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A.

Creados a Imagen
de Dios

“Y dijo Dios: Hagamos al hombre a


nuestra imagen, conforme a nuestra
semejanza” Génesis 1:26
B. Creados para
convivir en
Familia
“No es bueno que el hombre esté
solo, le haré ayuda idónea para
el.” Génesis 2:18
C. Creados para
partipar de la creación
mediante la reproducción

“Y los bendijo Dios y les dijo:


Fructified y multiplicaos; llenad
la tierra y sojuzgadla.” Gén. 1:28
“El hombre había de llevar la imagen de Dios, tanto
en la semejanza exterior, como en el carácter. Solo
Cristo es “la misma imagen” del Padre; pero el
hombre fue creado a semejanza de Dios. Su naturaleza
estaba en armonía con la voluntad de Dios. Su mente
era capaz de comprender las cosas divinas. Sus afectos
eran puros, sus apetitos y pasiones estaban bajo el
dominio de la razón. Era santo y se sentía feliz de
llevar la imagen de Dios y de mantenerse en perfecta
obediencia a la voluntad del Padre.” Patriarcas y
Profetas pág. 25,26
“Cuando el hombre salió de las manos de su
Creador, era de elevada estatura y perfecta
simetría. Su semblante llevaba el tinte rosado
de la salud y brillaba con la luz y el regocijo
de la vida. La inmaculada pareja no llevaba
vestiduras artificiales. Estaban rodeados de
una envoltura de luz y gloria como la de los
ángeles. Mientras vivieron obedeciendo a
Dios, este atavío de luz continuó revistién-
dolos.”Patriarcas y Profetas pág. 26
“Mientras permaneciesen fieles a la divina ley,
su capacidad de saber, gozar y amar aumentaría
continuamente. Constantemente obtendrían
nuevos tesoros de sabiduría, descubriendo
frescos manantiales de felicidad y obteniendo
un concepto cada vez más claro del incommen-
surable e infalible amor de Dios.”
Patriarcas y Profetas pág. 33
ESPIRITUAL

“Por cuanto todos pecaron


y están destituidos de la
gloria de Dios.” Rom. 6:23
MENTAL

“Y vio Dios que la maldad de


los hombres era mucha en la
tierra y que todo designio de
los pensamientos del corazón
de ellos era de continuo sola-
mente el mal.” Gén. 6:5
“Y vosotros padres, no provoquéis a
ira a vuestros hijos, sino criádlos en
disciplina y amonestación del Señor.”
Efesios 6:4
“Hijos,obedeced en el Señor a
vuestros padres, porque esto
es justo.” Efesios 6:1
“Instruye al niño en su camino
y aun cuando fuere viejo no
se apartará de él”. Prov. 22:6
“Oíd hijos, la enseñanza de
un padre, Y estad atentos,
para que conozcaís cordura.”
“Y todos tus hijos serán enseñandos
por Jehová; y se multiplicará la paz
de tus hijos.” Isaías 54:13
Efesios 5:21-33

¿Qué significa ser “CABEZA”


El Señor ha constituido al esposo como cabeza de la
esposa para que la proteja; él es el vinculo de la
familia, el que une sus miembros, así como Cristo
es cabeza de la iglesia y Salvador del cuerpo
místico. Todo esposo que asevera amar a Dios debe
estudiar cuidadosamente lo que Dios requiere de él
en el puesto que ocupa. La autoridad de Cristo se
ejerce con sabiduría, con toda bondad y amabilidad;
así también ejerza su poder el esposo e imite la gran
Cabeza de la iglesia.* 193
El esposo es el vinculador de los tesoros del
hogar, y por su afecto fuerte, fervoroso y
consagrado une a los miembros de la familia,
la madre y los hijos, con los lazos más
resistentes.*

Vi que son muy pocos los padres que se


percatan de su responsabilidad [en lo que
respecta a vincular los miembros de la
familia unos con otros].*
“Y estas palabras que yo te mando
hoy, estarán sobre tu corazón; y las
repetirás a tus hijos y hablarás de
ellas estando en tu casa y andando
por el camino y al acostarte y cuando
te levantes. Y las atarás como una
señal en tu mano y estarán como
frontales entre tus ojos; y las escribirás
en los postes de tu casa.” Deut. 6:6-9
“Desde la más tierna edad debe iniciarse
y llevarse adelante una sabia educación en
lo que enseñó Cristo. Cuando los cora-
zones infantiles son impresionables, se
les ha de enseñar lo concerniente a las
realidades eternas. Los padres deben
recordar que viven, hablan y obran en
presencia de Dios.” HC 289
•El ejemplo de Abraham

Los hijos buscan sostén y dirección


en el padre, quien necesita tener un
concepto correcto de la vida y de las
influencias y compañías que han de
rodear a su familia.
Ante todo, debería ser
dirigido por el amor y temor
de Dios y por la enseñanza
de la Palabra divina, para
poder encaminar los pasos
de sus hijos por la buena
senda.
•El ejemplo de Jacob

•Ante todo, debería ser


dirigido por el amor y temor
de Dios y por la enseñanza
de la Palabra divina, para
poder encaminar los pasos
de sus hijos por la buena
senda.
“Desde la más tierna edad debe iniciarse
y llevarse adelante una sabia educación en
lo que enseñó Cristo. Cuando los cora-
zones infantiles son impresionables, se
les ha de enseñar lo concerniente a las
realidades eternas. Los padres deben
recordar que viven, hablan y obran en
presencia de Dios.” HC 289
•Origen del sacerdocio
•De Aarón

•Privilegios del Sacerdote


•Ministrar delante de Dios
•Intercesor
•Representante

•Jesús SACERDOTE (Hebreos)


•El padre es en un sentido el sacerdote de la familia, que
dispone sobre el altar de Dios el sacrificio matutino y
vespertino. La esposa y los hijos deben ser alentados a
participar en esta ofrenda y también en el canto de alabanza.
A la mañana y a la noche, el padre, como sacerdote de la casa,
debe confesar a Dios los pecados cometidos durante el día por
él mismo y por sus hijos. Los pecados de los cuales ha tenido
conocimiento y también los que permanecen secretos, que
sólo vio el ojo divino, deben ser confesados. Esta norma,
celosamente observada por el padre cuando está presente, o
por la madre cuando él está ausente, resultará en bendiciones
para la familia.*
•TAREAS:

•Dirige el culto
•Animador
•Organizador
•Intercesor
•Está en lugar de Dios ante sus hijos

•Colabora con Dios cumpliendo los


misericordiosos designios de él,
afirmando a sus hijos en los principios
justos, y habilitándolos para desarrollar
un carácter puro y virtuoso, porque se
anticipó a ocupar el alma con lo que
habilitará a sus hijos para rendir
obediencia no sólo a su padre terrenal
sino también al celestial.*
•Debe andar con Dios
•Debe Ligar a sus hijos con el
trono de Dios por una fe viva.
•Desconfiando de su propia fuerza
y entregar a Jesús su alma
desamparada
•Traba de la fortaleza del
Altísimo.
El padre debe destacarse a la cabeza de su familia,
no como un niño crecido, pero indisciplinado, sino
como un hombre de carácter viril, que domina sus
pasiones. Debe obtener educación en una moral
correcta. Su conducta en la vida familiar debe ser
dirigida y refrenada por los principios puros de la
Palabra de Dios. Entonces crecerá hasta alcanzar
la plena estatura de hombre en Cristo Jesús.*
•Asegúrese de que rodea su alma una atmósfera
pura y santa....
•Debe aprender diariamente de Cristo.
•Nunca ha de manifestar un espíritu tiránico en el
hogar.
•El hombre que lo hace obra asociado con
agentes satánicos. Someta su voluntad a la de
Dios.
•Haga cuanto pueda para que la vida de su esposa
sea placentera y feliz.
•Haga de la Palabra de Dios su consejera.
•Viva en el hogar de acuerdo con las enseñanzas
de ella.
•Entonces vivirá así en la iglesia y llevará estas
enseñanzas consigo al lugar donde trabaja.
•Los principios del cielo ennoblecerán todas
sus transacciones.
•Los ángeles de Dios cooperarán con Vd. y le
ayudarán a revelar a Cristo ante el mundo.*
•Lo que será su influencia en el hogar será
determinado por su conocimiento del único
Dios verdadero y de Jesucristo a quien
envió. "Cuando yo era niño -dice Pablo,-
hablaba como niño, pensaba como niño,
juzgaba como niño; mas cuando ya fui
hombre hecho, dejé lo que era de niño."
•Hermanos, orad en casa, en vuestra familia, a la
mañana y a la noche. Orad fervorosamente en
vuestra cámara; y mientras os dedicáis a vuestra
labor diaria, elevad vuestra alma a Dios en oración.
Así fue como Enoc anduvo con Dios. La plegaria
silenciosa y ferviente del alma se elevará al trono de
gracia como santo incienso y será tan aceptable para
Dios como si fuese ofrecida en el santuario. Para
todos los que le busquen, Cristo llega a ser una
ayuda oportuna en tiempo de necesidad. Serán
fuertes en el día de la prueba.*
•“Los hijos no leen porque los padres no leen”

•“Conságrate a Dios todas las mañanas, has de esto tu


primer trabajo”.

•No permita Vd. que los vejámenes de sus negocios


ensombrezcan su vida en el hogar. Si al ocurrir cositas
que no son exactamente como Vd. piensa que debieran
ser, no sabe manifestar paciencia, longanimidad,
bondad y amor, demuestra que no escogió por
compañero a Aquel que tanto le amó que dio su vida
por Vd., para que pudiese ser uno con él.
En la vida diaria tropezará con sorpresas repentinas,
chascos y tentaciones. Mire a Jesús en todo
momento y lugar, elevando una oración silenciosa y
con corazón sincero para que pueda saber cómo
hacer su voluntad. Cuando esté a punto de ceder, de
perder la paciencia y el dominio propio y manifestar
un espíritu duro y condenatorio, dispuesto a
censurar y acusar, será el momento de elevar al
cielo esta oración:
"¡Ayúdame, oh Dios, a resistir la tentación, a
desechar de mi corazón toda amargura, ira y
maledicencia! Dame tu mansedumbre, tu humildad,
tu longanimidad y tu amor. No me dejes deshonrar
a mi Redentor, ni interpretar mal las palabras y los
motivos de mi esposa, de mis hijos y de mis
hermanos y hermanas en la fe. Ayúdame a ser
bondadoso, compasivo, de corazón tierno y
perdonador. Ayúdame a ser verdadero vinculador
de mi hogar y a representar el carácter de Cristo
ante los demás."
•No evidencia virilidad el esposo espaciándose
constantemente en su puesto como cabeza de la
familia.
•No aumenta el respeto hacia él cuando se le oye
citar la Escritura para apoyar sus derechos a ejercer
autoridad.
•No le hará más viril el requerir de su esposa, la
madre de sus hijos, que actúe de acuerdo con los
planes de él como si fuesen infalibles.
•Sigamos el ejemplo de Jesús: “Aprended de mi que
soy manso y HUMILDE de corazón”
•El deber del padre hacia sus hijos no puede
delegarse a la esposa.
•El padre no debe excusarse de hacer su parte
en la obra de educar a sus hijos para esta vida
y para la inmortalidad.
•El padre debe compartir la responsabilidad.
El esposo tiende a sentirse libre para salir y
entrar en su hogar como huésped más bien
que como vinculador del círculo familiar.*

Los deberes domésticos son sagrados e


importantes; sin embargo a menudo adolecen
de una monotonía cansadora
Los incontables cuidados y perplejidades se vuelven
irritantes cuando faltan la variedad y el alegre solaz
que con frecuencia el esposo y padre podría
concederle a ella si así lo decidiera, o más bien si
considerase necesario o deseable hacerlo.

La vida de la madre mientras cumple las tareas más


humildes de la casa es una vida de abnegación
incesante, y se agrava aún más si el esposo no
aprecia las dificultades de su situación ni le da su
apoyo.*
Las palabras bondadosas, alegres y
alentadoras resultarán mucho más eficaces
que las medicinas más poderosas. Infundirán
ánimo en el corazón de la abatida y
desanimada esposa, y la alegría infundida a
la familia por los actos y las palabras de
bondad, recompensarán diez veces el
esfuerzo hecho.
El esposo debiera recordar que gran parte de
la carga de educar a sus hijos recae sobre la
madre, y que ella ejerce una gran influencia
para modelar sus mentes. Esto debe
inducirle a manifestar los sentimientos más
tiernos, y a aliviar con solicitud sus cargas.
Debe alentarla a apoyarse en su afecto, y a
dirigir sus pensamientos hacia el cielo, donde
hay fuerza, paz y descanso final para los
cansados.
No debe volver a la casa con la frente
ceñuda, sino que su presencia debiera
brindar alegría a la familia y estimular a
la esposa a mirar hacia arriba y creer en
Dios. Unidos, pueden aferrarse a las
promesas de Dios y atraer su rica
bendición sobre la familia.
“El padre de la familia no debe dejar a la
madre todo el cuidado de dar instrucción
espiritual. Una gran obra debe ser hecha
por los padres y las madres, y ambos
deben desempeñar su parte individual
en la preparación de sus hijos para el
gran examen del juicio.” HC 290
Más de un marido y padre podría sacar
provechosa lección del solicito cuidado del fiel
pastor. Jacob, al verse instado a emprender
difícil y apurada caminata, contestó:

•"Los niños son tiernos, ... tengo ovejas y vacas paridas; y si


las fatigan, en un día morirán todas las ovejas.... Me iré poco
a poco al paso de la hacienda que va delante de mí, y al paso
de los niños.“

•En el camino penoso de la vida sepa el marido y padre ir


"poco a poco" al paso en que pueda seguirle su compañera
de viaje.

•En medio del gentío que corre locamente tras el dinero y el


poder, aprenda el esposo y padre a medir sus pasos, a
confortar y a sostener al ser humano llamado a andar junto a
él....
Si quiere que se conserve lozana y alegre, de
modo que sea como un rayo de sol en la
familia, ayúdele a llevar sus cargas. La
bondad y la amable cortesía que le demuestre
serán para ella un precioso aliento, y la
felicidad que sepa comunicarle allegará gozo
y paz a su propio corazón...
Si la madre se ve privada del cuidado y de las
comodidades que merece, si se le permite
que agote sus fuerzas con el recargo de
trabajo o con las congojas y tristezas, sus
hijos se verán a su vez privados de la fuerza
vital, de la flexibilidad mental y del espíritu
siempre alegre que hubieran debido heredar.
Mucho mejor será alegrar animosamente la
vida de la madre, evitarle la penuria, el
trabajo cansador y los cuidados deprimentes,
a fin de conseguir que los hijos hereden una
buena constitución, que les permita pelear las
batallas de la vida con sus propias fuerzas.
•Por lo general, el padre pierde muchas
áureas oportunidades de atraer a sus hijos y
de vincularlos consigo.

•Al volver de su trabajo a casa, debe


considerar como cambio placentero el pasar
algún tiempo con sus hijos.*
Los padres deben descender de su falsa
dignidad, negarse alguna satisfacción propia
en lo que se relaciona con sus momentos de
ocio, a fin de tratar con sus hijos, simpatizar
con ellos en sus pequeñas dificultades,
vincularlos con su propio corazón mediante
fuertes lazos de amor y ejercer sobre sus
mentes en desarrollo una influencia tal que
sus consejos serán considerados como
sagrados
•El padre de niños varones debe tratar íntimamente con sus
hijos, darles el beneficio de su experiencia mayor, y hablar
con ellos con tanta sencillez y ternura, que los vincule con su
corazón. Debe dejarles ver que todo el tiempo busca sus
mejores intereses y su felicidad.*

•El que tiene una familia de varones debe comprender que,


cualquiera que sea su vocación, nunca debe descuidar las
almas confiadas a su cuidado. Trajo a estos hijos al mundo y
se ha hecho responsable delante de Dios de hacer cuánto esté
a su alcance para guardarlos de compañías malas y no
santificadas.
•No debe dejar a sus varones inquietos totalmente bajo el
cuidado de la madre.

•Esta carga es demasiado pesada para ella. Debe él ordenar


las cosas de acuerdo con los mejores intereses de la madre y
de los niños. Puede resultar muy difícil para la madre
ejercer dominio propio y dirigir sabiamente la educación de
sus hijos. En tal caso, el padre debe asumir una parte mayor
de la carga. Debe resolver que hará los esfuerzos más
decididos para salvar a sus hijos.*
Como cabeza de su familia, el padre debe entender como ha
de educar a sus hijos para que sean útiles y cumplan su
deber. Tal es la obra especial de él, la que supera toda otra
labor. Durante los primeros años del niño la tarea de
modelar su disposición incumbe principalmente a la madre;
pero ella debe sentir en todo momento que en su obra tiene
la cooperación del padre. Si los negocios a los cuales se
consagra él le impiden casi totalmente ser útil a su familia,
debe procurar otro empleo que no le prive de dedicar algún
tiempo a sus hijos. Si los descuida, resulta infiel al cometido
que Dios le confió.
•El padre puede ejercer sobre sus hijos una influencia más
poderosa que las atracciones del mundo. Debe estudiar las
inclinaciones y el carácter que manifiestan los miembros de
su pequeño círculo, a fin de comprender sus necesidades y
peligros y estar así preparado para reprimir lo malo y alentar
lo bueno.*

•Cualquiera que sea el carácter de su ocupación, no es de


tanta importancia como para excusarle por descuidar la obra
de educar y preparar a sus hijos para que anden en el camino
del Señor.*
•Padres, . . . combinad el cariño con la
autoridad, la bondad y la simpatía con la
firme represión. Dedicad a vuestros hijos
algunas de vuestras horas de ocio; intimad
con ellos; asociaos con ellos en sus trabajos y
juegos, y ganad su confianza. Cultivad su
amistad, especialmente la de vuestros hijos
varones.
•Procure el padre aligerar la tarea de la madre. . . .
Hábleles de las hermosas flores y los frondosos
árboles, en cuyas hojas pueden notar la obra de
Dios y su amor. Debe enseñarles que el Dios que
hizo todas estas cosas ama lo bello y lo bueno.

•Cristo aconsejó a sus discípulos que reparasen en


las flores del campo y en las aves del aire, les indicó
cómo Dios cuida de ellas y presentó este hecho
como prueba de que cuidará del hombre, que es más
importante que las aves o las flores.
•Procure el padre aligerar la tarea de la madre. . . .
Hábleles de las hermosas flores y los frondosos
árboles, en cuyas hojas pueden notar la obra de
Dios y su amor. Debe enseñarles que el Dios que
hizo todas estas cosas ama lo bello y lo bueno.

•Cristo aconsejó a sus discípulos que reparasen en


las flores del campo y en las aves del aire, les indicó
cómo Dios cuida de ellas y presentó este hecho
como prueba de que cuidará del hombre, que es más
importante que las aves o las flores.
•Procure el padre aligerar la tarea de la madre. . . .
Hábleles de las hermosas flores y los frondosos
árboles, en cuyas hojas pueden notar la obra de
Dios y su amor. Debe enseñarles que el Dios que
hizo todas estas cosas ama lo bello y lo bueno.

•Cristo aconsejó a sus discípulos que reparasen en


las flores del campo y en las aves del aire, les indicó
cómo Dios cuida de ellas y presentó este hecho
como prueba de que cuidará del hombre, que es más
importante que las aves o las flores.
 RESPETO
 OBEDIENCIA
 REVERENCIA
 DOMINIO PROPIO
 AUSTERIDAD
 GENEROSIDAD
 LABORIOSIDAD
 SERVICIO
COMPRENSION AMISTAD
PERMANENTE En todo tiempo ama
el amigo, y es como un
hermano en tiempo
de angustia.
Prov. 17:17

HIJOS GUIA
DISCIPLINA ESPIRITUAL
REDENTORA Exhorta asi mismo a los
Corrige a tu hijo y te jóvenes a que sean prudentes
dará descanso, y dará presentándote tú en todo
alegría a tu alma. como ejemplo de
Prov. 29:17 buenas obras.
AMOR
El hará volver el cora- Tito 2:6
zón de los padres hacia los
hijos, y el corazón de los hijos
hacia los padres.
Mal. 4:6
•Las Actividades
COMPRENSION •Las Clases
PERMANENTE
EN: •Los Errores
•El Desarrollo

“No debe levantarse una valla de frialdad y


retraimiento entre padres e hijos. Intimen
los padres con sus hijos; procuren entender
sus gustos y disposiciones; compartan sus
sentimientos y descubran lo que embarga
sus corazones.” HC 172
•Sin Límites
•Invariable
AMISTAD •Intima
•Incondicional
•Permanente

“Dedicad parte de vuestras horas libres a


vuestros hijos; asociaos con ellos en sus
trabajos y deportes y conquistad su
confianza. Cultivad su amistad.” HC 171
•Firmeza al aplicarla
•Tacto
DISCIPLINA •Poca pero práctica
REDENTORA •Tacto
•Consecuente
•Ajustable
“En la familia la religión consiste en criar a los hijos
en la disciplina y admonición del Señor… Cuando
los padres son diligentes y vigilantes en su instruc-
ción, cuando enseñan a sus hijos a procurar since-
ramente la gloria de Dios, cooperan con él y el
coopera con ellos en la salvación de las almas de
aquellos hijos por quienes Cristo murió.” HC 286
•Genuino
•Sincero
AMOR •Demostrable
•Equilibrado
•Motivador
“Todo hogar debiera ser un lugar donde
reine el amor, donde moren los ángeles de
Dios y donde ejerzan una influencia sua-
vizadora y subyugadora sobre los cora-
zones de los padres y de los hijos.” HC 14
•Por ejemplo
•Por precepto
UN GUIA
ESPIRITUAL •Permanente
•Motivador
Los padres ocupan frente a sus hijos el lugar
de Dios para decirles con firmeza y perfecto
dominio lo que deben hacer y lo que no deben
hacer. Todo esfuerzo hecho en favor de ellos
con bondad y dominio propio cultivará en su
carácter los elementos de la firmeza y
decisión.” HC 289
“La instrucción religiosa significa mucho
más que la instrucción común. Significa
que debemos orar con nuestros hijos,
enseñarles cómo deben acercarse a Jesús
y hablarle de todo lo que necesitan”.
HC 286

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