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Historia de la humanidad

Maria C. Zapata.
Mayo 2019.
Universidad del Atlántico.
Facultad de Ingeniería.
Introducción a la Ingeniería Industrial.
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Introducción
Si bien es obvio que ha habido incontables cambios desde la iniciación del universo que

conocemos hasta el surgimiento de los primeros organismos y luego de eso muchísimos más

desde la aparición del hombre en el planeta hasta la actualidad, es de gran importancia conocer

y manejar la información que se nos brinda gracias a estudios realizados desde siglos remotos

que aún tienen validez gracias al seguimiento y comprobación que realizan científicos en la

actualidad.

Si hablamos del origen del universo y posteriormente del hombre, encontraremos muchas

teorías, sin embargo, las más coherentes que disputan por la verdad en la actualidad son

solamente dos el creacionismo y el big bang, y como derivada de esta segunda tenemos la teoría

evolucionista.

Aunque es claro que el hombre primitivo tenía comportamientos muy aislados a los de el mismo

en la actualidad, cabe destacar que tenía mucha similitud en cuanto a estructura física, mental

e incluso emocional con los de la actualidad.

A lo largo del trabajo desarrollaremos algunos de los conceptos como lo son las teorías, la

evolución, la historia y desarrollo de la humanidad, etc.

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El origen del hombre

Para hablar acerca del origen del hombre debemos tener conocimiento de concepciones que van

mucho antes, abarcando todo desde la formación de nuestro universo con cada uno de sus

componentes hasta el primer ser vivo.

¿Cómo surgió la vida? ¿cuándo lo hizo? Y ¿por qué lo hizo? Son preguntas muy comunes que

se han cuestionado las personas en diferentes lugares y culturas desde tiempos muy remotos.

Desde siempre hemos intentado encontrar un motivo y justificación a nuestra existencia,

siempre ha estado el anhelo de despejar esa incógnita que es el saber cuál es el origen de todo

y hay muchísimas respuestas a todas esas preguntas que constantemente se formulan, unas

respuestas son más coherentes que otras pero a decir verdad todas quedarían siendo hipótesis o

teorías que al momento de que alguien compruebe o demuestre lo contrario a lo que estas dicen,

pues, simplemente quedarían en el olvido y seguiríamos en ese círculo vicioso de encontrarle

una razón y lógica a todo lo que nos rodea y lo que somos.

Una cosa si es cierta y es que si analizamos el mundo antiguo y lo comparamos con el de la

actualidad podemos apreciar los innumerables cambios que ha tenido todo nuestro entorno e

incluso nosotros como seres humanos pensantes. Muchas de las costumbres que teníamos siglos

atrás han sido sustituidas por nuevas o simplemente se han desechado, y es que en la actualidad

consideramos muchas de ellas irracionales e innecesarias.

Si buscamos las diferentes teorías que intentan dar respuesta a todas las dudas que hay sobre

nuestro origen encontraremos muchísimas, pero las más aceptas por la mayoría, que suelen ser

consideradas las más razonables son solamente dos y a partir de ellas dos derivan muchas otras

teorías que explican los diferentes fenómenos que ocurren en nuestro entorno. Estas dos teorías

son la creacionista y la teoría del Big Bang.

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La primera esta en gran manera ligada a la religión y lo místico, ella explica que todo surgió de

una manera sobrenatural gracias a un ser divino superior a todo lo que conocemos; la segunda

fue investigada y apoyada por científicos y por el contrario de la primera esta intenta dar a

entender que todo surgió por una razón, que nada es coincidencia ni casualidad y que todo lo

que nos rodea solo sigue unas leyes regidas por la naturaleza, donde todo ser viviente está

formado por materia y energía siguiendo un ciclo de transformación constante, en pocas

palabras busca darle lógica a todos los fenómenos que ocurrieron, ocurren y ocurrirán; de esta

segunda ley deriva la ley de la evolución explicando cómo evolucionaron los organismos vivos

a partir de pequeñas partículas o seres unicelulares convirtiéndose poco a poco en organismos

más complejos y de gran tamaño.

En el principio…

Comencemos a partir de esta pregunta: ¿cuál fue el comienzo de todo? Si esto es lo que

queremos saber pues ¿qué es todo?, la verdad es que al hacerse este tipo de preguntas surgen

muchas más sin siquiera haber respondido las anteriores. Muchos prefieren ignorar estas

preguntas y simplemente vivir sus vidas con lo que ya conocen, pero para otros dar respuestas

a estas interrogantes les causa mucha curiosidad e inquietud, y así, buscan las maneras de

encontrar respuestas convirtiendo esta actividad en un hobbie o incluso en un estilo de vida.

Ahora bien ¿qué sabemos sobre “el principio”? tomemos la teoría creacionista y miremos qué

nos dice:

« 1 En el principio Dios creó los cielos y la tierra. 2

Y la tierra estaba desordenada y vacía…

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Y dijo Dios: sea la luz; y fue la luz.»

Teniendo ya esto, debemos saber que esta es la base de esta teoría y como toda teoría debe tener

un fundamento que demuestre su validez, los simpatizantes hacen todas sus demostraciones y
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pruebas partiendo de si bien pudiera llamarse “libro” al que todos conocemos como biblia. La

biblia no es más que la recolección de muchos libros escritos siglos atrás por hombres como

nosotros bajo una “revelación divina”, aunque en distintas religiones varíe su nombre y algunas

pocas cosas, todas coinciden en que todo es creación de un ser supremo.

Retomando el tema principal, entonces podemos afirmar que la explicación que nos da el

creacionismo sobre el cómo y el porqué de la existencia de todo lo que conocemos es que Dios

creo a partir de la nada los cielos, la tierra, las estrellas, los animales, las plantas e incluso al

primer hombre que pisó nuestro planeta.

Pero si esto es así, nos lleva a cuestionarnos entonces ¿Quién es Dios? Y si él nos creó a

nosotros ¿quién lo creó a él? Y luego ¿con qué propósito creó al ser humano?

Al hacer estas preguntas a religiosos creyentes del creacionismo podemos encontrarnos con

respuestas, así como «Dios en un Ser auto-suficiente en absolutamente todos los aspectos.» lo

que trata de dar a entender que, si bien necesariamente todo necesita de un principio y un final

pues él no, ya que él es el principio y el final. A muchos puede parecerle absurdo esto y lo que

le sigue puede que aun más; la respuesta que dan con respecto al propósito de la creación del

ser humano es que nos creó por amor, a su imagen y semejanza, Rick Warren un escritor

religioso dice con respecto a esto: «Fuiste creado por Dios y para Dios... Solo en él encontramos

nuestro origen, nuestra identidad, nuestro sentido, nuestro propósito, nuestro significado y

nuestro destino.»

En resumen, el creacionismo establece que todo fue creado por Dios, rechaza rotundamente a

su contraposición que es el Big Bang en conjunto con el evolucionismo, y el propósito del

hombre es simplemente vivir hasta su muerte cumpliendo los designios de Dios. A pesar de que

para algunos esta teoría deja muchos cabos sueltos de igual forma debe tomarse en

consideración en conjunto a las otras que hay.

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Del caos a la vida

¿Qué sabemos realmente del universo? ¿Cómo lo sabemos? ¿De dónde procede y a dónde se

dirige? La teoría del Big Bang o la gran explosión trata de dar respuestas a estas grandes

interrogantes que han estado por siglos en la mente de millones de personas sin lograr una

respuesta concisa.

Esta teoría sugiere que el universo en su comienzo, o sea, en el momento justo antes de la gran

explosión estaba concentrado en un solo punto, con un tamaño nulo, toda la materia de lo que

hoy conocemos posiblemente estaba concentrada dentro de una gran esfera.

Hawking nos dice que: «… en algún instante del pasado (hace unos 13.700 millones de años)

la distancia entre galaxias vecinas debió de haber sido nula. En otras palabras, todo el

universo estaba concentrado en un solo punto de tamaño nulo, como una esfera de radio cero.

En aquel instante, la densidad del universo y la curvatura del espacio-tiempo debieron de haber

sido infinitas. Es el instante que denominamos big bang o gran explosión primordial.»

Luego de que eso ocurriera el universo comenzó a expandirse indefinidamente y a medida que

esto sucedía si primordialmente estaba muy caliente este se fue enfriando, y a partir de ahí se

formaron partículas, átomos, luego algunos elementos, las estrellas y los planetas, etc.

Si se formulara la pregunta de qué había exactamente antes de la gran explosión Hawking nos

da una respuesta bastante aceptada: «…los sucesos anteriores al big bang no pueden tener

consecuencias, de modo que no deberían formar parte de un modelo científico del universo.

Por eso deberíamos eliminarlos del modelo y decir que el tiempo tuvo un comienzo en el big

bang.»
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Como secuencia de esta teoría para comenzar a explicar el surgimiento de la vida nace la teoría

de la evolución, así como de una gran explosión se fueron formando átomos, moléculas y

compuestos incluso más grandes hasta el punto de formarse planetas y estrellas, se formaron

organismos vivos comenzando por los unicelulares y estos fueron evolucionando hasta

transformarse en organismos más complejos y de gran tamaño. Esta teoría explica que los seres

vivos no aparecen de la nada y porque sí, sino que tienen un origen y que van cambiando poco

a poco.

El evolucionismo fue formulado anteriormente por filósofos presocráticos, pero quien en la

actualidad se lleva la mayor parte del crédito es Charles Darwin, el propuso que las especies

evolucionan principalmente por medio de la mutación azarosa y la selección natural. Esta

propuesta fue rechazada por muchos genios de la época, tal parece que Darwin estaba

completamente demente al decir que éramos animales parientes de los simios y es que si lo

decimos así sin más explicaciones puede parecer hasta un disparate.

De esta manera conociendo los postulados de esta teoría podemos afirmar que quizás, así como

hoy en día observamos a una pequeña oruga sufrir una metamorfosis convirtiéndose luego en

una enorme mariposa comparado con su tamaño inicial, hace millones de años un pequeño

organismo fue transformándose poco a poco, sufriendo una serie de cambios que lo ayudaron a

adaptarse al medio que lo rodeaba.

Si unimos estas dos últimas teorías de las que hemos hablado, tal vez podrimos pensar que en

cierto modo tienen más lógica para muchos, para otros quizás puede parecer completamente

ridículo que sus ancestros hayan sido simios y es que debido a todas las transformaciones

constantes que ha sufrido nuestro planeta parece muy difícil de creer que algo así pueda tener

un mínimo indicio de posibilidad. Pero sea cual sea que haya sido el origen de nuestro universo,

no podemos negar los constantes asombros que nos da la naturaleza, con solo mirar el cielo
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nocturno y la infinidad de estrellas que allí hay nos damos cuenta de lo diminutos que somos

realmente y aun así soñamos con alcanzar ese que dicen ser nuestro único límite: el cielo.

Un hombre poco civilizado

Partiendo de la teoría evolucionista tenemos que todas las diferentes especies de animales que

hoy en día conocemos e incluso los que no conocemos, partieron de un ancestro en común, de

ese ancestro pudieron haberse formado dos especies o más totalmente diferentes siguiendo una

línea genética distinta e irreconocible a simple vista; estas especies se agrupan en géneros y a

su vez en familias.

Así como cada especie animal entra en un grupo diferente de otro, podemos decir entonces que

necesariamente los humanos (homos) debemos entrar en una de estas agrupaciones, y queramos

o no entramos en la familia de los simios, siendo los chimpancés nuestros parientes más

cercanos.

Los seres humanos llegamos al planeta hace millones de años y pensar que el género homo

sapiens (que es el nombre con que se nos clasifica como especie en la actualidad) éramos los

únicos de nuestro género pues simplemente es un error, no podemos adivinar de la nada que

sucedió desde hace millones de años atrás cuando prácticamente la historia que actualmente

conocemos y estudiamos solo abarca unos 5000 o 6000 años como mucho.

Ahora bien, si nos ponemos al día con las investigaciones de biólogos, arqueólogos y demás

científicos que buscan dar respuestas a muchas preguntas entre las cuales está el saber el pasado

del hombre y tal vez a partir de ahí estudiar comportamientos y predecir acontecimientos

futuros, podemos fijarnos que muchos de los fenómenos que observamos en nuestro mundo

actual ya habían ocurrido antes, mucho antes incluso de lo que podríamos imaginar. En el

pasado estos sucesos si bien similares pudieron haber ocurrido en menor escala o incluso en
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mayor escala, como es el caso de la extinción de especies y en específico la extinción de las

diferentes especies homos.

En el libro Sapiens de Yubal Harari nos muestra un relato de toda la evolución del género homo

desde su surgimiento en el mundo hace 2,5 millones de años abarcando todo hasta su extensión

por todo el mundo y las consecuencias que esto trajo.

Al menos 6 especies diferentes de hombres rodaron nuestro planeta hace millones de años, pero,

¿Qué pasó con ellos y por qué en la actualidad solo sobrevivieron los Sapiens? La verdad es

muy sencillo deducirlo de una forma lógica, y obvio con una serie de investigaciones previas

podemos observar que en la actualidad las personas solo por pequeñas desigualdades como por

ejemplo el color de piel e incluso la diferencia de creencias y cualquier comportamiento fuera

de lo “normal” aunque no le haga daño a nadie es motivo suficiente para iniciar una masacre.

Ahora imaginemos el mundo primitivo donde se sobrevive a duras penas, claramente el homo

sapiens había desarrollado habilidades mucho más avanzadas que sus semejantes, quizás esto

bastó para verlos como una amenaza y exterminarlos o quizás incluso entrecruzarse con ellos

dando, así como resultado después de varios milenios lo que somos hoy en día.

De igual forma, así como sucedió con el resto de la especie homo, se extinguieron una rica

variedad de distintas especies animales hace miles de años cuando el hombre se aventuró a

explorar el mundo. Esto lo demuestran arqueólogos que encuentran fósiles de especies

totalmente desconocidas por nosotros ahora en la actualidad, esto debido a que se extinguieron

hace más de 40000 años atrás. Se intenta demostrar lo contrario buscando la inocencia del

hombre puesto que las condiciones climáticas pudieron haber tenido cambios radicales, pero, a

decir verdad, todo donde llegaba el hombre era brutalmente masacrado y se comprueba a

sabiendas de que aquellas islas remotas donde el hombre no logró llegar hasta hace 200 años

su fauna permanecía intacta.

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Revoluciones desde el comienzo

En la historia del hombre conocemos tres revoluciones: la revolución cognitiva, la revolución

agrícola, y la revolución científica.

La revolución cognitiva comenzó con la llegada del homo sapiens. El homo sapiens primitivo

tenía las mismas capacidades mentales que tenemos actualmente, solo que aún no las habían

descubierto ni desarrollado en su totalidad. Esta evolución permitió que el sapiens fuese

desarrollando habilidades un poco diferentes a las de sus hermanos las otras especies de homos,

y gracias a esto fue que pudo coronarse como el líder de la cadena alimenticia.

El homo sapiens comenzó por la creación de utensilios, dominio del fuego y fue desarrollando

un orden jerárquico que poco lo distingue de los demás animales que siguen al macho alfa de

la manada. Lo que si lo distinguió fue el desarrollo de un lenguaje y la manera de organización

distinta de la del resto de los animales, mientras que en una manada no puede haber más de 50

o 70 miembros, los sapiens formaban grupos de mucho más número y desarrollaron el

denominado chismorreo que facilitó la comunicación entre todos los miembros del grupo.

Si bien ya hasta ahí tenía suficiente ventaja sobre las otras especies, desarrolló de igual manera

la habilidad de hablar y creer en cosas ficticias, de ahí se formaron las creencias místicas-

religiosas, el orden social, las leyes, la cultura, etc.

Luego de la revolución cognitiva le siguió la revolución agrícola, donde el hombre pasó de ser

un cazador-recolector nómada a establecerse en un solo lugar formando comunas y

posteriormente ciudades y países. La habilidad de adiestrar diferentes hierbas y vegetales que

le sirvieran como alimento fue lo que lo impulsó a convertirse en un hombre sedentario,

construyó su propio hogar, conoció el concepto de lo que es familia y gracias a esto desarrolló

también la habilidad de pensar en un futuro y no solo vivir del día a día, ejercitó su memoria

creando recuerdos y pronósticos de lo que depararía el futuro.

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La revolución científica es en la que vivimos actualmente, si bien las revoluciones antecesoras

ocurrieron hace miles de años, esta última apenas surgió hace unos 500 o 600 años atrás.

Con el establecimiento de países, leyes, organizaciones, creencias y demás, se avivó en el

hombre la inquietud del saber. Conocer la razón y el porqué de las cosas se convirtió en una

ambición, así como la sed de poder y de tener autoridad lo hicieron en la revolución agrícola.

Si bien en milenios anteriores ya se habían creado muchos inventos, con la llegada de la

revolución científica se desbordó esa gran brecha que fue abriéndose camino poco a poco, cada

invento, cada investigación fue seguida de otra y otra siguió a esta anterior.

¿Quién iba a pensar que un animal irracional llegaría a evolucionar hasta ser capaz de hacer

grandes máquinas voladoras, o transportadores de mensajes en milésimas de segundos? Es

indiscutible que la humanidad sufrió un cambio y un avance totalmente drástico, pero como

todo tiene su límite, si la revolución científica e industrial no logra controlarse volveremos a

ser como hace milenios, los principales culpables de la extinción de muchas especies, como

consecuencia de las cosas que el hombre ha creado, hay una alta contaminación ambiental y

han aparecido enfermedades de las cuales nunca antes se había escuchado hablar y si sigue así

no solo acabaremos con la fauna, sino también con el planeta, incluyéndonos.

Así como logramos desarrollar la capacidad de pensar, de reflexionar y cuestionarnos antes de

hacer algo, debemos desarrollar la capacidad de cuidar nuestro entorno y tratar de revertir los

daños que nuestros antepasados cometieron y aún en la actualidad siendo conscientes de ello

seguimos cometiendo.

Hasta aquí pudimos observar la transformación maravillosa que tuvo nuestra especie, pasando

de ser un animal totalmente irracional guiado por su instinto a ser un ser pensante, reflexivo e

innovador. Y es increíble la forma en que un ser vulnerable como lo es el hombre llegase a

posicionarse en la cima del mundo.

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Historia y desarrollo de la humanidad

Hablemos ahora de la historia de la humanidad como no las presentan de forma general.

Básicamente nuestra historia fue marcada por un antes y un después, esa división se hizo a partir

del nacimiento y la muerte de quien conocemos como el Hijo de Dios. Desde el año de su

nacimiento hacia atrás podemos encontrar la era antigua y mucho más atrás la prehistoria. En

la edad antigua ya el hombre era gobernado por reyes y seguía una estructura social y política

no muy distinta a la que tenemos actualmente. Desde el año de su muerte a la actualidad, o sea,

2000 años aproximadamente abarca la edad media, la moderna y donde nos encontramos en la

actualidad que es la edad contemporánea, en estas épocas podemos observar muchos cambios

en todos los aspectos que ha creado el hombre como lo social, cultural, político, religioso, etc.

La historia de la humanidad abarca desde guerras, masacres y como parte de su desarrollo las

exploraciones, construcciones, el surgimiento de diferentes ciencias como la medicina,

arquitectura, ingeniería, etc. y la invención de muchos objetos.

Desde el hombre y el gobernante más injusto e irracional, hasta el más justo y democrático.

Nuestra historia tiene una gran variedad y es muy importante para nosotros conocerla, analizarla

y apropiarnos de ella para no cometer los mismos errores del pasado si es que realmente

queremos permanecer como la especie superior o, por el contrario, queremos quedar como los

tontos que acabaron con su propio mundo.

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Conclusión

A pesar de que la humanidad va en constante desarrollo, si comparamos diferentes épocas en

las que se divide nuestra historia podemos darnos cuenta de que realmente no hay gran

diferencia, solo que en la actualidad hemos desarrollado aparatos que antes ni imaginábamos.

Nuestro paso por la tierra ha sido un círculo vicioso lleno de muertes, ficción, extinción y sí,

también desarrollo.

Como seres humanos, consientes y racionales debiera notarse un cambio en cuanto a nuestro

comportamiento hacia los semejantes, pero si incluso nos dañamos entre nosotros mismos,

siendo miembros de una misma especie, pues, ¿qué se deja para los demás?

Hawking dijo: «Vivimos en un universo extraño y maravilloso. Se necesita una extraordinaria

imaginación para apreciar su edad, tamaño, violencia, e incluso su belleza.»

Pero más allá de imaginación en la actualidad necesitamos un toque de realidad, si miramos

hacia el basto cielo, podemos darnos cuenta de lo insignificantes que somos a comparació,

entonces, ¿Qué nos da el derecho a sentirnos superior a las demás especies si todas en conjunto

compartimos el mismo oxígeno?

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Bibliografías

Hawking. S. (2015), Brevísima historia del tiempo. Barcelona, España, Editorial Planeta S. A.

Hawking. S. (2007), The theory of everything, Un_Tal_Lucas ePub.

Harari. Y. N. (2014) From Animals into Gods: A Brief History of Humankind, T itivillus

ePub.

Warren. R. (2002) The Purpose Driven Life, Zondervan.

Campiño Santiago, (2016) https://hipertextual.com/2016/02/darwin-evolucion

Iglesias. L. A. (2018) https://www.filco.es/evolucionismo-o-de-donde-venimos/

(2012) https://verdadyfe.com/2012/06/09/quiencreoadios/

Vázquez. L. (2013) https://www.vix.com/es/btg/curiosidades/2011/05/29/teoria-creacionista-

o-fijista

Portillo. G. https://www.meteorologiaenred.com/teoria-del-big-bang.html