You are on page 1of 34

CAPITULO 1: CONCEPTOS BÁSICOS DE GEOLOGÍA Y GEOTECNIA

1.1 PROBLEMAS ASOCIADOS A LA MECÁNICA DE SUELOS

La Mecánica de Suelos es una disciplina que pertenece al área de la Geotecnia dedicada


al estudio de las propiedades mecánicas, físicas y químicas del suelo, la cual permite
determinar su comportamiento y definir el empleo de este suelo como material de
construcción (rellenos, terraplenes, bases de pavimentos y otros) o como sustento de
una construcción (fundaciones de edificios, puentes, muros de contención, entre otros).

En el trabajo práctico de construcción de obras civiles, el terreno puede presentar


diversos problemas, como en el caso de fundaciones, empleo del suelo como material de
construcción, en taludes y excavaciones, estructuras de contención y otros problemas
especiales que se pueden presentar durante el desarrollo de una obra.

Fundaciones

Todas las estructuras deben fundarse sobre la superficie del terreno o dentro de ella y
para que se comporte satisfactoriamente debe tener una fundación adecuada, lo que se
traduce en evitar asentamientos suficientemente grandes para dañar la estructura o
dificultar sus funciones.

Cuando el terreno resistente se encuentra próximo a la superficie, las soluciones de


fundación pueden ser de carácter superficial (zapatas aisladas, losas de fundación,
zapatas corridas, entre otras soluciones de acuerdo a las cargas transmitidas y la
capacidad de soporte del suelo de fundación).

En caso que el terreno firme no esté próximo a la superficie, un sistema habitual para
transmitir las cargas al terreno es por medio de fundaciones profundas (pilotes, pilas,
cajones u otros elementos verticales).

Cuando la solución de fundación es superficial, la Mecánica de Suelos deberá responder


algunas interrogantes, como:

9 ¿A qué profundidad deberá fundarse la estructura en el terreno?


9 ¿Cómo se protegerá la excavación durante la construcción, para evitar el
desprendimiento del terreno?
9 ¿Cuál es la posición del nivel freático?, ¿Habrá que abatirlo?, ¿Cómo?
9 ¿Existe peligro de daños a las construcciones adyacentes?
9 ¿Cuánto se asentará la construcción una vez finalizada la obra?, ¿Será uniforme
ese asentamiento?
9 ¿Qué esfuerzos y distribución de los mismos deberán considerarse para el
proyecto de fundación?

1
En los casos que la solución se trate de fundaciones profundas, las interrogantes pueden
ser:

9 ¿Qué tipo de pilote debe emplearse?


9 ¿Cuál es la carga máxima admisible por pilote?
9 ¿Con qué separación deben colocarse los pilotes?
9 ¿Qué método de colocación debe emplearse?
9 ¿Qué variación con respecto a la vertical puede permitirse en un pilote?
9 ¿Cuál es la secuencia óptima de colocación de los pilotes?
9 ¿Tendrá el hincado de pilotes alguna influencia sobre las estructuras adyacentes?

En los casos en que se opte por una alternativa de fundación que conduzca a reducir los
costos mediante alguna técnica de mejoramiento del terreno, como es la precarga,
algunas de las interrogantes a responder son:

9 ¿Qué altura debe tener el terraplén?


9 ¿Con qué rapidez se podría construir dicho terraplén?
9 ¿Cuáles serían los taludes que debe tener el terraplén?
9 ¿Cuál será el valor de los asentamientos que sufrirá el terraplén?
9 ¿Durante cuánto tiempo debería dejarse el terraplén con objeto de que el terreno
se consolide lo suficiente para permitir la construcción y buen funcionamiento de la
construcción definitiva?

Suelo como material de construcción

El suelo es el material de construcción más abundante del mundo y en muchas zonas


constituye, de hecho, el único material disponible localmente.

Cuando se emplea el suelo como material de construcción debe seleccionarse el tipo de


suelo más adecuado, el método de colocación y, posteriormente, controlar su colocación
en obra. Una masa de suelo colocada por el hombre constituye un relleno. Uno de los
problemas más habituales en este tipo de construcción se debe a la gran diversidad de
los puntos de extracción, denominados zonas de empréstito. De este modo, una labor
importante es cerciorarse que las propiedades del material colocado correspondan a las
supuestas en el proyecto, o modificar el proyecto durante la construcción, teniendo en
cuenta cualquier diferencia entre las propiedades de la obra construida y las que se
consideraron en el proyecto.

Algunos ejemplos de empleo del suelo como material de construcción lo constituyen las
presas de tierra y los terraplenes para carreteras, por lo que las principales interrogantes
planteadas para cada caso son:

a) Presas de tierra:

9 ¿Qué dimensiones debería tener la presa para obtener una estructura más
segura y económica?
9 ¿Cuál es el espesor mínimo seguro de las capas de grava?
9 ¿Qué espesores de grava y bloques de roca serían necesarios en el manto
para limitar el hinchamiento de un núcleo de arcilla a un valor admisible?
9 ¿Qué humedad y método de compactación deberían emplearse en la
colocación de la grava y arcilla?

2
9 ¿Cuáles serían las características de resistencia y permeabilidad de la
presa construida?
9 ¿Cómo variaría la resistencia y la permeabilidad de la presa con el tiempo y
la altura de agua e el embalse?
9 ¿Qué pérdidas por filtración podrían producirse bajo la presa y a través de
la misma?

b) Terraplén para carreteras:

9 ¿Cuál es el material más adecuado?


9 ¿Qué espesores deberían darse a las distintas
capas de material que deberán soportar las cargas
previstas?
9 ¿Qué tipo y grado de compactación debería
aplicarse?
9 ¿Qué equipo de compactación debería emplearse?
9 ¿Qué metodología de control es la más adecuada?

Taludes y excavaciones

Cuando la superficie del terreno no es horizontal existe una componente del peso que
tiende a provocar deslizamientos del suelo. Si a lo largo de una superficie potencial de
deslizamiento, los esfuerzos tangenciales debidos al peso propio o a cualquier otra causa
(como agua de filtración, peso de una estructura o de un sismo) superan la resistencia al
corte de un suelo, se produce un deslizamiento de una parte del terreno.

Para estos casos, las interrogantes planteadas pueden ser:

9 ¿Cuánta profundidad se puede excavar sin


necesidad de entibar?
9 ¿Cuál es el tipo de talud más adecuado a utilizar?
9 En caso que sea necesario entibar ¿Qué tipo de
entibación se puede emplear?
9 ¿Cuál es la dimensión de los puntales?
9 ¿Cómo afectan los cambios de humedad en el
comportamiento del suelo?
9 ¿Cómo pueden controlarse estos cambios de
humedad?

3
Estructuras de contención

Cualquier estructura construida bajo la superficie de terreno, o sobre ella, estará sometida
a las fuerzas que ejerce el suelo en contacto con la estructura.

Cuando se trata de estructuras como tablestacas ancladas, las cuales están bajo la
superficie del terreno, las interrogantes planteadas pueden ser:

9 ¿Qué tipo de material se puede emplear en la tablestaca y de qué sección


transversal?
9 ¿Qué profundidad debe penetrar la tablestaca en el terreno?
9 ¿A qué altura debe situarse el anclaje?
9 ¿Qué longitud debe tener el anclaje?
9 ¿Cuál es la distribución de presiones sobre la tablestaca?
9 ¿Qué tipo de drenaje debe emplearse para evitar que se desarrolle una importante
presión hidrostática diferencial a ambos lados de la tablestaca?

Problemas especiales asociados a la Mecánica de Suelos

Existen algunos problemas especiales, que a pesar de no ser muy comunes, pueden
presentar daños importantes en las construcciones.

9 Vibraciones:

Algunos suelos granulares se pueden compactar fácilmente mediante vibraciones y las


estructuras construidas sobre ellos pueden sufrir asentamientos importantes, producto de
la vibración de la maquinaria instalada sobre ellos. De este modo, los efectos pueden ser
graves, especialmente, cuando la frecuencia de la vibración coincide con la frecuencia
natural del terreno.

9 Explosiones y sismos:

Las ondas originadas por voladuras de canteras y otras explosiones realizadas con fines
constructivos pueden tener graves efectos sobre las estructuras adyacentes. Problemas
semejantes ocasionan los sismos. El tipo de terreno sobre el cual se apoyan las
estructuras y su tipo de fundación influyen en la magnitud de los daños que puede sufrir la
edificación durante un terremoto.

9 Heladas:

Debido a que ciertos suelos y bajo determinadas condiciones se dilatan al congelarse, los
problemas con los que se pueden enfrentar son de expansión por efecto de las heladas,
puesto que al entrar en contacto con la humedad y experimentar temperaturas de
congelación pueden absorber agua y sufrir una expansión importante.

El hinchamiento que se puede producir ejerce fuerzas suficientemente grandes como para
desplazar y agrietar estructuras adyacentes, creando serios problemas en épocas de
deshielo por el exceso de humedad. La descongelación de suelos helados suele proceder
desde la superficie hacia abajo. El agua de fusión de hielo no puede ser evacuada hacia
el terreno inferior helado, con lo cual queda atrapada reblandeciendo el suelo.

4
9 Hundimientos:

La extracción importante de agua del terreno puede producir asentamientos de gran


magnitud. Por esta razón, es importante estudiar detalladamente los métodos de
agotamiento del terreno y la metodología de sustitución de los volúmenes de agua
extraída en los casos necesarios.

Resolución de los problemas de Mecánica de Suelos

Comprendidos los problemas que el terreno puede plantear, es importante visualizar el


método de cómo enfrentarlos y resolverlos adecuadamente.

La Geología ayuda en gran medida, puesto que el método de formación de una masa de
suelo influye en el tamaño, forma y comportamiento del mismo. La exploración ayuda a
establecer los contornos de un depósito y permite la selección de muestras para ensayos
de laboratorio. La experiencia del profesional es importante en el momento de analizar los
resultados obtenidos de las pruebas. Por otro lado el factor económico es muy importante
en el momento de escoger una solución respecto a otra.

En resumen, para resolver un problema de Mecánica de Suelos es importante conjugar, a


lo menos, estos cinco elementos:

9 Conocimiento teórico, conceptos, modelos y propiedades de los suelos.


9 Exploración del terreno por medio de ensayos de laboratorio y pruebas en terreno
con el objeto de obtener los parámetros de diseño del suelo en estudio.
9 Experiencia del profesional que permita interpretar adecuadamente los resultados
obtenidos y contrastarlos con experiencias anteriores similares, donde las
soluciones implementadas han dado resultados positivos.
9 Costo de una alternativa de solución con respecto a otra.
9 Criterio profesional.

Es importante considerar que casi todos los problemas de Mecánica de Suelos son, en un
grado importante, estáticamente indeterminados. Aún es más relevante el hecho de que
los depósitos de suelos naturales presentan características que originan más
complicaciones:

9 El suelo no posee una relación lineal o única de esfuerzo-deformación.


9 El comportamiento del suelo depende de la presión, tiempo y del medio físico.
9 El suelo es diferente, prácticamente, en cada lugar.
9 En casi todos los casos la masa de suelo que interviene en un problema está bajo
la superficie y no puede observarse en su totalidad, sino que se debe estudiar a
partir de pequeñas muestras obtenidas en puntos localizados.
9 La mayoría de los problemas son muy susceptibles a alterarse, debido a la toma
de muestras, por lo que el comportamiento medido en ensayos de laboratorio
puede ser diferente al del suelo in situ.

5
1.2 CONCEPTOS BÁSICOS DE GEOLOGÍA

En este capítulo se presentan conceptos básicos de Geología, que han sido


seleccionados como los mínimos necesarios para comprender con mayor facilidad, los
temas geotécnicos que se desarrollarán más adelante. Para una mayor profundización y
comprensión de los temas que aquí se presentan, se recomienda al alumno revisar la
bibliografía de referencia que complementa este capítulo, la cual se encuentra al término
del presente capítulo.

La Geología es la ciencia de la tierra que se ocupa del estudio de las características


representativas, origen y transformación en el tiempo del planeta. De este modo, se
preocupa de dar respuesta a interrogantes de cómo se ha formado la tierra, de qué
está hecha, cuál es su historia, qué cambios han tenido lugar sobre ella y en ella y
otras preguntas que pueden ser respondidas con apoyo de disciplinas geológicas o
especialidades, como son:

Geografía: Estudio de la superficie y sus relaciones con los organismos


vivos
Oceanografía: Estudio de los océanos
Meteorología: Estudio de la atmósfera
Climatología: Investigación del clima
Geofísica: Estudio la estructura, composición y desarrollo del planeta
Sismología: Rama que estudia los terremotos
Hidrogeología: Investiga la cantidad y calidad del agua de la Tierra
Geodesia: Investiga la forma y dimensiones de la Tierra o una parte de ella
Mineralogía: Estudio de los minerales, su estructura interna, composición
química y clasificación
Petrología: Estudio de las rocas, su origen, procesos de formación,
composición, alteración y destrucción
Paleontología: Estudio de la vida de épocas geológicas pasadas, fósiles, su
clasificación y reconocimiento, con el objeto de mejorar el
conocimiento de la evolución
Estratigrafía: Estudio de la formación, composición, secuencia, cronología y
correlaciones de las rocas estratificadas
Geología estructural: Analiza e interpreta las estructuras tectónicas en la corteza
terrestre, las fuerzas que producen fracturamiento, plegamiento
y montañas (fallas, pliegues y orogénesis)
Geomorfología: Estudio de la descripción e interpretación de las características
del relieve terrestre
Geología histórica: Estudio de la evolución cronológica de la tierra desde su
formación
Geología económica: Aplicación de la geología al aprovechamiento de minerales,
combustibles y otros
Geotecnia: Estudio de las propiedades de los suelos, rocas y materiales
artificiales, que permiten resolver problemas de fundaciones y/o
excavaciones en ellos, o bien, su empleo como material de
construcción (presas, terraplenes, vías de comunicación, otros)

Otras especialidades son, por ejemplo: Volcanología, Geología Marina, Geología de


Yacimientos Minerales, Hidrología, Geofísica, Geoquímica, Petrografía, Geología
Regional y Sedimentología, entre otras.

6
El estudio de la Geología permite conocer los materiales naturales, sus características y
modos de ocurrencia, con lo cual se pueden evaluar zonas para emplazamiento de obras
y lugares de empréstitos. También se pueden conocer las rocas y los factores que afectan
su calidad con el objeto de estudiar la construcción de túneles en sus distintas etapas:
excavación, sostenimiento y revestimiento. Del mismo modo, el conocimiento de las
aguas subterráneas permite planificar y diseñar obras al comprender el comportamiento
de las napas freáticas. En términos generales, se puede decir que la primera importancia
de la Geología se manifiesta en las obras de ingeniería donde el terreno constituye el
soporte, el material de excavación, de almacenamiento o de construcción. Un segundo
campo en el cual la Geología tiene un importante rol, se refiere a la prevención, mitigación
y control de los riesgos geológicos, así como de los impactos ambientales de las obras
públicas, actividades industriales, mineras o urbanas.

La diversidad del medio geológico y la complejidad de sus procesos hacen que en las
obras de ingeniería se deban resolver situaciones donde los factores geológicos son
condicionantes de un proyecto. Las principales conclusiones son:

9 Los factores geológicos son la causa de la mayoría de los problemas geotécnicos.


9 El agua es uno de los factores de mayor incidencia en el comportamiento
geotécnico de los materiales.
9 Los procesos geológicos pueden modificar el comportamiento de los materiales,
incidiendo sobre el medio físico y ocasionar problemas geotécnicos.

1.3 LA TIERRA Y SU ESTRUCTURA

Los científicos de los últimos siglos no tenían métodos para medir las edades absolutas
en las rocas, por lo cual sólo se pudieron estimar edades relativas. Actualmente, se puede
medir la edad de la Tierra determinando la edad absoluta de la formación de rocas, lo cual
se ha podido llevar a cabo por el método de medición de la descomposición radioactiva de
algunos isótopos en forma permanente (U, Rb, C). De este modo, se ha determinado que
la Tierra tiene una edad aproximada de 4.750 millones de años.

La estructura de la Tierra se puede considerar que está formada por cinco partes: la
primera, la atmósfera, es gaseosa; la segunda, la hidrosfera, es líquida; la tercera, cuarta
y quinta, la litosfera, el manto y el núcleo son sólidas.

La atmósfera es la cubierta gaseosa que rodea el cuerpo sólido del planeta. Aunque tiene
un grosor de más de 1.100 km, aproximadamente la mitad de su masa se concentra en
los 5,6 km más bajos. La litosfera, compuesta sobre todo por la fría, rígida y rocosa
corteza terrestre, se extiende a profundidades del orden de 100 km. La hidrosfera es la
capa de agua que, en forma de océanos, cubre el 70,8% de la superficie de la Tierra. El
manto y el núcleo son el pesado interior de la Tierra y constituyen la mayor parte de su
masa. El núcleo está compuesto principalmente por hierro y níquel. Aquí tiene su origen el
campo magnético que afecta a todo el planeta. Algunos organismos vivos son sensibles al
magnetismo y lo utilizan para orientarse como, por ejemplo, algunas aves. Rodeando al
núcleo se encuentra el manto, es la capa más voluminosa de la Tierra, compuesta por
oxígeno y silicio acompañados de otros elementos como aluminio, magnesio, hierro,
calcio, sodio y otros.

7
La Tierra, según largos estudios, se cree procedente de una nebulosa o globo líquido de
temperatura muy elevada que el frío del espacio lo solidificó progresivamente. De este
modo, el aumento de la temperatura fue suficiente para calentar el planeta por entero. En
ese momento se inició la formación de la corteza terrestre, mediante el ascenso de
aquellos elementos licuados que eran gravitacionalmente más ligeros. Mientras, los
líquidos más pesados que contenían níquel, hierro y azufre, se separaron y se fueron
introduciendo hasta ir formando lo que es el núcleo de la Tierra. Los elementos ligeros
más volátiles fueron elevándose y al convertirse en gases, se escaparon al exterior. Esto
se puede asociar con la actividad volcánica en la superficie y formar la atmósfera
secundaria y los océanos. Este proceso es conocido como diferenciación de la Tierra.

Esta primitiva y delgada corteza, era probablemente inestable y se fundía e iba hacia las
profundidades, generando más energía gravitacional que a su vez permitía la formación
de una corteza más delgada, estable y duradera. Una vez que el manto se encontraba a
alta temperatura y en estado líquido, se produjo un largo proceso de sucesivos traslados
que dieron origen a la formación de la corteza oceánica. Durante un período de 700
millones de años, en los cuales se fue produciendo una evolución en la corteza,
comienzan a aparecer las primeras masas rocosas registrables.

Hay dos grandes procesos que han modelado la superficie del planeta y que han tenido
una decisiva importancia en la evolución y distribución de la vida:

9 La existencia, por una parte, de una atmósfera y una hidrosfera ha provocado un


continuo proceso de erosión, transporte y sedimentación de las rocas, en lo que se
suele llamar el ciclo geomorfológico;
9 Por otra parte, durante miles de millones de años se ha ido sucediendo un lento
pero continuo desplazamiento de las placas que forman la parte externa del
planeta, originando la denominada tectónica de placas. Los continentes se unen
entre sí o se fragmentan, los océanos se abren, se levantan montañas, se modifica
el clima, influyendo todo esto, de forma muy importante en la evolución y
desarrollo de los seres vivos.

Algunos datos interesantes de la Tierra son:

Radio ecuatorial : 6.378 km


Radio polo / polo : 6.357 km
Volumen : 1,083 x 1012 km3
Masa : 6 x 1021 ton
Peso específico promedio : 5,517 g/cm3
Rocas más antiguas : 3,75 mil millones de años
Océanos / Continentes : 71% / 29%
Profundidad promedio de los océanos : 3.800 m

La hidrosfera se compone principalmente de océanos, pero en sentido estricto comprende


todas las superficies acuáticas del mundo, como mares interiores, lagos, ríos y aguas
subterráneas. La profundidad media de los océanos es de 3.794 m, más de cinco veces la
altura media de los continentes. La masa de los océanos es de (1,35 × 1018) toneladas.

8
La litosfera comprende dos capas (la corteza y el manto superior) que se dividen en unas
doce placas tectónicas rígidas. La corteza misma se divide en dos partes. La corteza
siálica o superior, de la que forman parte los continentes, está constituida por rocas cuya
composición química media es similar a la del granito y cuya densidad relativa es de 2,7.
La corteza simática o inferior, que forma la base de las cuencas oceánicas, está
compuesta por rocas ígneas más oscuras y más pesadas como el gabro y el basalto, con
una densidad relativa media aproximada de 3.

La litosfera también incluye el manto superior. Las rocas a estas profundidades tienen una
densidad de 3,3. El manto superior está separado de la corteza por una discontinuidad
sísmica, la discontinuidad de Mohorovicic, y del manto inferior por una zona débil
conocida como astenosfera. Las rocas plásticas y parcialmente fundidas de la
astenosfera, de 100 km de grosor, permiten a los continentes trasladarse por la superficie
terrestre y a los océanos abrirse y cerrarse.

El denso y pesado interior de la Tierra se divide en una capa gruesa, el manto, que rodea
un núcleo esférico más profundo. El manto se extiende desde la base de la corteza hasta
una profundidad de unos 2.900 km. Excepto en la zona conocida como astenosfera, es
sólido y su densidad, que aumenta con la profundidad, oscila de 3,3 a 6. El manto
superior se compone de hierro y silicatos de magnesio como el olivino y la parte inferior
de una mezcla de óxidos de magnesio, hierro y silicio.

La investigación sismológica ha demostrado que el núcleo tiene una capa exterior de unos
2.225 km de grosor con una densidad relativa media de 10. Esta capa es probablemente
rígida y los estudios demuestran que su superficie exterior tiene depresiones y picos, y
estos últimos se forman donde surge la materia caliente. Por el contrario, el núcleo
interior, cuyo radio es de unos 1.275 km, es sólido. Se cree que ambas capas del núcleo
se componen en gran parte de hierro con un pequeño porcentaje de níquel y de otros
elementos. Las temperaturas del núcleo interior pueden llegar a los 6.650 °C y se
considera que su densidad media es de 13.

1.4 LOS MATERIALES DE LA CORTEZA TERRESTRE

Un corte de la Tierra muestra una serie de capas similares a las de una cebolla. La
corteza, compuesta sobre todo de basalto y granito, tiene un grosor de pocos kilómetros.
Por debajo se extiende el manto, compuesto principalmente de metales y rocas ígneas. El
manto constituye la porción más importante del planeta y abarca desde la base de la
corteza hasta 2.900 km de profundidad (figura 1.1). El manto aumenta su densidad con la
profundidad.

9
Núcleo
El interior de la Tierra consta del núcleo, el manto y la
corteza.

Manto La energía remanente de la formación del planeta,


unida a la que produce la radioactividad del núcleo y
Corteza el manto, genera un flujo de calor que desencadena
corrientes de material caliente en el manto.

Figura 1.1

Por debajo del manto se encuentra el núcleo exterior, líquido. Se cree que este material
se compone de hierro, níquel y cantidades menores de azufre y otros elementos, y que su
densidad supera en 10 veces la del agua.

Aún más profundo y denso resulta el núcleo interno, donde presiones enormes (cuatro
millones de veces las que imperan en la superficie terrestre) mantienen sólidos el hierro y
el níquel a pesar de que las temperaturas superan los 5.200 ºC. El núcleo interno, sólido,
forma el corazón de hierro de la Tierra y tiene un diámetro de 2.400 kms (figura 1.2).

Núcleo interno
Núcleo externo

Pirósfera - SIMA

Litósfera - SIAL

Discontinuidad de Conrad
Discontinuidad de Mohorovicic

Figura 1.2

La corteza terrestre se compone de dos tipos: la corteza continental y la oceánica. La


corteza continental incluye los continentes y los sectores del mar de baja profundidad,
mientras que la corteza oceánica se encuentra en los sectores oceánicos de alta
profundidad y contiene una mayor cantidad en aluminio, hierro, magnesio, calcio y
potasio.

La corteza continental en parte está dividida por la discontinuidad de Conrad, la cual no es


continua y se divide en una zona superior y una zona inferior. Esta discontinuidad no está
desarrollada en todas las partes de la corteza, normalmente se ubica en una profundidad
entre 15 a 25 km. En montañas altas, como los Alpes, la corteza continental llega hasta
una profundidad de 55 km.

10
La corteza terrestre se compone de:

9 47% Oxígeno
9 28% Silicio
9 8% Aluminio
9 5% Hierro
9 12% Calcio, magnesio, etc

La combinación de estos elementos forman los distintos minerales que se encuentran


presentes en la Tierra.

1.5 PROCESOS GEOLÓGICOS QUE DETERMINAN EL EMPLAZAMIENTO DE LAS


OBRAS CIVILES

Han transcurrido millones de años desde la formación de la corteza terrestre, la que fue
experimentando cambios muy profundos, debidos principalmente, a la elevación o
hundimiento de las masas continentales y a la formación de plegamientos o cadenas de
montañas.

Todo esto permite distinguir las llamadas eras geológicas, o etapas en la vida de la Tierra.
La más antigua es la era azoica, que significa sin vida porque en ella no aparecen fósiles
de plantas ni de animales. Luego sigue la era arcaica. Se calcula que duró unos 500
millones de años. Durante ella se produjeron grandes plegamientos y cataclismos que
dieron origen a algunas cadenas de montañas. La actividad volcánica fue muy intensa en
América, y surgió la cordillera de los Hurones en Canadá. Se cree que al final de este
período aparecieron las primeras bacterias y algas en el mar. Continúa la era primaria o
paleozoica, que consta de varios períodos. En los primeros la vida estaba limitada al mar.

La era secundaria o mesozoica, que siguió a la anterior, se extiende desde unos 200
millones hasta 70 millones de años antes de esta era. Comenzó con una intensa actividad
volcánica y se formaron los bosques petrificados de Arizona. Luego, Europa fue invadida
por los océanos, lo mismo que grandes extensiones de América y Africa.

Sigue la era terciaria o cenozoica, que se extiende hasta un millón de años antes de esta
era. La intensa actividad orogénica dio origen a cordilleras tan importantes como los
Andes, los Alpes y el Himalaya.

La última era, que es la actual, es la cuaternaria. Al principio los glaciares cubrieron la


cuarta parte de la superficie terrestre y el clima era muy frío.

La siguiente tabla muestra las edades geológicas de la Tierra, la cual debe ser leída
desde abajo hacia arriba:

11
Grandes acontecimientos
Eras Sistemas
morfológicos
y edad absoluta de su inicio (en millones de años salvo otra
indicación)

Posglacial u Holoceno Glaciaciones e interglaciares


10.000 años
Enfriamiento del clima en las zonas
Pleistoceno actualmente templadas
Cuaternario
0,7
1.8
Villafranquiense superior
1,8

Plioceno
6,5
Mioceno Neogeno
25
Terciario
Paroxismo de los plegamientos andinos
65 Oligoceno
40 Eogeno
Eoceno
65

Cretácico
135 Plegamientos andinos
Jurásico
Secundario
190
225
Trias Penillanura petriásica
225

Pérmico Depósitos rojos de las cuencas pérmicas


280 (correlativos de la destrucción de los
últimos relieves hercinianos)

Carbonífero Plegamientos hercinianos


345 Depósitos de Old Red Sandstone en
Devónico Gran Bretaña (correlativos de la cordillera
395 caledoniana)
Primario
Plegamientos Caledonianos
570
Silúrico
440
Ordovícico
550
Cámbrico
570

Infra-cámbrico Plegamientos cadonianos del macizo


700 Armoricano
Precámbrico Algónkico
5.000 1.000
Arcaico

12
Durante todas estas eras geológicas, se han dado lugar a distintos procesos geológicos
que dan origen a la formación de los suelos sobre la corteza terrestre. Los más
importantes se describen a continuación:

9 Orogénesis: períodos de deformación tectónica que consiguen dar a la región una


determinada estructura y levantamiento.
9 Volcanismo y magmatismo: consisten en la penetración a la superficie de la Tierra
de roca en estado de fusión.
9 Erosión: proceso que disgrega la roca en fragmentos más pequeños.
9 Meteorización: alteraciones físico – químicas de las rocas, producto de entornos
distintos a los que dieron origen.

Entre los procesos que llevan a la forma actual de la corteza, están la erosión y los
movimientos de la corteza terrestre, por medio de levantamientos, hundimientos y
plegamientos (figura 1.3).

Plegamiento Hundimiento Levantamiento

Figura 1.3

Teorías de formación de los continentes

Existen 2 teorías sobre la formación de los continentes. La primera corresponde a la


Teoría de la Deriva Continental, la cual postula que los continentes se mueven sobre el
magma, ya sea convergiendo o divergiendo entre ellos. De este modo, las corrientes
convectivas en el manto superior hacen que las placas "floten" como masas
independientes y se deslicen unos centímetros cada año

La segunda, de mayor validez que la anterior y empleada actualmente, es la Teoría de la


Tectónica de Placas, la cual es posterior a la de la Deriva Continental y sostiene que la
corteza terrestre está formada por placas rígidas en movimiento, cuyos bordes se
encuentran bajo el mar (50 – 100 km de profundidad). Estas placas se hunden en las
zonas de subducción dando lugar a las fosas oceánicas, cadenas de volcanes, fallas,
elevaciones y montañas.

9 Teoría de la Deriva Continental:

El posible movimiento de los continentes, uno con respecto al otro, en el pasado


geológico fue bosquejado por primera vez por Alfred Wegener en 1912, constituyendo un
tema de controversia por años. Durante la década de los años ‘60 se obtuvieron pruebas
que demostraron, fuera de toda duda, que la deriva sí se había efectuado. Las pruebas
provienen principalmente del estudio del magnetismo en las rocas de la corteza terrestre y
de los levantamientos detallados del piso del océano, las cuales demostraron que los

13
continentes no habían mantenido siempre la misma posición relativa y que los pisos de
los océanos son más “jóvenes” que los continentes que ellos separan.

Wegener y otros señalaron la similitud de las costas de Africa y América del Sur aunque
separadas en la actualidad por el océano Atlántico, lo cual podría ser explicado si los dos
continentes estuvieran originalmente yuxtapuestos y considerados como parte de una
sola masa continental. Wegener postuló un supercontinente al que dio el nombre de
Pangea (figura 1.4).

En el hemisferio meridional se incluyen


América del Sur, Africa, Antártica,
Australia e India peninsular, que
formaban un continente gigante llamado
“Gondwana”, durante el Carbonífero,
hace unos 400 millones de años, y
desde entonces se han separado hasta
ocupar su posición actual.

Figura 1.4

La deriva de los continentes está asociada con la apertura y extensión del piso del océano
a partir de los lomos oceánicos (cadenas montañosas submarinas). Las temperaturas de
las rocas cerca del centro de un lomo son más altas que en cualquiera de sus laderas,
puesto que el material del manto surge hacia la superficie en la parte central más caliente
del mismo. La causa de este flujo ascendente, se cree es debido a la operación de
corrientes de convección de movimiento lento que tienen lugar en el manto de la Tierra.
Las corrientes ascienden hacia la base de la litosfera y se extienden horizontalmente,
pasan por márgenes continentales y vuelven a descender. El material rocoso más caliente
en la corriente ascendente es menos denso, por lo que tiende a flotar y es lo que
constituye la fuerza motriz del mecanismo.

14
9 Teoría de la Tectónica de Placas:

Cuando se aceptó la deriva continental a mediados de la década de los años ‘60 esta idea
progresó aún más al considerar actualmente que la corteza terrestre, la litosfera, podía
dividirse en un mosaico de doce o más placas grandes rígidas. Las placas se mueven
libremente con respecto a la astenosfera subyacente, y también pueden moverse una con
respecto de la otra de tres maneras: (i) una placa se desliza pasando frente a la otra a lo
largo de su margen; (ii) dos placas se mueven alejándose mutuamente; (iii) dos placas se
mueven en tal forma que una desliza debajo de la otra. El primero de estos movimientos
tiene su expresión en la superficie de la Tierra por el movimiento a lo largo de las fallas
transcurrentes, como sucede en la falla de San Andrés. El segundo tipo de movimiento da
origen a los lomos oceánicos. El tercer tipo de movimiento tiene su acción en las
profundas trincheras oceánicas, donde el borde de una capa se mueve hacia abajo con
respecto a la otra y desaparece en el manto. Este proceso se conoce como subducción.

Las placas pueden ser continentales u oceánicas la diferencia está en que la última es
coronada por la corteza continental, es decir, los continentes “cabalgan” sobre la placa
subyacente. Generalmente se han determinado seis grandes placas: la Norteamericana y
Sudamericana, la Eurasiática, la Africana, la Indoaustraliana y la Pacífica. Hay muchas
placas más pequeñas cuyos movimientos son muy difíciles de determinar. La placa
oceánica está cubierta por una delgada corteza oceánica de composición principalmente
basáltica, la cual está cubierta por un delgado revestimiento de sedimentos.

El término Tectónica de Placas se utiliza para señalar los procesos que son responsables
de los movimientos e interacciones de las placas. Cuando convergen con placas
continentales y se forma una faja de montañas plegadas intercontinentales, como la faja
orogénica Alpina-Himalaya, puede utilizarse el término zona de colisión.

La validez de esta teoría recibió un fuerte apoyo de los datos sísmicos reunidos a través
de años de la red sísmica mundial que fue establecida hacia el final de la década de los
años `50. Los datos demostraron que las zonas en donde ocurren la mayor parte de los
terremotos del mundo son muy estrechas y muy bien definidas, sugiriendo que la mayoría
de los terremotos registrados resultan de los movimientos de las placas donde ellas
chocan unas con otras. De esta manera los datos sísmicos pueden utilizarse para
cartografiar los límites de las placas.

Placas tectónicas y Terremotos

La abundancia del calor interno de la Tierra da lugar a una gran actividad geológica en
comparación con otros planetas. El calor del interior provoca terremotos y erupciones
volcánicas, levanta montañas y desplaza los continentes. Un terremoto es el movimiento
brusco de la Tierra, causado por la liberación de energía acumulada durante un largo
tiempo.

La corteza terrestre está conformada por una docena de placas de aproximadamente 70


km de espesor, cada una con diferentes características físicas y químicas (figura 1.6).
Estas placas se están acomodando en un proceso que lleva millones de años y han ido
dando la forma que hoy se conoce a la superficie del planeta, originando los continentes y
los relieves geográficos en un proceso que está lejos de completarse. Habitualmente
estos movimientos son lentos e imperceptibles, pero en algunos casos estas placas

15
chocan entre sí como gigantescos témpanos de tierra sobre un océano de magma
presente en las profundidades de la Tierra, impidiendo su desplazamiento. Entonces una
placa comienza a desplazarse sobre o bajo la otra originando lentos cambios en la
topografía. Pero si el desplazamiento es dificultado, comienza a acumularse una energía
de tensión que en algún momento se liberará y una de las placas se moverá bruscamente
contra la otra rompiéndola y liberándose entonces una cantidad variable de energía que
origina el terremoto.

Cuando colisiona una placa delgada de corteza oceánica


con una placa continental gruesa (izquierda), la placa
oceánica se ve forzada a introducirse bajo el continente y
se funde en un proceso llamado subducción. La roca
fundida procedente del interior asciende entonces hasta
emerger y formar volcanes.

Figura 1.5

Las zonas en que las placas ejercen esta fuerza entre ellas se denominan fallas y son los
puntos en que con más probabilidad se originan fenómenos sísmicos. Se estima que sólo
un 10% de los terremotos ocurren alejados de los límites de estas placas.

Límites de placas en la corteza de la Tierra.


Los límites de estas placas coinciden
principalmente con zonas de actividad
volcánica y sísmica.

Se observan las placas del Pacífico,


Norteamericana, Sudamericana, Africana,
Euroasiática, Indoaustraliana, Antártica,
Filipinas, Caribiana, Nazca, Cocos y
Arábiga.

Figura 1.6

A causa de un choque de una placa oceánica (peso específico mayor) y una placa
continental (peso específico menor) la placa oceánica se hunde por debajo de la placa
continental. Este movimiento lento hacia abajo incluye un aumento lento de las
temperaturas en las rocas del antiguo fondo del mar. En una profundidad de 100 km
aproximadamente, las rocas de la placa oceánica se funden parcialmente. Durante la
subducción (figura 1.5) se observa además un aumento relativo rápido de la presión.

16
Convergencia oceánica - oceánica Convergencia oceánica - continental
Figura 1.7

La subducción ocurre principalmente en la costa oeste de América del Sur (Chile, Perú),
Japón y algunas zonas del mar mediterráneo. Siempre provoca fenómenos sísmicos de
mayor magnitud. Además, la placa oceánica en subducción y parcialmente fundida puede
generar una cadena de volcanes activos.

Existen dos tipos de subducción, el tipo


Andino, el cual tiene un ángulo entre 20º
a 30º y produce una morfología como la
de la cordillera de Los Andes.

El otro es el tipo Back-Arc, tiene un


ángulo de subducción de 70º y produce
una cadena de islas volcánicas y una
corteza oceánica entre los volcanes y el
continente.
Figura 1.8

Ejemplos en la configuración de placas actualmente en las zonas de subducción, son: la


placa Nazca en América del Sur, en Chile, Perú, Ecuador y Colombia (subducción tipo
Andino) y Japón con subducción del tipo Back-Arc, entre otras.

Otras causas de terremotos están asociadas a la actividad subterránea originada por un


volcán en proceso de erupción, el cual puede originar un fenómeno similar. Actualmente
se estima que una fuerza extrínseca, provocada por el hombre, podría desencadenar un
terremoto, probablemente en un lugar donde ya había una falla geológica. Es así como se
ha supuesto que experimentos nucleares, o la fuerza de millones de toneladas de agua
acumulada en represas o lagos artificiales podría producir tal fenómeno.

El estudio de los terremotos se denomina sismología y es una ciencia relativamente


nueva. Se definen dos conceptos importantes, en primer lugar hipocentro o foco, que
corresponde al punto en la profundidad de la Tierra desde donde se libera la energía en
un terremoto. Cuando ocurre en la corteza de ella (del orden de 70 km de profundidad) se
denomina superficial. Si ocurre entre los 70 y los 300 km se denomina intermedio y si es
de mayor profundidad, profundo. En segundo lugar, epicentro, el cual se define como el
punto de la superficie de la Tierra directamente sobre el hipocentro. Corresponde a la
localización de la superficie terrestre donde la intensidad del terremoto es mayor.

17
Hasta el siglo XVIII los registros objetivos de terremotos son escasos y no había una real
comprensión del fenómeno. De las explicaciones relacionadas con castigos divinos o
respuestas de la Tierra al mal comportamiento humano, se pasó a explicaciones pseudo-
científicas como que eran originados por liberación de aire desde cavernas presentes en
las profundidades del planeta.

El primer terremoto del que se tenga referencia ocurrió en China en el año 1.177 AC.
Existe un catálogo chino de terremotos que menciona unas docenas más de tales
fenómenos en los siglos siguientes.

En Chile, los más importantes son:

Siglo Fecha y lugar


- 8 de febrero de 1570, Concepción
Siglo XVI - 16 de diciembre de 1575, Valdivia

- 17 de junio de 1604, La Serena


- 24 de noviembre de 1604, Arica
- 16 de diciembre de 1615, Arica
Siglo XVII - 1639, Coquimbo
- 31 de marzo de 1650, Arica
- 15 de marzo de 1657, Concepción
- 10 de Marzo de 1681, Arica

- 24 de diciembre de 1737, Valdivia


Siglo XVIII
- 30 de Marzo de 1796, Copiapó

- 3, 4 y 11 de abril de 1819, Copiapó


- 5 de noviembre de 1822, Copiapó
- 7 de noviembre de 1837, Valdivia
- 6 de diciembre de 1850, Santiago
Siglo XIX - 5 de octubre de 1859, Copiapó
- 13 de agosto de 1868, Arica
- 11 de noviembre de 1876, Illapel
- 9 de mayo de 1877, Iquique
- 15 de agosto de 1880, Illapel

- 16 de agosto de 1906, Valparaíso (8,2 grados escala de Richter)


- 10 de noviembre de 1922, Vallenar (8,5 grados escala de Richter)
- 1 de diciembre de 1928, Talca (7,6 grados escala de Richter)
- 24 de enero de 1939, Chillán (8,3 grados escala de Richter)
- 6 de septiembre de 1942, Caldera (Intensidad VIII Mercalli)
- 6 de abril de 1943, Ovalle (8,2 grados escala de Richter)
- 2 de agosto de 1946, Copiapó (Intensidad IX a X Mercalli)
Siglo XX
- 19 de abril de 1949, Angol (Intensidad IX a X Mercalli)
- 12 de diciembre de 1949, Punta Arenas (Intensidad VII a VIII Mercalli)
- 6 de mayo de 1953, Ñuble (Intensidad IX a X Mercalli)
- 6 de diciembre de 1953, Calama (Intensidad IX a X Mercalli)
- 4 de septiembre de 1958, Cajón del Maipo (7 grados escala de
Richter)
- 21 y 22 de mayo de 1960, Valdivia (9,5 grados escala de Richter)

18
- 28 de marzo de 1965, La Ligua (7,6 grados escala de Richter)
- 28 de diciembre de 1966, Taltal (Intensidad VIII Mercalli)
- 20 de diciembre de 1967, Tocopilla y Calama (Intensidad VII a VIII
Mercalli)
- 8 de julio de 1971, Illapel (7,7 grados escala de Richter)
- 13 de marzo de 1975, Coquimbo (Intensidad IX Mercalli)
- 3 de marzo de 1985, Algarrobo (8 grados escala de Richter)
- 8 de agosto de 1987, Arica (Intensidad VII a VIII Mercalli)
- 30 de julio de 1995, Antofagasta (8 grados escala de Richter)
- 14 de octubre de 1997, Punitaqui (6,8 grados escala de Richter)

La medición de los terremotos se realiza a través de un instrumento llamado sismógrafo,


el que registra en un papel la vibración de la Tierra producida por el sismo (sismo
grama), informando la magnitud y su duración.

Este instrumento registra dos tipos de ondas: las superficiales, que viajan a través de la
superficie terrestre y que producen la mayor vibración de ésta (y probablemente el mayor
daño) y las centrales o corporales, que viajan a través de la Tierra desde su
profundidad.

Las ondas centrales a su vez son de dos tipos: las ondas primarias (ondas “P”) o de
compresión, las cuales viajan longitudinalmente y las ondas secundarias (ondas “S”) o
de corte, que viajan transversalmente.

Las ondas “P” viajan a través de cualquier material, sea sólido o líquido, como el magma o
zonas de rocas fundidas, modificando su trayectoria con cada cambio de densidad. Son
las que primero llegan a la superficie ya que logran una mayor velocidad y van empujando
pequeñas partículas de material delante de ellas y arrastrando otro tanto detrás.

Las ondas “S” solo se pueden propagar a través de los cuerpos sólidos, por lo que no
pueden atravesar el núcleo exterior líquido. Además, por ir más lentas van desplazando
material en ángulo recto a ellas, por esta razón se les denomina ondas transversales.

La secuencia típica de un terremoto es: primero el arribo de un ruido sordo causado por
las ondas “P”, luego las ondas “S” y finalmente el “retumbar” de la Tierra causado por las
ondas superficiales.

Escalas de medición de los terremotos

Uno de los mayores problemas para la medición de un terremoto es la dificultad inicial


para coordinar los registros obtenidos por sismógrafos ubicados en diferentes puntos
(Red sísmica), de modo que no es inusual que las informaciones preliminares sean
discordantes ya que fueron basadas en informes que registraron diferentes amplitudes de
onda. Determinar el área total abarcada por el sismo puede tardar varias horas o días de
análisis del movimiento mayor y de sus réplicas.

19
A cada terremoto se le asigna un valor de magnitud único, pero la evaluación se realiza,
cuando no hay un número suficiente de estaciones, basada principalmente en registros
que no fueron realizados forzosamente en el epicentro sino en puntos cercanos. De allí
que se asigne distinto valor a cada localidad o ciudad, interpolando las cifras se consigue
ubicar el epicentro.

Una vez coordinados los datos de las distintas estaciones, lo habitual es que no haya una
diferencia asignada que sea apreciable para un mismo punto. Esto puede ser más difícil
de efectuar si ocurren varios terremotos cercanos en tiempo o lugar.

Resulta más útil, entonces, catalogar cada terremoto según su energía intrínseca. Esta
clasificación debe ser un número único para cada evento, y este número no debe verse
afectado por las consecuencias causadas, que varían mucho de un lugar a otro.

De este modo, se presentan dos escalas de medición: la Escala de Magnitud Richter y


la Escala de Intensidad de Mercalli.

9 Escala de Magnitud Richter:

Representa la energía sísmica liberada en cada terremoto y se basa en el registro


sismográfico.

Es una escala que crece en forma potencial o semilogarítmica, de manera que cada punto
de aumento puede significar un aumento de energía diez o más veces mayor. De este
modo, una magnitud 4 no es el doble de una de 2, sino que 100 veces mayor.

Este método asocia la magnitud del terremoto con la amplitud de la onda sísmica, lo que
redunda en propagación del movimiento en un área determinada. El análisis de esta onda
(la onda “S”) en un tiempo de 20 segundos en un registro sismográfico, ha servido de
referencia para la calibración de esta escala. Teóricamente en esta escala pueden darse
sismos de intensidad negativa, lo que corresponderá a leves movimientos de baja
liberación de energía.

La forma general de la ecuación empírica para la magnitud M es:

⎛ A⎞
M = log10 ⎜ ⎟ + F ( D, P)
⎝T ⎠

Donde:

A : Amplitud máxima producida en la superficie en micrómetros. Se deduce de los


registros del sismógrafo.
T : Período de la onda en segundos.
F : Función empírica de la distancia D expresada en grados y de la profundidad P del
foco expresada en kilómetros.

20
Ejemplo 1.1:

-3 10-3 Los sismógrafos modernos son sensibles para niveles de -3,0.


-0,5 10-0,5 M = 10-0,5 unidades de energía, por ejemplo, es la magnitud de energía
generada por la caída de una roca de 100 kg de masa desde una altura de
10 m sobre la superficie terrestre.
2 102 Los terremotos menos sentidos por los seres humanos corresponden al
nivel 2 de la Escala de Richter.
9,5 109,5 Terremoto de 1960 en Chile.

La siguiente tabla muestra los efectos de un terremoto en función de la magnitud


alcanzada:

Magnitud Efectos del terremoto


Menos de 3,5 Generalmente no se siente, pero es registrado
3,5 a 5,4 A menudo se siente, pero sólo causa daños menores
5,5 a 6,0 Ocasiona daños ligeros a edificios
6,1 a 6,9 Puede ocasionar daños severos en áreas muy pobladas
7,0 a 7,9 Terremoto mayor. Causa graves daños
Mayor a 8,0 Gran terremoto. Destrucción total a comunidades cercanas

9 Escala de Intensidad de Mercalli:

Se basa en el efecto o daño producido en las estructuras y en las sensaciones percibidas


por las personas. Los grados no son equivalentes con la escala de Richter. Se expresa en
números romanos y es proporcional, de modo que una intensidad IV es el doble de una
de II.

La siguiente tala muestra los distintos valores de intensidad asociados a los efectos de un
terremoto:

Grado I Movimiento sentido por muy pocas personas en condiciones especialmente


favorables.
Grado II Movimiento sentido sólo por pocas personas en reposo, especialmente en
los pisos altos de los edificios. Los objetos suspendidos pueden oscilar.
Grado III Movimiento sentido claramente en los interiores, especialmente en los
pisos altos de los edificios, muchas personas no lo asocian con un temblor.
Los vehículos de motor estacionados pueden moverse ligeramente.
Vibración como la originada por el paso de un vehículo pesado.
Grado IV Movimiento sentido durante el día por muchas personas en los interiores,
por pocas en el exterior. Por la noche algunas personas despiertan.
Vibración de vajillas, vidrios de ventanas y puertas. Sensación como de un
vehículo pesado chocando contra un edificio, los vehículos de motor
estacionados se balancean claramente.
Grado V Movimiento sentido casi por todas las personas; muchos despiertan.
Algunas piezas de vajilla, vidrios de ventanas se rompen; pocos casos de
agrietamiento de estructuras; caen objetos inestables. Se observan
perturbaciones en los árboles, postes y otros objetos altos. Se detienen
relojes de péndulo.

21
Grado VI Movimiento sentido por todas las personas, muchas de ellas atemorizadas
huyen hacia afuera. Algunos muebles pesados cambian de sitio; pocos
ejemplos de caída de estructuras o daño en chimeneas. Daños ligeros.
Grado VII Advertido por todos. La gente huye al exterior. Daños sin importancia en
edificios de buen diseño y construcción. Daños ligeros en estructuras
comunes bien construidas; daños considerables en las débiles o mal
diseñadas estructuras; rotura de algunas chimeneas. Estimado por las
personas conduciendo vehículos en movimiento.
Grado VIII Daños ligeros en estructuras de diseño especialmente bueno; considerable
en edificios comunes con derrumbe parcial; grande en estructuras
débilmente construidas. Los muros salen de sus armaduras. Caída de
chimeneas. Los muebles pesados se vuelcan. Arena y lodo proyectados en
pequeñas cantidades. Cambio en el nivel del agua de los pozos. Pérdida
de control en las personas que guían vehículos motorizados.
Grado IX Daño considerable en las estructuras de diseño bueno; las armaduras de
las estructuras bien construidas se desploman; grandes daños en los
edificios sólidos, con derrumbe parcial. Los edificios salen de sus
cimientos. El terreno se agrieta notablemente. Las tuberías subterráneas
se rompen.
Grado X Destrucción de algunas estructuras de madera bien construidas; la mayor
parte de las estructuras de mampostería y armaduras se destruyen con
todo y cimientos; agrietamiento considerable del terreno. Las vías del
ferrocarril se tuercen. Considerables deslizamientos en los márgenes de
los ríos y pendientes fuertes. Invasión del agua de los ríos sobre sus
márgenes.
Grado XI Casi ninguna estructura de mampostería queda en pie. Puentes destruidos.
Anchas grietas en el terreno. Las tuberías subterráneas quedan fuera de
servicio. Hundimientos y derrumbes en terreno suave. Gran torsión de vías
férreas.
Grado XII Destrucción total. Ondas visibles sobre el terreno. Perturbaciones de las
cotas de nivel (ríos, lagos y mares). Objetos lanzados en el aire hacia
arriba.

1.6 ROCAS Y MINERALES

Las rocas son agregados naturales duros y compactos de partículas minerales con
fuertes uniones cohesivas permanentes que habitualmente se consideran un sistema
continuo. La proporción de diferentes minerales, la estructura granular, la textura y el
origen de la roca sirven para su clasificación geológica.

La composición, características y propiedades de las rocas son altamente variables,


confiriendo a los materiales naturales un carácter heterogéneo y anisótropo. Las rocas
están afectadas por procesos geológicos y ambientales que dan lugar a su fracturación,
alteración y meteorización.

En cuanto a sus condiciones y características en terreno, la roca está afectada por juntas
tectónicas y otros planos de debilidad, además de estar sometida a tensiones naturales
relacionadas con esfuerzos tectónicos.

22
Existen dos teorías sobre el origen de las rocas: la Teoría de Werner (1749 – 1817), que
sostiene que todo proceso de formación de las rocas estaría condicionado por el agua,
debido a esto, se pueden encontrar materiales remanentes de la corteza terrestre y
volcánicos, además de rocas formadas por erosión, arrastre y depositación; y la actual
Teoría de Hutton (plutonista), donde se sostiene que el calor interno y la presión de la
Tierra son responsables de las transformaciones de rocas preexistentes (ígneas y
sedimentarias).

De una forma simplificada las rocas se pueden clasificar, en base a su composición,


relaciones geométricas de sus partículas (textura) y características genéticas, en tres
grupos. Rocas ígneas (plutónicas y volcánicas) son el producto de una masa fundida,
magma, la que al emerger a la superficie y enfriarse, solidifica. Rocas sedimentarias
(detríticas y no detríticas) son el producto de la desintegración de rocas preexistentes por
acciones externas, estas partículas son arrastradas y depositadas. El material
sedimentado se solidifica por efecto del tiempo, temperatura y presión; existen también
rocas sedimentarias formadas por la concentración de sales, como el yeso y la caliza.
Rocas metamórficas son el producto de las presiones, cambios de temperatura y las
acciones de fluidos subterráneos activos, que provocan cambios en las propiedades
químicas y físicas de una roca. Con el tiempo y alterando las condiciones, una de las
rocas antes descritas se puede convertir en alguna de las otras dos, a esto se le
denomina el ciclo de las rocas.

Rocas ígneas

Los procesos geológicos debidos a los agentes naturales que operan en la superficie de
la Tierra se analizarán más adelante (subcapítulo 1.6). Sin embargo, otros procesos se
originan debajo de la superficie e incluyen la acción de los volcanes. El material rocoso
fundido que es generado dentro o debajo de la corteza terrestre alcanza la superficie de
vez en cuando y fluye de los orificios volcánicos como lava. Material similar puede ser
inyectado en las rocas de la corteza dando lugar a una variedad de intrusiones ígneas, las
cuales se enfrían lentamente y solidifican. Muchas de ellas fueron formadas durante
épocas geológicas pasadas y ahora son expuestas en la superficie después de haber sido
eliminada su cubierta rocosa debido a la denudación. Las lavas y las intrusiones
solidificadas constituyen las rocas ígneas.

El material fundido del cual han solidificado las rocas ígneas se llama magma. Los
magmas naturales son fundidos calientes, viscosos y silicosos, en los que los elementos
principales presentes son el silicio y el oxígeno, junto con los metales potasio, sodio,
calcio, magnesio, aluminio y hierro. Junto con estos constituyentes se encuentran
pequeñas cantidades de otros elementos, además de gases como CO2, SO2 y H2O. De
esta manera los magmas son cuerpos complejos y las rocas que se derivan de ellos
tienen una gran variedad en su composición. Un magma rápidamente enfriado solidifica
como una roca de vidrio, es decir, que no contiene cristales; el que se enfría lentamente,
los minerales formadores de rocas cristalizan a partir de él.

El punto de fusión del magma se ubica en profundidades entre 100 y 200 km, es decir, en
el manto superior. Se supone que sólo una porción pequeña del material del manto está
fundida, lo demás está en estado sólido. Este estado se llama fusión parcial. La porción
fundida es un líquido menos denso en comparación con la porción sólida. Por
consiguiente tiende a ascender a la corteza terrestre concentrándose allí en bolsas y
cámaras magmáticas.

23
En la formación del magma la presión juega un papel importante. A alta presión las
temperaturas de cristalización de los minerales son altas también. Una disminución de la
presión tiene en consecuencia una disminución en la temperatura de fusión o
cristalización de los minerales. De este modo, en altas profundidades en la corteza
terrestre y en el manto superior puede producirse el magma a partir del material sólido.

Un volcán es esencialmente un conducto entre la superficie de la Tierra y un cuerpo de


magma situado dentro de la corteza. Durante una erupción la lava es extraída por medio
del conducto volcánico y los gases contenidos en ella son separados; pueden ser
descargados con toda quietud si la lava es muy fluida y el contenido de gas pequeño,
pero por lo común son descargados con violencia explosiva. En una erupción submarina
la lava fluye sobre el piso marino; puede construirse una pila volcánica, la cual
eventualmente puede elevarse arriba del nivel del mar para formar una isla.

Todos los registros sobre erupciones volcánicas en


Chile presentan un cuadro más o menos similar, en
el cual se consigna la ocurrencia de algunos
fenómenos premonitorios como la emanación de
humo en un cráter que parecía inactivo o la aparición
de un nuevo cráter. Esto puede durar algunos días,
semanas e incluso años, hasta que una serie de
temblores y ruidos subterráneos preceden a la salida de cenizas y lava, la que escurre
entre 5 y 100 km/h, dependiendo del desnivel geográfico, siguiendo habitualmente las
quebradas del área y desembocando en cauces de ríos o lagos. La fase eruptiva ha
durado desde algunas semanas, hasta cinco o más años.

Se definen las rocas ígneas extrusivas o volcánicas como aquellas que cristalizan en la
superficie de la Tierra.

Cuando el cuerpo del magma se eleva a niveles altos penetrando en las rocas que se
encuentran sobre la corteza de la Tierra pero no alcanza la superficie, se habla de una
roca ígnea intrusiva. Durante el proceso de intrusión puede incorporar a su propia masa
fragmentos de la roca con la cual está en contacto. Algunos magmas pueden despedir
fluidos calientes que penetran y cambian la roca en su inmediata vecindad. Una masa de
magma grande, de muchos kilómetros cúbicos de volumen es una intrusión mayor, que
se enfría lentamente a causa de su tamaño. Son capaces de formarse cristales grandes y
las rocas así formadas son cristalinas de grano grueso. Dentro de este grupo se
encuentran los batolitos, que corresponden a una gran masa ígnea que no tiene base (el
término indica una “roca de profundidad”) que se eleva como una proyección irregular
dentro de rocas sedimentarias y de otras rocas de la corteza.

Cuando el magma se eleva y llena fracturas y otras aberturas en las rocas se forman las
intrusiones menores o rocas hipabisales, es decir, cuerpos ígneos pequeños entre los
que se incluyen los diques, los cuales son masas semejantes a un muro, muy empinado
o vertical cuyos lados son aproximadamente paralelos; y los mantos, que son hojas de
roca cuya extensión es más o menos horizontal y que yacen paralelos a la estratificación

24
de las rocas sedimentarias entre las cuales se encuentran intrusionados. Las rocas del
dique y el manto comúnmente tienen texturas de grano fino a medio. Las vetas son
inyecciones más pequeñas de material ígneo y comúnmente son delgadas e irregulares
que rellenan grietas que han sido abiertas en las rocas que rodean la intrusión. Un
lacolito es una intrusión pequeña que tiene un piso plano y un techo que ha sido
arqueado por la presión del magma que ingresa.

Lacolito

Dique

Batolito

Figura 1.9

Se puede sostener que las rocas ígneas han sido derivadas de dos tipos de magma, uno
granítico (ácido) y el otro basáltico (básico) los cuales se originan a diferentes niveles
bajo la superficie terrestre. El magma básico primario proviene del manto situado a
profundidades considerables mientras que los cuerpos de magma granítico son
generados en la corteza, en las fajas orogénicas de la Tierra donde la corteza llega a
hacerse lo suficientemente líquida. De esta manera se generan dos tipos de rocas
diferentes: granito y sus afines (diorita, porfirita, andesita, pórfido de cuarzo y algunas
riolitas) de los magmas graníticos; y lavas basálticas, dolerita, gabro y ultrabásicas (tales
como peridotito y picrita), del magma basáltico. Este agrupamiento corresponde a la forma
en la cual son distribuidas las rocas ígneas.

Basalto Andesita Brecha

Figura 1.10

25
Rocas sedimentarias

Los sedimentos forman una capa superficial relativamente delgada de la corteza terrestre
que cubre las rocas ígneas o las metamórficas que las subyacen. Esta cubierta
sedimentaria es discontinua y tiene un espesor promedio de 800 m; pero localmente
alcanza hasta 12.000 m o más. Se ha estimado que las rocas sedimentarias constituyen
un poco más del 5% de todas las rocas corticales (hasta una profundidad de 16.000 m);
dentro de este porcentaje las proporciones de los tres principales tipos sedimentarios son
las siguientes: lutitas y arcillas 4%; areniscas 0,75% y calizas 0,25%. Entre otras
variedades con cantidades más pequeñas se encuentran las rocas compuestas de restos
orgánicos tales como carbones y lignitas, y aquellas formadas por la depositación
química.

Las rocas sedimentarias se definen como los materiales que han sido depositados por el
agua, hielo, viento o químicamente precipitado en el agua.

Los procesos sedimentarios son fenómenos de la superficie terrestre y del agua. Empieza
con la destrucción de rocas sólidas por la meteorización, la erosión y el transporte por un
medio (agua, viento o hielo), la depositación o precipitación y como último la diagénesis
(formación de rocas sólidas). Los procesos sedimentarios generalmente son muy
complejos y dependen de muchos factores.

9 Formación de las rocas sedimentarias:

Material de partida

Grava
Arena
Meteorización Suelo
Limo
Arcilla

Erosión y transporte

Depositación / Rocas sedimentarias


precipitación blandas

Diagénesis Rocas sedimentarias

Los materiales de los cuales han sido formadas incluyen acumulaciones de arenas y
detritos lodosos derivados de la destrucción de rocas más antiguas y llevados juntos y
clasificados por el agua o el viento. Algunos sedimentos se forman principalmente de los
restos de animales y plantas que vivieron en ríos, estuarios, deltas a lo largo de las líneas
de costa y en el mar.

26
Los sedimentos también pueden ser formados por la evaporación del agua y la
precipitación de los minerales solubles, como ocurre en los lagos y playas.

Los componentes de los sedimentos se endurecen en rocas sedimentarias como


arenisca, cuarcita, caliza y lutita por cambios que comienzan inmediatamente después
que el sedimento es acumulado.

El agua que percola a través de los vacíos o poros entre las partículas de sedimento
acarrean materia mineral que cubre los granos y actúa como un cemento que los une.
Tales procesos se conocen con el nombre de cementación; eventualmente pueden llenar
por completo los poros, y son los responsables de convertir en roca muchos sedimentos
de grano grueso. La conversión de un sedimento lodoso en roca se logra principalmente
por las partículas muy pequeñas de limo y arcilla de las cuales están en su mayor parte
compuestas al ser presionadas por el peso de los sedimentos sobreyacentes, el agua
intersticial es expulsada y la materia mineral precipitada en la retícula microscópica de los
poros. En el curso del tiempo el lodo se transformará en una masa coherente de arcilla,
que recibe el nombre de lutita.

El término general diagénesis se utiliza para describir los procesos mencionados


anteriormente, los cuales convierten los sedimentos en rocas sedimentarias. La
diagénesis incluye, además de la cementación y la compactación, los procesos de
solución y redepositación del material para producir rocas extremadamente fuertes o
débiles. Todos estos cambios tienen lugar cerca de la superficie terrestre a temperaturas
normales.

Cuando las rocas están completamente formadas en la zona de intemperismo, luego de


permanecer sepultadas un largo tiempo, las sustancias solubles son removidas y las
partículas insolubles son liberadas, con lo que empieza un nuevo ciclo de sedimentación
en los ríos y en el mar.

Arcilla Caliza Conglomerado Arenisca

Figura 1.11

Rocas metamórficas

Metamorfismo es un término utilizado para indicar la transformación de las rocas en


nuevos tipos, por la recristalización de sus constituyentes.

La roca original puede ser ígnea, sedimentaria u otras que ya han sido metamorfoseadas
y los cambios que sufren resultan de la adición de calor o de la operación de la presión. El
calor y la presión son los agentes del metamorfismo que imparten energía a las rocas, la
suficiente para movilizar los constituyentes de los minerales y reunirlos como nuevos
minerales cuya composición y red cristalina están en equilibrio con las condiciones

27
existentes. Tales procesos transforman las rocas y les superponen una textura
metamórfica que puede ser muy diferente de la que originalmente poseían.

Figura 1.12 Pizarras

9 Clasificación geológica general de las rocas:

Clasificación de las rocas por su origen


Rocas sedimentarias Detríticas: Cuarcita, arenisca, lutita, limolita, conglomerado.
Químicas: Evaporitas, caliza dolomítica.
Orgánicas: Caliza, carbón, rocas coralíferas.
Rocas ígneas Plutónicas: Granito, gabro, diorita.
Volcánicas: Basalto, andesita, riolita.
Rocas metamórficas Masivas: Cuarcita, mármol.
Foliadas: Pizarra, filita, esquisto, gneiss.

Minerales

Los minerales son los constituyentes sólidos de todas las rocas ígneas, sedimentarias y
metamórficas. Un mineral puede ser definido como una sustancia homogénea de uno o
más elementos, formados mediante procesos inorgánicos naturales; se caracterizan por
una composición química definida, estructura atómica determinada y por sus propiedades
físicas.

Se conocen más de 3.000 especies minerales, algunos compuestos por elementos


simples, como el oro (Au), la plata (Ag) y el carbono (C), entre otros. También están los
conformados por elementos más complejos, como la pirita que contiene hierro (Fe) y
azufre (S), la sal, que contiene sodio (Na) y cloro (Cl).

Los minerales se clasifican de acuerdo a su composición química, tipo de cristal, dureza y


apariencia (color, brillo y opacidad). En general, los minerales son sustancias sólidas a
temperatura ambiente, siendo los únicos líquidos el mercurio y el agua.

Los minerales que conforman las rocas son de carácter no metálicos y se debe distinguir
entre aquellos que son constituyentes esenciales, por lo tanto dan su nombre a la roca y
otros que se encuentran en pequeñas cantidades y su presencia o ausencia no influye en
el nombre de ésta. Los minerales secundarios son aquellos que resultan de la
descomposición de los minerales esenciales, lo cual se ha producido por acción del agua
en alguna forma, con la adición o sustracción de otro material y con la formación de
subproductos del mineral.

28
Las principales familias de minerales que conforman las rocas son:

9 Feldespatos: Constituyentes más abundantes de las rocas ígneas. Los


componentes principales de este grupo son: Ortoclasa, Plagioclasa,
Microlina. La ortoclasa se encuentra en granitos y sienitas, como
también en algunos gneises y areniscas feldespáticas. Las
plagioclasa se encuentran en la mayoría de las rocas ígneas y en
algunas sedimentarias y metamórficas.

9 Cuarzos: Constituyente esencial de los granitos y puede reconocerse en la


roca por su dureza y granos vítreos de forma irregular. Componente
principal, de igual nombre, el Cuarzo. Muchas arenas y areniscas
tienen al cuarzo como principal constituyente, los granos tienen una
alta resistencia a la abrasión y transporte. El mineral se encuentra
en forma abundante en los esquistos y rocas metamórficas.

9 Micas: Tienen la propiedad característica de separarse en hojuelas muy


delgadas, lo que las hace fácilmente reconocibles. Sus
componentes principales son: Biotita (negra) y Muscovita (incolora o
con ligero tinte). La muscovita se presenta en los granitos y otras
rocas ácidas, también está presente en algunos gneises y esquistos
de micas. Respecto a la biotita, se encuentra en rocas ígneas, como
los granitos, sienitas, dioritas, en algunos gneises y esquistos.

9 Piroxenos: Los minerales de este grupo pertenecen a dos sistemas de


cristalización diferentes. En uno de ellos se encuentra la Augita, la
cual se presenta en rocas ultrabásicas, como el gabro, donde
aparece como áreas oscuras entremezcladas con el feldespato más
pálido. También es constituyente de algunas andesitas y dioritas, y
ocasionalmente, del granito.

9 Anfíboles: Dentro de este grupo se encuentran: Hornblenda y Asbestos


(tremolita, crisolita y crocidolita). La Hornblenda común se encuentra
en las dioritas y en algunas andesitas. También se encuentra en
algunas sienitas, granodioritas y en las rocas metamórficas, como
en el esquisto de hornblenda.

9 Olivinos: Se presenta principalmente en rocas básicas y ultrabásicas. Puesto


que cristaliza a alta temperatura, más de 1000ºC, es uno de los
primeros minerales en formarse en muchos magmas básicos.
Componente principal, de igual nombre, el Olivino.

Feldespato Cuarzo Piroxeno Mica Olivino

Figura 1.13

29
1.7 ORIGEN Y FORMACIÓN DE SUELOS

En un sentido general, suelo se define como el agregado no cementado de granos


minerales y materia orgánica descompuesta (partículas sólidas) junto con el líquido y gas
que ocupan los espacios vacíos entre las partículas sólidas.

Los suelos tienen su origen en los macizos rocosos preexistentes que constituyen la roca
madre, sometida a la acción ambiental disgregadora de la erosión en sus distintas
facetas.

La erosión ataca las rocas formando, en primer lugar, un suelo que puede quedar junto a
la roca madre, suelo residual, o bien ser arrastrado por la combinación de la acción del
agua, viento, gravedad u otros mecanismos, denominándose suelo transportado.

Los productos arrancados por la erosión continúan sufriendo transformaciones, tanto en el


transporte como después de depositados. Estas últimas transformaciones, que en
muchos casos ha comenzado a partir de sedimentos blandos, constituyen la diagénesis,
que terminará por convertirlos en materiales más o menos resistentes. En ciertos casos,
llegarán a estar sometidos a presiones y/o temperaturas muy elevadas, pudiendo
convertirse en verdaderas rocas, en ese caso se habla de metamorfismo.

9 Esquema del ciclo roca suelo:

Igneas

(2)

(1) (3) (4)

Sedimento
Roca
Arena
Limo
(5) Arcilla
(8)
(6)

(7)
Sedimentarias Metamórficas

Donde:

(1): Probable fundición profunda


(2): Meteorización
(3): Calor, presión y solución
(4): Fundición de rocas profundas
(5): Cementación
(6): Erosión
(7): Calor, presión, solución
(8): Erosión, meteorización

30
Ciclo erosivo

La destrucción gradual de las masas de roca sólida durante largos períodos es atribuible
al proceso de erosión, el cual puede ser considerado a lo menos de dos tipos: erosión
física y erosión química.

9 Erosión física:

Se denomina así al proceso de fragmentación física o desintegración de la masa de roca,


la cual puede deberse a cambios térmicos (lo que origina dilataciones diferenciales entre
los diferentes minerales y da lugar a acciones y fisuras internas) y a la acción del agua
(arrastre de fragmentos ya erosionados; posible acción directa por congelación, que
produce tensiones internas por el aumento de volumen del hielo respecto al agua; acción
alternada de humedad – sequedad a lo largo del tiempo, entre otros). Estas acciones
físicas tienden a romper la roca inicial y a dividirla en fragmentos de tamaño cada vez más
pequeño, que pueden ser separados de la roca por agentes activos (agua, viento,
gravedad) y llevados a otros puntos en los que continúa la acción erosiva.

De este modo, la erosión física es producida por numerosos agentes, los cuales se
pueden integrar en dos grupos:

- Cambios de temperatura
- Crecimiento de cristales
a) Erosión in situ - Actividad orgánica
- Tensiones de la corteza terrestre
- Gravedad

- Gravedad
b) Transporte y erosión - Agua
- Hielo
- Viento

Agente erosivo Ejemplo


Cambios de temperatura: Exfoliación y desintegración de rocas atribuidas a
expansiones y contracciones.
Crecimiento de cristales: Acción de las heladas que produce la cristalización del
agua adsorbida en los poros de las rocas, con el
consiguiente aumento de su volumen y posterior
pulverización de ella.
Actividad orgánica: Raíces de plantas que rompen y desplazan bloques
de roca. Actividad de gusanos de tierra y roedores.
Tensiones de la corteza terrestre: Plegamientos y terremotos.
Gravedad: En macizos rocosos sin soporte lateral aparecen
tracciones que pueden provocar la aparición de
diaclasas verticales.

31
9 Erosión química:

Las reacciones químicas asociadas con la erosión suelen ir acompañadas de aumento de


volumen y desprendimiento de calor. Se originan principalmente por fenómenos de
hidratación (adición de agua a un compuesto químico para formar otro compuesto
químico), disolución (disolución de una roca debido al efecto del agua y del anhídrido
carbónico), oxidación (transformación de óxidos ferrosos en férricos ante la presencia de
agua y temperatura) e hidrólisis (descomposición química de una sustancia por medio
del agua). Esta acción, por lo tanto, tiende tanto a disgregar como a cementar, lo que
quiere decir que puede ayudar a la acción física y, posteriormente, cementar los
productos formados, dando unión química a las partículas pequeñas, aunque en algunos
casos contribuye más a destruir y transformar que a unir.

Reacción química Ejemplo


Hidratación: Transformación de anhidrita en yeso
Hidrólisis: Descomposición de ortosa para formar caolinita
Disolución: Fenómenos kársticos: formación de grietas, cavernas y conductos
de todo tipo que debilitan y hacen permeables las formaciones
calcáreas.
Oxidación: Transformación de óxidos ferrosos en férricos.

Origen y tipos de depósitos de suelo

Los depósitos de suelos naturales se clasifican de una manera amplia como suelos
residuales o suelos transportados. También están los depósitos artificiales o rellenos,
generados principalmente por la acción del hombre y que pueden ocupar, en algunos
casos, grandes extensiones.

Mientras que los suelos residuales se han formado completamente por erosión in situ y
permanecen en su posición original, los suelos transportados han sido desplazados de su
posición original y depositados en otro sitio, donde los principales agentes son el agua, el
hielo, la gravedad y el viento. De este modo, el tamaño y la forma de las partículas en un
depósito de suelo transportado o sedimentario, están determinados por el agente de
transporte y el modo como se formaron los depósitos.

En términos generales, las etapas por las cuales pasa un suelo sedimentario o
transportado son: formación (por erosión física, química o una combinación de ambas),
transporte (por agentes como el agua, viento o hielo) y depositación.

9 Suelos depositados en agua:

Los ríos son agentes de erosión, transporte y formación de depósitos. Los suelos
depositados en agua pueden recibir distintos nombres, por ejemplo, a lo largo del curso
de los ríos se denominan aluviales; en agua de lagos, lacustres; en estuarios creados
por mareas, estuarinos; en el delta de un río, deltaicos.

El mar también es un agente importante en este ciclo y pueden dar lugar a la formación
de depósitos marinos.

32
Tipo de depósito Características
(a) Depósitos aluviales: Son materiales transportados y depositados por el agua. Su
tamaño varía desde la arcilla hasta las gravas gruesas, cantos
y bloques. Los materiales más gruesos presentan cantos
redondeados. Se distribuyen en forma estratigráfica, con cierta
clasificación, variando mucho su densidad. Están muy
desarrollados en climas templados, ocupando cauces y valles
fluviales, llanuras y abanicos aluviales.

Son suelos muy anisotrópicos en su distribución, con


propiedades geotécnicas altamente variables, relacionadas
con la granulometría. Pueden tener alto contenido de materia
orgánica y su permeabilidad depende de la granulometría.
Generalmente presentan un nivel freático alto.

Los aluviales constituyen una fuente importante de recursos


materiales para la construcción, sobre todo como áridos.
(b) Depósitos lacustres: Son sedimentos de grano fino, predominando los limos y
arcillas. El contenido de materia orgánica puede ser muy alto,
sobre todo en zonas pantanosas, en las que se encuentran
turbas. Frecuentemente presentan estructuras laminadas en
niveles muy finos. En condiciones de agua salada se forman
precipitados de sales.

Los principales problemas geotécnicos están en relación con


su alto contenido en materia orgánica, siendo en general
suelos muy blandos.

9 Suelos depositados por el hielo:

La acción del hielo da lugar a la formación de depósitos glaciales y, en algunos casos,


pueden presentarse en forma de depósitos fluvioglaciales de arena y grava, derivados
de la formación de depósitos en torrentes de agua de deshielo.

La heterogeneidad y anisotropía de estos depósitos es característica de ellos, pues


coexisten desde arcillas hasta gravas gruesas y grandes bloques. Por lo tanto, sus
características geotécnicas son altamente variables. Al estar la permeabilidad
directamente relacionada con la granulometría, estos suelos son muy sensibles a los
incrementos de presión intersticial producidos por lluvias torrenciales y por el deshielo.

9 Depósitos de suelo transportados por el viento:

Los depósitos que se forman por la acción del viento reciben el nombre de depósitos
eólicos, dentro de los cuales se pueden encontrar dos interesantes grupos: los loess y
las dunas.

El loess es un material formado en su mayor parte por partículas de limo de tamaño


uniforme, unidas entre sí por partículas de mineral arcilloso que actúa como cemento,
donde el viento las toma desde zonas desérticas y transporta a grandes distancias.
Aunque estos materiales se depositan en estado suelto y con baja densidad, normalmente

33
presentan una estabilidad razonable, pero si se saturan o secan, la cementación se
destruye y el depósito queda propenso al colapso.

Las dunas son depósitos de material formado esencialmente por partículas del mismo
tamaño y de forma redondeada como resultado de la intensa abrasión a la que son
sometidas.

9 Depósitos de suelo transportados por la gravedad:

Las rocas destruidas por la erosión se desplazan por el talud hacia abajo de dos maneras:
lentamente (pocos centímetros al año) o rápidamente (derrumbes de gran masa en poco
tiempo).

La energía del movimiento proviene de la gravitación, el agua solamente mejora el


deslizamiento. Los derrumbes tienen muchas veces como impulso una lluvia intensa o
una actividad sísmica.

Los materiales que componen el suelo residual al ser arrastrados por la acción combinada
del agua y de la gravedad, pueden originar un transporte corto consistiendo tan sólo en
una caída a lo largo de un talud, en ese caso se trata de depósitos coluviales.

Los depósitos coluviales están asociados a masas inestables y su composición depende


de la roca de la que proceden, estando formados por fragmentos angulares y de tamaños
muy heterogéneos, englobados en una matriz limo-arcillosa.

Tienen gran importancia geotécnica cuando se trata de masas inestables. La resistencia


de estos materiales es baja, sobre todo en la zona de contacto con el sustrato rocoso, y
cuando se desarrollan altas presiones intersticiales como consecuencia de lluvias
torrenciales.

Referencias bibliográficas

1. Geología para Ingenieros


F.G.H. Blyth – M.H. de Freitas, 1999 (6ª reimpresión) Edit. Continental S.A.

2. Ingeniería Geológica
L. González de Vallejo, 2002 Edit. Prentice Hall

3. Mecánica de Suelos
W. Lambe – R. Whitman, 2002 Edit. Limusa

34

You might also like