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iFLlNiDAiH iEfísITACION

a de~la
ara. Ahora
BÍBLIC ¡ÁSICA
5 ialesias
Dob |i ^ Géqesis^l ^27
nos darle
dia a FUNDAMENTACiÓN La Familia
er de ese l! BÍBUGA

1
iuenciar ¿ C O M F^LEiVl E N T . A F K A
ue este
y que cada
Dios tiene Génesis 2 : 1 8
Génesis 2 : 1 5 - 2 S
LECCIÓN
Marcos 3 : 2 7
Lucas 1 4 : 2 7 - 3 0
Salmos 1 2 7 : 3 - Q ; - "
Salmos 1 8 8 : 3
Efestoa 5 : 2 8
Tito 2 : 4
Proverbios 1 3 : 2 4 ' ' : 1 'i

Proverbios 2 2 : 1 5
1 Timoteo 5 : 8
lij
CülosensBS 3 : 2 1 >
Efesios 6 : 4
ü
Proverbios 31
: ... ;--v;^. ü
Marcos 10:6-9
Salmos 2 7 : 1 0 . LU
h
Mauea 7 : g 4 - 2 7 ;.
Y lea Dendijó Dicia, ^1 I

y I&3 dilí^: Pf'uccIílGfid y


«; llenaá la ei&rrá,
áiá, y £!iSinof'n!0G! en
ios pi2 és tlBl mar, (Sn las
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avss de W \ ci(3lD^, y en codas
bestiñS qu§ 9ií mueven
sí:'f3ré la cierra,"
' 'lis i'W

LA F'A
A. E L PLANj D E D O S Toda pgrejs ils
P A R A [_/K F A M I L I A hogar dal munc
las cimianboe.
P a r a Dios, el matrimonia es la extensión ! SU propia quB Kanga, MÍ
naturaleza (Génesis 1;27], La plenitud de legría y milia de donde
paz, y la grandeza de Dios fueron extendí d is a la raza oír, guardar y
humana a través de la primera pareja que :l creó. S i elementas qu8
ellos hubiesen a c a t a d o los principios pree tablecidos car. La combin
por Dios, no habrían tenido necesidad de a s a r p o r bre va a c o n s t
t a n t a s dificultades, tales como dolor, en 'ermedad, mi- de acuerdo al t
s e r i a , t r i s t e z a s , ' d e s d i c h a s , desengaños, ^tc. Aunque car buenos cirr
* O i o s había preparado cuidadosamente el gar donde hogar teniendo
e s t a pareja moraría con el r e s t o de s u de i c e n d e n c i a , s o p o r t e a la fa
y s e había encargado de t e n e r en c u e n t a a s t a el más
mínimo detalle para que ellos fuesen e t e r r amenté fe-
lices, hubo un sólo a s p e c t o donde Dios no quiso inter-
venir: la voluntad que Él le había entregadi}) al s e r hu-
mano. Ésta vendría a s e r la herencia que BS confiaba, El matrimonio
para que la a d m i n i s t r a s e n como mejor les pareciera. hombre con la
Podemos decir que el principio fundament de la felici- o p u e s t o , el ho
dad conyugal quedó sujeto a la obediencia que la pareja Dios le dio a Ac
le diera a la Palabra de Dios. Aunque la Pe reja no s e a fuese s u apoyo
e x p e r t a en los t e m a s que tienen que ver cor n la relación su infinita sabii
conyugal, las finanzas dentro del matrimoTi io, la e d u c a - diferentes la u
ción de los hijos, e t c . , con el simple hech de obedecer permanente, oi
lo que Dios dice. Él los guiará a t e n e r un nejor hogar, misteriosamen
porque "el principio de la sabiduría es elt u m o r a Dios". t a b l e c e r una gi
[Proverbios 1 :7]é^ caba una desee

Es esencial poner atención a la intención de Dios de redimir


matrimonios y familias, y de r e s t a u r a r l o s a s u plan ¡riginal, para
que n u e s t r o entendimiento s e ajuste al propósito d vino de vivir
a c e r t a d a m e n t e d e n t r o de las relaciones que Dios h i ordenado en La bendición vii
los hogares,) bendijo a la par
sabilídad. S i la
bendiciones peí

SEIVIiNAPia ADLiLTQS

\
i
• i o s e s t a b l e c i ó tara f u n d a m e n t o
CMateo 7 : 2 4 - 2 7 ]

Toda pareja llega al matrimonio con la ilusión de con 5truir el mejor


hogar del mundo, y para ello tiene que trabajar p r i m e r a m e n t e en
los cimientos. El cimiento del hogar no depende ni d 3 la profesión
que t e n g a , ni de la c u e n t a bancaria que p o s e a , ni si uiera de la f a -
milia de donde proviene. El Señor dijo: "el cimiento de un hogar e s
mi
oír, guardar y p r a c t i c a r " ; es como ladrillo, arena y c e m e n t o . Tres
elementos que conforman el fundamento: oír, guare ar,jy_[3ractj- i
car. La combinación de e s t o s t r e s es el cimiento. C uando el hom-
bre va a c o n s t r u i r una gran t o r r e , tiene que cavar profundamente •ii.M'li

de acuerdo al t a m a ñ o que desee c o n s t r u i r l a , pero tiene que colo-


car buenos c i m i e n t o s . De e s a misma forma, s e detje c o n s t r u i r un
hogar teniendo en c u e n t a que los c i mi e n t o s s o n Ioí£ que le dan el
s o p o r t e a la familia.

ivvDios mismo.eligiá u n a pareja


[ G é n e s i s 2 :1 B 3

El matrimonio no e s idea del hombre, fue idea diviin: 1 Dios creó al


hombre con la capacidad de s e n t i r atracción hacia el sexo
o p u e s t o , el hombre hacia la mujer y la mujer hacia hombre,
• i o s le dio a Adán ayuda idónea, una compañera, u la mujer que
fuese s u apoyo y s o p o r t e , para que ambos fueran jn equipo. En
su infinita sabiduría. Dios e s c o g e a dos p e r s o n a s c om p l e t a m e n t e
diferentes la una de la o t r a , y luego que ellas p a c t a n a m o r fiel y
p e r m a n e n t e , o c u r r e un milagro, e s t o s dos s e r e s on fusionados
m i s t e r i o s a m e n t e en uno solo. El propósito de e s t unidad es e s -
t a b l e c e r una generación para Dios. "¿Y por qué un D? Porque bus-
caba una d e s c e n d e n c i a para Dios" (Malaquías 2:1

a; 'r.:ézki-''i:'-í]¡^'^os! unió e n m a t r i m o n i o
[Génesis 1 :2B3

La bendición viene en plenitud cuando las p e r s o n a se c a s a n . Dios


bendijq a la pareja ambos recibieron^el mismo_grte do de réspon-
sabiüdad. S M a pareja puede m a n t e n e r s e en a r mo i a, e s t a s t r e s
bendiciones permanecerán s o b r e ellos:
A .

1. Frutficad;
Vs. 1 3 , ^ 1 7 . I

El f r u t o e s lo que determina la clase de árbol, _a vida de la


• i o s permite
primera pareja era de inocencia y pureza, por o cual el '
asegurarse(
f r u t o debía s e r la santificación.

Vs. 1 8 . C o m
2. Multiplicaos:

La mpjer e s
Conforme e s en lo natural, también lo e s enloj espiritual,
tieneíla capa
Los hijos dentro del matrimonio son el resultado de un
trabajo en equipo. Del mismo modo dentro de ministerio, el
Vs. Iig. El he
f r u t o abundante s e ve cuando la pareja decidej trabaja r en
equipo. E s t o e s lo que t r a e la multiplicación. El e s el rostí
la facultad di
Señoread: • ' s e r e s más rr
bre s u familií
La vida de santidad debe conllevar a la multip cación, y
ésta, a la autoridad. Una pareja unida en arm mía, y bajo la V s : S f-2í3í. 1
dirección de la Palabra de Dios, e s t a n p o d e r c s a como la
El milagro dé
fuerza de un ejército bien organizado. El éxito está en
hombre, ya q
trabajar siempre en equipo. Cuando Eva quisa s e r indepen- Cuando la pa
diente le abrió la p u e r t a al t e n t a d o r ; mas s i ella hubiese grarse y trat
consultado primero con s u e s p o s o , todo habrjía sido muy como la muje
diferente. ción para ser

Dios estableció pautas Vs. 2 4 . P r o t i


• [Génesis 2 :15 - 2 5 ]
Cada pareja i
15. El hombre debe proveer para s u ; c a s a y protener a su familia de m a d u r a r e
por sí m i s m a
El hombre e s como el ángel guardián de s u c a s a , pe r eso la e s -
Vs. 2 5 . Trán;
t r a t e g i a del adversario e s atarlo con vicios, pensantientos ma-
los d e s e o s y a c t o s pecaminosos. S i el enemigo logra doblega r la Con 1^ s i n c e r
voluntad del hombre y lo mantiene esclavo del p e c a | o , le e s más altos peldaño
fácil a t a c a r al r e s t o de s u familia [ M a r c o s 3:27).

SEMINARIO 1 A D U L T O S
V s . 1 6 , 1 7 . Obediencia

vida de la Dios permite que los hombres pasen por pequefjas pruebas para
:ual el -^i a s e g u r a r s e de que le aman con todo el corazón.

V s . ^B'. Compañerismos

La mujer e s el complemento perfecto para la vice del hombre y


spiritual. tiene la capacidad de llenar t o d a s s u s e x p e c t a t i / a s . • :,: r
de un
inisteria, el V s . 1 9 . El hombre m a r c a el-destino de s u f a m i l i i : r ;
•abajar en
Él e s el r o s t r o del destino f u t u r o de los hijos. L o s padres tienen,
la facultad de hacer de s u s hijos las p e r s o n a s más felices o los
s e r e s más miserables, porque s u s palabras sor de autoridad s o -
bre s u familia.
ción, y
a, y bajo la V s : 2 1 - 2 3 . L o s dos áéráñ uñó:
I como la
El milagro def matrimonio tiene s u origen en lacreación del
5tá en
hombre, ya que la mujer fue creada de s u mismb naturaleza.
sr indepen- Cuando la pareja entiende s u origen y s u d e s t i n a , puede inte-
hubiese - g r a r s e y trabajar en equipo. De e s t a manera, t b n t o el hombre
sido muy como la mujer, pueden aprovechar todo lo que £ s t a a s u disposi-
ción para s e r felices.

V s . 2 4 . Protección de la intimidad:
}i4
Cada pareja n e c e s i t a proteger s u intimidad, pu s la mejor manera
' a 8ü familia: de madurar e s cuando s e tiene el desafío de qu2 la pareja s e valga
por sí misma.
3SÜ la es~
V s . 2 5 . Transparencia?
ntos. ma-
ioblegar la Con la sinceridad y la integridad, la pareja podrí subir los más
le e s más altos peldaños en la e s c a l e r a de la armonía fam iar.

A D U L T O S
! A F=Afv1!UA

T
B. iMPOípTANCiA DE iQué marí
L A F A M I L I A tuosoe q i

Lstabiiidad conyugal- •
¡'Lucas 1 4 : 2 7 - 3 0 ]

Permítame p a r a f r a s e a r e s t e t e x t o : Cualquiera p L|BS, que quiere 'Té mujer


c o n s t r u i r la gran t o r r e llamada matrimonio, primero debe fcus hijos (
analizar s i puede llegar h a s t a el final, no vaya a r que empiece una repre
con mucho e n t u s i a s m o y después de algunos ands , abandone el las habilid
hombre a s u mujer, o la mujer a s u marido, ocasÍDnando a s e p a - cdmo olive
ración. Los demás van harán escarnio de él, dicierdo : "ese hombre da f u e r z a
empezó con mucho e n t u s i a s m o y vean cómo dejó a s u mujer y a unción CO
sus hijos".

P a r a poder c o n s t r u i r s u matrimonio, u s t e d debe t e n e r proyección


hacia el f u t u r o , visualizar que van a s e r felices ps ra siempre y que
tendrán la fuerza para p e r s e v e r a r juntos, y que Dgrarán repro-
El mandar
d u c i r s e por varias generaciones. El matrimonio c entro de los
arpar a la
parámetros divinos, es una de las más grandes endiciones; e n - ofreciéndc
tendiendo que la bendición de Dios es la que enri uece y no añade fundamen'
t r i s t e z a con ella. En o t r a s palabras. Dios los gu rdará de cual- bras, acti
quier posible separación. ' • luchar por
a fin de ev
[Descendencia miso firhn!
[Salmo 1 2 7 : 3 - 5 ] nuya o s e

¿De qué le servirá al que edifica la c a s a , sí no hiiy/ e n s u familia


quien habite en ella después de él? Napoleón, cohtodo s u cuidado
en e s t e punto, no pudo c r e a r una dinastía. ÍVlileE de p e r s o n a s
r i c a s darían la mitad de s u s haciendas por oír el anto de un niño
El apóstol
recién nacido en s u familia.
hqmpgéne
Los hijos son la heredad que Dios mismo da. De o t r o modo, si un ministerJa
hombre muriera sin ellos, quedaría a medias, s i r terminar, puediera E
trabajo es
Un g u e r r e r o s e alegra de que s u s s a e t a s puedan volar a donde donde los
él no puede ir. Los buenos hijos son las s a e t a s cjjue s e dirigen al quiere infl
blanco que apuntan s u s padres. de mujere
¡Qué maravillas puede realizar un buen hombre, si tiene hijos afec-
t u o s o s que secundan s u s d e s e o s s e p r e s t a n a s u s c esignios!

Familia bendecida
[Salmos 1 2 S : 3 ]

'Tu mujer será como vid que lleva f r u t o a los lados tu casa;
t u s hijos como plantas de olivo alrededor de t u m e s ^ '. La vid e s
una representación de alegría y fructificación. E s t a son dos de
las habilidades que el Señor ha dado a las e s p o s a s , - O S hijos son
como olivos. El olivo r e p r e s e n t a la unción de Dios, q je e s lo que
da fuerza a las familias para la conquista, pues el s unificado de la
unción con a c e i t e e s que Dios peleará por n o s o t r o s

• , :A m o r conyugal

El mandamiento que el Señor dio a cada hombre fue muy exigido:


amar a la mujer con e l amor que lo hizo Jesús hacia su iglesia,
ofreciéndose a sí mismo en sacrificio por la redenci )n de ella. E s
fundamental que el amor conyugal s e alimente a dila-'io con pala-
b r a s , a c t i t u d e s y pequeños detalles. Y , a s u vez la ¡areja debe
luchar por la protección de cada uno de los miembr Ds de la familia
a fin de evitar cualquier herida emocional. Debe t e n r un c o m p r o -
miso firme de no permitir q u e j a llama del amor r o n ántico dismi-
nuya ú s e apague. ^

Liderazgo d ela mujer


[Tito 2 : 4 ]

El apóstol Pablo e r a muy enfático en él trabajo con grupos


homogéneos. Él motivó a la mujer para que s e dése rollara
ministerialmente y adquiriese una capacitación, de tal forma que
puediera enseñar a o t r a s mujeres. L a mejor manera de h a c e r e s t e
trabajo e s a través de las redes conformadas sólo por mujeres,
donde los t e m a s t r a t a d o s son específicos para el ¡rupo al cual s e
quiere influenciar. Los dos t e m a s fundamentales c e n t r o de la red
de mujeres son el amor hacia el cónyyge y el amor hacia los hijos.

LA FAMIIJA
Lm
C. A U M I E N D O
RESPQNSABI LIDADES
Por o 0ener
s a b e n ; pero
oriendándalc
Apücsndo u n a corrección eficí
Aunque an 6
[Proverbios 13;2<4; 2 2 : 1 5Í
camino q u a
t r o s hijos pi
cumplido en
Tres deben s e r los motivos fundamentales para ap icar la c o r r e o -
zarnos por i
ción d e n t r o de la familia: >.
Los p a d r e s i
la relación c
1. P a r a edificar

Del mismo modo que el hombre coloca guías para que un


árbol no s e t u e r z a en s u desarrollo, así tan- bien lo hace un
padre con s u hijo. Debe corregirlo desde teinp rana edad,
estableciendo límites para ayudarlo en s u c i e c i m lento, La vraa el el s
P a r a lo mismo e s ejercida la disciplina, en c i alquier ámbito mer ciclo, lo
de la vida. t o d a s las ne
los que tiene
2. P a r a motivar . deben honra
califique de i
La disciplina no debe t r a e r un efecto centré rio del de su hogar, lo
motivar a los hijos a que s e a n mejores día a día. Una pala- generoso, CL
bra, una a c t i t u d o un ademán negativo, pue len d e s t r u i r l e s
s e n t a , utilizc
e m o c i o n a l m e n t e y q u i t a r l e s la f u e r z a d e c o rquista. E s fuñ-
d a m e n t a l , como padres, motivar siempre a os hijos y ben-
decirlos a diario, pues toda palabra que d e s b t e s o b r e ellos
es t a n p o d e r o s a como una profecía.

3. Para consolar
La díbciplin'a
Los hijos deben entender que no están solofc en s u s muy drástico
luchas, sino que c u e n t a n con la ayuda y el r spaldo de s u s sos,tronque I
p a d r e s , a quienes podrán acudir en cualquie r c i r c u n s t a n - perder, come
cía, e n c o n t r a n d o en ellos refugio. El valor d n u e s t r o s hijos e s t o los cont
' n o lo proporciona lo que ellos hacen, sino
lo que ellos son.

SEMII-xlARIO 1 ADLJl T O S
La impopCancia d eu n a buena im
[Proverbios 2 2 : 1 5 ]
JMIENDO
'li-
LOADES Por lo general, los hijos tienen la tendencia a cr(ie r que todo lo li •

saben; pero e s deber de los padres, con amor y su ejemplo, ir •IH,


(MI
orientándolos para que puedan andar por la sendia de la verdad,
lili
Aunque en e s t e mundo hay muchas alternativas t a n sólo hay un
camino que nos conduce al Padre: "Jesús". S i leg r a m o s que nues- •i;
t r o s hijos puedan t e n e r una relación íntima con Dios, habremos
cumplido en gran p a r t e n u e s t r o deber. Además debemos esfor- Í5 1Í
r la c o r r e c -
zarnos por ¡nvertir_tieiTipx} en ellos en la etapa ce su formación,
Los padres deben b u s c a r puentes de comunicac ion para cultivar mu-.
la relación con s u s hijos.

.Provisión a las necesidad|es


3ra que un [1 Timoteo 5 : B ]
in lo hace un
m
rana edad, nii'^:
La vida del s e r humano se va desarrollando por icios. En el pri-
jmlento. m
mer ciclo, los padres son los que trabajan y proseen para suplir «
quier ámbito
t o d a s las necesidades del hogar. En el segundo ciclo, son los hijos
los que tienen la fuerza de provisión para la famiilia , y es cuando
deben honrar a s u s padres con s u s bienes para que Dios no los
califique de impíos, Quien tenga la responsabilid ad de proveer para
) del de su hogar, lo debe h a c e r con una a c t i t u d de fe y con un corazón
ia. Una pala- generoso, cuidando de no perder la bendición qijie e s t o le r e p r e -
n destruirles s e n t a , utilizando c o m e n t a r i o s negativos.
l i s t a . E s fun-
3 hijos y ben-
e s o b r e ellos
V a l o r e s m o r a l e s
[Colosenses 3 : 2 1 ; Efesios ;:4] ;;,::Í,;,,Ü,Ü:H1

-r-.'A' -Í;,':;" ^,:.^^^.f•'t*•^'


La disciplina hacia los hijos debe s e r equilibradc No puede s e r ni
én'süs' ' • muy drástica, ni muy permisiva. Los dos ext^er^os son peligro-
;paldo de s u s
circunstan-
s o s , porque los hijos s e pueden d e s a l e n t a r o se pueden e c h a r a
perder, como sucedió con los hijos de Eli. Él nupca los disciplinó y
IMWHÍ
e s t o los condujo a una m u e r t e p r e m a t u r a (1 Sumuel 3 : 1 1 - 1 4 3 . ; ;: L
n u e s t r o s hijos

ímm>

AOULTOS
LA FAÍVÜLIA

i
f
La mujer ejemplar
CPi-overbios 3 1 : 1 0 ]

La mujer v i r t u o s a Mifi.cas_^ c a s a , s e convierte en i\e del h o g a r , El origen de


tiene la habilidad de d e s c u b r i r los dones de s u s hi Q S , discierne p a r t e del pía
cuáles son los negocios c o r r e c t o s para s u marido sabe cuál e s el
es la|restaui
lugar donde s u s hijos podrán c r e c e r y consigue a t riaer la p r o s p e -
lo que el ene
ridad a s u c a s a .

• •r. M a t r i m o n i o ideal
06 i^rf M a r c o s 1 0 : 6 - 9 ]
Los estüciiáí
Podemos decir que la t a s a de divorcios d e n t r o de c r i s t i a n i s m o e s familias en e
mínima, g r a c i a s a e s a s palabras de c o m p r o m i s o c 3n as cuales el
hombre y la mujer unen s u s vidas en matrimonio c alante de Dios,
Y, como el Señor e s un Dios de pacto, está muy andiente de
Durahte e s t
quienes unen s u s vidas bajo s u bendición y de qu le ^ e s , además,
la familia quf
se e s f u e r z a n por a c a t a r s u s mandatos. S o n muc as las r a z o n e s
cada uno de
por las cuales puede haber un divorcio, infidelidad falta de amor, cualidades d
falta de comunicación, falsas expectativas del matrimonio, e t c .
pero aquellos q u e t l i n e n la bendición de Dios, t e n rán la fuerza
' p a r a s u p e r a r cualquier obstáculo,

El a m o p ¡ncondicional d e IDiop
[Salmos 2 7 : 1 O]

Por lo general, el s e r humano tiene muchos vacío ; emocionales,


E s t o s vacíos, en s u gran mayoría, vienen desde le niñez habiendo
sido c a u s a d o s por diversos motivos o c i r c u n s t a m ; as. Algunos
de ellos o c u r r e n por descuido de los padres, por abandono o por
e s t a r muy ocupados en s u s actividades, por simf le indiferencia o
por presiones hacia uno o algunos de los hijos. A i nque los padres
hubieran dejado de lado s u responsabilidad primoi'dial de p r o t e g e r
a s u s hijos, Dios no lo hace. Él asume la respons.ibilidad que no
asumieron los p a d r e s ; por ello, las manos de Dio; están siempre
a b i e r t a s para dar consuelo a cada uno de s u s hijos.
.CONCLUSIÓN

El origen de la familia s e refiere al origen del homqre, y forma


parte del plan de Dios para la humanidad, Por eso el plan de Dios
es la restauración para las familias y su proposite es r e c o n s t r u i r
lo que el enemigo trató de destruir.

TAREA

Los e s t u d i a n t e s deben realizar un trabajo a c e r c a de s u s propias


familias en el que evalúen s u e s t a d o actual y posi les soluciones.

Durante e s t a s e m a n a t o m e tiempo para darle g r a c i a s a Dios por


la familia que le ha dado; busque e s t r e c h a r los lados de amor con
cada uno de los miembros de s u c a s a . Haga una I s t a de las
cualidades de cada uno de ellos y a g r a d e z c a a Dios por s u s vidas

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