algorítmicamente:
A. Todo pensamiento es un proceso de computación, es decir, en particular la
percepción de uno mismo y la autoconciencia son procesos emergentes que son
resultado directo de la computación o algoritmo adecuados.
B. La conciencia es una consecuencia del tipo de acción física que ocurre en el
cerebro, y aunque cualquier acción física puede simularse apropiada a través de
medios computacionales, el hecho de que se lleve a cabo un proceso de simulación
computacional del cerebro no comportaría, por sí mismo, la aparición auténtica de la
autoconciencia.
C. La realización de cierta actividad física en el cerebro es lo que lleva a la aparición
de la autoconciencia en el ser humano; sin embargo, aunque puede ser reproducida
artificialmente, dicha acción no puede simularse algorítmicamente.
D. La conciencia de tipo humano no puede entenderse propiamente en términos
físicos, computacionales o científicos de otro tipo.
El punto de vista D claramente niega la posibilidad de comprensión científica
de la conciencia. Muchos investigadores del campo de la inteligencia artificial,
en particular los más optimistas sobre sus logros, se adhieren a la
postura A. John Searle sería más bien un partidario de la postura B, y el
propio Penrose ha argumentado fuertemente en su trabajo por la postura C,
relacionándola con varios otros problemas abiertos de la física como la teoría
cuántica de la gravedad.

¿Qué es la consciencia? ¿Cuál es su esencia, la chispa que hace que


seamos nosotros? Algo hermoso que aparentemente se encuentra
dentro de cada uno y que nos permite saber quiénes somos y cómo
es el mundo que nos rodea.
El siguiente texto ha sido extraído, traducido y adaptado a partir del libro
“Conciencia y el cerebro social” escrito por Michael S. A. Graziano, de la
universidad de Oxford:

Estaba observando un espectáculo de magia. Una mujer se encontraba


dentro de una caja de madera en la que se podía ver su rostro sonriente,
mientras un mago pasaba largas espadas a través de la caja.

El hombre que estaba sentado a mi lado, le susurro a su hijo,


“Jimmy, ¿Cómo crees que hace eso?

El niño que contaba con 6 o 7 años de edad, no se impresionó por la


pregunta de su padre y entre dientes dijo, “Es obvio, papá”.

“¿A si?”, dijo su padre. “¿Has descubierto cual es el truco?”

“El mago hace que suceda así”, dijo el niño.

El mago lo hace posible. Esa explicación, tan encantadora y vacía como


suena, podría ser un resumen de casi todas las teorías espirituales y
científicas que se han propuesto para explicar lo que es la consciencia
humana.

¿Qué es la consciencia? ¿Cuál es su esencia, la chispa que hace que


seamos nosotros? Algo hermoso que aparentemente se encuentra dentro
de cada uno y que nos permite saber quiénes somos y cómo es el mundo
que nos rodea. Sin consciencia seriamos como zombies sin ningún
tipo de curiosidad, incluso sin saber que hay un mundo lleno de cosas por
descubrir, sin ninguna motivación para profundizar, ya sea en áreas
emocionales, artísticas, espirituales o científicas. La consciencia es la
ventana por la cual podemos entender.
Nuestro cerebro cuenta con alrededor de cien millones de neuronas que
interactúan entre sí. Los neurocientíficos saben, al menos de forma global,
que las neuronas tienen la capacidad de calcular información. Pero, ¿Cómo
puede el cerebro ser consciente de esa información? ¿Dónde se
encuentra la capacidad de sentirnos a nosotros mismos?

La primera explicación científica conocida


acerca de la consciencia viene desde el siglo V a.c, gracias a Hipócrates.
En ese entonces, la ciencia no estaba establecida en la sociedad como hoy
en día. Sin embargo, Hipócrates fue un agudo observador de casos médicos
y se dio de que las personas con cierto daño cerebral tienden a perder sus
capacidades mentales. Comprobó que la consciencia es creada por el
cerebro y que se puede perder poco a poco a medida que el cerebro
muere. Un pasaje atribuido a él resume elegantemente su punto de vista:

“Las personas deben saber que desde el cerebro, y solamente desde el


cerebro, surgen nuestros placeres, alegrías, risas y bromas, así como
nuestras penas, dolores, angustias y lágrimas. A través de él también
pensamos, vemos, escuchamos y distinguimos lo feo de lo bello, lo malo de
lo bueno, lo agradable de lo desagradable.”

Con esta visión Hipócrates puso en marcha 2500 años de


neurociencia. Ésta se tomo durante mucho tiempo como una explicación
específica de la consciencia, sin embargo cabe aclarar que la definición
de Hipócrates no nos ayuda mucho. En lugar de explicar lo que es la
consciencia, se limita a indicar que el cerebro es una especie de mago.
Como la afirmación del niño. El cerebro hace que suceda. Pero ¿cómo lo
hace? ¿Qué es exactamente la consciencia? Estas preguntas van mas
allá de sus observaciones médicas.

2000 años después de Hipócrates, más concretamente en el año


1641, René Descartes propuso una segunda visión de las bases de la
consciencia. En su opinión, la mente estaba hecha de una sustancia
etérea, una especie de fluido almacenado en

un receptáculo del cerebro. Lo llamó


“rescogitans” (Sustancia pensante). Cuando diseccionó el cerebro en
busca del receptáculo del alma, se dio cuenta de que prácticamente toda la
estructura cerebral se había formado en pares, uno a cada lado. Según él,
el alma era una entidad unificada, una sola cosa, por lo tanto no podía
estar dividida y almacenada en dos lugares diferentes. Finalmente halló un
pequeño bulto en la parte central del cerebro, era la glándula pineal,
entonces dedujo que ésta debía ser la casa del alma. Hoy en día
sabemos que esta glándula se encarga de producir melatonina, regulando
así los ciclos del sueño.

La idea de Descartes, aunque fresca e inteligente para la época y con gran


influencia en la filosofía y la teología, no logró adelantos en la comprensión
científica de la consciencia. En lugar de proponer una explicación clara de la
consciencia lo atribuyó a una especie de fluido mágico. Mediante que
mecanismo ésta sustancia produce la experiencia de la consciencia o de
dónde viene este fluido, no fue explicado por Descartes. En realidad apunta
al mago sin explicar el truco.

Uno de los pilares fundamentales de la ciencia moderna y en especial de la


psicología actual, es un tratado brillante realizado por Immanuel Kant,
titulado “Crítica de la razón pura (PDF)” publicado en 1781. En él Kant
señala que la mente se basa en lo que el denominó “a priori forms”,
capacidades e ideas que están presentes en nosotros antes que
todas las explicaciones. Por lo tanto acerca de la consciencia Kant tenia
una clara respuesta: No hay una explicación para la magia. Viene a
nosotros por acto divino. Literalmente, el mago lo hizo.

Hipócrates, Descartes y Kant tan solo representan tres visiones


particulares de la mente en la historia de la ciencia. Podría continuar
describiendo una visión tras otra, sin embargo no llegaríamos a mucho
más. Incluso con el rápido avance de la neurociencia moderna, si
examináramos la gran cantidad de teorías propuestas acerca de la
consciencia, casi todas tienen la misma limitación. No son realmente teorías
que explican el mecanismo a través del cual la consciencia fluye, sino que
señalan al mago pero no explican su magia.

Una de
las primeras teorías innovadoras sobre la consciencia fue propuesta
por los científicos Francis Crick (co-descubridor de la estructura del ADN)
y Christof Koch. Sugirieron que cuando las señales eléctricas en el
cerebro oscilan, causan la consciencia. Para dejarlo más claro, la idea
es: El cerebro se compone de neuronas que transmiten la información entre
sí. Esta información se trasmite más eficientemente en cortos períodos de
tiempo si las señales eléctricas de las neuronas oscilan en sincronía. Por lo
tanto, la consciencia podría ser causada por la actividad eléctrica de
muchas neuronas oscilando en conjunto.

Ésta teoría tiene cierta plausibilidad. Quizá las oscilaciones neuronales,


son una condición que antecede a la consciencia. Aunque debemos
tener en cuenta que una vez más esta hipótesis no es realmente una
explicación de la consciencia. Se identifica a un mago. Al igual que
Hipócrates “El cerebro lo hace” o como decía Descartes, “El fluido
mágico dentro del cerebro hace que ocurra”, la teoría moderna
establece que “Las oscilaciones neuronales hacen que ocurra” aunque
todavía no sabemos cómo. Supongamos que las oscilaciones neuronales en
realidad aumentan la eficacia de la trasmisión de información. Esto es
asombroso y según la evidencia reciente, parece probable que sea así.
Pero ¿por qué al mejorarse la trasmisión de información tiene como
consecuencia la consciencia? ¿Por qué esta experiencia interior?
¿Por qué la información en el cerebro, sin importar cuánto se
incremente su intensidad de trasmisión de un sitio a otro, no sigue
siendo solo información sin el complemento de la consciencia?

Por estas y muchas otras razones, muchos pensadores son pesimistas


acerca de encontrar en algún momento una explicación lógica para la
consciencia. El filósofo Chalmers, en 1995, eligió un camino que ha ido
tomando popularidad. Él sugirió que el desafío que implica definir y
explicar la consciencia se puede dividir en dos grupos de
problemas. El primero de ellos, el problema fácil, es explicar como es
que el cerebro calcula y almacena la información. Por supuesto llamarlo
fácil, es un eufemismo. El segundo problema, el problema difícil es
explicar como nos damos cuenta de todo lo que pasa en el cerebro. La
consciencia de sí mismo, la esencia detrás de todo, ya que se dice que
no es algo físico, es por definición una experiencia privada, y por eso
parece ser científicamente inabordable. De nuevo al llamarlo el problema
difícil es un eufemismo; es casi el problema imposible. No tenemos más
remedio que considerarlo un misterio. En lugar de tratar de explicar la
consciencia, deberíamos maravillarnos de su solubilidad.

El estudio científico actual de la consciencia me recuerda en muchos


aspectos a callejones sin salida. Charles Darwin publicó su reconocido libro
“El origen de las especies” (PDF) en 1859, pero mucho antes de
Darwin, los naturalistas ya habían sospechado que una especie
podía evolucionar hacia otra y que las diferentes especies podrían
estar relacionadas en un árbol genealógico. La idea del árbol
genealógico se articuló un siglo antes de Darwin, por Linneo en 1758. No

obstante lo que hacía falta era explicar el truco.


¿Cómo ocurrió realmente? ¿Cómo diversas especies cambian con el
tiempo hasta ser diferentes unas de otras y lograr ser tan
sofisticados en las funciones que debían cumplir? Los estudiosos
exploraron callejones conceptuales sin salida, sin esto una explicación
plausible no habría podido ser hallada. Nadie podía pensar en una
explicación mecánica, ya que esta estaba fuera del reino de la
imaginación humana, ya que la grandeza y la complejidad de la vida era
obviamente demasiado mágica para ser algo mundano, una deidad superior
debía ser la responsable. El mago hizo que fuera posible. Había que
aceptar el gran misterio y no invertir mucho esfuerzo en explicarlo.

Después, Darwin descubrió el truco. Un ser vivo tiene muchos hijos, la


descendencia varía aleatoriamente, y el medio natural, al ser un lugar duro,
permite que solo algunos descendientes vivan para procrear, por lo que los
descendientes con las mejores adaptaciones pasan sus genes a sus propios
descendientes y así sucesivamente. Con el paso del tiempo y miles de
pequeñas adaptaciones acumuladas, una especie puede ser muy
diferente de sus antepasados. Ésto es la evolución por selección natural.
Una vez se descubre el truco detrás de la magia, parece tan simple, y al
mismo tiempo angustiante o maravillosa, dependiendo de su estado de
ánimo. Como Huxley escribió en una célebre carta dirigida a Darwin, “¡Que
estúpido de mi parte no haber pensado en eso!”

Podríamos decir que la neurociencia de la consciencia es pre-


darwiniana. Estamos muy seguros de que es el cerebro el que crea la
consciencia pero desconocemos el truco. ¿Encontrará la ciencia una
teoría que nos permita entender el fenómeno de la consciencia?

Bien, propongo una teoría sobre la consciencia, que a diferencia de


la mayoría de las teorías planteadas hasta el momento, no señala a
un mago. No se limita a apuntar cierta estructura o proceso cerebral para
exclamar sin más explicación: ¡Esto es la consciencia! Aunque hago
referencia a áreas específicas del cerebro y a una categoría de información
específica, intento explicar el truco tras la magia. Lo que trato de
explicar no es solo “Aquí está el mago que lo hace” sino también
“Así es como el mago lo hace”.
Hace más de 20 años empecé a estudiar cómo la vista, el tacto y el oído se
fusionan en el cerebro y como esa información era usada para coordinar el
movimiento de las extremidades. Estas cuestionen en concreto pueden
parecer muy alejadas del tema de la consciencia, pero con los años me he
dado cuenta de que los conocimientos básicos sobre el cerebro, el
procesamiento sensorial y el control del movimiento,
proporcionaban una posible respuesta a la cuestión de la
consciencia.

En el cerebro se originan dos procesos que son de particular importancia


para la actual teoría. En primer lugar, utiliza un método que la mayoría
de los científicos llama “La atención”. Al carecer de los recursos suficientes
para procesar todo al mismo tiempo, centra todos sus procesos hacia
algunos elementos que necesita en un momento dado. La atención es un
truco del cerebro para el manejo de información y así profundizar en
algunos datos a expensas de los demás datos. En segundo lugar el
cerebro usa datos internos para generar modelos simplificados o
esquematizados de los objetos y situaciones que componen el mundo.
Estos modelos son usados para probar cosas, hacer simulaciones y
planificar acciones.

¿Qué sucede cuando


el cerebro inevitablemente combina estos dos procesos? En teoría la
consciencia es un modelo simplificado del cerebro, un modelo
esquemático del complicado manejo de información. Por otra parte, el
cerebro puede usar la construcción de la consciencia para modelar su
propio estado de atención, o para modelar el estado de atención de
cualquier otra persona. Por ejemplo, Harry podría estar fijando su
atención en una mancha de café en su camisa. Miramos a Harry y se
entiende que él es consciente de la mancha. En teoría, gran parte de la
maquinaria, regiones del cerebro y el procesamiento de datos que
usamos en un contexto social para atribuir consciencia a alguien
más, también se utiliza continuamente para construir nuestra propia
consciencia y atribuírnosla a nosotros mismos. La percepción social y la
consciencia comparten la misma base. La teoría del esquema de
atención, como eventualmente la he llamado, trata de explicar la
consciencia de una manera científicamente plausible sin trivializar el
problema.

Esta teoría generó un gran número de reacciones por parte de


expertos en el tema de la mente y la consciencia. Muchos eran
entusiastas, algunos eran prudentes y unos pocos se oponían directamente.
Agradezco los comentarios que me ayudaron a dar forma a la idea y a su
presentación. Siempre es difícil comunicar una nueva idea. Puede
tomarle años a la comunidad científica para darse una idea de que es lo
que se está planteando, igualmente pueden tomar muchos años para que el
que plantea la idea encuentre la mejor forma de trasmitirla.

Nadie sabe a ciencia cierta cómo es que el cerebro crea la consciencia,


pero la teoría de los esquemas de atención parece ser prometedora.
Explica los principales fenómenos. Es lógica, conceptualmente simple,
comprobable y cuenta con el apoyo de una serie de experimentos
anteriores a su formulación. No es una teoría opuesta a los tres o cuatro
puntos de vista principales de la neurociencia acerca de la consciencia. Más
bien, este enfoque combina muchas de las anteriores teorías y
líneas de pensamiento, es la construcción de un marco conceptual único,
combinando todos los puntos fuertes. Por todas estas razones, es una
teoría que me emociona, al ser una explicación biológica de la mente,
de la consciencia misma y estoy impaciente por comunicarla
adecuadamente.

LA CONCIENCIA MORAL
 “En lo más profundo de su conciencia el hombre descubre una ley que él no se da a sí
mismo, sino a la que debe obedecer y cuya voz resuena, cuando es necesario, en los oídos
de su corazón, llamándole siempre a amar y a hacer el bien y evitar el mal….
 El hombre tiene una ley inscrita por Dios en su corazón… la conciencia es el núcleo más
secreto y el sagrario del hombre, en el que está solo con Dios, cuya voz resuena en lo más
íntimo de ella”.

EL DICTAMEN DE LA CONCIENCIA
 Presente en el corazón de la persona, la conciencia moral le ordena, en el momento
oportuno, practicar el bien y evitar el mal.
 Juzga las opciones concretas aprobando las que son buenas y denunciando las que son
malas.
 Atestigua la autoridad de la verdad con referencia al bien supremo por el cual la persona
humana se siente atraída y cuyos mandamientos acoge.
 El hombre prudente, cuando escucha la conciencia moral, puede oír a Dios que le habla.
 La conciencia moral es un juicio de la razón por el que la persona humana reconoce la
cualidad moral de un acto concreto que piensa hacer, esta haciendo o ha hecho.
 En todo lo que dice y hace, el hombre está obligado a seguir fielmente lo que sabe que es
justo y recto.
 Mediante el dictamen de su conciencia el hombre percibe y reconoce las prescripciones de
la ley divina:
 La conciencia es una ley de nuestro espíritu, pero que va más allá de él, nos da
órdenes, significa responsabilidad y deber, temor y esperanza…
 La conciencia es la mensajera del que, tanto en el mundo de la naturaleza como en el
de la gracia, a través de un velo nos habla, nos instruye y nos gobierna.
 La conciencia es el primero de todos los vicarios de cristo.
 Es preciso que cada uno preste mucha atención a sí mismo para oír y seguir la voz de su
conciencia.
 La interioridad es tanto más necesaria cuanto que la vida nos impulsa con frecuencia a
prescindir de toda reflexión, examen o interiorización.
 La dignidad de la persona humana implica y exige la rectitud de la conciencia moral.
 La conciencia moral comprende:
 La percepción de los principios de la moralidad
 Su aplicación a las circunstancias concretas
 Un discernimiento práctico de las razones y de los bienes.
 El juicio formando sobre los actos concretos que se van a realizar o se han realizado.
 El dictamen prudente de la conciencia

SE LLAMA PRUDENTE AL HOMBRE QUE ELIGE CONFORME A ESTE DICTAMEN O JUICIO.


 La conciencia hace posible asumir la responsabilidad de los actos realizados
 “EL hombre tiene el derecho de actuar en conciencia y en libertad a fin de tomar
personalmente las decisiones morales.
 No debe ser obligado a actuar contra su conciencia. Ni se le debe impedir que actúe según su
conciencia, sobre todo en materia religiosa”.

LA FORMACIÓN DE LA CONCIENCIA

27/09/2018
LAS VIRTUDES
 Flp 4, 8.
 La virtud es una disposición habitual y firme a hacer el bien.
 Permite a la persona no sólo realizar actos buenos, sino dar lo mejor de sí misma.
 Con todas sus fuerzas sensibles y espirituales, la persona virtuosa tiende hacia el bien, lo busca
y lo elige a través de acción concretas.
 Las virtudes humanas:
 Actitudes firmes, disposiciones estables, perfecciones habituales del entendimiento y
de la voluntad. Que:
 Regulan nuestros actos, ordenan nuestras pasiones, Guían nuestra conducta según la
razón y la fe. Proporcionan:
 Facilidad, dominio, gozo, para llevar una vida moralmente buena.
 Las virtudes morales se adquieren mediante las fuerzas humanas.
 Son los frutos y los gérmenes de los actos moralmente buenos.
 Disponen todas las potencias del ser humano para armonizarse con el amor divino.

LAS VIRTUDES CARDINALES


 La prudencia
 La justicia
 La fortaleza
 La templanza.

LA PRUDENCIA:
 La virtud que dispone la razón práctica a discernir en toda circunstancia nuestro verdadero
bien y a elegir los medios rectos para realizarlo.
 El hombre cauto medita sus pasos Pr 14,15.
 “Sed sensatos y sobrios para daros a la oración” 1 Pe 4,7
 No se confunde ni con la timidez o el temor, ni con la doblez o la disimulación.
 Conduce las otras virtudes indicándoles reglas y medida.
 Es la prudencia quien guía directamente el juicio de conciencia.
 El hombre prudente decide y ordena su conducta según este juicio.
 Gracias a la prudencia se puede superar las dudas sobre el bien que debemos hacer y el mal
que debemos evitar.

LA JUSTICIA:
 Es la virtud moral que consiste en la constante y firme voluntad de dar a Dios y al prójimo lo
que les es debido.
 La justicia para con Dios es llamada “la virtud de la religión”.
 Para con los hombre, la justicia dispone a respetar los derechos de cada uno y a establecer en
las relaciones humanas la armonía que promueve la equidad respecto a las personas y al bien
común.
 El hombre justo, evocado con frecuencia en las Sagradas Escrituras, se distingue por la rectitud
habitual de sus pensamientos y de su conducta con el prójimo.

LA FORTALEZA
 Virtud que asegura en las dificultades la firmeza y la constancia en la búsqueda del bien.
 Resistencia frente a la tentación.
 Ayda a el temor, incluso a la muerte y de hacer frente a persecuciones.

LA TEMPLANZA:
 Es la virtud moral que modera la atracción de los placeres y procura el equilibrio en el uso de
los bienes creados.
 Asegura el dominio de la voluntad sobre los instintos.
 Mantienen los deseos en los límites de la honestidad
 La persona moderada:
 Orienta hacia el bien sus apetitos sensibles
 Guarda una sana discreción
 No se deja arrastrar “para seguir la pasión de su corazón”

Vivir bien no es otra cosa que amar a Dios con todo el corazón, con toda el alma y con todo el
obrar.
Quien no obedece más que a él (lo cual pertenece a la justicia), quien vela par discernir todas las
cosas por miedo a dejarse sorprender por la astucia y la mentira (lo cual pertenece a la prudencia),
le entrega un amor entero (por la templanza), que ninguna desgracia puede derribar (fortaleza).

04 OCTUBRE 2018

LAS VIRTUDES Y LA GRACIA:


 Las virtudes humanas se adquieren mediante:
o La educación
o Actos deliberados
o Perseverancia
o Con el esfuerzo
 Son purificadas y elevadas por la gracia divina
 Con la ayuda de Dios forjan el carácter y dan soltura en la práctica del bien
 EL hombre virtuoso es feliz al practicarlas.
LAS VIRTUDES TEOLOGALES
 Las virtudes humanas se arraigan en las virtudes teologales que adaptan las facultades del
hombre a la participación de la naturaleza divina.
 Las virtudes teologales se refieren directamente a Dios.
 Disponen a los cristianos a vivir en relación con la Santísima Trinidad.
 Tienen como origen, motivo y objeto a Dios Uno y Trino.
 Las virtudes teologales fundan, animan y caracterizan el obrar moral del cristiano.
 Informan y vivifican todas las virtudes morales.
 Son infundidas por Dios en el alma de los fieles para hacerlos capaces de obrar como hijos
suyos y merecer la vida eterna.
 Son la garantía de la presencia y la acción del Espíritu Santo en las facultades del ser humano.
 Las virtudes teologales son:
o La fe
o La esperanza
o La caridad
LA FE
 La fe es la virtud teologal por la que creemos en Dios y en todo lo que Él nos ha dicho y
revelado, y que la Santo iglesia nos propone, porque Él es la verdad misma.
 Por la fe “el hombre se entrega entera y libremente a Dios” (DV5)
 Por la fe el creyente está llamado a esforzarse por conocer y hacer la voluntad de Dios.
 El don de la fe permanece en el que no ha pecado contra ella.
 La fe sin obras está muerta: privada de la esperanza y de la caridad, la fe no une plenamente el
fiel a cristo ni hace de él un miembro vivo de su cuerpo.
 El discípulo de Cristo no debe sólo guardad la fe y vivir de ella sino también profesarla,
testimoniarla con firmeza y difundirla.
 El servicio y el testimonio de la fe son requeridos para la salvación.

LA ESPERANZA
 La esperanza es la virtud teologal por la que aspiramos al Reino de los cielos y a la vida eterna
como felicidad nuestra.
 Poniendo nuestra confianza en las promesas de Cristo.
 Apoyándonos no en nuestras fuerzas, sino en los auxilios de la Gracia del Espíritu Santo.
 La virtud de la esperanza corresponde al anhelo de felicidad puesto por Dios en el corazón de
todo hombre
 Asume las esperanzas que inspiran las actividades de los hombres
 Las purifica para ordenarlas al Reino de los cielos
 Protege del desaliento y sostiene en todo desfallecimiento
 Dilata el corazón en la espera de la bienaventuranza eterna.
 El impulso de la esperanza preserva del egoísmo y conduce a la dicha de la caridad.
 La esperanza cristiana se manifiesta desde el comienzo de la predicación de Jesús en la
proclamación de las bienaventuranzas
 Las bienaventuranzas elevan nuestra esperanza hacia el cielo como hacia la nueva tierra
prometida.
 Trazan el camino hacia ella a través de las pruebas que esperan a los discípulos de Jesús.
 Es una arma que nos protege en el combate de la salvación: “Revistamos la coraza de la fe y de
la caridad, con el yelmo de la esperanza de salvación”
 Se expresa y se alimenta en la oración, particularmente en la del Padre Nuestro, resumen de
todo lo que la esperanza nos hace desear.
LA CARIDAD:
 La caridad es la virtud teologal por la cual amamos a Dios sobre todas las cosas por el mismo y
a nuestro prójimo como a nosotros mismos por amor de Dios.
 Jesús hace de la caridad el mandamiento nuevo, amando a los suyos “hasta el fin” manifiesta
el amor del Padre que ha recibido
 Amándose unos a otros, los discípulos imitan el amor de Jesús que reciben también en ellos.
 “Este es el mandamiento mío: que os améis unos a otros como yo os he amado” (Jn 15, 12)
 El ejercicio de todas las virtudes está animado e inspirado por la caridad.
 Esta es “el vínculo de la perfección” (Col 3,14); es la forma de las virtudes, las articula

 La caridad tiene por frutos el gozo, la paz y la misericordia


 Exige la práctica del bien y la corrección fraterna, es benevolencia, suscita la reciprocidad; es
siempre desinteresada y generosa, es amistad y comunión.

DONES Y FRUTOS DEL ESPÍRITU SANTO


 La vida moral de los cristiano está sostenida por los dones del Espíritu Santo.
 Estos son disposiciones permanentes que hacen al hombre dócil para seguir los impulsos del
Espíritu Santo.
 Son; sabiduría, inteligencia, consejo, fortaleza, ciencia, piedad y temor de Dios.
 Los frutos del Espíritu santo son perfecciones que forman en nosotros el Espíritu Santo como
primicias de la gloria eterna.
 La tradición de la Iglesia enumera doce: caridad, gozo, paz, paciencia, longanimidad, bondad,
benignidad, mansedumbre, fidelidad, modestia, continencia, castidad.

TAREA:
 Definir cada uno de los dones del Espíritu Santo.
 Exponer un santo y decir de que manera han vivido las virtudes teologales.
 Quien es el santo, por que se caracteriza el santo desde las virtudes teologales.

EL PECADO
 El pecado es una falta contra la razón, la verdad, la conciencia recta.
 Es faltar al amor verdadero para con Dios y para con el prójimo, a causa de un apego perverso
a ciertos bienes.
 Hiere la naturaleza DEL HOMBRE Y Atenta contra la solidaridad humana.
 Es una palabra, un acto o un deseo contrarios a la ley eterna.
 El pecado es una ofensa a Dios
 El pecado se levanta contra el amor que Dios nos tiene y aparta de El nuestros corazones.
 Es una desobediencia, una rebelión contra Dios por el deseo de hacerse “como dioses”.

LA DIVERSIDAD DE PECADOS
 La variedad de pecados es grande.
 La escritura contiene varias listas.
 Ga 5, 19-21
 Rm 1, 28-32
 1Co 6, 9-10
 Ef 5, 3-5
 Col 3, 5-8
 1 Tm 1, 9-10
 2 Tm 3, 2-5
 Los pecados se pueden distinguir:
 Según su objeto, como en todo acto humano.
 Según las virtudes a las que se oponen, por exceso o por defecto.
 Según los mandamientos que quebrantan.
 Se los puede agrupar según se refieran a Dios, al prójimo o así mismo.
 Se los puede dividir en;
 Pecados espirituales y carnales, pecados pensamiento, palabra, acción u omisión.

La raíz del pecado está en; el corazón del hombre, su libre voluntad.
 Mt 15, 19-20
 En el corazón reside también la caridad, principio de las obras buenas y puras, a la que
hiere el pecado.
LA GRAVEDAD DEL PECADO
PECADO MORTAL
 Destruye la caridad en el corazón del hombre por una infracción grave de la ley de Dios.
 Aparta al hombre de Dios, que es su fin último y su bienaventuranza
 Prefiriendo un bien inferior.
PECADO VENIAL
 Deja subsistir la caridad, aunque la ofende y la hiere.

PECADO MORTAL:
 Ataca en nosotros el principio vital que es la caridad.
 Necesita una nueva iniciativa de la misericordia de Dios.
 Necesita de una conversión del corazón que se realiza en la reconciliación.
 Para que un pecado sea mortal se requieren tres condiciones:
o Que tenga como objeto una materia grave.
o Sea cometido con pleno conocimiento
o Deliberado consentimiento.
 La materia grave:
o Señalada en los 10 mandamientos: no mates, no cometas adulterio, no robes, no
levantes testimonio falso, no seas injusto, honra a tu padre y a tu madre
 La gravedad de los pecados es:
o Mayor o menor: un asesinato es más grave que un robo.
o La cualidad de las personas lesionadas cuenta también.
o La violencia ejercida contra los padres es más grave que la ejercida contra un
extraño.
 El pecado mortal requiere
o Plena conciencia
o Entero consentimiento
 Presupone el conocimiento del carácter pecaminoso del acto, de su oposición a la ley de
Dios.
 Implica un consentimiento suficientemente deliberado para ser una elección personal.
 La ignorancia afectada y el endurecimiento del corazón no disminuyen, sino aumentan, el
carácter voluntario del pecado.
 La ignorancia involuntaria puede disminuir, si no excusar, la imputabilidad de una falta
grave.
 Se supone que nadie ignora los principios de la ley moral que está inscritos en la
conciencia de todo hombre.
 Los impulsos de la sensibilidad, las pasiones pueden igualmente reducir el carácter
voluntario y libre de la falta, lo mismo que las presiones exteriores o los trastornos
patológicos.
 El pecado más grave es:
o El que se comete por malicia
o Por elección deliberada del mal
EL PECADO MORTAL ES UNA POSIBILIDAD RADICAL DE LA LIBERTAD HUMANA COMO LO ES
TAMBIÉN EL AMOR.

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