Universidad Católica del Norte

Teológico

Distintos tipos de sexualidad

según cultura

Integrantes:

Adrián González
Alvaro
Matias
Francisca
Asereje(?)

Docente: Maria Jacqueline

1. Introducción

A lo largo de la historia y de las diversas civilizaciones y culturas, la sexualidad

cambia o ha cambiado en lo que se refiere a costumbres y forma de
manifestarse. Realmente encontramos en la historia multitud de conceptos y
legislaciones diferentes en torno a la sexualidad. Sin embargo, la monogamia
es y ha sido siempre el comportamiento sexual más frecuente, y usted es el
sistema que más asegura la supervivencia del núcleo familiar. La mujer ha
dependido generalmente del hombre, que en muchas ocasiones se considera
como dueño de la misma; Galerías y gérmenes se consideran con derecho
sobre la vida y la muerte de su mujer, al igual que sus hijos.

También es cierto que en la Edad Media, la mujer fue parte de los bienes del
marido, si bien, siempre estaba un tanto subyugada a sus deseos. La
poligamia ha sido mucho más consentimiento que la poliandria (mujer que
tiene varios esposos simultáneamente), posiblemente porque este modo se ha
vuelto más fácil de aumentar la descendencia, y por tanto, se ha incrementado
la población de un pueblo, lo que ha resultado especialmente las épocas más
importantes. Que la guerra acabó con gran número de varones. Las
desviaciones sexuales no son cosa de nuestros días; Lo que realmente se
modifica es la tolerancia social hacia las mismas, lo que dificulta o favorece su
difusión.

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 2. Sexualidad Judía
El judaísmo establece que el deseo sexual no debe ser nunca reprimido. La
tradición judía considera esto como una obligación positiva. El hombre está
obligado a procrear para asegurar la descendencia y se establece que los seres
humanos deben satisfacer las necesidades sexuales de su pareja con una actitud
de mutuo respeto y consideración..

2.1. La mujer judía

- Es importante la vestimenta y conducta refinada, agradable y digna que
protegen a la mujer y garantiza la preservación de su pureza.

- En la época talmúdica la mujer respetable comenzó a permanecer

confinada en su casa. Una mujer que salía era considerada una prostituta.

- El Talmud determina que las mujeres no debían aparecer en público, pero

en caso de hacerlo, el hombre no debía entablar conversación con ella aun
si fuera su esposa.

- El hombre tiene la obligación de alegrar a su mujer por ser ella el hilo

conductor con el creador.

- Todos los códigos religiosos prohíben cualquier manifestación de afecto a

una mujer que no sea la propia.

2.2. La homosexualidad
- El judaísmo no prohíbe la homosexualidad, sino los actos homosexuales.
La Torá prohíbe expresamente dar expresión física a los deseos
homosexuales

- La postura del judaísmo ante la expresión sexual no es discriminatoria, sino

exclusiva.

- El judaísmo acepta al individuo con tendencias homosexuales como

miembro pleno del pueblo judío. Esto no quiere decir que pueda hacer lo
que se le antoje.

- Una persona homosexual puede superar y canalizar su sexualidad de

manera productiva y sana, eso nos distingue de los animales que siguen su
instinto.

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2.3. El matrimonio
- Si un varón no tiene descendencia, el hermano soltero de más edad debe
contraer nupcias con su cuñada viuda. Esta no puede casarse con un
extraño.

- La mujer en el día de su casamiento recibe bajo la jupá una "ketuvá" en la

cual están escritas y especificadas las obligaciones del hombre para con
ella. Para poderse casar ambos deben ser judíos, solteros, y no hijos del
adulterio. El judaísmo consagra la legitimidad de la vida sexual dentro del
matrimonio.

2.4. La poligamia en el judaísmo

- La poligamia es el no imponer límite alguno en el número de mujeres que
un esposo hebreo podía tener.

- Algunos rabinos, sin embargo, aconsejaron que el hombre no tome más de

cuatro esposas. Posteriormente, la poligamia fue prohibida en el judaísmo
por los rabinos, no por Dios.

- En el Israel moderno, cuando una mujer no puede tener hijos o está

mentalmente enferma, los rabinos le dan al esposo el derecho de casarse
con una segunda esposa sin divorciarse de la primera.

2.5. El adulterio
- El adulterio se sanciona con severidad y reporta gravísimas
consecuencias, que encontrarán muchos problemas cuando pretendan
casarse.

- En el mundo judío se castigaba con la lapidación, mientras que el Talmud lo

hacía con el ahorcamiento.

- Si un judío mantuviere relaciones con una mujer que no fuera su legítima

esposa, pagará cinco sueldos, idéntica cantidad a la que pesa sobre el
juego furtivo de los dados; por cada hijo extramatrimonial abonará 30
sueldos.

- Si una mujer es sorprendida con un moro o con un judío y pueden ser

capturados, ambos conjuntamente serán quemados

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2.6. La prostitución
- Los judíos insatisfechos con su vida marital o sin excesivos escrúpulos
requieren los servicios de meretrices cristianas o musulmanas y disponen
de numerosas oportunidades para consumar sus apetitos.

- La semilla divina no debe ser compartida. Se percibe a una doble moral que
hace de la prostitución un mal necesario.

2.7. La menstruación
- La Torá exige la abstinencia sexual siete días desde que se inicia el
sangrado.

- La práctica usual entre los judíos es que al terminar la abstinencia la mujer

debe sumergirse en un baño antes de reanudar relaciones con su esposo.

- Se pone fin a esta abstinencia cuando se realizan diversos actos de

purificación coincidentes con una nueva ovulación.

3. Sexualidad Romana

4. Sexualidad Musulmana

5. Sexualidad Griega

6. Sexualidad Cristiana