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Campus Puerto Montt

Diplomado Inserción de Noveles en Comunidades Educativas Diversas

ANÁLISIS E INFORME DE
MENTORÍA EN ACCIÓN.

Integrantes:
Maria Valeria Cárcamo
Yohana Valeska Ruiz
Miltón Jofré
Sergio Antonio Ruiz

Profesora:
Verónica Ormeño

Fecha:
10 de agosto de 2016
ÍNDICE.

PORTADA
ÍNDICE

INTRODUCCIÓN

DESARROLLO
- TEMAS ABORDADOS

- NOTA ETNOGRÁFICA

- DESCRIPCIÓN DE NOVELES Y MENTOR

- PROBLEMAS Y COMPETENCIAS A TRABAJAR

- SUGERENCIAS DE RETROALIMENTACIÓN

- REFLEXIÓN DE MENTOR

- REFLEXIÓN DE NOVEL.
-

CONCLUSIONES.

BIBLIOGRAFÍA.
INTRODUCCIÓN.

Los estudios señalan que los primeros cinco años son de aprendizaje, hasta que se
logra seguridad y competencia docente. En este contexto, el primer año es decisivo, pues
es el período en el que muchos profesores jóvenes deciden si abandonan la docencia o
permanecen en ella. Más aún se plantea que tiene una fuerte influencia en las actitudes que
orientan su comportamiento en toda su vida profesional( Feiman - Nemser 1996)

La mentoría es un proceso mediante el cual una persona con experiencia ayuda a otra
persona a lograr sus metas y cultivar sus habilidades a través de una serie de
conversaciones de tipo personal y confidencial. En nuestro país no existía un plan de apoyo
sistemático a los docentes que se iniciaban en su ejercicio profesional. Más aún, tampoco
existía la conciencia clara de la necesidad de tener una política sobre la materia.

Hoy en día el Ministerio de Educación, a través del CPEIP, ha implementado ​El


Sistema Nacional de Inducción para Docentes Principiantes, que es una iniciativa
presidencial destinada a apoyar a quienes comienzan a ejercer la docencia en el sistema
público de educación. Este sistema de inducción consiste en el acompañamiento que
realizan profesores experimentados, con formación específica para ejercer como mentores,
a los docentes principiantes durante el primer año de ejercicio docente.

Por lo tanto, según lo expresado por el propio Ministerio de Educación concebimos


la mentoría como un proceso colaborativo (una interacción, una conversación, un análisis
reflexivo) que tiene el propósito de producir un cambio en nuestra forma de ser y actuar en
la práctica, teniendo como patrón las competencias que cada actor (mentor y principiante)
debe evidenciar.

Al respecto los sistemas de mentorías se distinguen en función del tipo de relación


que se establece entre el principiante y el mentor, de este modo es posible reconocer, por
ejemplo la mentoría natural, intencional, paritaria o de enlace (Carr, 1999) o bien en el
modelo de Orland-Barack (2006), Topdown, Botton-up, interactivo y colaborativa, cada una
con rasgos que definen el tipo de relación.
El presente informe, se basa en el análisis de una sesión de mentoría grupal de
cinco profesoras, en donde una de ellas es mentora y cuatro noveles en donde se aborda
los temas de “conducta de los estudiantes” y “reflexión en torno a su actuar como docentes”.
CONTEXTUALIZACIÓN.

En un proceso de acompañamiento emergen diversos temas que son parte de esta


nueva experiencia profesional, los que tienen que ver con las creencias y concepciones que
traen los nóveles, su formación profesional y el contexto en el cual se desenvuelven los que
de una u otra forma condicionan y determinan su desempeño profesional. Como mentores
tenemos la misión de facilitar, favorecer y potenciar la resolución de necesidades y el
desarrollo del novel, alcanzando, en definitiva, una mayor eficacia. Frente a esto, es
fundamental profundizar en una de las competencias principales que debe poseer un
mentor, la capacidad de reflexión, siendo conscientes de que la realidad educativa es
compleja, cada experiencia es diversa y por lo tanto sólo la reflexión desde nuestra propia
práctica nos brindará los saberes necesarios para la mejora de nuestro desarrollo
profesional, en consecuencia, fomentar y guiar la reflexión en el novel es una de los
desafíos más importantes en nuestro rol.
Considerando las distintas problemáticas a las que se enfrenta un novel, en esta
oportunidad profundizaremos en aquellos elementos que tienen que ver sobre cómo nuestra
conducta, emociones y percepciones pueden influir y condicionar el comportamiento de
nuestros estudiantes, lo que en nuestros inicios en la docencia, no lo concientizamos. Para
dar cuenta de esta problemática, consideraremos el análisis realizado en base a un video
del trabajo de una mentoría grupal, en la cual a través de este diálogo, se da cuenta de
dicha problemática.

I. PRINCIPALES TEMAS ABORDADOS.


Luego de la observación del video de una sesión de mentoría grupal, podemos
señalar que en esta se abordan distintos temas que tienen cierta relación entre sí:

- Conducta de los estudiantes​: este tema se aborda desde la problemática que


presentan los noveles cuando constantemente en distintas instancias plantean la
necesidad de generar cambios en las conductas de sus estudiantes.

Extracto 1:
Menor líder: “​Bueno, me resulta interesante pensar sobre el concepto modificación de la
conducta ya que lo utilizamos regularmente cuando hablamos entre nosotros sobre el
comportamiento de algún niño y como queremos modificar ese comportamiento…”
- Reflexión en torno a nuestro actuar como docentes: este tema es presentado por
el mentor a raíz de lo planteado por los noveles, quien los guía para que ellos
primero tomen conciencia de que deben manejar su propia
conducta,autocontrolarse, para así poder guiar a los estudiantes, lo cual se
profundiza cuando se señala que ellos, los estudiantes, de cierta forma entregan
pautas que podemos aprovechar y utilizar para modificar nuestra práctica docente.

Extracto 2:
Mentor líder: … el último paso está relacionado con lo que haremos esta semana, lo que
vamos hacer es comprometernos a intentarlo en nuestras aulas, si este provino de una
discusión en torno de a un artículo o si tuvimos una iluminación cuando estábamos
reflexionando, qué es lo que vamos hacer para modificar el manejo de nuestra sala de
clases, modificar el comportamiento de nuestros estudiantes.
Connie​: voy a levantarme y moverme más, por que los estudiantes se levantan mucho de
sus asientos, pero si me siento en un lugar no común y hago las clases, creo que es una
buena idea circular por la sala de clases para que haya más dinámica se acostumbran a
seguir y se ponen más atentos y puedan decir “ella está atrás” ¿qué es lo que está
haciendo? y si estoy atrás tengo un poco más de atención. Quiero intentar eso.

II. ANÁLISIS DEL ROL DEL MENTOR Y PROFESOR NOVEL.

Con respecto al diálogo observado consideramos que el mentor presenta diversos


atributos en base a los temas abordados durante la sesión, evidenciándose cierta seguridad
y empoderamiento en cada una de sus intervenciones con las cuales busca potenciar el
pensamiento reflexivo en cada uno de sus noveles, escuchando atentamente cada una de
las ideas y sugerencias propuestas y en base a esto, organiza el diálogo desde su rol
principal.

Por otra parte, frente a la problemática que se le plantea, entrega retroalimentación


que de cierta forma guía la reflexión, acompañada además de desafíos que a futuro los
noveles deben considerar para la mejora de su práctica docente. En este sentido, tal como
señala Shaw (1992) un mentor debe configurarse como un individuo que entrega un
consejo constructivo y va más allá de la simple crítica, sobretodo el mentor debe permitir al
aprendiz reflexionar y desarrollar su propia actuación en la sala de clases.
La retroalimentación al interior del proceso de mentoría es fundamental. Para que
sea efectiva, esta debe partir de la necesidad del novel, tal como se evidencia en la
grabación, además implica establecer una relación de ayuda que se caracteriza por: la
confianza mutua, el aprendizaje colaborativo, el crecimiento mutuo, la apertura recíproca, la
resolución compartida de problemas, el desarrollo de la autonomía y la experimentación
(Richards & Renandya, 2002). La retroalimentación en este caso, se sustenta en la
escucha activa y la conversación bien informada y estructurada considerando elementos
como la realidad de sus noveles conjugados con su propia experiencia y saberes
pedagógicos.

Con respecto a los noveles, éstos muestran un claro interés por el aprendizaje que
pueden obtener de su mentor y pares, con ganas de compartir experiencias a modo de dar
a conocer las diversas problemáticas que enfrentan y los contextos en los que se
desempeñan, además al recibir la retroalimentación de los mentores, se puede evidenciar
que son capaces de reflexionar en base a su propia práctica y como ésta, en su caso,
puede condicionar e influir en la conducta de sus estudiantes.

- Problemas y competencias a trabajar por el novel.

Durante el desarrollo del diálogo se evidencia como problemática la modificación de


conducta que esperan realizar los docentes con sus estudiantes, para generar un cambio
positivo que facilite el aprendizaje, en base a esto podemos dilucidar que debemos
potenciar en los noveles la capacidad de reflexión y autocrítica, de tal forma que puedan
buscar estrategias que involucren la modificación de su práctica pedagógica para producir el
cambio que esperan. Por otra parte, deben tomar conciencia de lo complejo de la realidad
educativa, donde cada experiencia es distinta y requiere un análisis para ser comprendida,
lo que sirve de base para implementar medidas de mejora.

- Problemas y competencias a trabajar por el mentor.


La mentora conduce el diálogo en esta “mentoría grupal” a un proceso reflexivo en
donde, en virtud de su experiencia, conocimiento y competencia desarrollada en las
distintas prácticas pedagógicas, fomenta positivamente la participación de cada uno de
ellos, enriqueciendo el diálogo con propuestas que nacen desde la mirada propia del novel.
Sin embargo, consideramos que dentro de lo que pudimos visualizar de la sesión, se debe
trabajar en organizarla de mejor forma respecto a destinar tiempo en aspectos que pueden
ser relevantes para los temas abordados, por ejemplo, cuando se habla de posibles
soluciones a la problemática, donde pareciese ser que se lanzan ideas, pero éstas no
quedan claramente establecidas de tal forma que sean un desafío para aplicarlas, además
el cierre de la sesión es débil, no hay un cierre o una reflexión final a raíz de lo trabajado.
Otro aspecto importante a trabajar es que en una sesión de mentoría grupal, el
mentor debe demostrar cierta competencia para lograr que todos los noveles participen de
manera activa en el diálogo, dando a conocer su experiencia y posibles estrategias de
solución, esto considerando que cada contexto y realidad es distinta, por lo tanto podemos
aprender de todos y con todos.
Con respecto a lo expuesto, consideramos que en esta sesión de acompañamiento
se podría hacer una actividad con los noveles donde ellos podrían responder, primero de
forma individual preguntas reflexivas, como por ejemplo: ¿qué problemática se te ha
presentado en tu quehacer pedagógico?, ¿a qué le atribuyes?, ¿qué cambios realizarías
para mejorar ?, entre otras, luego a partir de las respuestas, entablar un diálogo donde cada
novel pueda exponer su situación, recibiendo retroalimentación que venga del mentor y sus
pares, de tal forma que esto le implique un desafío que le permita avanzar, para esto,
además, es importante establecer metas claras, precisas y reales, las que pueden
monitorearse en futuras sesiones. Consideramos además que las estrategias de mejora
deben ser abordadas desde el punto de vista de la importancia que estas tienen, ya que en
el diálogo se evidencia la profundización de la reflexión que hace el mentor, pero no se le
otorga mayor realce a lo que plantean los noveles, cuando señalan los cambios que pueden
hacer en su práctica, quedando sólo en mencionarlas y no reflexionando en torno a las
implicancias que pueden tener.

Reflexión personal del mentor (extracto de su bitácora).

He quedado muy conforme con esta reunión de mentoría grupal. Creo que mis
colegas fueron muy receptivas y reflexivas frente a los temas planteados. Estuvimos muy de
acuerdo en que resulta relevante para el logro de mejores aprendizajes en el aula tener
presente que:

Primero, mantenernos emocionalmente estables, equilibradas y receptivas de las


ideas y problemas de nuestros alumnos porque ellos también se comprometen con nuestros
estados de ánimo, sean estos positivos o negativos. Así lo compartió la colega Karen, quien
expresó que cuando se encontraba ansiosa o estresada era un pésimo ejemplo para sus
alumnos.
Segundo, que para modificar positivamente la conducta de nuestros alumnos,
tenemos que primero modificar positivamente la conducta propia, pues resultamos ser el
ejemplo más visible para alumnos y alumnas a nuestro cargo.

Lo importante de haber reflexionado sobre estos temas radica en que son problemas
transversales a todos los docentes y maestros, más allá de su especialidad o grado.
Además quiero destacar la importancia de estas reuniones grupales porque resultan muy
apropiadas para tratar estos tópicos que están más allá de una clase en particular o de un
saber pedagógico específico.

Me gustaría expresar también, que mis colegas demostraron una gran humildad para
asumir compromisos puntuales para mejorar el proceso de enseñanza aprendizaje con sus
alumnos, como fue por ejemplo, adoptar posicionamientos estratégicos dentro de la sala de
clases, algo bastante simple o elemental, pero que ciertamente junto a otras estrategias
puede contribuir a lograr clases más exitosas.

Finalmente quiero destacar que, cuando nos reunimos a reflexionar sobre temas de
interés común, no somos indispensables los responsables directos. En esta reunión me
retiré antes que ésta concluyera, pero mis colegas continuaron sin problemas con la
temática presentada, logrando de igual manera los objetivos y consolidando las
conclusiones finales y acuerdos logrados.

Reflexión Novel( Karen).

En esta reunión de mentoría grupal reflexionamos sobre la modificación de la


conducta. Considero importante el manejar y modificar primero la conducta propia, para
luego modificar la de los niños.

En esta reunión me sentí muy bien . El trabajo propuesto por la mentora me


identifico plenamente.Con esta reflexión me quedó muy claro que seré mejor profesora si
estoy tranquila, calmada y con el control de la situación. Me he dado cuenta que soy un mal
ejemplo para mis alumnos cuando estoy ansiosa o estresada. Cuando esto ocurre no me
puedo enfocar bien y mi desempeño en el aula ve disminuido. Quienes me conocen pueden
dar testimonio de ello. Creo que reflexionar sobre estos temas ayudan a ser mejores
docentes cada día, pues recibir retroalimentación de mis pares y de los mentores es un
gran apoyo a mi inserción en este establecimiento.

Además muchas veces como docentes, delegamos toda la responsabilidad en


nuestros alumnos, sin pensar que quizá mucho de lo que hacemos está influyendo en su
comportamiento y motivación para el aprendizaje, con esta sesión me quedó claro de que
antes de pensar en cambiar a los niños, primero debo analizar sobre qué hago como
docente para producir un cambio favorable, quizá debo modificar mi práctica, aplicar otras
estrategias y/o en algunos casos ser un poco más cercana a ellos.
CONCLUSIÓN.

“La mentoría es el baile de las generaciones, a través del cual los mayores con su
experiencia empoderan a los jóvenes y los jóvenes empoderan a los mayores con una
nueva vida”
Parker J. Palmer.

Los docentes a medida que vamos adquiriendo experiencia, podemos tomar


conciencia de las distintas problemáticas que se presentan en nuestro quehacer diario, las
cuales en muchas ocasiones, son transversales a los distintos contextos, con sus
particularidades, pero transversales finalmente. En este sentido, es parte de nuestra
competencia profesional, tener un conocimiento profundo de la realidad en la cual nos
desempeñamos, considerando de que esto comprende la base para generar estrategias y
tomar decisiones de mejora.
En consecuencia, un profesor, debe ser un profesional reflexivo, que
constantemente analice y evalúe su propia práctica, desde la complejidad que ésta tiene por
todos los actores y factores que en ella confluyen. Como mentores esto supone un desafío
importante en donde la toma de decisiones pedagógicas deben nacer desde los
conocimientos previos de sus noveles y no sólo de sus experiencias, por lo que debe
considerarse como un “facilitador del aprendizaje” en lugar de alguien que posee todas las
respuestas, ayudando al novel a aprender otros recursos, metodologías y estrategias que
vayan más allá de los conocimientos y experiencias con las que cuenta lo que servirá como
un instrumento para la innovación y el cambio.
Finalmente, es considerable destacar que las acciones desarrolladas en el proceso
de acompañamiento tendrán un impacto positivo tanto para el novel como para el mentor, la
que cobrará un real sentido cuando se asuma por ambas partes que es necesario aprender
de nuestras propias prácticas en variadas circunstancias durante este periodo de apoyo
profesional y pedagógico en la medida que favorezcan una integración constructivista y
autónoma a la comunidad a la que pertenecen.
BIBLIOGRAFÍA.

Carr, R. (1999). Alcanzando el futuro: el papel de la mentoría en el nuevo milenio. Canadá.

Feiman - Nemser,S.(1996). “La tutoría docente: una revisión crítica”. ERIC Digest.
Orland-Barak, L. (2006). “Lost in translation (perdidos en la traducción): tutores o mentores
que aprenden a participar en discursos competitivos de la práctica educativa”. Revista de
Educación, 340: 187-212. Madrid, Ministerio de Educación y Ciencia.

Richards, J., & Renandya, W. (2002). Methodology in language teaching. An anthology of


current practice. Cambridge: Cambridge University Press.
Shaw, R. (1992). Teacher training in secondary schools. London: Kogan Page Limited.

http:// ​www.cpeip.mineduc.cl
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cionInicialDocente-4714183.pdf

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