IV DOMINGO DE PASCUA

MONICION DE ENTRADA
Hermanos, IV domingo de Pascua nos invita a seguir al Buen Pastor
reconozcamos su voz de salvación en esta celebración en la que
oramos por las vocaciones de especial consagración y el Día de la
Madre
Puesto en Pie iniciamos nuestra celebración

MONICIÓN A LA 1° LECTURA
La lectura del libro de los hechos de los apóstoles nos dice que pablo
y Bernabé lleva la buena noticia a un pueblo pagano por mandato de
Dios para la salvación. Escuchemos con Fe

MONICIÓN DE SALMO
Hermanos al salmo responderemos con la siguiente antífona:
“Somos su pueblo y ovejas de su rebaño”

MONICIÓN A LA 2° LECTURA
El libro de Apocalipsis nos enseña que los vencedores en Cristo
darán culto a Dios en espíritu y en verdad. Escuchemos con un
corazón agradecido

MONICIÓN DEL EVANGELIO

El evangelio de San Juan presenta las ovejas que escuchan la voz
del Señor.
Hermanos nos ponemos en pie para la aclamación del Santo
Evangelio
Aleluya: “Yo soy el buen pastor – dice el Señor – Conozco mis
ovejas, y las mías me conocen.
Termina la Lectura Evangelio: Podemos sentarnos
PLEGARIA UNIVERSAL:
A cada petición responderemos:
Guía a tu pueblo, Señor
- Por el Papa Francisco, para que Cristo este siempre presente
en su labor de pastoreo y conduzca a la Iglesia hacia fuentes
tranquilas. Roguemos al Señor.
- Por los obispos y sacerdotes para que como buenos pastores
acompañen a sus ovejas con silbos amorosos, aunque
caminen por cañadas oscuras. Roguemos al Señor.
- Por los que dedican su tiempo a la predicación y el anuncio del
evangelio para que no pierdan de vista a Cristo el único Buen
Pastor. Roguemos al Señor.
- Por la consolidación de las vocaciones y para que no falte
jamás nuestra oración y nuestra ayuda para quienes se educan
en el nombre de Jesús. Roguemos al Señor.
- Por los enfermos y necesitados para que sientan como Cristo,
el Buen Pastor, atiende sus heridas y los carga sobre sus
hombros Roguemos al Señor.
- Por todos nosotros para que siguiendo con confianza al Buen
Pastor, caminemos sin temor tras sus pasos a pesar de la
oscuridad que nos rodea. Roguemos al Señor.

Terminada la oración de las peticiones se dice:

“Podemos tomar asiento”

ANTÍFONA DE COMUNIÓN
Señor, quiero reconocer tu voz en medio del ruido incesante del
mundo que me distrae y me aleja de ti. Quiero que tú me llames por
mi nombre, a voz alta cada vez que me pierdo en el camino y me
alejo de ti Jesús.
Acerquémonos a tú llamado en la Santa Comunión.