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Apuntes de Juicios Orales en Materia Civil

Elaborados por el Licenciado Rosalío Albor Ortiz


Profesor de Asignatura Ordinario Nivel “A”

ASIGNATURA: JUICIOS ORALES EN MATERIA CIVIL

Unidad 1. Argumentación Jurídica.

Objetivo particular:
Analizar los elementos y las estrategias necesarias para conocer y celebrar en forma eficiente
y con ética profesional la expresión jurídico-oral para realizar procedimientos orales en
materia civil.

Breve análisis de la frase “argumentación jurídica”.

El cuarto párrafo del artículo 14 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos
dispone:

“En los juicios del orden civil, la sentencia definitiva deberá ser conforme a la letra o a la
interpretación jurídica de la ley, y a falta de ésta se fundará en los principios generales del
derecho”.

El verbo interpretar proviene del latín interpretatio, interpretationis que significa explicación,
interpretación, traducción, declaración de los textos faltos de claridad.

El vocablo latino interpres, interpretis indica agente entre dos partes, intermediario,
mediador, en medio de.

El artículo 4 constitucional entre otros derechos fundamentales del hombre establece que el
varón y la mujer son iguales ante la ley, que toda familia tiene derecho a disfrutar de una
vivienda digna y decorosa.
¿A qué igualdad se refiere la oración gramatical “el varón y la mujer son iguales ante la ley?
¿Qué se debe entender por “una vivienda digna y decorosa” para toda familia?

El vocablo argumentación indica la acción y el efecto de argumentar.


Argumentar consiste en sacar en claro, descubrir, probar un hecho, una tesis.

En Lógica se entiende por argumentación el ejercicio escolar que consiste en una discusión
metódica entre dos adversarios, uno de los cuales propone y defiende una tesis, y el otro le
opone objeciones.

El verbo argumentar proviene del latín argumentum que significa prueba, razón que
convence, argumento, demostración.

Argumentar consiste en presentar, invocar un conjunto de razones o de pruebas para fundar,


apoyar una conclusión.

Argumentar es invocar razones o “pruebas” en favor de lo afirmado o negado en un tema


determinado sujeto a discusión.

“La demostración es un argumento que junto con la prueba, y con independencia de ella,
constituyen dos grandes especies en que la argumentación fundamentalmente se divide: se
demuestran las tesis y se prueban los hechos, o para decirlo más técnicamente, se
demuestran las proposiciones abstractas y se prueban las proposiciones fácticas”. (Jaime M.
Mans Puigarnau, Lógica para Juristas, p. 12).

1.1 Técnicas y estrategias.

El término técnica designa el conjunto de procedimientos y recursos de que se sirve


una ciencia o un arte. Pericia o habilidad para usar de esos procedimientos y recursos
para lograr un objeto determinado, una obra de arte.

El adjetivo técnico, técnica del griego de arte:


perteneciente o relativo a las aplicaciones de las ciencias y las artes.
Aplicación en especial de las palabras o expresiones empleadas en forma exclusiva
con sentido distinto del vulgar, en el lenguaje propio de una ciencia, de un arte.

Lenguaje del gr y del latín , en general, el uso de los signos


intersubjetivos entendiendo por intersubjetivos los signos que hacen posible la
comunicación entre los seres humanos. Estructuras lingüísticas.
Se entiende por lenguaje el conjunto de sonidos articulados con que el hombre
manifiesta lo que piensa o siente.
La relación del leguaje con el derecho es muy amplia, y por eso se menciona que:
“Derecho y lenguaje es un tema eterno. La razón es evidente: las leyes y su
concretización en derecho judicial y en la dogmática jurídica, su interpretación y
aplicación en las decisiones judiciales y en la crítica de estas decisiones, todo ello es
lenguaje. Donde termina el lenguaje, comienza la fuerza, y la fuerza puede ser
demorada en tanto el lenguaje tenga efectos”.
El lenguaje adquiere importancia con la ley porque con la ley se faculta, se autoriza y
se prohíbe, regulando la convivencia de los integrantes de la sociedad humana.

El lenguaje normativo: “Es el que usamos para realizar actos de prohibir, autorizar,
ejercer críticas de ciertos tipos, excusar, justificar; atribuir o reconocer derechos,
afirmar que alguien tiene o no una competencia, un deber un derecho, una
responsabilidad, imponer deberes y obligaciones, afirmar que algo hecho por alguien
es o no una transgresión o que merece o no un premio o un castigo”.
Esta clase de lenguaje se encuentra en el lenguaje romano y sus aportaciones al
lenguaje jurídico.
La terminología es un componente de la lengua correspondiente a un área
especializada y en consecuencia forma parte de un lenguaje especializado.

El leguaje especializado es el campo del lenguaje que busca una comunicación


unívoca libre de contradicciones en una resolución determinada.
Se puede decir que el lenguaje especializado:
“Es el lenguaje específico que utilizan algunos profesionales y expertos para transmitir
información y para refinar los términos, los conceptos y los saberes de una
determinada área de conocimiento, confirmando los ya existentes, matizando el
ámbito de su aplicación y modificándolos total o parcialmente”.
Las lenguas de especialidad se denominan también lenguas profesionales y
académicas.

Técnicas y Estrategias

Las técnicas de expresión utilizadas en un proceso oral tienen una relación estrecha
con la oratoria.
Litigar en juicio oral es un acto de comunicación cuyo medio idóneo es el lenguaje de
viva voz.

El interés primordial de todo profesional del derecho cuando se presenta ante un


tribunal es lograr ser escuchado y comprendido por el juzgador que está dispuesto al
diálogo, a un enfrentamiento dialéctico que concluirá con una sentencia condenatoria
o absolutoria, de acuerdo a lo que en el procedimiento haya sido justificado con los
medios idóneos de prueba invocados por la parte actora para acreditar la acción
ejercitada o la parte demandada haya justificado sus excepciones y defensas que
dejaron sin efecto los hechos en que el actor pretendió fundar los extremos de su
acción.

La comunicación es el arte de transmitir y recibir mensajes claros y precisos respecto


de la materia de que traten.
La comunicación humana requiere para su eficacia de los siguientes elementos:
Habilidades de comunicación que consisten en la capacidad del emisor y del receptor
para construir la expresión adecuada al tema de que se trate.

La palabra estrategia proviene del vocablo griego de que


significa general, jefe. Arte de dirigir las operaciones militares; arte, habilidad para
guiar un asunto determinado.
1.1.1 Vocabulario jurídico

Se entiende por vocabulario el conjunto de palabras de un idioma. El lenguaje es


común a todos los seres humanos que permite relacionarse en sus ideas y acciones
intersubjetivas.

El lenguaje es un instrumento de capacidad cognoscitiva y afectiva de la persona


física lo que indica que el conocimiento lingüístico se vincula con el conocimiento que
se tenga del entorno social de una comunidad determinada.

Si bien es cierto que el lenguaje humano en sus diferentes manifestaciones es uno,


también es verdad que existen lenguajes específicos, especializados con un alcance
propio que constituye la herramienta de determinadas ramas del saber humano; y así
se mencionan lenguajes profesionales, el argot que forma parte del habla de un grupo
social determinado, como es el caso de la lexicografía jurídica.

El jurista como tal utiliza un léxico específico denominado vocabulario jurídico o léxico
del jurista al utilizar palabras cuyo significado puede ser ignorado por personas no
especializadas en el estudio y comprensión del derecho, de las leyes que regulan la
conducta externa del hombre en sociedad.
El jurista debe investigar el origen de los términos con los que se denominan los
conceptos específicos de algunas instituciones cuya existencia nació con la
humanidad misma.
El estudiante de derecho debe conocer, entender e interpretar en el campo del
ejercicio profesional los conceptos de acción, pretensión, proceso, procedimiento,
demanda, juicio, admisión, prevención, emplazamiento, pruebas, desahogo,
allanamiento, confesión, rebeldía, audiencia, sentencia, recurso, apelación, amparo,
ejecución.
En un juicio jurisdiccional simulado el alumno debe conocer el léxico específico, el
significado preciso de cada término y cómo lo utilizan las partes procesales en una
controversia jurídica determinada y en qué momento procesal oportuno, el porqué de
su actuación de otra manera como mandatario judicial de los actores procesales
dejará en entredicho su calidad de profesional del derecho.
1.1.2, 1.2.5 y 1.2.7 Oratoria

La oratoria es el arte de hablar en público con elegancia para persuadir, deleitar y conmover
por medio la palabra oral.
La persuasión se logra con la manipulación de la voluntad y del ánimo de las personas, el
convencimiento se produce con razonamientos encaminados a justificar la necesidad de
actuar de una manera determinada para alcanzar un objetivo concreto.
La palabra es un sonido o conjunto de sonidos articulados que expresan una idea.
La idea del griego que significa ver.
La idea es el primero y más obvio de los actos del entendimiento que se limita al
simple conocimiento de una cosa.

Se entiende por conocimiento la acción y efecto de conocer.


Conocer del latín cognóscere que se traduce por averiguar por el ejercicio de las
facultades intelectuales la naturaleza, cualidades y relaciones de las cosas.
El término oratoria es sinónimo de retórica.
Retórica del griego arte de bien decir, de embellecer la expresión de
los conceptos, de dar al lenguaje escrito o hablado eficacia bastante para deleitar,
persuadir, conmover.

La oratoria forense tiene por objeto ilustrar la inteligencia y mover la voluntad de los
jueces para decidir si los hechos narrados por las partes procesales en los escritos de
demanda y de contestación a la misma se realizaron o no en las circunstancias de
tiempo, lugar y forma expresadas para aplicar una determinada norma jurídica.
La oratoria forense requiere de tres elementos fundamentales que son:
Las cualidades del orador.
La materia del discurso.
El estilo.

El ejercicio y el desarrollo de la oratoria forense dirigida al ejercicio profesional del


derecho es la herramienta fundamental para controlar, estructurar y ordenar los
pensamientos, expresarlos en forma lógica, exponerlos con concisión, precisión y
claridad, así como con elegancia y vigor para persuadir a los juzgadores de la
procedencia de la acción ejercitada o bien de la improcedencia de la acción y la
justificación de las excepciones y defensas que destruyen la acción ejercitada.
La práctica oratoria contempla estos aspectos:
El estilo personal que consiste en que cada persona una vez adquiridas sus
habilidades comunicativas, debe desarrollar un estilo propio, es la expresión de su
propia personalidad.

El lenguaje. En este aspecto el mejor lenguaje lo determina el propósito del discurso.


En los juicios orales en materia civil la exposición discursiva pretende convencer de
manera racional y con apego a las reglas de la lógica formal, con términos y
conceptos precisos relacionados con la acción ejercitada o la excepción opuesta, para
que el juzgador emita la sentencia que favorezca a quien mejor defienda su derecho.

El discurso forense debe ser preciso, sin ambigüedades.


El brillo intelectual se expresa en la armonía y la claridad de los conceptos.
Hablar en público exige una actitud seria y rigurosa.
La regla de oro es la claridad y la precisión del uso del lenguaje jurídico.

La naturalidad y la sencillez son cualidades del orador que admira el oyente y


expresan una actitud de respeto. Al hablar con claridad el orador manifiesta que
desea ser entendido en lo que está expresando.

Leer los artículos 281, 284 y 402 del Código Procesal Civil para el Distrito Federal e
interpretarlos en relación con las actuaciones procesales de la parte actora, parte
demandada y juez en una controversia jurídica planteada al órgano jurisdiccional.

El término oratoria es sinónimo de retórica.


Retórica del griego arte de bien decir, de embellecer la expresión de
los conceptos, de dar al lenguaje escrito o hablado eficacia bastante para deleitar,
persuadir, conmover.

Retórica
El arte de persuadir mediante el uso de instrumentos lingüísticos.
La retórica fue el gran invento de los sofistas y uno de sus fundadores fue Gorgias de
Leontinos que vivió en el siglo –V.
La finalidad de la Retórica es “poder persuadir con discursos a los jueces en los tribunales, a
los consejeros en el consejo, a los miembros de la asamblea en la asamblea y en toda otra
reunión pública”.
Por ello el retórico es hábil “en hablar contra todos y sobre todo argumento y de tal manera
logra, respecto a la mayor parte de las personas, ser el más persuasivo de todos y con
respecto a todo lo que quiere” Platón en el Diálogo “Gorgias”.
1.1.2.1 Oralidad y escritura

En la práctica jurídica los procedimientos civiles no son en sentido estricto sólo orales o sólo
escritos. Los procedimientos escritos contienen elementos de oralidad como los orales
necesitan formas escritas. Un procedimiento predominantemente escrito requiere de
manifestaciones de viva voz que se transcriben al recibir la prueba de declaración de alguna
de las partes procesales o la declaración de los testigos en los casos en que se ofrezca y se
admita la prueba testimonial.
Las actuaciones que se realizan en los procedimientos orales se hacen constar por escrito en
forma electrónica, de tal manera que se puede afirmar que no existen procedimientos
jurisdiccionales puramente orales ni puramente escritos.
En el procedimiento en el cual predomina la forma escrita su característica principal es la
documentación del proceso bajo el argumento de la certeza en su desarrollo y para ello se
invoca esta máxima jurídica: “quod non est in actis, non est in mundo”: “lo que no está en las
actas no está en el mundo”, y que cuando se habla en lenguaje jurídico se traduce: “lo que no
está en el expediente no existe”, en consecuencia las actuaciones en los juicios orales civiles
se almacenan en forma electrónica para consultas posteriores así como para fundar los
recursos procedentes en contra de la sentencia definitiva invocados por la parte a la que le
sea desfavorable la resolución que resuelva de fondo la controversia planteada.
La oralidad en los juicios civiles no pretende suprimir la escritura, medio por el cual se deja
constancia de lo actuado en forma hablada.
En un proceso oral civil el propósito es dar preferencia a la expresión verbal buscando así
favorecer la inmediatez en el procedimiento al permitir una intervención personal y directa
entre las partes procesales, facilitando así la celeridad del procedimiento al impulsar el
desarrollo del proceso en una o dos audiencias, las cuales una vez realizadas el juzgador
resuelve la controversia planteada invocando el principio de la libre valoración razonada de
las pruebas ofrecidas y desahogadas.

1.1.2.2 El habla y la escritura como formas distintivas del discurso

Los vocablos oral y escritura indican dos aspectos distintos de la capacidad de


comunicación del ser humano. Una persona con plenitud de facultades debe tener las
habilidades necesarias para comunicarse con las demás personas ya sea en forma
oral o escrita.
La comunicación más utilizada en forma cotidiana es la oral. La oralidad como acto
humano de comunicación se sustenta en un conjunto de símbolos, sonidos
articulados, por medio de los cuales se transmite un significado al interlocutor.
El objeto de la comunicación es transmitir ideas, conocimientos, razonamientos para
lo cual el emisor y el receptor deben conocer los símbolos, el lenguaje para que el
mensaje sea recibido, entendido y valorado en su justa dimensión, de lo contrario el
mensaje no se transmite de manera eficaz.
En el desarrollo de la vida social, la oralidad permite la realización y reproducción de
las actividades humanas cotidianas. Ninguna de las dos formas de comunicación es
más importante que otra ya que los dos modos constituyen dos maneras distintas de
utilización del lenguaje.
Se considera esencial el hecho de que el interlocutor se encuentre físicamente
presente para que utilice expresiones y estrategias no lingüísticas y ejerza
mayor control sobre las reacciones de quien lo escucha y pueda replantear el
discurso para una recepción eficiente.
Una de las desventajas de la comunicación oral consiste en que excluye la posibilidad
de organizar y desarrollar cuidadosamente el texto de la comunicación, posibilidad
que sí se tiene en la comunicación escrita.
La escritura en la comunicación es considerada el soporte de la memoria en tanto que
la oralidad requiere métodos mnemotécnicos si pretende trascender en el tiempo y en
el espacio.
Los medios tecnológicos actuales constituyen medios de preservación de la expresión oral.
1.2 Oralidad, escritura y textualización desde el punto de vista se la teoría del
discurso

Este tema trata de la semiótica, ciencia que estudia los sistemas de signos lingüísticos,
códigos de señales, señalización, y el signo como unidad del significado y significante.
Significante es el participio activo del verbo participar que en una de sus acepciones significa
ser una palabra o frase expresión o signo de una idea o de un pensamiento.
El vocablo significado como sustantivo es la significación o sentido de las palabras o frases, lo
que se entiende o pretende entender con el signo.
La semióteca se divide en sintaxis, semántica y pragmática.
La sintaxis es la parte de la gramática que enseña a coordinar y unir las palabras para
formar las oraciones y los conceptos.
La semántica estudia la significación de las palabras.
El adjetivo pragmático y pragmática se refiere al pragmatismo, método filosófico
divulgado por el psicólogo norteamericano William James, según el cual el único
criterio válido para juzgar de la verdad de toda doctrina científica, moral o religiosa, se
ha de fundar en sus efectos prácticos.
El lenguaje jurídico tiene un contenido deóntico. Expresa el deber ser que no utiliza el
litigante, sino que está contenido en la norma jurídica y que expresa el juzgador al
dictar la sentencia de fondo en una controversia sometida a su resolución.
El jurista postulante utiliza un lenguaje en sentido retórico que lleva implícita
intenciones argumentativas y persuasivas para convencer al juzgador que su
interpretación respecto a la ley invocada y al derecho defendido en la acción
ejercitada es la correcta.
1.2.1 Factores de oralidad

La comunicación oral es una actividad semiótica que exige la atención en tres planos
de estudio:
El verbal o lingüístico.
El paralingüístico.
El semiótico cultural.

La utilización de la lengua formal oral es indispensable en las profesiones


relacionadas con las ciencias sociales y las humanidades, de manera muy especial
las áreas del derecho y de la política, requieren el dominio de todas las estrategias
orales, de la argumentación y de la persuasión.
1.2.2 Lingüístico, articulación clara de la palabra y la construcción correcta de
oraciones.

Lo menos que se debe exigir a un profesional del derecho, a un jurista, es el uso


correcto del lenguaje. El abogado postulante que pretenda ejercer la profesión de
licenciado en derecho y en especial en el campo de los juicios orales debe conocer
los diversos usos tanto del lenguaje oral como el escrito.
La práctica en el foro exige construir un discurso oral correcto y propio.
Un uso informal de la lengua genera descrédito en un profesional del derecho.
La falta de una competencia comunicativa por no dominar la habilidad de la expresión
oral pone en evidencia y desacredita la calidad de abogado postulante.

El profesional del derecho antes de hablar debe tener muy claras y precisas las ideas
que va a exponer, y para eso es necesario conocer el tema y precisar las ideas que
constituirán el discurso.
Las ideas y los valores se deben jerarquizar y para ello se pueden usar mapas
mentales, mapas conceptuales y cuadros sinópticos, ideas que comprenden los
siguientes pasos:
Conocer y comprender en forma clara y precisa las ideas sobre el asunto.
Jerarquizar los conceptos y las ideas.
Hacer uso de medios que permitan asociar las ideas como los mapas conceptuales.
Al hablar debe exponer adecuadamente los contenidos temáticos de su discurso.
Fortalecer la expresión de ideas con emociones.

1.2.3 Expresión lingüística

La expresión lingüística requiere del abogado postulante en la construcción de las


oraciones que integren su disertación estas características:
Inteligibilidad que exige la utilización de la sintaxis que sólo se logrará si los
interlocutores saben usar las reglas gramaticales indispensables, tratando de ser lo
más claros posibles.
Verdad que se refiere a evitar el uso de palabras ambiguas en el uso de la lengua
hablada, y esto se logra conociendo la semántica.
Veracidad que recurre al significado de las palabras, a la intención del que habla,
utilizar un lenguaje claro y preciso, sin ambigüedades.
Rectitud que consiste en que los participantes se conduzcan en un ambiente de
respeto y evitar el uso violento o lesivo del lenguaje.
La mirada desempeña un papel importante de toda exposición oral.
El orador debe mirar a su interlocutor o interlocutores de forma tranquila y natural y
evitar dirigir la mirada hacia el techo o el suelo, así como fijarla por mucho tiempo en
un solo lugar.
Debe poner atención en las reacciones y actitudes de quienes lo escuchan.
El hecho de que el orador se abstenga de observar al interlocutor o interlocutores es
un signo de timidez, inseguridad y falta de confianza en sí mismo.
La timidez es un estado emocional que inhibe a la persona y le impide comunicarse
eficazmente.
El miedo a hablar en público puede ser por temor al fracaso, a lo desconocido de la
situación o que el auditorio le provoque vergüenza.
1.2.4 Discursivo: construcción de discursos de acuerdo con una intención, siguiendo
estructuras expositivas, argumentativas, descriptivas, retóricas.

Un discurso argumentativo es el razonamiento con el cual se quiere convencer al juez


o la contraparte en un juicio oral para que reconozca y acepte que la razón y el
derecho le asiste a su cliente y por tanto el juzgador debe dictar sentencia en el
sentido argumentado.
El discurso es el conjunto de palabras y frases para expresar lo que se piensa y
siente, dirigido a otras personas con la finalidad de convencer o enseñar.
El discurso en el proceso oral se presenta en forma de diálogo o con participaciones
alternada entre el juzgador y los abogados.
El abogado del actor o del demandado debe abstenerse de interrumpir al juez en su
exposición de los hechos y motivos en los cuales fundará su resolución, para no
distraerlo.
El orador debe termina su discurso con frases concluyentes y peticiones concretas
que se infieren de todo lo argumentado en su intervención discursiva con el propósito
de convencer al juez principalmente y a la contraparte de la procedencia de la acción
o de la excepción invocada, según la intervención del abogado de la parte actora o de
la demandada.

Para construir un discurso argumentativo deben seguirse los siguientes pasos:

a). Exponer objetivamente un asunto o tema.


b). Argumentar, aportando razones que justifiquen una pretensión.
c). Describir una situación, un escenario, un objeto, una persona.
d). Narrar los hechos sucedidos.
e). Llevar acuerdos convencionales con los interlocutores.
f). Expresarse en forma clara, precisa, con sentido lógico y sentido común para
convencer a quien se dirige el discurso.
Un litigante al exponer una idea, narrar un hecho, invocar una norma jurídica debe
utilizar palabras claras y precisas y evitar el uso de palabras ambiguas, confusas.
El discurso argumentativo tiene una estructura lógica inductiva o deductiva establecida por
premisas que sustentan las pretensiones de la conclusión en términos de la lógica formal.
La argumentación es parte del lenguaje de uso cotidiano que emplea una persona para
justificar o defender una pretensión, una idea, un hecho.
1.2.4.1 Sociolingüístico: conocimiento del contexto cultural en el cual se produce
el hecho verbal.

El acto comunicativo desde el punto de vista gramatical debe ser coherente, cualidad
que se refiere a la comprensión de lo que se dice según los contextos del orador, del
oyente y el marco de referencia.
La coherencia en el discurso verbal depende de que tanto el hablante como el oyente,
el emisor y el receptor del mensaje sepan de qué se habla porque comparten
nociones del asunto de que se trata.
El proceso jurídico comienza desde que el cliente se entrevista con el abogado,
entrevista verbal en la cual el abogado postulante debe ganarse la confianza de quien
puede o no contratar sus servicios profesionales.
Se dan casos en el sentido que aun entre grupos de personas con preparación
profesional en el área del derecho, algunos no saben expresarse en forma correcta y
con propiedad tanto escrita como verbalmente.
Los profesionales del derecho, los juristas que usan el lenguaje escrito y oral como
herramienta de trabajo deben tener conciencia de ese poder que es la comunicación y
usarlo de manera ética, sobre todo en el ejercicio de su profesión.
1.2.5 Cultural, comprensión que se tiene acerca del tema tratado.

La expresión oral, la oralidad suele ser espontánea, un uso formal de la oralidad es el


que se desarrolla en los juicios orales, en cuyo caso debe prepararse con
antelación la estructura discursiva.
El litigante requiere un conocimiento previo de lo que va a decir. Lo oral puede
planearse hasta la entonación de la voz y el énfasis, este es el trabajo preparatorio del
orador.
El abogado postulante que pretenda dedicarse al ejercicio de la profesión en el foro
tiene la obligación de cultivarse y para ello debe leer mucho, reflexionar y meditar,
escuchar a los demás y aprender de la experiencia.
El orador, como decía Cicerón, necesita poseer conocimientos de filosofía porque los temas
filosóficos se refieren al hombre y la materia de todo discurso jurídico es el hombre.
1.2.6 Prosodia, acentos, tonos y entonación.

La prosodia es la parte de la gramática que enseña la recta pronunciación y


acentuación de las letras, sílabas y palabras.
La prosodia estudia:
La correcta pronunciación y acentuación de las sílabas y las palabras.
Los rasgos fónicos los cuales afectan a la métrica, especialmente los tonos, acentos y
cantidad.
Los rasgos fónicos que afectan los fonemas que comprenden letras, sílabas y
palabras de la expresión oral.

La gramática de la oralidad estudia los signos que constituyen los sonidos lingüísticos
y los mecanismos en la comunicación.
El mensaje oral se transmite por medio del sonido de los signos lingüísticos y la
información que se proporciona al receptor por medio de los elementos prosódicos.
La inflexión de la voz en lengua oral se considera la parte fundamental de la prosodia
como es la duración y el ritmo que incluye pausas, timbre y velocidad del habla.
Son elementos de la prosodia la pausa, el acento y la sílaba.
La prosodia señala y encadena los enunciados, en lenguaje jurídico las proposiciones.
1.3 Argumentación jurídica.
La característica fundamental del hombre es la razón, facultad propia del hombre que le
distingue de los otros animales.

Cicerón decía: “La razón mediante la cual nos diferenciamos de los brutos, por medio de la
cual podemos conjeturar, argumentar, rebatir, discutir, conducir a término y formular
conclusiones, es común a todos, diferente en preparación, pero igual en cuanto facultad de
aprender”.

1.3.1 La inferencia

La mente humana tiene como nota distintiva el raciocinio que consiste en razonar
discursivamente para pasar mediante la inferencia, de lo conocido a lo ignorado.

“La inferencia es la relación de razón entre proposiciones dispuestas de tal modo que su
conocimiento nos lleva al conocimiento de proposiciones nuevas. La inferencia es la
intencionalidad de la tercera operación mental” (el raciocinio).
.

1.3.2 El razonamiento o raciocinio

En el orden lógico la tercera operación de la mente del hombre, es el razonamiento o


raciocinio, acto intelectual en virtud del cual pasamos de un hecho conocido a otro
desconocido. La función del entendimiento como razón es el discurso.
La esencia del razonamiento radica en el paso de lo conocido a lo desconocido, en el
discurso.
El razonamiento en sentido estricto es la operación intelectual que permite de juicios
conocidos inferir otro juicio con dependencia causal de los primeros.

La palabra argumentación indica la acción de argumentar, verbo que significa


disputar, impugnar la opinión ajena y poner argumentos contra esa opinión.

En la práctica forense por lo general se usa más el vocablo argumento designando así
cualquier razón, prueba, demostración, dato, motivo, apto para captar el asentimiento y para
inducir a la persuasión o a la convicción.

En lógica se utiliza la palabra proposición para designar la expresión de un juicio entre dos
términos, sujeto y predicado, que afirma o niega éste o aquél, o incluye o excluye el primero
respecto del segundo.

La argumentación se sustenta en el raciocinio lógico que está compuesto de antecedente y


consecuente, esto es, de premisas y conclusión, de datos y respuestas. El antecedente y el
consecuente se expresan en forma de juicios.

Gramaticalmente la argumentación es la acción de argumentar, expresando razones que


motivaron una acción pasada, presente o futura.

El propósito de toda argumentación es persuadir a alguien de que lo que se afirma o se niega


es verdad que sucedió o no aconteció.

En la argumentación jurídica las únicas razones que cuentan son las que tienen el respaldo
de las leyes vigentes que contienen el derecho tanto sustantivo como adjetivo.

La teoría de la argumentación jurídica contemporánea reconoce que la ley no siempre aporta


todas las razones para resolver una controversia jurídica determinada. En esta situación la
argumentación “se ocupa de la manera como razonan jueces y abogados”.
El derecho es una práctica social argumentativa. Sus participantes aportan razones para
respaldar y justificar sus pretensiones. En los casos “fáciles”, las normas jurídicas constituyen
la única razón de la decisión; en cambio, en los casos “difíciles”, aquellos para los que existen
más de una solución posible, plantean el problema de justificar la elección de la decisión”.
Desde otra perspectiva autores como Jaime Cárdenas expresan que el razonamiento jurídico
es esencialmente dialógico, en el cual la práctica decisoria está presidida no por un
razonamiento subjetivo sino por uno intersubjetivo.

Atienza sostiene que el derecho es esencialmente una actividad lingüística, relacionada con
los estudios clásicos de tópica, retórica y dialéctica.

1..3.3 El silogismo, concepto y sus elementos

El silogismo es la forma técnica del raciocinio en virtud del cual inferimos un juicio o
proposición de otro juicio o proposición mediante un tercer juicio o proposición.

Aristóteles definió el silogismo diciendo que es un argumento en el cual, establecidas ciertas


proposiciones, se sigue necesariamente otra proposición distinta, por el sólo hecho de haber
puestas las primeras.

Los elementos del silogismo son los dos juicios que constituyen el antecedente del
razonamiento que formaliza, y el tercer juicio que integra el consiguiente denominado también
consecuente, del antecedente.
Todo juicio supone la fusión de dos conceptos, entendiendo por concepto, primera
operación del entendimiento que nos permite conocer de manera inmaterial lo que son las
cosas.

El juicio está formado por conceptos.


Juzgar es la operación mental que corresponde al juicio, y la expresión del juicio, ya sea
verbal o escrita, es la proposición.

Los pensamientos se expresan por un término, una proposición y un argumento.

El término o palabra es la expresión oral o escrita de una idea.

La proposición o enunciación es la expresión externa de un juicio.

La argumentación es la expresión de un raciocinio.


Los dos primeros juicios que integran el antecedente del raciocinio, se denominan premisas,
y el tercer juicio que constituye el consiguiente, se llama conclusión.

Las premisas del silogismo deductivo son dos: premisa mayor y premisa menor de las cuales
se infiere la conclusión.

En un litigio jurisdiccional, la premisa mayor es la norma jurídica general, obligatoria.

La premisa menor el caso concreto en el cual se aplica la norma general, obligatoria.

La conclusión es la sentencia definitiva.

1.3.4 Lógica formal y su función en la argumentación jurídica.

El derecho se aplica argumentando, no existe otra forma de aplicarlo.


Es una cosa diferente que en su aplicación exista una excelente, buena, mala o
pésima argumentación, pero necesariamente debe estar presente un acto
argumentativo en su aplicación.

Para poder argumentar con eficacia, cuando se tiene un buen argumento jurídico hay
que saberlo exponer con claridad y con una excelente estructura lógica.
“Dar un argumento” significa ofrecer un conjunto de razones o pruebas en apoyo a
una conclusión.
A contraposición de intereses, contradicción de argumentos.
Argumento es la manifestación externa del razonamiento, ya sea deductivo o
inductivo.

La lógica es la parte de la filosofía que trata de las formas del pensamiento y de las leyes por
las cuales se rige para llegar a la verdad

Pensamiento es un vocablo general que designa todos los actos del entendimiento.

Entendimiento es la potencia del alma, la capacidad, en virtud de la cual concibe las cosas,
las compara, las juzga, o induce o deduce otras de las que ya conoce.

La lógica suele dividirse en dos partes:


Lógica formal o pura que considera los elementos formales del pensamiento que son el
concepto, el juicio y el raciocinio.
La lógica formal trata de las formas del pensamiento para que sea coherente con los juicios
expresados como premisas, y no necesariamente de la verdad de las premisas que integran
los juicios.

Si las premisas son verdaderas, la conclusión también será verdadera.

Función de la inferencia lógica

El razonamiento es una operación lógica mediante la cual, partiendo de uno o más juicios, se
infiere la validez, la posibilidad o la falsedad de otro juicio.

Los juicios en que se basa un razonamiento expresan conocimientos ya adquiridos, por lo


menos como hipótesis.

Los juicios que sirven como punto de partida en una inferencia lógica se denominan premisas
y desempeñan la función de ser las condiciones de la inferencia.

El resultado de la inferencia es el juicio inferido como consecuencia y se llama conclusión.

La inferencia permite obtener de los conocimientos ya establecidos, otro conocimiento que se


encuentre implícito en las premisas o que resulte posible de acuerdo con las premisas que
constituyen la inferencia.

Una inferencia será objetivamente válida solamente que lo sean sus premisas y su
conclusión.

Silogismo es un método típico de razonamiento deductivo que se llama raciocinio.

Para Platón la palabra silogismo es razonamiento en general y Aristóteles lo adoptó como


indicar el tipo perfecto del razona miento deductivo, definido como “un discurso en el cual,
puestas algunas cosas, otras resultan necesariamente”.

Ejemplos:

“Todos los animales son mortales.

Todos los hombres son animales.

Por lo tanto, todos los hombres son mortales”.

El cielo nublado indica posible lluvia


Esta tarde está el cielo nublado

Luego esta tarde es posible que llueva

Si un abogado afirma que Simplicio merece veinte años de cárcel, fundamenta su dicho en un
silogismo jurídico expresando:

El artículo 266 del Código Penal para el Distrito Federal establece:

al que por medio de la violencia física o moral realice cópula con persona de cualquier sexo,
se le impondrá prisión de veinte años.

Simplicio cometió el delito de violación en contra de Cuadrada.

Formular el silogismo jurídico.

El delito de violación se castiga con veinte años de cárcel.

Simplicio cometió el delito de violación en agravio de Cuadrada.

Luego entonces, Simplicio merece veinte años de cárcel

El hombre es una especie

Carlo Magano fue hombre

Luego, Carlo Magno fue una especie

Todo hombre es mortal

Sardanápalo es hombre

Luego, Sardanápalo es mortal.

Con el artículo 2412 fracción IV, elaborar un silogismo jurídico sabiendo que José Pérez
González es el arrendador y Norberto Noriega Noroña es el arrendatario.
Con los artículos 2425 fracción I, y 2426 elaborar un silogismo jurídico con los mismos
contratantes de arrendamiento que se mencionan.

1.3.5 Discurso

Facultad racional con que se infieren unas cosas de otras, obteniéndolas por consecuencia
de sus principios o conociéndolas por indicios y señales.

Introducción a la Retórica y a la Argumentación 6. Discurso p 81

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